Mi primer trío
Mi primer trío, con mi novio y un antiguo "amigo"
Tanto tiempo pensándolo, planeándolo, que ahora que me veo aquí no sé qué hacer, ni cómo reaccionar, ni qué va a pasar… Ni en mis mejores sueños hubiera pensado que se cumpliría mi fantasía: un trío, pero no un trío cualquiera, un trío con el que es el hombre de mi vida, que dentro de unos meses se convertirá en mi marido, y con él, un viejo “amigo” que abrió mi caja de Pandora, y me descubrió lo placentero que es el sexo, el morbo y lo prohibido.
Todo empezó unos meses antes, hacía años que no sabía nada de él, de Iván, sabía que estaba casado, y que vivía en Madrid, nos habíamos encontrado por el facebook, pero nunca habíamos tenido contacto, siempre por miedo a meterle en líos en su matrimonio. Pero, casualidades de la vida, me enteré de que se había separado, así que volvimos a tener contacto.
Lo que en un primer momento fueron conversaciones triviales sobre cómo nos había ido en este tiempo, se convirtieron en noches hablando de todo, del pasado, del presente, del futuro, de sexo, de cómo habíamos disfrutado en el pasado, de todo lo que me había enseñado… Hasta que una noche tuvimos “cibersexo”, no lo puedo resistir y él lo sabe, sabe que con esa mirada pícara y su sonrisa, caería… Y así, como en el pasado, me corrí delante de él, con el morbo de saber que mi novio dormía en la habitación de al lado y yo estaba “follando” virtualmente con Iván. Esta situación se repitió alguna vez más, porque él sabía y lo sabe, que no me puedo resistir a sus insinuaciones, que cada vez que recuerdo cómo me comía el coño o me follaba, me pongo cachonda como una perra.
En nuestras conversaciones hablábamos de todo, de nuestras relaciones tanto de las mías con mi pareja como de las suyas con sus rolletes ocasionales, de nuestras fantasías… de todo, no sé porqué, pero es una de las pocas personas con la que tengo la confianza absoluta para contarle todo, y no solo en lo que a sexo se refiere.
Después de muchas charlas con él, y con mi novio, Jose, un buen día salió el tema de los trios, y Jose, que siempre había sido reacio, me dijo que estaría encantado de hacerlo, pero que no podría ser con cualquiera, que tendría que ser con alguien con quien hubiera un trato especial, que fuera “buena persona”. No me lo tuvo que decir dos veces, le propuse a Iván. Jose sabía que nos habíamos vuelto a “encontrar” después de muchos años, y que hablábamos bastante, así que me propuso que se lo comentara a Iván, a ver qué pensaba. Me dijo que fuera sutil y que solo se las tirara, jeje. Al momento, estaba chateando con Iván y preguntándole directamente si quería ser la tercera parte del trio (la sutileza entre nosotros no se estila). Me respondió que sí, y mi coño se encharcó solo de pensarlo.
Se agregaron al facebook, y desde entonces se dedicaron a charlar ambos sobre cómo sería el encuentro y demás detalles… Cada vez lo veía más cerca…
Pero no todo es tan fácil y, por circunstancias de la vida, el tema quedó en el olvido, o mejor dicho, en espera.
Y ahora, después de meses de no hablar del tema, volvió a surgir con más fuerza entre Iván y yo, y en consecuencia, entre Jose y yo. Y a falta de dos meses de mi boda, con todo el estrés y los preparativos que ello conlleva, me vi buscando hotel en Madrid, para pasar un fin de semana con Iván y con Jose, para cumplir nuestra fantasía, para dar rienda suelta a nuestros instintos más básicos…
Y aquí estoy, en medio de los dos, presentándolos formalmente, disimulando mi nerviosismo, pensando qué voy a hacer ahora, bloqueada por no saber cómo reaccionar y hasta con miedo a no saber qué hacer… Yo, que se supone que lo tenía todo controlado, no sé cómo actuar…
Después de pasar el día por Madrid, de tomar unas cañas, de calentarnos cenando y de tomar una copa, donde ya sin inhibiciones me besaba abiertamente con los dos, calentándolos y poniéndome a mí misma a mil, aquí estamos, en su casa, en la de Iván, con ambos desnudándome y tocándome por todos los lados, y yo, como puedo, desnudándolos a ellos con la sola intención de, por primera vez, tener dos pollas para mí…
Y, como en las películas porno(menos mal que vi alguna para saber cómo empezar, jeje), me siento al borde de la cama y comienzo a chupar la polla de uno mientras con la mano, acaricio la del otro, voy cambiando de una a otra, mientras me soban las tetas, me pellizcan los pezones… Iván me empuja hacia atrás, quedando mis piernas abiertas, y mete su cabeza entre ellas, lamiéndome el coño y metiéndome dos dedos, mientras me retuerzo cuando pasa su lengua por mi clítoris, Jose mientras se dedica a follarme la boca y estrujarme los pezones como sabe que me gusta cuando estoy a punto de correrme, y así tengo mi primer orgasmo de la noche, estoy exhausta, pero quiero más, mucho más… Me ponen a cuatro patas, Jose se pone detrás de mi e Iván su polla apuntando a mi boca, me la mete y agarra mi cabeza, y Jose me la mete en el coño de una sola vez, no podía gritar, pero casi me corro otra vez… Mientras me están follando, uno la boca, el otro el coño, me corro varias veces, perdiendo la noción de lo que me está pasando, y cuando me doy cuenta, Jose tiene dos dedos metidos dentro de mi culo, pero no aguantan más e Iván se corre en mi boca, mientras Jose me llena el coño de leche. Sé que necesitamos tomar aire, no solo ellos, yo también, y nos quedamos los tres tirados en la cama, pero también sabemos, o saben, que lo que más me gusta de la idea del trío es la doble penetración, llevo tanto tiempo queriendo sentir dos pollas dentro de mí….
Les dejé descansar lo justo, y me puse a cuatro patas en medio de ellos para poder chupársela a ambos y que se pusieran “ a tono”, y como no todo es como en las películas porno, les di un lubricante y el consolador que llevaba en el bolso, no hizo falta decirles más, sabían lo que quería, me fueron dilatando el culito con los dedos y el consolador, mientras me metían dos dedos en el coño y me acariciaban el clítoris, haciéndome llegar más de una vez al climax total, y cuando comprobaron que ya estaba abierto, Jose se tumbó en la cama, yo me puse encima de él, e Iván me la metió por el culo… Solo con sentirlas dentro me corrí, y cuando ambos se vaciaron dentro de mí, perdí hasta la noción de donde estaba….