Mi primera vez con

Mi marido estaba de instrucción ese fin de semana, se había ido a Zaragoza y yo me quede en casa. Como él no estaba yo había organizado una cena con la gente de la universidad que hacía años que no veía.

Fuimos todos, éramos 8 chicos, Arminda y yo. Siempre éramos las únicas chicas que iban a esas cenas.

Arminda estaba viviendo en Londres y ese fin de estaba aquí. Como íbamos a salir de marcha le comente que se podía quedar en mi casa y así el domingo la llevaba al aeropuerto.

Cenamos muy bien en un restaurante italiano, allí ya nos aviamos bebido unas botellitas de vino entre todos. La verdad que nos lo pasamos genial ablando de todas nuestras cosas.

Del restaurante ya nos fuimos todos muy contentitos y nos fuimos a bailar. En la discoteca entre copa y copa ya estábamos todos más que borrachos. Arminda y yo no parábamos de bailar.

Me sentía súper observada por todos aquellos tios a nuestro alrededor, y eso hacía que me pusiera cachondisima, porque no hay nada que me guste más que un tío me mire…me hace sentir muy golfa…y además ese fin de semana no iba a tener la polla de mi marido y estaba de lo más necesitaba. En mi mente deseaba llevar a casa para coger el móvil y tener sexo telefónico con él.

No solo me miraban a mi sino también a mi amiga Arminda. La verdad que ella llamaba mucho la atención, le gusta vestir muy provocativa. Es morena, sobre 1,68 de altura no muy delgada, unos pechos medianillos pero muy bien puestos y un culo que llamaba muchísimo la atención y sobre todo lo más importante tenía una cara de golfa y que haría cualquier cosas… que eso hacia flipar a cualquiera. Además yo que la conocía sabía perfectamente lo que estaba haciendo porque no parece una golfa sino ES UNA GOLFA….

Me acerque a ella y le dije te has dado cuenta que todos nos miran… ella se rio y me dijo vamos a divertirnos un poco y dejar a todos estos tios con la boca abierta…..yo estaba tan borracha que asentí rápidamente….

Empezamos a bailar tan sensual y pegadas de lo que yo pudiera imaginar. Al principio no sabia que hacer y a pesar de lo borracha que estaba me daba un poco de vergüenza…pero me deje llevar y salió lo mas golfo de mi…

Mientras bailábamos iba rozando mis pechos contra los de ella, y no dejábamos de sonreír y mirarnos fijamente, ella me acariciaba la espalda hasta mi culo, esa sensación me ponía el bello de punta y lo más extraño es que me estaba gustando… por un instante para mi no había nadie mas en aquella pista solo ella y yo…

Ella se acerco a mi oído y me susurro –míralos como están, están todos palote…jajaja- se retiró tan pegada a mi que casi me roza mis labios….en ese momento volví a la discoteca de mi pensamientos, me sentía tan tan cachonda que con solo rozarme el coñito iba a estallar.

Se me habían pasado las horas rapidísimo y la discoteca iba a cerrar. Cogimos nuestros bolsos y nos fuimos a por un taxi. Casi nos manteníamos de pie y nos fuimos de la mano, riéndonos de todo…

Entremos al taxi como pudimos y le dije la dirección de casa, en el taxi empezamos hablar de cómo nos miraban aquellos tíos y como de cachondos los dejamos…mientras ella hablaba puso la mano en mi muslo, bastante hacia arriba muy pegadita a la mini que llevaba puesta, me quede callada y mire para ella rápidamente…ella sonrió de oreja a oreja y siguió hablando de todas aquellos chicos…la situación me estaba volviendo loca, estaba muy cachonda no recuerdo a ver estado así nunca no se si era el alcohol, o la sensación de que una tía me estaba tocando.

Llegamos a casa al subirnos al ascensor, Arminda entre risas me arrinconó en él, y me susurro –veo que te gusta- y empezó a comerme la boca.  Yo la aparte lo mas rápido que pude y abri la puerta de casa. Le dije que iba al baño.

En el baño solo podía pensar en ese beso, tenia muchas ganas de que me follara, estaba tan cachonda que solo podía pensar en ella. Justo en ese momento me acorde de mi marido, la situación había conseguido que me olvidara de el por un momento. Intente llamarlo desde el móvil pero lo tenia apagado.

Que pensaría mi marido de todo aquello. En ese instante me vino a la mente todas las fantasías que había tenido con mi marido y una tía. Incluso recordé que un día me insinuó que yo lo hiciera con una tía y el solo miraba, que esa situación lo pondría a mil… esa noche follamos como locos. Solo con pensar aquello me estaba poniendo mas cachando y tenía más ganas de hacerlo.

Empecé a desnudarme para darme un ducha, porque el colocón no se me había bajado nada. Empecé a bañarme con agua hirviendo, la sensación del agua, aun el efecto del alcohol y todo lo que había pasado esa noche, estaba tan caliente que empecé a tocarme, mientras el agua caiga sobre mi, necesitaba correrme llevaba toda la noche a punta de estallar.

Mientras que estaba en plena faena tocan en la puerta y pasan, era Arminda  que entro al baño, pare de hacerme mi trabajito hasta que ella saliera, y seguí duchándome

Al poquito la oigo reírse y de repente la veo entrar a la ducha conmigo, -¿puedo?, me pregunta con esa cara de golfa y una sonrisa en los labios…. No era la primera vez que la veía desnuda, y la verdad que estaba bien buena, en ese momento pensé, que pena que mi marido no este aquí, y viera esto…..

Asentí con la cabeza y empezó a ducharse ella también. Le pedí que me enjabonara la espalda, y entre risas y espuma, empezó hacerlo muy despacio, me estaba poniendo los pelos de gallina, lo estaba haciendo muy despacio pero tan bien…. Ello se acerco a mi espalda y me dijo tranquila déjate llevar…. Y con sus manos en mi espalda empezó  a hacerlas hacia delante hasta llegar a mis pechos, empezó a masajearlos con sus manos a la vez que sus tetas me rozaban la espalda…… era una sensación nueva para mi, se veía que ella ya tenia experiencia, no se que me pasaba pero estaba en las circunstancias perfecta para que todas las fantasías que había tenido con mi marido se hicieran realidad.

Ella siguió tocándome las tetes, se hecho más jabón y empezó a bajar, por mi barriga, tocando mis caderas, rozándome el culo, hasta llegar a mi coño, muy despacio empezó a tocarme el clítoris….yo estaba en el cielo, iba a estallar muy pronto… no me podía creer lo que estaba pasando y sobretodo que me estuviera gustando tanto….

Metió sus dedos en mi coño y empezó a besarme por el cuello, en ese momento mi cuerpo tenias pequeñas convulsiones y estalle, me corrí lo máximo, el orgasmo duro bastante hasta grite….

Me di la vuelta me quede mirándola de frente y no quitaba esa sonrisa de oreja a oreja, nos besamos apasionadamente, y yo empecé a bajar, no sabía bien lo que iba hacerle pero me deje llevar.

Llegue a su coño, y empecé a darle labiecitos suaves, para ser la primera vez que chupaba un coño, me sentía diva, puta, golfa…. La miraba a los ojos y estaba disfrutando a mas no poder… empecé a darle mas caña, le mete un dedido sin dejar de chupar, estaba tan mojada que allí entraría cualquier cosa, le metí el segundo dedito, y sin dejar de chupar empecé a darle rápidamente, notaba como su vagina se contraía y apretaba mis dedos, me di cuenta enseguida que iba a llevar. Y así fue, estallo con un grito de placer y yo seguí chupando esa corrida ese sabor nuevo para mi…....

Ha pasado un año desde que mi amiga se fue, y no he podido dejar de pensar en esa noche, fue fantástica, una de las mejores experiencias y locuras que había hecho en mi vida. Solo con recordarla y escribir este relato he revivido esa noche como si fuera hoy, tanto que escribiéndolo he llegado a masturbarme pensando en ella….

Deseo volver a verla y esta vez en compañía de mi marido…………….