Mi primera orgia. Parte 1
Nunca se olvida la primera orgia y menos si es con buenas amigas.
Mi primera orgia fue gracias a mi amiga Silvia D como no podía ser de otra forma. Una amiga suya tenía una casita en el campo y había preparado todo para pasar una divertida noche. Yo iba algo nervioso pues hasta entonces lo más que había hecho eran tríos. Por lo que me había contado Silvia yo solo conocía a una de las amigas, era Elena con la que ya había tenido sexo muchas veces y éramos también buenos amigos. Todas eran infieles y ninguna iba con su pareja.
Cuando Silvia salió del portal y la vi desde el coche se me pasaron los nervios al ver lo guapísima que iba. Iba con un vestido negro ajustado, que marcaba sus tetazas, con estampado floral en relieve con escote palabra de honor y con la falda hasta la rodilla. Las medias transparentes la hacían unas piernas deliciosas. Los zapatos negros de taconazo eran abiertos en la punta y se veía que llevaba las uñas pintadas como las de las manos con un rojo muy sexy. Cuando se subió nos saludamos con un largo beso y acaricie sus piernas viendo así como las medias terminaban en sus muslos.
Cuando llegamos a la casa y pasamos al salón estaban 3 amigas de Silvia y otros 3 hombres. Elena estaba allí con un vestido verde, resaltando sus carnosas tetas, hasta medio muslo sin mangas y escote en v. Se la veían unas piernas deliciosas con las medias transparentes y, al igual que Silvia, los zapatos negros eran abiertos con un taconazo y se veía sus uñas pintadas de rosa como las de la mano. En cuanto me vio vino rápido a saludarme con un besazo con lengua.
Una de las sorpresas de la orgia fue Raquel J. Yo la había conocido antes, aunque sin tener nada con ella. Era la cuñada de una pareja liberal amiga mía. Cuando Silvia nos presentó, y se lo comente, Raquel dijo que su cuñada la había hablado muy bien de mí. Esta sin ser muy guapa tenía una deliciosa y gran boca con carnosos labios y unas bonitas piernas. Iba con un vestido verde con rayas negras hasta las rodillas donde se veían ya unas medias transparentes. Nos dimos un pico y Silvia siguió presentándome a la amiga que faltaba. Paloma P, la dueña de la casa, bastante fea, con un vestido verde clarito de media manga, hasta medio muslo y unas medias transparentes, con la que también me di un pico.
Las 3 nos presentaron a los otros hombres. Paloma nos dijo que 2 amigas y 2 hombres más también habían llegado ya pero que estaban en la habitación. Elena se puso a preparan unos chupitos y tras tomarlos Silvia la pidió a Paloma que nos dijera cual era nuestra habitación. Iba a ir a dejar allí las pocas cosas que habíamos traído cuando Raquel me cogió y me dijo que Silvia sola podía llevarlo, que me quedara que teníamos mucho que hablar aun. Silvia se fue con Paloma y uno de los hombres que cogió nuestra mochililla.
Raquel y yo nos pusimos a hablar mientras Elena bailaba con los otros 2 hombres. Raquel me conto que ella también había tenido sexo con su cuñado y que ya la primera vez que habíamos coincidido, su cuñada la había hablado de mí. Durante la conversación estábamos bien arrimados y no parábamos de acariciarnos. Nuestras bocas cada vez estaban más cerca hasta que nos empezamos a dar picos.
A Elena la sonó el móvil y salió fuera a hablar. Los 2 hombres se colocaron cerca de nosotros y comenzaron a acariciar a Raquel.
Tras acariciar su culo, subí mis manos por la espalda de Raquel. Cogí la cremallera del vestido y la baje. El hombre que estaba detrás de ella cogió el vestido por los hombros y se lo echo hacia delante dejándoselo caer. Raquel se quedó con un sujetador negro de aro, un culotte negro, las medias transparentes que la llegaban hasta el muslo y los zapatos negros de tacón con la punta descubierta viendo que las uñas estaban pintadas solo el principio de blanco. Raquel se besó y acaricio con los 3. En uno de sus giros la desabrocharon el sujetador y la acariciamos sus tetitas metiendo nuestras manos por debajo del sujetador. La quite el sujetador y junto a otro de los hombres la comí esas tetitas con los pezones duros, mientras ella se besaba con el otro.
La dije que era hora de saber si ella sabía hacerlo igual que su cuñada. Esta sonrió y me quito la camiseta. Comenzó besándome y lamiendo mi cuello y fue bajando por mi pecho lamiéndolo hasta colocarse de rodillas. Me quito el pantalón dejándome el slip negro. Me acaricio y mordisqueo el paquete. Los otros 2 se desnudaron y empezaron a masturbarse mirándonos. Saco mi pene por un lateral del slip y comenzó a pasar su lengua por ella de arriba abajo mientras me masturbaba. Cuando la tuve completamente empapada comenzó a mamármela deliciosamente con esa boca grande y labios carnosos.
Los 2 hombres se colocaron a los lados de Raquel y mientras me la mamaba a mi masturbo a ambos. Luego nos la fue comiendo a todos por turnos y al que no le tocaba mamada le masturbaba.
Silvia, Paloma y el hombre que las acompaño volvieron al salón uniéndose a nosotros. Silvia me dio un buen beso pero inmediatamente se puso a besarse con otro de los hombres.
Desde mi posición, apoyado en una mesa, veía bien todo mientras Raquel seguía haciéndome la mamada. Silvia se arrodillo y le comió el pene a uno.
Mientras el que había entrado con ellas se estaba desnudando, Paloma empezó a besarse con el otro. Paloma cogió a este y lo llevo junto al primero. Agarro los penes de ambos y mientras se besaban los 3 los masturbo. Paloma se quitó el vestido quedándose solo con un pequeño tanga verde y las medias hasta los muslos. La sentaron en el sofá y la comieron las tetas.
Levante a Raquel y la senté en la mesa. Me coloque entre sus piernas y mientras nos besamos la acaricie las piernas. La quite el culotte y comencé a masturbarla. Cuando lo tuvo mojadito me arrodille y la comí el coño, mientras seguía acariciando sus muslos.
Llamaron a la puerta y Paloma me pidió que fuera a abrir. Raquel no quería que dejara de comerla el coño y apretaba mi cabeza contra ella. Conseguí levantarme y tras darnos un beso fui a abrir. Al girarme pude ver que Silvia seguía mamándosela al hombre y que Paloma estaba entretenida comiéndose el pene de uno de los hombres mientras el otro la comía el coño.
Quien llamaba a la puerta era Elena que ya termino de hablar. Al verme desnudo no dudo en agarrarme el pene y lanzarse a besarme. Al volver al salón Raquel no había perdido el tiempo y estaba follando sentada en la mesa con uno de los hombres. Me senté en la mesa al lado de ella y empezamos a besarnos mientras Elena se agacho y comenzó a mamar mi pene.
Elena se levantó y me pidió que la mirara. Se levantó un poco el vestido mostrándome el final de las medias en sus muslos con unas ligas de encaje floral incluidas y los tirantes del liguero negro. Siguió subiendo su vestido hasta mostrarme el liguero negro con encaje floral y el pequeñito tanga negro que llevaba. Me baje de la mesa y la cogí de la cintura. La quite el vestido, quedándose con lo anterior comentado y un sujetador de triangulo negro, y la subí en la mesa. Me arrodille y empecé a comerla el coño echando el tanga a un lado.
Una mano agarro mi polla y empezó a masturbarme. Mire y era Raquel que me venía a poner un condón. Luego se lo puso al hombre con el que estaba ella y empezaron a follar. Yo seguí comiendo el coño a Elena hasta que se corrió. Entonces me levante y empecé a follármela. Elena me rodeo con sus piernas y la acaricie los muslazos y nos besamos.
Me cambie con el hombre que estaba con Raquel y empecé a follar con ella y este con Elena. Raquel me rodeo el cuello con sus manos y nos besamos mientras acariciaba sus piernas.
Raquel bajo de la mesa y me llevo hacia un sofá. Cuando me sentó en el pude ver que Silvia tenía el vestido subido hasta la cintura y estaba tumbada en el otro sofá follando con uno mientras Paloma tumbada en el suelo follaba con otro.
Raquel se sentó encima de mí dándome la espalda, metiéndose mi polla por el culo. Mientras la enculaba, se echó hacia atrás y pude agarrar sus tetillas con mis manos para así jugar con sus pezones mientras la besaba el cuello. Elena se puso de rodillas en el sofá a nuestro lado. Me empecé a besar con ella hasta que se cambió el puesto con Raquel. Elena se colocó igual que Raquel, dándome la espalda con mi polla dentro de su culo. Raquel se descalzo y se subió en el sofá poniendo su coño en mi boca. La volví a comer el coño mientras Elena seguía moviéndose con mi polla dentro de su culo. Mis manos acariciaban las piernas y el culo de Raquel. Cuando esta me aviso que iba a correrse la apreté, agarrándola el culo, contra mi cara para meter más dentro mi lengua.
Cuando la limpie con mi lengua su coño Raquel se bajó y se fue donde Silvia. Esta estaba de rodillas comiéndosela al hombre y Raque se sentó al lado de este que empezó a besarla y masturbarla. A Paloma la estaban haciendo una doble penetración.
Elena se dio la vuelta y se sentó ahora mirándome. Mientras follábamos nos besábamos y acariciaba sus piernas. Agarre sus tetas canositas y se las acaricie hasta que note duro sus pezones. Saque sus pechos del sujetador y pellizque los duros pezones hasta que agache la cabeza para mordisquearlos.
El hombre que estaba con Silvia dio un gemido alto que hizo que miráramos. Este se corrió dentro de la boca de Silvia. Esta se levantó se colocó el vestido y se fue para la zona de las habitaciones.
Yo estaba también a punto de correrme y avise a Elena. Esta se colocó a gatas en el sofá, me quito el condón y me la comió hasta correrme en su boca, mientras yo acariciaba y masturbaba su culo.
Elena me dijo de ir al baño a limpiarnos bien. Me levante y nos fuimos dejando en el salón a Raquel follando con uno mientras se la comía a otro en el sofá y Paloma tumbada en la mesa follando con el otro.
En el baño se encontraba Silvia que también había ido a limpiarse. Cuando me coloque detrás de ella y la vi reflejada en el espejo no me pude resistir a esas grandes tetas que la marcaba el vestido. Pase mis manos por su cintura y las fui subiendo hasta llegar a agarrarlas. Silvia giro la cabeza y nos empezamos a besar mientras la apretaba las tetazas. Elena se colocó detrás de mí y, mientras me besaba el cuello, agarro mi pene, que seguía por fuera del slip, y empezó a masturbarme.
Baje el vestido a Silvia hasta dejar sus tetazas al descubierto al no llevar sujetador. Seguíamos besándonos y nos lanzábamos miradas a través del espejo mientras jugaba con sus tetazas y pezones grandes.
Silvia se giró y se arrodillo. Elena me había puesto la polla durísima. Esta también se arrodillo y junto a Silvia comenzaron a comerme el pene. Hubo un momento donde Silvia me estaba haciendo la mamada y Elena lamiendo mis huevos que me puso atacado y a mil.
Tenía el pene durísimo. Elena salió a buscar un condón. Silvia metió mi polla entre sus tetazas y me hizo una maravillosa cubana hasta que Elena volvió. La dio a Silvia el condón y me lo puso. Elena se sentó en el borde del lavabo y se echó el tanga a un lado ofreciéndome su delicioso coño. Me levante y metí mi polla bien dentro de él. Mientras follábamos, Silvia se besaba con Elena y mis manos acariciaban sus lindas piernas y el liguero.
Deje de follar a Elena y cogí a Silvia. Tras darla un besazo, la gire poniéndola mirando de nuevo al espejo. La subí el vestido hasta la cintura y la baje el tanga negro que llevaba, hasta q cayó al suelo. La abrí el culazo y la fui metiendo la polla en el poco a poco. Cuando se la metí entera comencé a encularla agarrándola de la cintura. Elena empezó a masturbarse.
Volví a subir mis manos hasta agarrar sus tetazas. Las apreté fuerte mientras la enculaba. Las miradas con Silvia a través del espejo me ponían más cachondo aun si cabe.
Cuando Elena se corrió nos dio un beso a ambos y se fue del baño. Cambie el agujero y metí mi polla en su coño desde atrás. Mientras follábamos seguí agarrando y jugando con sus tetazas.
Me senté en la taza del váter. Silvia se sentó encima de mí y empezamos a follar. Nos besamos mientras la acariciaba las tetazas. Agache la cabeza para poder comérselas y meterla entre ellas apretando sus pechos con mi cabeza dentro.
Silvia se arrodillo en el suelo, me quito el condón y metió mi polla entre sus pechos. Me hizo una cubana maravillosa hasta que me corrí. Se pasó mi polla por las tetas y los pezones echando allí el semen que me salió. Volvió a sentarse encima de mí y, mientras acariciaba sus muslos, nos volvimos a besar hasta que se nos bajó el calentón.
Silvia se colocó el vestido, yo me puse bien el slip y salimos del baño dirección el salón. En el pasillo nos encontramos con un hombre nuevo desnudo con una botella de vino en la mano. Era uno de los que Paloma nos dijo antes que estaban en la habitación. Silvia lo conocía y tras saludarse nos presentó. Fuimos con él a la habitación donde estaba la gente que aún no había conocido. Allí estaban el otro hombre y las 2 amigas de Silvia. El otro hombre se levantó de la cama para saludarnos. Silvia no lo conocía pero parece que le gusto pues empezaron a darse un buen beso.
Las 2 amigas de Silvia estaban sentadas en la cama con las piernas cruzadas. Una se llamaba Vanesa, guapa con tetas normales que solo llevaba puesto unas medias blancas tupidas hasta las rodillas muy sexys. La otra era Susana, guapa también, con unos pechos bien grandes y redondos, que solo llevaba unas medias negras transparentes hasta las ingles. Me pidieron que me acercara y entonces me senté en la cama entre ellas con las piernas estiradas. Tras unos besos de presentación con ambas, empezamos a besarnos más a fondo, mientras mis manos acariciaban sus piernas. Susana metió su mano por dentro de mi slip y acaricio mi polla. Pase mis manos por sus espaldas y mientras se las acariciaba comencé a besarme con Susana. Esta seguía con su mano dentro de mi slip y Vanesa me besaba el cuello.
Vanesa me echo hacia atrás tumbándome. Ella lo hizo a mi lado y nos besamos. Susana me quito el slip, se puso a gatas en la cama y empezó a hacerme una mamada. Cuando se me puso bien dura, Susana se tumbó también y volví a besarme con ella mientras con mis manos agarre sus grandes tetas.
Vanesa se sentó en la cama y comenzó a pasar sus pies cubiertos por las medias blancas por mi polla, hasta que comenzó a masturbarme con ellos. Mientras Susana puso sus tetas en mi cara para que se las pudiera comer.
Susana y Vanesa se colocaron a gatas y me comieron ambas la polla y los huevos. Entonces yo me coloque sentado para poder así acariciar sus ricos culos durante la mamada. En esa posición pude ver a Silvia, que estaba de pie, desnuda solo con las medias. Uno de los hombres estaba arrodillado comiéndola el coño y el otro estaba echando vino por sus tetazas mientras se las lamia.
Susana se levantó y bajo de la cama. Vanesa siguió comiéndose mi polla hasta que Susana volvió con un condón. Susana me lo puso y me masturbo un poco mientras nos besábamos. Se sentó de rodillas encima de mí metiéndose mi polla por el coño. Me rodeo el cuello con los brazos, yo la agarre sus tetazas y empezamos a follar. Vanesa le pidió al hombre que tenía la botella de vino que se la acercara. Cuando la tuvo, empezó a echar vino sobre los pechos de Susana, así que tuve que empezar a lamérselos. Vanesa se colocó a gatas y también empezó a comérselas. El hombre que la dio la botella, se colocó de rodillas detrás de ella y la empezó a follar. De vez en cuando Vanesa y yo nos besábamos.
Vanesa y el hombre se fueron con Silvia y el otro hombre, y los 4 se pusieron en el borde de la cama a hacer sus cosas. Yo seguía follándome a Susana, comiéndola las tetazas y acariciando sus piernas. La tumbe en la cama y me eche sobre ella. Volví a meter mi polla en su mojadito coño y seguimos follando. Mis manos acariciaban de arriba abajo sus largas piernas mientras nos besábamos.
Alguien entro en la habitación. Cuando hablo supe que era Raquel. Esta se quedó con los 2 hombres, pues unas manos empezaron a acariciarme el culo y al mirar eran Silvia y Vanesa. Me puse de rodillas entre las piernas de Susana, colocando sus piernas sobre mis hombros y metiendo mi polla nuevamente en su coño. Así, mientras follábamos podía besarme con Silvia y con Vanesa. Mis manos además de acariciar las piernas de Susana, acariciaban los pechos de Silvia y Vanesa.
Uno de los hombres se corrió en la cara de Raquel dejándosela bien blanca. El hombre que aún no se había corrido se colocó un condón y me pidió follarse a Susana. Le deje y yo me senté en el borde de la cama. Vanesa se sentó encima de mí rodeándome con sus piernas y follamos con muchas ganas. Silvia sentó al que se corrió al lado nuestra y se colocó de rodillas mamando su polla para limpiarla y volver a ponérsela dura.
Cuando Raquel volvió del baño de limpiarse la cara se puso de rodillas detrás de mí empezando a besarme el cuello. Se echó un poco más hacia delante y nos empezamos a besar los 3. Raquel tiro de mí hacia atrás hasta tumbarme. Se puso encima de mi cara colocando su humedísimo coño en mi boca. Agarre fuerte su culo y se lo devoré con mi lengua, mientras seguía follando con Vanesa, y ambas se besaban. Vanesa se metió mi polla por el culo y siguió moviéndose como una loca. Cuando Raquel se corrió en mi boca, la hizo bajarse a Vanesa para ser ella la que se metía mi polla x su culo. Vanesa se fue con Silvia y el hombre. Me volví a poner en posición de sentado y así pude besarme con Raquel y agarrar sus tetitas y pellizcárselas pasando mis manos por debajo sus brazos. Cuando fui a correrme, Vanesa volvió con nosotros colocándose de rodillas en el suelo y en cuanto Raquel se levantó para bajarse agarro mi polla. Me quito el condón y empezó a mamármela. Mientras Raquel, se puso de rodillas a mi lado y nos besamos. Cuando me corrí, Vanesa me la dejo limpita y se sentó al otro lado. Me bese con ambas mientras sus manos acariciaron mi polla y los huevos sin dejar que esta se relajara.
Los 3 salimos de la habitación y nos fuimos al salón. Allí seguían Elena, con 2 de los hombres y Paloma con el otro. Raquel se fue con uno de los que estaba con Elena. Vanesa no me soltó de la mano y me llevo hasta la mesa. Se sentó en el borde y me pidió que la comiera el coño. Me arrodille, la puse las piernas sobre mis hombros, y mientras la comía el coño, acaricie sus suaves medias blancas.
Paloma se me acerco y me hizo irme con ella. Esta se subió encima de uno de los hombres que estaba tumbado en el sofá. Me puso de pie al lado y, mientras follaban, se inclinó para hacerme una mamada. Cuando la tuve bien dura, me coloque un condón y me coloque detrás de ella con un pie sobre el sofá y otro en el suelo. La eche hacia delante y metí mi polla por su culo. Durante la doble penetración pase mis manos y agarre sus pechos. Paloma nos pidió cambiar posiciones. Yo me tumbe en el sofá, follándola, y el otro se puso con el anal. Paloma y yo nos besábamos y acariciaba sus muslos.
El hombre que estaba follando su culo se levantó y se puso de pie. Se quitó el condón y se masturbo hasta q se corrió, momento en que la metió en la boca de Paloma que se lo trago todo.
Paloma y yo nos levantamos del sofá. Se puso de rodillas en el sofá mirando la pared. Se apoyó en el cabecero y la metí la polla por su culo, volviéndoselo a follar.
Estuvimos así hasta que llamaron a la puerta y Vanesa, que fue a abrir apareció en el salón con una nueva pareja. Ella era una dominicana mulata guapísima con unos labios carnosos que me llamaron inmediatamente la atención. Llevaba un vestido largo ajustado, hasta el suelo, azul claro, de tirantes anchos, con un escotazo en v que mostraba los laterales interiores de sus pechos redonditos. El hombre no era tampoco su pareja. La dominicana, se me acerco diciendo que a mí no me conocía. Paso su mano por toda mi espalda hasta llegar a mi culo. Nos dimos un pico y nos dijimos los nombres, Dilcia era el suyo. Esta se separó y siguieron saludando al resto. Entonces fue cuando deje de encular a Paloma y nos fuimos hacia ellos. Paloma empezó a basarse con él y yo me puse al lado de ella, que estaba hablando con Elena.
Yo, al igual que ella, pase mi mano por su espalda y la baje hasta llegar a su culazo. La dije que me encantaría conocerla mejor y comencé a besarla el cuello. Dilcia no dijo nada, simplemente echo una de sus manos atrás y me agarro el pene con el condón puesto. Elena se unió a Paloma y el hombre.
Gire a Dilcia y nos empezamos a besar mientras la acariciaba bien el culo. Cogí los tirantes del vestido y los eche hasta el borde de sus hombros. Empecé a besarla el cuello y los hombros. Volví a coger los tirantes y los deje caer haciendo que su vestido se bajara hasta la cintura. Sus redonditos pechos quedaron al descubierto al no llevar sujetador. Se las acaricie un poco pasando mis pulgares por ellas, sobre todo por sus pezones mientras nos volvíamos a besar. Baje mis manos hasta su cintura para cogerla el vestido y bajárselo del todo. Me eche hacia atrás, agarrándola de la mano, para poder girarla y verla bien su cuerpo entero. Simplemente llevaba un tanguita de hilo negro, unas medias cristal hasta la ingle con la liga de encaje floral, que la hacían brillar sus morenitas piernas de forma espectacular. El culazo que tenía Dilcia también era de nota. Tras darla un par de vueltas, la lleve hacia el sofá. Nos paramos enfrente de él y mientras nos besábamos agarre fuerte ese culazo suyo.
Me senté en el sofá y Dilcia lo hizo encima de mí de lado. Nuevamente nos besamos mientras con una mano acaricie sus piernas y con la otra sus pechitos. Subí mi mano por su pierna y, tras acariciar fuerte su muslazo, comencé a acariciar su vagina por encima del tanga. Metí mi mano por un lado del tanga y la masturbe metiendo mi dedo corazón en su vagina. Mientras la masturbaba nos besábamos y de vez en cuando bajaba la cabeza para mordisquear sus pechitos. No pare hasta que Dilcia se corrió. Entonces saque mi dedo y Dilcia me lo lamio limpiándolo de sus jugos.
Dilcia se tumbó en el sofá y yo me eche sobre ella. Volvimos a besarnos y acaricie sus piernas. Metí mi polla por su coño, echando su tanga a un lado, y nos pusimos a follar. Ella me rodeo con sus piernas y así se las pude acariciar mejor durante el sexo.
Coloque a Dilcia a gatas en el sofá y me coloque de rodillas detrás de ella. Aparte su tanga y empecé a darla por el culo. Durante el anal Silvia, Susana y los 2 hombres que se quedaron en la habitación entraron en el salón. Silvia se nos acercó y, tras besarse conmigo y dejarse acariciar las grandes tetas, se sentó delante de Dilcia para que esta la comiera el coño. Yo continué con el anal hasta que me corrí dentro de su culo.
Me senté en el sofá en el sitio que estaba Silvia y esta se puso de rodillas a mi lado. Me empecé a besar con Silvia y Dilcia me quito el condón para lamerme la polla y limpiármela. Una de mis manos acariciaba el culazo de Dilcia y la otra las tetazas de Silvia.
Tras un rato así paramos para cenar algo y reponer fuerzas.