Mi padre ejecutivo (5)

Esta es la noche en la que salgo de fiesta con Samuel y me quedo a dormir en su casa, aunque dormir lo que se dice dormir no hicimos.

Recomiendo leer los anteriores relatos para entender la historia.

Aquí estoy de vuelta, perdonad el retraso. Estoy ocupado con temas de la universidad, pero iré escribiendo de cuando en cuando. Todos los relatos hasta el momento ocurrieron el año pasado así que intentaré contar lo más interesante y morboso, también hay historias que ha habido durante el confinamiento con mi padre y si quereis también puedo hacer algún especial de cómo fué la primera vez de mi padre y yo, o algun "juego" que hemos hecho mi padre y yo aunque no tenga que ver con la historia principal. --------------------------------------------------------------------------

Esa noche fuimos mi padre y yo a un centro comercial no muy lejos de casa, cenamos en un restaurante de comida rápida y luego vimos una película en el cine. Era su forma de agradecerme el favor que le había hecho de caerle bien a Don Gregorio. Estuve dándole más vueltas a lo que había pasado con Diego que a la supuesta insinuación del viejo, igual Diego se había arrepentido de todo una vez perdido el calentón, me daba miedo que no me tratase igual que siempre, o que incluso se marchara a trabajar a otra empresa.

Volvimos a casa y como estábamos cansados nos fuimos pronto a la cama para dormir (mi padre y yo no follamos todos los días, también estamos cansados o no nos apetece aunque en las fantasías la gente folle 4 o 5 veces todos los días jajaja). Me desperté y mi padre seguía durmiendo, como era sábado no tenía trabajo y podía dormir más, él me prefiere aprovechar la mañana del domingo más que la del sábado, así que acurruqué a su lado y puse mi cabeza sobre su pecho sintiendo su respiración, me da mucha paz estar así en la cama con él. Hice una lista mental de lo que haría ese día: Primero, cuando fuéramos a desayunar los dos le contaría lo ocurrido con Diego, y si me pregunta por qué no se lo conté ayer le diría que seguía algo alucinado por lo ocurrido y se me pasó (en lugar de decirle que estaba rayado por lo de Don Gregorio); Segundo, hablaría con Samuel para ver como quedábamos para la noche y planear bien las cosas y que fuera una noche divertida; Tercero, por la tarde cuando tuviera algo de intimidad llamar a Don Gregorio como me dijo y que me explique exactamente que quería de mí, a lo mejor no me insinuaba nada en absoluto y yo mismo me estaba montando un lio en la cabeza, aunque parecía que me proponía algo sexual en toda regla. La persona más mayor con la que he hecho alguna vez algo es mi padre, y Don Gregorio debe de sacarle unos 20 años, no es que fuera un Sugar Daddy maduro si no que era casi como mi abuelo, no me gustan mucho los maduros en el ámbito sexual pues como para gustarme un sexagenario. Aun así me dio morbo pensar que ese viejo rico dueño de la empresa y jefe de mi padre quisiera hacer algo conmigo a cambio de ayudarlo laboralmente, era prácticamente prostituirme con un señor 40 o 45 años mayor que yo, la verdad es que la situación suena erótica, y mientras lo iba pensando menos grima me daba ya que para su edad Don Gregorio tampoco estaba mal y además ese traje tan caro le quedaba estupendamente.

Así andaba imaginándome mil cosas cuando noto que mi padre se mueve, me rodea con un brazo y me da un bezo en la cabeza.

-Buenos días hijo, has dormido bien?

-SI papá, muy bien, ya me hacía falta dormir unas cuantas horas y sin madrugar jajaja.

-Quieres bajar ya a desayunar?

-Espera un poquito, que se está muy a gusto en la cama -  le dije apretándome más a él. Me apetecía hacer algo esa mañana, pero había quedado con Samuel a la noche y prefería estar 100% para él.

-Te importa si hoy no hacemos nada papá? Es que he quedado con Samu para salir esta noche y me ha invitado a dormir a su casa aprovechando que no están sus padres – dije levantando un poco la cabeza para mirarle.

-Claro que no hijo, que preguntas haces – me dijo dándome otro beso en la cabeza y abrazándome más – sabes que no eres un esclavo sexual o algo así jajajaja aquí lo hacemos cuando tú quieras – y me dio otro beso.

-Bueno también me gusta que me obligues jajajaja – le dije juguetón.

Empezamos a acariciarnos y a reírnos, hablamos de algunas cosas sin importancia y vi el momento para contarle lo de Diego, mejor que esperar para desayunar.

-Oye papá, tengo que contarte una cosa que pasó ayer.

-Claro hijo, de que se trata?

Le conté todo de principio a fin, sin omitir detalles, yo seguía con la cabeza apoyada en su cuerpo mientras se lo contaba y él me acariciaba el pelo. Al principio estuvo muy sorprendido, aunque fuera él quien me animó a lanzarme en el fondo lo hacía de broma ya que no pensaba que a Diego le molaran los tíos. Cuando ya le aclaré algunas dudas y le conté lo de la corrida en la cara y chuparle a Diego mi leche de su zapato ya no estaba flipando, estaba caliente.

-Joder hijo, estas hecho todo un campeón come pollas, mira como me has puesto – dijo riéndose y señalando con las cejas la enorme carpa bajo las sabanas.

-Fue muy guay si, aunque me gustaría ayudarte con eso pero ya sabes que he quedado con Samu esta noche – le dije poniendo cara triste.

-Pues esta noche tendré que hacerme una paja aquí solo mientras a ti te folla el vecino – dijo fingiendo también que estaba triste y resignado.

-Puedes quedar con alguien, no tienes algún amigo de esos con los que quedabas antes? – antes de que mi padre y yo hiciéramos cualquier cosa él tenía algún rollo de vez en cuando con unos pocos hombres de su edad, cuando empezamos a hacerlo él y yo dejó de verlos con la misma frecuencia y ahora prácticamente solo folla con otras personas cuando se va de viaje de negocios a otra ciudad, aunque me ha dicho que generalmente son polvos de una noche.

-Pues no sé, tendría que buscar por algún lado si quiero quedar porque no tengo contacto con nadie de por aquí.

-Ya, bueno yo podría ayudarte con eso – me estaba poniendo cachondo y tenía unas ganas de comérsela y de que me penetrase enormes, pero tenía que aguantar para estar a tope con Samuel así que tuve una idea.

-Que vas a hacer? – me preguntó mi padre viendo que me quitaba sus fuertes brazos de encima y me ponía tumbado boca abajo en la cama, como para ir a dormir, pero con el culo en pompa.

-Ven, te dejo que te frotes con mi culito para correrte, es lo mejor que puedo ofrecerte ya que no te la puedo comer ni dejar que me rompas el culo – le dije mirándole con vicio y poniendo un tono sexy, me gustaba cuando mi padre se frotaba por las noches con mi culo antes de hacerlo.

-En serio me dejas hijo? – que mono se ponía mi padre cuando me pedía permiso o preguntaba si estaba seguro, se le veía más inocente que a mí.

-Claro papi, yo estoy para darte placer, pero intenta no metérmela porfi – le dije con mi tono de niño bueno.

-Va a ser difícil resistirme a este caramelito hijo, pero lo intentaré – me dijo riéndose y poniendo las rodillas a los lados de mi culo. Se pajeó un poco para ponerla dura del todo y yo de mientras movía mi cadera para ponerlo más cachondo, mientras hacía eso mi pene se restregaba aplastado contra las sábanas, el colchón y mi cuerpo dándome mucho placer.

Noté como mi padre ponía la punta de su pene en la raja de mi culo y la iba restregando lentamente arriba y abajo, yo movía también mi culo acompañándolo para darle más placer. Empezó a bufar por el gusto, notaba como empezaba a soltar mucho precum que ayudaba a la lubricación y podía mover el pene de manera más fácil.

-Mmmm si papi, disfruta de mi culito, úsalo como quieras – le decía yo en tono seductor, me gustaba provocarle.

-Me estás dando mucho gusto con tu culo hijo, mucho mejor que una paja jajaja – me dijo apoyando las manos a los lados de mis hombros y moviendo la cadera – uffff si, como me gusta, tienes un culo precioso peque.

-Es todo tuyo papi – le decía gimiendo, a mí también me estaba dando mucho gusto sentir todo su pene duro y caliente frotarse con la entrada de mi ano, notaba como sus huevos chocaban con los míos y su pene llegaba hasta el final de mi espalda, y cuando movía su pene de atrás a adelante la cabeza se quedaba atascada medio segundo con mi ano, como queriendo entrar.

-Uffff hijo, es una pena que no quieras hacer nada hoy, estoy muy caliente aaaah – decía gimiendo.

-Querer si quiero papi, pero es que quiero tener el culo bien estrechito para Samu, la primera vez que lo hicimos fue después de que me follaras en el despacho y lo tenía ya dilatado, seguro que disfruta más sintiéndolo bien apretado – le decía mientras gemía.

-Así que es por eso uffffff, quieres tener el agujero bien apretadito para que te lo rompa verdad? Aaaahhh eres una putita viciosa mmmm – mi padre estaba cachondísimo, cada vez se frotaba más rápido y fuerte contra mi culo, estaba dejándose caer poco a poco aplastándome cada vez más contra el colchón, su pene estaba totalmente lubricado por el precum y algo de sudor suyo.

-Pues lo siento por Samu hijo, pero no puedo aguantarme más – no me dio tiempo a reaccionar cuando noté que en una de las embestidas que me hacía mi padre mientras se frotaba apuntó con su pene a la entrada de mi culo y me la metió de golpe. Pegué un grito ahogado en la almohada.

-AAAAAAGGHHHhhh, JODEEEER PAPAAAAA – chillé, mi padre al meterla dejo caer todo su cuerpo contra el mío, aplastándome sin dejar que pudiera moverme y agarrándome las manos sujetándolas junto a mi cuerpo. Empezó a bombear en mi culo de manera rápida y fuerte, no estaba siendo nada delicado.

-Lo siento peque, lo siento, lo siento, lo siento mmmmufffff – era lo único que me decía mi padre pegado al oído mientras bufaba, el muy cabrón prácticamente me estaba violando, sin pedirme permiso y después de decirle que prefería dejar mi culo sin dilatar para Samuel, además de que no me preparó antes el culo, su pene estaba lubricado pero mi agujero no.

-Joder papá, eres un capullo aaaaahhh aunque sea ufffff hazlo más ¡JODER! Aaaah más suaveee ahhhh – le decía yo casi sin poder hablar de la follada. Varios años de follar con mi padre habían ayudado a acostumbrarme a su pene por lo que después del dolor y sorpresa inicial me adapté rápido a él, aunque me estuviera dando desde el primer momento muy fuerte, estaba gimiendo y estaba más molesto por no hacerme caso de que quería dejarme el culo apretado que por la “violación” que me estaba pegando, de hecho me daba algo de morbo.

-Joder hijo! Aaahhh lo siento, lo sientoohh, no aguanto maaaaaas uffffffff – noté como se corría de manera abundante dentro de mi culo, genial pensé, aparte de dilatado también me lo va a dejar lubricado, bueno, espero que para la noche después de lavarlo bien quede más “virginal” que ahora.

Fue moviéndose cada vez más lento, debía de estar muy cachondo porque la “violación” duro solo un par de minutos, o eso o quería correrse rápido para no hacerme más daño.

-Joder hijo…..perdóname….lo siento mucho…..estaba muy cachondo y….no sé, ha sido como que algo se ha apoderado de mi…… no te habré hecho mucho daño verdad?– me decía recobrando el aliento, por su tono de voz estaba realmente preocupado y eran unas disculpas sinceras.

-No te preocupes papá – le dije intentando recuperar el aliento también sin poder moverme al tener a mi padre todavía encima de mí – me ha dolido cuando la has metido al principio pero luego ya no, me ha jodido más que te pasaras por el forro de los cojones lo de que no quería follar, pero bueno, supongo que soy irresistible jajaja – le dije entre algo molesto y con un poco de broma para quitarle hierro al asunto y que no estuviera tan preocupado.

-Perdón hijo, perdón – empezó a darme besos por toda la cara – no volverá a pasar, te lo prometo, joder como he podido ser tan bestia.

-Tranquilo papá – y le di un beso para que se calmara, la verdad es que estaba bastante preocupado, ya habíamos jugado a que él me violaba o que me lo hacía sin mi consentimiento, pero esta vez que había sido en serio se notaba que estaba profundamente arrepentido porque él en realidad no es así, había sido el calentón que se había ido de madre – no pasa nada vale? Tranquilo, que estoy bien, pero a cambio este fin de semana limpias tu solito la casa jajaja.

-Sí por supuesto, lo que quieras cariño – y me dio un abrazo tierno – no quería hacerte daño de verdad – me dijo al oído.

Después de que yo me recobrara de la follada y mi padre estuviera más calmado nos aseamos un poco y bajamos a desayunar. Como compensación también me haría mi padre el desayuno, ese fin de semana yo no iba a hacer ninguna labor de la casa, al final hasta salía ganando, menos por mi culo dolorido jajaja.

Fue pasando el día y después de comer ya estaba hablando con Samuel por whatsapp para decidir a qué hora quedábamos para salir de fiesta. Me dijo que como le llevaba yo a la discoteca gay que dijera la mejor hora para ir, así que quedamos en la parada de bus de la urbanización a las 10 de la noche, tomar algo por algún bar primero y luego sobre las 12 y media entrar a la discoteca, ya que aunque habría a las 11 hasta las 12 no entra prácticamente nadie. Los dos teníamos ganas y me lo decía:

-Vale pues a esa hora en la parada de bus, joder tengo ganas de salir contigo de fiesta y luego comerte por la noche jejej – me dijo.

-Yo también tengo muchas ganas…  de todo jaja – respondí – tus padres se han ido ya?

-Sí, se han ido al medio día, hasta mañana por la tarde tengo toda la casa para mi solo jeje.

-Oye, pues me podrías invitar a cenar y así estamos un rato más juntos no? (emoticono de cara pícara).

-Por mí perfecto, mientras a tu padre no le importe. Eso sí, no le digas que sales conmigo de fiesta ni que te quedas a dormir aquí, sabes que todavía no quiero que nadie sepa lo mío.

-No te preocupes, mi padre es fácil de convencer y tampoco pide muchas explicaciones.

-Qué suerte, los míos suelen andar detrás de mí todo el rato, hasta me ha costado convencerles de que me dejen la casa sola estos días, ellos pretendían que me fuera a casa de mi abuela en el centro, como si fuera un niño pequeño jajajaja.

-Jajaja o puede que tuvieran miedo de que hicieras una fiesta como en las películas y les destrozases la casa, como todavía eres un niño pues pensarán que no puedes encargarte tu solo de la casa – le dije de broma para picarle.

-Como que un niño?! Pero si tengo 18 y tú solo me sacas un año, que vas aquí de tío maduro o qué? jajaja.

-Bueno pues lo que yo digo, un crio, aquí el adulto de los dos soy yo, en realidad voy a tu casa para hacer de niñera y que no te portes mal jajaja – le seguí picando y le puse emojis sacando la lengua.

-Que cabrón, te vas a enterar esta noche, a ver quién es el adulto de los dos y quien el crio – el comentario me puso cachondo, picar y provocar a alguien con quien vas a acabar follando si o si es lo mejor.

Seguimos hablando y picándonos el uno al otro un rato más cuando me acordé del asunto de Don Gregorio. Me dio mucha pereza pero tenía que hacerlo, quería saber a qué si era una insinuación como yo pensaba. Busqué en la cartera que tenía en el cuarto y saqué la tarjeta que me había dado donde venía su número de móvil. Cerré la puerta para que mi padre no me escuchara y fui marcando los números mirando la tarjeta. Estuve un rato dudando si darle a llamar o no, de cómo podría empezar la conversación o que es lo que me diría Don Gregorio. Al final le di a llamar, mientras sonaba el pitido me puse muy nervioso y entonces una voz respondió.

-SI dígame? Quién es? – reconocí la voz de Don Gregorio al momento.

-Bu-buenos días Do-Don Gregorio – me temblaba la voz y no sé por qué, ni siquiera sabía lo que él podía querer de mí, respiré hondo un segundo y me concentre en hablar normal – soy Carlos Gómez, el hijo de David Gómez, nos vimos la semana pasada en la “fiesta” de la oficina y me dijo que lo llamara.

-A si, muchas gracias por llamarme Carlos, pensaba que al final no lo harías, pero recuerda que no hace falta que me llames Don Gregorio, con señor Areza es suficiente – su tono era de simpatía, me seguía pareciendo el hombre simpático de cuando lo conocí.

-Bueno señor Areza, sigo sin saber muy bien para que quería que lo llamase – contesté.

-Veras, es sobre lo que te dije la última vez, tu padre es uno de los hombres que había pensado para darle ese ascenso, pero ese puesto es para alguien con el que tenga confianza absoluta.

-Ya… - dije para hacerle saber que estaba atento a lo que decía.

-Y para es – siguió – es necesario que conozca un poco mejor a su entorno más cercano, como ya te dije. A tu padre ya lo conozco bastante, es muy trabajador y muy buen candidato, por lo que me gustaría conocerte a ti personalmente un poco mejor.

-Y qué quiere decir con conocernos un poco mejor? – me hice el inocente.

-Creo que eres lo suficientemente listo como para saberlo Carlos, que te parece si el sábado que viene vienes a mi casa y tomamos algo por la tarde y así hablamos mejor – vale, ya no cabía duda, el viejo se me estaba insinuando y además con algo de chantaje de por medio por lo de ese ascenso.

-El sábado que viene…. pueees – estaba pensativo, no me gustaba especialmente ese señor de manera sexual, se salía bastante de mi gusto de edad. Aunque al mismo tiempo me daba bastante morbo, hacerlo con el jefazo de la empresa de mi padre para darle un ascenso, sería casi como una puta pero para ayudar a mi padre, la idea no me disgustaba del todo, aunque tenía mis dudas.

-Sé que parece todo un poco precipitado – dijo mientras yo dudaba - y sé lo que piensas, que te estoy chantajeando, y nada más lejos de mi intención. Tu padre seguirá siendo uno de los candidatos me digas lo que me digas, y el sábado que viene no pasará nada que tu no quieras hacer, vale Carlos? – esas palabras me tranquilizaron, parecía un tío legal, no parece que quisiera aprovecharse de mí, el tener la oportunidad de ser yo quien decidiera hacer algo o no me la puso un poco dura, así que le respondí.

-Vale, pues me parece bien, el sábado que viene quedaremos en su casa señor Areza.

-Estupendo! Me alegra que te animes, te voy a decir mi email para que podamos hablar por ahí esta semana, prefiero no usar mensajes en el móvil por temas de discreción, es el móvil del trabajo, aunque si quieres llamarme ten la confianza para hacerlo.

-Está bien señor Areza, vamos hablando esta semana – le dije ya sin nervios y hasta con algo de ganas por ver que ocurría la semana siguiente.

-Perfecto chico, apunta mi email – me dio su email y lo apunté en una hoja que tenía por ahí – que tengas un buen día, hasta la semana que viene.

-Igualmente señor Areza – colgué.

Me quedé un rato sentado en la cama pensando en todo, tenía que poner mis pensamientos en regla, en primer lugar esa noche iba a ir de fiesta con Samuel y después me quedaría a dormir en su casa (aunque dormir seguramente poco), segundo estaba Diego, hasta que llegara el lunes y mi padre fuera a trabajar no iba a saber nada de él, de si está bien o de si se arrepiente de lo que pasó, mi padre me dirá si le ha notado raro o algo. Y tercero, había quedado para una especie de “cita” con el jefe de mi padre, el cual me saca más de 40 años, para “conocernos mejor” y así darle a mi padre un ascenso. Joder, todo esto estaba siendo un lio para mí, eran demasiadas personas a la vez teniendo en cuenta que hasta hace dos semanas mi padre ha sido prácticamente la única persona de la que me he tenido que preocupar en el tema sexual.

Decidí dejar rayarme por estos temas e hice tiempo hasta que me tuviera que preparar para salir jugando con el PC en el cuarto, cuando dieron las 8 me fui al cuarto de baño, me duché bien, me lave bien por todos lados para la noche y me puse ropa cómoda para  salir de fiesta. Sé que a Samuel le ponen los tíos en chándal pero aunque la discoteca no tenía normas de vestir no iba a ir en chándal a una discoteca, así que me puse algo que me hiciera parecer un poco Cani que también le pone y listo. Me puse unos vaqueros negros algo apretados y un suspensorio blanco debajo (esto de sorpresa para la noche), una camiseta de tirantes roja porque iba a hacer calor y una sudadera para estar por la calle antes de entrar. Me miré en el espejo y me gustó como iba.

Me había preparado muy rápido, eran las 8 y media pasadas así que había tiempo de sobra para cenar en casa de Samu, sin prisas. Cogí mi móvil y cartera del cuarto y bajé a la planta de abajo para salir. Mi padre estaba en el sofá leyendo el periódico, me acerqué a él por detrás y le di un beso en el papo.

-Me voy a casa de Samu a cenar, nos vemos mañana que ya sabes que también me quedo a dormir con él.

-Pásalo muy bien hijo – me dio un beso en el papo también – déjame ver cómo vas.

Yo me puse delante y le dejé ver bien cómo iba, me daba la vuelta de manera sensual de broma, como si fuera un modelo. Mi padre dejo el periódico abierto en sus piernas y se puso la mano en la barbilla como pensando.

-Creo que vas un poco provocador no crees? – me dijo de broma – ya sabes que hay hombres mayores pervertidos en las discotecas buscando jovencitos, ten cuidado vale?

-En serio hay adultos que buscan chicos de mi edad? – fingí estar sorprendido – no puedo ni imaginarlo – y nos reímos los dos.

-Bueno me voy ya que Samu me está esperando – dije.

-Espera llevas dinero? – me dijo dejando el periódico a un lado y cogiendo su cartera.

-Sí que tengo papá, no me gasto toda la paga que me das- le dije riéndome.

-Bueno da igual, toma 50€ para que invites a Samu a algo y no tengas problemas con el taxi de vuelta.

-Joder papá que tengo dinero no hace falta que me des tanto – en realidad para mi padre no era mucho dinero, pero como nunca he sido muy de gastar (no soy agarrado, es solo que no me va el rollo de ir de compras jajaja) pues a mí sí me lo parecía.

-Da igual, tu cógelos, no es obligatorio que los gastes – me los dio y aprovechamos para darnos un pico – venga, vete y no hagas esperar más a Samuel -  me dijo dándome un cachete en la nalga – que envidia que él vaya a comerse esto esta noche.

-No has tenido suficiente con lo de esta mañana cabrón? – le dije en broma guiñándole un ojo y sonriéndole, él se puso un poco rojo.

Salí de casa, todavía había bastante luz, se notaba que nos acercábamos a junio, en nada empezaría con los exámenes y supongo que Samuel también tendría que estudiar para selectividad.

La casa de Samuel está a 3 casa de la mía por lo que llegué en nada, le mandé un mensaje mientras me acercaba a la puerta y al llegar toqué el timbre también. Me abrió la puerta muy sonriente, llevaba puestos unos pantalones pitillo negros un poco rasgados y una camiseta como de andar por casa o hacer deporte que no pegaba nada.

-Que pasa que tu solo tienes pantalones pitillo? Jajaja – le dije al saludarle de broma – y vas a ir con esa camiseta? No le pega nada a un chico pijo como tú – seguí diciendo en tono de provocación.

-No joder, voy a llevar una camisa, pero no me la voy a poner para cenar jajaja – me dijo riéndose, cerró la puerta y al momento me agarró de la cintura, me estampó con un poco de fuerza a la pared y puso su cara muy cerca de la mía – muy vacilón estas tu no? Jejeje – me dijo antes de empezar a liarnos. Nos besamos de forma lenta pero con ganas – es que me gusta vacilar a los niños pijos – le respondí de manera sensual – así luego son más duros conmigo – dije poniendo cara de vicio.

-Pues yo siempre soy muy duro – dijo sin apartarse de mi pero empezando a mover suavemente la cadera, rozando nuestros paquetes – y más aún con un Cani perroflauta como tú – dijo en tono sensual mientras me empezó a dar pequeños besos en el cuello.

-Joder cabrón – dije cachondo perdido – y se supone que no has tenido experiencia de antes? – le dije riéndome.

-He visto mucho porno, he aprendido algunas cosas para hacer en los preliminares jejeje – me dijo riendo.

Yo estaba super caliente con sus caricias, me tenía atrapado entre él y la pared, a la vez que me abrazaba con sus brazos, que aunque no fueran nada exagerado comparados con los míos tenían bastante musculo. Estaba mentalizado de que tendríamos un polvo rápido antes de ir de fiesta cuando se aparta de golpe de mí.

-Venga, vamos a cenar que luego no nos da tiempo de llegar – me dijo en tono de colegueo, cambió la actitud de machito dominante a la de amigo de colegio en un segundo. Yo le dije de coña:

-Joder tío, me vas a dejar así? – dije señalando al bulto de mi pantalón.

-Sí – me dijo – que no tenemos tiempo sino – y acercándose me dijo al oído – ves? Yo también puedo calentar y vacilar jejeje. Yo me reí y le seguí a la cocina.

Cenamos en su cocina tranquilamente, se nos fue bajando el calentón y estuvimos hablando como dos colegas del instituto. Hablando de muchos temas, entre ellos de sexo, nos intentamos contar el uno al otro más sobre nuestros respectivos fetiches, algún detalle más o que molaría hacer algún “role play” los dos juntos algún día. Le conté que aunque yo como bisexual también me sentía atraído por las chicas todavía no había estado con ninguna, solo algún lio rápido con alguna en una discoteca pero poco más, así que Samuel me contó cosas de su relación con su ex novia y algún consejo, porque al parecer el con las chicas era un ligón, pero que ahora al descubrir también a los tíos esa parte suya la tenía un poco aparcada. Terminamos de cenar y de hablar y Samuel se cambió la camiseta por una camisa de fiesta azul claro, salimos de su casa y llegamos a la parada de bus sobre las 10 de la noche, estuvimos esperando al autobús un rato y de camino al centro seguimos hablando de nuestras cosas. No había casi nadie en ese autobús a esa horas, y como nos pusimos por la parte de atrás Samuel me estuvo tocando el muslo y la rodilla bastante rato, para querer discreción sí que le molaba tocar en sitios públicos, pensé.

Llegamos casi a las 11 y fuimos andando hasta una zona de bares a la que solía ir antes de ir a la discoteca. Estuvimos bebiendo tranquilamente y poco a poco nos fuimos animando más, teníamos ganas de fiesta y el alcohol nos ayudaba a desinhibirnos. Después de unas cañas entramos a la discoteca y fue una noche genial, estuvimos bailando y haciendo, riéndonos y pasándolo genial, era la primera vez que Samuel iba a una discoteca de ambiente y le gustó mucho, nos podíamos liar sin pensar en quien nos veía, sobre todo para él, que en público era más cortado a la hora de besar y tocar. Bebimos más y aunque no nos emborrachamos del todo sí que pillamos el puntillo con el que estás todo el rato sonriendo y pasándolo bien por lo que sea, un chico intentó lugar conmigo y a Samuel le entraron como 4 tíos (normal, está bastante bueno y aunque iba vestido algo pijo le hacía muy sexy), pero no les hicimos mucho caso al estar juntos. La noche pasó súper rápido y para las 6 de la mañana ya cerraron la discoteca, como a esas horas todavía no había autobuses que nos llevaran a la urbanización pillamos un taxi, intentábamos disimular las  ganas que teníamos de liarnos allí mismo, pero no queríamos montar una escena. Al llegar a la urbanización quise pagar el taxi pero Samuel no me dejó, ni siquiera pagar a medias. Me dijo que como había invitado yo en la discoteca a un par de copas que esto lo pagaba él.

De camino a su casa, y estando algo pedo, le dije de broma que la próxima vez le llevaba pero para follarse a los tíos que quisiera, que allí esa noche había triunfado y pero que se había conformado conmigo.

-No me he conformado contigo tonto, es que tú eres mejor que cualquiera de esas zorras jajaja – me dijo con algo de dificultad para pronunciar bien las palabras.

Entramos a su casa y nada más entrar se me echó encima, no habíamos ni cerrado la puerta, y empezó a comerme la boca esta vez de manera más salvaje que en la discoteca.

-Joder, llevaba horas esperando para esto – me dijo.

-Bufff y yo, pero mejor si cerramos la puerta antes no? Jajaja – le dije.

Cerró la puerta casi de golpe y siguió morreándome. Fuimos a la habitación como pudimos, ya que con el pedo y que Samuel no dejaba de abrazarme ni despegarse de mí, fue complicado subir las escaleras y esquivar los muebles sin caernos.

Al final llegamos a su habitación, la casa era prácticamente idéntica a la mía porque la urbanización se construyó con casas iguales, pero su habitación estaba en lo que en mi casa sería el despacho de mi padre. Al estar cachondo, liándome con Samuel y algo pedo, ni me fijé en cómo era la habitación al entrar, solo noté como Samu me tiraba a y luego él gateo hasta mí como si fuera un león y yo su presa, así como estábamos seguimos besándonos pero esta vez más tranquilos, disfrutando el momento.

-Me gusta mucho estar contigo – me soltó de golpe, me dio mucha ternura el comentario y la manera en la que lo dijo.

-A mí también me gusta Samu, tenemos que salir de fiesta más a menudo jeje.

-No me refería solo a la fiesta – y me sonrió antes de seguir besándome suavemente.

Se incorporó poniéndose de rodillas sobre mis piernas y se empezó a desabrochar la camisa, yo me quité la camiseta en un segundo y le aparté las manos para quitársela yo. Le fui soltando los botones a la vez que le besaba su pecho que ya se quedaba al descubierto. Terminé de desabrochársela y él se la abrió por completo, me quedé un rato mirándole, no tenía un cuerpo de gym pero sí que estaba fibrado y tenía bastante más musculo que yo, buenos pectorales y se le notaba un poco de tabletilla. Así con la camisa abierta y con la piel brillante por el sudor de la noche vi que Samuel estaba realmente bueno. Me rodeo el cuello con sus fuertes brazos y nos besamos, mi polla estaba ya dura y a él se le marcaba un buen paquete en esos pantalones tan ceñidos, empezó a moverse encima de mí de manera sensual, moviendo las caderas y rozando con su culo mi paquete.

-Que pasa, es que quieres que te dé por el culito? Jeje – le dije de broma.

-Ya te gustaría, en mi culo no entra nadie, por lo menos de momento jajaj.

Me dio un pico y se apartó un poco, para seguidamente agarrarme y darme la vuelta con mi cara contra la almohada. Me quitó los pantalones de manera violenta, sin desabrocharme el cinturón, solo estiró y me los sacó. Se quedó quieto cuando vio la sorpresa que le tenía preparado para esa noche.

-Joder tío, y esto que llevas puesto? – me dijo sonriendo y agarrando mí suspensrio, yo seguí tumbado y girando la cabeza para mirarle le dije:

-Te gusta? Me los he puesto para que puedas follarme con ellos puesto como a una zorrita – le dije de manera lasciva, moviendo mi culo para provocarle más.

-Que si me gusta? – me dijo acariciándome las nalgas – me encanta – y abriéndome las nalgas respiró profundamente con su nariz muy cerca de mi ano – bua tío, como me pones – y después de decir esto me dio un lametazo que me hizo gemir de placer.

-Aaaaghhh joder tío que gustooo.

Me empezó a comer el culo, dando lametones y metiendo tímidamente la lengua dentro de mi ano.

-Te gusta? Lo estoy haciendo bien? – me dijo dándome un azote en una nalga.

-Bua si tío, me gusta mucho, lo haces muy bien – dije yo respirando entrecortadamente por el placer.

-Joder que bien, es la primera vez que como un culo y es genial, sabes súper bien – y volvió a comerme el culo.

-Aaaaaaahhh – yo gemía como una perra en celo, lo hacía muy bien para ser su primera vez, puede que la “violación” de la mañana por parte de mi padre ayudase a que tuviera el ano sensible. Estuvo así unos minutos cuando paró, se levantó y se acercó a mi cara, quedándose de pie a mi lado. Se desabrochó el cinturón y se bajó los pantalones hasta los tobillos, yo me incorporé un poco y le bajé sus calzoncillos, dejando libre esa polla sin circuncidar de 18cm que miraba al techo.

Le di un lametón desde la base hasta la punta, bajándole la piel con la mano.

-Uffffff – es lo único que dijo, me agarró suavemente de la cabeza y me dejó hacer a mí.

Le fui lamiendo todo el pene por todos lados, dejándolo bien mojado con mis babas. Chupaba sus huevos, jugaba con ellos en la boca mientras le pajeaba, me metía uno y después otro y los dejaba bien húmedos.

Cuando tenía la polla bien mojada me la metí de una hasta la mitad, la tenía dura como una piedra y muy grande, me atraganté un poco, cosa que pareció gustarle porque me agarró más fuerte de la cabeza y me la dejó dentro unos segundos.

-Siiii tiooo, que boca tienes ufffff –decía con voz sensual – eso es Carlistos, trágatela entera – dijo a la vez que empezó a mover lentamente las cadera adelante y atrás y con la mano me obligaba a metérmela aún más.

La tranquila mamada que le estaba haciendo yo solo se fue convirtiendo en una follada de boca en toda regla, cada vez me entraba más polla mientras aguantaba las arcadas y respiraba con dificultad por la nariz, me estaba encantando. Samuel gemía y me animaba a seguir tragando, sus huevos chocaban con mi barbilla y mi nariz se hundía contra su cuerpo, me la estaba metiendo entera. Solo se escuchaba en la habitación la respiración entrecortada de Samuel y los sonidos que salían de mi garganta, saliva y arcadas.

-Ufffff que bien tragas Carlistos, eso es aaaahh, como me gusta siiiii, ah joder como me pones – Samuel me estaba follando la boca como un bestia, me agarró con las dos manos y la metió lo más hondo que pudo dejándola ahí metida. Yo me ahogaba y tosía, hasta que me entró una arcada grande y le empujé como pude para que me dejara respirar.

Me soltó y me saqué su polla, la cual estaba enorme y pringada de mis babas (de esas espesas que salen cunado la meten hasta la garganta), y empecé a toser y a respirar como pude.

-Joder ¡cof!¡cof!, macho me vas a matar, ufff tío hazlo más suave.

-Qué pasa? Es demasiado para ti la polla de un niño pijo? – me dijo sonriendo y en tono de burla, se estaba “vengando” por haberle vacilado sobre que era un crio y un pijo. Yo sonreí también y decidí picarle más, esa noche me apetecía que me dieran caña.

-No joder, pero a ese ritmo te vas a correr enseguida y no vamos a poder follar, que ya sé que los niñitos no aguantáis nada – eso lo dije a la vez que lamía su pene muy suavemente con la punta de mi lengua y en un tono de provocación y burla.

  • Hijo de puta, vas a flipar – y al decirme esto me agarró con fuerza de la cabeza y me la metió hasta la campanilla de una, yo intenté escaparme pero me tenía bien agarrado. Me estaba ahogando y el además movía la cadera como para meter aún más polla. Cuando notaba que me ahogaba de verdad y que no podía aguantar más me soltó. Cogí aire y al momento con la voz entrecortada por el esfuerzo le reté.

-Eso es todo lo que sabes hacer?

Aunque todo lo que decía lo hacía en tono de broma y de pique para que me diese algo de caña, esa frase le tocó en la hombría.

-Uufffff – dijo mordiéndose el labio inferior y negando suavemente con la cabeza mientras se pajeaba – la has cagado Carlitos, te vas a enterar – y se puso encima de mí.

En un movimiento rápido me abrió con una mano una de mis nalgas y con la otra se agarró del pene apuntando a mi agujero.

-Oye espera Samu que no te has puesto el conAAAAAAAAAAHHHH – no pude acabar la frase porque me la metió de golpe. Intenté enderezarme y hacer fuerza para sacarla, también le empujé un poco con mis brazos para que se apartara ya que me había dolido mucho.

Samuel viendo que intentaba escaparme me agarro los brazos con una mano y con la otra me agarró de la cinta del suspensorio obligándome a levantar aún más el culo, empezó a bombearme fuerte y sin parar. Yo solo sentía un gran dolor por el objeto extraño que entró de repente en mi culito, hasta se me escapaban algunas lágrimas, en ese momento le di gracias a mi padre por haberme abierto el culo a la mañana de esa forma, porque de haber estado bien cerrado como yo quería ahora mismo no tendría culo.

-SAMU DIOS AAAGGHHH, PARA POR FAVOOORR, AAAA, ME DUELE JODEERR.

-Haberlo pensado bien antes de vacilarme de esa forma Carlitos – me decía con tono de burla y con voz de depravado total – ahora déjame romperte este culito un rato, total, como soy un niño no creo que te haga daño – esto me lo decía sin para de follarme fuerte y dándome a veces azotes.

-TIO POR FAVOR, AUNQUE SEA HAZLO MAS SUVE JODEEER – aunque estaba acostumbrado a un polvo fuerte con mi padre, esa manera dan bruta y de golpe no ayudaba a que mi culo se acostumbrase a su polla y no paraba de dolerme.

-Pídeme perdón por llamarme crio Carlitos y dejare de violarte jejeje – dijo burlón.

-AAAAHHH DIOS LO SIENTO VALE UFFF AHORA PARA.

-Lo sientes por qué? PLAS! – y me dio un azote fuerte en una nalga – dime por qué lo sientes.

-JODER SAMU CABRÓN AAAAAHH SIENTO ABERTE LLAMDAO CRIO JODEEER PARA!.

-Samu? PLAS! A mi trátame con respeto PLAS! Quiero que a partir de ahora me llames Señor Samu PLAS! Entendido?

-JODER AAAGHH SI!

-Sí que? PLAS!

-JODER CABRON AAAGHH SI SEÑOR SAMU! – dije rindiéndome totalmente y siendo completamente sumiso.

En ese momento paró de follarme de golpe pero no me la sacó, me soltó los brazos los cuales moví de mi espalda a la almohada para agarrarla fuerte a la vez que Samu se dejaba caer encima de mí aplastándome entero.

-Buen chico Carlitos, espero que hayas aprendido la lección – y me empezó a besar de manera tierna, era increíble la capacidad que Samuel tenía para cambiar su actitud de macho activo y dominante al de  un chico tierno y mimoso en cuestión de segundos.

-Dios Samu cabrón, que daño me has hecho, yo solo quería vacilarte un poco para que me diera un poco de caña, no para esto – dije quejándome mientras Samu me daba besos por el cuello, hombros y cara, estaba completamente encima de mí pero no movía su cadera, por lo que poco a poco el dolor empezó a desaparecer a la par que mi culo se acostumbraba a su polla.

-Lo siento Carlitos, pero el que se burla de mí lo paga de alguna forma – dijo sonriéndome – además da gracias a que eres tú, a otro le hubiese metido una paliza jajaj.

-Joder pues no sé qué es peor – se me estaba pasando el dolor con sus mimos, caricias y a que no se moviera.

-Oye me has llamado Samu a secas? Te había dicho que ahora era Señor Samu jajaja – me dijo riéndose mientras me mordía la oreja.

-Pero eso iba en serio? Aghhh – se me escapó un pequeño gemido, ahora volvía a sentir placer.

-Claro que iba en serio, cada vez que follemos quiero que me llames Señor Samu, así no se te olvidará que por mucho que me saques un año yo soy quien manda aquí.

Ese tono entre cariñoso y dominante me volvía loco, esa podría ser perfectamente la definición de Samu a la hora de follar, un dominante cariñoso.

-Bueno pero no te creas que no voy a volver a vacilarte más, provocar es lo que más me gusta hacer – ya no me dolía el culo, sus caricias me habían calmado y mi experto ano se había amoldado rápidamente a su miembro una vez la dejó quieta dentro.

-Qué pasa? Es que tengo que volver a violarte como antes para que aprendas? – preguntó divertido.

-Haz lo que quieras, ya me he acostumbrado a tu polla, ya no tienes poder sobre mí – le dije sonriéndole y besándolo.

-Bueno eso habrá que comprobarlo – y empezó a darme por culo otra vez, esta vez era algo más suave que antes pero no tan bruto.

Ahora no me dolía nada, al haberme acostumbrado y tener una posición más cómoda podía disfrutar de verdad.

-Uffff siiii, joder eso es, ahora siiii aaaghh siga Señor Samu no pare – dije usando mi tono de puta tragapollas, llamándolo señor como él me había pedido.

-Siii joder, que culito tienes, te gusta ahora Carlitos? Te gusta zorrita?

-Siiiiii – dije gimiendo, es lo único que pude decir.

Estuvimos en esa posición unos minutos, solo se escuchaban nuestros gemidos y alguna frase que Samuel me soltaba para ponernos aún más calientes los dos. Me cogió del pelo y dándome azotes siguió penetrándome fuerte, pero delicado a la vez, no sabría cómo describirlo, desde fuera seguro que se vería como una escena de sexo fuerte pero para mí Samu estaba siendo cariñoso, se notaba que controlaba el no hacerme daño y de que disfrutara.

-Joder Samuuuu, me esta gustando muchooo aaaghhh – gemía.

-Parece que no aprendes – ¡PLAS! Me dio un azote más fuerte que los demás – tendré que amaestrarte como a un cachorro Carlitos - ¡PLAS! Del placer de la follada se me había olvidado llamarle señor.

Salió de mi culo con fuerza, yo solté un fuerte gemido por el vacío repentino que sentí. Samuel me cogió en volandas y me puso de pié contra la pared, con la cara medio aplastada contra un poste de algún grupo de música que en ese momento, evidentemente, ni supe ni quise saber de quién era. Me colocó el con sus brazos el culo en pompa y me la volvió a meter hasta el fondo, empujando con fuerza a la vez que me acercaba a el sujetándome de las caderas.

-AAAAGHHH – es el gemido, o más bien el grito de placer, que solté al sentir todo el miembro dentro de mí.

-Así aprenderás cachorrito - ¡PLAS! La verdad es que para poner motes eróticos al follar Samuel era un experto.

Seguimos follando en esa posición un buen rato, me estaba encantando, Samuel alternaba el sexo duro con azotes y diciéndome cosas eróticas con un ritmo más suave, con besos y más caricias. Cambiamos de posición poniéndose él tumbado boca arriba y yo cabalgándolo y después él me agarró cambiamos de posición, quedándome yo con las piernas abiertas y Samuel dándome fuerte por el culo.

Me pajeaba frenéticamente disfrutando de esa bestial follada, mirando la cara de puro placer de Samu y su cuerpo bastante más trabajado que el mío agarrándome de los tobillos.

-Quiero hacer esto contigo muchos más días Carlitos, cuando termine los exámenes voy a tener muchos días libres – me decía sin parar de follarme y con la respiración entrecortada.

-Uffff siii, en mi casa mi hay sitio casi todos los días, asiqué ven cuando quieras que yo también estoy terminando los exámenes.

Estuvimos dos minutos más así cuando noté que no podía más.

-Samu ahhhh joder, señor Samu voy a correrme, no aguanto más.

-Correte Carlitos, quiero ver como mi cachorrito suelta toda su leche.

-AAAAAAAGGGGHHHH SIIIII JODEEEEEER!!

Cuando dijo que yo era su cachorrito fue demasiado y empecé a correrme de manera copiosa, los chorros salían fuertes y acababan en mi pecho y alguno llegó hasta mi pelo. Fueron 6 trallazos grandes y con abundante semen, pocas veces había tenido una corrida tan abundante, me dejo totalmente relajado por el placer. Mi culo se cerró por la relajación de la eyaculación, lo que hizo que apretase mucho el pene de Samuel y el no pudo más.

-Me corro Carlitos AAAAAAAGGGGHHHH! – noté como me inundaba por dentro con su semen, también fue una corrida grande y larga. Era la primera vez que sentía la leche de alguien que no fuera mi padre dentro de mi culo.

Se dejó caer sobre mí, manchándose con mi semen, y dándome un morreo apasionado. Nos seguíamos besando mientras nos relajábamos y nuestros cuerpos se calmaban. Habíamos estado follando una hora y ya se notaba la luz del día que empezaba. La fiesta, el alcohol y ese pedazo de polvo acabó con nosotros, y de repente sentimos muchísimo sueño, solo teníamos fuerzas para seguir besándonos suavemente y acariciarnos un poco.

-Me encanta estar contigo Carlos – fue lo último que dijo Samuel antes de dormirse.

-A mí también Samu – le dije dándole un beso antes de notar como me quedaba dormido.

Y así acabó la noche (aunque técnicamente ya era por la mañana), con los dos dormidos, abrazados, manchados con mi semen y con la polla de Samu saliendo poco a poco de mi ano bañado de leche a medida que se desinflaba.

Continuará