Mi primera experiencia de sumisa
Es la primera vez que me animo a escribir, tal vez todavia le falte mucho al relato, pero nada que con el tiempo no se pueda aprender, tengo mucho mas que contar ya que no es solo un relato, es parte de lo que esta sucediendo en mi vida y que quiero compartir con ustedes, cualquier critica me es favorable para mejorar al escribir, saludos para todos.
Desde que tengo 12 años siento deseos, deseos que en ese momento eran muy vagos, pero que a medida que he crecido han crecido conmigo, muy dentro de mi, y que jamas he podido sacar a la luz, hasta hace muy poco, deseo de sentirme una verdadera puta, de sacar afuera la sorra que llevo dentro, pero como hacerlo con un marido tradicional y aburrido?, esperando y deseando cada mañana al levantarme que fuera ese el día, el día en que apareciera mi amo, un verdadero amo que supiera cumplir mis mas profundas fantasías, todo era rutinario, la madrugada a las 5am, ir al restaurante, atender las mesas con la fiel sonrisa de siempre, 25 añitos, envuelta en un cuerpo que siento hermoso, 1.68, sin grasa extra, moldeado con sugerentes curvas, pechos regulares de una talla 95, con un culo exuberante y bien parado, que da comienzo a mi pequeña cintura, piernas bien formadas, mas aun con el gimnasio, y mis pies podrían ser para un aviso de tv, morocha, pelo enrulado que cae a mi cintura, rebajado en el frente a los lados de mi cara, lo que permite tener una cara muy angelical o muy provocativa, según como mire y a quien mire.
Pero mi vida no ha sido mas que llegar del trabajo a mis obligaciones domesticas, preparar la comida para cuando mi esposo regrese a la noche a casa, y estar aquí frente al monitor, muchas veces leyendo sus relatos hoy tal vez ustedes leyendo el mío, han sido mi compañía segura tanto tiempo sin saberlo, y ahora que todo ha cambiado no puedo dejarlos afuera, por eso es que quiero después de esta pequeña he insulsa introducción relatarles lo que es el principio de las realizaciones que tanto desee.
Fue hace ya dos meses, todo era rutinario y normal como siempre, me desperté a la mañana, me dispuse a tomar mi ducha, normal como cada mañana, y otra vez ese bendito uniforme, pantalón de tela fina negra, muy ajustado, camisa blanca ajustada, y el moñito que presiona mi cuello sobre la camisa, pelo recogido por una cola bien tirante, y a trabajar, todo era normal en el trabajo, el saludo a los/as compañeros/as, y a prepararme para atender al publico.
Llegan mis primeros clientes, saludo sonrientemente, tomo su orden y me dirijo a la cocina a dejar el pedido, los cocineros son una pareja de Venezolanos, pero me extraño que esa mañana solo estuviera el, Ángel ese no es su nombre real, pero así lo llamare aquí, su esposa se había sentido mal y no iría hoy a trabajar, muchas veces sentí su mirada, penetrando la mía, pero siempre la he evitado, pero esa mañana no podía, un hombre trigueño, de unos cuantos años mas que yo, tal vez 43 o 45 no lo se exactamente, de ojos verdes y mirada muy fuerte que hace bajar la mía en cuanto me mira, 1,75 de altura, y que deja ver que en sus mejores años tal vez tuvo una muy buena figura, algo gastada ya por el pasar de los años, pero extremadamente deseable para mi gusto, he querido evitar todo contacto con el, porque siento que hay esa atracción que hace que dos personas busquen sus miradas, o esos roces que hacían atascar mi respiración y sentir mi corazón latiendo en mi garganta a mil, haciéndome desear que cumpliera con mi cuerpo todos sus deseos;
Transcurrió una mañana bastante tranquila, y gracias a eso pude tomar mi descanso para almorzar a las 12 en punto, y me retire al patio de atrás donde siempre nos sentamos a comer, no pasaron 5 minutos que salio el y se sentó a almorzar conmigo;
Le pregunte por su esposa a lo que el inmediatamente y con sonrisa desafiante respondió,
-Se sintió mal hoy, para que yo pudiera hacerte sentir hoy!
-Como? (respondí)
Se paro de donde se había sentado, dio la vuelta a la mesa y me pare rápidamente, cuando vio que iba a alejarme, estiro su mano aun mas rápido y rodeo mi cintura, me presiono contra el y mi culo quedo apoyado en el borde de la mesa de mármol, tomo mi pelo con su otra mano y enrosco toda mi cola que llegaba casi a la cintura en su mano,
-Dime que no lo deseas tanto como yo perrita (fueron sus palabras)
-No, no deseo nada (le respondí)
-Y si no lo deseas, porque no te has zafado aun?, porque tu respiración se oye excitada?
Baje la mirada, no podía soportar la suya mirándome fijamente, y conteste:
-Puede venir alguien, suéltame.
-Volvió a mirarme cínicamente y pregunto
-Eso es lo que te preocupa? No te preocupa lo que pueda hacer de ahora en mas contigo? O simplemente deseas que lo haga?
Soltó mi pelo y bajo su mano hasta mi coño y comenzó a refregarlo ejerciendo algo de presión lo que me hizo saltar y acelerar aun mas mi respiración, lo empuje y me Salí de sus brazos, le dije que no podía ser y que no le haría eso a su esposa a quien apreciaba, a lo que respondió con su mirada seria,
-No, no puede ser, ya es!, y tu vas a ser mía de ahora en mas y cuando yo disponga, te someterás a mis deseos y si no obedeces, tu sabes lo que pasara.
Realmente no podía creer que estuviera, en ese lugar con mi compañero, y escuchando algo que tantas veces desee escuchar, me parecía algo estúpido en ese momento, sacar de mis fantasías algo que luego lo veo en mi vida real, era difícil de creer.
-Estás loco le dije y me di vuelta y entre al pasillo que me llevaba primero a los baños y luego a la cocinar del restaurante.
Abrió la puerta fuertemente y camino hacia mi, tomo mi brazo fuertemente y me llevo al baño de mujeres, tranco la puerta y se quito el delantal, lo puso en el piso, y me ordeno que me arrodillara, sinceramente me reí en su cara, y quise pasar sobre el para salir ya que estaba parado contra la puerta del baño, puso sus manos en mis caderas y me hizo caminar hacia atrás unos pasos, a lo que replico:
-Te diré como son las cosas una vez, una sola vez, espero que las entiendas y no tendré que aplicarte ningún castigo, desde que te conocí la primera vez, desee hacerte mía, desee tu cuerpo, tu ser, y es solamente eso, deseo, el mismo deseo que tu sientes, si no lo sintieras tan fuerte como yo, esto no estaría pasando, ni pasaría nunca, puedo reconocer una sumisa con solo leer sus ojos, y tus ojos me lo están implorando, tienes tu esposo y yo mi mujer, te daré lo que te hace falta y tu me darás lo que quiero, te someterás a cumplir mis deseos y nada mas, cuando yo quiera tu cumplirás, y te limitaras a obedecerme, a partir de este momento "soy tu amo" y así me llamaras, me has entendido?
-Angel, yo no puedo (respondí)
Levanto la mano y me viro la cara de un bofetada, y volvió a preguntarme.
-Como me llamo? Has entendido?
-Si amo (respondí)
Creo que por mi muy alto orgullo, pronunciar esas palabras fuera de mis fantasías era algo torturante, humillante.
-Despréndete la camisa hasta la mitad, toma tus tetas y masajealas.
Y así lo hice, desprendí lentamente mi camisa con la mejor de mis miradas angelicales, inocente, corrí el sostén hacia los costados y me tocaba yo misma, tomando mis pezones que estaban bien parados y tirando de ellos suavemente, mirándolo con una dulce sonrisa, moje mis dedos y los pase húmedos recorriendo todo el pezón, apretando y juntando mis tetas, sacando mi lengua y pasándola por los pezones.
-Eres mas sorra de lo que yo imaginaba (me dijo)
-Arrodíllate y sácame toda la leche con tu boca.
Me arrodille y desprendí su pantalón, no llevaba ropa interior, su pene estaba erecto, era de tamaño normal, no muy grande no muy chico, pero bastante mas gordo que el de mi marido, pase mi lengua por todo su pene y lo humedecí en la cabecita tenia una gota de semen, que deguste al pasar mi lengua y limpiarla, recorrí toda su cabeza con mi lengua y con mis labios bien húmedos apretando todo su contorno la metí de una sola vez hasta mi garganta, deje que mi lengua se relajara para que pudiera ocupar la mayor superficie de su pene dentro de mi boca y mientras acariciaba su pene con mi lengua empeze a meter y sacarla de mi boca, apretándola lo mas que podía con mis labios, refregando toda mi lengua en su interior y succionando cada vez que esta salía de mi boca, con la mirada hacia arriba clavada en la suya, viéndolo disfrutar de mi mamada, creo que lo intimide un poco pues, me cogió fuertemente del pelo manteniendo firme mi cabeza y comenzó a follarme por la boca lo hacia rápido, yo seguía succionando cada vez que salía y comenzaba a sentir gotas de su leche caliente cayendo en mi boca, hasta que la saco de mi boca y me ordeno que me metiera sus testículos en mi boca y lo masturbara con mis manos, recorrí cada parte de ellos con mi lengua, mientras mis manos apretaban su polla y se movían rápidamente, me ordeno que me comenzara a masturbarme que ya iba a correrse y quería que yo lo hiciera con el, desprendí mi pantalón sin dejar de chupar sus testículos, con una mano seguía masturbándolo y chupando sus testículos, mientras me masturbaba con la otra mano.
-Apunta mi polla a tu cara y abre tu boca (me ordeno)
Y así lo hice, hasta que su leche salto rápidamente en mi cara y parte de mi cuello, el tomo su polla y comenzo a pasarla por la leche en mi cara a la vez que me la introducía en la boca para que me tragara su leche, después que me trague toda la leche que había caído en mi cara, me ordeno que le limpiara la polla, y la volví a chupar por unos segundos mas hasta que no quedaron rastros de leche.
Me ayudo a parar pues ya me dolían las rodillas de la posición, y me ordeno que volviera a mi trabajo aunque aun me faltaban 10 minutos mas para entrar, y me aclaro que de ahora en mas cumpliría todo y cada uno de sus deseos, volvió a preguntar si había entendido, a lo que conteste:
-Si, Amo!