Mi prima, mi puta

Nunca pense que mi deseo se hiciera realidad, y si alguien tenía que ayudar a mi prima ese era yo, despues de todo para eso esta la familia.

Aun recuerdo aquel dia. Crei que iba a ser un dia mas de esos aburridos pero me equivocaba de principio a fin.

Todo comenzó cuando al levantarme mi madre insistió en que fuera a llevarle a mi prima que vivía no muy lejos de nosotros unas cosas. Yo no tenía muchas ganas pero al final accedí. Mas que nada porque mi prima de siempre me había atraído físicamente pero como sabía que nunca tendría nada con ella pues me aburría allí.

A se me olvidaba, yo soy un chico de 20 años, pelo castaño y corto, ojos color miel y con un cuerpo normal tirando a fuerte.

Bueno visto que tenía que llevarle eso a mi prima me cambie y por el camino me puse a pensar que no debí aceptar porque siempre que iba a su casa me aburría pero tardaba en irme por cumplir así que pasaba un largo rato allí de mala gana. Pero ese día parecía distinto. Al llegar a su casa llame al timbre y no contestaba nadie. Pero cuando estuve a punto de llamarla al móvil para ver si estaba cerca me abrió. Ella es una chica mas bien bajita, quizás 1,55, pelo rubio que le llega sobre los hombros, ojos así oscuros. Tenía entonces unos 24 años. Pero lo mejor era su cuerpo. Lo que no se le había dado en altura si que se le dio en físico, y vaya físico. A mi de siempre me habían vuelto loco esas tetas redondas y bien subidas que poseía, todo un lujo que estaba seguramente saboreando su marido, con el que llevaba un año casada, y por supuesto ese hermoso culo. ¡Dios que culo! Como lo deseaba.

Ese día ella llevaba una de esas prendas superiores sin mangas algo escotadas y ceñidas y debajo una falda corta roja ( esta ropa se debía a que era verano claro) y a mi me estaba volviendo loco ya desde el principio.

Ella me saludo nada mas verme:

¿hombre qué pasa? ¿cómo tu por aquí?,- dijo asombrada porque la verdad es que no nos veíamos mucho.

Nada aquí trayéndote esto, me ha mandado mi madre.- respondí enseñándole la bolsa donde llevaba las cosas que mi madre me dijo que llevara.

Entramos y nos sentamos en su salita donde ella empezó a hacerme preguntas de cómo me iba y todo eso y yo también se las hacía y entonces me pregunto por como me iba con las chicas y nada le dije que seguían sin atarme, y finalmente le pregunte que como le iba a ella con su marido. Y entonces me sorprendió al callarse durante un minuto y luego contestar:

Pues nada, no muy bien. Solemos discutir mucho últimamente.

Vaya no sabia eso- dije al no saber que mas decir.

Entonces sonrió levemente y me soltó: ya es que ni apenas lo hacemos.

Pero Gema ( que así se llamaba ella), ¿como me dices eso? Muy mal deben estar las cosas para que no quiera hacerlo contigo.

Ella sonrió y me preguntó: ¿como me dices eso?

Entonces claro yo también me reí pero no quería cortarme ya que posiblemente era la única vez que podría decir lo que sentía de verda.

Chica es la verdad, estas realmente buena y te esta desaprovechando.

Ella ya dejo de reir y empezor a soltar alguna lágrima, me acerqué a ella y la abracé y empecé a secarle las lágrimas cuando ella me beso en los labios. Yo por supuesto no iba a dejarlo ir y seguí el beso pero ella entonces aparto la cara y empezó a susurrar:

No esto no esta bien, somos primos.

Volví a coger su cara y la bese para que ella volviera a apartarla y repetirlo pero entonces a mi no se me ocurre otra cosa que decirle:

Vamos, se que somos primos. Y por eso nos queremos tanto, y ya que te quiero pienso que lo mejor es ayudarte y por lo que veo uno de tus mayores problemas es que estas sexualmente insatisfecha.

¡Dios no se como dije eso¡ ella me miro a los ojos.

La verdad es que si que nos queremos- empezó a decirme mientras yo notaba como su mano empezaba a acariciar el bulto que tenía en mi entrepierna debajo de unas bermudas que llevaba puesta aquel día. Y por supuesto ese tocamiento me lo puso a mil. Yo empecé a besarla y ella me saco la polla para empezar a masajearla de arriba abajo, fue genial pero eso podía ser mejor y así fue. Ella se agacho sin decir nada y empezó a chuparla al principio muy suave, dando leves mordiscos en la punta mientras me miraba apartándose el pelo de la cara y soltabas suspiritos. Y entonces empezó a chuparla salvajemente, tanto que estaba a punto de estallar al poco y a ella no parecía importarle aunque se lo dijera así que siguió y si a ella le daba igual yo no puse reparos en correrme en su boca, llenándola de leche, fue genial ver como se la tragaba y dejaba mi polla mas limpia que recien bañada. Entonces ella se acercó a mi oído y me susurro:

Te toca ayudarme, primito- dijo con el tono mas picaron que jamás e podido escuchar.

Empecé a subirle la faldita sin quitársela y a bajarle sus braguitas blancas que estaban húmedas y entonces vi su rajita rasurada. Fue genial verla pero mucho mejor fue meter mi lengua y empezar a disfrutarla a la vez que escuchaba como daba suspiros.

Si, asi…sigue primo, sigue, siiii

Fue genial si, ella estaba totalmente entregada a mi, a su primo al que tanto la había deseado y ahora no pensaba dejar escapar ese coño humedo por mi, que deseaba que se lo comiera y luego se lo follara. Todo resultó tan excitante para mi como para ella porque no tardo en correrse mientras le pasaba la lengua en circulos y metía mis dedos y jugaba con su rajita, teniendo, por supuesto que limpiarle igual que ella hizó por mi, después de todo somos primos y no podía dejarla ahí tirando sus jugos.

Entonces me acerqué a besarla y decirle lo mucho que llevaba deseando eso mientras le tocaba aquellas tetas que yo deseaba bien redonditas y que empecé a chupar tras quitarla la camiseta. Estaban riquísimas con sus pezones totalmente chupados por mi mientras ella me agarraba el culo después de quitarme las bermudas y empecé a besarle el cuello cuando ella me lo pidió:

Follame primo, hazlo ya, lo necesito, te necesito dentro

Y entonces:

Vamos, folla…. Aaaaaaahhhhh- y de la metí sin dejarla terminar esas palabras que tanto me exitaban de su boca. Y a partir de empezó un mete saca frenetico en el que ella no paraba de pedirme que me la follara, que le diera mas fuerte y chillaba y gemía por mis embestidas. Entonces paré un momento, apoye sus piernas sobre mis hombros, me ayude un poco de mis manos para abrir su coño y se la introduje fuertemente para escucharla estallar en un chillido de aceptación para luego seguir con el mete saca.

Siiii, siiiiiiiii, asi. Eres genial primito

¿te gusta e?,- decía yo mientras apretaba más.

Siiiiii…ss…ssiii, aaaahhhhh, me corro, me voy a correr!!!!

Y entonces los dos a la vez, nos corrimos llenándonos de flujos y sin importarnos que yo lo hiciera dentro de ella y sin condom. Y así seguimos unos minutos asta que nos relajamos y la saque para acostarme a su lado y escuchar algo que eso si que nunca me lo hubiera esperado:

O dios Carlos ( que así es como me llamo yo), a sido genial.

Si me a encantado.- dije yo sin saber lo que iba a escuchar.

Te quiero primo y tengo algo que pedirte- me dijo y me dejo pensando que iba a decirme que ser primos haria que no pasaramos de ese dia asi que no volveríamos a repetirlo.

¿Qué?- pregunté

me gustaría que aceptaras venir aquí cada vez que puedas y me hicieras tu puta. Quiero que me folles siempre. Sentir tu polla a sido genial.

Esas palabras me volvieron loco y empecé a besarla de nuevo y por supuesto eso llevo a lo demás otra vez… pero eso es ya otra historia, que gustosamente les contare, porque por supuesto acepté que fuera mi puta, después de todo no puedo dejar que mi hermosa prima sea puta de nadie de la calle, mejor que quede en familia.

Bueno espero que les haya gustado y acepto que me mandéis mensajes a cosechadel83@msn.com con algunos relatos vuestros si queréis y con comentarios