Mi nombre es Isabel.

Además de estar escuchando a mi hermano que bufaba de placer atrás de mí, que empecé a chuparle la verga a mi esposo con fervor enajenante hasta que hice que se viniera a chorros...

Recordarán ustedes mi aventura con JORGE Y SU HERMANA. Cuando despertamos por la mañana, pregunté a Isabel qué cómo habían empezado esa relación incestuosa tan hermosa que llevaban y de inmediato comenzó a platicarme; pero Jorge nos urgía para comenzáramos la cogida de despedida en trío, pues pronto amanecería y era entresemana.  Como estábamos los tres tan calientes, pues nos dormimos y despertamos desnudos y abrazados, Isabel me dijo, luego te la mando escrita para que la publiques en TodoRelatos. Y aquí tienen el relato que me envió Isabel:

“MI NOMBRE ES ISABEL.

Tengo 46 años. Estoy divorciada, delgada de piel blanca, cabello corto de color oscuro. Mi talla de brasier es 38b, mis nalgas son redondas y paraditas.

Te voy a narrar algo que me pasó cuando estaba aún casada.

Resulta que un viernes tuvimos una reunión en la casa e invitamos a varios amigos y algunos familiares. Ese día me puse un vestido blanco muy ajustado, tanto que se marcaba el triangulito de mi tanga de hilo, la cual era de color beige, de licra. Noté que mi vestidito le encanto a mi esposo, pero a mi hermano Jorge literalmente se le caía la baba.

Bueno, la reunión fue todo un éxito y poco a poco se fueron yendo nuestros invitados, para esos momentos mi esposo ya estaba muy borracho, lo que aprovechó mi hermano menor para seguir bailando conmigo, pero al hacerlo sentí que él me pegaba mucho a su cuerpo.

Yo sabía que mi hermano Jorge deseaba tener relaciones sexuales conmigo, también sabía que se masturbaba con mis calzones y que me había espiado mientras me bañaba y que cuando me creía dormida tocaba mis partes íntimas. La verdad es que me comencé a excitar porque mi hermano me acariciaba de la cintura hacia el nacimiento de mis nalgas de una manera muy sensual.

Después que se fue el último de los invitados. Mi hermano llevó a mi esposo a la recámara para que durmiera. Yo los iba siguiendo y en cuanto estuvo mi esposo tirado en la cama, mi hermano se acercó a mí y me empezó a manosear por todas partes...

  • Isabel...que buenota estás, cuando vi cómo se te marca la tanga con ese vestidito no pude dejar de mirar tus nalgotas!!! -Dijo al mismo tiempo que me subía el vestido y metía las manos por debajo de mi diminuta prenda interior.

Estaba tan excitada con la idea de que mi hermano Jorge me cogiera y se me hacía tan morbosa la idea de cometer el incesto al lado de mi esposo. Que me dejé hacer y me rendí a las prohibidas caricias.

Me empezó a quitar el vestido jalándolo hacia abajo y me dejó en ropa interior...

  • Mira nada más que tetotas hermanita...me las voy a comer enteritas...!!!

-Dijo y yo sacándolas de mi brasier se las ofrecí, pero antes de tomarlas terminó de desnudarme por completo. Mi brasier blanco y mi tanga beige quedaron en el piso. Mientras mi hermano me daba de lengüetazos en los pechos al mismo tiempo que exploraba con sus dedos mi vagina.

  • Que peludo y apretadito tienes el bizcocho... tu esposo es muy afortunado por disfrutar de este pachón cada que quiere!!!  -Me decía, visiblemente excitado.

  • Mmmmmhhh....sí, la quiero toda!!!  Le contesté cachondísima.

-Déjame acomodarte... agáchate mamacita, empínate!!!

  • No!!! Como crees que aquí delante de mi esposo… y si se despierta?

  • De eso se trata, de hacerlo emocionante... No? Además tu vagina está empapada, eso quiere decir que te excita también la idea, si no me hubieras parado desde que comencé a acariciarte...

-Parecía que mi hermano adivinaba mis pensamientos, así que me empiné apoyando las manos en la cama, y viendo a mi esposo dormir, me dejé llevar por ese momento tan morboso y caliente...

  • A ver Isabel... Oooohhh... qué nalgotas!!! Mira que ano tan precioso tienes... Te lo voy a abrir para cogerte por el culo...!!!

  • No...!!! No lo hagas, por ahí no estoy acostumbrada...!!!

  • Que bien hermana, así le voy a hacer el favor a tu esposo de hacerle grande el culo a su mujer!!!

-Con sus manos mi hermano me abrió las nalgas, y cuando puso la cabeza de su verga en mi ano me dijo : -ahí te va!!! Ay Isabel lo tienes bien chiquito y apretado... rico... oohhh... siempre soñé con culearte mamacita,,,!!!

-Cuando mi hermano comenzó a metérmela por el culo yo solo pujaba y trataba de no gritar para no despertar a mi esposo. Luego de que los pelos de sus testículos tocaron mis nalgas, su pene grande y grueso comenzó a entrar y salir de mi ano mientras me jalaba del cabello hacia atrás como si yo fuera su yegua y no su hermana mayor.

Empecé a sentir un placer que nunca me había imaginado que se pudiera sentir.

Ya no pude aguantar más y entre gemidos ahogados me vine, por lo que involuntariamente mi incestuoso ano apretaba y soltaba la verga de mi hermano, provocando que él disfrutara enormemente, tanto que sentía que le crecía más la verga.

  • Aggghhh... que rico isabel!! Que sabroso culo...!!! Como aprieta... Uuufff...!!!

  • Decía mientras seguía penetrando mi ano con su vergota.

Pero de pronto se apartó y me dio un beso negro que casi hace que yo aullara de lujuria. Me besaba el culo lamiéndomelo por los lados y después pasaba su lengua completa por mi ojo anal, para enseguida penetrarlo, primero con la puntita de la lengua, pero la fue metiendo más y más en mi ano y me dijo que mi culo tenía un delicioso sabor saladito.

Yo sentía un placer riquísimo, quería que me metiera más la lengua en el culo...

  • Aaaahhh....qué rico.... mmmmhhh.... - Le decía, pero una vez más mi hermano se detuvo y me dijo : -A ver Isabel... Ahora tú chúpame la verga!!!

-Y la acercó a mi boca, así que se la empecé a mamar...Tenía un sabor raro, sabor a mi ano, pero estaba tan caliente que eso no me detuvo para disfrutar la verga de mi hermano con la boca.

Con mucho placer chupé sus peludos testículos, seguí por el tronco y volví a capturar su hermosa verga con mis labios, mamándosela con unas ganas que poco faltaba para sacarle los mocos... Por lo que mi hermano Jorge me detuvo.

Me volvió a empinar, y separando mis nalgas, me puso de nuevo su endurecido pene en la entrada de mi ano. Y una vez más volví a sentir aquel pedazote de carne caliente rozando mi culo.

De repente me la metió toda de un solo golpe y sentí que me partía en dos...

  • Así hermanita mía... mueve las nalgas... así.... muévelas más, más...!!! Ohhh... que hermanota tan sabrosa tengo... que rico culo tiene...!!! Aaahhhh....!!!!!

  • Decía mientras resoplaba y empujaba su trozo de carne hasta el fondo de mi dilatado ano. Era tan rico lo que sentía que tenía los ojos cerrados por el placer que mi hermano me daba. Y no vi que mi esposo se había levantado de la cama hasta que lo sentí tratando de meter su pene en mi boca. Me agarró de la cabeza jaloneándome para que se la mamara. Yo estaba sorprendida y algo asustada. Pero mi esposo me miraba con placer y lujuria...

  • Ya sabía que eres bien puta...!!! Chúpame la verga como se la chupaste a tu hermano!!!

  • Me ordenó. Se la mamé como nunca. Sentía enloquecer de placer. Por un lado sentía la verga gruesa y larga de mi hermano enterrarse en mi ano, llenándomelo todo, y en la boca la tremenda erección de mi esposo.

Era tan delicioso que no quería que terminara, pero de pronto sentí una ola de calor entrar en mi ano, mi hermano Jorge se estaba viniendo, por lo que mi esposo comenzó a pedirme que le sacara los mocos a él también.

  • Ándale mamacita... sácame todos los mocos porque quiero que te los tragues!!! Quiero ver cómo te los tragas!!!

-Me puso aún más caliente oír eso. Además de estar escuchando a mi hermano que bufaba de placer atrás de mí, que empecé a chuparle la verga a mi esposo con fervor enajenante hasta que hice que se viniera a chorros, echándome todos sus mocos en mi boca... Y me tragué hasta la última gota de su semen, mientras mi hermano seguía cogiéndome fuerte y sabroso, pues todavía tenía la verga bien erecta y me hizo venir una vez más.

Caí rendida boca abajo, jadeando y disfrutando la sensación, de pronto sentí a mi hermano separarse de mí y le dijo a mi esposo:

  • Te gustó ver el incesto? Seguro que disfrutaste observando cómo me cogí por el culo a mi hermana que es tu esposa... Si quieres volver a hacer esto, o si tienes otra fantasía que quieras realizar... ya sabes, avísame.

Con esto pude entender que mi marido había planeado todo con mi hermano, lo que me dio mucho gusto, pues no habría culpas ni arrepentimientos, pero lo que si habría sería mucha morbosidad, placer e incesto, que harían de mí una mujer cachondamente feliz, al tener a mi esposo y a mi hermano Jorge dándome verga como esa noche de infidelidad e incesto.

FIN

PD. Esta experiencia es real, si deseas comentarme algo al respecto, o deseas que te mande una foto de la tanga que traía esa noche, la misma que, luego mi hermano me la pide prestada para masturbarse, aunque sospecho que a veces se las pone; te dejo el email de mi hermano Jorge:

Ratablancacrue@hotmail.com

Espero sus comentarios, chao. Isabel”.