Mi primera infidelidad
A los 22 años, mi curiosidad por el sexo me llevó a mi primera infedeliad con mi jefe, para iniciarme en un camino lleno de placer.
Mi nombre es Gaby, me considero una chica normal pero he de reconocer que siempre he levantado las miradas de los machos, si algo les gusta a los hombres es mis senos bien formados y mis piernas torneadas en largas horas de gimnasio.
Les contare lo que me paso cuando tenia 22 años, apenas había salido de la universidad y obtuve mi primer trabajo como pasante en una importante compañía trasnacional en la ciudad de México. Como toda chica de provincia, quede deslumbrada ante la magnitud del distrito federal, sus infinitas posibilidades de diversión y sobre todo, las cosas que una nena de mi edad podía aprender del sexo.
En aquel entonces, tenia una relación estable con mi novio de la universidad, sin embargo el moverme a la ciudad de México había enfriado la relación con el, lo cual abría las posibilidades de conocer a otros hombres, aunque le había prometido fidelidad, muy en mi interior sentía la curiosidad de probar otros chicos.
Desde el primer día de trabajo sentí como la mirada de mis compañeros se centraba en mi; cuando me presentaron ante Hector, mi jefe, me percate inmediatamente que no le era indiferente, sus ojos lo delataban y su insistente mirada a mi trasero cada vez que tenia oportunidad lejos de incomodarme me hacían sentir sexy.
El era un buen macho de 34 años, de espalda ancha , manos gruesas y sobre todo de una mirada penetrante. Casado y con un hijo, lo hacían fruta prohibida para mi, y yo, una muchachita de carne tierna era lo que el estaba buscando
Hector me pedía insistentemente que le entregara reportes que me exigían quedarme hasta mas tarde, para después llevarme a mi casa y la muy modosita de mi accedía sin problema alguno.
Un día, después de una larga jornada de trabajo, antes de llevarme a mi casa me invito a cenar, yo le pregunte que si no tendría problema su esposa, el me contesto... "no tiene por que enterarse" , yo accedí sin oponer mas resistencia, y me llevo a un lugar de comida italiana.
Después de la comida llegaron los tragos, platicando de las cosas de la oficina y del mundo, hasta que tomo mi mano para quitarme el anillo que traía puesto...
-"Quien te dio este anillo?"
-"Mi novio, me lo dio en nuestro aniversario"
-"sabes como lo envidio" contesto inmediatamente
-"me gustaría tener lo que el tiene"
inmediatamente me robo un beso, yo no tuve mas opción que corresponderle; bajo la mesa me comenzó a acariciar mis piernas, ya para ese momento mis jugos mojaban mi tanga .Sentí como su dedo acariciaba mi conchita...
-"No sigas" le suplique... "al menos no aquí"
El pidió la cuenta y dejamos el lugar,
-"Gaby, hoy vas a ser mía" me dijo al oído mientras estábamos en su coche, yo accedí con la cabeza mientras mis manos acariciaron su polla, ese trozo de carne caliente estuvo por primera vez entre mis manos, le baje el pantalón mientras el conducía para introducírmelo en la boca mientras el manejaba rumbo a un motel.
El me pedía que no parara mientras el conducía, yo estaba hipnotizada por ese tronco, mis labios no dejaban de succionar y el gemía pidiéndome mas...
" Haaa tienes una boquita !!"
"Si papito, es tuya, mi voy a comer tu verga completita" , yo jamas pensé en decirle eso, me consideraba recatada en los artes del sexo, pero esa noche me sentía una zorra.
Llegamos al motel y entramos a la habitación, el se sentó en la cama...
"Ven zorrita , ven por tu lechita"
Yo me arrodille ante el, bajándole los pantalones para que su trozo de carne quedara completamente al descubierto
"no pares Gaby, eres una Diosa"
Yo estaba a mil, recorría su capullo con mis labios, y le lamia el pene desde sus testículos como una gatita en celo ...ronroneando y gimiendo para que la penetren.
"no puedo mas Hector, hazme tuya , métemela completita"
El me tumbó en la cama , yo me despoje de mi blusa y falda para quedar en tanga y sostén.
El me empezó a dedear mientras besaba mis pechos...
"Asì papi, asì!!!!!"
De un solo golpe me saco mi sostén , dejando mis pezones erectos al descubierto.
"Dale papi, comelos"
"Que buena hembra eres Gaby, ya me imagino como te coges a tu novio"
En ese momento vino la imagen de mi novio, y lejos de remordimiento me dio mas morbo..
" el no me pone como tu, te pertenezco, has de mi lo que quieraaaas" , le dije jadeando...
El me ordeno ponerme en cuatro patas "muéstrame tu culo zorrita"
yo me contoneaba como una puta en la cama, mostrando mi mercancía a mi macho.
Me metio su miembro de un solo golpe y me empezó a bombear, yo gritaba como poseída mientras soportaba sus embestidas, sentí que llenaban mis entrañas,
" soy tu puta, por favor métemela hasta adentro"
sus estocadas llenaban mi vagina, me sentía plena, llena de carne de mi hombre, hasta que me llego el primer orgasmo...
" aaa si, dame , mass siiii"
Sentí como mi cuerpo se llenaba de una descarga de placer, para caer sobre la cama rendida...
Hector se puso boca arriba
"ahora es mi turno, cabalga Gaby" .... me ordeno
Muy obediente me senté sobre su pene , controlando la penetración, disfrutando de cada uno de los centímetros de su miembro. El me agarraba mis tetas que se movían al aire, al ritmo de mis contoneos.
Yo en ese momento le pertenecía, ya no era dueña de mi ser, solo sabia que necesitaba mas de su cuerpo, y que quería llenarme toda "dame tu leche papi", le gritaba suplicante.
Fue entonces cuando sentí su descarga, un borbotón de semen corriendo por mi interior para llenarme de su sexo e impregnar la habitación a ese aroma dulzón del jugo de hombre ; yo quede exhausta, pero aun tenia fuerza para limpiar su pene lleno de semen con mi boca hasta dejarlo completamente limpio
"que buena, eres Gaby, desde ahora me perteneces, poco a poco descubrirás a la mujer que realmente eres.... CONTINUARA....