Mi negro y el mirón...
Me señala unas esposas que tenía encima de la cama.... pero le dije que no, hoy, esas esposas eran para él..... pude notar al momento la erección instantánea, fuerte y contundente en sus pantalones...
Fui a Barcelona a una jornada de trabajo, preveía terminar tarde, asi que no quedé con nadie, ni para comer.
Cual sería mi sorpresa cuando a las 2 y dado lo avanzado de la jornada, cerramos conclusiones y me vi con una deliciosa tarde libre ante mi, sola y.... estupenda.
Llamé a mi "negro", hace semanas que no se de él y siempre nos apetece vernos... debería decir tocarnos?.
Respondió a mi llamada al primer toque, su voz, siempre suave y sugerente ya me puso... de esa manera.... me invitó a su casa y en 20 minutos me planté allí.
Ya había estado, una casa de ambiente africano, como él mismo, limpia y ventilada, incienso en la mesa y velas por la habitación...
Nos ahorramos los preámbulos, los dos teníamos ganas y necesidad de besos y abrazos.
Solo abrirme la puerta un largo y intensisimo beso, tocamientos variados y a la habitación.
Me señala unas esposas que tenía encima de la cama.... pero le dije que no, hoy, esas esposas eran para él..... pude notar al momento la erección instantánea, fuerte y contundente en sus pantalones...
Nos desnudamos, poco a poco, sus dedos largos recorrían mi cuerpo, sin dejar un milímetro libre, yo intentaba lo mismo, ni que me resulta difícil, su 1'96 de estatura, frente a mi 1'60, me limita un poco, eso en pié, tumbados no hay medidas qué valgan.
Se agachó y empezó a morder mis pechos, sabe que eso me vuelve loca, primero uno y luego el otro, sin prisa pero sin pausa, mordiscos largos he intensos, hasta cierto dolor me provocaba, pero era mayor el placer...
Mientras, una de sus manos me agarraba por la espalda la otra bajaba entre mis piernas, le encantó notar mi humedad, me susurró al oido que no conocía ninguna mujer que se pusiera tan rapidamente...ni que el inmenso bulto en sus pantalones delataban su estado...
Un dedo jugaba con mi clítoris, otro con mi ano y su lengua en mis pechos... le hice notar que un orgasmo se aproximaba y no paró, al contrario, insistió en esos puntos hasta que mis piernas flaquearon frente a un delicioso y largo orgasmo. Me dejé caer en sus potentes brazos, y ahi, en el suelo, me abrazó y acunó un buena rato..
Luego segui desnudandole, le puse las esposas y tapé sus ojos... eso, me comentó, iba a provocar que se corriera, le dije con voz severa.... ni se te ocurra.... si lo haces me voy y te dejo asi.... empalmado y atado!.
Fuí besandole poco a poco.... despacio... pasando mi lengua por cada recoveco de su cuerpo, mis pechos le acariciaban, mis humedades le excitaban, no podía tocarme, solo yo podía hacerlo y cómo no veía hacía donde iba, estaba super excitado, a flor de piél...
Me puse de espaldas a él. sentado encima, mi vagina rozaba su boca y no perdió el tiempo, metió toda su lengua, me costaba concentrarme en su pene, sus lamidas eran largas he intensas.
De repente, al levantar mi cabeza vi a través del cristal de la puerta una sombra, y asi, a contraluz pude ver un cuerpo y un pene que se acariciaba.... primero me asustó, alguien nos estaba mirando y disfrutaba con ello, sin duda....
Asi que por una vez, quise ser exibicionista, eso me puso a mil, agarré su pene y lo succioné como nunca, pellizqué con una mano mis pezones mientras mis ojos miraban la puerta y veían otro pene.... excitado... negro y maravilloso....
No tardamos ni cinco minutos en corrrernos los dos.... los tres... el de la puerta se corrió y su semen quedó esparcido por el cristal...
No podeis imaginar el placer.... limpié mi boca y bebí un trago de cola, me acerqué a mi "negro" y le di un largo beso, larguísimo, sabía a mi, mis flujos le habían inundado la boca...
Le solté de esposas y ojos, me comentó que se la habia comido como nunca.... yo sonreí y no dije nada...
Luego me agarró por la espalda y así, sin preambulos me la metió desde atrás, yo a cuatro patas y notando todo ese impulso, mirando por la puerta y viendo un par de ojos fijados en mi, en el balanceo de mis pechos y mi cara... de placer absoluto...., nos corrimos los dos a la vez, esta vez no se qué pasó con el de la puerta, desapareció, ni que al rato oimos correr agua en la ducha del pasillo.
Me fuí a la media hora, tenía que cojer un tren, pero antes de irme me presentó a su compañero de piso... este me miró a los ojos y sonrió, él sabía que le había visto y había gozado con él también, pero no dije nada....
Él me acompañó al tren y me dijo cuando regresaría, que le gustaría pasar una noche entera conmigo, sin prisas.... esa sonrisa al pronunciar eso ya me puso otra vez encendida.
Le respondi que pronto, muy pronto y le pregunté si su amigo iba a estar en casa.... solo me dijo.... estará tanto como tu quieras, te esperamos los dos...
Asi que ya he decidido el dia, y solo de pensarlo... uuffff.....