Mi Primera Noche... ♥ Mi Primer Anal ♥
Aquella fue mi primera noche como niña.. la noche en que me convertí en mujer, gracias a un extraño que me llevo a un mundo incierto de pasión y deseo, haciéndome sentir suya en un instante que cambio mi vida para siempre.. Desde aquel momento termino mi dignidad ahora solo existe el placer...
Mi Primera Noche... ♥ Mi Primer Anal ♥
Admiraba esos hermosos zapatos a través del cristal, su brillante color dorado y esos lindos adornos rojos que los hacían lucir espectaculares... El se acerco por detrás, pude verlo en el reflejo del cristal, ofreciéndose a comprármelos si los modelaba para el, me deje llevar por la ilusión de poder probármelos y el morbo de que fuera frente a un hombre, creía que simplemente presumía para ganarse mi atención, aunque el no sabia la sorpresa que le esperaba. Cuando los provee comencé a sentir una sensación muy rica recorriendo mi cuerpo, eran muy altos tanto que me hacian sentir como una prostituta con ganas de ofrecer su cuerpo, el no paraba de verme y decir lo hermosa que lucia con ellos, desapareció por un momento y cuando lo vi volver tenia en sus manos un vestido precioso, también dorado, tan cortito que cuando me lo puse apenas me cubría las nalgas, y su pronunciado escote dejaba ver mi pecho semidesnudo, aunque me sentí un poco apenada por no tener que mostrar.
Continué probándome cosas en la tienda, el pago todo lo que elegí, no se como me convenció para ir a un departamento y vestirme ahí por completo. Tome aquellos tacones, y ese vestido dorados; me mire en el espejo y estaba realmente reluciente... se acerco por detrás de mi y me tomo de la cintura, acariciándome, sus manos suaves se apoderaron de mi cuerpo, hasta que deje que me llevara a su cuarto y el resto es historia...
Aquella fue mi primera noche como niña.. la noche en que me convertí en mujer, gracias a un extraño que me llevo a un mundo incierto de pasión y deseo, haciéndome sentir suya en un instante que cambio mi vida para siempre.. Desde aquel momento termino mi dignidad ahora solo existe el placer...
Yo jugueteaba tiernamente recostada boca abajo en la cama, levantando mis piernas como niña chiquita buscando seducirlo, sentía como el peso de mis tacones guiaba mis pies moviéndose con cierta inocencia. El se coloco de rodillas frente a la cama de forma tal que sus labios quedaban justo frente a los míos, se acercaba despacio admirando mi rostro... mientras mis labios deseaban volver a sentir el calor de los suyos, sintiéndose fríos sin ellos... su boca tomo a la la miá lentamente, y de pronto sentí como su lengua se deslizaba lentamente por entre mis labios llegando hasta la mía, la tomo con suavidad masajeandola con tu lengua mientras saboreaba mis labios, enredo sus dedos en mi cabello acercándome a su boca.. yo estaba inquieta dejándome llevar por sus movimientos, sin saber que debía hacer, quietecita, nerviosa; sintiendo su aliento apoderarse de mis labios.
Sujeto mi rostro con ambas manos y poco a poco comenzó a ponerse de pie, yo me levante despacio de igual manera siento esta vez yo quien quedo de rodillas en la cama frente a él. Comencé a menear mi colita de un lado a otro probocandolo, de repente me di cuenta de el tamaño de su miembro atrapado en su pantalón deseando salir y liberarse del placer que aguardaba entre tus piernas. Acerque mi rostro a su miembro sobandolo con mi mejilla, lo bese suavecito sobre su ropa y lentamente comencé a bajar su bragueta... Lamí su miembro sobre su bóxer hasta dejarlo completamente humedecido por el liquidito que salia de aquel majestuoso pene y mi saliva de tantos lenguetazos que le dí.
Baje despacio su bóxer hasta que de pronto salto de golpe aquel miembro maravilloso, su enorme tamaño me asombro al verlo desnudo y completamente erecto, bese suavemente la punta, dejando que mi lengua lamiera despacito la cabeza de su miembro. Él acariciaba mis mejillas con sus suaves manos, mientras yo continuaba lamiéndolo tímidamente, hasta que de pronto sentí como me tomo con sus manos dejando que su miembro entrara lentamente en mi boca, lo sentí llegar a mi garganta, aquello era tan enorme que apenas podía entrar en mi boca, me quede quieta mientras el movia sus caderas empujando su miembro sintiéndolo entrar y salir de una forma deliciosa en mi boca.
Lo tome con mis manos necesitaba ambas para cubrirlo y aun su punta salia por encima dejando que mi boquita lo saboreara, le besaba la cabeza lamiéndolo completito. Empese a masturbalo, recorriendo la piel de su miembro con mis manos lentamente, hasta sentir que no podia bajar mas, su miembro se estiraba lo sentía vibrar de vez en cuando en mis manos, aprete mis labios en la punta empujando mi cabeza hacia su abdomen, su miembro entro lentamente separando mis labios, mientras el gemia despacio yo trataba de apretar mi boca lo mas que podía... continué devorando aquel enorme miembro, sintiendo un calorcito rico en mi abdomen, me sentía pervertida como una niñita portándose bien para su hombre, me sentí perderme por un instante mi mente comenzó a fantasear en lo delicioso que seria poder tener a aquel hombre dentro de mi cuerpo.
De repente sentí que se alejo de mi... creí que había hecho algo mal y me asuste un poco, me indico que girar.. lo hice despacio gateando mientras meneaba mi colita de un lado a otro, completamente excitada, buscando provocarlo con mi cuerpo me sentía hermosa, suave y delicada. Volvió a ponerse de rodillas frente a mi, mis nalgas quedaban justo a la altura de sus labios, los sentí pegarse a mi piel apretándome de una manera muy rica... sus besos se apoderaron de mi cuerpo, era imposible resistirse a tan deliciosas caricias, su lengua jugueteaba al pasar despacio por entre mis nalgas. Sentí como mi pene se erecto de golpe apenandome por tener un trozo de carne entre mis piernas y una vagina húmeda y tibia que pudiera ofrecerle. Tomo mi pene con sus dedos y empezó a masajearme, en ese momento me sentí en las nubes... sus labios se posaron en mi ano, justo en la entrada mientras su lengua masajeaba mi esfinter lamiéndolo de una forma deliciosa, mis gemidos empezaban a escaparse sin poder contenerme ante esa maravillosa y extraña sensación de placer, morbo y excitación.
Llevo un dedo a mi boca, haciéndolo entrar.. lo lamí y chupe como si fuera su miembro dejándolo lleno de mi babita, coloco ese dedo humedecido por mis labios en mi ano y lo empujo de golpe, sintiéndolo entrar de una gemí despacio apretando mis labios, un dolorcito rico se apodero de mi cuerpo... Lo movía dentro de mi excitandome sin medida, sin imaginar el dolor que me esperaba con lo que venia...
Me tomo por detrás cargándome en sus brazos, metió una almohada bajo mi abdomen y me dejo caer recostándome de panza sobre ella, llevo mi cabeza hasta abajo... en una posición bastante relajada, aun le coqueteaba moviéndome sensualmente y muy provocativa. De pronto sentí como su miembro caliente y duro se apegaba contra mi ano, para entonces estaba completamente relajada y su pene consigo posarse en la entrada de mi ano, un dolor intenso recorrió mi cuerpo, y yo ni siquiera imaginaba que aquello no había conseguido entrar, sino que solo descansaba esperando la oportunidad de partirme en dos. Aquella escena debía ser hermosa para el, admirando por detrás a su mujercita, que arqueaba su espalda gustosa se tenerlo.
Empujo suavemente y el dolor que sentía aumento de golpe, la punta de su miembro logró entrar con dificultad, deje escapar un grito que no pude contener e inmediatamente lleve mis manos atrás hasta su abdomen tratando de impedir que entrara... El tomo mis manos con las suyas, apretándolas para apartarlas de su camino, y empujo nuevamente, volví a gritar intensamente sintiendo como aquella verga majestuosa se abría paso en mi ano separando mi carne y rompiendo mi esfinter en un movimiento lento y profundo... Se recargo sobre mi cuerpo dejando caer su peso en mi, su miembro entro hasta lo mas profundo de mi ser, empece a patalear por el dolor ahora si como una niña chiquita haciendo berrinche, gritaba gimiendo y a punto de llorar porque no podía soportarlo dentro de mi.
Su aliento suave en mi oído comenzó a tranquilizarme, besaba mi oreja con cariño... Susurrándome tranquila chiquita todo esta bien, mordía la sabana queriendo amortiguar el dolor. Me quede quietecita hasta sentir como mi ano increíblemente acomodo al tamaño de su enorme humanidad. Me moví un poquito a lo que el respondió tomándome con tus brazos, me levanto un poco dejándome en la pose de perrito tomo mis nalgas con sus manos y comenzó a empujarla contra mi cuerpo, mi ano dilatado dejando que su pene me rompiera el alma con cada movimiento, sintiéndolo entrar durísmo por mi culito.
Sus movimientos pasaron de ser lentos y profundos a rápidos y superficiales, prácticamente toda su verga quedaba fuera de mi ano... solo la punta enorme y gruesa me partía el culo en pedazos, de repente sentí como lo saco por completo y entro hasta el fondo de golpe, grite muy fuerte y el lejos de parar por mi dolor empujo una y otra vez intensamente, me sentí perderme en aquella sensación y sin darme cuenta el dolor fue sediendole paso a una sensación hermosamente placentera, un calorcito rico se apodero mi cuerpo por completo, un escalofrió intenso recorría mi espalda sintiéndome completamente perdida y entregada a aquel extraño.
Me tenia tirada en la cama como su perrita, penetrándome en esa posición tan placentera coloco una mano en mi espalda haciendola arquearse; y la otra sobre mi cabeza apegandola a la cama... completamente entregada a el, mi cuerpo entero vibraba al sentir tan deliciosa sensacion apoderarse de mi ser. Por primera vez era una señorita y en ese mismo instante me convertía en mujer, entregada, sumisa, dejando que ese hombre me montara como a su hembrita.
Continuo moviéndose por un buen rato, me sentí perderme en el tiempo... aquello era formidable, su impulso su fuerza, cada penetración llegaba hasta lo mas profundo de mi ano, sintiendo aquel miembro enorme chocar contra mi carne, mi miembro se erectaba al sentir ese placer tan rico, hasta que el volvió a tomarlo con su mano, esta masturbándome suavemente, aumentaba el ritmo de la masturbación mientras su duro miembro seguía clavándose en mi colita... la sensación era tal que no pude resistirme, y comencé a correrme en su mano, tomo mi semen y llevo su mano hasta mi boca, lamí sus dedos devorando mi propia lechita de su mano mientras sentía su verga dura derramarse dentro de mi colita, empujo muy fuerte y se dejo caer sobre mi cuerpo, su liquido caliente y denso llenaba mi interior, derramándose lentamente, haciéndome suspirar...
Se tumbo sobre mi cuerpo, descansando nos quedamos así por un buen rato, calladitos disfrutandonos el uno al otro, nuestros cuerpos sudorosos y exhaustos, se relajaban mutuamente sintiendo el calor del otro, hasta que finalmente rompió el silencio preguntándome si me quedaría a dormir ahí esa noche, accedí y me abrase a el hasta quedarme dormida. Al día siguiente cuando desperté el ya no estaba, solo dejo una nota que decía... Ha sido increíble estar contigo mi amor, quizá algún día tengamos la deliciosa suerte de volver a encontrarnos.. hasta pronto mi niña ♥