Mi primer trío...casi

Una experiencia más.

Ra y yo salimos una noche de copas,me sorprendió porque como recordaréis él está casado y es complicado que podamos hacer cosas de ese estilo. Su "gran sueño" es ir a un local de intercambio para que él me vea follar con otro y yo a él con otra, así que pensé que esa noche me llevaría a un local de ese estilo. He de confesar que esa idea me pone un poco nerviosa porque él es totalmente desinhibido, pero a mi aún me cuesta "arrancar" un poco y, la verdad, si no fuera porque él tira de mi creo que seguiría practicando la postura del misionero...única y exclusivamente.

Pasó a recogerme e iba vestida con una minifalda, sandalias de tacón, una camiseta de tirantes y sujetador...nada más, como a él le gusta, pero eso no lo sabia, quería darle una sorpresa... Cuando subí me dijo que iba como una puta y me metió la lengua hasta el la garganta sin apenas dejar que le dijera "hola", mientras me apretaba fuerte los pechos y llevaba mi mano a su entrepierna para que supiera como "estaba". Acto seguido arrancó el coche y estuvimos hablando durante todo el camino, eso sí, mientras me acariciaba las piernas y me miraba las tetas "con hambre".

Fuimos a una discoteca a la que suele ir él cuando sale alguna vez y nos tomamos la primera copa. He de decir que no estoy acostumbrada a beber, por lo que enseguida empieza a subirme el alcohol y la líbido. Mientras hablábamos de "lo  Divino y lo humano" jugueteba conmigo intentando meterme mano, metiéndome la lengua en la oreja, pegándose a mí para que notara su rabo, metiéndome la mano por debajo de la camiseta...en fin, ese estilo de cosas que sabe que me ponen nerviosa porque me "dan un poco de corte", pero que a él le ponen mucho. Acabamos tomando una segunda copa en ese mismo local y de ahí nos fuimos a otro.

Cuando llegamos a este segundo sitio, yo ya estaba bastante caliente por las copas y por su jugueteo conmigo. Lo que me apetecía en aquel momento era calentarle mucho pero sin que me llegara a follar, y ver su deseo en la cara, porque eso me pone, pero nunca lo consigo, ni tampoco lo conseguí esa noche, porque siempre acaba haciendo conmigo lo que quiere y eso, he de confesaros, me gusta: que él sea el que me de órdenes y que disfrute mucho conmigo. Lejos de calentarle y dejarle con las ganas, lo que conseguí fue desatar más "la bestia" que lleva dentro y esa noche quería algo más que lo de siempre.

Fui un momento al baño (tanta bebida es lo que tiene) y cuando volví él estaba hablando con otra, lo cual me cabreó bastante porque pensaba que me iba a dejar tirada para follársela. Decidí acercarme a los dos con buena cara, como si no me importara y me la presentó. Se llamaba Elena, tenía 37 años, tenía el pelo moreno, más o menos de mi estatura, grandes pechos, buen cuerpo en general, llevaba un minivestido y taconazos. Nos pusimos a charlar un rato los tres y nos contó que había salido sola esa noche, a ver que encontraba por ahí. De repente pusieron música de salsa y Ra se fue a la pista a bailar con ella (directamente me rechaza porque dice que soy un pato bailando, cosa que me molesta bastante, pero bueno...lo pasaremos por alto), cosa que me dolió bastante, porque de verdad pensaba que me había estado calentando para luego irse con otra. Ahí decidí que yo iba a follar con él esa noche sí o sí.

Propuse irnos a otro sitio, para lo cual teníamos que coger el coche y le dije a Elena que si se quería venir con nosotros, pero antes volví otra vez al baño y la "invité" a venir conmigo, quería tener una pequeña charla con ella...Una vez que salimos del local, nos fuimos hacia el coche y Elena comentó que prefería ir en el asiento de atrás porque alante se solía marear. Le dije que me sentaría con ella porque con el "pequeño pedal" que llevaba también estaba un poco mareada. A Ra le pareció un poco extraño pero nos dijo que nosotras veríamos.

La discoteca a la que íbamos estaba un poco lejos de donde estábamos, pero por eso propuse ir allí. Elena y yo empezamos a hablar de tíos y esas cosas, mientras que Ra nos miraba por el retrovisor y de vez en cuando se metía en la conversación, la cual se derivó hacia el sexo, experiencias y esas cosas, todo esto en un ambiente total de risas. En un momento determinado del "viaje" Elena puso su mano sobre mi pierna y empezó a moverla lentamente. Yo puse mi mano sobre la suya y la apreté. Nos agarramos las manos y nos volvimos la una hacia la otra, acercándonos poco a poco juntamos nuestros labios y empezamos a besarnos de forma suave. No podía ver a RA en ese momento, pero sabía que estaba alucinando y que ahora sí iba a conseguir ponerle a mil.

Continuamos besándonos mientras nos acariciábamos las piernas y yo bajaba mi lengua por su cuello y volvía a subir hasta llegar a su boca para luego mordernos suavemente los labios y pasar a sacar las lenguas, retorciendo la una contra la otra. Ella subió más su mano por mi piernas, haciendo que las separase ligeramente llegando a tocarme el clítoris. En ese momento Ra vio que no llevaba bragas, eso unido a todo lo que estaba viendo hizo que se le pusiera el corazón a mil y empezó a decir: "Qué coño estáis haciendo!! Hijas de puta, lo teníais preparado!! Es eso lo que queréis, bien, pues yo os voy a dar más,putas!! En algún sitio tengo que poder parar para follaros!!

En serio, creí que le iba a dar algo. Estabámos los tres tan cachondos que hubiéramos podido follar en mitad de cualquier calle sin importarnos quien pasara por allí. Comencé a agarrarle las tetas por encima del vestido, mientras ella seguía acariciando mi coño y besándonos con total deseo. Le bajé la parte superior del vestido y el sujetador y empecé a comerle los pezones mientras las dos gemíamos de placer...y Ra con la polla más grande y dura que en toda su vida y, por primera, vez, conseguía que lo estuviera pasando fatal, lo cual aún me excitaba más y me hacía comerle los pezones con más ansia. Me subí a cuatro patas sobre el asiento (las lunas del coche están totalmente tintadas) y empecé a bajar sobre sus muslos, los separé lentamente y comencé a lamerle el coño por encima del tanga, mientras ella me metía dos dedos por el coño.

Ra por fin consiguió encontrar un sitio apartado donde dejar el coche. Echó los asientos del conductor y copiloto hacia adelante para tener más sitio y pasó a la parte de atrás. Le hicimos un hueco, mientras nos besábamos con total cara de salidas y le mirábamos para provocar más su erección. En cuanto se quitó los pantalones y vi su gran polla erecta por encima de sus calzoncillos, me lancé a comérsela. Primero saqué un poco la punta del capullo, mientras lo lamía como una perra y después saqué todo su gran rabo para comerla con total deseo. Mientras, el besaba y pellizcaba los pezones de nuestra acompañante y le hacía un dedo. Cómo me ponía oir los gemidos de los tres!!! Entonces Ra le dijo que ella también pasara a comerle la polla, quería ver como dos perras le comía su gran rabo. Yo estaba en el suelo del coche comiéndosela y ella a cuatro patas sobre el asiento, las dos lamiéndosela y peleándonos con las lenguas por llevarnos el trofeo. Nos turnamos para metérnosla hasta el fondo, mientras Ra nos decía que nos iba a pagar como a dos putas por el buen trabajo que le estábamos haciendo. A las dos nos ponía que nos comparase con dos buenas putas.

Ra levantó mi cabeza con su mano y me la acercó a su cara y mientras nos comíamos las lenguas me dijo casi en un susurro: Quiero que le empieces a comer las tetas y bajes hasta que lleges a comerle el coño, vas a hacer lo que tu amo te ordena?? Apenas le pude decir que sí, porque no paraba de gemir de placer, estaba totalmente extasiada, así que según ella estaba a cuatro patas comiéndole la polla a mi amo, yo me puse casi debajo y mientras le comía un pezón le pellizcaba el otro. Poco a poco empecé a bajar lamiéndole todo el cuerpo y, como no tenía espacio, abrí la puerta del coche (estábamos en pleno campo) y puse mi cabeza debajo de su clítoris y empezé a comérselo, esto provocó que ella comiera con más ímpetu el rabo de mi amo y que éste, a su vez, empezara a follarle la boca.

Acto seguido, nos dijo que quería que hiciéramos un 69, yo encima de ella para que él me pudiera follar el coño y después, cuando lo tuviera bien abierto, follarme el culo. Como no tenías espacio en el coche Ra sacó una manta que llevaba en el maletero y la extendió en el suelo. Adoptamos la postura del 69 y empezó a follarme el coño, pero mi culo estaba pidiendo a gritos que me metiera todo su rabo dentro y me empezará a embestir. Él lo notó y se agachó hacia mí y me dijo: Perra quieres que te folle el culo, eh? Quieres que tu amo te follé el culo?? Me levantó la cabeza con las dos manos, con fuerza e hizo que le mirara: Pídemelo, quiero que me lo supliques zorra!! Y me escupió y lo limpió a lenguetazos. Yo seguía sin poder hablar por el estado de placer en el que me encontraba porque, a parte de lo de Ra, que bien me comía el coño esa zorra. Saqué fuerza y le supliqué que me follara el culo, se lo pedí por favor, casi de lo grité...me empujo la cabeza hacia el coño de la otra y empezó a embestirme por detras, ordenándome que no me corriera, que ni se me ocurriera.

Así estuvimos un rato y como veía que no iba aguantar mucho más, me la sacó, me apartó y tal y como estaba tumbada Elena, boca arriba, empezó a follarle el coño a lo bestia, mientras él me miraba fíjamente, poniéndome aún más cachonda el ver como se follaba a otra. Me acercó hacia él y mientras daba fuertes embestidas, con una mano pellizaba los pezones de la otra y los apretaba, mientras me decía: Ves zorra como me estoy follando a otra!!, lo ves?? Eso te gusta, eh? y me metía la lengua hasta dentro. Elena no paraba de gritar de placer y pedía que la follara más fuerte. Le dio la vuelta y empezó a follarle el culo, ella empezó a gritar de dolor, pero a Ra eso le puso más cachondo y me ordenó que me dejara comer el coño por ella mientras la follaba en esa posición. Así lo hice, nos mírabamos fíjamente y yo retorcía mi cuerpo de placer, no podía dejar de convulsionrame, estaba más mojada que en toda mi vida. Veía como él la agarraba del pelo y tiraba fuertementemente de ella hacia atrás mientras la agarraba por el cuello, después le empujaba la cabeza hacia mi coño, prácticamente hundiéndolo dentro de él, para que me lo siguiera comiendo. En la soledad del campo y de la noche solo se oían nuestros gemidos, mi flujo removiendóse con la lengua de aquella puta y las embestidas de Ra contra su culo.

Mi amo nos cogió a las dos fuertemente del brazo y nos llevó hacia el coche. Volvimos al asiento de atrás e hizo que Elena se sentara encima de él, para seguir follándose el culo, mientras que yo, como pude, me puse de cuclillas para que él pudiera meterme tres dedos dentro y follarme así. Mientras besaba a una y a otra nos dijo: Putas, quiero un servicio completo, quiero que os corráis las dos a la vez, me habéis entendido?? Las dos empezamos a decir: sí, sí, sí !!! Entonces nuestros gemidos empezaron a hacerse cada vez más seguidos e intensos, los tres nos besábamos con absoluto placer, mientras yo seguía arriba y abajo sobre sus dedos absolutamente empapados de mi y Elena hacía el mismo movimiento sobre su rabo. Cada vez gritábamos más y más hasta que las dos empezamos a agitarnos y a gritar como dos locas de absoluto placer, mientras mirábamos a Ra y el nos miraba complacido. El oirnos gritar la una a la otra de esa forma aumentó aún más nuestro orgasmo y nos ella y yo nos besamos nuevamente.

Por último Ra apartó a Elena de encima diciéndole: Quítate puta, tu has acabado ya, ahora quiero que mi zorra se coma toda mi leche. Me tiró del pelo hacia él y pegando su frente a la mía con fuerza me dijo: es eso lo que quieres no? A eso has venido esta noche, eh puta? A por mi leche, pues quiero que te la comas toda. Empezé a follarme la boca y notaba como sus venas latían por todo su rabo, le empezé a pedir mi semen, lo quería todo y el gruía de placer hasta que por fin salió, Puse toda mi lengua y rebañé absolutamente todo, sin dejar una gota. Lo mantuve en mi boca y atraje hacia a mí a esa zorra para pasarnos el semen de una lengua a otra mientra mi amo nos miraba y gemíamos suavemente, porque sabía que eso era una de las cosas que más le iba a gustar...y me lo agradeció diciendo: Así me gusta, zorra!! Te has portado muy bien con tu amo, estoy muy contento.

Y aquí acaba la historia...aunque esta vez he de decir que esto es una fantasía que tenemos Ra y yo. No os lo he querido confesar antes para que la historia no perdiera interés y conseguir poneros a cien...de todas formas si hay alguna que le interese hacer realidad nuestra fantasía, solo tiene que contactar conmigo.

Ra, ya me contarás si te ha gustado. Muack!