Mi novia se folla a todos: ingenua o puta (14)

Finalmente Eva llega al gimnasio, por suerte para ellos mi novia les salva de un terrible problema que tienen.

Rafa y Eva fueron al gimnasio, la verdad que Eva se decepcionó un poco al ver que las instalaciones eran bastante cutres. Eva se esperaba un gimnasio moderno y bien decorado pero eso era una lonja, que sin duda había conocido tiempos mejores. Había una gran sala con diversos aparatos de gimnasia, la verdad que muchos y variados y como una docena de hombres estaban haciendo musculación. El sitio olía bastante a sudor y a humedad, sin duda una manita de pintura no le hubiese venido nada mal.

La oficina, por llamarla de alguna forma ya que era un cubículo acristalado y desordenado, estaba en una entreplanta a la que se accedía por una escalera metálica desde la sala de musculación.

Ambos entraron en la oficina donde dos tipos bastante musculosos les esperaban, Rafa los presentó como los monitores y propietarios del local. La verdad que los dos tipos parecían clones. Llevaban unas mallas y unas camisetas ceñidas que marcaban todos sus músculos (y lo que no era músculo), tenían unas espaldas tan anchas que Eva y Rafa podrían haberse escondido en sus espaldas. No eran muy altos y la verdad es que la única diferencia era el pelo, uno era moreno y el otro castaño, pero ambos debían ir al mismo peluquero porque los dos llevaban un corte tipo marine americano.

  • Así que lo que deseas es fortalecer un poco, en menos de un mes, ¿verdad?
  • Exactamente.
  • Bueno, ahora cámbiate, ponte la ropa deportiva y luego sube a pesarse y a medirla, tras lo cual te prepararemos el plan de acción.

Eva bajó y se dirigió al vestuario femenino, que era una sala llena de taquillas, a cual más oxidada, bancos de madera y cuatro duchas. El sitio olía mucho a lejía, así que por lo menos estaba desinfectado. Eva sacó la ropa, que hasta entonces no había visto y quedó muy sorprendida, era una malla tipo bañador de un color verde pistacho fosforito y en medio, en la zona donde seguro quedaría su coño tenía un dibujo de un diablo sonriendo con el culo hacía afuera y metiéndose el tridente por el culo. Era lo más horrible que había visto en su vida, era como de latex pero se notaba que era más bien plástico malo y para continuar el conjunto se completaba con unas zapatillas de deporte doradas. Eva comprobó que eran su número, por lo que sin duda Rafa se había fijado en el número de sus zapatos mientras estaba durmiendo. La verdad es que el chaval había tenido un detallazo yendo a buscar la ropa y llevándola al gimnasio, como se alegraba de haber encontrado un amigo tan bueno. Eva se desnudó para ponerse el body, no sólo era horrible… le venía muy pequeño.

Eva, ya vestida sacó la cabeza por el vestuario buscando a Rafa con la mirada. Rafa estaba hablando con uno de los instructores, le llamó con la mano y Rafa se acercó.

  • Mira Rafa, no puedo salir así.

Rafa le miró y le preguntó.

  • ¿Así cómo?
  • Me queda muy pequeño
  • Yo creo que te queda perfecto, quizás un poco apretado pero se dará de sí.
  • Pero si apenas puedo respirar
  • Eres una exagerada.

En ese momento entró al vestuario el monitor y les interrumpió.

  • Perdonad pero un chico no puede estar en el vestuario de mujeres.
  • Es que Eva dice que el traje le queda mal y no quiere salir a hacer gimnasia.
  • Eso suena a excusa para no hacer gimnasia – comentó el monitor con una mirada de reprobación contra Eva.
  • La verdad que sí- afirmó Rafa
  • Yo la veo estupendamente preparada.
  • Pero voy muy ajustada- protesto Eva
  • Ja,ja,ja Y yo, dijo el monitor, dándose la vuelta y mostrando a Eva su malla en el que se marcaba claramente su culo musculoso.- Te garantizo que nadie se va a escandalizar. Vamos a la oficina, te pesamos y medimos y así puedes empezar a hacer ejercicios

Eva desiste de seguir protestando y sale del vestuario acompañada del instructor del gimnasio, mira hacia abajo y ve moviéndose sus pechos sin apenas sujeción, se pueden ver grandes partes debido al gran escotazo que está a punto de reventar, rebosan por el escote y también por los laterales. Sigue andando mientras nota como al moverse los labios de su coño pugnan por salir de esa opresión y se marcan totalmente, si se le marcan hasta los pelos, de su culo mejor no pensarlo, Eva supone que se marcará todo y tiene más de la mitad por fuera, por no decir que lo tiene todo sudado debido al material plasticoso y encima sin haber empezado a hacer gimnasia. Tiene que subir otra vez esas escaleras para llegar a la oficina y aunque decide no volverse nota, o más bien supone, que todos los hombres del gimnasio la están mirando. Además el monitor va detrás de ella, por lo que supone que esta también está pasando un buen rato mirándole el culo.

En la oficina la pesan sobre una báscula romana. El monitor saca una cinta métrica.

  • Vamos a medirte, las caderas, cintura, muslos y contorno de pecho.

Mi novia ya suponía lo que iba a pasar, el monitor con el disimulo de medirla aprovecharía para meterle mano, pero no, al contrario, si bien la cinta métrica pasó por diversas partes de su cuerpo, en ningún momento fue tan siquiera rozada por la mano del monitor. Esto alegró y relajó mucho a Eva, al menos los del gimnasio eran profesionales y no aprovecharon el momento para meterle mano. Pasó un poco de vergüenza cuando le medía la cadera y el monitor estaba en cunclillas frente a ella, ya que la cara del monitor quedó a la altura de su coño y con esa ropa de gimnasia tan apretada se le marcaba totalmente el sexo.

  • Pues por lo que veo estas muy bien y muy proporcionada, creo que con que fortalezcas un poco estarás estupenda. Como tenemos un mes por delante vas a poder conseguirlo, sin problemas. Vamos para abajo a empezar inmediatamente.

Cuando llegan a los aparatos el instructor se dirige a ella elevando la voz:

  • Eva ya puedes iniciar los ejercicios, ponte en está maquina.

Varios chicos se acercan, la saludan y la ayudan a sentarse, unos la empujan, otros la colocan en el asiento, otros abren sus piernas y la colocan en la máquina, el instructor pone las pesas. Eva empieza a hacer los ejercicios consistente en sentarse en un banco con las piernas abiertas con dos almohadillas en su interior que debe unir juntando las piernas, accionando con ese movimiento unas pesas que están a la espalda de Eva y que suben y bajan. Le cuesta mucho esfuerzo y cuando no lleva ni diez flexiones está completamente sudada.

Siente como la malla la tira y tira… está totalmente abierta de piernas, no quiere ni mirar abajo, nota perfectamente como solo un trozo de tela separa los labios… no solo está casi desnuda y abierta de piernas sino que la malla le está abriendo el coño y le duele… intenta acabar el ejercicio lo antes posible pero una y otra vez los hombres que están a su alrededor corean "uno más, uno más" ella abre y cierra las piernas hasta acabar extenuada… no siente los músculos de los muslos.

  • Eva, parece que te he puesto demasiado peso… pero tienes tan poco tiempo para ponerte en forma- le comenta el monitor.

Ella se siente azorada ya que casi todos los hombres del gimnasio se han acercado a ella disimuladamente, más o menos, sin duda no están dispuestos a perderse el espectáculo. Casi todos le comentan que bonito diablo lleva, lo que significa que descaradamente le están mirando el coño.

Al verla tan desfallecida después de esa dura sesión de entrenamiento, el entrenador se suma a los demás y la anima a probar el press banca, allí la tumban y la colocan justo encima de su cabeza la gran barra con unas pesas… venga, animo, apóyate bien en el banco y arriba!!! Al hacer el ejercicio correctamente vuelve a abrir sus piernas, nota de nuevo como seguramente están viendo todos su coño abierto por la malla y empieza a sudar levantando la pesa… una, dos, tres… casi no puede respirar, la malla le aplasta el pecho… Rafa se acerca a ella y le dice..

  • Joder si lo que te pasa es que no puedes casi ni respirar hay que forzar un poco la malla que está nueva…- da varios tirones y de repente ve como puede volver a respirar mientras escucha como se ha roto un poco su parte de arriba
  • Upsss, lo siento, bueno, tranquila, no se ha roto del todo… mierda de ropa venden los chinos, la verdad.

Al menos puede respirar y el sudor de su pecho se refresca con el aire… no sabe cuánto pecho queda al descubierto, pero Rafa le ha dicho que no se ha roto del todo así que no se verá tanto y por lo menos puede respirar, así que le esta muy agradecida a Rafa….

  • Eva ya puedes descansar un poco – dijo el instructor.

Acaba la sesión y se levanta mirándose a uno de los grandes espejos del gimnasio… está totalmente sudada, el pelo de su cabeza pegado a la cara… sigue bajando la vista y ve una diminuta malla a punto de estallar que intenta cubrir su cuerpo, rasgada en el pecho haciendo una gran V abierta que le llega desde los hombros y muestra todo su canalillo, solo deja a la imaginación la parte final de sus pechos y uno de sus pezones está totalmente a la vista y el resto del pecho marcado totalmente en la malla. Le da miedo seguir bajando pero sus ojos siguen y ven un fino trozo de plástico que separa dos abultados labios vaginales los cuales están totalmente fuera mientras que algún pelo púbico se escapa.

  • Venga, ahora a la ducha le dice el instructor -mientras le da un amistoso cachete en el trasero- por hoy has entrenado muy bien… te espero mañana eh? No te retrases que estamos todos deseando verte… no te preocupes por las mallas yo te busco de aquí a mañana alguna y te la regalamos entre todos

Mientras la acompaña a la ducha le dice al oído..

  • Eso si, mientras te busco unas mallas una talla mayor, que esta ciertamente te está un poco apretada, deberías depilarte un poco mas… algún pelillo se ve por ahí… aquí en el gimnasio mismo puedes depilarte… espera… ahora mismo y así lo dejamos solucionado.

La agarra del brazo y cambia totalmente de dirección hacia la zona de depilación del gimnasio… Entran en la sala bastante espartana donde hay una camilla de masaje y una estantería llena de cosas para depilar.

  • Vaya!! No hay nadie, claro.. sin cita… bueno, tú no te preocupes… cerramos ahora mismo la puerta y esto lo arreglamos tu y yo en un plis… si casi no tienes pelo, estoy segurísimo –ya puede estarlo porque casi todo el coño ha quedado a la vista, pensó Eva-… venga, te ayudo a quitarte esa malla sudada que ya me ha dicho Rafa que te encanta estar en pelotas

Sin que le de tiempo a protestar se ve arrastrada por los grandes brazos del instructor y retirándole los tirantes del hombro su malla es bajada dejándola totalmente desnuda… sin prestar atención a su cuerpo desnudo empieza a buscar la cera fría… y la empuja hacia la camilla, la sube y la coloca boca arriba

  • Venga Eva, esto es un pequeño tirón, que solo tienes unos pelitos de nada… te dejo rasuradita en pocos minutos…. Abre bien las piernas y tranquila será por tias que he visto trabajando aquí

Eva duda de que muchas tías vengan a este cutre gimnasio y menos que se dejen depilar por él.

  • Tía parece mentira que tengas el felpudo así siendo nudista.

Eva se mira el coño, tampoco lo tiene tan mal depilado piensa.

En ese momento entra Rafa. Menos mal piensa Eva que no quería estar en pelotas y abierta de piernas delante del monitor, pero por lo menos estando su amigo Rafa estaba segura.

  • Hola cariño, ¿qué tal el primer día?

Joder este Rafa, piensa Eva, le parecerá normal encontrarme aquí desnuda, abierta de patas delante de este tío que parece un armario ropero de grande que es. El monitor contesta por ella.

  • Se ha portado como una campeona, ha hecho todos los ejercicios y creo que aún tendría fuerza para más.

En ese momento también entró el otro monitor y se dirigió a su compañero sin prestar especial atención al cuerpo desnudo de Eva, ya que solo le ha echado una mirada rápida.

  • Ya he venido el pardillo… perdón el inversor.
  • Por fin, le esperaba ayer, menos mal que hemos mantenido bien limpio y ordenado el gimnasio para que el inversor lo vea en condiciones.

Eva, allí plantada en la camilla, pensó que menos mal que el gimnasio lo habían apañado para que pareciese mejor de cara a ese inversor, así ya parecía un garaje por lo que cómo sería antes.

Rafa intervino en la conversación.

  • ¿Aun no habéis solucionado el tema?
  • Que va, le dijo el monitor-depilador, pero como este no invierta en el negocio en un mes el banco nos embarga.
  • Joder tio, ¿tan mal está el tema?
  • Peor, aquí el compañero hace tres meses que no cobra y hace dos despedí a la de limpieza y ahora la hago yo mismo.

Ahora Eva entendía ese desorden, mientras pensaba eso Rafa comentaba.

  • ¿Y este quiere invertir?
  • No sé, es de un pueblo y tiene un montón de pasta. Le han dicho que para ligar lo mejor es un gimnasio y quiere comprar una parte con la intención de echarse novia.
  • Pero que mala suerte tenemos- dijo el otro monitor- ha de venir a esta hora que no hay tías. Joder este va a pasar de meter pasta en un gimnasio lleno de pollas… perdona el lenguaje tía, estoy muy nervioso.
  • No pasa nada.
  • Íbamos a pedir a nuestras novias que se pasasen por aquí cuando viniese el pardillo e incluso les habíamos comprado unas mallas super sexis, por eso quedamos ayer por la tarde con él y no hoy por la mañana. Ahora no podemos llamarlas porque están currando.
  • Debe ser más listo de lo que pensáis y ha decido pasarse sin avisar para pillaros sin preparar- comentó Rafa-
  • Sí que cabrón, estamos totalmente jodidos.
  • Bueno quizás no esta todo perdido.
  • ¿Conoces a otro inversor?
  • No, pero dejadme un minuto hablar con Eva, si ella quiere creo que estaréis salvados.

Rafa habló con Eva y le contó su plan.

  • No, no Rafa yo no puedo hacer eso.
  • Venga Eva, son mis amigos.
  • Pero yo me caso en breve, tengo novio y no puedo estar haciendo eso.
  • Eva, ya sé que tienes novio y que también le aprecio mucho, pero no se va a enterar.
  • Ya sé que no se va a enterar. Pero igual tu plan no da resultado y tengo el coñito que necesita un descanso.
  • Eres una egoísta, yo también tuve ayer varias corridas pero por unos amigos me esfuerzo y trataré de empalmarme y correrme delante de ese tío.

A Eva le dolió que Rafa le llamase egoísta.

  • Tu lo has dicho son tus amigos no los míos- argumento Eva enfadada.

  • Vale Eva, vale, pensaba que eras amiga mía y por tanto mis otros amigos también te importaban, pero claro solo te preocupas por ti. Espero no tener nunca un problema y necesitar tu ayuda.

  • Rafa a ti te ayudaría, sin dudarlo.

  • Sí, seguro que me ayudarías, ya lo veo, para un cosa que te pido para unos amigos me dices que no.

Eva dedicó unos segundos a pensar, estaba muy dolida por las palabras de Rafa, pero lo cierto es que Rafa siempre la había ayudado.

  • Vale pero sólo lo haré contigo

  • Eso no vale Eva, si lo haces solo conmigo el inversor no se lo va a tragar y no va a invertir. Tiene que ser con cuatro.

  • ¿Cuatro?

  • Sí o mejor quizás seis tíos

  • No, no cuatro, cuatro, esta bien.

  • Entonces aceptas

  • Acepto por ti, que conste. – Eva estaba más o menos satisfecha con la negociación, de los seis que planteaba Rafa había quedado en cuatro.

  • Gracias cariño- y diciendo esto le plantó un besazo en la boca- Voy a organizarlo todo.

Rafa se dirigió a buscar a los dos monitores que estaban fuera ocultos del inversor.

  • Como os dije esta mañana por teléfono, la tía acepta.
  • ¿Qué acepta? – Dijo uno de los monitores sorprendido
  • Sí ya os dije que esta tía se traga todo y no sabe decir que no.
  • Eso espero, que se trague todo, todo.
  • Vamos a prepararlo, llama a estos dos y que vengan a a sala de depilación, tú –dirigiéndose a uno de los monitores- vente para adentro y tú – dirigiéndose al monitor-depilador vete a por Eugenio o mejor dicho para meternos en el papel el inversor e insístele en que haga bien su papel, que no se lance a la primera, que espere a que nos corramos los cuatro.

Eva no estaba muy convencida de lo que iba a hacer, hubiese preferido que Rafa no le hubiese pedido eso… que mala suerte tenía siempre se metía en problemas… después de hoy no pensaba volver al gimnasio se moriría de vergüenza si volviese a coincidir con cualquiera de ellos.

Eva empezó a desarrollar el plan de Rafa, allí estaba ella con cuatro tíos, Rafa, uno de los monitores y otros dos tíos cachas del gimnasio. Según iban entrando se iban desnudando y allí estaba ella desnuda con esos cuatro tíos también en pelotas. A Eva nunca le han llamado especialmente la atención los tíos muy cachas, le gustaban fibrosos y musculosos un poco, pero esos músculos tan grandes, esos brazos que no podía abarcar con sus dos manos y esas piernas tan anchas no le ponían nada. Le parecían cuerpos deformados por los músculos. Cuando se fijo en las pollas flacidas de los tres cachas le sorprendió lo pequeñitas que eran, seguramente era un efecto óptico al tener unos cuerpos tan grandes el pene parecía más pequeño. Por si fuera poco era lo que los nudistas llaman culitos blancos, osea con la marca del bañador, con lo que ella "odiaba" a los culitos blancos. La verdad que por lo menos los culitos de los tres eran muy atractivos bien pequeñitos y apretaditos… pero entonces Eva se dio cuenta que estarían tumbados por lo que ni siquiera tendría esa satisfacción. Cada vez se arrepentía más de haber cedido a la propuesta de Rafa, pero ya no podía echarse atrás.

Los cuatro se tumbaron en unas esterillas en el suelo y Eva se inclino hacia ellos y empezó a lamerles las pollas para que se les pusiese tiesa y poder ponerles el preservativo, bueno la verdad es que solo tuvo que lamer a uno de ellos porque los demás con el espectáculo ya se pusieron firmes. Como tardaba tanto en aparecer el monitor con el inversionista, de vez en cuando Eva tenía que dar un repaso con la lengua a las pollas para que no pediesen la erección. Eva que la verdad no estaba nada excitada ante la situación se lo tomó como un juego de una feria, ella debía estar atenta a que las cuatro pollas de los tíos tumbados no perdiesen la verticalidad y saltaba de una a otra lamiéndolas un poquito. La verdad es que los tíos colaboraban, pensó Eva ya que cuando se bajaba a lamerles estos le metían mano por el culo y los dedos por su coño a fin de mantenerse más excitados, así que Eva pensaba que lo hacían como atención para que ella tuviese menos trabajo con las lamidas de polla. Esto pensaba la ingenua de Eva cuando de repente oyó voces que se acercaban a la sala de depilación.

  • Y está es la sala de depilación en donde también estamos experimentando un nuevo método de gimnasia, que es todo un exito– oyó Eva mientras se abría la puerta.

El ejercicio es sencillo, como puede ver, la clienta debe ponerse de pié encima de los monitores e ir bajando flexionado las piernas hasta que llega al pene y es penetrada. Con este ejercicio fortalecemos la pelvis las piernas y los glúteos.

Eva hacía exactamente eso, estaba de cara al inversor que no dejaba de mirarla con deseo y subía y bajaba para ser penetrada por esas pollas que a cada bajada desaparecían por su coñito.

La verdad que el ejercicio era enorme, Eva sudaba un montón y le dolían las piernas de tanto flexionarlas, por suerte las pollas entraban y salían con facilidad, no se permitía concentrarse en las folladas, tenía claro que estaba haciendo un favor y no buscando sexo, pero por suerte su cuerpo había respondido y su coñito se había lubricado con sus flujos vaginales. Eva llevaba más de cinco minutos pasando de una polla a otra en cada genuflexión y se preguntaba cuando se iría el inversor

  • Luego hay una versión para que la usuaria trabaje las abdominales- el monitor se dirigió a Eva y cogiéndola del brazo la colocó a los pies de Rafa frente a él.

  • Como ve la clienta se coloca a los pies del chico y sin doblar las piernas, flexiona la cintura, le permitimos abrir un poco las piernas pero no flexionarlas- diciendo esto le cogió del final de los gluteos y le separó un poco las piernas- Mierda me he manchado de flujo los dedos- sacó los dos pulgares brillantes por el flujo, ya que al abrirle las puertas había aprovechado para meterle los dedos en el coño.

El monitor se limpió los dedos sobre la espalda de Eva y continúo explicando el ejercicio mientras Eva en esta ocasión se encontraba de espaldas al inversor y al monitor. Al principio le molestó el gesto del monitor, como podía tener tanto morro, encima que les ayudaba, le metía los dedos en el coño y se limpiaba en ella, aunque la siempre bien pensada Eva finalmente supuso que la metida de los dedos en el coño había sido accidental al abrirle el monitor las piernas y claro no tenía ningún sitio donde limpiarse.

  • Con la cintura flexionada, que no las piernas, debe de llegar hasta el pene e introducírselo en la boca. El ejercicio se completa cuando llega a los testículos y va alterándose de un pene a otro por lo que para el cambio debe de ponerse otra vez vertical, y así trabaja la tripa.
  • ¿Puedo ponerme? – Dijo el inversor que no podía quitar los ojos del culazo y la parte del coñito de Eva que se le veía cada vez que flexionaba las rodillas.
  • ¿Cómo? Preguntó el monitor extrañado
  • ¿Qué si puedo ponerme y que la tía me la mame, o me folle o lo que quiera?
  • Claro, claro… toda ayuda para nuestra clienta es bienvenida.

Mierda pensó Eva, ahora si que esto no termina hasta que se corran… ya puedo empezar a ponerle ganas, seguro que a este del campo le huele la polla fatal. El inversor enseguida se bajó los pantalones y el calzoncillo, se colocó el condón y se tumbó en uno de los extremos.

Eva además de la bajada e introducirse las pollas en la boca, con la lengua recorría todo el aparato y sobre todo se centraba en el capullo a fin de que se corriesen lo antes posible. Eva llegó al inversor, la verdad que el pueblerino tenía un buen cipote, estaba preparada para el mal olor, pero descubrió con agrado que hasta olía bien a jabón, si casi parecía que se había duchado hacía nada.

Llevaba varios minutos haciendo ese ejercicio y varias gotas de sudor caían de su frente sobre las tripas de los sufridos muchachos, Eva las limpiaba y cada vez que alguien le caía una gota de su sudor le pedía disculpas ya que suponía que no era agradable que le cayese sudor de ella sobre los otros cuerpos. Por suerte uno de los dos chavales que no conocía se había corrido, ya solo le quedaban cuatro, la voz del monitor que dirigía el ejercicio le sacó de sus pensamientos.

  • Por último tenemos el ejercicio para reforzar los músculos de los brazos y las piernas

Eva al principio agradecía el cambio ya que el ejercicio de las mamadas era muy duro, pero cuando escuchó lo que tenía que hacer, ya no le hizo tanta gracia.

  • En esta ocasión la clienta recibirá sus penes por el ano, ella se flexionará los recibirá en su esfínter y con las piernas flexionadas y ayudada por sus brazos hará 10 flexiones, pero el pene no puede salir del año.

Como siempre la obediente Eva se puso a realizar el ejercicio y lamentó no haberse lubricado un poco el ojete, sobre todo cuando llegó al inversor. Tenía el culo bastante dilatado después de tantos días ofreciéndolo, pero aún así todavía le molestaba cada vez que un pene más grande de lo normal se introducía por su culo.

  • Me largo a la ducha – dijo el que ya se había corrido y salió desnudo de la sala de depilación, durante unos segundos que a Eva se le hicieron minutos la puerta quedó abierta y varios de los hombres que hacían gimnasia fuera pudieron ver lo que sucedía n esa sala.

El otro monitor se corrió y en la siguiente enculada también Rafa, ya solo le quedaban el chaval que no conocía y el inversor, pero transcurridos 6 largos minutos el ejercicio se dio por finalizado porque todos se habían corrido.

Mientras Eva se subía a la camilla desnuda y totalmente sudada para descansar un poco y Rafa y el otro monitor volvieron de la ducha y se unieron a la conversación del inversor, que seguía en pelotas y el monitor.

  • Estoy impresionado por su innovación- dijo el inversor- debo confesarle que al principio no me parecía el sitio correcto para invertir,, pero viendo que son tan innovadores el negocio lo cerramos seguro… mañana nos vemos en el notario y regularizamos la operación, te llamo para decirte la hora y el lugar.

El inversor se vistió y se fue, Eva seguía descasando sobre la camilla, había buen ambiente se veía a los dos monitores (propietarios) muy contentos.

  • Lo hemos conseguido Rafa, lo hemos conseguido.
  • Muchas gracias, Rafa, sin ti no lo hubiésemos logrado nunca.. en serio tío te debemos el haber salvado el negocio.

Eva sintió una punzadita de celos, si bien la idea había sido de Rafa sin ella no lo hubiesen conseguido, pero se alegró por Rafa.

  • A mi no hay nada que agradecer, en todo caso a mi amiga Eva – y diciendo esto todos se volvieron hacía ella.
  • Sí, sí, por supuesto, gracias Eva.
  • Muchas gracias, muchas gracias.

Todos se arremolinaron a la camilla y empezaron a abrazar el cuerpo desnudo de Eva. Mi novia estaba a punto de bajarse para poder ir a ducharse cuando no sabe como el buen ambiente desapareció, ambos monitores discutían.

  • De todas formas tienes un morro que te lo pisas- Decía el monitor que se había follado a Eva al otro, el que dirigía los ejercicios
  • ¿Pero qué me cuentas? ¿por qué dices eso?
  • Tú la parte fácil, hablar con el inversor y yo aquí pasándolas putas
  • ¿Pasándolas putas? Oye que solo has tenido que estar tumbado y correrte.
  • Claro pero ahora el marrón con Ana, para mi. Esto me va a costar la relación.

Rafa le dijo a Eva muy bajito que Ana era la novia de él.

  • No digas tonterías, Ana entenderá que lo has hecho para salvar el negocio- dijo el monitor que había explicado los ejercicios
  • Sí, entenderlo lo entenderá pero lo que no va a entender es que yo tuviese que hacer esos ejercicios y tú no.
  • Alguien tenía que hacerlo y otro estar con el inversor.
  • Si claro, pero tú no y así no tienes ningún problema con tu novia… mientras yo sí.
  • No será para tanto
  • ¡Qué! ¿Qué no será para tanto? Parece mentira que me digas eso… conoces perfectamente a Ana. Empezará a decir que yo soy el tonto, el que tengo que hacer siempre el trabajo sucio y tú siempre sales de rositas.
  • Joder tío que no lo he hecho adrede.
  • Ya lo sé pero insisto tú no vas a tener ningún problema con tu novia y yo sí. Y yo creía que estábamos juntos en esto
  • Y lo estamos
  • Pues no lo parece.

La verdad que el chaval tenía razón para estar cabreado, pensó Eva iba a tener un problema con su novia y el otro no. Eva intervino.

  • Quizás no tienes que decir nada a tu novia
  • Mi novia se va a enterar que hemos salvado el negocio y se va a imaginar que no ha sido por las maravillosas instalaciones que tenemos.
  • Claro –dijo Eva- se va a enterar.
  • Ya no podemos hacer nada – dijo el monitor que no se había follado a Eva
  • Claro que podemos… Eva sigue aquí – dijo el otro monitor, el follador-.
  • No te entiendo
  • Si te parece tan mal fóllatela.
  • ¿Pero qué dices? Si ya se ha ido el inversor
  • Ves… no quieres tener problemas con tu novia… pues o te la follas o hablo con el inversor , rompo el negocio y así no tenemos que explicar que hemos cerrado el negocio.

Eva alucinaba en colores, estaban hablando delante de ella de follársela y ni siquiera pedían su opinión.

  • Vale, vale, no hay problema – Y diciendo esto se bajó el pantalón tipo malla que llevaba dejando al descubierto su polla..

  • Espera, espera dijo Eva… una cosa es ayudaros al negocio y otra muy diferen….

  • Joder Eva – le interrumpió Rafa- no me jodas que este idiota es capaz de joder el negocio y todo el esfuerzo anterior no servirá para nada, además no querrás que tenga problemas con su novia.

  • No pero

Mientras Eva trataba de objetar a Rafa, las grandes manos del monitor ya le había separador las piernas y agarrado de las caderas apoyándola sobre su coxis para posicionarla para recibir su polla que ya estaba bien durita.

Durante el proceso de colocarse el preservativo, Eva seguía objetando pero se mantuvo en la posición en la que le había colocado para recibir el pene. Por supuesto el monitor no hizo caso de ninguno de sus argumentos y empezó a comerle todo el conejo como un loco. La verdad es que Eva estaba predispuesta porque pese a haberse follado a 5 tíos no había tenido ni un solo orgasmo. Eva gemía hasta que de un empujón le metió su polla.

  • Ya verás que follada putita, mi colega no va atener ninguna queja, no solo voy a follarte sino que voy a disfrutarte

Un par de veces sacó la polla y escupió en su chochito, supongo que porque le gustaba hacerlo, porque según me relató Eva no necesitaba lubricarla en absoluto. Siguió penetrándola con tanta fuerza que a Eva empezó a dolerle, ya no disfrutaba y sólo deseaba que esa polla saliese definitivamente de su conejito.

Con cada embestida, cuando sentía esa verga penetrándola soltaba un gritito de esos que nos encantan a los tios, mezcla de placer y dolor, un "Ay" corto que es esta ocasión era de dolor. Después de un largo rato de hundírsela la sacó, se retiró el preservativo y se empezó a pajear frenéticamente frente a Eva, hasta que apuntó su polla hacía la cara de Eva y empezó a escupir toda su leche, que cayó sobre los labios de Eva y principalmente contra sus tetas y tripa. Le dolía el coño y no había tenido ni un solo orgasmo, pero aunque llena de semen por lo menos el suplicio había finalizado.

  • ¿Contento? – le pregunto el monitor que acababa de follársela al otro
  • Muy contento, gracias, ahora ya estamos igual.
  • Pues ala, ahora a llamar a nuestras novias y darles la buena noticia. ¿Por cierto Eva vuelves mañana?

Eva no pensaba volver, que vergüenza volver teniendo presente que se había follado a los monitores, dos desconocidos y mientras la puerta estuvo abierta varios socios la habían visto. Si lo único que quería era salir de allí lo antes posible y sin mirar a nadie a la cara.

  • No sé –dijo Eva- ando muy liada
  • Hoy has hecho mucho deporte, pero tenemos poco tiempo hasta la boda
  • Además – dijo el otro monitor- es posible que durante unos días necesitemos seguir con el engaño al inversor.
  • Claro que vendremos- dijo Rafa- igual no mañana pero por lo menos cuatro veces más hay que hacerlo con el inversor para que se lo trague.

Eva decidió no discutir en ese momento, ya hablaría con Rafa en privado, se duchó y salió con la cabeza baja con dirección a la calle, por supuesto no se libró de los comentarios de los que estaban haciendo gimnasia, que sin duda ya sabían lo que había pasado además que muchos lo habían visto mientra la puerta estaba abierta.

  • Guapa ¿ya te vas?
  • Yo necesito endurecer mi músculo gordote
  • Estoy lleno de amor- dijo uno mientras se llevaba las manos a las pelotas- y te lo reservo todo para ti.

Cuando Rafa y Eva salieron del gimnasio en dirección al metro.

  • Sobre lo de volver con el inversor ¿Por qué no pueden venir sus novias? – Le preguntó Eva a Rafa
  • Joder Eva cómo se va a follar a sus novias el inversor
  • Ahh y a mi pueden follarme, ¿yo soy una puta?.. pero a sus novias no.
  • Eva parece mentira que pienses eso de mi… ¿cómo voy a pensar que eres una puta? – Eres una puta, guarra y muy zorra pensó Rafa- Lo digo porque el inversor conocerá a sus novias y no va tragarse que les deja hacer ese ejercicio. Así que tendrás que volver tú- sentenció Rafa.

El plan tras finalizar en el gimnasio era ir a la playa de la ciudad, en nuestra ciudad hay una playa que es nudista o más bien mixta ya que también hay textiles (gente con bañador). En la playa principalmente hay hombre nudistas y casi todos gays. Eva no solía ir a esa playa ya que había muchos paseantes y siempre estaba llena de gente.

Cuando salieron del metro en dirección a la playa, Eva comentó a Rafa.

  • No tengo biquiñi
  • Vamos a la playa de XXXX, no te hace falta.
  • Me siento más cómoda con biquini
  • ¿Tú?, no eres nudista convencida
  • Sí, pero en esa playa puede haber muchos conocidos

La verdadera razón no era esa, pero últimamente cada vez que "sacaba su coño a pasear" terminaban follándosela así que quería cubrírselo.

  • Pero te quedarán marcas – Objetaba Rafa.
  • Por un día no creo.
  • Pero odias bañarte y tener un bañador mojado
  • No creo que hoy me bañe.
  • Pero no tenemos bañador
  • Tu puedes hacer lo que quieras, yo compraré un biquini en cualquier chiringuito
  • ¿Biquini? Vamos a hacer el ridículo yo desnudo y tu en biquini
  • Hay muchas parejas así
  • No tantas y además ellas llevan tanga.
  • Bueno, pues me compro un tanga, pero no voy a ponerme desnuda.
  • ¿Entonces no te importa que yo tome el sol desnudo?
  • Por favor Rafa, claro que no.
  • Pues ponte un tanga, si a ti no te importa a mi menos- si ya hasta empiezo a aburrirme de verte todo el día el chocho pensó Rafa

Eva adquirió un bonito tanga azul en un puesto cerca de la playa y fue más tranquila hacia la playa. Nada más llegar, ni siquiera dio tiempo a que Rafa se desnudase, Rafa dijo ver a un conocido y se fue a saludarle, tardó casi media hora en llegar. Claro que rafa se fue realmente a preparar alguna de las suyas.

Eva estaba tumbada, relajada con su tanguita tomando el sol boca arriba. La verdad que por la falta de costumbre de usar tanga este le molestaba y eso que en esta ocasión era su talla. No entendía como Rafa podía venir con ella a la playa y largarse a hablar con un amigo. Levantó varias veces la vista pero no lo vio. Había un viejecito mirándola, las tres veces que levantó la cabeza el ancianito allí estaba… empezaba a ponerla nerviosa. El viejecito era calvo con un poco de pelo balnco sobre las orejas, estaba muy moreno, tenía una gran barrigota que su bañador, un modelo ancho y azul apenas contenía, pero las piernas eran muy delgaditas, casi sorprendía que pudiesen sostener esa tremenda barriga.

  • Hola señorita, perdone que la moleste

La voz del viejo la sobresaltó y se incorporó quedando sentada en la toalla tapándose los pechos con los brazos. En ese momento pareció Rafa, menos mal.

  • Hola Eva… Hola Sr. dijo Rafa.
  • Hola- el viejo continuo hablando- estaba aquí hablando con su novia… es que se parece mucho a mi nieta y he pensado que su novia puede ayudarme.
  • Claro, claro, dijo Eva.
  • En unos días será el cumpleaños de mi nieta y a ella también le gusta mucho la playa e ir con esa braga cortita como usted
  • Tanga, se llama tanga –aportó Rafa
  • Tanga, perdone no recordaba el nombre. A mi al principio me molestaba que mi nieta enseñase las carnes y al principio del verano discutí con ella por eso. Pero ahora me he dado cuenta que todas la señoritas lo llevan… e incluso algunas ni eso.
  • Sí, dijo Rafa, ahora lo raro es que alguien no la lleve, no tiene que preocuparse por su nieta, de verdad.
  • El caso es que le dije cosas muy feas, que si su difunta abuela la viese, que era una cualquiera… y más cosas por lo que desde entonces no me habla.

Eva estaba muy apenada por el pobre señor, también su nieta debía entender que su abuelo era de otra generación. El viejo seguía hablando.

  • Yo había pensado hacerle un regalo y que entendiese que no me importa y había pensado en una braga de esas, vamos en un tanga.
  • Es una muy buena idea – aportó rafa a la conversación.
  • El caso es que me da vergüenza entrar a comparla y además no sé si será muy cara.
  • Yo esta me la he comprado hoy, no es cara 18,00 euros.
  • ¿18,00 euros?- exclamó sorprendido el viejo- Pero si es un trozo de tela mínimo y con mi poca pensión y por espacio de casi 10 minutos se explayó sobre lo mal que estaba el país, la cantidad mínima que cobraba de pensión tras toda una vida trabajando y que con 18 euros comía toda la semana.
  • Yo le doy los 18,00 euros dijo Eva y soltó los brazos de su pecho. Hasta entonces no se había dado cuenta de lo bajito que era el anciano, pero lo era ya que ojos del viejo quedaban a la altura de sus tetas. Eva se inclnó sobre su bolso por lo que por primera vez el viejo puedo admirar el culazo de Eva. Se incorporó y extendió un billete de 20 euros al viejo
  • Por favor no puedo aceptar su dinero.
  • Pero si no es nada, solo son veinte euros.

Eva percibió cierto odio en la mirada de viejo, la verdad es que después de lachada que les había metido sobre la precaria situación económica, sin duda le había ofendido al decir que 20 euros no eran nada. Rafa le recriminó a Eva su actitud.

  • Eva no puedes ofender a la gente ofreciendo dinero y de repente se sintió ridicula con el billete en la mano- otra cosa es dar al señor el tanga porque te sobra, pero de hay a darle el dinero.
  • Lo siento, no pretendía ofender – que tonta había sido, había ofendido al pobre señor-
  • ¿De verdad le sobra ese tanga tan bonito?

Eva dudo durante un momento, la verdad que la mirada de odio del ancianito había desaparecido

  • Realmente no voy a usar más veces este tanga.

El ancianito ya transmitía total felicidad y se quedó allí plantado.

  • Pues solucionado - dijo Rafa- el Sr. ya puede arreglar el problema con su hija y tú has hecho tu buena acción diaria, eres fantástica Eva, fantástica pocas personas hay tan buenas como tú, de verdad eres de premio novel.

Los dos la miraban callados, Eva no acababa de entender, ¿querían el tanga ahora?, no le importaba dárselo ¿pero tenía que ser ahora?

  • Nosotros nos iremos en un par de horas- informó Eva – y puede – pero Rafa le interrumpió rápidamente.
  • Sí nos vamos en un par de horas, por lo que no nos importa dárselo ahora total para dos horas.
  • Gracias, gracias señorita porque además yo me voy a casa a comer, muchas gracias.

Eva se tumbó y se bajó el tanga, no era para tanto al fin y al cabo iban a ser un par de horas, el viejo sin retirar los ojos del coño de mi novia extendió la mano para recoger el tanga mientras insistía en su agradecimiento.

  • Ahora date cremita, que se te va a quemar, dijo Rafa señalándole el coño y extendiendo el bote de crema al viejo que sin mediar palabra se puso abundante crema en la mano y se puso a extendérsela a Eva, que notaba pese a la crema las asperas y rugosas manos del viejo. Por fin se fue y Eva mosqueada con Rafa le comentó. .

  • Eres un cabronazo, una cosa es darle el tanga, pero ofrecerle el bote de crema para que me meta mano… te has pasado.

  • Ahora estamos en paz
  • ¿En paz?
  • Sí en paz, por lo de anoche, por hacerme sufrir innecesariamente… - Eva lo miraba alucinada, su cara debía ser un poema porque Rafa comento- joder tía que era una broma. ¿te ha molestado?
  • Un poco… pero se me pasará. Y como dices estamos en paz, así que ninguna bromita más, por favor.

Ambos se tumbaron, por fin Rafa se desnudó así que ella ya no llamaba tanto la atención. Llevaban poco más de media hora tranquilitos cuando oyeron a un moro que desde lejos anunciaba que vendía refrescos y bocadillos.

  • ¿Te apetece comer?, Eva
  • Sí, la verdad que el deporte me ha dado hambre

Rafa llamó con un gesto al vendedor ambulante, pero eso ya os lo contaré en el próximo relato.

Gracias por las opiniones y por las aportaciones, en la medida de lo posible trato de seguirlas pero sí que es cierto que algunas son opuestas y es complicado. En este relato hay mucho de un compañero que me escribe, muchas gracias.