Mi prima se decide

Mi prima decide que yo sere suyo y quien soy yo para negarme.

No cabe duda, que la visitas a la familia traen cosas que nunca esperaste fueran realidad.

Por azares del destino a mi Mama se le ocurrió ser madrina de confirmación de una de sus sobrinas. Para complicar aun mas la cosa una semana antes de la celebración tenia que asistir a un retiro espiritual para lo cual hubimos de levantarnos a las 3 de la mañana para recorrer el camino que nos llevaría hasta la capital.

Ya cerca de las siete de la mañana Mari quien se iba a confirmar y la mas pequeña de dos hermanas recibió a mi Mama con mucha efusividad mientras mi tía y Karen la hermana mayor nos veían con ojos de sueño. Para una mejor imagen Mari de escasos 8 años es de un metro quince de altura y algo gordita, Karen es casi de mi altura 1.68, tiene unos senos como de una naranja madura, un traserito sino muy grande bien formado y una leve pero sensual pancita. Con unas piernas fuertes y una carita delicada que la hace ver como un angelito, un angelito que acababa de terminar la secundaria y estaba esperando entrar en la preparatoria.

Me ofrecieron un lugar donde dormir el cual acepte encantado y antes de irme mi Mama me dio un consejo algo raro "Recuerda que son familia"

Caí como piedra pues me moría de sueño, despertando por el ruido que oí en la habitación.

Era Karen que como buena prima me venia a despertar pero como traviesa que es me quería hacer cosquillas lanzándose a la cama con esa intención. Vestía unas mayas cortas estilo pescador muy pegadas a su piel de color negro y una camiseta floja que le llegaba hasta las piernas.

Peleábamos por hacernos cosquillas, yo por mi parte le agarraba los senos, su traserito y rozaba discretamente su entrepierna mientras ella cada vez mas descarada rozaba con una mano mi erección. En un momento quedamos cara a cara y no pude resistirme a besarla de forma suave y pasional.

-Estamos solos pero no tardan en llegar - me anuncio.

Se dio media vuelta, se sentó en mi estomago dándome la espalda, me desabrocho y bajo el pantalón, aparto mi bóxer descubriendo una erección naciente, se levanto un poco se bajo el mayon junto con su ropa interior y dándome al espalda ella sola se sentó incrustándose mi pene.

Me empezó a cabalgar mientras yo me arrime almohadas para quedar semisentado y poder acariciar por debajo de su camisa sus senos y acariciar su piel.

Fue muy pero muy rápido su orgasmo, fue ruidoso y muy abundante. Sin mas se levanto tomo un bote que tenia cerca y me unto el pene de gel, se recorrio un poco y ahora entraba mi pene en su ano.

Lo tenia muy lubricado, y calientito. – Me prepare para ti – y sin mas decirnos me empezó a cabalgar con ganas.

No aguante mucho y los dos alcanzamos un ruidoso orgasmo.

Se levanto, se arreglo la ropa y arreglo la mía.

Desayunamos como si nada hubiera pasado, y esperamos a mi tía y mi madre en el cuarto de la tele sentados en un sofá.

Besándonos me confeso que era una fantasía que quería realizar y como su madre la celaba mucho no quería perder la oportunidad.

La buena noticia es que en la comida están intentando convencer a mi madre que le permita estudiar en nuestro pueblo quedándose en nuestra casa. A que mi prima.