Mi Paraíso parte 1

Mi Paraíso

(Si os gusta el relato por favor comentar lo que os gusta, lo que añadiriais etc. También estaré agradecido a quien me contacte en stbroski@outlook.es con respecto a este relato a otros o incluso dándome ideas ya que soy bueno en hacer relatos a partir de ideas como hice con mi relato La reina de prisión que fue petición de una lectora y que os recomiendo leer y comentar. Contra más comenteis más ayudais a que este relato tenga continuación y a que escriba otros)

Cap 1. Lo que daría.

Si quieres leer una historia de alguien que fue bueno, todo le fue bien y acabó en el paraíso eterno por sus méritos... este no es tu relato.

Esta es la historia de Michael Fashworth. Teniendo solamente un año sus padres murieron en un accidente de tráfico. Fue mandado a vivir con Erick y Helena Tanner sus tíos, quienes apenas se fijaban en él debido a su hija, la muy mimada prima de Michael, Eliza Tanner.

Eliza era perfecta a la vista de la mayoría. Un año mayor que Michael, cuerpo curvilineo, la primera de la clase en todos los cursos y con varios premios de atletismo. Pero cuando se quedaban a solas Eliza sacaba su verdadero lado con su primo Mike como ella le llamaba, era mimada y arrogante, usaba a Michael como un esclavo, siendo su orden favorita que el chico le masajease los pies cuando ella volvía de correr sudada. De pequeño el chico intentaba negarse pero aprendió que entonces Eliza se inventaba cosas de él y se las decía a sus tíos y ellos siempre la creían por encima de él porque era su chica perfecta mientras que él sólo era el sobrino que aprobaba en las recuperaciones y con el que todo el colegio se metía por su esquelético aspecto.

En clase la cosa no era mejor que en casa. Estaba en último curso de instituto y él sólo deseaba que se acabase, los alumnos lo maltrataban físicamente e incluso los profesores hacían chistes sobre él.

Pero lo peor eran las chicas. Al mando de Janeth Mars, una chica popular con cierta fama de facilona, las chicas se burlaban de él de muchas formas, casi siempre dejándolo creer que tenía oportunidades con alguna de ellas. En muchos recreos acababa rodeado por ellas que le maquillaban a la fuerza y le pateaban la entrepierna si intentaba huir, para ellas él era un juguete.

Un año Michael tuvo una amiga por un tiempo. Jade Mendoza era una chica sombría con fanatismo por el negro y las cosas sombrías, como ella tampoco era igual a los demás se acercó a Michael. Sin embargo él no podía evitar sentirse atraído por ella, en especial por su cada vez más crecidas tetas, que con la ropa pegada de látex y cuero se le notaban demasiado. Un día creyéndose correspondido él dio un paso demasiado grande agarrandole un pecho... sólo para recibir una hostia y una reprimenda que acabo con la chica alejándose de él por pervertido.

El día que todo empezó, Michael caminaba camino a casa sin ganas, había salido tarde porque las chicas le tenían algo planeado y se tuvo que parar a que se fueran de la puerta, ahora no tenía ganas de llegar porque Eliza había tenido entrenamiento y eso significaba masaje de pies. Pensando en ello, Michael no vio el socavón hecho por las obras en el que cayó. El chico quedó inconsciente.

Se encontró en una sala oscura con un hombre atractivo con el pelo blanco que le preguntó:

• Que darías por cambiar tu vida?

• Que daría? - respondió el chico - daría lo que fuera.

• Hay una manera.

• Quien es usted?

• Yo? Jajaja chaval, yo soy un demonio. Y te ofrezco un trato. Te daré un poder, el poder de cambiar las cosas, de hacer que todo el que te ha tratado mal haga lo que desees.

• Y... que tendría que dar a cambio? Que quieres?

• No es obvio? Soy un demonio. Quiero tu alma! Cuando mueras tu alma será devorada por mi, nada de cielo, nada de reencarnar, ni siquiera nada de infierno.

• ... acepto. Si esta vida será el final, al menos la convertire en mi paraíso!

Cap 2. Para Eliza

Pensó que lo había soñado. Algo así no puede ser real verdad?

Cuando Michael despertó en el socavón en el que había caído gritó por ayuda. Y rápidamente la gente que había por la calle lo ayudaron a salir. Aquello ya fue raro, tanta gente ayudándolo a él era algo que no pegaba en su vida pero él no se dio cuenta.

Entre la gente había una chica de unos 30 años con gafitas y pinta de secretaria, la chica se había agachado a mirar en el socavón y desde abajo Michael le vio el canalillo. Una vez rescatado y la gente se empezó a dispersar y empezar a expresar el normal asco que la gente le tenía, el joven se acercó a la chica:

• Por favor dame tu nombre. - dijo ante la presunta secretaria que se quedó mirándolo de mala manera pero aún así contestó:

• Rika - y tras decir eso, se dio la vuelta y empezó a marcharse. El joven susurro para si mismo:

• Ojalá me enseñaras las tetas Rika, esas si que están ricas.

Ante su sorpresa, Rika se volvió levantándose camiseta y sujetador y enseñando sus tetas en mitad de la calle. Michael flipó demasiado y antes de poder reaccionar, la chica se había bajado la ropa y se había ido.

Tras pensarlo un poco, el chico sólo pensó que podía haber pasado una cosa: el sueño era real! Podía ordenar a la gente y que hagan lo que diga!

Tras ese descubrimiento lo primero que pensó fue:

• Jajaja se me están ocurriendo buenos planes... Planes para Eliza.

El joven llegó tarde a casa. Su prima estaba sola. Normalmente siempre estaban solos ya que sus tíos trabajaban fuera y ahora que eran mayores ellos los dejaban solos menos los findes. La chica lo miró con prepotencia y rabia:

• Cuanto has tardado Mike! No sabes que cuando tengo entrenamiento tienes que estar aquí para recibirme? Quien piensas si no que me va a dar mi masaje de pies relajante? Una princesa atleta como yo necesita masajes ya lo sabes idiota! Venga! Ponte a ello ya y después pensaré tu castigo por la tardanza.

• No esta vez.

• Como que no?! Sabes lo que pasará si no lo haces, le diré algo malo a mis padres y me creerán. Les diré por ejemplo que te he pillado drogandote, eso explicaría tus pintas de muerto habituales, pintas de yonki.

• Mejor me vas a dar tu a mi el masaje de pies Eliza, venga hazlo.

El chico se sentó y contempló con disfrute como la chica mirándolo con asco y perplejidad se agachaba, lo descalzaba y empezaba a masajear como él solía hacerle a ella

• Agh. No entiendo porque estoy haciendo esto!

• Calla y chupame los pies.

Quiso humillarla aún más por todo lo que le había hecho pasar a lo largo de los años y la puso a lamerle los pies y chuparle los dedos. Poco paso antes de que diera otra orden.

• Desnudate. Quiero ver tu cuerpo.

• Qué?! Por que iba a hacer eso?! Te has vuelto loco?! Y... por qué lo estoy haciendo?! - la chica se iba sacando la ropa ante su propia incredulidad. El chico repantingado en el sillón la miró con atención y no fue hasta que estuvo totalmente desnuda que volvió a hablar.

• Sacame la polla y mamamela que mientras lo haces te contaré el porque lo haces y para ello tienes que estar callada - La chica intentó decir algo al respecto sólo para descubrir que no podía hablar al haberle dicho que se callara. Así pues con ojos furiosos saco el miembro del chico y empezó a deleitarlo con la primera mamada de su vida - oh si, se siente mejor de lo que pensé... mira, la verdad es que haces esto porque soy tu dueño, te vas a dar cuenta que así son como deben ser las cosas por eso ahora mando yo y tú no serás más la princesa que crees ser sino la esclava que mereces ser de alguien tan superior como soy yo. Y sabes lo mejor? Que tú estás de acuerdo! Verdad que si? Oh vaya si no puedes hablar, bueno sigue tragando.

Como era su primera vez el chico se corrió rápido llenando la boca de la chica.

• Y dime sucia esclava, a que estas feliz con tu nuevo puesto a los pies de tu amo?

• Si amo, es el puesto que merezco y estoy muy feliz

Cap 3. Prima esclava

Eliza se convirtió así en la esclava de Michael, su primo y a la vez muy adorado amo.

Con las órdenes apropiadas dadas, la chica se comportaba como siempre hasta que se encontraba a solas con él, entonces se transformaba completamente.

Su puesto normal salvo que él ordenase algo era con su nuevo vestido de sirvienta (bastante escotado y corto) y un collar de perro en el cuello mientras se mantenía a su pies esperando sus órdenes. Tenía prohibido sentarse en el sofá o las sillas a no ser que él le dijese lo contrario, ella pertenecía al suelo, su lugar siempre debía estar por debajo del amo.

Aparte de ahora ocuparse de todas las tareas de la casa, Eliza debía bañar ella a su primo. Y por supuesto satisfacerlo en todo, a veces cosas simples como hacer de reposapies o traerle algún aperitivo de la tienda de la esquina, otras veces la cosa se volvía más sexual y ella debía desnudarse y empezar lamiendo los pies del amo para luego subir hasta el adorado miembro de su dueño.

Una vez que la verga estaba bien mamada y dura, ella se colocaba solita encima de ella penetrandose de una sola sentada aunque doliese, ella cabalgaba y hacia todo el trabajo... salvo cuando el amo deseaba ser duro.

Entonces la ponía contra la pared y la penetraba con toda la violencia que su cuerpo le permitia, azotandole el trasero y abofeteandole la cara, él le ordenaba que con cada golpe pidiera más y ella lo hacía.

Por supuesto su culo no quedó libre. Poco paso hasta que el amo deseo tomar ese orificio hasta entonces sin profanar y a ella no le quedó más remedio que entregárselo. Aunque por órdenes ella estaba de acuerdo en entregarlo no por ello le resultó menos doloroso, lloró, gritó e imploro el fin hasta que el amo ordeno parar y la chica por más que quiso no pudo seguir haciendo ruido. Al acabar como siempre tuvo que dar las gracias. Y de hecho se sentía agradecida porque era su destino ser esclava y él la convertía en cada vez mejor esclava, estaba segura de esas cosas dado que el amo lo había dicho.

Así fue como la vida en casa de Michael se transformó en lo que él consideraba un paraíso.

Pero aún faltaba mucho por hacer, la vida fuera de casa seguía dando asco y eso es algo que él iba a cambiar.