Mi primer gran orgasmo fue con Johana

se volteó, acaricié su cadera y su cintura y después se agachó... era la imagen más hermosa que había visto en mi vida, un culo redondo, nalgas preciosa, una cintura breve.

Esta historia es completamente real, me sucedió en Guadalajara, México, (a donde llegué a estudiar) cuando tenía 21 años y desde entonces mi vida no ha sido la misma. Hoy tengo 26, nadie de los que me conocen saben de mis gustos y siempre he sentido una gran necesidad de platicar esto, por eso es que me decidí escribir. No hablo tanto de sexo explícito pero todo es cierto (tal vez omito algunos datos)y es una experiencia que nunca olvidaré.

Soy hombre, y siempre me han gustado las chicas, y de hecho salía con amigas de vez en cuando pero por diferentes circunstancias no me sentía muy bien. Nunca había tenido una pareja formal, es decir no tenía suerte con las chicas y mis experiencias sexuales eran muy pocas, las cuales no las disfrutaba mucho, no se... tal vez la tensión, falta de química, el caso es que sexualmente era una persona insatisfecha.

Como vivía solo, la única manera de satisfacerme era a través de la masturbación, pero al mismo tiempo me ponía a pensar en muchas cosas que me excitaban. Cierto día pasé por la noche por una calle muy transitada en donde se ponen travestis a dar servicios sexuales, los vi y pude contemplar varios monumentos, en toda la extensión de la palabra. Sabía que no eran mujeres, pero me gustaron. Mis sesiones de masturbación ahora incluían a travestis.

A partir de allí el estar con una tv se convirtió en un deseo inmenso, algo en lo que pensaba todo el día. Tuve la oportunidad de conocer a varios porque trabajé en un bar donde había show travesti pero no pasó nada, a la hora de la verdad me daba miedo.

Como era tímido y nadie sabía de mis deseos, consideré que la única forma de contactar a una tv era por medio de los anuncios. Me instalé en un motel y llamé a una agencia de modelos que también tenía tvs. Le dije que buscaba a una tv con bonito cuerpo, guapa y buena onda, me dijo que me mandaría a Johana; cuando colgué me puse muy nervioso, con ganas de cancelar el servicio sobre todo porque me imaginaba que no me iba a gustar.

De rato sonó el timbre del teléfono y la operadora me dijo que si esperaba a alguien, a lo cual contesté que sí, estaba entre excitado y nervioso, pero con muchas ganas de conocer a la visita. A los dos minutos tocaron la puerta, era Johana, una chica muy guapa, me saludó y su voz me pareció muy sensual, muy femenina, tenía también 21, después supe que sólo le llevaba 20 días. La dejé pasar y pude contemplar algo completamente nuevo y gratificante para mí: tenía el cabello negro hasta la mitad de la espalda, tez blanca, con poco maquillaje pero muy guapa, unos labios que se veían muy ricos y unos ojos grandes,0 negros; medía 1.72 aproximadamente, traía una blusa ajustada blanca, y un pantalón negro un poco ajustado también, se veía delgada pero con una excelente figura.

No podía creer que eso fuera posible, me excité demasiado, tenía ante mí a una verdadera modelo. Comenzamos a platicar y ella parecía algo tímida, aunque buena onda; yo estaba emocionado pero ella no lo parecía estar, normal pensé yo. Nos sentamos en la orilla de la cama a platicar, le conté lo hermosa que era, después le pasé la mano derecha por la cintura y la izquierda sobre su pierna, ella puso su mano izquierda sobre mi hombro y nos abrazamos. Sentí una atracción inmensa.

Después ella misma se retiró y comenzó a desvestirse, me dijo que yo también lo hiciera, me imagino que puse una cara de estúpido para que me lo dijera. Después quedamos sólo con ropa intima, ella con una tanga chiquita, blanca y brasiere. Si desde un principio sentí que era lo máximo imagínense cuando la vi así... eso era un monumento, nos subimos a la cama, nos acostamos de frente y nos empezamos a acariciar, y todo lo que tocaba me gustaba. Tenía una piel suave y muy agradable, unas piernas muy bien torneadas y bonitas, largas, unas nalgas muy ricas , grandes, duras. Mientras la acariciaba ella también lo hacía pero con menos intensidad.

Después nos hincamos, nos pusimos de frente para poder acariciarnos mejor, pude tocar sus ricas nalgas y recorrer sus espalda con mis manos, acariciar su cabello, besé su cuello y nos dimos un pequeño beso.

Después sacó un condón y me lo puso, yo aunque me sentía muy bien con esta experiencia, en el fondo no quería llegar a la penetración, nunca lo había hecho y tal vez en el fondo no me gustaba la idea, sólo quería un agasaje total y que me hiciera el sexo oral. Como no hablábamos, yo supuse que lo que no habría penetración, sólo sexo oral. Me mamó un poco la verga, pero casi inmediatamente se volvió a hincar para quedar frente a mí... se volteó, acaricié su cadera y su cintura y después se agachó... era la imagen más hermosa que había visto en mi vida, un culo redondo, nalgas preciosas, una cintura breve, toda depilada... de pronto se acercó hacia atrás hasta que quedó mi pene frente a su ano, todas mis dudas e ideas acerca de que no pensaba penetrar a una tv se borraron en un instante, acerqué mi pene, pensé que no entraría tan fácil...la tomé de la cadera y la comencé a meter...era la sensación más placentera que había experimentado, esto era nuevo para mí, sentí en el pene algo así como si me la estuvieran mamando, pero eran los abrazos apretaditos de su ano, la metía y la sacaba y no podía creer que se sintiera tan rico, era tanta la excitación que rápidamente sentía que me venía, tuve que la sacarla con la esperanza de aguantar más.

Me preguntó que qué tenía y le dije la verdad, que estaba tan hermosa y tan rica que sentía que muy rápido me venía. Descansé un minuto supuestamente en lo que me calmaba, sólo le acariciaba la cadera y la volví a meter ... pero sólo aguanté talvez dos minutos más y experimente por fin lo que nunca. Un orgasmo, algo intenso, algo que nunca había sentido.

Hasta ahora los orgasmos que había sentido habían sido de alguna forma forzados, no los disfruté, pero esta vez fue producto de un placer inmenso al penetrarla, indescriptible, por fin sentía lo que era un verdadero orgasmo y había sido con una tv.

Después nos volvimos a abrazar, nos bañamos, aparte cada quien, y me gustó aún más ese cuerpo tan hermoso. Platicamos un rato, nos volvimos a acariciar un rato y me dio su teléfono para que le hablara cuando quisiera, parecía que le caía bien pero me lo dio para que para la siguiente vez el trato fuera directo.

Después le volví a hablar y comenzó una relación muy bonita, de amistad, de atracción sexual mutua, en ocasiones ella me marcaba porque tenía ganas de verme, la mayoría de las veces era yo el que hablaba, pero ella siempre estaba dispuesta, muchas veces se vestía como a mi me gustaba, con minifalda, lucía espectacular, comenzamos una relación de amantes que duró un año y medio, a veces pasaba a su casa y nos íbamos al hotel, o ella llegaba a mi casa. Talvez las experiencias posteriores con Johana las platique en otra ocasión.

Aunque ya no la veo, perdí contacto con ella y ya vivo en otra ciudad, nunca olvidaré a Johana, la persona con la que experimenté la pasión y la satisfacción sexual al límite, una persona que siempre me comprendió, me respetó, la persona me trató como nadie me ha tratado.

A partir de allí no han dejado de gustarme las tvs, he tenido otras experiencias no tan intensas ni duraderas y sueño con tener como pareja estable a una linda tv.

Johana: donde quiera que te encuentres gracias por todo, nunca te voy a olvidar porque contigo experimenté el máximo de los placeres, eres la primera persona con quien pasé una noche entera, contigo conocí la pasión al límite y supe lo que era la atracción y el respeto mutuo y profundo.