Mi novia era ninfómana

Mi novia era ninfómana

Estuve saliendo con ella durante un año y medio aproximadamente hasta que no pude continuar con esa relación que me hacia sentirme mal por no llegar a saciar sus necesidades sexuales, llegué a pensar que era impotente.

La conocí en una reunión de amigos que celebraban una fiesta en casa de ella, mis amigos me avisaron para acudir al lugar diciéndome que debía llevar algo de bebida pues todos harían lo mismo, me dirigí hacia allí solo pues hacia tiempo que no tenía relación con ninguna mujer.

Me presentaron a varias personas entre ellas estaba la anfitriona que a primera vista no me pareció atractiva, mas bien corriente para mi gusto.Transcurrió la velada entre copa y copa hasta que decidimos irnos a bailar, llagamos a la sale de baile y cada uno se buscó la vida por el lugar; yo me dirigí hacia la barra a por mi copa y acto seguido me fui a bailar con todos ellos, en el circulo que formábamos me encontraba frente a ella pudiendo contemplar como se movía y su figura se adivinaba esbelta, llevaba una mini falda de cuero bastante corta y una blusa blanca amplia que no dejaba el volumen de sus pechos, tras unos minutos en que nos miramos fijamente noté que ella sonreía de forma un poco descarada dándome a entender algo.

El tema que hizo saltar la chispa fue un merengue y dirigiéndome hacia ella la cogí de la cintura invitándola a bailar, ella me dijo que no sabia bailar salsa y yo le comenté que le enseñaría, durante unos cuantos bailes y apretando nuestros cuerpos fue subiendo la adrenalina hasta llegar a tocarle el culo con las dos manos notando que lo tenia bien prieto, cuando notó mis manos ella se agarró fuerte a mi cuello y acercó sus labios a mi boca dándome un beso suave, yo le correspondí con un beso mas largo a lo que llegó a ser un morreo de primera.

Ahí comenzó todo pues separándonos de el grupo nos dirigimos a un rincón dándonos un achuchón de categoría, metí mis manos debajo de su falda y pude notar que no llevaba bragas, ella me dijo que no las usaba frecuentemente, a mi me pareció bien y manosee su culo y vagina hasta que noté que se corrió muy pronto pues apenas había tocado su clítoris.

Me dijo que si nos íbamos de allí a otro sitio y así lo hicimos no sin antes despedirnos de nuestros amigos, una vez en el coche le pregunté donde podíamos ir y me contesto que fuera hacia su casa, por el camino fuimos comentado lo ocurrido y como yo estaba aun excitado le metí la no entre sus muslos llegando a su vagina que todavía estaba húmeda, me retiró la mano se volvió hacia mi con las piernas abiertas subiéndose la falda pudiendo ver su coño abierto esperando ser devorado, entonces aparqué el coche en una calle y le dije que no aguantaba hasta su casa.

Ella pasó a los asientos de atrás y subiéndose la falda hasta la cintura se abrió de piernas en medio de los asientos, me arrodillé y comencé a succionar su vagina rapada sin pelo alguno, no reparé que en esa calle podía pasar gente pues estaba tan caliente que me olvidé donde estábamos, era invierno y al cabo de un rato los cristales estaban empañados de el bao de nuestro aliento, allí se corrió de nuevo y se levantó hacia el asiento delantero quedándome otra vez sin mi recompensa.

Por fin llegamos a su casa y por el pasillo empezamos a desnudarnos dejando la ropa donde caía, la seguí hasta el baño viendo su trasero desnudo y blanquito, se colocó en bidet para lavarse el coño y me dijo que fuera a la nevera para coger una botella de cava, abierta la botella y siguiéndola a ella fuimos al dormitorio, se tumbó en la cama y me dijo, "soy toda tuya", sin pensarlo me tumbé encima y como ya estaba empalmado se la metí enseguida dándole fuertes golpes hasta que eyaculé dentro de ella, después de correrme y con la polla dentro de su vagina fue cuando se corrió de nuevo.

Quedando exhausto sobre ella me incorporé para lavarme y me cogió del brazo diciéndome que me quedara a su lado y que si podía quedarme a dormir esa noche junto a ella, le dije que si y así nos quedamos tumbados hablando hasta que nos dormimos.

No transcurrió mas de dos horas cuando noté unas caricias en mi pene y abriendo los ojos pude ver que estaba chupandome la polla mirándome fijamente, sabia hacerlo muy bien pues me la puso tiesa otra vez y se puso encima de mi metiéndosela toda dentro moviéndose con rapidez, no tardó en correrse, tenia orgasmos múltiples y yo no conseguía correrme a lo que ella pareció complacerle según me dijo.

No me corrí pues ella era la que dominaba y así me lo hizo saber, me quedé dormido hasta el día siguiente no recuerdo cuantas horas dormí, solo sé que me desperté cansado y con la polla erecta con muchas ganas de mear, me fui al baño, ella estaba en la ducha y me invitó a ducharme, le dije que tenia que mear primero, a lo que me contestó que podía hacerlo allí mismo, pasé a la bañera y comencé a mear, ella se tumbó delante de mi recibiendo mi orina entre sus pechos mientras se masturbaba con las dos manos, terminé de orinar y entonces me cogió la polla con una mano llevándosela a la boca chupando el capullo con gotas de orina que aun me quedaba, el chorro de agua de la ducha lo tenia entre sus piernas y llegaba a su vagina, aquella imagen no se me va de la cabeza todavía, era excitante como aquella mujer engullía mi pene y se masturbaba con el agua caliente de la ducha, se corrió dos veces mas.

Después de secarnos y desnudos nos dirigimos a la cocina a preparar algo para comer, comimos y en el postre sacó unos plátanos y pelando uno se lo metió en la vagina invitándome a comerlo, sentada en la silla abierta de piernas con los pies en mis hombros comencé a meter y sacar la fruta chupando la parte que había penetrado en su interior, con mordiscos pequeños y lamidas continuas el plátano quedó reducido a una pasta que se mezclaba con los jugos de su vagina hasta que no quedó rastro de la fruta.

Ahora te toca a ti me dijo, se levantó de la silla y me cogió de la mano llevándome a el dormitorio haciéndome tumbar en la cama, se tumbó encima de mi pidiéndome que no la tocara en ningún momento, comenzó a frotar sobre mi cuerpo con suavidad y pasando su lengua por todos lados, en los pies, huevos, tetillas, ingles, por todos los sitios notaba su lengua y la excitación iba en aumento, consiguió lo que quería y mi pene se puso erecto, pasó su lengua sobre mi capullo varias veces hasta que notó babeaba, entonces me puso boca abajo para continuar chupandome por detrás llegado hasta mi culo y metiendo su lengua dentro de mi ano, me levantó cogiendome la polla sacándola por detrás y comenzó a chuparla al tiempo que levantaba mi culo para metérsela mejor en la boca, así hasta que a punto de correrme me introdujo un dedo en el ano y me corrí dentro de su boca toda mi leche dejando mi pene limpio sin resto alguno, se tragó todo si derramar gota alguna.

Me lavé y me vestí, me acompaño hasta la puerta totalmente desnuda y con un beso quedamos hasta el fin de semana siguiente que ya os contaré mas cosas de esta relación.