Mi primera vez

Todo empezó un día que estaba bastante deprimida, las cosas iban muy mal con mi pareja y eso no ayudaba para mi autoestima.

El caso es que decidimos salir de fiesta con unos amigos, y tras beber y bailar un rato acabamos discutiendo delante de todos por culpa de su actitud. Finalmente nuestros amigos, o más bien sus amigos se fueron con él dejándome algo borracha y triste en el local. Me senté en unos sofás que había a los laterales del local, la verdad es que estaba un poco deprimida y algo bebida, rechacé a un par de chicos, uno me preguntó si estaba bien y el otro que si estaba sola, la verdad es que estaba deprimida y pase de ellos.

Después de un rato sola se me acercó una chica rubia, delgadita, no tenía mucho pecho, llevaba una falda plisada a cuadros, unas medias de rejilla, botas, y una camiseta de tirantes muy muy ajustada. Me dijo que me veía triste y se sentó a abrazarme, era agradable, olía bien, tenía unos brazos, delgados, pero a pesar de eso me sentía protegida. Después de un rato la miré y la dí las gracias.

Ella sonrió y me dijo que fuera con ella a bailar, parecía una chica muy alegre. Bailamos bastante rato, no sabría cuánto tiempo y me ofreció pasar la noche en su casa. Me pareció muy amable, yo creo que me lo ofreció porque le dije que hoy iba a dormir en casa de mi ex-novio. Su casa no estaba lejos, fuimos andando, mientras íbamos algunos hombres que nos cruzabamos nos decían alguna guarrería, daba un poco de mal rollo. Pero ella se reía y me llevaba de la mano.

En su casa me ofreció dormir en su cama, pero yo la dije que me iría bien su sofá. Me quedé en ropa interior en el sofá viendo la televisión intentándolo evadirme de mis pensamientos. Ni sabía qué hora era y estaba algo somnolienta, entonces oí mi nombre, era ella de pie al lado del sofá. - Creo que me debes algo. Dijo, se me tiró encima y me besó. Pensé en quitarme, en empujarla, pero era agradable, me gustó. Nos empezamos a deslizar por el sofá, nos besamos, abrazamos, acariciamos.

Ella, que estaba encima, bajó su cabeza y comenzó a lamerme por encima de mis bragas, lo notaba, notaba el calor se su boca y su saliva. Me apartó las bragas y noté como resbalaba su lengua por todo mi coño, cómo me lámina el clítoris con la punta de su lengua y como me metía la lengua dentro de mi. Al principio me sentía algo cohibida, pero sentía tanto placer, sabía exactamente cuándo y con que tenía que ser mas delicada mas rápida.

Ella también parecía disfrutar mucho, pude ver que estaba tocándose mientras lo hacía, metía los dedos en su coño una y otra vez con soltura. Sentí un espasmo electrizante por todo mi cuerpo, no podía parar de mover las caderas, hasta que me corrí.

Ella me miró, me sonrió, pasó un dedo de los que se estaba metiendo por mis labios, me besó y me deseó buenas noches. A la mañana siguiente me fui a casa, ella me acompañó hasta la puerta. Luego me enteré de que le recordaba mucho a su novia y que por eso se lió conmigo.

De está experiencia saqué en claro dos cosas, la primera es que no me gusta nada como me sabe allí abajo, la segunda que tener una chica folla-amiga renta, renta mucho.

FÍN

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