Mi padre cumplio su promesa final
Final de la historia
MI PADRE CUMPLIO LA PROMESA – 12
Por la tarde Fran me llevo de compras, me compro una equipación para montar, pantalones, botas, guantes y todo aquello necesario para la equitación, luego fuimos al cine, no recuerdo la película que vimos, pero lo que sí recuerdo es que durante toda la proyección, Fran no soltó mi mano. De regreso a la casa y tras la cena, nos retiramos al dormitorio, fue entonces cuando le pregunte si el servicio estaba enterado de mi condición física.
- No Cariño, nadie sabe en la casa de tu condición, creen que eres una mujer y cuando tú quieras lo conseguimos.
- Para eso ya llegara su momento, de momento tengo pendientes las películas de las que hablamos.
- Ya sabes que cuando quieras hablo con el mejor cirujano para que te opere.
- Gracias, mi amor.
Esa noche hicimos el amor, el se tumbo en la cama y yo me puse encima suya, su pene ya erecto y duro lo fui metiendo en mi culo, una vez dentro comencé a moverme quería sentir como engordaba dentro de mí, tocaba mi punto P que me llevaba al clímax en eso exploto en un orgasmo llenando mi culo con su caliente esperma, yo aun no había llegado pero la explosión dentro de mi cuerpo me llevo a dar un grito de placer y caer sobre el pecho de Fran y unir mis labios con los suyos en un beso eterno.
Nos desacoplamos y nos abrazamos, y así nos quedamos dormidos.
Durante unos días permanecí en la casa por la mañana hasta que llego el día en que me dijo que podía acudir a la oficina a tomar posesión de mi trabajo como secretaria particular de el, me indico que debería llegar antes que el y que me presentase al jefe de personal, indicándole que era la nueva secretaria del jefe, el ya había dado las órdenes oportunas, me ubicaron en un pequeño despacho al lado del de Fran, como había estudiado secretariado en la residencia, puse todo los papeles que encontré por orden, cartas ordenador etc. y espere a que el llegase.
Cuando llego Fran, el jefe de personal me llamo y me acompaño al despacho de Fran para presentarme, como si no me conociese, el no quería que se supiese la relación que teníamos de momento. Su despacho y el mío estaban comunicados, lo que suponía una ventaja, ya que no tenía que salir al pasillo para ir a verlo.
Tras la presentación, Fran me dijo.
- Srta. Carla, quiere tomar nota de unas cartas por favor.
- Si Sr. de inmediato.
El Jefe de personal abandono el despacho y nos quedamos solos. Entonces me acerque a el y le di un beso en la boca, al mismo tiempo que mi mano bajaba hasta su bragueta buscando su documentación, quería hacerle una mamada.
Me acerque a la puerta y la cerré con llave, luego me puse de rodillas ante él y le abrí la bragueta, mi mano busco su pene que ya se estaba poniendo morcillón, tras acariciarlo me lo metí en la boca y comencé a masajearlo con mi lengua, notaba como a cada lametada su pene engordaba y comencé a meterlo y sacarlo de mi boca al mismo tiempo que masajeaba sus testículos, y sin darme cuenta exploto dentro de mi boca, su esperma lleno mi boca y sin decir nada me trague aquel manjar que para mí era un néctar de dioses.
Tras arreglarme le dije:
- Señor cuantas copias quiere de las cartas
- Solo original y copia cuando estén me las trae a la firma.
Saque el pestillo de la puerta y me retire a mi despacho.
En si casi nada tenía que hacer, todo era un paripé, solamente le preparaba la agenda de entrevistas y lo acompañaba a alguna reunió por si tenía que tomar nota.
Asi pasaron varios meses, hasta que me llamaron para una película, la duración del rodaje en si fue corta, ya se sabe que ese tipo de películas casi no tienen argumento, la gente las adquiere por morbo, quieren ver a un Transexual, como se lo joden o como jode bien a una mujer o a un hombre. Hice tres películas y me retire de ese trabajo.
Tras dos años viviendo con Fran, le dije que me quería operar. Se puso en contacto con el mejor cirujano en esa especialidad, y tras la primera visita y revisión, me puso un tratamiento preoperatorio, me suprimió las hormonas durante tres meses y tras ese periodo ingrese en la clínica. Fran no quiso acompañarme, tras la operación y el postoperatorio reanude mi jornada laboral en la empresa, durante 6 meses no tuvimos relaciones únicamente teníamos sexo oral dos o tres veces por semana le hacia una mamadas que lo dejaba satisfecho. Cuando el Dr. me dio de alta esa noche fue especial por la tarde había ido a un centro de belleza, me hicieron una depilación total con laser, ya que al haber dejado las hormonas el bello había vuelto a salir en las partes bajas. Por la noche me puse el conjunto mas sexi que tenia y lo espere en la cama. Esa noche seria mi noche de autentica mujer, por fin me penetraría por mi nuevo sexo, me beso acaricio todo mi cuerpo y cuando ya estaba preparada le pedi que lo hiciese con mucho cariño
- Carla, no te preocupes, será tu primera vez y quiero que guardes un buen recuerdo de ella.
Se acerco y besándome en mis labios fue poniéndose en posición, yo abrí las piernas un poco avergonzada, estaba tan excitada que me sentía húmeda, puso su pene ya erecto a las puertas de la cámara del tesoro, y poco a poco lo fue introduciendo, sentía como entraba dentro de mi despacio y con suavidad hasta que sus testículos le dijeron que no podían entrar, fue entonces cuando lentamente comenzó con el movimiento de mete y saca despacio yo lo agarre con mis piernas cruzándolas tras sus glúteos para evitar que se separara y comencé a pedirle.
- Por favor, dame fuerte, quiero sentirte dentro de mi no pares, descarga tu esperma en mi coño quiero que me lo llenes.
Esas palabras lo excitaban, y cada vez apuraba los movimientos haciéndolos mas rápidos hasta que comprobé que estaba a punto de eyacular, entonces yo sentí una corriente que invadía todo mi cuerpo haciendo dar un grito de placer, estaba teniendo mi primer orgasmo vaginal que coincidió con la descarga de Fran.
Los dos quedamos agotados, sudorosos y nos besamos, cuando la saco, se la limpie con la boca y nos quedamos dormidos.
Todas las semanas teníamos sesión de sexo durante tres días, yo no tenía el problema de la menstruación por eso me convertí en una dicta al sexo vaginal.
Tras arreglar los papeles de mi documentación, para ser oficialmente una mujer, Fran me dijo que quería casarse conmigo.
Aquello me dejo un poco desconcertada pero acepte. Al año siguiente nos casamos, hoy vivo feliz con mi marido, he dejado el trabajo de la oficina, somos felices y estamos en trámites de adopción de dos recienes, niño y niña. Espero llegar a ser una buena madre