Mi Prima mi Martirio Capítulo 14

Fran idea un plan para seguir juntos con Claudio... No será fácil para el pardillo

Capítulo 14: El plan de Fer

Salimos del baño como siempre, primero Fer, luego Coté y finalmente yo, nos fuimos por separado a nuestras respectivas obligaciones, no las vi cuando salí, solo divisé a Coté en clases y no puedo agregar que la tarde continuó algo lenta… finalmente llegó el momento de regresar a casa, busqué a Fer en la cafetería donde usualmente me espera, no estaba, sabía que sus clases habían terminado y comencé a buscarla por los otros lugares comunes y no la encontraba por ninguna parte… algo preocupado la llamé a su móvil sin que ella me contestara, miré en el estacionamiento y vi el coche vacío, por lo que no me había dejado botado como en alguna otra oportunidad… seguí en su búsqueda hasta que Rorro me informó que la había visto por el sector del gimnasio principal de la facultad con Nora y Coté. Me extraño que después de lo ocurrido estuvieran juntas, por lo que algo alarmado concurrí al sector con el propósito de que no pasara nada loco o incluso grave.

El  gimnasio es gigante por lo que las busqué en los lugares comunes, pero no las encontré, lo que me hizo alarmarme, pues mi pérfida primita es de armas tomar y probablemente no le gustó que Coté se inmiscuyera extorsionándonos como lo hizo… reflexionando un poco, se me ocurrió que podían estar en las bodegas, pues era un lugar aislado que solo entraban los profesores o alumnos a buscar implementos que no estuviesen a mano, no es que se pudiese ingresar fácilmente pero era posible

La primera bodega estaba cerrada, pero en la segunda el candado no estaba, entré lo más silenciosamente posible, la bodega no estaba oscura pero solo estaba encendida una luz mortecina casi al final, la que iluminaba poco y nada, tal vez por que en ella no se guardaban elementos de uso común, en la medida que ingresaba a la bodega cuyo techo eran las graderías del gimnasio comencé a escuchar unos murmullos… presté atención a ellos y con alguna dificultad logré captar lo siguiente:

  • …. Entendiste putita, Claudito es solo nuestro…
  • Coté: Snifff, sniff… sí, no lo haré más…. Se los juro…
  • … Más que jurarlo no te acerques a él, ¿entendido?...

Sentí un fuerte palmazo o eso pensé, por lo que me acerqué un poco más y desde atrás de unos antiguos cajones de salto, pude ver como Fer y Nora tenían a Coté amarrada a un “potro de salto” con los jeans a la rodilla y cada una le daba con ira un palmazo en cada cachete del culo a mi ex novia… ya me parecía que Fer se había tomado muy relajadamente el tema de la culeada exigido Coté a cambio de su silencio… por el sonido de los palmazos ese portento de culo debía estar rojo, pese a que no se notaba a la distancia que mantenía con las chicas.

  • Coté: Sniff, sniff, por favor ya no más, les juro que no me acercaré a él a no ser que ustedes lo permitan, sniff.
  • Nora: Muy bien putita, danos acceso a tu móvil para borrar lo que gravaste
  • Coté: Sniff, sí, acérquenlo…

Fer se lo acercó para activar el reconocimiento facial y así acceder a las grabaciones que había tomado Coté, luego procedió a borrarlas, agregando:

  • ¿Las guardaste en algún otro lado?
  • Coté: Noo, se los juro, por favor no más…
  • Nora: Muy bien pedazo de puta, no lo vuelvas a tocar ¿¡entendido!?
  • Coté: Siii, entendido, ahora déjenme ir….
  • Fer: Dejémosla ahí… ¿te parece?, dijo dirigiéndose a Nora
  • Nora: ¿Pero si no se puede soltar?
  • Fer: Alguien la encontrará y la soltará, jajaja
  • Nora: No seas cruel, soltémosla…
  • Fer: Okey, pero no se lo merece….

La soltaron y dejaron ahí entre sollozos… para cuando pasaron por mi lado yo me oculté, no quería entrar en mayores problemas… luego salí silenciosamente y aguardé en la salida del gimnasio para asegurarme que Coté estuviese bien, la divisé, salía sin dificultades, pese a que se sobaba su tremendo culo,  afortunadamente fue así y no algo peor. Mis dos bellas Arpías le habían aclarado a Coté cuales eran sus límites.

Los otros días fueron pasando sin mayores cambios, algún morreo con Nora en la facultad o con Fer en la bodega del departamento, hasta llegar al viernes en que mis chicas me invitaron a salir, cosa que acepté encantado… lo único que me extraño es que era a una barbacoa a casa de Rorro, que siendo mi amigo no me había mencionado y yo no había escuchado absolutamente nada acerca de ella, pero conociendo mi amigo, tal vez pensó que diciéndole a las chicas era suficiente

Ese día los abuelos también salieron a jugar algo de dinero al casino, por un momento los envidié, pues se podían dar esos lujitos, en cambio yo, pese a usar la moto, el solo hecho de pagar el combustible me desfinanciaba y que decir de tomar café en la universidad, lo que pese a ser necesario n ocasiones, me dejaba en banca rota, por lo que una barbacoa donde Rorro viernes en la noche era un regalo caído del cielo

Llegamos casi a la hora indicada, pues eso con ellas es como un milagro… Rorro nos recibió junto con Coté en la entrada, ella miró a mis dos arpías y puso cara de asco, la verdad que después de presenciar lo que le habían hecho en el gimnasio me impresionó que las saludara, también llegaron otros chicos que eran del grupo habitual nuestro, por lo que la velada se animó, especialmente al momento en que Rorro y yo tomamos el control de la parrilla. Todo iba bien hasta que Rorro me comentó que estaba de novio con Coté, al tiempo que me preguntaba si eso me molestaba… ¿qué podía decirle?...

  • Yo: por supuesto que no, Coté es una buena chica, hacen una pareja estupenda

No lo podía creer, Rorro en manos de Coté que resultó ser una chica diferente a lo que solo hace un tiempo creía… en ese momento recordé todo el embrollo griego con su ex novio por el que me había dejado, pero no quise comentárselo a mi amigo, lo que sí tenía claro es que ya no la follaría nunca más, incluso si mis dos bellas arpías locas me lo pidieran.

La noticia se fue rápidamente divulgando entre los comensales, todo los felicitaron, muchos como yo de corazón, no sé si mis dos bellas arpías lo hacían del mismo modo. Todo transcurrió en un marco de alegría y amistad, hasta que cerca de la media noche mis chicas me dijeron que debíamos marchar. No les pregunté por qué tan temprano, pero me imaginé que tenían cosas que hacer para la uni al día siguiente.

Cuando anunciamos nuestra ida Coté de improvisto le dijo a Rorro que aprovechaba nuestro regreso a casa para marcharse con nosotros y así el no tuviese que salir después a dejarla, eso me causó extrañeza, pero más extrañeza me causó que las dos arpías mías no lo objetaran en lo absoluto.

Aún sospechando que algo ocurría, nos subimos al auto después del amoroso morreo entre Rorro y Coté partimos, debo confesar que me molestó un poco el espectáculo que dieron, pero al mirar a mis lindas chicas lo superé… no debía molestarme por alguien que me dejó y ahora vuelve arrepentida.

Como Fer conducía yo me senté al lado de Nora, pues para todos era mi ligue de la uni, por lo que Coté se subió a su lado, partimos del lugar casi de inmediato, pero apenas avanzamos unos metros se desató otro de los diálogos surrealistas de mis arpías. La que rompió el fuego fue Nora:

  • ¡Coté que pretendes!
  • Coté: ¡Que Claudio y Fer cumplan su promesa!
  • Fer: Una promesa forzada no tiene validez, pensé que te habías dado cuenta
  • Coté: Unas cuantas nalgadas no me harán cambiar de parecer.
  • Nora: tienes que entender que el pardillo es nuestro.
  • Coté: No les pido que me lo regalen, solo que de vez en cuando…
  • Fer: ¿¡Te folle!?... Eres una loca de patio
  • Coté: ¿Qué opinas Claudio?
  • Yo: La verdad es que yo quiero estar con ellas, tú ya tuviste tu oportunidad y la dejaste ir, no sé por qué insistes.
  • Coté: Por que nadie me ha hecho sentir lo que he sentido contigo…
  • Fer: Búscate un novio…
  • Nora: Sí Rorro te quiere.
  • Coté: Lo sé, pero no es lo mismo.
  • Fer: ¿Y es culpa nuestra?
  • Coté: No, pero les suplico que me dejen…
  • Nora: Con una condición
  • Coté: Lo que sea…

Maldición volvíamos a fojas cero, las locas de patio cedían la posición, ¿cómo era posible? pensé

  • Fer: No puedes follar con nadie más
  • Nora: Bueno dos condiciones, jajaja, la otra es que sea solo con nuestra autorización.
  • Coté: Acepto…
  • Yo: ¿Qué hay de mí opinión?
  • Fer: Vamos Claudito, no quejarás por tener el mejor culo de la universidad, jajaja
  • Nora: Es un trato que debemos sellar… vamos a tu casa Coté…

Fuimos con Coté a su casa, afortunadamente Bea no estaba por que las tres deseaban sellar el trato a su “extraña manera de ver la vida” … Apenas entramos me miraron como lobas a un cordero. Yo las miré, aún no podía entender que mi adorada Fer, la bella arpía quisiera compartirme y que Nora avalara todo…. En un momento de casi lucidez las miré y les dije:

  • Son lindas, las quiero, las deseo, pero no soy un juguete de ustedes, no soy su posesión ni nada parecido… si quieren sellar un acuerdo no será por mi posesión, me voy a casa… Fer aquí están las llaves del coche, puedes dejar a Nora o hacer lo que quieras, pero no podrás jugar conmigo… ¡Adiós!
  • Fer: Claudio, ¡espera!
  • Yo: No adiós…

Me marché antes de que ellas pudieran reaccionar, monté en el primer ascensor y casi corriendo salí del edificio, luego me refugié en el portal de otro edificio cercano, a los dos minutos vi salir a Fer y Nora salir en coche desde el estacionamiento de visitas en plan de búsqueda

No aparecí por casa hasta el día siguiente… lo que quedaba de la noche me la pasé deambulando por el barrio bohemio y conversando con algunas chicas y poco más, la verdad que cuando regresé me encontré con el abuelo que se aprestaba a ir a comprar el pan

  • Abuelo: Hola Claudito, vamos a comprar el pan, dijo en tono de orden
  • Yo: Hola abuelo. ¡vamos! contesté, pues no podía hacer nada más
  • Abuelo: ¿Qué pasó con Fer?
  • Yo: Tuvimos un desacuerdo y le dije que volviera con Nora
  • Abuelo: ¿Solo eso?
  • Yo: Sí
  • Abuelo: Ella volvió llorando y echando pestes contra ti
  • Yo: Solo no acepté que me usara como un juguete de su propiedad
  • Abuelo: Es que ella tiene sus formas especiales… de relacionarse
  • Yo: Ella es una consentida y manipuladora, ¡por favor! no trates de seguir avalándola, ya no me trago eso
  • Abuelo: Vamos que no me gusta que estén disgustados.
  • Yo: Bueno abuelo, intentaré retomar las paces, pero ella se lo busca.
  • Abuelo: Ese es mi nieto

Nuevamente tenía que ceder ante el abuelo, pero antes dejaría pasar agua bajo el puente. Ya la luz del amanecer estaba invadiendo la ciudad y yo estaba muy cansado, por lo que de saludar a Oma me fui a dormir, no antes de sufrir por parte de ella un interrogatorio en mi cuarto que impedía que me pusiese mi pijama, aún cuando yo lo único que quería era dormir

  • Oma: ¿Qué pasó Claudito?
  • Yo: Lo que pasa siempre con Fer… es una consentida y manipuladora.
  • Oma: No entiendo…
  • Yo: Ella quiere imponer sus propias ideas sin pensar en mí.
  • Oma: ¿Cómo qué?
  • Yo: Ella me insiste que lo mejor para los dos es que yo sea novio oficial de Nora y de ella en las sombras, para evitar el que dirán y la condena social
  • Oma: ¿¡En serio!?
  • Yo: Sí quiere que yo esté con Nora y ella a la vez y yo no quiero eso…
  • Oma: Hablaré con ella

Me levanté casi a la hora de almuerzo, saludé a Oma que lo preparaba y ella, haciendo unas señas me dice que me acerque.

  • Oma: Hablé con Fer, y después de mucho conversarlo, comencé a encontrarle algo de razón
  • Yo: ¿Tú también Oma?
  • Oma: Sí, además, Nora es una chica preciosa, inteligente y me parece que es muy dulce contigo
  • Yo: Ay Oma, no puedo entender a las mujeres.
  • Oma: Como dice tu abuelo Federico, no nos entiendas, solo ámanos, jejeje

No sé cómo Fer era capaz de embrujar a todos, incluyendo a Oma, pero yo no caería en su envolvente tela de araña… ¿o ya había caído?... Me duché pensando en todo lo ocurrido y mientras lo hacía, decidí que debía tomar las riendas de mi relación con las chicas… ¿pero cómo?

Me metí a mi cuarto para vestirme ante el apuro de Oma, la que decía que ya estaba todo listo para que disfrutáramos de un aperitivo previo al almuerzo, ella tenía ya preparada unas deliciosas bocatas y el abuelo descorchaba una botella de rojo vino riojano.

Cuando entré, a mi pequeña habitación, me encontré con una Fer sentada en mi cama y mirándome con cara de disgusto me dice

  • Fer: Me dejaste abandonada…
  • Yo: ¡No!, te deje con tus amigas… ahora sal que me voy a vestir.
  • Fer: tTe conozco completo, puedes vestiré conmigo adentro.
  • Yo: El abuelo está en casa, no quiero un escándalo.
  • Fer: Tal vez sea bueno que el abuelo sepa todo.
  • Yo: Si tal vez sea bueno, pero ahora no.
  • Fer: Vístete

Comencé a vestirme ante su atenta mirada y comentarios referente a mi tozudez de no acatar su idea, insistiendo que era lo mejor… Me estaba hastiando por lo que finalmente me paré delante de ella y la callé de un apretado beso, luego le dije

  • ¡Cállate!, ahora voy a ser quien manda
  • Fer: Pe…

La volví a besar y le repetí que guardara silencio, ella aún algo sorprendida me miró con un brillo especial en su mirar y después de apoyar su oído en la puerta salió de mi cuarto.

Por primera vez en mucho tiempo tenía una tarde de sábado solo para mí, por lo que me puse mi tenida para ir a trotar con la idea de botar la tensión y el estrés que me provocaba mi adorado tormento, pero apenas iba a tomar el picaporte de la puerta de salida, apareció Fer con su tenida de trote que me provocaba infartos como también calenturas casi demoniacas

  • Fer: ¿A dónde iremos a trotar?
  • Yo: ¿Eres bruja?
  • Fer: Sí, jajaja…. En realidad, no, pero Oma me contó, jajaja
  • Yo: Por la costanera…
  • Fer: Espera un poco que le envío un WhatsApp a Nora.
  • Yo: ¿Para qué?
  • Fer: Para que será, que nos acompañe…
  • Yo: Sigues con tu idea loca
  • Fer: Es lo mejor
  • Yo: ¿Qué te pasaría si a Nora le doy una feroz follada y a ti te dejo mirando?, pregunté algo mal humorado…
  • Fer: Nada, ya me tocará a mí y te exigiré lo mismo…

Finalmente salimos a trotar, mientras lo hacíamos caí en el embrujo del espectacular culo de Fer y casi sin darme cuenta iba un metro detrás mirando su portento de retaguardia, la verdad es que ni siquiera me di cuenta cuando llegamos a la cercanía de donde vive Nora la cual nos interceptó en una esquina.

  • Nora: Hola chicos.
  • Fer: Hola linda, traje al pardillo… que me amenazó con follarte a matar y no darme ni un beso siquiera
  • Nora: ¿Eso dijo?... está lelo, jajaja
  • Yo: Lo dije porque Fer y tu están locas…
  • Nora: Por follar contigo… podemos ir a mi casa…
  • Yo: ¿Y las cámaras de tu padre?
  • Nora: ¡No son problema para una ingeniera!, bueno casi ingeniera, jajaja
  • Fer: ¡Hiciste lo que te dije!, jajaja
  • Nora: Las cámaras muestran solo lo que yo quiero que muestren, jajaja

Yo como un imbécil seguí a las dos que con sus vestimentas deportivas dignas de modelos de fórmula uno, despertaban las miradas de los transeúntes del sector, tanto que al llegar a la conserjería del edificio de Nora, el sujeto de la entrada las quedó mirando, saludando a Nora con cara de baboso, mientras pasábamos con premura … las dos chicas se reían de la reacción del pobre conserje.

En el ascensor, Nora sacó su móvil de la cartuchera sujeta a su brazo y abrió una aplicación que activo apenas llegó a la puerta de su casa, anulando el sistema de grabación colocando en su reemplazo un loop infinito de escenas donde no había nadie, para que en caso de que sus atribulados padres miraran desde la clínica o donde estuviesen, solo verían eso y nada más. Era como una película de “Misión Imposible”, en este caso “Follada Imposible”

Apenas entramos las dos comenzaron a sacarse sus atractivas prendas deportivas mientras nos dirigíamos al dormitorio de Nora, la cual no importando lo sudado que estaba me besó y luego pasó su lengua por mi mejilla izquierda:

  • Nora: Estás salado
  • Yo: Es sudor de lo que ya habíamos trotado con Fer, contesté.
  • Nora: mejor, ya no necesitas aliño, dijo con voz sensual y mirada de tigresa ya característica en ella

Nora finalmente se sacó el corpiño atlético blanco dejando sus tetas al aire, incitándome a que se las comiera meneándolas de lado a lado, yo antes de aceptar la invitación miré a Fer y tomándolas con mis manos le di dos lametones.

  • Fer: Pardillo.... ¿Quieres ver mi sujetador?
  • Yo: No, mi atención es para Nora…  muéstrame como te queda el leggins Nora...
  • Nora: Que pardillo más malo dijo girándose para mostrar el culo.

Fer media ofuscada igual se quitó la camiseta y el sujetador atlético que traía, dejando sus tetas al aire rebotando mientras me miraba desafiante.... No pude evitar mirar embelesado esos portentos… con mi verga a punto de estallar.¡Uff! qué tetas se gasta Fer, pero luego reaccioné y me metí un pezón de Nora en la boca y comencé a mamarlo, mientras ella se restregaba en mi cuerpo comentar el chico.

Nora sólo lo miró sonriendo a Fer. y apretó mi cabeza contra su pecho y me decía:

  • ¿Te gusta?
  • Yo: ¡Mmmucho!
  • Nora: ¿Quieres que me saque mis leggins pardillo?
  • Yo: ¡Sí corazón! Respondí mientras la ayudaba a desprenderse de su prenda.

Cuando Nora se quitó los leggins le amasé los cachetes del culo ahora solo cubierto con una tanga deportiva que se le incrustaba entre los duros cachetes de modelo de lencería. Luego se sacó la última prenda que tenía. Me quedé mirando la belleza desnuda que tenía en frente mientras Fer nos miraba tal vez con algo de ¿decepción?

Pero Fer no se quedó quieta, pues se desnudó por completo, lo que me hizo mirarla aún cuando no quería, ahora ella estaba sólo con sus calcetas deportivas puestas, pavoneándose como solo ella sabe, se acercó un poco hasta casi tocarnos y poniéndose frente a mí se amasó las tetas y sonriendo maliciosa.

Su actitud desafiante hizo que yo descaradamente pusiera mi mano en el monte de Vénus de Nora y le metiera el dedo medio en el coñito, ella gimió profundamente luego miró a Fer con sus ojos felinos y le sonrió de manera súper sexy.... intenté abstraerme de lo que hacía Fer comiéndole con más fruición las tetas de Nora y jugando con mi dedo medio en su coño. Como no le hacía caso a Fer, ella dijo:

  • ¿Cómo me veo?
  • Nora: Preciosa corazón.... ¿me muestras tu cola?
  • Fer: ¿Cómo la encuentras?
  • Nora: Perfecta Fer, ¿no opinas igual pardillo?
  • Yo: Sí pero ahora estoy contigo…

Fer se dio la vuelta, colocándose en mi espalda restregó sus tetas en ella, como yo no le hacía caso restregó su coñito adornado con un pequeño triangulito de bellos contra mi culo. Yo la empujé atrás suavemente con el culo, pero Fer se afirmó de mis caderas y tomó mi verga pajeándola, toqué su mano, pero fui incapaz de sacarla de mi amiguito, ella con la otra mano alcanzó el culo de Nora atrayéndola hacia mi verga.

Mi amiguito dirigido por Fer ahora se metía en el triangulito formado por el coñito y piernas de Nora, instintivamente comencé a mecer mi cuerpo simulando un suave mete saca que hacía delira a Nora que estaba hirviendo de caliente, lo supe porque ella sacó mi mano de su coño y pasaba dos dedos por su clítoris. Yo sentía que iba a correrme antes de meterle la verga.... la sedosa piel de mis amantes estaba tan caliente, que creí que me quemaba.

Nora gemía fuerte diciendo que se corría, estaba muy excitada, así que comenzó a pajearse con furia mientras yo le pasaba la verga por la rajita del coño, perineo y orto. Ahora solo quería metérsela como fuera… De pronto se me ocurrió algo morboso.

  • Yo: Nora....Te la quiero meter en el orto.
  • Nora: Por donde quieras, pero hazlo…. ¡Mmm.... estoy tan caliente!, que quiero que me la metas bien adentro, mientras me mordía el lóbulo de la oreja y apretaba a Fer contra mi espalda.

Luego Nora me besó y se colocó en cuatro sobre su cama, separó un poco las piernas y me miró con su cara de tigresa caliente. Era una clara invitación a que se la metiera. Por su parte Fer no dejaba de tocarme la verga y enterrar sus tetas en mi espalda, ante esta lujuriosa visión de Nora lista a ser perforada Fer me dice:

  • ¿Qué esperas para metérsela?

Fer se separó de mí dejándome en libertad de acción, di los dos pasos hacia la cama de mi Nora y tomándola de las caderas metí mi verga endurecida por su coñito hasta el fondo, llegando a estremecer la cama.

  • Nora: ¡¡Ahhh!! Dale, fóllame duro pardillo

La instrucción era innecesaria, pues inicié un desenfrenado meta y saca, casi brutal, pero Nora aguantaba sin chistar, es más diría que lo disfrutaba pues sus gemidos y estertores eran signo de ello, ¡mi follada era tan fiera!, que Nora a los pocos minutos se corrió como una burra, pero yo estaba para más y sin mediar palabra saqué mi pringada verga llena de fluidos de su coño y se la hundí lentamente por el culo, abriendo el perfecto anito y haciendo que ella casi se desmallara en una mezcla de sensaciones sadomasoquista… la embestida hizo que bajara la cabeza quedando apoyada de la cama afirmada de su frente y brazos, dejando el culito en pompas… ¡no tuve piedad!... una vez completamente adentro le di como nunca, afortunadamente para ella, ya su orto estaba amoldado a mi verga y se dejo culear entre quejidos, sofocos y gritos delirantes

Miré a Fer que estaba en un silloncito sentada amarrando sus piernas con los brazos y los pies sobre el asiento, mirándonos, la miré con malicia, como diciendo mira como la follo, ¿no te da un poco de celos? No sé si se dio cuenta de mi mirada o no, pero me dijo:

  • ¿A eso te referías?
  • Yo: ¿Te gusta?
  • Fer: Preferiría estar ahí, pero lo puedo soportar si se lo haces a ella.
  • Yo: ¿Y Coté?
  • Nora: Ahhh…a ella no…
  • Fer: Jajaja, me está preguntando a mí, jajaja…
  • Nora: Ella no es de la familia… ¡Mmmm!... me matas pardillo…
  • Fer: Tranquila, solo seremos tu y yo con nuestro pardillo, a ella solo cuando nosotras queramos que así sea…
  • Yo: Amén…
  • Nora: pero yo no quierooo

Comencé a notar que mi calentura ya me haría desbordar… que no podría aguantar mucho más, traté de culearla más lento y suave, pero era lo mismo, este orto mágico me tenía al borde del colapso, así y todo, intenté estirar al máximo la enculada, pero tuve que claudicar y la llené de leche, tanta que comenzó a desbordar… Nora al sentir que la llenaba de mi semen, desencadenó otro orgasmos gigante y se dejó caer atravesada en su cama.

Ya cansado o mejor dicho sin fuerzas para seguir follando a Nora, me senté a su lado y puse una de mis manos en su bello culo recién perforado, como queriendo aminorar los efectos de la enculada con mis caricias. Fer e levantó tomó algo del tocador de Nora se arrodillo al frente de mi y tomado mi morcillona verga la limpió con una toallita desmaquillante, mientras me miraba con aires triunfales… era cierto, ella estaba triunfando.

Mientras mi verga desfalleciente aún tenía un tamaño considerable, se la metió en la boca y comenzó a darme una mamada, pensé en sacarla de su boca, pues después de la follada a Nora ni Cristo la levantaría, o eso pensé yo, pero mi Fer de algún lugar encontró energía en mí y logró endurecerla, para luego montarse a Horcajadas sobre mí y empalarse, sin dejar de mirarme con esos ojos que reflejaban su victoria.

Ya vencido, le agarré las dos tremendas tetas y comencé a comérselas, mientras ella se contoneaba ante la mirada de una sonriente Nora que se unía a su celebración de mi derrota… la miraba ella y a mi, ¡la pérfida arpía me tenía subyugado!… Fer completamente roja y excitada, entrecerró sus ojos suspirando profundo, eso indicaba que estaba al borde del orgasmo, por lo que pronto sentí como Fer comenzaba a tener espasmos en su coñito que me indicaban que se corría, o eso me imaginé.

  • Fer: Me... me ¡corro!
  • Nora: ¿Ya?... ¡Tan pronto!

Se la metí bien adentro tomándola de las caderas y haciendo fuerza para que mi glande llegara lo más adentro de su ser, sentí como mi Fer se estremecía y se derrumbaba sobre mi pecho y hombro.

  • Fer: Uhmm me mataste pardillo….
  • Yo: ¿Te gustó?, pregunté como pardillo que soy….
  • Nora: Sin dudas, jajaja nadie puede hacer esa pregunta, jajaja
  • Yo: ¿Cómo te corriste tan rápido?
  • Fer: ¡Ese es efecto que me causas, estaba muy muy excitada!

Descansamos un poco de las exigentes folladas que nos dimos, luego Fer se acomodó en cuatro en la cama, como perrita mirándome con ojos libidinosos y em dijo:

  • Culéame como a Nora
  • Yo: No sé si pueda…
  • Nora: Vamos que puedes, dijo metiéndose mi cansada verga en la boca, pajeándola al mismo tiempo

Milagrosamente se comenzó a endurecer y cuando creí que ya podría meterla, le pasé la lengua por el orto.... luego de eso estaba listo para encularla como quería… me puse detrás y empujé un poco, mi verga entró sin muchas dificultades pese a no estar del todo dura para follarla.

Fer gimió quedamente, mientras yo la agarraba de sus caderas la penetraba despacio, abriéndome paso a sus entrañas mientras mi morbo alentaba a mi verga a endurecerse y aumentar de tamaño en su interior.

Al poco rato ya mis envestidas sonaban ruidosamente en el perfecto culo de Fer, mientras Nora le metía mano a su coño para hacerla bramar de deseo y calentura, tal fue el duro mete saca, que a los pocos minutos ambos nos corrimos como bestias y le llene al orto a Fer con los últimos chorros de leche que me quedaban… Los tres quedamos silentes realmente agotados de tanto darle.

Agotado por la entrega dada a mis bellas arpías, me vestí rápidamente y me fui a la cocina por un vaso de agua y algo que comer, mientras las chics se quedaron conversando algo que no quise saber… al rato llegaron ellas vestidas diciéndome que en la noche querían hacer algo tranquilo como ir al cine o ver una película en el cable…. Al parecer quedaron más que satisfechas de la follada que les había dado, jejeje.

Regresamos con Fer a casa en autobús, pues ya no quería hacer nada más de ejercicio, al llegar los abuelos estaban fuera, por lo que Fer me invitó a la ducha, en un principio me negué porque no sabía donde habían ido los abuelos y por ende tampoco sabía a qué hora llegarían.

  • Fer: Clo, cloc clo … gallina… me dijo simulando aletear, jajaja
  • Yo: No me voy a suicidar en defensa propia….
  • Fer: Clo, cloc clo …, jajaja

Sus burlas calaron hondo en mi y tomándola en brazos me metí a la ducha con ella, aún vestidos, a lo que ella protestaba entre risas, sabiéndose una vez más ganadora del desafío. En la ducha más allá de las caricias y besos no hicimos gran cosa, ella quería algo más, pero yo no estaba en condiciones, las cuatro folladas de hacía solo una hora atrás me dejaron seco.

Afortunadamente salimos unos quince minutos antes de que los abuelos regresaron de donde fueron, los saludamos como siempre y como siempre Oma nos leyó las caras y se puso contenta de vernos que habíamos superado nuestro último desencuentro… si supiera como lo superamos creo que se escandalizaría, jajaja

Fuimos al cine en la noche, nos “portamos bien”, al otro día almorzamos con los padres de Nora, estudiamos e hicimos lo usual de un estudiante dedicado, la verdad es que todo estaba tranquilo hasta que el domingo por la noche Fer se metió a mi cuarto y sin decir agua va me dio un morreo de proporciones deseándome buenas noches, el problema es que el abuelo la sorprendió saliendo de mi cuarto, por lo que después de una conversación en un tono agrio que no pude descifrar él entró a mi cuarto:

  • Abuelo: ¿Qué estaban haciendo?
  • Yo: Fer me preguntó sobre cómo nos iríamos a la universidad y me dio las buenas noches…
  • Abuelo: ¿Eso fue todo?
  • Yo: En resumen, claro que con Fer nada es corto o sencillo.
  • Abuelo: Okey, pero no me gusta que ella entre a tu cuarto…
  • Yo: Bueno abuelo, pero creo que se lo debes decir a ella…
  • Abuelo: Ya se lo dije, buenas noches…
  • Yo: Buenas noches abuelo

Llegó una nueva semana, afortunadamente para mí bastante relajada pues teníamos programado tiempo para el proyecto de titulación y las chicas para algo que no le presté mucha atención, en cuanto a los abuelos, al parecer siguieron disfrutando de su estadía  en la ciudad, al parecer después de tanto tiempo con nosotros no tenían intención de volver a su casa. El único problema que yo veía con esto, era que ahora el abuelo como diría un futbolista, me tenía impuesta una marcación al hombre, por lo que me debía portar bien pese a que mis deseos por Fer aumentaban día a día.

En cuanto a Nora, ella fue la única vía de escape para mis bajas pasiones, pues es lo suficiente desenfadada para follar conmigo en cualquier parte, incluso en el baño de la universidad, no es que lo hiciéramos muy seguido, pero sí lo hicimos el miércoles durante un recreo. Por otra parte, Coté ya no me asedia como lo hizo, pero sí me mira “como gato frente a una carnicería”, lo cual me incomoda, pues Rorro está bastante prendido de ella, pero no hay nada que hacer.

El jueves por la tarde dejamos a Nora en su casa y llegamos a casa y no encontramos a los abuelos, solo pudimos saber donde estaban al ver un mensaje de Oma en la mesa de entrada que nos decía que ellos fueron a un casino de juegos para tentar a la suerte, que volverían después de cenar en el lugar y que teníamos nuestra cena en el microondas… cabe señalar que ni Oma ni el abuelo les gustaba el uso de las redes sociales, a lo sumo usan correo electrónico.

Terminado de leer este mensaje Fer dejó su mochila en un sillón de la sala y sonriendo me “asaltó”, abrazándome como un pulpo, no voy a decirles que me resistí mucho, la verdad es que la tomé de su culo y la llevé en vilos a mi cuarto con la sana intención de follarla hasta que no pudiese caminar…

Al llegar al cuarto y querer bajarla en la cama, Fer me detuvo, me posicionó en la cama y bajándome los pantalones se arrodilló frente a mí. Al ver sus intenciones me puse feliz, mi preciosa arpía tenía su propio plan para aprovechar la oportunidad de estar solos y su naturaleza osada y juguetona se revelaba ante mí… mi Fer me la iba a chupar, con sus preciosos labios… era un día maravilloso para mí, por lo que me senté en mi cama con mi erecta verga apuntando al techo. Fer sonrió como si le sonriera a un niño festejado su cumpleaños, tal vez porque así me sentía…. Me miró a los ojos una vez más y tomando mi amiguito se lo metió a la boca, sentí como sus labios pasaron por mi glande y su lengua atacaba mi frenillo, ¡creí morir!

  • Fer: Escúchame… no intentes nada raro… te la voy a chupar, te llevaré al cielo en mis propios términos, ¿entendido? Dijo sacándose mi verga de su boca y mirándome con sus bellos ojos claros llenos de determinación.
  • Yo: Sí lo claro… ¿Te puedo masajear tus tetas?
  • Fer: Mm agh… ¡Sí!

Le tomé sus tetas aún cubiertas por su ropa y le besé con ternura su cabeza, luego le saqué su camiseta y la liberé de su sujetador. Ella correspondió mi beso con una lamida de mi tronco pasando por el frenillo y besando la punta del glande… mi Fer sabía cómo “matarme”. Luego volvió al ataque saboreando mi amiguito, para con una de sus manos acariciar mis bolas con delicadeza, eso me volvió loco y desde ese momento solo deseaba empalarla… pero antes busqué sus pezones que estaban como un garbanzo de duros, lo que me invitaba a apretarlos y sobarlos.

Pero ya mi objetivo otro, por lo que quitándola de mi amiguito la hice levantarse, le desaté el lazo que ajustaba sus pantalones y junto con sus bragas los bajé hasta donde pude, luego metí mi mano para acariciar ese abultado y afiebrado Monte de Venus… Fer me miró y me dijo:

  • Mmm… ¿Quieres metérmela?…
  • Yo: Mmm ¡sí!

Se sacó el pantalón tirándolo a una silla de mi cuarto, luego se montó a horcajadas sobre mí. Yo ni corto ni perezoso, me acomodé y comencé a pasar mi verga con suavidad por su coño, me costó no metérsela de inmediato, pero al cabo de un minuto mientras disfrutaba de sus besos sentí como ella deslizaba su coñito por mi verga…. Dejé sus tetas por un instante acariciando su precioso culo, duro, turgente y mientras ella me cabalgaba, con una mano atrapé su clítoris torturándole con esmero… sus besos ahora eran salvajes, me metía la lengua, me lamía la cara me mordía mis orejas, su deseo estaba desatado, Fer se notaba como gata en celo.

Yo trataba de estimular todas sus zonas erógenas… Además de acariciar su formidable culo le amasaba sus tetas, con pasión “perillaba” sus pezones, estimulaba su clítoris y la besaba con furia…. ella gemía e intentaba mantener el ritmo al cabalgar mi verga, pero su placer y deseo incontenible le impedía hacer un buen trabajo. Pero mi Fer con la persistencia que la caracteriza siempre volvía a la carga….

¿No sé cuánto tiempo habrá pasado?, pero comenzó a jadear con fuerza intentando tomar aire cada vez más rápido, lo que junto con sus apagados gemidos me anunciaba su inminente corrida. De pronto comenzó a gritarme en forma casi silenciosa:

  • ¡Amor, me corro!… ¡Dios mío, me corro!, ¡me coorrooo!

No le hice caso a sus súplicas, y seguí acariciándola y follándola hasta que se corrió por segunda vez y se desvaneció por unos instantes….  Me asusté, pues no esperaba que algo así sucediera…. Afortunadamente se recuperó rápido mientras sentía como ella chorreaba sus flujos, su coñito era una mar de goce.

  • Yo: ¿Estás bien?... ¿Te gustó corazón?
  • Fer: Eres malo, casi me matas… pero sí, me gustó mucho… ¿Y a ti?
  • Yo: Me faltó un poco… pero sí me ha gustado, claro que me asustaste, jejeje.
  • Fer: Casi me mataste… en cuanto a lo otro, Nora me enseño la solución para eso, jejeje, siéntate en la orilla…

Fer se arrodillo nuevamente al lado de la cama y puso sus tremendas tetas abrazando a mi verga, ¡fue impresionante!, luego la ensalivó como también a mi amiguito. Por mi parte ¡me moría de calentura! De solo imaginar sus intenciones… Fer comenzó una tremenda paja cubana.

El sentir como se deslizaban a lo largo de mi amiguito era una sensación única, en verdad nunca había sentido algo así. Ni Coté, ni Nora las tenía así de grandes, tal vez Bea hubiese podido hacerlo. Por otra parte, al verla con esa determinación para hacerme acabar y tan propia de ella, no pude más que acariciarla y sonreírle, mientras me corría como un burro y le llenaba la cara y sus tetas con mi leche.

Una vez que los últimos chorros de mi simiente cayeron en sus tetas, ella sonrió en forma pícara y con un dedo se sacó parte de mis restos de su cara para luego chuparse el dedo… mi novia solo hacía cosas que no creí posible, si no, que además se ponía morbosa o eso pensé yo. Cuando aún no salía de mi asombro, simplemente me dijo:

  • ¿Te gustó corazón?
  • Yo: sí amor, fue fantástico…
  • Fer: Vamos a la ducha, antes de que lleguen los abuelos…
  • Yo: ¡Vamos corazón!

Busqué una tolla mientras ella se fue a la ducha, nos juntamos en el pequeño cuarto de baño y entre juegos y caricias nos metimos bajo el tibio chorro de agua… Fer quería más, la verdad es que con tanto juego y caricias pronto logró levantarme el espíritu y la libido, por lo que mi amiguito a los minutos estaba listo para la acción, por lo que Fer puso una pierna apoyada en el borde de la tina dejando su coñito expuesto a mi lanza con la cual no dudé en ensartarla, iniciando un suave pero profundo mete y saca. De pronto la puerta del cuarto de baño se abrió y un sonoro grito resonó en el departamento:

  • Abuelo: ¿Qué significa esto?
  • Oma: ¡Calma Federico!

Mi espina dorsal recibió una descarga eléctrica, mientras la adrenalina aceleraba mi corazón, a lo que se unió un torbellino de pensamientos que buscaban una respuesta a la pregunta que aún resonaba en mis oídos dando saltos en mi mente.

  • Abuelo: Les doy cinco minutos para vestirse y que hablemos… Los espero en la sala.
  • Yo: Sí abuelo…
  • Oma: Tranquilo Federico, apúrense niños…

Fer no decía “ni pío”, su impronta canchera estaba desaparecida, la miré y vi como su cara era de una chica aterrada y al borde del llanto, por lo que le dije:

  • Tranquila mi amor, no hemos cometido ningún crimen, déjame a mi hablar con el abuelo…
  • Fer: Pero de echará de la casa, me devolverá a mis padres y no sé que más, en una de esas no me dejan verte más…
  • Yo: Mira, nos van a retar, tal vez nos separen, pero no creo que sea más que eso…
  • Fer: ¿Tú crees?
  • Yo: ¡Estoy seguro!, la verdad es que no lo estaba y el miedo arraigado en lo profundo de mi ser estaba vivo, pero no lo quise demostrar para no desatar un infierno.

Después de secarnos y vestirnos cada uno en su cuarto como los bomberos, salí a encarar mi destino, obviamente llegué primero a la sala, por lo que Oma se fue al cuarto de Fer mientras yo daba cara a mi abuelo…

  • Abuelo: ¿En que demonios pensabas al follarte a tu prima?
  • Yo: Abuelo, hacía el amor…
  • Abuelo: Pero es tu prima…. Eso es incesto, ¿¡lo sabes!?
  • Yo: Sí abuelo, pero no elegimos enamorarnos, intenté no hacerlo, pero ella…
  • Abuelo: ¡Le vas a echar la culpa a Fer!
  • Yo: No abuelo, te iba a explicar lo que me sucede con ella…
  • Abuelo: Muy bien intenta explicar lo inexplicable…
  • Yo: Al mirarla, al conocerla, al convivir con ella, todo en mi se revolucionó, el solo pensar en ella, hace que mi vida sea feliz, sin importarme nada más que ella, no es culpa de Fer que me suceda eso, es más intenté evitarlo, pero siempre vuelvo a ella, por lo que la culpa es mía…

De pronto llegan Fer y Oma a la sala y escucho

  • Fer: La culpa también es mía abuelo, no sé por qué el llena mis sentidos y me hace ser una persona diferente a la que era, lo intenté evitar desde hace mucho tiempo, incluso desde antes de que él se diera cuenta de lo que sentía por mí…
  • Oma: Sí Federico, la niña hace tiempo que me confesó sus sentimientos por Claudio, por lo que ayudé a que viniera a estudiar aquí.
  • Abuelo: ¡Tú lo sabías Berta!...
  • Oma: Sí Federico, Fer merecía encontrar a un chico que fuera la horma de su zapato y analizando sus sentimientos y conociendo a Claudio, creo que él es ese chico.
  • Abuelo: ¡Pero sabes a lo que se enfrenta en esta relación!
  • Yo: Sí abuelo y tengo un plan…
  • Abuelo: ¿Qué dices chiquilla?
  • Fer: Que tengo un plan. Claudio, tiene una novia oficial que es Nora y una novia en las penumbras que soy yo, los tres viviremos juntos…
  • Abuelo: ¿¡Y Nora acepta esta locura!?
  • Fer: Sí abuelo, las dos estamos convencidas de ello.
  • Abuelo: Pero que pasará cuando quieran tener hijos, cuando vayan a una fiesta y tantas actividades que se hacen en pareja, o simplemente de vacaciones…
  • Fer: Todo lo podremos superar….
  • Oma: Sí, lo que dice Fer tiene muchas ventajas, ella me convenció de que puede ser posible…
  • Abuelo: Berta, eres muy crédula…
  • Oma: Escucha a la niña…

Les resumo que en la hora de argumentos y contraargumentos entre el abuelo y Fer. Fer convenció al abuelo de que su fantástico plan era infalible, que, si bien yo era un pardillo, también era el amor de su vida y que eso no cambiaría, que Nora estaba al tanto de todo y que gracias a mí, a ella le iba muy bien en los estudios y que si nos apoyaba todos seríamos felices… Bueno es la magia de mi chica perfecta.

Pero esto no acabó ahí, el abuelo al dar su consentimiento y para no desterrarme o enviarme a la calle, nos exigió algunas cosas:

  1. Que Nora cenara con nosotros al día siguiente y lo convenciera de que su apoyo a la causa era irrestricto
  2. Que no “folláramos” en casa estando ellos de visita en la ciudad”
  3. Que las notas se mantuvieran buenas y los trabajos de titulación progresaran.
  4. Que iríamos a visitar a nuestros padres y les explicaríamos nuestros sentimientos
  5. Que mientras no estuviéramos titulados no podríamos ser padres.

Epílogo:

La cena con una aterrada Nora se efectuó sin mayores contratiempos, lo que desencadenó que oficialmente me comprometiera con ella ante sus padres, claro que en un noviazgo que no tiene una fecha fijada para transformarse en matrimonio

Luego tuvimos que viajar a ver a nuestros padres y explicarles que queríamos ser novios, mi madre que ya sospechaba que yo estaba prendado de Fer, me miró con su típica cara de “yo te lo advertí”, mi padre aún incrédulo lo aceptó a regañadientes, mis tíos se rieron, mofaron y finalmente se pusieron felices por nosotros, nuestros respectivos hermanos, sin gustarles la situación nos apoyaron. Claro que aún no les contamos el infalible plan de Fer, pero creo que Oma habló con mamá, pues al despedirme de ella, me miraba y movía la cabeza como diciendo “las locuras que haces”, a lo que agregó:

  • Trata bien a la otra chica

Los abuelos se quedaron en su casa y nosotros regresamos a terminar el año, por lo que además de cumplir con los estudios, follamos con Fer y Nora como conejos en primavera, claro que las visitas de nuestros padres y hermanos se multiplicaron ocupando casi todos los fines de semana.

No sé en qué momento toda la familia se enteró de mi triunvirato con Fer y Nora, pero de pronto me vi compartiendo con ella y mi familia, afortunadamente todo se desarrolló dentro de una “relativa normalidad”, además que la encontraban muy maja y agradable, en especial Nora conquistó el corazón de mamá, lo cual no es tarea fácil.

Con ese tren de vida llegamos a finalizar las respectivas carreras, en un principio comencé a trabajar para un tío de Rorro que también acogió a él y Coté, esta última seguía con sus insinuaciones y coqueteos, algunos tan descarados que me avergonzaban ante Rorro, pero mi amigo no se inmutaba…. ¿Si la follé con ella?, la respuesta es: más de una vez, pero siempre autorizado por mis dos bellas arpías, las que comenzaron a aceptar la presencia de Coté como un aderezo a nuestra vida sexual.

En cuanto a ellas, comenzaron a trabajar en una empresa de desarrollo tecnológico referentes a control de energías sustentables, cosa que está muy en boga en la actualidad y les va muy bien.

¿Sí me casé?... ¡Sí!, con Nora en él país y con Fer en Uruguay, esto último para reafirmar mi compromiso con las dos… a lo dos matrimonios asistieron mi familia más cercana y Rorro acompañado de Coté. Rorro me decía que envidiaba mi suerte de follarme a las dos bellezas y el solo lo hacía con Coté… no quise comentarle nada, solo lo miré y le dije que no era tanta suerte… esto último, pues el control de nuestra vida familiar está basado en un matriarcado apoyado por Oma y Mamá.

En cuanto a los hijos, las dos bellas arpías están embarazadas con diferencias de semanas, afortunadamente todo va bien, incluso los estudios que le han realizado a Fer y su bebé aún no nato, no presentan evidencias de problemas, cosa que le pido al altísimo que siga igual. Ambos serán nenes, por lo que ellas me han presentado el típico conflicto de cómo se llamarán, pues quería un Claudito para cada una de ellas… Este dilema lo zanjé determinando que ninguno se llamará Claudio

Entre los tres y con la ayuda de la familia hemos comprado una antigua casa en las afueras de la ciudad, está situada en cercanía de una playa. No estaba muy buena, pero tenía un gran terreno por lo que con unos obreros de confianza he estado arreglando para convertirla en nuestro refugio.

A la fecha el plan de Fer y Nora ha funcionado bastante bien, claro que como las dos se embarazaron casi al mismo tiempo, se me ha complicado el tema de la clínica y el ginecólogo, pues cuando las acompaño a sus respectivas sesiones, consultas y clases, el personal me mira con cara de reproche y más de alguna les ha insinuado a ellas que yo soy un descarado, por no decir un mujeriego.

Fin....