Mi Prima Gemma IV

Mi prima y yo seguimos nuestro periplo por Madrid y hacemos de todo antes de quedar con Bea. Gracias por vuestros comentarios en mi mail laocultacion@gmail.com

Bajamos por las escaleras mecánicas hasta la planta de abajo y de nuevo mientras ella leía que había en esa planta siguió a la siguiente. Sabia que en ese momento su morbosa cabecita maquinaba a mil por hora buscando de nuevo un lugar para nosotros.

En ese momento vio lo que buscaba y de la mano me llevo rauda como el rayo a la sección que menos necesitábamos, la de lencería. – Estas juguetona – le susurre mientras le besaba con un leve mordisco el lóbulo de la oreja izquierda y pegaba mi polla dura a su culo. – Como no te imaginas – me susurro ella. – ¿Te acuerdas cuando en verano íbamos al centro comercial del Puerto? – me susurro ella. – Uuuf, claro que me acuerdo – le susurre ahora yo a ella mientras recordaba haber follado con ella en un montón de rincones de aquel enorme centro comercial.

– Pues vamos a ello – me respondió ella. – Mira, ¿has visto que guapa? – me susurro ella mientras me señalaba la foto a tamaño real de una modelo que estaba de toma pan y moja vestida tan solo con un tanguita y un escueto sujetador de la marca Victoria Secret. – Preciosa – le dije – pero yo no necesito más inspiración mira como estoy – le dije refregando de nuevo toda mi extensión por su culo. – Uuuum ya lo veo – me susurro ella mientras caminando delante de mí pasaba su brazo por mi cintura a fin de que me pegase más a ella.

En ese momento, ella juguetona como siempre buscando llevarme al límite, y solo consiguiendo que yo al estar a cada momento más cachondo mientras de igual manera no paraba de rozarme con ella haciéndola consciente de la enorme empalmada que tenía, como era desde hace años propio en nosotros mi prima empezó a pasear por los pasillos de ropa y ropa de lencería mientras me enseñaba diferentes modelos que iba depositando en mis manos a fin de írselos probando según me decía al tiempo que nos podríamos follar en mil posturas diferentes. – Mira este es ideal para que me revientes el culo mientras frotas mis pezones – me decía ella mientras ponía un conjunto color salmón en mis manos. – Este es ideal para que yo te folle subida encima de ti – me decía ella poniendo el modelo en mis manos. – Vayaaaa este es ideal para follarme mañana en la montaña – susurraba. – Este es ideal para que me pongas a hacer la calle – me susurraba. Así seguimos por unos minutos más dando vueltas por unos diez minutos más en los que ya salido de madre mi prima me oyó como le decía – Puta no aguanto más – le susurre en ese momento metiendo mi mano debajo de su falda y sin piedad clavando dos de mis dedos dentro de ella le decía que necesitaba ya poseerla.

Ella tomo un par de modelos más y cogiéndolos todos de mis manos mientras nos dirigíamos a los probadores ella anduvo delante de mí a fin de terminar ya de ponerme en un estado de ceguera sexual en la que solo de ver su culo moverse no podía más que pensar en follarme hasta morir a aquella maravillosa mujer.

Nada más llegar a los probadores una preciosa chica pelirroja de pequeños pechos en torno al metro sesenta de altura nos atendía a la entrada de los probadores. – Si mira, llevo, no sé cuántos modelos porque no se si este, pondrá lo suficientemente cachondo a mi amante – le soltó Gemma en ese momento a la chica mientras subiendo su camisa de vuelo dejaba que la chica la viese tal y como iba vestida debajo en ese momento la chica la miro boquiabierta mientras veía los preciosos pechos de talla noventa de mi prima y sus pezones empitonados.

Por un segundo más la chica miro a mi prima y viendo a lo que íbamos le susurro. – Creo que lo mejor es que pasen al probador del fondo – le susurro la chica. – Y si me necesitan no duden en avisarme – dijo la chica mientras me miraba a mí. – Normalmente suelo poder yo sola – le susurro mi prima mientras quedando yo en el marco de la entrada a los probadores mi prima con sus manos marcaba la tela del pantalón y mi camisa sobre mi polla haciendo que aquella desconocida se percatase del tamaño de mi miembro. – Pero si necesito ayuda te avisare guapa – le susurro Gemma mientras agarrándome de la mano me llevaba por el pasillo de probadores hasta llegar al último.

Una vez que entramos dentro no pude resistirme a lanzarme a besar la boca de mi prima mientras mis manos se colaban por debajo de su falda y hacían contacto directo con su culo a la vez que sus manos se apoyaban en mi cara. – No sabes las ganas que tengo de sentirte – nos dijimos los dos a la vez. Poco a poco mientras nos enrollábamos iba desnudando a mi prima que en un momento se deshacía de su falda y quedando vestida solo con su ropa interior, sus medias y sus morbosos zapatos de tacón la veía de espaldas en el reflejo de los espejos que rodeaban el probador.

Alejándome un segundo vi a aquella hermosa mujer vestida de puro erotismo y sensualidad para mí, mientras giraba sobre mí, a fin de que pudiese verla por completo. – Espero que te guste como me visto de puta para ti – me susurro ella mientras de nuevo volvía a besarme quedándonos los dos parados cuando oímos como la cortina del probador se abría levemente mostrándose en ese momento quien era realmente mi prima mayor.

Gemma al ver que aquella chica se quedaba fuera cogiéndola de la mano tiro de ella hasta meterla dentro del probador. – Eres preciosa – le confeso la chica mientras se sentía tan excitada como amedrentada por la belleza de mi prima. – ¿Te excito? – le pregunto mi prima en un primer momento. La chica tímidamente la miro y asintió con la cabeza. – Que te gusta más la polla de él o mi cuerpo – le pregunto de nuevo mi prima. – Tu eres preciosa – le respondió la chica. – y la polla de él es descomunal – le confeso la chica. – A él, por el momento, no podrás catarlo, pero sí que podrás enrollarte conmigo si quieres – le susurro Gemma que hábilmente en ese momento ya había bajado la cremallera del pantalón de la chica y había metido su mano dentro del mismo empezando a masturbar a aquella chica.

Las manos de mi prima al igual que eran de experta manejando mi polla lo eran de igual manera a la hora de darle placer a una mujer y quedo claro cuando aquella chica en menos de cinco minutos se corrió en la mano de mi prima. – ¿Te masturbas muchas veces aquí? – le pregunto mi prima a la chica. Esta asintió con la cabeza y susurro – estoy aquí muchas horas – le confeso ella.

En aquel momento mi prima miro a la chica y le susurro – arráncame el sujetador –. Por un segundo la chica la miro y le susurro – con una sola mano puedo quitártelo. – Quiero que me lo arranques – le dijo mi prima después de negar con la cabeza y llevar la mano de aquella chica al espacio del sujetador que quedaba entre sus pechos. – Vamos tira fuerte – le susurro mi prima mientras la chica cumplía sus órdenes y le arrancaba el sujetador tal y como le había pedido mi prima.

Por un segundo mi prima me miro. – Sácatela, que te la vea – me susurro mi prima mientras yo como aquel verano hacia cinco años hacia lo que me pedía sin rechistar conocedor de que así obtenía los momentos más morbosos de mi vida.

Allí de pie delante de las dos me desabroche mis vaqueros y deje que mi polla cayese delante de ellas. Aquella chica al ver mi polla en toda su extensión se acercó a mi prima y dejando caer su cara a la altura de los pechos de mi prima empezó a comerse sus pezones mientras su mirada no se apartaba de mi miembro. – ¿Has visto que belleza? – le susurro entre gemidos mi prima mientras empezaba a disfrutar de la comida de pezones que le estaba dando aquella desconocida. – Si es una maravillaaaaa – gimió ella mientras sentía como mi prima empezaba a masturbarla de nuevo. Solo que esta vez aquella chica no se quedó quieta y mientras sentía la mano de mi prima en su coñito volviendo a follarla, las manos de aquella chica fueron al culo de mi prima y separando sus cachetes dejo a mi vista el culo abierto de mi prima mientras me perdía en el detalle del asterisco que formaba su ano. – Si está disfrutando el momento, podría prepararte tu culo para mí – le susurre a mi prima.  – Me encanta tu sugerencia – me respondió mi prima. – ¿Qué me dices tu? – le susurro mi prima a aquella desconocida. – ¿Me follas el culo con tu lengua para que él luego pueda follarmelo con su enorme polla? – le pregunto mi prima mientras los dos éramos testigos de cómo aquella chica se corría por segunda vez en la mano de mi prima solo de imaginar lo que iba a hacer.

En aquel momento mi prima anduvo los dos pasos que nos separaban y se acercó a mi uniendo de nuevo nuestros labios mientras la chica se colocaba de rodillas detrás de mi prima y separando sus nalgas a la vez que le arrancaba el diminuto tanga a mi prima hundía su boca entre los cachetes de mi prima y su lengua empezaba a devorar el culo de mi prima a la vez que follaba con dos dedos su coño. Mi prima gemía sin parar hasta que por un segundo parando llevo la boca de aquella chica a mi polla y mientras me decía – se lo ha ganado de sobra – me daba a conocer que mi prima se había corrido en la boca de ella y ya estaba preparada para que una vez que ella ensalivase mi polla poder clavarme sin piedad dentro de ella.

Sentí como mi prima tomando la cabeza de aquella muchacha de la coronilla con una mano y del mentón con la otra la guiaba a fin de alojar mi polla dentro de la boca de aquella chica y como está dejándose llevar por mi prima engullía ensalivando a la perfección mi polla. – Desde luego sabe mamar – le susurre a mi prima mientras sentía como la boca de aquella desconocida saboreaba mi polla. Al sacársela de la boca vi que estaba preparada para clavarse en mi prima y, en ese momento, ayudando a mi prima a apoyarse en la pared y arqueando su cuerpo a fin de dejar su culo en pompa me posicioné detrás de ella para apoyando mi glande en su ano empezar a presionar a fin de hundir mi polla dentro de su culo. – Joooooooooooooooooder sigueeeeeee – gruño mi prima cuando sentía como mi miembro profanaba su cuerpo.

En ese momento la chica desapareció, ya que había alguien a la puerta de los probadores, que la llamaba y allí nos quedamos solos los dos mientras mi prima sentía como mi polla se internaba dentro de ella. Presionando sacando y volviendo a meter mi polla dentro del culo de Gemma iba introduciendo cada vez más extensión de mi polla dentro de ella que extasiada me recibía encantada.

En ese momento saliéndome del culo de Gemma me clave sin piedad dentro de su coño que encharcado me recibió completamente abierto mientras Gemma boqueaba en busca de aire que le faltaba gracias al placer que estaba sintiendo. – Córrete para mi puta – le susurre en su oído mientras pegaba todo mi cuerpo al suyo. – Vamos quiero sentirlo – le gruñí mientras me clavaba dentro de ella. – Si sigueeeeeeeeeeeee – me susurro ella mientras sentía como su coño literalmente exprimía mi polla. – Joooooooooooooder quiero tu polla todos los días de mi vidaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa – gruño ella mientras de nuevo volvía a besarme llena de pasión y lujuria. – Así me gusta bien corrida es más fácil reventarte el culo – le susurré mientras de nuevo sacando mi polla de ella me volví a clavar esta vez sí, hasta el fondo, en lo más profundo de su culo.

En aquel momento la chica de los probadores volvió a entrar en nuestro cubículo y esta vez llegando a mi altura se lanzó a comer mi boca mientras abriendo el segundo y tercer botón de su camisa dejaba a la vista sus pequeños pechos, pero con unos pezones de no menos de dos centímetros que me invito a comerme mientras yo a su vez no paraba de clavarme en el culo de Gemma. – Joder que bueno – gimió levemente aquella chica al sentir como mi lengua estimulaba sus mamas.

La escena era de lo más morbosa. Mientras me clavaba hasta el fondo en el culo de Gemma y me comía los enormes pezones rosados de la desconocida chica de los probadores veía como la mano de está empezando a tocar los pechos de mi prima iba bajando poco a poco por su abdomen hasta llegar a su coño el cual empezaba a masturbar y de igual manera mi prima al sentir la doble estimulación al ser follada por el coño y por el culo era consciente de como aquella chica al igual que yo le estábamos dando placer.

Por respuesta mi prima en ese momento se dejó caer apoyando su hombro contra la pared a fin de dejar su mano derecha libre para pasándola por detrás de su cuerpo llegar hasta mi cadera a fin de ayudarme marcando el ritmo a clavarme en lo más profundo de ella y de igual manera veía como de nuevo su mano izquierda bajaba la cremallera de los pantalones de aquella chica  y de nuevo haciendo a un lado el tanga que llevaba aquella chica, mi prima, clavaba sin piedad tres dedos dentro del coño de aquella desconocida. – Si que estas cachonda puta que te entran mis tres dedos sin problema – le susurro Gemma. – Como para no estarlo viendo el pedazo de rabo que se está comiendo tu culo – le respondió esta. – Es una lástima que no puedas follártelo aun – le susurro Gemma, pero es que tenemos un acuerdo entre cinco mujeres y de igual manera que nosotras no follamos con otros tíos no podemos permitir que él se folle a otras tías – le susurro Gemma mientras no parábamos nosotros de devorarnos las bocas en esos momentos. – Poder ver como hunde su polla dentro de tu cuerpo es todo un espectáculo – le respondió esta. – Joooder que gustazo – gruño Gemma acallando sus gritos de placer sintiendo en ese momento un orgasmo anal.

Por un segundo me quede con tan solo el glande clavado dentro de su culo mientras haciéndolo entrar y salir marcaba la abertura y cierre de su conducto alargando su orgasmo hasta que finalmente este desapareció por completo dejando a mi prima plenamente satisfecha.

En ese momento, en el que saque mi polla completamente dura y roja del culo de mi prima aquella muchacha pidiendo permiso a mi prima se puso de rodillas entre nosotros dos y tomando mi polla de nuevo volvió a mamármela suavemente mientras clavaba su mirada en los ojos de mi prima.  – Nunca he visto una polla tan dura – dijo mientras se la sacaba de la boca y escupiendo sobre mi polla extendía a continuación su saliva por mi miembro. – Es que nos da mucho morbo follarnos – le susurro Gemma antes de meterse mi glande dentro de su boca después de ponerse por un momento de rodillas a mi lado.

Sentir como la boca de aquella desconocida envolvía mi polla y la recorría por completo en toda su extensión y como su lengua recorría por completo todo mi glande me hacía retorcerme de placer. – ¿Quieres correrte en su boca? – me pregunto mi prima mientras la miraba a ella. – Aun te quiero follar – le susurre a ella. – Esta bien – me respondió Gemma mientras desnuda se volvía a posicionar y ahora apoyando su espalda contra la pared y empujando su cadera hacia delante me invitaba a clavarme en ella.

Yo en ese momento sacando mi polla de la maravillosa boca de aquella desconocida me quede encantado cuando esta me susurro – Me encantaría que te corrieses en mi boca – mientras levantándose se ponía al lado de mi prima quien elevando su pierna invito a aquella desconocida a que la agarrase en volandas a fin de tener más hueco a la hora de poder clavarme en mi prima.

Esta chica en aquel momento mientras se colocaba a la derecha de mi prima quedo entre ella y la pared y besando a mi prima llevo su mano derecha a la vagina de mi prima para empujando hacia arriba dejar sus labios vaginales abiertos a fin de facilitar mi penetración dentro de mi prima quien pudo sentir como ahora yo delante de ella empezaba a clavarme centímetro a centímetro en el interior de su vagina.

Aquella penetración la hice lo suficientemente lenta pero continua a fin de que mi prima sintiese como de tan solo una estocada todo mi pene se internaba dentro de ella y la colmaba de polla por completo dejando toda su vagina llena de mí. – Jooooooooder me encanta sentirte primo – gimió Gemma cuando sintió como habiendo alojado mi polla por completo dentro de ella me quedaba clavado haciendo que ella sintiese como la llenaba por completo mientras chupaba su pezón izquierdo y sentía en mi coronilla la barbilla apoyada de nuestra desconocida.

Después de un momento de silencio en que rece por que aquella desconocida no hubiese oído a mi prima nos preguntó – ¿sois primos? – en un susurro aquella desconocida. – En ese momento yo seguí a lo mío y mi prima sintiendo sobre mi cabeza como giraba su rostro para mirar a aquella muchacha le susurro – Si, si que lo somos – le respondió ella. – Ahora entiendo por qué os folláis con tanta pasión – nos respondió a los dos mientras esa se lanzaba a devorar la boca de mi prima completamente desatada.

Durante un momento indeterminado seguimos allí los tres contra la pared mientras yo observaba como aquellas dos mujeres literalmente se devoraban la boca la una a la otra encendidas a mas no poder. – Yo tengo un primo que cada vez que lo veo me muero de ganas de follarmelo – nos susurró ella cuando por fin mi prima y ella se separaron. – Pues fóllatelo – le escupió casi automáticamente mi prima aquellas palabras. – Te digo yo que no hay nada mejor – le juro esta mientras haciéndonos cambiar de posición ahora hacía que aquella chica se despojase de sus pantalones. – ¿Como se llama tu primo? – le pregunto mi prima. – Luis – le respondió esta.

En aquel momento mi prima invito a aquella desconocida a que sin pantalones ni bragas se sentase en un butacón que había dentro del probador y dejase su cadera al borde del mismo mientras ella posicionándose a cuatro patas delante de ella se lanzaba a devorar el coño de aquella desconocida. – Ahora mientras él me folla quiero que imagines que el que me folla es Luis – le susurro mi prima mientras dejaba a la vista los pequeños pechos de aquella chica. – Y mientras sientes en mí, las embestidas que él me da quiero que las sientas como las que te puede dar Luis a ti la próxima vez que os veáis – le susurro de nuevo en su oído mi prima mientras descendiendo se amorraba en el coño de ella y empezaba a estimularlo.

Yo conocedor ya de las situaciones de morbo que era capaz de crear mi prima en la mente de las personas que la rodeaban me quedé de pie delante del culo de mi prima y mientras esta empezaba a estimular el coño de aquella chica yo de pie delante de ella me empecé a masturbar suavemente mientras clavaba mi mirada de ojos verdes esmeralda sobre aquella chica. – Luis, ¿me vas a follar con esa enorme polla? – me susurro ella mientras al oírse así misma decir aquellas palabras sentía un latigazo lleno de placer que la hacía correrse ya en la boca de mi prima que abnegada continuo sin pausa comiendo el coño que se le ofrecía.

Vi como aquella chica por un momento más se contraía de placer mientras yo continuaba con una suave paja mirándola sin decir palabra cuando me percaté que en el probador de al lado alguien entraba. En aquel momento los tres conocedores de que debíamos mantener silencio absoluto me acerqué al oído de la desconocida inclinándome sin moverme sobre el cuerpo de mi prima. La cual al sentir mis muslos sobre su culo mientras inclinaba mi cuerpo entendió que me acercaba para decirle algo a nuestra desconocida al oído. – Prima – le dije muy suavemente. – Te voy a dar polla hasta que te salga por la garganta – le susurre desatando en aquel momento que aquella chica de repente se empezase a poner roja para pasar en una décima de segundo a ponerse su cara completamente amoratada y momento después ver como en la boca de mi prima aquella chica literalmente explotaba en un tremendo squirt que literalmente ducho a mi prima mientras lágrimas de contención caían de sus ojos sin remedio a fin de mantener el silencio mientras la persona que estaba en el cambiador de al lado ya abandonaba el mismo.

En ese momento aquella chica tomo una enorme bocanada de aire detrás de otra mientras se recomponía.  – Joder en mi vida me había sentido así – nos susurró ella mientras mi prima la miraba llena de ella. – Es lo que provoca el incesto cariño – le susurro mi prima mientras yo ahora ya, sí que me posicionaba detrás de mi prima y empezaba a hundir mi polla dentro del coño de mi prima. – Prepárate guapa que aquí vienen los pollazos de Luis – le susurro Gemma mientras su cuerpo se balanceaba por las acometidas que yo le empezaba a hacer sentir en su cuerpo. – ¿Te folla bien tu primo? – le pregunto la desconocida a mi prima. Esta no le respondió más que asintiendo con la cabeza mientras sentía como de nuevo mi miembro entraba dentro de ella.

Poco a poco comencé a coger ritmo y empecé a clavarme dentro de mi prima como sabía que a ella le gustaba de manera continua hasta que después de dos orgasmos más de mi prima esta me pidió que parase y en ese momento volvimos a cambiar de posición.

– Primo siéntate aquí – me pido mi prima mientras me pedía que me sentase en el butacón. Yo seguí sus indicaciones y mientras era invitado a sentarme en el butacón sentí como mi prima se hacía hueco entre mis piernas mientras la chica desconocida se ponía a mi espalda y llevaba su mano a mi polla para poniéndola erguida invitar a mi prima a comenzar a chuparla dulcemente. – ¿Me vas a dar mi ración de leche? – me pregunto. – Claro que si prima – le respondí mientras sentía como la boca de mi prima acogía mi miembro y empezaba a dejarlo internarse en su boca mientras la chica de los probadores lo sostenía erguido desde la base viendo como la boca de mi prima acogía toda mi extensión.

– Que buena tragona estas hecha – le susurro esta mientras veía como los labios de mi prima se apoyaban sobre los dedos de la mano de esta que estaban anillados a mi polla. – Es la mejor tragando pollas – le susurre yo a aquella chica mientras ella girando quedaba a mi lado y nos empezábamos a besar mientras sentía como la boca de mi prima le daba placer a mi polla. Aquella chica arrancándose de nuevo la camisa me dio a beber de sus pechos al igual que alternaba devorando mi boca mientras me invitaba a follarme con tres dedos su coño.  – Prima entre tu mamada y las tetas de ella la verdad es que me están dando ganas de probar este coño – le susurre a ella. Aquella desconocida en ese momento oyendo mis palabras se corrió en mi mano llena de placer. – Si ella quiere ya sabes que puedes follarla si se cuida – me susurro ella sacándose mi polla de la boca.

En aquel momento ella desbocada de placer nos confesó a los dos – Hace un año que no estoy con nadie y por temas médicos si, si, si, que me cuido con la píldora – nos dijo apresurada. – Pues ya sabes semental – me susurro mi prima. – Yo ya la he disfrutado – me confeso mi prima mientras yo en ese momento la ayudaba a ponerse a cuatro patas en el asiento del butacón y colocándome detrás de ella empezaba a clavarme dentro de su coño sin piedad esperando a ver como ella disfrutaba de mis acometidas. – Todas las noches me follo en mi cama con un consolador algo más pequeño que tu polla – me susurro ella mientras disfrutaba de mi polla dentro de ella. – A veces también lo pruebo en mi culooooo – gruño de nuevo ella mientras su coño se retorcía de placer rodeando mi polla llena de placer encadenando un orgasmo con el siguiente. – No pensaba que una polla de verdad pudiese ser más grande que mí, que mi consoladooooooooooooooooooooor – gruño aquella muchacha mientras escandalosamente se corría pensando en que alguien podría oírnos.

En aquel momento decidí hacer “órdago a grande”. – Prima soy el primo Luis, pero no me mires que nos pueden pillar – le susurre a ella notando como ella se estremecía de placer al oír mis palabras mientras yo permanecía pegado a su oído y ella cerraba sus ojos imaginándose a su primo detrás de ella.

– Te quiero follar el culo, ese culo que no puedo dejar de mirar cada vez que nos vemos y que estos pantalones que llevas te enmarcan tan bien haciéndolo aún más deseable – le susurre mientras sentía como ella se deshacía. – Por favor prima te lo ruego dame permiso para poder clavar toda mi polla dentro de tu culo, lo necesito para mí – le susurre mientras durante todo ese rato no había dejado de follarme su coño. – Primo, ¿tanto deseas joderte mi culo? – me pregunto ella. – Como no te imaginas – le respondí yo. – Es que tu polla es enorme – me susurro ella. – Eso es por lo deseosa que esta de clavarse dentro de ti – le respondí yo mientras me clavaba en lo más profundo de su coño y continuando empujando hacia que su cuerpo se desplazase hacia delante.

Por un segundo más ella disfruto de mis acometidas dentro de ella mientras enganchaba un nuevo orgasmo que la hacía desfallecer de placer. – Por favor prima dame tu culo – le susurre de nuevo mientras ella por respuesta asentía con la cabeza. – Gracias prima – le susurre mientras mi prima Gemma al sacar yo mi polla de su coño llevaba la mayor cantidad de flujos a su ano y dedeándolo y chupándolo lo lubricaba para abrirlo lo máximo posible llevando a un orgasmo anal a aquella desconocida. Un segundo después mi prima guiaba mi polla para clavarme en el culo de aquella chica que llevada por la excitación y el morbo del momento había decidido entregarme su culo.

Empuje suavemente mi polla ayudado por Gemma dentro de ella mientras sentía como muy fácilmente mi rabo rompía la leve resistencia del recto de ella e internando tras cuatro acometidas mi polla dentro de ella sentía como esta me invitaba a continuar con la sodomización.

Mi prima, una vez que más de la mitad de mi polla estaba dentro del culo de ella la soltó y metiéndose boca abajo por el respaldo del butacón quedando boca arriba se colocó en la posición perfecta para estimular el coño de aquella desconocida mientras de igual manera mi prima dejaba a la disposición de aquella desconocida su coño apoyado sobre el respaldo de la silla para de igual manera ser estimulado.

Ver como aquellas dos mujeres se amaban mientras yo disfrutaba del culo una de ellas fue muy morboso ya que al mismo tiempo que mi polla follaba su culo sentía la lengua de mi prima a ratos lamiendo mis cojones que estimulaba aumentando la carga de leche que iba a soltar en aquel momento.

Tras un rato en el que ambas dos lograron su placer yo en la conjunción de la escena, el morbo del lugar y las palabras de mi prima a aquella desconocida diciéndole como su primo la follaba sin parar representado por mi provoco que en breve sintiendo el punto de no retorno sacando mi polla de su culo en el último momento me corriese entre grandes eyaculaciones mientras aquella desconocida, saliendo mi prima de debajo de ella para quedar de rodillas a un lado del butacón,  esta se girase y entre sus tetas en primer plano mientras me susurraba – Vamos primo dame tu corrida que llevo mucho deseando que esto ocurra – entre las tetas y la boca de aquella hermosa pelirroja de ojos color miel me vaciase por completo entre grandes espasmos de placer mientras al acabar sentía como la boca de mi prima lamia mi polla y se apoderaba de los últimas contracciones de mi corrida llenando la boca de mi prima quien al terminar, tragando lo que había soltado en su boca se girase y besando a aquella chica compartiese con ella mi esencia deleitándose las dos con mi sabor.

Pero aquello aún no había acabado. En aquel momento yo con los pantalones por los tobillos fui invitado a sentarme en el butacón mientras ellas dos de rodillas observándome me ofrecían un espectáculo de lo más morboso en el que mi prima recogía los goterones de semen que había depositado en los pechos de aquella muchacha y los llevaba a la boca de ella mientras el lefazo que había quedado en el labio superior de nuestra desconocida daba un condimento extra al morbo de la situación viendo como entre ellas se besaban y poco a poco iban limpiando el restregón de semen que esta tenía en su labio superior.

Y como poco a poco mientras ellas disfrutaban mi esencia las manos de una recorriendo el cuerpo de la otra llegaban a sus coñitos y alternando los besos y lametones que entre ellas se daban follándose el coño de la otra me miraban y disfrutaban del placer que le daba la otra hasta llegar a correrse una última vez para ellas mismas.

Por un momento más, mientras la lengua de mi prima dejaba limpia de todo rastro la boca de aquella muchacha esta se dirigió a mí y después de un beso húmedo, lujurioso y lleno de pasión me susurro – espero que el encuentro con mi primo sea la décima parte de placentero que con vosotros – me confeso. – No me han follado así en mi vida – nos confesó a ambos después de besar a mi prima. – Supongo que no me querréis dar vuestro contacto, pero os aseguro que de lunes a sábado estoy aquí de diez de la mañana a nueve de la noche – nos confesó.

En aquel momento nos empezamos a vestir, yo tan solo tuve que tirar de mis pantalones hacia arriba y abrochármelos mientras la chica tan solo tuvo que ponerse los pantalones y recolocar su ropa siendo tan solo mi prima la que aún seguía desnuda por completo cuando de repente oímos – Luna, Luna, ¿se puede saber dónde demonios estas? – decía aquella voz que parecía presentar a una mujer mayor que tirando encabronada de la cortina descubrió a mi prima desnuda mientras esta chica que ahora sabíamos que se llamaba Luna permanecía a su lado mientras yo sentado en el butacón sujetaba entre mis piernas una cantidad nada despreciable de ropa interior.

  • Pero no ve usted que estoy siendo atendida – ladro mi prima mientras con la misma intensidad que aquella mujer había tirado de la cortina a un lado mi prima lo hizo al contrario volviendo a cerrar la misma. – Yo, yo, yo – se oyó balbucear a la otra mujer al otro lado de la cortina. – Váyase usted a la mierda señora – le escupió de nuevo mi prima poniendo voz de enfado mientras le guiñaba el ojo a Luna. – Ahora cuando termine de atenderme esta amable señorita ya hablare con usted – volvió a decirle mi prima. – Espero que no se vaya de la entrada de los probadores por la cuenta que le trae – gruño mi prima mientras se vestía sacando ahora del bolso que llevaba un nuevo conjunto de ropa interior y a su vez encima se ponía la falda y la blusa que llevaba volviendo a ser la mujer elegante y señorial que deslumbraba a todos dejando escondido bajo su ropa la zorra ninfómana que era para mí.

Por un segundo aguantando las risas mi prima volvió a farfullar – Sera puta la tía que ha abierto la cortina cuando estaba desnuda – ladro mi prima en voz alta a fin de que la señora si estaba en la puerta de los probadores pudiese oírla.

Cuando nos recompusimos por completo mi prima salió del probador mientras yo dejaba pasar a Luna delante de mí y yo salía en último lugar tras ellas dos.

Nos encaminamos por el pasillo y llegamos a la entrada de los probadores donde al salir mi prima ya estaba enfrentada a aquella mujer que sin permiso había presenciado la desnudez de mi prima y en ese momento fui consciente de la imagen que mi prima proyectaba a los demás.

– Señora mía no tiene usted vergüenza ninguna – le gruño mi prima de nuevo. – He venido expresamente a su centro para que me atendiese la mejor dependienta que tiene porque me la han recomendado varias amigas y usted ha violado por completo mi intimidad, ha abierto el probador sin mi permiso y me ha expuesto completamente desnuda – le decía mi prima en un tono recio de marcado carácter militar mostrando su naturaleza.

A aquella mujer una señorona regordeta y aplastada por la vida mi prima la amedrentaba haciéndola sentir pequeña y sin tener razón ninguna solo susurro tímidamente. – Es que llevaba desaparecida más de dos horas y no sabía dónde estaba Luna, le ruego que me disculpe – le dijo aquella mujer casi al borde del llanto que ya no sabía dónde meterse. – Mire usted – le dijo mi prima completamente seria mientras girándose hacia Luna le arrancaba parte de las prendas que esta llevaba del probador. – Iba a comprar todas estas prendas – le gruño de nuevo mi prima indignada – pero este maltrato por su parte me ha quitado las ganas de llevarme nada – le escupió de nuevo mi prima.

Aquella mujer, poco a poco, casi sin salirle la voz del cuerpo le pidió mil veces disculpas a mi prima y más al percatarse de que mi prima aparte de ir vestida completamente de marca y tener muy buena presencia llevaba más de mil euros en ropa interior de la marca Victoria Secret y tras mil disculpas se ofreció a regalarle a mi prima para deshacer la afrenta los veinte modelos que más le gustasen. – Solo aceptare si la venta consta a nombre de ella – dijo en ese momento mi prima señalando a Luna.

Finalmente, aquella mujer se retiró mientras le pautaba a Luna como debía hacer a fin de que mi prima se llevase como obsequio las prendas elegidas. Una vez nos quedamos los tres solos mientras Luna trasteaba la caja mi prima veía que esta se mantenía a una distancia prudencial de nosotros observando como Luna terminaba de cerrar la venta.

Finalmente, en tres bolsas de Victoria Secrete entraron todas las compras que había realizado mi prima y después de pasarme las bolsas Luna nos susurró. Por si queréis verme alguna vez o hablarme o follarme directamente como hoy aquí os apunto mi teléfono nos susurró Luna pasándonos un papel con sus señas. – Solo si te follas a tu primo – le susurro Gemma. – Él nos folla a tres primas y a su tía – le susurro Gemma. – Le pertenecemos como él a nosotras – le susurro Gemma mientras dándole dos besos se despedía de ella. – Espero que nos veamos en breve – le susurro esta mientras despidiéndonos Gemma le recalcaba que debía hacer. – Si – le susurro Gemma. – Bueno vámonos que nos espera mi novia – le dije a Gemma viendo que ya casi eran las ocho de la tarde.

Luna en ese momento me miro sorprendida y le yo le confesé mientras le daba dos besos – Por parte de mi novia también me follo a su madre y a su tía – le confesé mientras tocando su entrepierna notaba como empezaba a humedecerse de nuevo. – Solo espero que nos veamos de nuevo – nos dijo ella a modo de despedida. – Adiós guapa – dijimos mi prima y yo a la vez mientras bajando al aparcamiento sacábamos el coche del parking y bajando al aparcamiento del Carmen de nuevo dejábamos el coche. Ya que el Parking de El Corte Inglés cerraba en unas horas más o menos.

Tras caminar por la calle Preciados llegamos tras pasar por la Plaza de Callao a la puerta del cine del Capitol que era donde habíamos quedado con Bea.