Mi primera experiencia infiel

Hola

Te cuento que por razones del trabajo de mi esposo vivo en Venezuela ya que el trabaja hace varios años con una petrolera de este país.

Al llegar acá nos instalamos en un conjunto residencial donde conocí un travestí que administraba una peluquería donde fui por primera vez para hacerme unos retoques para estar bien conmigo misma, es un chico (chica) bien amable, atenta y muy bondadosa, halagándome y resaltando mis atributos por lo que me subió el ánimo - ya que estaba desanimada porque mi esposo se había retardado más de lo normal en la despedida de año de la empresa, no era por celos porque yo sabía de la situación de mi esposo que por miedo a quedar mal no enamoraría a ninguna mujer – Así que Soraya (así se llama el travesti) me cayó bien e hicimos bastante empatía, y una gran amistad.

Ese mismo día en el conjunto residencial donde nos quedamos a vivir mientras encontrábamos una mejor, se estaba celebrando la fiesta de fin de año, esperé a mi esposo hasta bien tarde de la noche aunque algunos vecinos me brindaban algunos tragos no quise bajar e integrarme a la fiesta solo salía de apartamento hasta la escalera para ver hacia la portería cuando llegara mi esposo, solo llego Soraya y su amigo también travestis, me dio alegría porque siguió elogiándome, yo tenía puesto un vestido de color rojo muy pegado al cuerpo con un escote pequeño pero se podía apreciar el contorno de mis senos, me sonreí con él, al rato me invito a su apartamento lo cual acepté, me brindo unos tragos de licor donde se sincero conmigo contándome muchas de sus experiencias con algunos hombres que la habían hecho disfrutar mucho y también lo (la) habían dejaban planteado como mi esposo me estaba dejando en ese momento, al entrar en confianza con él (ella) también le relaté las experiencia que había disfrutado por lo que me dijo que eran experiencia hermosa y me recomendó que las compartiera por internet, cambiando mi nombre para evitar ser identificada así que de esa manera salió el seudónimo (DUBYS) nombre con que me van a conocer mis amigos de internet.

Así que empecé a escribir esas experiencias.

Al calor de los tragos nos pusimos a escribir mi primera experiencia, la cual fue en resumidas cuentas mi primera infidelidad aunque fue una masturbación pensando en un hombre muy conocido del cual siempre me agrado como hombre solo que él es el esposo de mi tía, antes lo había hecho pensando en los hombres de las películas con sus vergas grandes, gruesas y bien paradas.

Esa experiencia la viví un día en que la noche anterior miraba una de esas películas. La noche en que se subió la gota que rebaso todos mis deseos cuando como en otras ocasiones estuve bregando con mi esposo a que se le parara la verga después de mirar películas XXX las cuales a mi me excitaban mucho, cuando me acosté no pude conciliar el sueño por el deseo de tener una de esas vergas en mis manos y hacer lo mismo que hacían en las películas, al fin pude conciliar el sueño.

Al día siguiente me desperté toda somnolienta y recordé que tenía que ir donde mi abuela que en esos momentos se encontraba enferma y como mi tía que vivía con ella tenía que trabajar me pidieron que acompañara a mi abuela, ese mismo día el esposo de mi tía, un hombre muy guapo que despierta en cualquiera mujer algún suspiro, a mí también me había llegado en varias ocasiones ese suspiro pero por ser el esposo de mi tía lo veía como algo inalcanzable para mi además de reprochable. El llego como a las 10 de la mañana bastante borracho ya que había tomado licor toda la noche y estaba trasnochado, todos en la casa habían salido, solo estaban en la casa mi abuela y dos señora que la estaban visitando a causa de su quebrantos de salud. Se acostó y se durmió enseguida, mi abuela me dijo al rato que entrara a la habitación de él y le encendiera el aire acondicionado, fui hasta su habitación, estaba acostado en pantaloncillo boca arriba dejando ver el tremendo bulto entre sus piernas lo que me produjo admiración y curiosidad, Salí de la habitación con unas ganas de tocar ese miembro pero el miedo a ser descubierta me lo impedía, impulsada por el deseo de la noche anterior de tener una verga en mis monos me llene de coraje y volví a entrar donde el estaba acercándome un poco con mucho más miedo, empecé a bajar un poco la mano con temor al principio hasta tocar ese bulto por encima de su pantaloncillo, salí rápidamente de allí para ir a cerciorarme de mi abuela y sus amigas, empecé a sentir un vacío en mi estomago de ansiedad y temor como algo que recorría todo mi cuerpo y se concentraba en mi vagina, volví a la habitación resuelta a meter la mano en su calzoncillo y tocar ese palo que discretamente había deseado por ser un hombre atractivo. Lo toque pasando la mano totalmente acariciando ese miembro que a mi parecer se ponía duro saque un poco mas de valor y metí la mano en su interior sacándole la pinga y acariciando por primera vez un miembro con bonitas pelotas, mi vagina instintivamente comenzó a humedecerse mientras que mi boca se me hacia también agua. Era una polla hermosa, grande, muy poderosa, preciosa y muy bien flanqueada por dos estupendos testículos redonditos, con la punta color canela, solo pensaba en esa maravilla, mi cuerpo empezó a desear tener esa verga, mi boca solo quería besarla, recorrer toda su longitud con la lengua desde la punta hasta los huevos, meterla en mi boca, chuparla y chuparla hasta exprimir la última gota de semen.

Como ustedes imaginarán estaba calientísima, con mi chocho hecho aguas y mis pezones muy duros, el vacío en mi abdomen se hacia cada vez mas grande empecé a masturbar esa pinga bonita quise besarla pero sentía miedo a que se despertara, aun así la bese en la punta y salí de la habitación con un deseo grande de tener mi primera experiencia sexual con él, me fui corriendo a mi habitación desnudándome totalmente acariciando mi vulva caliente y jugosa, mi panty estaba totalmente mojado del liquido preorgásmico, apoyé la espalda en uno de los extremos de la cama a la altura de mis hombros, cerré los ojos y me deje embriagar por el delicado olor de sus huevos en mis manos y con el calor del interior de mi vulva que actuó como resorte para que mi mente empezara a rememorar lo acontecido. Empecé a acariciar mi cuerpo, primero el torso muy suavemente, rozando apenas las tetas casi vírgenes descendiendo hasta el vientre saltando hacia la cara externa de los muslos Pasando varias veces las manos arriba y debajo de los muslos desviándolas hacia el centro a cada pasada.

Cuando ya mis manos se deslizaban por el interior de los muslos separé las piernas y las apoyé en uno de los laterales de la cama, el roce continuo de mis dedos en mi coño estaba despertando mi hambrienta perla. Finalmente, pasé la palma de la mano derecha sobre la vulva y llevé la izquierda a mis tetas acariciando primero y después frotando y estrujando alternativamente una y otra cada vez más fuerte Aún notaba mi vagina ligeramente dilatada por la imagen de la verga de Raúl y también imaginaba la caliente leche alojada en mi cálido refugio. A la vez, mi cabeza estaba ausente, solo pensaba en ser penetrada por esa poderosa polla, penetrada por delante y por detrás, tenerla entre mis medianas tetas hasta regarme con su leche. Tuve mi primer orgasmo a su nombre, fue un orgasmo como de campeonato, nunca antes había tenido un orgasmo asi, continué con la idea de tenerla clavada hasta el fondo. Esa idea me resulto muy excitante y en ese momento, con una de mis manos ejerciendo una suave presión sobre mi clítoris y la otra masajeando mis tetas y la sensación de tener el coñito lleno de leche, era lo que necesitaba para terminar de encenderme. Coloqué la mano abarcando ambos labios de la vagina y situé los dedos corazón y anular entre los mismos, Entonces inicié un movimiento cadencioso hacia arriba y abajo desplazando mis labios junto con la mano, de modo que estimulaba mi clítoris indirectamente por encima combinando el movimiento arriba y debajo de la mano con movimientos adelante y atrás de los dos dedos de modo que presionaban de manera intermitente la boca de mi coño. Mi corazón latía ya con fuerza y mi respiración se transformaba en gemido. Podía sentir cómo mi perla se alzaba ya exultante e hinchada separándose y abriendo aún más la flor de mi coño.

Sabía que si incrementaba el ritmo de frotación llegaría pronto al segundo orgasmo, así que fui aumentando la velocidad hasta que empecé a percibir cómo una descarga eléctrica se desencadenaba en mi clítoris, mientras que con el dedo corazón de la izquierda me estimulaba el clítoris. Quería imaginarme, mientras me masturbaba, como Raúl me penetraba con su polla, Era tal mi imaginación en ese momento, que me parecía estar totalmente desnuda delante de Raúl restregándome el glande de su verga en la entrada de mi vagina. Me encontraba en esas metiéndome la punta del dedo cuando en eso Explote. No pude más. Esa sensación Se dirigía velozmente a mi espina dorsal y desde allí se expandía por todo mí ser. Apreté fuertemente la mano contra mi sexo cuando mi cuerpo se tensó por una fracción de segundo para explotar a continuación en una sucesión de contracciones de mi útero, de mi vagina y de mis orificios delantero y trasero.

Contracciones que se sucedieron vertiginosamente en un principio y que progresivamente se fueron espaciando unas de otras, hasta convertirse en un leve palpitar que agitaba mi cuerpo con pequeñas sacudidas de mi vulva. Como mis pezones se ponían más erectos de mi boca salían gemidos que intentaba parar mordiéndome los labios mis manos seguían entre mis piernas, inmóviles pero invadidas por el flujo que mi coño expulsaba en ese momento. Recuerdo que me sumergí en un estado de sopor con las piernas todavía separadas, los brazos cayendo flácidos a ambos lados de mi cuerpo y las manos descansando sobre el monte de Venus. Minutos más tarde me incorporé despacio y tomando mi ropa me vestí alcé hacia el cielo la vista como agradeciendo ese permiso por una jornada doblemente satisfactoria. Al mismo tiempo pidiendo perdón Sonreí y acerqué mis dedos mojados de mis jugos orgásmicos a mis labios. ¡Uhmmm, realmente delicioso.

La experiencia de ser penetrada por Raúl se me hizo una realidad casi cinco años mas tarde, en una maravillosa relación que duró casi tres años, para nuestra fortuna nadie se enteró de esa relación, en otra ocasión les cuento como comenzó esas relaciones sexuales con el esposo de mi tía.

Espero que les haya gustado esta experiencia

Escríbanme y denme su opinión para así sentirme motivada a escribir las otras experiencias que son varias.

Mi nombre es Dubys

Mi Email es: lunaysol0027@yahoo.com