Mi olvido 6

Y no se había equivocado era Andrea.

Lo confirmo cuando la vio venir con esa forma de caminar tan decidida. En su rostro se miraba rastros de lágrimas. Pero aun así aunque quisieran detenerla nadie lo lograría.

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Alejandra.- Hoy vas a quédate todo el día conmigo?.- la niña como cada sábado ya esperaba a su abuelita para contarle de sus dibujos, de sus aventuras de princesa con sus amiguitas y de todas las cosas que los niños viven en su mundo.

Abuelita.- si nena, pero me parece que hoy nos va a tocar salir de compras. Qué te parece?- resolviendo esto desde que vio a su hija bajar del auto y dirigirse hacia ellas.

Alejandra.- siii, y me vas a degalad vestidos y mi helado de fesa. Mi ma puede id?.- hablaba con mucha ilusión. Sus ojitos azules brillaban como los de su hija cuando se le recompensaba al ir bien en la escuela.

Abuelita.- si amor, voy a comprarte unos vestidos y comeremos el helado que quieras. Solo que tu mami no va a ir.- viendo que su hija ya había quedado a unos pasos de distancia. Ellas tienen mucho de qué hablar, pensaba.

Ni Alejandra, ni Susana se dieron cuenta de la presencia de Andrea.

Susana.- pero en eso no habíamos quedado. Digo por eso pedí el día de hoy. Para pasarla juntas. Ya lo habíamos planeado.-estaba muy confundida.

Andrea.- hola, buenos días.- sonaba a que no venía a socializar. Estaba muy molesta y no podía controlarse. Y digo estaba por que una vez que vio a su hija dirigirse hacia ella con sus brazos extendidos para que la cargara hizo que se olvidara de todo.

Susana escucho esa voz que no podría olvidar ni deseándolo con todas sus fuerzas. No sentía necesario voltear a ver para saber de quién se trataba. Y se preguntaba por qué su Madre la había traído. Acaso venia a pedirle disculpas por la última vez que se vieron. No tenía idea.

Alejandra.- Andeaaaa, Andea dónde estabas? Te estañe!!.- la niña ya estaba colgada en su cuello. Regalándole un beso y un fuerte abrazo.

Abuelita.- hola hija, buenos días. Nos acompañaras a comprar vestidos y helado?.- sabia a que realmente venia su hija. Así que no le dio tanta importancia para no asustar a Alejandra.

Andrea.- no madre, me quedare hablando con Susana. Yo también te extrañe pequeña.- devolviendo el beso y abrazo.- Susana no vas a saludarme?- ya estaba ahi. Así que había que agarrar al toro por los cuernos.

Susana volteo a mirarla, causándole a Andrea prácticamente un paro cardiaco. Mas allá de saber que era muy bella, el hecho de saber que fue su esposa, que se pertenecieron no solo una sino muchas veces mas, la colocaba nerviosa y ansiosa por saber todo.

Susana.- buenos días. Hija yo me quedo con Andrea. Cuando vuelvas aquí estaré esperándote amor.- de que querrá hablar. Se preguntaba.

Alejandra.- mmm solo vamos tú y yo, Andea también me espedas?.- haciendo pucheritos y gestos muy tiernos

Andrea.- claro amor, aquí estaré para cuando tu vuelvas.- no es que no le gustara la compañía de su hija y madre. Solo que esta vez deseaba que la dejaran a solas con Susana.

Abuelita.- bueno nosotras nos vamos! Se cuidan.- llevando de la mano a Alejandra quien le decía adiós a sus mamis.

Susana se dirigió a la entrada de su casa. Seguida por una ojiazul muy nerviosa que no dejaba de mirarle. Andrea no dejaba de pensar en cómo le diría a su hija que era su Madre y que realmente debió amar tanto a Susana ya que hasta le había cedido la patria potestad de su hija. Eso era realmente inexplicable. O la amaba demasiado o no entendía de qué se trataba. Si es que también dejo que su hija llevara los apellidos de Susana.

Susana.- entonces vas a pasar o te quedaras ahí todo el día.- Ella ya tenía un rato en la puerta esperando a que Andrea entrara. Esta estaba completamente ida. Tenía que llamar su atención para sacarla de trance. Y realmente no tenía ganas de ser amable con ella.

Andrea.- Si, gracias.- al querer entrar a la casa Paso por un lado de Susana que se encontraba esperándola en la puerta para cerrarla. Sintiendo ese aroma que la mataba, la cautivaba, la calmaba y a la vez la desestabilizaba. Ese que extraña endemoniadamente. Tan solo su presencia hacia que sintiera un zoológico en su vientre.

Susana.- toma asiento por favor, siéntete como en tu casa.- intentaría no ser grosera, no era totalmente su culpa lo que sucedió la última vez que se vieron.- deseas tomar algo? Un café, regreso, agua? O deseas comer algo?.- y le ofrecía por que necesitaba tomar algo para calmarse ella también.

Andrea.-Gracias. Solo un poco de agua está bien.

Susana fue por ello. Andrea no pudo evitar sentir todo lo que aquella mujer le causaba, esa quien una vez más le había robado su corazón. Porque aun que no recordara sabía que la amo, tanto o más que en el presente. O tal vez nunca la dejo de amar.

Susana.- aquí tienes. Entonces dime a que se debe tu visita? Aclaraste tus ideas?

Andrea.- Susana al día siguiente fui por ti. Después que te fuiste me sentí tan mal.  Me comporte como todo un patán. Quería disculparme. Ya no te encontré, me comunicaron que ya no estabas en esa empresa.

Susana.- Era lo mejor en ese momento. Sinceramente tus palabras me dolieron.

Andrea.- No más que a mi decirlas.- esta que había tomado asiento se levanto y dirigió hasta donde estaba la castaña. Se acerco lo suficiente.- Susana te extraño. Vuelve conmigo.- no lo podía creer, se maldecía internamente. Vino aclarar las cosas del pasado y ahora le rogaba por que volviera.

Le era tan complicado poner de acuerdo a la razón con el corazón y es que al tener a la castaña en la misma habitación a solas, Hacia que todos sus sentidos se volvieran locos.

Había escuchado bien? Andrea le estaba pidiendo una oportunidad

Susana.- No entiendo, acaso no es tu boda mañana? Quieres que sea tu amante?

Andrea no estaba pensando bien las cosas. No carburaba. Susana Tomo un poco de distancia. Haciendo reaccionar a Andrea quien Se estaba dejando llevar por su corazón, no por la razón. Era momento de aclarar todo de una vez y por todas.

Susana.- si a eso viniste. No tiene caso esta plática.- alejándose de Andrea. Se dirigía a la puerta para abrirla y darle a entender con ese gesto que se fuera. Andrea miraba por la ventana.

Andrea.- siempre huyes de los problemas?

Susana.- huir? No Andrea. Yo no requeriero ser la amante de nadie. No me lo merezco.- estando ya a punto de abrir la puerta.

Andrea.- se que estuvimos casadas, que Alejandra es mi hija. Y que tú me dejaste.

Aquella se petrifico al escuchar tal declaración. No quiso voltear a verla. Sabía que algún día iba a suceder pero no se imaginaba que fuese hoy. Acaso ya había recordado todo? Pensaba.

Andrea.- no vas a decir nada. Me dejaste en ese hospital!. Porque Susana? No entiendo. Tú estabas ahí cuando yo desperté eso lo recuerdo perfectamente. Bien pudiste haberte quedado. Pero te fuiste, ya no te volví a ver. Nunca pensabas buscarme? Porque no me dijiste nada al reencontrarnos nuevamente?  Porque me alejaste de mi hija? Maldita sea habla. Necesito saber!!.- todo lo dijo casi que gritando. Estaba frente a Susana.

Andrea.- te estoy preguntando. Contéstame. Fuiste muy cobarde o que creías? Que no iba a aceptarlas? Que poco me conoces. Yo no las hubiera rechazado.

Todo se lo dijo mirándola. Tenía más preguntas por hacerle.

Susana había tomado asiento. Miraba al piso, no quería verla. No pudo evitar que algunas lágrimas salieran. Es que ella tenía razón. Fue una cobarde que no quiso luchar. Si se hubiera quedado a su lado, Nada de esto estuviera pasando. Pero el padre de Andrea la había amenazado, precisamente le había pedido ayuda a Ángel y este estaba de acuerdo con el padre de Andrea. María no podía hacer nada, ella tenia suficiente con cuidar de Ale mientras ella iba al hospital. Fue por eso que ella no quiso seguir. El miedo de que le quitara a la niña era más grande o le hiciera daño a Andrea. Era algo con lo cual no podría vivir.

Andrea.- mírame cuando te hablo!- estaba muy molesta por su silencio. Se acerco hasta ella y tomo su rostro para que la mirase. Entonces se dio cuenta que lloraba, que tenía el mismo aspecto que en el video. Eso le estrujo el corazón y no pudo más con ello. Se coloco de rodillas y la abrazo.

Era un abrazo que ambas necesitaban. Lloraban juntas, se apretaban fuerte. Sollozaban. Entendían que el sentimiento era mutuo. El dolor físico que sentía por estar arrodillada era poco; Al dolor, al vacio que sentía en su corazón cuando la veía así Tan débil, derrotada, triste, cansada. Duraron varios minutos sin decir nada, y es que en ese momento las palabras sobraban.

Al calmarse se separaron solo para mirarse por un momento. Una le limpiaba las lagrimas a la otra y viceversa.

Susana fue por unas toallitas y las trajo a la sala con Andrea. Iba a necesitar más. Se aclaro la garganta.

Susana.- así que recordaste todo? Que recuerdas exactamente? Porque yo también necesito saber porque me pediste el divorcio?

Andrea.- lo lamento, pero no es que recordara. Sino que encontré algunas cosas y esas me llevaron a otras. Y esas a ti.- se aclaro la garganta también. Los sentimientos estaban a flor de piel.

Susana.- no vas a decirme que fueron esas cosas que te trajeron aquí? es una lástima que aun no me recuerdes. Pero está bien, Haz venido por repuestas.

Volvió a tomar asiento, esto iba para largo.

Susana.- estaba tomando una siesta con Alejandra por que había enfermado, cuando me llamaron para decirme que estabas en el hospital. Mi número había sido al último que marcaste. Andrea estabas muy mal. Contusiones muy feas, te hicieron estudios. Concluyeron en que el golpe más fuerte lo tuviste es la cabeza. Había que esperar que despertaras para saber que tanto te había afectado.

Andrea estaba atenta, quería saber que había provocado el accidente. Pero Susana solo podía darle respuestas de acuerdo a lo que ella vivió.

Susana.- Alejandra también se había enfermado. Anímicamente me sentía fatal, abatida. Tu madre estaba de viaje no podía volver, era ella o María eran quien nos ayudaba cuando la bebe enfermaba, así que estuve algo sola. Entre ir a visitarte y cuidar a mi hija se me iba el tiempo, casi no dormía. Despertaste a la semana. El que no me recordaras me mato. Acabo con todo.- estaba hablando y en modo de apoyo Andrea tenía sostenida las manos de Susana. Esta sonreía pero flaqueaba cuando hablaba y esa tristeza que emanaba era bastante perturbarte para no querer darle su apoyo.

Susana.- los papeles del divorcio me llegaron el mismo día que despertaste. Te juro que me hubiera gustado estar ahí en esa cama postrada, ser a mí a quien le hubiese ocurrido el accidente. Para Los que estábamos despiertos, los que te amábamos cada nuevo día que no despertabas era como ver a una bella rosa marchitarse. Tu eres más fuerte que yo, si hubieras estado en mi lugar habrías encontrado como arreglar las cosas.- estaban sentadas una al lado de la otra. Andrea no quería verla así. Por lo que veía era muy doloroso para Susana.

Susana.- todo se venía encima, todo se destruía, caía en pedazos y no supe cómo detenerlo. O mejor dicho tome la decisión de no hacerlo, es que fui oblig...- estaba dudando en contarle sobre la amenaza que recibió por parte de su padre. No quería causarle problemas. Y cuando al fin se había decidido fue callada por Andrea de una manera muy tierna.

Andrea.- sabes Sus mejor así déjalo. Podemos continuar otro día, he esperado por un poco más de tres anos porque no hacerlo otro día mas.- le coloco un dedo en sus labios. Para callarla. Pero esa acción hizo reaccionar otras cositas en ambas. Esos cosquilleos, ese nerviosismo. Parecía una niña con su primer amor. Quizás era un beneficio el no recordar. Era todo nuevo.

Susana tampoco soporto ese contacto. Se acerco a Andrea su ex esposa. Iba a besarla. Pegaron frente con frente. Andrea estaba que se moría por sentir esos labios tan suaves entre los suyos. Susana hablo muy cerca de los labios de Andrea. Causándole a la otra escalofríos por su cuerpo.

Aun había algo más importante por saber. Al menos para Susana.

Susana.- Solo quiero saber si vas a casarte?

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Espero realmente que les haya gustado. pero siento que les quede a deber.

bueno cuidenseme mucho. besos

acepto reclamaciones ;)