Mi prima Rebeca

El fin de semana que desperto la pasion por mi prima Rebeca

Aunque mi familia es de un pueblo pequeño de Aragón. Yo vivo en Madrid junto a mis padres y mi hermano desde que era pequeño por motivos laborales.

Un día estando en la cena mi padre nos informo de que mi prima Rebeca iba a venir a vivir con nosotros durante una temporada, ya que iba a realizar un master post-carrera. Nosotros vivimos en un piso bastante grande de 4 habitaciones. Una para mis padres, otra que ocupa mi hermano, otra que es la mía y por ultimo una llena de chismes que tuvimos que reorganizar en el trastero para dejarla habitable para ella.

Cuando vino a vivir en principio todo fue lo normal, mis padres a su trabajo, mi hermano a su carrera universitaria, mi prima a su master y yo a trabajar. Cada uno llevaba su ritmo y de domingo a jueves solo nos juntábamos a cenar. Los viernes mi prima se marchaba al pueblo y volvía los domingos por la tarde. Mientras que yo salía de fiesta con mis amigos.

Pero un fin de semana de finales de marzo, mis padres y mi hermano se marcharon a conocer Sevilla aprovechando que el lunes era festivo. Mientras que mi prima decidió quedarse en casa para terminar los trabajos pendientes. ¿casualidad?

El caso es que el viernes por la tarde nos quedamos solos en casa mi prima y yo. Hablamos de que íbamos hacer el fin de semana su plan era dedicarlo al master; mientras que el mío era aburrirme como una ostra ya que por el puente estaba todo el mundo fuera. Todo el mundo menos yo que trabajaba el lunes L.

Quedamos que mientras ella trabajaba yo me encargaría de la cena y de buscar una película que ver después.

Y así fue, hice la cena y mientras cenamos los planes se trastocaron.

REBECA: la verdad es que estoy cansada ya de tanto master, necesito una copa.

YO: pues si te apetece podríamos salir un rato, aunque no creo que haya mucha gente.

R: vale, recogemos me arreglo y salimos.

Y: bien pues voy a hacer unas llamadas para ver que se mueve por ahí.

A las 23.00hrs ya estábamos listos para salir. YO con una camisa de cuadros, unos vaqueros y unas zapatillas. Y ella con una escotadísima camisa blanca por dentro de una falda negra de tubo, unos taconazos negros que la hacían igualarme en altura y una trenza morena larguísima sobre su hombro izquierdo. Estaba imponente, se le marcaban los pechos y el culo de una figura con curvas y voluptuosa. Me dejo con la boca abierta.

Salimos y la noche transcurrió entre risas, copas y bailecitos; y que bailecitos me pase la noche intentando disimular mi empalme mientras que ella se me restregaba a ritmo de reggaetón.

Sobre las 4 llegamos a casa y cada uno se fue a su cuarto, yo tenia ganas de ir a mi cuarto para cascarme una gran paja pensando en las tetas y el culo de mi prima, ya me había fijado antes de que estaba buena pero nunca pensé que me pondría la polla tan dura.  Me metí en la cama y me hice un gran pajote imaginando  que me follaba a Rebeca de todas las posturas, que sus tetas botaba y rebotaban en mi cara mientras me cabalgaba. La corrida fue brutal y entre la relajación y las copas no tarde en quedarme dormido.

A la mañana siguiente me desperté con una clara intención este fin de semana tenia que follarme ese culo que tanto tiempo había pasado desapercibido para mi.

Me puse el pantalón de pijama y salí al pasillo a ver como estaba el panorama. Fui a la cocina a prepararme un café y Rebeca no tarde en aparecer

R: buenos días primo, has madrugado

Y: si bueno, no se ni que hora es

R: las 10

Y: joder pues si, quieres café?

R: no gracias, ya llevo 2. Pero bueno voy a prepararme un cola cao y desayuno contigo

Me senté en la mesa a tomarme el café con unas magdalenas y encendí la radio, momento en el que sonaba una de las canciones de reggaetón que anoche bailamos hasta la saciedad y que hizo que los restregones de culo pusieran mi polla mas dura que el acero. Por su parte Rebeca se preparaba su cola cao de pie en la encimera de espaldas a mi, y la música hizo que empezara a mover el culo al ritmo de la música dejándome embobado bajo su hipnótico balanceo de su culo que trasparentaba el tanga negro bajo el blanco pantalón de pijama con muñequitos.

De repente Rebeca se giró y me pillo de lleno mirándola

R: eh! Que miras! Que su tu prima

Y: lo siento Rebe pero es que no he podido evitarlo –dije con una sonrisa picarona- lo mueves tan bien

R: ya me di cuenta anoche – mientras me guiñaba un ojo y se sentaba al lado. Haciendo que mi cara se pusiera roja como un tomate. Yo iba a ir a saco, lo que no esperaba es que ella estuviera tan predispuesta.

Y: anoche? No se porque lo dices – claro que lo sabia, pero me hice el tonto-

R: joder primo, por tu… vamos porque cada  vez que me acercaba a ti la tenias mas dura. Porque era por mi no? O era por otra? – tomo un trago a su tazón, mientras me miraba esperando respuesta

Y: eh… no era por ti – dije medio cortado- es que entre los bailes y la ropita que me llevabas ayer… para no.  Tenias ganas de fiesta eh? – dije intentando contraatacar-

R: pues si que tenia.  Aunque me quede a medias – volvió a beber.

Esto va ser mas sencillo de lo que esperaba, no pensaba que Rebeca iba a estar tan predispuesta.- pensaba mientras apuraba el café.

Y: a medias? Como que a medias?

R: pues eso a medias, tu acabaste la fiesta solito pero yo me quede con ganas de mas – apuró su cola cao y se marchó dejándome con cara de tonto y la polla a reventar.

Joder me había escuchado ayer mientras me pajeaba, quizás el alcohol y las ganas que tenia hicieron que me desinhibiera mas de la cuenta. Y que ahora que…

Yo que iba a ir a por ella me he visto sorprendido por su ataque.

Continuará...