Mi primera vez anal 2

--Se me salieron las lágrimas del dolor - quise gritar y no podía -sentí que se me rompían los huesos de la cadera, - me quede inmóvil – tense mis nalgas en un vano intento de evitar que me siguiera penetrando pero fue inútil – me tenia completamente ensartada

Después de mi primera vez anal con Steven mi vida cambio.

Durante todo el tiempo de mi relación con Steven el sexo se me hizo una

Necesidad constante y su verga una obsesión, me encantaba que me cogiera y terminara en mi cola además sentía que de esa manera corría menos riesgo de no embarazarme. Las miradas lascivas de los hombres en la calle, los chiflidos y piropos no faltaban, pero mi mundo era el sexo con Steven que llegue a olvidarme de mi esposo.

Comencé a trabajar en la agencia, la mayoría de los clientes eran hombres de buena posición económica. Al principio cubrí solo eventos como edecán sin tener que ir a la cama con alguien.

Un día recibí una llamada de Steven y me dijo que había llegado un amigo y buen cliente de la agencia a hacer unas supervisiones de obras que estaba haciendo la empresa donde trabajaba y que lo quería invitar a cenar. Y quería que lo acompañara le dije que si y me pidió unas fotos mías para enseñárselas, lo cual se me hizo de lo más Normal. Le recordé que había unas donde estábamos los dos pero me dijo que No, que quería en donde estuviera yo sola y con minifalda.

La cena era un viernes – al salir de mi casa le deje un recado a mi esposo que llegaría tarde de la oficina –Steven me llevo a comprar un vestido para la noche. Me extrañó que escogiera uno un poco atrevido, color vino, escotado, cortito y entallado, además me pidió que no me pusiera medias ni nada abajo. Me fui a casa de mi mamá a cambiarme a las 8 había quedado de verme con Steven así que me apresure para estar lista- tenia nervios no lo voy a negar de cierta forma intuía que seria mi primera vez como escort como una puta de lujo.

--Al llegar al restauran sentí las miradas de los hombres prácticamente el vestido me quedaba muy ceñido a mi cuerpo pregunte por el Sr. Steven y me llevaron a su mesa – de esa forma conocí a Jean era un hombre enorme, como de 1:95, maduro, rollizo, de más de 47 años, con barbas y bigote.

Steven noto cierto nerviosismo de mi parte y tomo mi mano – solo relájate – no pasa nada sonó su celular y tomo la llamada se alejo unos metros de la mesa y quede sola con Jean el cual no dejaba en decirme que era una muñequita, que mis ojos eran muy bonitos, que tenía cuerpo de princesita y cuando me dijo que Steven le había contado que tenia menos de un mes que me había roto del culo – sentí que mi cara se puso roja de vergüenza – me pregunto mi edad -

Le dije que tenía 21 años, se chupo los labios y dijo ¡Umm, eres un buen pastelito! Y estas casi nuevecita – nos vamos a divertir –

Tomamos champaña y cenamos - ellos se pusieron a platicar de negocios -Jean se levanto de la mesa para ir al baño y me quede sola con Steven – sus palabras me cimbraron hoy es el día rebeca – encárgate de hacer feliz a Jean es un excelente cliente y uno de los mejores vas a estar con el tres días - no debería decírtelo pero te lo voy a decir – es de verga grande - me encontraba distraída con sus palabras cuando sentí una mano en mi hombro era Jean que me invitaba a bailar baile con el como dos canciones muy pegaditos y cada vez que me apretaba de la cintura, sentía su pene erecto en mi estomago.

Terminamos de bailar y Jean no dejaba de frotarme con sus manos la espalda, me acariciaba los oídos y las mejillas y me puso una de sus manos en mis piernas - De reojo veía a Steven – salimos del restauran – subí al auto de Steven como sonámbula – llegamos a su departamento – Jean me llamo para que fuera a su lado y yo me quede helada sin poder reaccionar - Steven me sirvió una copa me la tome de un solo trago – en ese momento tenía sentimientos encontrados, Jean me había excitado al acariciarme con su dedo durante el trayecto pero en ese momento vino a mi mente que no podía ser, yo estaba casada y además mi amante estaba ahí.


Me di valor, me sirve una copa más y decidí romper la barrera de la moral tradicional. Regresé a ver a Steven - Jean tenía su enorme verga en la mano.

--me dirigí directamente con Jean y comenzó a besarme y desvestirme.

Me aflojé toda, me deje llevar mientras Jean no dejaba de decirme pastelito,

Cada movimiento de él, cada caricia, cada toqueteo de sus manos en mi cuerpo me encendía más y más. Abrí los ojos buscando a Steven pero ya no lo encontré –

La boca de Jean llegó a mi sexo sus barbas y sus bigotes se enredaban en mis vellos públicos, pero su lengua me penetraba enardecida; de pronto

Sentí su dedo en mi cola, en mi ano, y cuando me metió uno, me vine en su boca como nunca, en realidad era mi primer orgasmo completo.

--Perdí la moral comencé a gemir a gritar – escuchaba los gritos de Jean no dejaba de hablar, me decía que era un manjar de dios, que mi sexo era de caramelo -que mis muslos y mis senos eran una delicia y se puso a lamerme el culo.

--Me volví a venir, mi sexo estaba mojadísimo solo escuchaba sus palabras así rebeca así, vente hasta que se te seque la panocha.

Exhausta, le busque con mis manos la verga, era grande, mas grande que la de Steven y la de mi esposo me bajé del sillón y el me agarró de las orejas y me condujo la cara hacia su pene. Lo acaricie todo, lo recorrí ansiosa con mis manos desde los huevos hasta la cabeza que parecía un champiñón comencé a lamerlo.

--me metí la verga de Jean en la boca y no lo podía creer, con trabajos me cabía la cabeza, no era como la de Steven que me cabía casi toda. Jean seguía hablando en voz alta: que bonito miras cuando mamas muñequita, chupale, mama. Yo le buscaba la forma y no encontraba la manera de comerme bien esa vergota. Jean me decía como, me dirigía, pero me daba cuenta que no lo alcanzaba a satisfacer. Un poco molesto me ordeno

Que lo montara, me subí en el, me senté en su verga y comenzó a lamerme y

Chuparme los senos y a besarme en la boca.

--Su lengua era un demonio, me la metía hasta la garganta y luego en los oídos, bajaba por mi cuello y me chupaba los senos - Me vine otra vez ahora sobre su pene. Al sentirme me levantó de las nalgas y me acomodó para penetrarme. Fue delicioso, sentía que me llenaba toda y por primera vez sentí mi clítoris presionado por una verga. Mientras me nalgueaba me decía que me moviera, que brincara y así lo hice.

Me sintió un poco tensa y el mismo me levantaba de las nalgas y me dejaba caer sobre el, volví a venirme. El le gritaba a Steven: ¡oye, tu putita se sigue vaciando!

Me voltio de espaldas a él y pude acomodarme mejor para seguirlo cabalgando - Un nuevo orgasmo me invadió y por primera vez en mi vida no pude contenerme y grité, aullé, gemí maullé, ladré, no se, me sentí supersatisfecha. No lo pensé, me safé de Jean y me arrodille frente a el y volví a lamerle los huevos y manosearle la verga. – le mamaba a mi manera y como podía la verga a Jean-- Me olvidé de todo, esa verga estaba muy crecida, muy dura y sentía sus palpitaciones en mis labios y en mi lengua. Jean me decía: mama rebeca así sigue mamando – en ese momento todos mis sentidos estaban concentrados como nunca en esa mamada al pene de Jean.

---Me sorprendió la capacidad de Jean de aguantar tanto tiempo la eyaculación, mi mamada a cualquier hombre lo hubieran echo eyacular hacia tiempo, pero su virilidad estaba en su máxima expresión. Lo sentí ponerse tenso y explotó en mi boca, me echo tal cantidad de semen que no lo pude contener y comenzó a escurrirme por la comisura de los labios. Comencé con mi lengua a recoger su semen se lo fui limpiando poco a poco de la cabeza de su palo – de los pelos de sus huevos – de sus piernas hasta dejarlo limpio -

Me subí al sillón y la boca de Jean busco la mía, y nos fundimos en un beso tremendo. Lo acaricie todo lo que pude, mis manos lo devoraron, sentí su espalda, su pecho amplio lleno de pelos, su barba, sus bigotes, todo.

Me sentí cansada, exhausta, las piernas me temblaban, nunca había imaginado tener tantos orgasmos tan completos en una noche, traté de descansar, pero Jean me tomo por atrás, me cargó, me acostó en la alfombra, se subió sobre mi, me abrió las piernas y me penetró. Yo cerré los ojos y me deje manosear, besar y coger por esa verga formidable hasta que me sentí inundada de semen –quedamos acostados sobre la alfombra perdí la noción del tiempo -

Mire el reloj era media noche - En eso escuche que Jean pregunto por vaselina y Steven le indicó que había en el baño, en el botiquín. Escuche la meada de Jean en el baño, el ruido de la tapa del botiquín y los pasos de regreso de Jean. Luego sentí su lengua en mi ano y sus manos devorando mi piel. Me prendí otra vez. Steven se acostó a mi lado y me dio su verga a mamar

-- En ese momento sentí la penetración de Jean en mi vagina y sus dedos en mi ano, luego sentí sus dedos untándome vaselina en mi ano y su cabeza rondando mi hoyito. Me espanté, pero los dedos de Jean y sus besos en mi espalda y en mis nalgas -Fueron dilatando mi abertura anal hasta que sentí la embestida; puje y lo cerré instintivamente- grite - pero la paciencia de Jean no se perdió y volvió a Intentarlo - nuevamente falló – me lastimas me duele –

--sentí sus dedos nuevamente con vaselina alrededor de mi cola, en eso me tocó meterme la verga de Steven en mi boca y Jean en su tercer intento por fin me penetro. Yo me Trague la verga de Steven más de lo que había logrado hacerlo, la embestida de Jean me abrió la boca al querer gritar que la verga se me metió hasta la campanilla- Steven oprimió mi cabeza instintivamente para no dejarme mover y Jean la empujó hasta donde le cupo.

--Se me salieron las lágrimas del dolor - quise gritar y no podía -sentí que se me rompían los huesos de la cadera, - me quede inmóvil – tense mis nalgas en un vano intento de evitar que me siguiera penetrando pero fue inútil – me tenia completamente ensartada – hasta lo mas profundo de mis intestinos – sentí sus dedos acariciar mi clítoris al principio me resistí hasta que de pronto una corriente eléctrica recorrió mi cuerpo y comencé a disfrutarlo

Steven retiro su verga de mi boca y comenzó a tomarnos fotografías. Yo respiraba con dificultad pero alcanzaba a jalar un poco de aire y así me mantuve hasta que Jean comenzó a bombear.

--Deliciosa tu hembra, le decía a Steven tiene un culo formidable, es una muñequita deliciosa y una princesa digna del mejor sexo del mundo. En ese momento, con esa gran satisfacción de sentirme penetrada, me di cuenta de toda la potencialidad que tenía como mujer.

--Jean me cargó en vilo sin sacarme la verga del culo y se sentó en el sillón de enfrente. Yo quede boca arriba sobre de él. -me volvía loca con esa vergota moviéndose en mis intestinos.

Jean le dijo a Steven que me cogiera. Mi vagina estaba totalmente abierta y a

Steven no le costó ningún trabajo penetrarme, sentía sus vergas casi –tocarse

Dentro de mi – Jean me disfruto como nunca y yo le di el placer que buscaba - -Mientras me bombeaba me preguntaba si me gustaba, si quería más, si estaba satisfecha, que si lo volvíamos a hacer. Obviamente a todo le respondí que sí.

La experiencia de Jean fue importantísima para mí, dirigía a Steven para que no perdieran el ritmo del bombeo sobre mí y lo esperó hasta que los dos eyacularon dentro de mí. --- fue increíble, estaba loca, excitadísima tuve

Otro orgasmo mientras ellos se venían dentro de mí.

Francamente me olvidé de todo abracé a Jean, lo besé, lo disfrute lo más que pude y me quedé dormida en su pecho.

Me desperté como a las 9 de la mañana, tanto Steven como Jean estaban

Dormidos, me sentí rara de verme desnuda durmiendo con otro hombre.

Hice del baño -Me dolía mucho y me costaba trabajo caminar, destapé una cerveza y quise –sentarme pero no pude, me dolía mucho la cadera y el ano.

--Me acabe la cerveza y luego otra y otra, nunca lo había hecho y menos a esas horas, me temblaban las piernas me sentí mejor y regresé con Jean. vi. su pene flácido pero grande y no pude contenerme, lo quería en mi boca. Lo comencé a lamer despacito para que el No se despertara, me gustó que no roncaba como mi esposo – la verga se le fue Parando poco a poco y me prendí de ella hasta que llego a su máxima Expresión, hice todo lo que aprendí de Steven – Jean se despertó y se acomodó para disfrutar mejor mis mamadas. –Me acariciaba el pelo maternalmente -mientras mamaba sin decirme nada, con mi mano le sobaba los huevos a Jean - y la apretaba el pedazo de palo que mi boca no alcanzaba a chupar.

Steven entro a la recamara cuando Jean estaba a punto de venirse en mi boca. Cuando sentí el chorro, lo mire, el vio como disfruté, saboree y me comí

Esa descarga de hombre. Estaba contento, así me quería ver.

--me felicitó por mi rico desayuno. Entre al baño y me bañe -

--yo hubiera querido bañarme con Jean, pero el y Steven tenían asuntos de negocios - sentí celos y me bañé sola.

--salimos a almorzar, yo quería estar todo el tiempo con Jean, esos tres días que pase con el fueron una locura sexual para mi -

--Cuando sus manos separaban mis nalgas y sentía su lengua recorrer la división entre ellas me ponía tensa – excitada era la señal que me ensartaría del culo – con sus manos me inclinaba de mi espalda y comenzaba a presionar - para que mentirles – me dolía no lo voy a negar –varias veces grite – llore – cuando la cabeza de su verga lograba entrar en mi culo – en ocasiones intentaba zafarme – Me lastimas - me duele Jean - solo escuchaba sus palabras tranquila princesa – pronto vas a gozar – se que duele pero ya estoy dentro disfruta -

--Sentía como mi culo se abría –como mis caderas involuntariamente comenzaban a rotar – varias veces mordí las sabanas – las almohadas buscando sentir menos dolor -- comenzaba a cogerme despacio al principio pero al final se convertía en una bestia en un animal y comenzaba a ensartarme del culo con mayor rapidez. – me decía que tenia que acostumbrarme no te muevas ---Yo solo me quejaba – me dolía el culo me ardía - Ah me matas, despacio – así – despacio – y al ultimo sentía la estocada final lo sentía hasta lo mas hondo de mi cuerpo – hasta lo mas intimo de mis intestinos -

El día de la despedida llego - supe que ellos salían de México al día siguiente, tenían que estar temprano en el aeropuerto prácticamente era el momento de despedirnos. Jean me pidió hablar un momento y me explicó que era casado, que tenia asuntos pendientes de negocios pero que había disfrutado conmigo. Que Steven le mostró mis fotos y que le había gustado y que por eso accedió a ir a la cena. Me sentía bien pero a la vez me sentía mal. Me dio un beso en la boca y me prendí de él, no lo quería dejar ir. Me repitió todo lo que me había dicho, que era un pastelito, que era una muñequita linda, que era un culito delicioso y que me había disfrutado como mujer.

--yo no pude decirle nada, solo lo besé y lo bese. Nos despedimos, yo hubiera querido pedirle que me volviera a coger, pero ya no era posible.

Antes de subir al taxi regreso hacia mi persona y me dijo puedes viajar mañana si puedes hacerlo mando por ti – me quede callada y lo bese me abrase a su cuerpo y le dije que iría a donde el me llevara así fue como comencé a ser su amante su puta – regrese a mi casa pero ya nada sería igual, yo ya había probado las mieles de la lujuria y de la perversión.

Jean y Steven fueron para mí el despertar al sexo de una forma animal y salvaje pase más de una semana con Jean de vacaciones siempre ensartada de la cola.

Termine adolorida – cansada – con ojeras – mis piernas y mis caderas me dolían horrores - tome la decisión de separarme de mi esposo y no lo hice por lo que había vivido con Jean y con Steven si no por que ese capitulo de mi vida tenia que cerrarse – mi marido a sus 20 años aun era un niño inmaduro con muchos problemas de mamitis.

Rebecadiaz2009@hotmail.com