Mi Prima mi Martirio Capítulo 11

Capítulo11 Oma y Nora los puentes de plata

Efectivamente debí regresar en bus, afortunadamente no era tarde y por este día no tenía nada importante que estudiar o hacer, por lo que me lo tomé con calma, y me fui sentado mirando el paisaje mientras pensaba en lo que estaba viviendo. Lo único que me tenía algo preocupado era que mi vida “sentimental”, no estaba para nada en calma, si bien estaba seguro que mi primita tenía parte de mi corazón y creo que yo parte del de ella, el tener sexo con Coté y con Nora me hacía dudar de esos sentimientos… ¿es normal follar con otras chicas mientras hay una que te encanta? ... ¡sé que no es normal follar con una chica en presencia de la que uno ama!, pero ¿por qué ella no explota y manda a la mierda a Nora? … ¿Fer me querrá como yo creo que me quiere? … ¿qué haré con Nora?... La verdad es que en el viaje no logré ninguna conclusión, pero dicen que hay dos tipos de problemas, los que se solucionan solos y los que no tienen solución, jajaja… el tiempo dirá de cuál de ellos estoy viviendo.

Volví a casa y me encontré con la sorpresa que los abuelos y Fer estaban viendo una película del cable en su cuarto, los saludé y Oma me invitó a unirme a ellos y pese a que tenía algo de hambre, acepté con gusto; me tendí en la orilla de la cama al lado de Oma.

Como los cuatro ocupábamos la totalidad de la cama, tuve que abrazar a Oma para no caerme, jajaja… como sea nos acomodamos lo mejor que pudimos, pero yo permanecí con el brazo pasando por sobre Oma, de tal forma que mis dedos tocaban el brazo de Fe que estaba en medio de los abuelos… en eso sentí como unos dedos de Fer rozaban los míos y luego los entrelazaban… que les puedo decir fue super tierno.

La película fue muy entretenida, pese a que el final casi me hace llorar y eso que yo no lloro ni con Lassie siendo devorado por lobos o Flipper atacado por un tiburón; por si a alguno le interesa, se llamaba “No se aceptan devoluciones” y es mexicana. Estaba pensando en eso cuando de pronto Oma se incorpora y podría apostar que se dio cuenta de que Fer y yo teníamos nuestros dedos entrelazados, pero no hizo ningún comentario.

• Oma: Bueno niños vamos a cenar, tú también Federico
• Abuelo: Ya voy vieja, ya voy…

Cenamos como de costumbre, Fer me miraba en forma extraña, pero por más que intentaba interpretar su mirada, no sabía interpretarla. Finalmente, todos nos fuimos a la cama, pues la universidad no perdona a los dormilones. Cuando ya estaba con pijama de pronto Fer entró intempestivamente a mi cuarto, cerrando rápidamente.

• Yo: ¿Qué haces?
• Fer: Te tengo que decir algo.
• Yo: ¿No puede esperar a mañana?, los abuelos aún están dando vueltas
• Fer: Te quiero….
• Yo: Yo también, pero debes ir a acostarte….
• Fer: ¿No me entendiste?
• Yo: Sí claro, me quieres como todos nos queremos en la familia….
• Fer: No pardillo, te quiero como hombre…
• Yo: Y yo te quiero a ti como mujer, le contesté…
• Fer: ¡Ufff! Que alivio, jejeje dijo y se colgó a mi cuello besándome

Fue un beso tierno y bastante prolongado, el problema es que los abuelos aún estaban deambulando por ahí y no teníamos ninguna explicación que fuera posible de dar.

• Yo: Debes irte…
• Fer: ¿Por qué?
• Yo: Los abuelos…
• Fer: Tranquilo, solo nos estábamos coordinando para mañana, jejeje
• Yo: Los dos en pijama en mi cuarto con la puerta cerrada… ¡son viejos, no tontos!
• Fer: Tú y tus miedos, me voy…
• Yo: Sí debes irte, le dije y le di un palmazo en el culo cuando se dio vuelta
• Fer: Eres un pardillo sinvergüenza aprovechador…
• Yo: Aprendí de la mejor, jejeje

Finalmente salió del cuarto y los abuelos no se dieron cuenta, o por lo menos eso pienso. Luego me acosté y como ya casi una tradición más que una costumbre, me hice una soberana paja a la salud de Fer y Nora … bueno y con el apoyo recurrente de Coté… jajaja. Como verán mis fantasías están pletóricas de las tres arpías locas que me rodean… ¡sí!, incluí a Coté, la que ya no es la inocente y bella hada que yo creía, por lo que sí, también la incluí, jejeje

Al otro día me levanté como de costumbre en mi horario, estaba por entrar a la ducha cuando entra intempestivamente Fer, casi me da un síncope cardiaco, pues no me lo esperaba…

• Yo: ¡Fer que haces!
• Fer: Estoy que me meo, hazte a un lado
• Yo: Pero Oma está levantada…
• Fer: Sí, pero no me voy a mear por ese motivo, jejeje… métete a la ducha pardillo.
• Yo: Okey, pero ya sabes no tires de la cadenilla del wc.
• Fer: Con una condición…
• Yo: Vamos que debes salir…
• Fer: Solo si me das un beso….
• Yo: ¡Estás loca! Oma se puede dar cuenta…
• Fer: Dame un beso y me voy, dijo cuando ya se levantaba del váter.
• Yo: Okey, dije asomando la cabeza de tras de la cortina.

Me besó con una inusitada pasión, pero me dio la impresión que estaba jugando conmigo, ¡volvía a ser la Fer manipuladora! ... la Fer divertida, segura de sí misma, la Fer desenfadada que me trastornaba la vida y yo de una extraña forma volvía a perder el control de mi vida. Si bien se me paró la verga, hice el esfuerzo casi sobrehumano de no pajearme, la verdad es que no quería que Fer se anotara ese pequeño triunfo al provocarme.

Desayunamos juntos y Oma, como casi una costumbre nos preparó algo para llevar e insistió que nos fuéramos en el coche de Fer, por lo que para no ser desagradable acaté con “algo de sumisión” … bueno es mi única abuela viva y nos da cariño por las dos.

Asimismo, Fer como de costumbre me pasó las llaves para que condujera, mientras llamaba a Nora y Coté para decirles que las pasaríamos a buscar, mmm esto me sorprendió. ¡Sinceramente mi primita está loca y trama algo!…

Primero recogimos a Coté y al poco a Nora, Fer las saludó con fingido cariño o eso me pareció, y cuando ya íbamos rumbo a la uni, se giró en su asiento y nos dijo:

• Chicos, he decidido dar un paso adelante en la relación con Claudio, por lo que ya no se encuentra disponible para follar con ustedes…
• Nora: Eres una fresca, ¿qué dices tú Claudito?
• Yo: Fer, no somos nada y no te he autorizado a decidir si puedo follar con alguien o no.
• Coté: Yo terminé con Claudio, ahora somos amigos, así que tu tontería no me alcanza.
• Fer: Vamos Coté, casi media universidad sabe que aún follas con tu ex, no me vengas con patrañas.
• Nora: Sí Coté, cuando el pardillo te folla se te nota demasiado, jajaja. En todo caso Fer, mientras él no sea tu novio oficialmente, voy a seguir follando con el hasta que no me quede coño.
• Fer: ¿Y tú que dices Claudio?
• Yo: Fer sabes que te quiero, que me encantaría tener algo serio contigo, pero somos primos….
• Nora: ¿Pero te follarías a Fer?
• Coté: Pero que dices Nora, son primos hermanos.
• Nora: Lo que es evidente, pero ambos se desean, se les nota en los ojitos cuando se miran, jajajaja
• Yo: Basta trio de locas, yo sabré que, y cuando deseo hacer algo, entre los cuales se encuentra el hecho de follar.

Gracias a Dios llegamos a la uni, pues el chivateo que llevaban las tres en el coche me tenía loco, incluso las dejé discutiendo mientras yo me marchaba a clases, donde me encontré con Rorro y me puse a conversar de cualquier cosa hasta que llegó la profesora junto con Coté. La mañana pasó rápido y me abstuve de liarme con las tres arpías, yo quería estar tranquilo.

A la hora de almuerzo me escondí en un área donde se juntan los que fuman marihuana, incluso uno que me conoce me saludó extrañado, preguntándome desde cuando yo la fumaba, a lo que le contesté que no lo hacía, solo escapaba de mis sombras, a lo cual él rio y me dijo:

• Si yo estuviera en tu lugar no me escaparía de mis sombras, jajaja

Por la tarde, a la hora de salida coordinada con Fer, me dirigí al coche y me encontré con la sorpresa de que estaban esperándome las tres apoyadas en él, se les veía conversando animadamente, o eso me pareció a la distancia.

• Yo: Hola chicas, ya pueden subir, dije accionando el mando remoto de las puertas
• Nora: Hola pardillo, ¿dónde te escondiste?
• Yo: No me escondí, me extraña que no me vieran, dije mintiendo descaradamente.

Afortunadamente las tres se comportaron bastante bien, hasta cuando dejamos a Nora, la que metió su cabeza por mi ventana y me besó con pasión, metiendo su lengua hasta mis amígdalas por decir lo menos, la verdad es que fue demasiada pasión, luego miró a las otras dos chicas y les sacó la lengua, para finalmente decirles adiós riendo. La reacción de las otras dos no tardó en manifestarse, lo menos que le dijeron fue que era una zorra guarra o algo así, pero noté que no fue con ira o un enojo muy manifiesto.

La escena se repitió con Coté y Fer se rio diciéndole que era otra zorra mal enseñada, la verdad es que las tres estaba jugando conmigo… ¡es una locura! ¿o no? Finalmente llegamos al estacionamiento del edificio y Fer me besó al igual que las otras dos locas, luego me miró y dijo:

• ¿Cuál fue mejor?
• Yo: Son unas locas, no soy un juez o un trofeo de nadie y esta es una competencia absurda.
• Fer: No sabes nada, jajaja

Caminamos un poco y Fer me detiene frente a la puerta de la bodega, lo cual me aceleró el corazón y mientras ella abría la puerta yo ya me sentía ardiendo por dentro, por lo que apenas entramos la abracé y besé por iniciativa propia… pronto comencé a acariciar su cuerpo recorriendo con mis manos cada curva de mi pérfida arpía, hasta que ella me dijo:

• Paremos pardillo, ya no aguanto más, vamos a casa.
• Yo: Pero podríamos seguir un poco más…
• Fer: No ya no puedo más… por favor.
• Yo: Fer realmente no te entiendo, me provocas, logras que me interese, haces cosas que nadie más haría y después te arrepientes.
• Fer: Yo tampoco me entiendo, la verdad es que tal vez sea mejor que sigas con Nora.
• Yo: No puedo creer que digas eso…
• Fer: Vamos a casa, dijo sollozando de pronto.
• Yo: Los abuelos van a pensar que te hice algo si te ven llorando
• Fer: Ya lo hiciste.

Luego de eso, ella salió de la bodega y se adelantó a mí, aprovechando de que yo estaba cerrando la bodega tomó el ascensor y se me adelantó. Apenas entré Oma me reprendió por hacer llorar a su niña, pese a que intenté explicarle que yo era inocente, luego el abuelo también me reprendió, por lo que enfurecido tomé mi moto y me fui a casa de Coté que era la más cercana.

• Coté: Pero que sorpresa, ¿qué te pasó con la furcia de tu prima?
• Yo: ¿Cómo sabes que me pasó algo con mi prima?
• Coté: ¿Qué más podría ser para que de la nada aparezcas aquí?
• Yo: Pudo haber sido algo con Nora…
• Coté: No, ella solo está para tenerte contento, no creo que te haga nada malo.
• Yo: Es cierto, ¡es que no entiendo a Fer!, me torea y torea y cuando cargo se escapa del ruedo
• Coté: Algunas mujeres somos así, jajaja, tomemos un café y conversemos… ¡¡Bea ven a ver quién tenemos aquí!!
• Bea: ¿¡Al pesado de tu novio!? Dijo gritando desde su cuarto
• Coté: ¡¡No!!….
• Bea: ¡Ahh que bueno!
• Yo: Parece que tu novio no lo pasa mucho, jajaja
• Coté: Son bromas entre ellos, aun cuando algo de eso hay, jajaja
• Bea: ¡Claudito!... ¡qué sorpresa!
• Yo: Hola Bea, que bueno que no soy el novio de Coté, jajaja

Alcanzamos a conversar unas pocas palabras y como si hubiésemos invocado al demonio, apareció el novio de Coté, el chico era bien parecido, rubio de ojos claros, al entrar se extrañó de verme en el departamento de Coté y con aires de suficiencia preguntó:

• Novio: ¿Tú quién eres?
• Bea: Mi nuevo novio, dijo mintiéndole descaradamente
• Coté: Sí, Bea me lo vino a presentar, se llama Alonso
• Yo: Hola, dije estirando la mano
• Novio: Hola, dijo dejándome con la mano estirada
• Bea: Vamos a mi cuarto y dejémoslos solos para que se aburran.

Bea tomó mi mano y me llevó a su cuarto, y entre risas me sentó en su cama sentándose a horcajadas encima de mis piernas.

• Yo: ¿Pero Bea, que pretendes?
• Bea: Aprovechar la ocasión, jejeje, además vengarme de Coté, jejeje
• Yo: ¿Estás segura?
• Bea: Contigo sí, además hace tiempo que no lo hacemos, jejeje
• Yo: Pero Coté y su novio…
• Bea: Lástima por Coté, en cuanto a él ¡que se pudra!
• Yo: No puede ser tan malo….
• Bea: Lo es, es un bicho raro que le hace Bullying Psicológico.
• Yo: ¿En serio?
• Bea: Sí pero mi amiga no lo quiere entender… lástima que te dejó por él, de otra forma seríamos felices los tres, jejejeje

Una nueva sorpresa en mi vida y qué sorpresa, mi ex novia con un tipo a todas luces deleznable…

Bea no me dejó pensar mucho cuando ya estaba encima de mí acariciándome con pasión y desnudándome apresuradamente, tanto que la ayudé para que no rompiera mi ropa, pues no podía llegar a casa desnudo como Adán, jajaja. Luego yo la ayudé a ella y la muy condenada me tendió en la cama, me hizo una comida de verga buenísima, después me pidió con una cara de putita que le comiera su húmedo y adornado coñito.

La verdad es que no la hice esperar, mientras le comía el coño Bea berreaba de placer sin ningún tapujo, tanto que en un momento sentí fuertes golpes en la puerta del cuarto y a través de ella escuchamos la voz del “noviete” diciéndonos.

• Eh chicos sean un poco más discretos, que aquí no podemos hablar

Bea se reía tapándose la boca y apretaba mi cara contra su monte de Venus, la verdad es que además de la impresión también me causo risa, aun cuando lo lamentaba por Coté, la verdad es que encontraba increíble que ella lo hubiera preferido a él en vez de mí, porque sinceramente yo era un poco más simpático sin llegar a ser el alma de la fiesta.

Después de la inoportuna interrupción del “noviete” retomé nuestro encuentro dándole besitos por el cuello mientras mis manos dibujaban su silueta con inusitada pasión, ella me acariciaba con igual ardor y reía calladamente mientras me decía cuanto quería que se la metiera, en especial porque ardía después de que le comiera el coño. Ahora Bea era toda pasión, estaba casi desenfrenada, recordándome a cada minuto que Coté estaba solo a pasos de nosotros con el estúpido del novio…

• Yo: ¿Quieres que te la meta?
• Bea: Sí, no he dejado de pensar en ella desde que me la metiste la última vez, quiero que me la metas nuevamente.
• Yo: Entonces guíala, porque la pobre es tuerta, jajaja.
• Bea: Sí, jajaja, bien, dijo tomando mi verga en sus manos

Amasaba sus tetas y perillaba sus pezones con pasión, mientras ella gemía e intentaba encajar mi verga en su coño … pero su placer y deseo incontenibles le impedía hacer un buen trabajo. Claro que con gran persistencia volvía a la carga, hasta que logró ensartarse en mi amiguito, dejando escapar un gemido apenas contenido. Comenzamos un mete-saca rápido… Bea jadeaba con fuerza intentando tomar aire cada vez más rápido, lo que junto con sus gemidos me anunciaba su inminente corrida, de pronto comenzó a gritarme en forma desenfrenada:

• Bea: ¡Métemela al fondo, me corroo… métemela bien adentro, me corrooo!!!!!
• Yo: No tan alto, Coté y su noviete nos puede escuchar.
• Bea: Que nos escuche la tonta, ella se lo pierde al estar con el pesado.
• Yo: Oye zorrita es tu amiga y mi ex.
• Bea: Es una tonta que debería dejar al saco de plomo, pero mejor para mí que lo sea, mmmm ¡ahh! .... ¡me corro…. me corrooo!!!

Bea tuvo una bulliciosa y descomunal corrida a solo pasos de mi Ex y su noviete, jejeje; se derrumbó sobre mí sin dejar de tener mi verga en su mano. Ambos nos quedamos quietos hasta que comenzamos a darnos caricias esperando a que se recuperara de su corrida. Estábamos en eso cuando sentimos la puerta de salida se cerraba con inusitada violencia.

• Bea: Debe ser el noviete que como de costumbre se enojó
• Yo: ¿Tú crees?
• Bea: Seguro es un idiota… ahora podemos seguir y gritar lo que queramos.
• Yo: ¿Pero Coté?
• Bea: Yo no dije nada cuando la hacías berrear, jajaja
• Yo: Es cierto, jajaja

Bea con mucha iniciativa tomó a mi amiguito y abriendo las piernas lo apuntó casi exigiéndome que la penetrara. Esta chica sí que le gustaba la verga, nuevamente pude admirar su depilado y adornado coño… estaba jugoso, demostrando su profundo deseo, por lo que comencé a penetrarla suave mientras ella se acomodaba… No sentí cuando se abrió la puerta de mi habitación, solo me di cuenta cuando una sombra interrumpió la luz de la ventana, miré y vi a Coté mirándonos, el morbo y lujuria que sentí al verla con ojos de deseo hizo que profundizara mis estocadas, mientras pensaba lo mágico que sería follarla a las dos… con cada empellón deseaba llegar hasta topar mis cojones en Bea…

• Yo: ¿Estás bien? la pregunté a Bea mientras miraba de reojo a Coté
• Bea: Si está muy bueno, siiigueee me contestó en voz baja esta vez.
• Yo: ¿Te gusta lo que ves Coté?
• Coté: Más me gustaría que me partieras el coño…
• Bea: ¿Y tu novio?
• Coté: Es un estúpido, lo eché por el escándalo que hizo porque ustedes estaban follando.
• Bea: Sí es un tonto… ¿quieres follar?
• Coté: Si, se los dije…

Continué con el mete saca mientras la besaba e intercambiamos nuestras lenguas, sentía como sus trémulas carnes vibraban, tal como lo hace un volcán previo a una erupción, sentía sus duras tetas engalanadas de piercing dando contra mi pecho, yo quería meterme dentro de su piel para sentir esa energía encerrada a punto de estallar… Bea se estremecía en cada acometida, eso me volvía loco, solo deseaba ser parte de ella, pronto sentí un naciente estremecimiento que anunciaba una segunda corrida… En eso Coté le metió mano a las tetas de Bea y un dedo en el culo de su amiga… En ese instante escuche los gritos de Bea corriéndose… Asimismo, yo también estaba al borde del colapso, así que bombeé con fuerza dos veces más y estallé… mientras iniciaba mi corrida puse una mano en el coño de Coté, el triángulo estaba hecho, me corrí como nunca, joder con Bea, ¡estaba hecha una fiera!

• Bea: Fue maravilloso, me dijo entre suspiros y apagados gemidos mientras se echaba a mi lado casi desfalleciente
• Coté: Ahora me comeré ese amiguito que está aderezado, jajaja
• Yo: Eres una guarra Coté, jejeje
• Coté: Lo aprendí de ti, jejeje

Coté fue por mi amiguito y lo chupó, lamió y limpió mientras Bea y yo nos quedamos abrazados intentando reponernos. Terminada la faena de Coté se tendió a mi lado y comenzó a pasarme sus tetas por la cara, indudablemente quería su ración de verga, pero yo aún estaba rehaciéndome después de la monumental corrida que había tenido con Bea.

Hice lo que pude hasta que luego de un rato y con la ayuda de sus suaves caricias me fui reencendiendo progresivamente, comencé a recorrer su cuerpo con mi boca, besando y lamiendo toda su exuberante voluptuosidad, le besé y lamí su exquisito culo, su abultado Monte de Venus, sus pechos coronados por unos hermosos pezones sonrosados, su cara sus ojos…. toda ella, de vez en cuando miraba Bea que no había dejado de mirar.

Coté por su parte me acarició con apasionada ternura, intentó nuevamente mamarme la verga, la que ya despertaba de su letargo, se puso sobre mí y ayudada por una de sus manos se la metió con presteza en su coño, durante todo el trayecto hacia su interior, me miró a los ojos y me dijo:

• Coté: ¿Bea te gusta tanto su verga como a mí?
• Bea: Mmm puede ser, jejeje.

Comenzó a cabalgarme con fiereza mientras yo aprovechaba de alternar mis caricias de entre sus tetas y su tremendo culo, ¡Uhmmm! que placer era poseer ese cuerpo llamado a provocar las pasiones de los hombres … cada uno de sus poros exudaba lujuria, era ver a la diosa Afrodita personificada en Coté, cada cierto tiempo miraba de reojo hacia su amiga como invitándola a participar.

Bea se incorporó y comenzó a amasarle las tetas a Coté al mismo tiempo que yo, luego le dio un jugoso beso a Coté y acompaño una de mis manos en el culo de Coté. Coté por su parte gemía y gozaba las caricias de culo y tetas propinadas a cuatro manos, mientras me cabalgaba a su propio placer. De pronto comenzó a boquear y gemir alto anunciando que se corría, la verdad es que no alcancé a hacer mucho ya que de pronto se derrumbó sobre mi pecho, sin darme la oportunidad de correrme nuevamente, por lo que la tendí en la cama junto a Bea, y comencé a pajearme para correrme sobre sus tetas.

• Bea: ¿Qué haces cochino?
• Yo: Me voy a correr sobre sus tetas
• Coté: Eres un guarro, jajaja
• Bea: Mmm sí que cochino… ¿alcanzará para cuatro tetas?
• Yo: Yo creo que sí, jejeje
• Coté: Sí, no le hago asco a la leche de mi macho.
• Bea: ¡Vaya con la zorrita!
• Yo: ¡Las zorritas!, alcancé a decir antes de que les callera mi leche en sus tetas.

No fue mucho, pero me alcanzó para las cuatro tetas… luego las muy zorras se giraron para comerse las tetas sazonadas con mi leche… “el cuadro plástico” fue toda una pasada, tanto que mientras lo hacían yo les amasé el culo a las dos de puro goloso.

Seguimos con los juegos eróticos, incluso ellas se comieron el coño mutuamente en un precioso sesenta y nueve, lo que pasado un rato revivió a mi amiguito y no pude resistir sus encantos, por lo que acto seguido, las coloqué en cuatro patas con sus culos apuntados al borde de la cama me paré a la orilla les ensalivé sus ortos metiendo mis dos índices. Cuando creí oportuno metí mi verga primero a Coté mientras a  Bea continuaba con mis dedos que exploraba hasta donde podían.

Comencé a cabalgar a Coté solo para mi placer, luego cambié de lugar metiéndosela a Bea y seguí jugando con el orto de Coté…  yo nunca lo había hecho como tampoco ellas, pero se dejaban culear alternadamente con lujuria, tanta que se besaban y manoseaban en la medida de los posible…. No sé si lo estaba haciendo bien, pero creo que sí, pues Bea ronroneaba, gemía y boqueaba como nunca y en cuanto a Coté, indudablemente disfrutaba, pues ella gritaba:

• Que rico, dame más …rápido, dame más rápido
• Yo: Lo que tú quieras, ¡Ufff!, ¡que culo te gastas! Le dije mirando su magnífica cola.

Nuevamente intercambié a Coté por Bea, pese a que ella no quería, pero intentaba ser equitativo, cosa que Bea agradeció mientras me miraba con una cara afiebrada que reflejaba algo así como deseo… la verdad es que no puedo precisarlo, solo creo que ella quería ser la culeada mientras su amiga la miraba.

• Bea: Sigue… sigue…- ¡sigue que me corro! dame fuerte, me decía mientras se “dedeaba” el clítoris con una mano.
• Yo: Te voy a dar hasta que te rompa tu culito, zorrita.
• Bea: ¡Ssí pardillo! … rómpeme el culo ¡Ahhh!

Una vez que se corrió como una burra me cambié nuevamente y comencé a darle desenfrenadamente a Coté con el fin de llenarle ese portento de culo con toda la leche que me pudiese quedar en el cuerpo, hasta que de pronto escuché a Coté decirme:

• Me corro corazón me corro…

Me apuré al máximo estallando en un nuevo orgasmo, derramando lo que quedaba mi leche en el delicioso orto, quedando finalmente sin fuerzas para nada más. Los tres desfallecientes descansamos un buen rato, conversamos de la universidad, de lo bien que lo habíamos pasado hasta que nos fuimos a duchar juntos

Con algo de dificultad entramos los tres a la ducha, sin parar de acariciarnos mis zorritas hacían lo posible para ducharnos juntos … era como si quisieran aprenderse de memoria nuestros cuerpos, fue en ese momento que le pregunté:

• ¿Le gustó?
• Bea: Me encantó Claudio.
• Coté: A mí también me encantó, pero quiero dejarte claro que solo somos amigos.
• Bea: Amigos con ventajas jajaja.
• Yo: Bueno somos amigos con ventaja.

Salimos de la ducha sin otro ánimo que tomar un refrigerio y después cada uno a estudiar, ellas en su casa y yo… ¡no lo sabía aún! Monté mi moto y me fui a un café literario, pedí una gaseosa con pastelillos y me instalé a estudiar y leer lo que tenía por delante.

Una chica muy mona fue la que me atendió, estuve tentado en entrarle, pero ya tenía suficientes problemas como para buscar otros. A la hora del cierre me tuve que marchar, era tarde, casi las nueve, por lo que no me quedó más alternativa que volver a casa. Obviamente el abuelo me retó en cuanto entré y me mandó a mí cuarto, afortunadamente Oma intercedió calmándolo y luego me llevó un emparedado a mi cuarto para que no me acostara con hambre.

Pese a todo había sido un buen día, por lo que me dormí plácidamente hasta que cerca de la media noche, alguien me movía para despertarme, por supuesto era Fer que se sentaba en mi cama para luego besarme con dulzura, ante lo cual yo me dejé, pero acto seguido le dije:

• Eres una loca, primero me pones mal con los abuelos y luego vienes a besarme…
• Fer: Perdón Claudito, es que no sé qué hacer…
• Yo: No molestarme más o dejar de hacerte la indecisa.

Luego la besé y tomándole una de sus suaves tetas, la acaricié con pasión, ella se dejó hasta que le dije:

• Vete a acostar, los abuelos duermen ligero y poco… mañana será otro día.
• Fer; ¿Estoy perdonada?
• Yo: Sí, ahora vete

Dormí como un lirón, no sé si fue el efecto del beso o que había follado hasta el agotamiento, lo bueno es que descansé. Al día siguiente me desperté muy temprano por lo que salí a trotar a un parque cercano, fueron solo 25 minutos, pero sirvieron para que me despejara de todas mis preocupaciones, solo que no pude dejar de pensar en Fer y Nora… ¿Qué pasaría si me quedo con Fer?... ¿Qué pasaría si me quedo con Nora?, la verdad es que los escenarios que surgían no me gustaban mucho, pues el tener a una de ellas no me aseguraba tener la otra… Pero de alguna forma aún cuando estaba locamente perdido por Fer, Nora no me era indiferente, ella era como la contraparte de Fer, la que mantenía el equilibrio…. todo me llevaba a querer tener a las dos. Pero en este mundo mi deseo estaba prohibido, incluso estar solo con Fer tampoco era muy aceptado.

Llegué de mi trote aún dentro de horario para la ducha, al entrar saludé a Oma que ya estaba trajinando para hacernos el desayuno, me fui sacando el chándal y al ver a Fer le sonreí y saludé casi de pasada, como ella a mí… pero me detuve y pensé hacerla sufrir, jajaja… como estaba sudado jugué a querer abrazarla, ella muy jovial me siguió el juego haciendo ademanes de defenderse y me amenazó con un cucharón de madera y otras tonterías… En tanto Oma que es una mujer increíble se reía de nuestro juego, ella tiene el carácter preciso para ser una abuela tierna y cariñosa, pese a ser una joven de sesenta y dos años y que por supuesto conserva en gran medida su belleza, aparentando diez años menos… la verdad es que no me había fijado hasta ahora que los genes de ella se habían replicado en Fer, pues tenían los cabellos rubios, los ojos claros y una voluptuosidad que no se había aún marchitado con los años… ¿sería ella de joven una mujer dinámica y cautivadora como Fer?

Despues de abrazar y besar en ambas mejillas a una “asquienta FEr”, fui a cuarto de baño y entré a la ducha como de costumbre, me tenía que duchar con cierta celeridad para salir a la hora de costumbre, por lo que me acordé de mis años de servicio militar voluntario como estudiante y aceleré la marcha.

Salí de la ducha cruzándome con Fer en el pasillo, ella me miró y puso cara que yo conocía desde mi más tierna niñez, era esa “cara de maldadosa”, y sin mediar palabra me tomó de la cara, me dio un beso que no era de primos y luego aprovechándose de mi estupefacción, tomó la toalla que llevaba al cinto arrancándola para luego tirarla lejos

• Hola primito, jajaja, veo que te pones contento de verme, jajaja
• Yo: ¿Pero qué haces? ...
• Fer: Vamos que estás muy bien, como para mirarte, jajaja
• Yo: ¡Oma está en la cocina! …
• Fer: Lo sé para allá voy, jajaja

Recogí la toalla que estaba tirada cerca de la puerta de la cocina, mientras ella arrancaba, reaccioné rápidamente para ir a recogerla, al tiempo que juré que me las pagaría, afortunadamente Oma no se había asomado y el Abuelo seguía en cama.

Algo mas tarde, estar listo para salir me despedí de Oma y lo iba a hacer de Fer, cuando vi que ella estaba parada en la puerta con su chaqueta de cuero en la mano sonriendo

• Fer: Estoy lista
• Yo: ¿Lista para qué?
• Fer: Para que salgamos
• Yo: ¿Quién te dijo que iríamos juntos?
• Oma: Ya niños no peleen, se van juntos y se acabó…. Que tengan un buen día.
• Yo: Bien Oma… vamos, dije resignado agregando, que tú también tengas un buen día.
• Fer: Vamos primito, adiós Oma.

Bajamos al estacionamiento donde estaba mi moto y la verdad es que después de verme obligado a llevarla, aún tenía ánimos de tomar venganza, especialmente después de haber mi bella arpía había logrado que nos fuéramos juntos… Por lo visto Fer trataba de tomar el control de mí nuevamente. Pensaba en eso cuando al pasar por en medio de las bodegas, fui yo el que tomó la iniciativa y abrió la puerta de la nuestra, arrastrando a Fer al interior.

• Fer: Tenemos que irnos, o llegaremos atrasados
• Yo: Sí, después de que pagues por tus actos
• Fer: ¿Yo?... ¿Pagar qué?... tú empezaste
• Yo: Lo de la toalla y de la ida a la Uni
• Fer: Lo de la ida es un premio para ti pardillo, jajaja y lo de la toalla… solo una bromita por lo del abrazo asqueroso que me diste, jajaja

No le dije nada más y la abracé besándola con pasión, también dejé volar mis manos por su humanidad, el sentir sus tetas que vibraban junto con su corazón, el tomar su maravilloso culo, el acariciar su cintura y el sentir su boca me volvían loco… ella pese a intentar evitarlo por un momento rápidamente se dejó llevar, hasta que sin más, fui yo el que se contuvo y la dejé, luego di media vuelta y salí rumbo a mi moto, ella quedó un poco perpleja, pero luego se recompuso y salió tras mío.

No nos hablamos por el resto del camino, creía que le había arrebatado la iniciativa, o por lo menos pensé que aún no controlaba mi viva. Llegamos como de costumbre a la uni, afortunadamente el taller que debía asistir me quedaba cerca, pero en cambio Fer debió ir corriendo, lo que obviamente atrajo las miradas de muchos chicos, e incluso de algunas chicas… el verla correr era en si un espectáculo… hasta correr lo hacía con grácil belleza.

Durante la jornada casi no la vi, pues ella junto a Nora estuvo ocupada en sus cosas… a la única que me encontré fue a Coté, la que se comportó como “una señorita” y compartió conmigo y Rorro a la hora de, como también la mayoría de los recreos en que nos topamos.

Por la tarde Fer me avisó que se iba con Nora a “no sé qué” y yo con Rorro fuimos a un partido de futbol en la facultad, enfrentándonos a los chicos de electrónica… lamentablemente perdimos 5x3, incluyendo un autogol mío por intentar evitar uno de ellos, como diría un locutor radial “cosas del futbol”, a eso de las seis volvimos con Rorro a casa, bueno el a la suya y yo a la mía.

Entré como de costumbre y al pasar por la cocina vi un precioso culo que revisaba algo en la parte inferior del refrigerador, por lo que con mi ánimo vengativo aún no aplacado, fui y le di un sonoro palmazo a Fer…. El sonido fue música para mis oídos, como también el fuerte ¡Ay! Que profirió ¡¡Oma!!!...

• Oma: ¿¡¡¡Qué fue eso chiquillo de moledera!!!?
• Yo: Perdón Oma, fue un error de identidad, pensé que era Fer
• Oma: Sabes que juego de manos es de villanos… no le debes pegar en el culo a tu prima.
• Yo: Perdón Oma linda, es que ella también hace… bromas
• Oma: Jajaja, bueno, por lo menos me confundiste con mi nieta, lo consideraré un alago, jajaja
• Yo: Sí Oma, ella salió tan bella como tú…
• Oma: ¿La encuentras bella?
• Yo: Sí claro, solo un ciego podría negarlo…
• Oma: ¿Ella te gusta?
• Yo: ¡Nooo!, es que sinceramente es bonita, ¡pero de gustarme no!
• Oma: ¿Estás seguro?
• Yo: ¡Pero Oma por qué preguntas eso!, obvio que no me gusta ¡es mi prima!
• Oma: Mira Claudito, no soy ciega, no soy tonta y como bien sabes ¡más sabe el diablo por viejo que por diablo!
• Yo: Oma pero tu eres súper joven y te repito que ella es mi prima… no me imagino que viste, pero no.
• Oma: Solo veo como la miras y como ella te mira…
• Yo: Oma necesito ir al baño, permiso, después hablamos.

Dije tratando de evitar seguir con la conversación que me complicaba, pero para mí mala suerte justo llegó a casa Fer que venía de “algún lugar”. Ella con su característica entrada precipitada, dejó su mochila en un sillón de la sala ingresando a la cocina, saludó a Oma con un acelerado hola, y a mí con un beso en la mejilla que rozó mis labios, el problema es que de inmediato mi cara se ruborizó, a lo que se agregó que mi primita me dijo:

• Extrañé el no regresar contigo pardillito.
• Oma: A eso me refiero, jajaja, ve al baño “pardillito” dijo con algo de ironía.
• Yo: Voy…
• Fer: ¿Qué pasa?
• Oma: Ven siéntate, yo te explico, jajaja, ¿un té?

No escuché el resto, pero me lo imaginé, la verdad es que mientras en el baño hacía mis necesidades fisiológicas, algo sin urgencia pero obligado por las circunstancias, ellas hablaban, yo quería desaparecer. Primero mi madre y ahora Oma descubría mis sentimientos, ¿Tan transparente soy?... Terminada mi “obra maestra”, no podía seguir en el baño eternamente, por lo que salí directo a mi cuarto y me encerré hasta la hora de cenar, momento en que Fer tocó a la puerta y asomándose para decirme:

• Pardillo hora de cenar…
• Yo: Okey gracias
• Fer: ¿Qué le dijiste a Oma?
• Yo: Nada ¿por qué?
• Fer: Porque la última hora me interrogó acerca de mis sentimientos hacia ti
• Yo: ¿Qué le dijiste?
• Fer: Que eres mi primo preferido y que te quería mucho
• Yo: ¿Eso es todo?
• Fer: En un resumen muy apretado, jajaja… pero ella sospecha algo…
• Yo: De que me gustas…
• Fer: Sí de que me gustas y yo te gusto, tenemos que ser cuidadosos
• Yo: ¿Te gusto?
• Fer: Pardillo, a estas alturas creo que lo sabes perfectamente.
• Yo: Dilo…
• Fer: Sí, me gustas, ¿contento?... vamos a cenar

La cena fue bastante difícil para mí y creo que para Fer, pues si bien el Abuelo pasaba de la situación, Oma nos miraba y sonreía o algo así, yo por mi parte trataba de evitar mirar a Fer y ella intentaba ser todo lo natural que puede ser ella, jajaja, la verdad es que estábamos fritos o simplemente descubiertos.

Terminada la cena nos ofrecimos de voluntarios para lavar los platos y ordenar, lo que Oma aceptó gustosa y se fue con el abuelo a ver las noticias o lo que él quiera, nos miramos y sin mediar palabra nos besamos como si el mundo se terminara en ese momento, estábamos los dos morreándonos de lo lindo cuando sentí un ligero carraspeo, ¡era Oma!

• Oma. No he visto nada, jajaja, solo es mi imaginación permiso voy por un té, dijo con ironía
• Fer: Oma, es que…
• Oma: Ya les dije que no he visto nada, jajaja
• Yo: Pero Oma.
• Oma: Par de pardillos, que me pueden decir que me convenza de lo contrario a lo que sospechaba y ahora vi… no le diré a nadie, pero deben comprender que se meten en un gran lio… mientras esté el abuelo deben calmarse, porque él no lo entendería
• Fer: Sí Oma… ¡ves lo que haces pardillo!
• Yo: ¿Y qué hay de ti?
• Fer: Pero yo soy la chica… y tú…
• Yo: No soy el único responsable… incluso eres mayor que yo…
• Oma: No peleen por tonteras, ya tendrán tiempo para esto, par de lesos…
• Yo: ¡Oma, perdónanos!
• Oma: No tengo nada que perdonar, a veces las cosas se dan así, no es lo óptimo, pero es la realidad, muchos no comprenderán su cariño, pero no se limiten por eso.
• Fer: ¿Lo crees Oma?
• Oma: Sí, pero no sé si su abuelo lo cree.

Lavamos los platos, ordenamos y cuando ya estábamos listos no volvimos a besar, no eran besos fogosos o con alguna intención sexual, yo diría que eran tiernos e incluso cándidos, estuvimos algunos minutos en eso cuando finalmente nos fuimos a estudiar a la sala hasta como eso de las 2230 horas, momento en que yo definitivamente tenía sueño y no me entraba nada más. Fer se quedó un poco más haciendo ¡no seque diseño de un circuito!

Entré al baño, me lavé los dientes y todas las cosas que uno hace en ese proceso, cuando de pronto entró Fer y se me cuelga del cuello estrellándome contra la única pared libre de artefactos y me besó con pasión… La verdad es que como siempre me sorprendió

• Yo: ¡Fer estás loca!, acabamos de ser sorprendidos por Oma y vienes acá para que el abuelo nos sorprenda.
• Fer: Vamos solo es el beso de buenas noches, no seas miedoso, además el abuelo no muerde.
• Yo: A ti, lo que es a mí, la verdad es que no lo sé.
• Fer: Bueno amorcito, buenas noches
• Yo: ¿Amorcito?
• Fer: Sí, la verdad es que ¡sí!...

Ahora fui yo el que la besé y estreché entre mis brazos, sintiendo su cuerpo tibio pegado a mí, lo que provocó que mi amiguito se despertara pese a que yo quería ir a dormir. Ella sin duda sintió mi verga que se pegaba a su pubis, pese a la ropa puesta, por lo que echó su culito atrás para despegarse… pero yo ya estaba muy caliente y sin más tomé su precioso culo y la pegué más a mí.

• Fer: No te portes mal pardillo, es solo un beso
• Yo: ¿Pardillo y no amorcito?
• Fer: Cuando intentas empalarme… es solo pardillo, jejeje, me voy a dormir, sueña conmigo, jejeje
• Yo: Buenas noches corazón.

Hacía tiempo que no tenía sueños húmedos, creía que eran cosa del pasado, pero amanecí totalmente pringado, afortunadamente coincidió con el cambio de sábanas y no fui sorprendido por nadie.

Al desayuno, como de costumbre estaba Oma preparando unos deliciosos huevos con chorizo, pan caliente comprado por el abuelo cuando nosotros aún nos levantábamos, café con leche y su mirada expectante, la verdad es que no sabía qué hacer, también Fer se encontraba un poco incómoda ante la atenta mirada de Oma

• Oma: Vamos salúdense…
• Yo: Hola Fer…
• Fer: Hola pardillo…
• Oma: ¿Así se saludan?
• Yo: ¿Pero el abuelo?
• Oma: Está acostado leyendo el periódico…
• Fer: Hola corazón…
• Yo: Hola linda ¿soñaste conmigo?
• Oma: ¡Pero que par de gandules! … ¿No hay un beso?

Ante eso me levanté acercándome a donde estaba sentada Fer y le di un piquito candoroso, luego le sonreí, ella hizo lo mismo y ambos miramos a Oma

• Oma: ¡Uhmm!, un poco mejor, par de pardillos.
• Fer: Pero nos dijiste que debíamos tener cuidado de revelarnos al mundo
• Oma: Pero no conmigo, soy su Oma y los voy a querer siempre

Desayunamos y salimos a la uni, fuimos en el coche de Fer pues el día estaba nublado con llovizna y yo aún no tenía una chaqueta de cuero, jajaja, ¡algún día! Como siempre mi primita me tiró las llaves para que condujera.

Increíblemente por primera vez en el semestre llagamos con tiempo a la uni, por lo que nos bajamos y entramos sin correr, en el trayecto nos encontramos con Nora, la que al verme me dio un morreo de ¡padre y señor mío!, ante lo cual Fer.

• Oye Nora, no te comporte así con Claudio que es mi novio
• Nora: ¡¡Novio!!.... ¿En serio?
• Fer: Bueno algo así, es que nos sorprendió Oma cuando nos besábamos en la cocina y no quedó más que reconocer que algo teníamos.
• Nora: Los felicito par de lesos, ya estaba bueno, jajaja
• Yo: No entiendo, lo estás tomando demasiado bien después de lo que hemos….
• Nora: Follado, jajaja…. La verdad es que ustedes son tal para cual, y como te dije, te prefiero compartido a no tenerte pardillo…
• Yo: ¿En serio me compartirías con Fer?
• Fer: ¡Pardillo!, debes preguntarme a mí si te dejo compartirte con alguien.
• Nora: A estas alturas creo que no tiene muchas alternativas…
• Fer: ¿Por qué dices eso?
• Nora: Simple, si yo voy de novia de tu pardillo, nadie dirá nada si andamos los tres juntos pues somos amigas, ustedes podrán disfrutarse el uno al otro sin levantar reproches ni nada… Además, a ti aún te aterra tener sexo con el pardillo, jajaja
• Fer: Oye no digas eso que alguien puede oírte, aunque puedes tener un poco de razón, pero de ahí a seguir follando con mi pardillo, no lo veo bien.
• Nora: El tiempo me dará la razón, sobre todo que tu pardillo es muy caliente
• Yo: ¡Oigan, estoy aquí!, puedo decir algo…
• Nora: Sí, pero la decisión siempre será de nosotras, jajaja
• Fer: Sí pardillo, tú serás nuestro hombre hasta que nos canses, jajaja
• Yo: Ustedes son un par de arpías manipuladoras, jajaja.
• Fer: Lo somos, jajaja, en todo caso Nora, preferiría que no tengas sexo con Claudio, ya que en la práctica soy su novia, ¿me entiendes?
• Nora: Sí Fer, te entiendo… lo siento pardillo, es una lástima siendo tan bueno como eres….

La conversación era sacada de un mundo alternativo donde las chicas se comportan como los chicos, la verdad es que las dos “arpías” no solo no se enojaban entre ellas, si no que su relación se hacía cada vez más fuerte, eso nunca lo había visto entre chicas, era una locura. Por otro lado, el que las dos chicas más bellas de la universidad hablaran de compartirme no podía ser más halagador, jajaja

En todo caso me quedó claro que la situación con Fer era más seria de lo que yo siquiera sospechaba y que por las conclusiones que saqué de la conversación, ya no podía ir por el mundo follando a quién quisiera, por lo que todos mis esfuerzos se debían centrar en Fer.

Que les puedo decir, el resto de la semana fue más de lo mismo, yo con ganas de follarme a mi bella arpía y ella regalándome besos a escondidas, o toqueteándonos sobre la ropa, la verdad es que me gustaba, pero a los pocos días yo ya podía caminar por los techos de caliente que estaba; incluso cuando salimos con los abuelos el viernes a cenar, le acaricié las piernas bajo la mesa hasta que ella con sus uñas me indicó que no podía subir más arriba de donde estaba llegando. Pero no soy un chico que se rinda fácilmente y algo más tarde fuimos a bailar juntos, mintiéndole a los abuelos al decirles que nos reuniríamos con otros chicos, pero la realidad fue una velada a solas, en la cual traté por todos los medios de concretar todos mis deseos por ella.

No puedo negar que disfruté de su compañía, como también de sus besos y caricias, sin dejar de mencionar que los bailes fueron una buena excusa para continuar mi asedio a por ella, aprovechando todos aquellos que nos permitieron el roce de nuestros cuerpos. Ella sonreía y me coqueteaba con una cándida ternura, pero yo no solo quería el roce y su coqueteo… Tal vez estaba mal acostumbrado con las otras chicas y Fer era diferente a ellas, puede ser que las ataduras a los tabúes sociales y familiares la frenaran y por ende no me dejaba entrarle por ningún lado.

Lo extraño es que a Fer nunca la vi como una chica que se fijara en el que dirán, como también nunca noté que fuera una chica que la frenaran las reglas, o una chica que se amilanase aun cuando estuviera rodeada de hombres. Es más, ella siempre manejó las situaciones en que tuviera que enfrentar dogmas, reglas o fronteras con casi total libertad, como nunca la vi limitar sus actitudes de cariño a los chicos que a ella le gustaban o simplemente jugaba a dejarse querer, como nunca obedeció por completo las reglas de su casa o la mía.

• Yo: Fer, quiero hacer el amor contigo…
• Fer: No Claudito, aún no estoy segura de hacerlo contigo.
• Yo: Pero te quiero y estoy seguro que tú también me quieres (esto último, la verdad es que no estaba seguro… digamos no estaba seguro de nada)
• Fer: Sí te quiero, pero aún no estoy lista para ese paso…
• Yo: Pero me tienes… no sé como decirlo…
• Fer: ¿¡Caliente!?, jajaja
• Yo: ¡Sí!, muy caliente…jajaja
• Fer: Si me quieres tendrás que esperar, es más, si estás tan caliente puedes visitar a Nora
• Yo: ¡Nora! ¿Segura de lo que estás diciendo?
• Fer: No, pero aún no puedo aliviar tu fuego interno, lo siento... ¿Me perdonas?
• Yo: Sí claro, pero preferiría hacerlo contigo…
• Fer: Lo sé, pero aún no estoy lista.

Por más que insistí varias veces los resultados fueron los mismos, no soltaba prenda más allá de unos morreos a escondidas en la bodega del departamento, unos besos furtivos a escondidas del abuelo, o cuando salíamos solos a algún lugar, es más, ya ni siquiera me mostraba su anatomía al desnudo.

Después de una semana de trabajos y estudios, el día viernes los abuelos salieron a cenar y nosotros con Fer a un Karaoke… acompañados de Nora y Rorro (no lo podía creer, ella los había invitado), este último apareció con Coté, la cual se veía como la Coté habitual… al rato descubrí había roto con su novio, el que había resultado no ser el amor de su vida y estaba de los más relajada.

Al principio lo pasamos bastante bien, cantamos, bailamos y bromeamos “de lo lindo”. En fin, todo estaba en un ambiente de amistad, pese a que Coté coqueteó conmigo descaradamente. Fer me miraba con desagrado por la situación, ante lo cual no me quedó otra que besar a Nora delante de todos, el morreo lo hice a instancias de la misma Fer, y con el propósito de dejarle claro a Coté que yo ya no estaba disponible y menos si ella estaba acompañada de Rorro.

De regreso pasamos a dejar a Nora, la que insistió que la acompañáramos a un último trago, algo así como dicen en el campo: “el del estribo”. Nos bajamos y noté que Nora estaba muy alegre ¿serían las copas que tomamos?, como también, que sus padres como de costumbre estaban operando en la clínica y no aparecerían hasta el mediodía del día que recién se iniciaba.

• Nora: ¿Qué desean tomar chicos?
• Fer: Una cerveza
• Yo: Solo una gaseosa, pues soy el conductor designado, jajaja

Conversamos en la cocina mientras preparábamos unas bocatas y las bebidas, luego pasamos a la sala donde nos sentamos los tres en el sofá, aparentemente todo estaba tranquilo y amistoso hasta que la loca de Nora nos dice:

• ¿Y cómo está el sexo
• Yo: ¿¡Nora a qué esa pregunta!?
• Nora: Es que no veo el brillito en los ojos de mi amiga, jajaja
• Fer: No lo hemos hecho, así de simple.
• Nora: Claudito debes estar arañando las puertas, jajaja… ¿Y por qué no Fer?
• Fer: Yo no estoy lista aún…
• Nora: ¿Pero qué problema tienes?
• Fer: ¡Ehh! … solo te lo puedo decir a ti…
• Nora: Claudito puedes traerme hielo del refrigerador y demorarte un rato.
• Yo: Pero por qué no me puede decir a mí…
• Fer: Es que me da “cosa” …
• Yo: Pero Fer…
• Nora: No sea pesado y tráeme hielo, porfa… jejeje
• Yo: Bueno

Fui a la cocina, busqué el hielo, revisé el calendario de pared, vi el tablero de recados, miré los adornos magnéticos del refrigerador, gasté todo el tiempo que pude hasta que escuché un “ven Claudito” de Nora.

• Yo. ¿Todo aclarado?
• Nora: Sí, pásame el hielo y siéntate.
• Yo: ¿Entonces?
• Nora: Nada que no se pueda solucionar, por lo pronto convencí a Fer de darte una solución transitoria que no le afectará a su pequeño problema, como tampoco a su mar de dudas, jajaja
• Fer: Oye, ¡no seas así!
• Yo: Entonces…
• Nora: Fer te hará sexo oral para calmar la bestia que tienes entre las piernas, jajaja
• Fer: Oye así suena muy mal…
• Nora: ¿Lo quieres a él?
• Fer: Bueno sí, si lo quiero…
• Nora: Pero aún no estás lista del todo, por lo que mi solución es simple y no te afecta para nada en tus temores y todo lo demás… ¿O no?
• Fer: Sí tal vez… bueno creo que tienes razón
• Nora: Bueno Claudito siéntate aquí, dijo indicándome el lugar central del sofá.
• Fer: Es que me da un poco de asquito… la idea del sexo oral
• Nora: Vamos no es tan terrible, es como chuparse el dedo, ah que sí pardillo.
• Yo: La verdad es que no lo sé, pero supongo que debe ser así
• Fer: Ves él no lo sabe…
• Nora: ¿Dejarás que el pardillo vaya a follar a Coté u a otra furcia?
• Fer: No por ningún motivo, es que igual me debo hacer a la idea
• Nora: No sigamos dándole vueltas… Pardillo sácalo de su encierro para que ella lo vea…
• Yo: Pero si lo ha visto
• Nora: Si lo dejas encerrado no podemos continuar, ¡Capisci!
• Yo: Sí claro

Saqué a mi amiguito de su encierro, el que salió semi erecto, y con expectativas de endurecerse rápidamente. Ambas lo miraron, pero ninguna hacía nada por lo que lo tomé con mi mano y comencé a pajearme lentamente hasta que no me quedó otra que preguntarle a Fer

• Yo: ¿Me la chupas?
• Fer: Es que me da asco…
• Nora: Tómasela para que te acostumbres
• Fer: No lo sé… es que…
• Yo: ¿Nunca has tomado una?, pregunté con incredulidad
• Fer: Bueno, la verdad es que así… así…
• Nora: No, nunca ha tomado una pardillo, dile la verdad Fer, será más simple.
• Fer: La verdad es que no, nunca he tomado una…
• Yo: Pero tus novios…
• Fer: Hacían lo que yo quería y nada más…
• Yo: Pero con lo cancheros que eran… ¿No?
• Nora: Ya te lo dijo pardillo ¡No!

No entendía nada, Fer no había tomado nunca una verga en sus manos y aparentemente tampoco metido una en su boca… ¡era increíble!, la musa de muchos, la chica popular, la belleza envidiada por todas y perseguida por muchos ¡era más pardilla que yo!

• Nora: ¡Vamos Fer! dale, que se nos enfría el pardillo
• Fer: Es que no sé…
• Nora: Mira es simple, dijo tomándome la verga y meneándola suavemente, ¿Te gusta pardillo?
• Yo: ¡Sí, me encanta!, pero…
• Nora: ¡Dale Fer!, dijo tomándole una mano y colocándola en mi verga

Si ya estaba excitado, el contacto de la mano de Fer fue un latigazo de adrenalina que me recorrió mi espinazo y mi amiguito que se endureció por automático, al mismo tiempo que esto ocurría suspiré de emoción

• Nora: Bueno Fer mueve la mano

Mientras Nora la miraba, Fer comenzó a mover la mano, lo hacía suavemente y sin apretar mucho, tal vez demasiado suave….

• Fer: Claudito, está bien así o te molesta algo, ¿sí?... es la primera vez que hago esto, dijo mientras miraba a mí amiguito.
• Yo: ¿Puedes apretar un poco más y echar saliva?
• Fer: ¿Saliva?
• Nora: ¡Para que no lo desolles vivo mujer! ...
• Fer: ¿Cómo?
• Nora: Mírame, dijo dejando caer saliva de su boca sobre la cabeza de mi verga, luego agregó: Ahora tú ensaliva tu mano…

Así lo hizo Fer, consiguiendo lubricar mi verga para luego reiniciar el movimiento suave pero continuo, me movía la piel de mi verga como Nora le iba diciendo.

• Fer: ¿Así Nora?
• Nora: Sí así, también puedes dejar descubierto su cabecita…
• Fer: ¿Cómo?
• Nora: Mira pardilla, así, dijo y me corrió entero el prepucio hacía atrás, dejando a la vista mi glande en todo su esplendor.

El único problema que al forzar el movimiento y dejar todo al descubierto, las dos manos se entorpecieron y ocasionó que me doliera

• Yo: Ay… más suave
• Nora: Perdón pardillito, sana, sana dijo dándome un besito en la punta, luego le dijo a Fer, hazle también sana sana…
• Fer: Jejeje… sana sana colita de rana, jejeje, dijo y besó la punta de mi verga, creí morir de goce
• Nora: Jajaja, ¿sanó?
• Yo: Casi, con un beso más de cada una, seguro.

Fer besó nuevamente mi amiguito y luego Nora sonriendo imitó el gesto, tenía a dos bellezas dándole besos a mi amiguito y pajeándolo, no podía pedir más… ¿o sí?

• Yo: Puedes poner más saliva
• Nora: Sí dale pardilla, ponle más saliva en la mano así lo lubricas

Fer escupió más saliva en su mano y miró a Nora, la cual con una sonrisa divertida escupió también, para volver menear mi amiguito.

• Fer: ¿Ahora sí?
• Yo: Mmm sí, tal vez un poco más rápido.
• Fer: Bien…
• Nora: No tan rápido, el pardillo es bueno, pero así se va a correr en segundos… sí así sí, dijo al ver una cadencia adecuada.

Fer continuó con el pajeo aconsejada por Nora que nos miraba entre asombrada y divertida por la situación digna de Ripley; “la osada Fer” era tan pardilla como yo, pero la situación no avanzaba, por lo que Nora dijo:

• ¡Bueno pardillo!...... a ver...... esto no avanza mucho así que ¡Me la meteré en la boca!
• Fer: ¿Qué harás?
• Nora: Lo que no te atreves pardilla, si no, no avanzaremos en las clases, por lo que veo ya sabes todo lo que se necesita saber de pajeos… aprobaste “Pajas I”, jajaja

Nora se inclinó sobre mí metiéndose mi verga en la boca aún con la mano de Fer en ella, la cual intentó retirar la mano, pero Nora se lo impidió, tenía su boquita apresando mi glande y sus labios alcanzaban a rozar los dedos de Fer y así comenzó a mover la cabeza acompasando el movimiento de Fer…

A ratos Nora sacaba su boquita de mi verga y miraba a Fer que estaba como hipnotizada moviendo a mi amiguito, luego se la volvía a meter, me lamía el glande y parte del tronco, dejando escurrir saliva que embadurnaba la mano de Fer.

• Fer: ¿Te gusta mi amor?
• Yo: Sí claro, es tremendo…
• Nora: Mmm sí ya le está saliendo líquido pre seminal, seguro que le gusta…
• Fer: ¿No te da asco eso?
• Nora: No es delicioso, pero no, no me da asco, prueba no seas tonta.
• Fer: ¿Cómo?
• Nora: Pásale la lengua a la punta de su cosa

Fer por primera vez actuó menos indecisa y pasó su lengua por el frenillo de mi glande hasta llegar a la punta, bajo la atenta mirada de Nora que una vez retirada la cabeza de Fer repitió lo que había hecho su amiga, les juro que estuve a punto de correrme.

• Nora: ¿Y?
• Fer: La verdad es que no es tan malo
• Yo: Es maravilloso…
• Nora: Nos referimos al sabor pardillito, al sabor, jajaja
• Yo: ¿Pueden repetirlo?
• Nora: Sí, ¿te atreves Fer?
• Fer: Sí claro.

Ambas repitieron la lamida de mi amiguito y pese a que ahora Fer arrugó la nariz por haber más líquido pre-seminal, me miró alegre. Era como si hubiese logrado algo que antes no había conseguido… Nora nuevamente abrió su boquita y se tragó a mi amiguito hasta donde pudo, para lo cual retiró la mano de Fer, la cual al quedar fuera de la escena solo atinó a besarme mientras Nora devoraba a mi amiguito.

Yo ni corto ni perezoso aproveché de tomarle las dos tetas a Fer por sobre la ropa y amasarlas con pasión, ella comenzó a gemir como nunca lo había hecho antes, indudablemente estaba caliente y yo por primera vez la escuchaba tan cerca… De pronto Nora se levantó de su faena, presumo que fue al sentir los gemidos de Fer y le preguntó:

• ¿Qué estás haciendo?
• Fer: Nos besábamos…
• Yo: Sí además de que acariciaba sus meloncitos.
• Nora: Miren el par de frescos, yo haciendo el trabajo pesado mientras el pardillo le amasa los melones a la pardilla…
• Fer: ¡Pero Nora!
• Nora: Nada de peros métete esa cosa en la boca, ya está bueno de remilgos

Fer como si estuviera ante una profesora de su cátedra, medio espantada o avergonzada se inclinó sobre mi amiguito y se lo metió hasta donde pudo. Dada su inexperiencia, esto ocasionó que se atragantara y tosiera, lo que la obligó para mi fortuna sacar la boquita de mí verga, pues no quería que mi amiguito saliera dañado

Luego de que Fer se sacó de su boca a mi amiguito estaba roja por la congestión y le colgaban hilitos de saliva de sus labios, estuve a punto de reír, pero no lo hice; Nora si lo hizo por mí.

• Nora: Si serás pardilla, jajaja
• Yo: No todo de un golpe, piensa que es un helado
• Nora: Un helado caliente, jajaja
• Fer: Okey, ya entendí

Fer reinició la chupada intentando pensar que mi amiguito era un helado y lo estaba consiguiendo, salvo que en ocasiones usaba un poco los dientes, cosa que tuve que corregirla yo, dado que su instructora no lo había notado

• Yo: Cuidado con los dientes corazón
• Fer: Mugh biengg, ¿agsi estg mejog?, dijo con mi verga en su boca
• Yo: Sí corazón, está muy rico… ¡mmm que delicia!
• Nora: No vayas a acabar en su boca pardillo, ella aún no está preparada para eso
• Yo: Sí le avisaré…

De pronto Fer le dio una última chupada succionando todo lo que pudo de mi verga, luego la besó ofreciéndola a Nora.

• Fer: ¡Te toca Nora! Se me cansaron las “carretillas de la boca”…

Nora toda ufana por sus conocimientos se metió mi verga hasta casi topar con mi pubis, la verdad es que me impresionó, no pensé que le cupiera toda, luego fue saliendo lentamente, eso casi me infartó, sentía que su mamada era maravillosa y ya llevábamos mucho rato en el tema y estaba por correrme.

• Yo: ¡Me voy a correr!
• Fer: ¿¡Tanto te gustó lo que hizo Nora!?
• Yo: ¡Ufff!, lo que han hecho las dos, alcancé contestar con un esfuerzo sobre humano para no correrme.

Entonces Nora se la sacó de la boca completamente, mirándome como pervertida con su azul mirar y sonriendo mientras le chorreaba una mezcla de saliva y líquido pre seminal por los labios, aun cuando no dejó de pajearme.

• Nora: ¿Vas acabar pardillo?
• Yo: ¡Sí! ... ¡ya no aguanto más!
• Nora: ¿Dónde te quieres correr?
• Fer: ¿Cómo dónde?
• Nora: Puede ser donde quiera, si estuviéramos desnudas podría ser en las tetas, ahora sugiero que, en tu cara, jejeje
• Fer: ¿¡En mi cara!?
• Yo Me corro, decidan pronto…
• Nora: También puede ser en la boca
• Fer: No, en la boca … me da asquito, que sea en la cara. ¿Sale mucha?
• Nora: No mucha, jajaja, pero será toda tuya, jajaja

Ya no pude más y comencé a correrme en la cara de Fer, podía ver como mis lechadas daban en sus labios, nariz, ojos, los que apenas alcanzó a cerrar, algo en su pelo y habría sido más si ella no hubiese reaccionado instintivamente atajando con una mano lo último que salía de mi verga apretándome con algo de rudeza…. Nora se reía del espectáculo, yo nuevamente me tuve que contenerme, pues al mirar la cara de Fer que continuaba con sus ojos cerrados, me acordaba de tantas bromas que me gastó pidiéndome que cerrara mis ojos.

• Fer: No te rías Nora, este pardillo me pringó toda la cara y mi mano
• Nora: Es que te ves genial, jajaja, déjame ayudarte pardilla.
• Yo: Perdón es que hacía tiempo que estaba acumulando…
• Nora: Ves pardilla porque me ofrecí a aliviar a tu Claudito, jajaja

Acto seguido Nora comenzó a pasarle la boca y la lengua par la cara a Fer, la que aún estaba ciega por mi simiente en sus ojos, luego la muy puta, la besó traspasando parte de mi leche con la lengua, a lo que Fer, dijo:

• Puagh, Nora eres asquerosa
• Nora: Debes catar a que sabe tu hombre pardilla, jajaja
• Fer: Ahora lo sé y no es para nada rico, puaghhh
• Yo: Gracias, eso me dolió, jajaja

Acto seguido Fer aún con rastros de mi leche en la cara me tomó de la mía, me besó y se restregó todo lo que pudo en mí, para finalmente decir:

• ¿Te gustó pardillo?
• Nora: Parece que no, jajaja, nunca había hecho una mamada en que me riera tanto.
• Fer: Seguro que has hecho muchas, dijo con ironía
• Nora: Solo a mis novios y a tu pardillo, jajaja, ¡no seas enojona!, me río porque lo pasé muy bien enseñándote pardilla, deberías agradecerme.
• Yo: Yo si te lo agradezco Norita.
• Fer: Bueno yo también eres una buena instructora, ahora aprobé “Mamadas I”
• Nora. Sí pero solo con un suficiente, tendrás que practicar más mi joven Padawan, jejeje
• Yo: Jajaja, ¿ahora eres una maestra Jedi?
• Fer: Y me está enseñando a manejar tu espada laser, jajaja

Bueno, los tres fuimos al baño a lavarnos, algunos la cara y todos la boca, la verdad es que no les puedo mentir, mi semen sabe horrible y solo espero que Fer se pueda acostumbrar a mi sabor, como yo me acostumbré al sabor de la cerveza cuando cumplí la mayoría de edad.

Después de la clase, nos despedimos de Nora, la que se quedó con las ganas de más, pero Fer estaba cansada y yo con todo lo que expulsé no podía esperar en el corto plazo que mi amiguito se animara nuevamente.

• Nora: No te vayas, estoy muy caliente, déjame a Claudito, porfa.
• Fer: No puedo dejártelo, pues los abuelos nos esperan a los dos y yo ya estoy cansada, además le prometí al abuelo que llegaríamos antes de las 0200 horas, y él no se va a dormir si no he llegado.
• Nora: ¿Tan estricto es? … ¡pero ustedes son mayores de edad!
• Yo: Lamentablemente al igual que tú con tus padres, es “Mi casa, mis reglas”
• Nora: ¿No hay nada que hacer?
• Fer: Para que veas lo agradecida que estoy por tus clases, te lo presto mañana temprano.
• Yo: Pero el pardillo es el que se debe levantar temprano, dije a modo de protesta.
• Nora: Ay pardillito, ¿lo harías por mí?
• Yo: Si a Fer no le importa…
• Fer: ¿Después de todo lo que hemos hecho?
• Yo: Muy bien ¿a qué hora?
• Nora: Mis padres llegan tipo 1130 a 1200… ¿te parece tipo nueve?
• Fer: Yo lo despertaré por ti, jajaja

Continuará