Mi prima Paula. (Parte $)

Ésta es la historia de cómo me tuve que ir a vivir con mis tíos y mi prima a Madrid, y de cómo desde el primer momento empecé a desear algo que, se suponía, no podía tener...

...

Rebuscó en el armario hasta dar con el tanga.

-Joder, sí que te corriste bien primito. Me sorprende que aún te quedara para llenar esos cleenex jaja mucho tienes que echar! Ala venga, prepárate que en un rato nos marchamos.

Y se fue contoneando el culo, hipnotizándome con ese monumento. Yo me levanté y traté de pensar qué demonios estaba ocurriendo. Mi prima parecía tomarse con mucha naturalidad todo aquello, y la verdad que se lo agradecía muchísimo. El problema era que no podía sacarla de mi cabeza. ¿Qué me estaba pasando?Nunca antes me había pasado algo así. ¿Y qué demonios era lo que íbamos a hacer esta noche? No me habían explicado absolutamente nada. Solo sabía que Allá donde fuéramos iban a estar Claudia y...Paula.


(Parte 4)

Me vestí con unos vaqueros y una camisa blanca. Hacía calor así que no iba a llevar chaqueta. Como acabé antes que mi prima, me senté en el salón a esperarla.

Cuando apareció...me dejó sin aliento. Llevaba una minifalda negra, que dejaba a la vista dos largas piernas morenas que terminaban en unos zapatos con un tacón de por lo menos 10 cm. Encima, llevaba una especie de camisa, blanca como la mía, metida por dentro de la falda. Los dos últimos botones estaban desabrochados, dejando una maravillosa vista de su canalizo y parte de su sujetador, blanco también.

-Parece que te gusta como voy jaja

Salí del trance.

-Sí, bueno, estás bastante guapa.

-¿Solo bastante? Vaya...que decepción...-Me puso carita triste. Dios, casi me muero de amor.

-No tonta, estás preciosa, hasta la luna tendrá envidia de ti esta noche.

Se sonrojó un poco.

-Qué cosas me dices..jeje

Y sin más nos marchamos.

-Bueno venga, te cuento ya qué vamos a hacer jaja Los padres de Claudia no están este finde, así que tenemos su casa para nosotras. Van a venir algunos amigos más y vamos a hacer una pequeña fiesta.

Llegamos, al parecer, los primeros. Solamente estaba Clau en la casa.

-Hola!!- nos saudó-. Me alegro de que hayas venido, pensé que iba a tener que ir a sacarte a rastras de tú casa.

-Bueno, no me dejasteis muchas más opciones la verdad.

Clau puso música y mi prima y yo nos sentamos en el salón. Pronto llegaron las demás personas y me los presentaron a todos. Por un lado estaba una pareja, se llamaban Ana y Alberto. Ana era una chica ni guapa ni fea, un poco regordeta y parecía bastante agradable. Alberto no era ni más ni menos que ella. Se podría decir que, físicamente, hacía una pareja perfecta.

Luego estaba Dani, un chico un año mayor que yo, rubio y de piel bastante morena. Tenía un look muy surfero. Y le vi dirigir un par de miradas de deseo a Paula que no me gustaron nada.

Y por último Cristina. Era guapa, con gafas, pelo moreno rizado y una bonita sonrisa. Y era algo más alta que yo, aunque no sé si se podría deber solamente a los tacones.

Una vez hechas las presentaciones nos sentamos en los sofás. La parejita junta en el pequeño. Cris sola en una butaca, y mi prima, Clau, Dani y yo sentados en el otro, yo justo en el medio de mi prima y Clau, y Dani al otro lado de Paula.

Pronto empezamos a beber y yo fui perdiendo, supongo que gracias al alcohol, parte de mi timidez. Las risas y los piques fueron subiendo de volumen a medida que el alcohol nos soltaba las lenguas. La parejita feliz pronto empezó un beso que no parecía tener fin, ya que cada vez que los miraba estaban besándose.

Paula y Dani se pusieron a bailar, y Claudia, a pesar de todo el espacio libre que había ahora en el sofá, parecía estar más pegada aún a mi.

-Parece mentira que Paula te haya tenido guardado todos estos años.

-Bueno, ni si quiera nos conocíamos...

-Pero si sois primos, ¿cómo es eso posible?

-Pues...no se, mis padres y los suyos no se llevaban muy bien y...bueno, la verdad que no me sé la historia muy bien jeje

-No te preocupes cielo, venga, bebe, que la noche es joven!!

La verdad es que me lo estaba pasando bastante bien. Llevaríamos ya tres horas haciendo el payaso, más borrachos que otra cosa, cuando vi que Dani y Paula se iban corriendo de la mano por el pasillo.

-Mira, una que hoy folla- me dijo entre risas Claudia.

No puedo explicar la sensación que me recorrió el cuerpo en ese momento. Supongo que fue una mezcla de celos y cabreo. Imágenes de mi sueño volvieron de repente a mi cabeza. Pude ver a mi prima, desnuda en la ducha, pero en vez de conmigo la vi con Dani, y me cabree muchísimo.

-Tranquilo, Dani la tratará bien, no te preocupes por eso, hace mucho que tontean, son casi novios jaja

Ese comentario, destinado a ayudarme pensando que me preocupaba "como buen primo" por su prima, lo que consiguió fue llevarme a una tristeza aún mayor. ¿Qué demonios me pasaba? Si hacía solo un par de días que conocía a mi prima. Intenté sonreír consciente de lo absurdo de mi situación. Nadie se enamora así de su prima. Entonces una cosa que alguien me dijo hace tiempo:"bastan 4 segundos para enamorarte de alguien. En 4 segundos se sabe todo lo necesario. Lo demás son solo apuntes a la personalidad de esa persona. Porque en 4 segundos, el tiempo de una sonrisa, de una mirada, la mujer de tú vida te robara el corazón. Y no necesita ni un segundo más, porque ya serás suyo."

-Venga hombre, no te pongas así. Si hasta pareces celoso jajaja Será el alcohol! Además, la que debería estar triste soy yo...que Paula al menos va a echar un polvo, en cambio yo...

Volví al mundo real. Claudia me estaba tirando los tejos descaradamente. No sé que me pasó. No sé si fue el alcohol, o la rabia y los celos, desconocidos para mi hasta entonces, lo que me llevó a hacer todo lo que pasó esa noche. He de decir que tengo muchas lagunas, apuntadas con destellos de lucidez. La verdad,que la fiesta cumplió su objetivo.

Miré a Claudia. Era muy guapa. No era un 10 como mi prima, pero aún así estaba cerca del 9. La sonreí y...ella se lanzó. De pronto tenía sus labios en los míos. Notaba su lengua dentro de mi boca. Con un gran esfuerzo la aparté de mi un poco, deteniendo ese beso.

Me miró a los ojos, con una sonrisa en la boca. En ese momento pensé en Paula, me la imaginé en una de las habitaciones follando con Dani y...no necesité pensar más. Agarré a Claudia de la nuca y la empujé suavemente contra mis labios. Cuando por fin se juntaron la besé suavemente, despacio, pero ella rápidamente tomó el control y hundió su lengua en mi boca. Fue un beso bastante apasionado, con risas por parte de los aún presentes de fondo, y sabor a tequila en la boca. Cuando nos separamos no dijimos nada. Claudia se levantó, me cogió de la mano y me guió tras ella hasta su habitación.

Me tumbó en la cama y se tiró encima de mi.

-Tranquilo, seré buena.

Yo ya no pensaba en nada más que en Claudia. No soy de piedra, y esa chica estaba ralamente buena. Mi camiseta desapareció, al igual que la suya, dejando a la vista un par de pechos, realzados por el sujetador y..realmente grandes. Nos besamos sin descanso. De vez en cuando mordía su labio, a lo que ella respondía con un leve gemido. Se apartó de mi y, sin quitarme el ojo de encima, se desnudó por completo.

Me había equivocado con sus tetas. No las realzaba el sujetador, eran perfectas. Y muy grandes, coronadas por unos pezones rosados y ya duros. Su coñito estaba completamente depilado, sin un solo pelo.

Yo hice lo propio y me quité el pantalón.

-Deja, el boxer ya te lo quito yo-me dijo con cara de viciosa.

Se puso de nuevo sobre mi y empezó a bajar por mi pecho, sin pararse hasta llegar a mi ropa interior. Mi polla ya estaba dura dentro, así que se marcaba perfectamente en el bóxer. Empezó a manosearlo por encima, mientras que con los dientes agarró el borde del elástico. Empezó a tirar hacia abajo hasta que mi polla saltó como un resorte, momento en el que me los quitó de un tirón, la agarró con una mano y la hundió hasta el fondo en su garganta.

La chupaba bastante bien, alternando el tragársela hasta el fondo con una rápida paja mientras lamía mi glande. Pronto pareció cansarse, se subió sobre mi y, apuntando mi polla a su ya bien lubricado coño, se dejó caer, ensartándose de un solo golpe. Los dos gemimos, y las paredes de la habitación parecieron hacernos eco.

Clau comenzó a subir y bajar a buen ritmo. Vaya zorra estaba hecha. No me daba ni un solo respiro. Pero de pronto un nuevo gemido, como un eco, me hizo desconcentrarme un segundo. Yo no había sido, y estaba casi seguro de que Claudia tampoco.

-MMMMMM..parece que a tú prima también le está gustando lo suyo ahh...- gimió Claudia mientras me cabalgaba.

Joder, claro, era eso. Los gemidos venían de la habitación de al lado, de la pared que tenía justo encima de mi cabeza. Pues se iba a enterar.

Agarré a Claudia y la tumbé en la cama. Le dije que se pusiera a cuatro patas, mirando hacia la pared. Y así lo hizo, agachando su cuerpo sobre la cama ofreciéndome una vista de escándalo de su culo y de su coño. No me retrasé ni un segundo más y se la meti de golpe, haciéndola gritar de placer.

-AAHHHHHH MMMMmmmm cabrón, no pares....

Podía escuchar un rítmico "AH AH AH AAH.." proveniente de la habitación contigua. Joder, me estaba poniendo de muy mala hostia, así que aceleré mis embestidas,tratando de acallar sus gemidos con los de Claudia. Y pareció funcionar.

-Que rico AAHH DIOS...¡JODEEER! Que bien follas Alex, JODER! sigue, sigue, mmm ACELERA QUE ME CORRO JODER mmmmm...

Y cumplí sus deseo mientras la agarraba de las caderas, haciendo fuerza con mis brazos para conseguir acelerar al máximo. La noté contraerse de repente, y en los tres segundo que guardó silencio mientras le llegaba el orgasmo pude escuchar a mi prima estallar en el suyo: "aaaahhh...me corro, que riicooo mmmm......."

-DIOS ALEX, AAAH JODEEER MMMMMMMM-chilló Claudia.

Noté su coño empapando mi polla, apretándola en infinitas convulsiones, mientras el eco del orgasmo de mi prima seguía aún en mi cabeza.

Claudia se dejó caer rendida sobre la cama, con mi polla aún dentro. La dejé disfrutar de su orgasmo, metiendo y sacandola muy lentamente

-¿No te has corrido?-me pregunto en un susurro.

-No quería hacerlo dentro..no sabía si...ya sabes..

-Para la próxima no te preocupes, tomo la pildora. Ven aquí, ponte encima mío.

Me puse de rodillas a su lado, y ella me obligó a pasarle una rodilla por encima. Estaba prácticamente sentado sobre sus tetas, las cuales ella apretó en torno a mi polla.

-Venga cielo, fóllame las tetas.

Dios, menuda imagen. Comencé a follarme ese par de globos, mientras ella lamía mi glande cada vez que llegaba a su boca. Aumenté mi ritmo hasta que noté que me iba a correr. La avisé, y, sacando mi polla de sus tetas, me agarró por el culo y se hundió mi polla hasta la garganta. MMMMMMMHH... Esto pudo conmigo y comencé a descargar sin parar. Ella tragaba todo lo que podía, pero aún así hubo mucha leche que se derramó por su barbilla hasta caer en sus tetas.

Cuando notó que ya no echaba más, la lamió hasta dejarla bien limpita.

Me tumbé a su lado sobre la cama y  ella se abrazó a mi, poniendo la cabeza sobre mi pecho.

-No ha estado nada mal. Estas bien...armado jeje y sabes usarlo-me dijo.

-Tú tampoco has estado nada mal-correspondí.

-Esto hay que repetirlo, si quieres claro.

¿Qué se suponía que debía decir? ¿Que no? Soy tío, por el amor de Dios.

-Claro jeje cuando quieras.

Se rió.

-He de confesar que el oír a Paula al otro lado me ha calentado muchísimo.

Joder, es verdad, Paula. Con mi corrida me había olvidado de ella. Me entraron una especie de remordimientos y traté de sacarla de mi cabeza. Después de todo era mi prima, nunca habría nada entre nosotros. No era correcto.

Claudia me sacó de mis pensamientos con un beso, suave esta vez, en los labios.

-Será mejor que nos vistamos y salgamos, que tengo que atender los invitados jaja

Y así lo hicimos. Pillamos a Ana y a Alberto saliendo por la puerta dando tumbos y nos dijeron que Cristina hacía rato que se había marchado ya.

Claudia y yo nos sentamos juntos en el sofá escuchando música, mientras esperábamos a ver si mi prima y Dani salían de la habitación.

-Oye Alex, no quiero que pienses que hago esto cada fin de semana.

La miré y sonreí.

-¿Soy especial entonces? jajaja-dije en broma.

Ella se mantuvo seria.

-No sé que me pasó contigo la verdad, pero es que me pareciste taaaaan mono cuando nos presentó tú prima que...bueno jajaja que me entraron unas ganas locas de quitarte esa timidez de encima. Y creo que no se me dio nada mal....

-Estoy de acuerdo, se te dio de maravilla...

Los dos nos reímos y Claudia volvió a besarme.

-Mañana si quieres quedamos para tomar algo tú y yo solos, sin Paula, para conocernos de verdad un poquito más.

-Creo que ya nos hemos conocido a fondo hoy...jajaja

-jajaja no seas tonto, que hablo en serio!

-Vale sí, me parece bien. Te paso a buscar por la tarde a eso de las 5 y tomamos algo.

-Bueno, si quieres podemos tomar algo aquí. Mis padres no llegan hasta el lunes y la casa la tengo para mi solita.

-Tú lo que quieres es pervertirme otra vez...

-jajaja no bobo, tomar algo, en serio. Aunque lo que pase luego...jajaja

-Vale, me parece bien.

Se escuharon voces en el pasillo y aparecieron en el salón Paula y Dani. Paula tenía el pelo revuelto y la ropa un poco descolocada. Dani...Dani una sonrisa de oreja a oreja. Será hijo de puta, pensé.

-Oye Alex, creo que va siendo hora de ir para casa, que luego mis padres se preocupan.

-Vale, como veas.

Nos despedimos todos de todos y Paula y yo nos pusimos en marcha. Había un profundo silencio entre los dos, que Paula se encargó de romper.

-Lo que ha pasado hoy...quiero que entiendas que Dani y yo ya llevábamos mucho tonteando y...bueno, el alcohol y demás..ya sabes.

-No tienes que darme ninguna explicación.-Respondí un poco seco.

Silencio.

-Además...por lo que pude oír tú también te divertiste.-comentó Paula.

La verdad es que, por el tono de su voz, no sabía si le parecía bien o mal.

-Ah, ¿nos oíste?-me hice el loco

-Joder, como para no oír a Claudia. Parecía que la estabas matando jaja

Yo también me reí, soltando un poco de tensión en la carcajada.

-Uno hace lo que puede jajaja

-Que cabrón jajaja Así que ya no necesitarás más mis tangas me imagino, ¿no?

Casi me atraganto con mi propia saliva.

-Esto...no, supongo que no.-¿qué demonios quería que contestara?

Ya habíamos llegado a la puerta de casa.

-Una pena-dijo- No hagas ni un ruido que si se despiertan nos matan.

Y, sin más, entró en la casa y se metió en su habitación, dejándome a mi en la puerta y con cara de tonto.

Reaccioné y, con sigilo cerré la puerta de la casa y me encerré en mi habitación.

¿Una pena? ¿Qué había querido decir con aquello? Me metí en la cama, y traté de dormirme con aquella pregunta en la cabeza.

Habían sido dos días cargados de demasiadas emociones. No entendía lo que me estaba pasando con mi prima. Y Claudia...Claudia era maravillosa, pero ¿hacia dónde me llevaba ese camino?


Gracias a todos por los comentarios y las puntuaciones recibidas en mis anteriores relatos de esta serie. No duden en puntuar y comentar este, se agradece de verdad.

Espero que la serie les esté gustando, déjenme sus opiniones!

Un saludo a todos.