Mi mundo era el trabajo

Mi mundo era mi trabajo

Mi mundo era mi trabajo, clases y mi casa, contaba con 25 años y una vida por delante; no soy un adonis pero si he tenido mi pegue tanto con chavas como con chavos, pero me llaman más la atención esos señores mayores que Yo, muy masculinos y formales.

Comencé a laborar en una compañía privada en la cual mis labores eran en  computo y por ende tenía relación laboral con todos los departamentos que conformaban la compañía.

El día que comencé me presentaron a todos y en especial me llamó la atención el contador general, un tipo de 1.80 mts. de altura, tez clara, pelo castaño muy claro, ojos verdes y unos labios que parecían dibujados, en términos generales ese no es mi prototipo de macho, Yo soy más para los latinos y no anglosajones, esos que se miran tipo obreros fortachones y no modelos de foto.

Yo por mi parte soy del tipo bajo con 1.65 mts., pelo negro entrecano, ojos café claros, piel trigueña clara y un poquito pasadito de libras pero muy simpaticón.

El asunto es que todo fue bien, pasé el período de prueba y seguí adelante con mi rutina, de vez en cuando los compañeros organizaban parrilladas en las que todos participábamos y así nos conocíamos socialmente unos a otros.

En una de esas reuniones que realizábamos en la casa de campo del gerente ocurrió algo muy inusual, Pablo jugando al futbol se torció el tobillo y salió por causa del dolor y no pudo seguir participando, Yo no estaba jugando y como compañero le dije que me mostrara el pie a ver que tan mal estaba.

Algo había aprendido de primeros auxilios en el colegio y otro trabajo.

El pié solo mostraba hinchazón por el doblón, nada serio pero no podría continuar, me pidió que le hiciera algo de masaje en el pié para ver si calmaba el dolor y así lo hice, conseguí algo de aceite y comencé mi tarea afortunada de sobarle el pié a este señor (Pablo es el contador de la oficina) que me traía por la calle de la amargura pensando en como sería desnudo y aquí lo tenía, sentado frente a mi en calzoneta, sin camiseta y descalzo agregando a esto que estaba a punto de comenzar a acariciar su pié porque a eso no se le puede decir sobarlo.

Comencé calentando el aceite untándolo y frotándolo entre mis manos, luego tomé su pié y lo coloqué suavemente sobre mi rodilla apoyado en un paño y con sumo cuidado comencé a tomar su pié por los costados ya que lo tenía con la planta frente a mi.

El doblón fue en el tobillo pero quería recrearme primero con ese empeine, esos dedos y el arco del pié tan bien pronunciado, su talón era grueso como lo suponía, el pié era nervudo se brotaban sus venas en el empeine y poco a poco fui subiendo hasta llegar a su tobillo, Pablo arrugo un poco la cara al tocarlo allí, le rocié más aceite a mi mano para que llegara tibia al contacto con su piel.

La hinchazón no era mucha pero con las caricias que le propinaba estimábamos que sería leve para el día siguiente que había trabajo.

Estuve como 20 minutos acariciando su pié hasta llegar a la pantorrilla que era muy gruesa y fuerte.

Fueron los 20 minutos más sabrosos de ese fin de semana.

Yo al levantarme busque una escusa para tomar el paño que había estado utilizando y tapar la carpa que tenía en mi calzoneta, ese hombre me hacía temblar de solo tenerlo a mi lado.

Pablo me agradeció mi gentileza y dijo que había sido la mejor sobada que le habían dado en su vida.

Pablo al día siguiente llegó cojeando al trabajo, todos pasamos a saludarlo por turnos y mirar como seguía, Yo fui de los últimos en acercarme por mis labores pero al entrar en su oficina me invitó a pasar, pidió nos trajeran un par de cafés y charlamos un poco; todo muy ameno y volvió a agradecer mis detalles al sobarle el pié a lo que me preguntó que donde había aprendido a hacerlo tan bien y respondí que fue con mi ex mujer que ella es quinesióloga profesional.

Estupendo dijo Pablo, mira Luis, te propongo que me ayudes en estos días con un masaje a mi pié para ir mejorando, de mi casa traje el aceite y una toalla para que no te vayas a embarrar además te voy a recompensar por tus servicios.

Yo dije que estaba de acuerdo pero que no tenía que pagarme nada, era una ayuda entre amigos y así fue, todos los días de esa semana le di un masaje a ese pié tan divino de Pablo y al final de la semana volvió a agradecérmelo pero me dijo que en vista que no había querido tomar dinero alguno me invitaba a salir a una peña (lugar de canto de aficionados y grupos) y así fue.

Ese viernes salimos de la oficina, fuimos a la tal peña y allí cenamos acompañados de unas cervezas al tiempo que escuchábamos a los diferentes cantantes aficionados que en términos generales no estaban mal.

Luego Pablo se ofreció a llevarme a casa para que no pagara taxi y así conocía donde era.

Pasaron un par de semanas más y todo volvió a la misma rutina en la oficina, pero llegado el miércoles teníamos feriado al día siguiente y Pablo me llama para invitarme a una noche de piscina en su casa, acepté de inmediato sin pensármelo dos veces.

Llegando a su casa nos reciben sus hijos y la señora de Pablo, una familia preciosa coronada con 3 varones que eran la mescla exacta de sus padres, llegándolos a superar en su propia hermosura uno a uno.

Hubo muy buena comida, música y diversiones; los invitados eran muchos y de todas las edades, los habían niños, adolescentes y más grandecitos.

Estando en las platicas Pablo contó a sus amistades de lo fabuloso que era dando masajes y que le había servido enormemente mis atenciones en su pié que estaba totalmente recuperado.

Pablo luego se me acercó para pedirme que si podría llegar a su casa este fin de semana y darle un masaje entero a él y a su esposa, pero que por esos si tenía que aceptar paga.

Como estaba un poco escaso de efectivo acepté gustoso y nos apuntamos para el sábado después del trabajo.

Llegó el sábado y Yo estaba nervioso por el asunto ese de los masajes a Pablo y a su esposa, Yo ese día alisté ropa extra para dar los masajes porque Yo sudo una temeridad dándolos y no quería quedar con la camisa toda mojada de sudor.

Llegamos a casa de Pablo y nos encontramos con su esposa muy preocupada llamando por teléfono a sus padres porque uno de ellos tuvo un accidente en la casa y estaba hospitalizado, Pablo se ofreció llevarla y esta dijo que no, que ella conduciría y que le avisaría si necesitaba de algo.

Al salir la esposa de Pablo le dijo que se llevaría a los dos menores que tienen una semana de vacaciones para que vean a sus abuelos y que Pablo José se quedaba porque tenía que presentar un examen en la universidad el lunes.

Pablo José es el mayor de los 3 hijos y tiene 18 recién cumplidos en esa misma semana, es un chaval de la misma estatura de su padre, su piel es un poco más oscura por la combinación de la madre que es trigueña, pelo negro.-  PJ como lo llaman en su casa tiene los ojos color verde esmeralda, piel trigueña clara pero bronceada por el uso frecuente de la piscina, pelo castaño oscuro y unas cejas unidas al centro que hace que su mirada se vuelva como inquisidora si te mira mucho tiempo, porque no decirlo digno hijo de su padre.

Pablo me dijo que alistaría todo para comenzar el masaje pero que primero tomemos algo para relajar la tarde y que después de hablar con PJ me encontraría en la piscina que es donde voy a darle el masaje.

Pablo se giró y mientras caminaba pude ver su trasero firme y respingón, al tiempo que le escuchaba decir que buscara que quería tomar de la refrigeradora.

Así lo hice, tome una cerveza y me fui a la piscina, vi que había una mesa cubierta con toallas de playa, una mesa auxiliar con aceites, así que todo en orden y listo para la acción, fui a un lado donde está una ducha al aire libre y me cambié la ropa, me puse un traje de baño tipo speedo y una camiseta sin mangas.

Pablo volvió con su hijo al par platicando entre ellos y al llegar a la piscina me presentó con su hijo que no había podido conocer el otro día porque estaba fuera de la ciudad, precisamente donde sus abuelos.

El hijo es una maravilla dije a mis adentros, pero el padre no lo cambio por nada ni por nadie.

Bueno, salud por el trabajo y que tus suegros se mejoren dije a Pablo y PJ se unió al brindis con un refresco.

Pablo comenzó a desnudarse hasta quedar en bóxers del tipo flojos pero que le asentaban súper bien, PJ por su parte entró a la casa y cuando salió vino solo con un traje de baño del mismo tipo del mío (speedo) de color beige que saltaba sobre su piel bronceada y dejaba a la vista un par de piernas bien formadas y musculosas, un abdomen plano queriendo marcar el sixpack, toda una visión.

Pablo se recostó boca abajo y comencé mi labor dándole masaje en su espalda y hombros, su nuca y fui bajando por su espalda a la par de su columna, sus músculos eran firmes pero si tenía tención en ellos.

Al llegar a la altura de su elástico pude comprobar lo que muchas veces vi en su pantalón, Pablo tiene un par de nalgas riquísimas; solo pude posar mis ojos en ellas unos instantes y continuar con sus piernas súper peludas, mas bien parecía un pantalón al natural esas columnas envueltas en pelos que descendían por todo su largo hasta llegar al tobillo.

Su talón se mostraba ancho y grueso, pude comprobar que también suave al tacto y sus piernas eran como columnas de mármol oscuro bien firmes y tensadas, doble su pierna hacia arriba para presionar sus músculos y poder masajear su pierna extendida mientras presionaba la otra con el peso de mi cuerpo y así cambiamos de una  a la otra pierna para continuar con su pierna completa.

Mis manos pasaban cerca de su entrepierna para poder sobar las piernas en si.

Luego subí por su espalda hasta alcanzar nuevamente sus hombros y en un descuido mío Pablo que tenía sus brazos extendidos en los costados de la mesa con el borde de su mano rocé mi pene que estaba parado pero tapado por la camiseta y aprisionado por mi speedo y vi como Pablo apartó un poco la mano al sentir mi dureza y tención.

No hice ningún comentario y ni Pablo tampoco, seguí mi tarea de masajear ese cuerpo hermoso que sus padres le dieron al nacer.

A todo esto PJ seguía en el agua perfeccionando su estilo de nado tipo mariposa, era muy bueno y de eso charlábamos Pablo y Yo, de lo bien que se desenvolvía PJ en el agua parecía un pez.

Luis, fíjate que Yo cuando estaba como PJ fui seleccionado de natación y es por eso que lo primero que hice cuando pude fue instalar la piscina en mi propia casa y cultivar en mis hijos la dedicación a la natación y gracias a Dios que la captaron porque PJ tiene un cuerpo fenomenal que es la envidia de sus amigos y la admiración de toda chica que lo llega a conocer.

PJ es muy activo y hace mucho deporte, aparte de natación hace futbol y está en el equipo de natación de la universidad,  sus hermanos lo tienen como un gran ejemplo y siguen sus mismos pasos; además todos son grandes estudiosos y les va muy bien, no puedo quejarme de ninguno de ellos.

Charlando y masajeando y en eso le digo: Pablo, no se si a ti te moleste pero parte del masaje es también dar un tanto en los glúteos, ahora si no quieres llenar el bóxers de aceite puedes quitártelo y te pongo la toalla mientras te masajeo.

MMMM Luis, no hay problema me lo quito y por quedarme desnudo no hay problema, con mis hijos nos conocemos bien, incluso en ocasiones nos bañamos todos juntos y desnudos; nosotros no objetamos la desnudes en casa, hasta mi mujer lo practica junto a nosotros y todo bien.

A bueno, siendo así veo que no hay problemas.

Y dicho esto Pablo levanta levemente sus caderas y me dice: Luis me ayudas a sacarlo y así lo hice, mi corazón parecía que se me saldría por la boca, sentí que se subieron colores a mi cara y orejas y mis manos temblaban.

Pude observar por primera vez ese par de globos al desnudo, todos cubiertos de pelos, incluso en la raja era tal la ensortijada de pelos que parecía de esas selvas impenetrables.

Tragué saliva y terminé de sacar el bóxers de sus piernas y tirarlo en la grama.

Por entre las piernas pude ver que el pene de Pablo se había deslizado para atrás y su glande apuntaba por debajo de sus huevos.

Eso era tremendo.

Volviendo a la carga, mis manos con aceite bajaban de sus espalda y subían por sus nalgas, masajeaba una y otra y me concentraba en estar de frente a la piscina para que PJ no fuera a notar mi verga parada desde la piscina al masajear a su padre porque así me cubría la mesa y los faldones de las toallas.

Yo estaba en el cielo hecho tierra, mis pies sentían delicioso el roce con el césped al estar desnudos sobre el, mi tranca de vez en vez la rosaba con la mesa para aprisionarla y darle un leve masaje a ella también.

Mi respiración era agitada a causa de mi excitación y nervios, Pablo no notaba nada de todo eso y eso me alegraba más.

Toco el momento de que Pablo se volteara y así lo hiso, al voltearse pude observar que su pene estaba camuliano, a medio parar.

Se mostraba grueso y largo, quedó tendido hacia un lado sobre su vientre.

PJ había salido de la piscina y se tendió  a todo su largo en la orilla de esta, pude ver que el mazo de carne que se cargaba PJ era herencia de su padre porque así en reposo se notaba grande y grueso a través de la tela que siendo de color clara se intentaba transparentar un poco y marcaba cada borde que esa verga que tenía y se adivinaba hermosa y suculenta.

Pablo por su parte tendido frente a mi con su verga en reposo pero igual a su hijo un buen pedazo de carne para degustar, Yo masajeaba sus piernas desde su pié hasta sus muslos, suavemente pasaba los dedos en la parte interna de su muslo y podía ver como la bolsa del escroto arrastraba ese par de pelotas que tenía por huevos hacia lugares mas firmes y como su pene solo bamboleaba al ritmo de mis manos al frotar el cuerpo de Pablo, pasé de las piernas a su abdomen, firme y peludo todo el hasta subir a su pecho donde se formaba una cruz de pelos que en sus extremos ocultaban un par de pezones rosaditos y grandes, dignos de una buena lamida y un par de mordiscos en sus puntas que se adivinaban paraditas a la vista y duritas al tacto.

Como dije, estaba en el cielo y no lo podía creer; estaba masajeando al hombre que me tiene fascinado y a unos metros de mi un chaval mostrando su espectacular cuerpo y todo para mi solito.

PJ salía y entraba de la piscina y Yo continuaba dando el masaje a su padre, Pablo cerró sus ojos y me dejó hacer, PJ vino hasta nuestro lado a platicar mirando como le daba el masaje a su padre.

No podía pedir más, eso era fenomenal, al estar masajeando su abdomen podía ver como su pene se bamboleaba reposado en su ingle y al pasar a tratar las piernas de vez en cuando mis dedos hacían contacto con su escroto y pude observar que mis masajes en sus piernas causaban un buen suceso en Pablo porque su pene fue tomando grosor y comenzó a largarse y templarse más.

Yo comencé a sentir pena porque estaba Pablo acostado en la mesa con migo acariciando su cuerpo a través de un masaje y su pene comenzaba a tomar tamaño en una erección eminente que no se podía parar y lo peor de todo su hijo mayor de apenas 18 años cumplidos estaba parado al frente platicando con nosotros y Yo no podía verle la cara a PJ de la vergüenza de estar en esa situación, manoseando a su padre y que este sufra una erección frente a él.

Con la frente bajada por la vergüenza le dije a Pablo que perdonara que Yo no quería que eso ocurriera y Pablo me dijo: No tengas penas Luis, mira, es normal que me ocurra ya que desde hace como más de media hora estas sobe que me sobes y mi cuerpo tiene que reaccionar, recuerda que soy de carne y huesos y tengo sensibilidad y no es que tu hayas hecho algo malo o inapropiado es simplemente el reflejo de mi cuerpo a lo bien que tu sabes hacer masajes ¿Verdad PJ? Y este dijo un Sí fuerte y claro con un ademan de su cabeza entonando aun más lo dicho.

Con todo y todo le digo a Pablo, me siento mal, si quieres paramos aquí y no te preocupes que no me vas a deber nada.

Pablo se incorporó y se apoyo en sus codos para voltearme a ver y dijo: Yo soy el que estoy apenado con tigo por no poder controlarme, pero es tan satisfactorio tu masaje, bueno pues; es que se siente tan rico que de allí no pude evitar que se me parara la riata.

PJ se tiró una carcajada y dice: Mire Don Luis, si viera que mi papá toda la vida anda con la riata parada por nada y como aquí en la casa solo desnudos andamos ya se la conocemos re bien.

No se preocupe que eso es normal para mi viejo, Yo respiré un poco y Pablo se volvió a recostar, con la vista un poco baja todavía por la pena que sentía levanté mis ojos para ver a PJ que estaba frente a mi y cuando iba subiendo la mirada pude observar que él mismo tenía una pequeña erección en su traje de baño y digo pequeña porque solo se notaba un poquito más grande que hace un rato el rabo que allí se escondía.

PJ cuando alcancé sus ojos con los míos, estaba embozando una preciosa sonrisa y me miraba con sus bellos ojos que me hicieron palpitar el corazón.

Lo de haber subido al cielo, estar en el paraíso era nada con lo sentía en ese momento, sentía como si hubiera muerto y hubiera renacido al mismo tiempo, eso es fenomenal.

Un padre hermoso y vigoroso como lo podía atestiguar esa riata que a segundos crecía más y más a lo que había que sumar ese cachorro hermoso,  retoño de un gran semental que hacía tendido en la mesa dejando que mis manos lo masajearan dándole placer que él mismo atestiguaba frente a su hijo que lo estaba haciendo disfrutar.

Seguí mi labor y la riata de Pablo se empinó toda hacia el cielo abierto, esa pija daba brincos a medida continuaba mi labor; después de unos 15 minutos más con las manos temblando de la excitación terminé mi masaje a Pablo y así se lo hice saber.

Pablo me dijo: Luis, nuevamente no sientas pena por esto dijo señalando su bergota bien parada ya te dije que es una reacción normal a tu buen trabajo relajando mis músculos y haciéndome sentir bien.

Dicho lo anterior Pablo saltó de la mesa y dando una nalgada a PJ se dirigió a la ducha para darse un baño de agua tibia y quitarse el aceite utilizado.

Yo estaba viendo a Pablo bañarse y tomé una cerveza del recipiente al par de la butaca de patio, PJ se tiró a la grama a disfrutar del sol y todos charlábamos como si tal, pero Pablo no bajaba la erección en su pene aun después de darse un baño y lo vi tirarse un hermoso clavado en el que su pene se mostraba como más grande que antes cuando estaba en la regadera.

Desde el agua me instó a que entrara y le dije que esperaría a tomar la cerveza para entrar, pero mentiras, todo era porque quería que mi propia erección bajara y no avergonzarme más aún.

PJ dijo, Don Luis, no le molestaría que me quite el traje de baño, es que estoy acostumbrado a estar desnudo y me estorba.

Claro que no, conteste Yo, e inmediatamente aquel Príapo quedó como vino al mundo desnudo por completo y un detalle me llamó la atención y es que su padre es excesivamente peludo y el en contraste es lampiño y donde debiera haber una pelusa en la base de su pene se notaba limpio de todo pelo a lo que asumí que se rasuraba.

Su pene en verdad estaba camuliano y sin circuncidar lo cual me llamó la atención pues el de Pablo si lo estaba.

Pensé que era raro que su padre tuviera la operación y su hijo no, podría ser que su madre tuvo que ver en ese punto, eso era secundario pues aquel hombre joven que estaba acostado en la orilla de la piscina tomaba el sol completamente desnudo junto a su padre que nadaba tal cual vino al mundo también.

Yo poco a poco hice que mi verga bajara su volumen y me tiré al agua con mi traje de baño.

Pablo que estaba en el agua no me dijo nada, pero luego de un rato me dice: Mira Luis si tu no quieres no lo hagas, pero aquí solo estamos mi hijo y Yo que fuera de otra cosa ya estamos empelotados y por consiguiente si quieres te puedes quitar el traje de baño sin pudor; además, desnudos entre machos no hay problemas y mi mujer viene hasta la otra semana así que tu decides.

Yo no conteste nada, seguí un rato así y luego de pensármelo me dije y que, si se me para es natural que a uno se le pare la pija de vez en cuando así que no hay problema y desde el centro de la piscina lancé mi traje de baño a la orilla y quedé completamente desnudo.

El agua inmediatamente pegó directo a mi verga que al sentir ese bamboleo de la piscina se comenzó a parar de forma deliciosa, esa sensación nunca la había tenido y es sabrosa.

Pablo por su parte ya había comenzado a lanzar agua y unos flotadores en forma de tubos plásticos muy vistosos y que se encontraban en toda la superficie, Yo también comencé a jugar con aquello y como corríamos por toda el área en ocasiones salpicábamos a PJ que estaba en la orilla tomando el sol y en una de esas siento como entra al agua en forma de bolita casi ahogándome con la cantidad de agua que salpicó.

PJ se había lanzado al agua en forma de pelota y me lleno de agua toda la cara, casi sentía ahogarme por aquello, pero lo mas interesante fue que estando en lo de recuperar la respiración siento como alguien se desliza entre mis piernas que estaban entre abiertas y como tuve que abrirme muchísimo más debido a que su cuerpo me rozaba las pelotas y mi verga que estaba totalmente parada para ese entonces era acariciada por una mano desde su base, pasando por los huevos y arrastrando sus dedos muy sutilmente por mi raja acariciando mi culito, EL AGUJERO DE MI CULO era acariciado por los dedos que pasaban por allí y luego de eso inmediatamente sentí como ese cuerpo se pegaba a mi espalda y rozaba todo mi entorno de las nalgas sin separar esa mano de mi piel y como una culebrota gruesa y larga se restregaba en mi culo y subía por mi espalda hasta llegar a casi la mitad de mi espalda para luego abrazarme desde atrás y dejarme inmovilizado.

La riza no la podía contener el tal PJ, me había sacado de todo, no sabía que hacer, ¿me quedaba sin decir nada, me hacía el enojado que en verdad no lo estaba, hacía que quería zafarme cuando en verdad quería que me aprisionara más, qué hacer?

JAJAJAJAJjJAJAJAJ ajaaaa jajajajajajjajaaJHAJAJAJAJAJa

Escuché las risotadas tanto de PJ como de Pablo.

PJ estaba pegado a mi desde mi espalda y me tenía aprisionado con sus brazos, su pija estaba pegada a mis nalgas en el medio de ellas y podía sentir su grosos y largo.

Su padre, estaba al otro lado de la piscina viendo aquello y carcajeándose a más no poder por mi cara de susto y ahogamiento.

Yo estaba rojo de vergüenza porque PJ al tocarme así pudo sentir mi verga parada sin un motivo aparente.

Pero con todo y todo este chaval me tenía aprisionado contra su pecho y más peligroso aun, mis nalgas contra su verga.

Yo opté por luchar para zafarme, pero PJ era más fuerte de lo que supuse y lo único que lograba era que mis nalgas se frotaran contra la verga que PJ no separaba de ellas y que Yo podía sentir como con mis movimientos de culo esta verga se ponía más y más dura, gruesa y larga a cada segundo, Pablo ya se estaba acercando demasiado para mi ver y su hijo PJ no me soltaba.

Yo estaba a punto de ser totalmente descubierto con mi pija parada y con PJ sujetándome desde atrás.

Pablo llegó, se hundió en el agua para tomarme de mis piernas y es seguro pudo ver mi verga bien tiesa bajo el agua, no dijo nada, me tomo de mis piernas aprisionándome de mis tobillos, PJ me tomó de la cintura y entre los dos me lanzaron fuera del agua para luego dejarme caer en ella para que me hundiera, allí pude comprobar estando bajo el agua que tanto padre como hijo tenían esos tremendos salchichones que poseían por verga en total erección.

Ufff  ese espectáculo casi me hace tragarme toda el agua de la piscina.

Salí de la piscina a su superficie casi morado del ahogamiento y mis amigos lo pudieron notar, rápidamente ambos me ayudaron a salir a la orilla apoyándome en su borde con el resto del cuerpo dentro del agua.

Yo estaba asustado y podía sentir a ambos a cada lado mío confortándome y pidiendo disculpas a más no poder.

Tanto Pablo como PJ se sentían muy turbados que por culpa de ellos casi me ahogara, pero la verdad era lejos de eso, lo que me escapa de ahogar fue ver ese par de vergajos como nunca los había visto en mi vida y lo mas excitante es que eran pijas de padre e hijo.

Sus manos me daban suaves palmaditas en la espalda y la acariciaban de arriba abajo encontrándose en ocasiones.

Pablo sugirió que saliera del agua y que descansara un rato que de agua había tenido suficiente.

Yo no dije ni pio, mi mente estaba ocupada en procesar las sensaciones que tenía en ese momento, ambos estaban acariciándome la espalda muy preocupados por mi reacción pero no ponían reparo en que ambas vergas rozaban mis muslos y eso me volvía a calentar.

Primero salió PJ de un solo salto y luego Pablo desde atrás mío me tomó por la cintura elevándome haciendo que PJ me ayudara a salir.

Mi cara al salir del agua quedó a escasos centímetros de la inmensa verga de PJ que ya colgaba como péndulo por su gran tamaño que habiendo perdido firmeza continua siendo un tremendo salchichón.

Su padre por su parte luego del levantón, ayudó apoyando sus manos en mi culo que tomó fuerte y firme.

Podía sentir como esos dedos casi tocaban el agujero de mi culo y como para ayudarme a salir una mano se posicionó en mi nalga derecha en su parte más baja, quedando su dedo pulgar en la mera entrada de mi ano.

Su otra mano en mi muslo levantó un poco más mi pierna izquierda haciendo que la separación de mis nalgas fuera bien amplio y estoy seguro que pudo verme en culito en todo su esplendor.

Al sacarme Yo estaba muy agotado y asustado, PJ se sentó en la grama y apoyó mi cabeza en su pierna mientras su padre dijo que ya volvía y vi cuando se retiró.

PJ me dijo que le perdonara que no era su intención que pasara esto, que no podía perdonarse que me pasara mi casi ahogamiento.

Con su mano posada en mi pecho y la otra en mi frente apartando los pelos que allí se alojaban pude ver que su cara era sincera y emotiva.

Su mano me acariciaba la sien mientras mi cabeza reposada en su pierna estaba a escasos centímetros de su verga que a estas horas a pesar de encontrarse en completo reposo en un movimiento mío por voltearle a ver pude sentir que se pegaba en mi mejilla y que no estaba tiesa, estaba blanda pero tirada sobre su costado.

Se que PJ no percibió mi roce porque fue muy rápido y no quise parecer abusador.

Su padre volvió y dijo que había consultado a emergencias y que ya venían por si llegaba a tener agua en los pulmones y que lo mejor que tenía que hacer es estar recostado.

La central de emergencias estaría muy cerca porque en un par de minutos los paramédicos estaban allí.

Me revisaron, escucharon mis pulmones, tomaron signos y dijeron que todo estaba bien, sugirieron que no me volviera a meter al agua pero que si podía seguir en un lugar con algo de sombra para evitar una insolación.

Allí fue cuando me percaté que los tres estábamos aun desnudos y que los paramédicos no hicieron insinuación de la situación ni porque Yo estaba en las piernas de aquel hermoso muchacho.

Acto seguido me tendí en la poltrona con sombrilla y me trajeron mucho líquido para tomar.

Pablo sugirió que pasáramos a la casa para evitar el sol y que Yo estuviera más cómodo.

Así fue, me adentré a la casa por mi propio pié no sin antes pedir disculpas por el incidente y que no se preocuparan que era mi falta de costumbre al nadar, pero nada más alejado de la verdad, fue el susto de ese par de vergas que ahora lucían pequeñas en comparación a los sables que vi en la piscina y eso que en estado de reposo eran unos suculentos manjares dignos de un sultán.

La verdad que ambos, tanto padre como hijo son un portento de belleza masculina, irradian testosterona por todos sus poros, sus atenciones hacia mi fueron como si estuvieran contemplando a la más fina dama que hubieran tenido en frente de ellos.

Me sentida aturdido de sus atenciones y a eso sumarle que todos seguíamos desnudos en el interior de la casa.

Pablo me invitó a tomar un baso de jugo natural en su sofá frente a la tv y su hijo preguntaba si quería algo de comer.

Les dije que no se preocuparan tanto que todo había pasado y que si sentía alguna molestia les diría, les propuse que miráramos tv todos en la sala y que todo iba genial.

A todo esto, me paré del sofá disculpándome por estar desnudo allí y Pablo dijo que no había problema, en esta tu casa todos somos nudistas y así pasamos siempre.

Así que así me quede.

PJ por su parte me sonreía y me decía que tremendo susto se llevó con migo, que pensó que allí me petateaba y que se alegraba que nada hubiera ocurrido.

Le invité que se sentara a mi lado y al llegar lo abracé diciéndole que gracias eran las que tenía Yo que darle por haberme cuidado tan bien.

Luego de una cena ligera me invitaron a quedarme y acepté, en mi vida había estado tan cómodo y desnudo frente a un par de heterosexuales tan hermosos.

Pablo me dijo que prefería que durmiera en el cuarto de su segundo hijo que estaba cerca del suyo por si Yo tenía algún apuro en la noche por lo ocurrido en la piscina.

PJ se fue al cuarto de él que era el siguiente.

Durante muchas horas no sentí nada y al estar dormido pude sentir que alguien entró en mi habitación y sin encender la luz llegó esta persona a mi lado y suavemente posó su mano sobre mi frente como tomando mi temperatura.

Mi ojos se abrieron y era Pablo que estaba allí, desnudo como era usual en él, su mano se posaba en mi frente como si fuera uno de sus hijos que estaba mal.

Al abrir mis ojos se disculpó por despertarme y le dije que no había problema y me informó que me escuchaba toser mucho y vino a ver que me ocurría.

Lo primero que pensó fue que por el agua tragado tendría calentura y así era.

Me medicó según las indicaciones dadas en la tarde por los paramédicos y me dijo que si quería podía estar allí con migo un rato hasta que me durmiera y Yo encantado acepté.

Pablo se sentó en la cama apoyándose en la cabecera y me jaló con su brazo como se que habrá acunado a sus propios hijos más de una vez, aquel brazo me atrajo como si no pesara nada y me recostó baso su regazo quedando mi cuerpo un poco ladeado teniendo que ponerme completamente de lado hacia él.

Mi brazo derecho lo cruce sobre su cintura y mi cabeza sobre su pecho.

Podía sentir su respiración, escuchar su corazón latir suave y parsimoniosamente, aquello era divino, era fenomenal.

Ese hermoso hombre me estaba arrullando allí mismo, en su casa, en la cama de uno de sus hijos como si fuera uno de ellos, ambos aún desnudos, mi brazo en su cintura y mi pierna un poco subida en la de él.

No pude evitar que mi verga rozara su muslo al estar así y la reacción de Pablo al sentir mi pene en su muslo fue de mover su pierna y ponerla entre las mías para que reposara la superior en él y la otra estuviera estirada a todo lo largo de la suya.

Podía sentir los bellos de las piernas de Pablo rosándome, eso era fantástico, estaba así y me pregunta Pablo que si ya me sentía mejor después de los medicamentos y le dije que sí, me pidió disculpas por lo groseros que fueron él y su hijo con migo y me prometió que eso no volvería a ocurrir.

Le dije que no dijera tonterías, que había sido un accidente sin importancia y más culpa era mía que de ellos por Yo ser tan poco deportista y tan flojo en natación.

Se dobló un poco y por primera vez pude sentir sus labios posándose sobre mí, me estaba dando un beso paternal en la frontera de mi pelo y mi frente, eso fue sensacional y una fuerte corriente recorrió todo mi cuerpo y fue a parar directo a mi verga que inmediatamente comenzó a crecer, Yo no pude disimular de lo rápido que se me paró.

Pablo lanzó un “Mm” al sentir como rebotó contra su pierna mi pene al erectarse así de rápido.

Mi reacción fue retirarme y su brazo fuerte me sujetó y me dijo: No te preocupes que hace rato que se que Yo te gusto.

Me paralizó, no sabía que decir, su reacción fue volver a besar mi frente pero esta vez un beso más prolongado en el cual pude sentir como sus labios se posicionaron en mi frente por completo y su mano subía por mi brazo apretándome y acariciándome por igual.

Yo temblaba no sabía que hacer, Pablo con su mano izquierda levantó mi cara y me besó en los labios, un beso tierno y delicado.

Y lo volvió a hacer una y otra vez, Yo me derretí, mi cuerpo no fue mío por mucho rato, mi boca le pertenecía a él, sus manos me atrajeron contra su cuerpo y me acariciaban sin cesar, Yo le abracé, acariciaba sus caderas, su pecho, bajaba por su abdomen y tocaba su verga.

Pablo seguía besándome como nunca nadie lo había hecho, podía sentir su lengua hurgando en busca de la mía mientras acariciaba mis labios antes de entrar.

Mi boca le soltó y bajé por su barbilla y seguí sin parar, su cuello me supo a manjar, llegando a su pecho sus tetillas eran un par de pequeños montículos rosados que me invitaban a comerlos, lamerlos y besarlos sin parar, aquello era fenomenal.

Levanté sus brazos y me hundí en sus axilas, aspirando su olor, un olor de hombre revuelto con el cloro de la piscina que guardaban sus bellos gruesos y abundantes, un olor a macho anglosajón de los cuales no había sabido nunca cuan sabrosos olían y mejor aún como sabían sus axilas, su sudor.

Aquel hombre me estaba doblegando, Yo lo admiraba y lo deseaba pero nunca hubiera querido que se diera cuenta de mis sentimientos, me hubiera quedado con ser Yo el que supiera sobre ellos pero ahora estaba allí junto a mi en aquella cama cómplice de nuestros deseos lujuriosos, esos bajos instintos que me hacían seguir hacia abajo en su cuerpo, saboreando con mi boca, lamiendo con mi lengua cada rincón de su anatomía, sus pectorales eran como vainilla, su lavandero de una mescla especial de chocolate blanco español y sus bellos púbicos eran fruto de tierra dulce y salada un termino agridulce nunca antes probado por mis glándulas gustativas porque eran la mescla de ese olor a macho y lo salado de su sudor limpio, sudor nuevo, sudor que salía de su cuerpo por lo caliente de la excitación y esa excitación era provocada por mí.

Rápidamente pude sentir como ese bastón de carne dura, caliente y suave que emanaba un olor singular por los fluidos pre-seminales que de su cabeza surgían como fuente de agua cristalina que manchó mis mejillas y pronto mi lengua degustó.

MMMM mmmmm   eso es estar en el cielo y volver a bajar al paraíso terrenal.

Ese mástil estaba coronado por un glande singular que mis labios cubrieron para darme de amamantar.

Ni una gota de líquido pre-seminal deje derramar, mis manos jugaban con sus huevos y sus piernas eran acariciadas al igual.

Me coloqué boca abajo en el medio de sus piernas y así podía besarle en las piernas y los huevos, la verga y volver a sus deliciosas bolas, en esas estaba cuando inicié un descenso por su pierna bajándome todo Yo, dejándolo recostado mientras Yo disfrutaba de lo lindo acariciando esas piernas, pantorrillas hasta llegar a sus pies, su talón, pasando por la planta del pié no sin dejar bien acariciada la parte del arco, a estas alturas estaba de rodillas al pié de la cama con sus par de pies frente a mí, podía sentir su textura, su grosor, podía acariciar sus dedos, tomaba entre mis manos sus hermosos dedos de los pies y luego uno a uno fui metiéndolos en mi boca para poder acariciarle con mi lengua cada uno de ellos y poder pasar mi lengua en cada cavidad entre los dedos de tan hermoso pié.

Así mismo, mi mano estirada acariciaba sus huevos y pajeaba su verga muy suavemente, volví a subir hasta ella aplicando las mismas caricias al otro pié y en todo lo largo de su pierna hasta toparme con ese par de manjares envueltos en un saco de carne suave y rugosa que se volvió mi locura de sensaciones en mi paladar.

Pablo jadeaba en la cama, sus manos me tomaron del pelo para apretarme contra ellos y jalarme hacia arriba para que hundiera su mástil en lo más profundo de boca llegando hasta mi garganta.

Mis ojos se cerraban automáticamente de tanto placer que sentía en mi boca, mi garganta virgen hasta entonces era taladrada por esa verga masculina, verga heterosexual, que delicia de sensación, ese ahogamiento, falta de aire que me hacia pedir más.

No supe como pero en ese preciso momento sentí como tomaban mis nalgas y las separaban, las estrujaban un par de manos que no eran las de Pablo y volteo mi cabeza para ver que era lo ocurría allí abajo y miro a PJ que estaba arrodillado atrás de mi.

PJ había escuchado los quejidos de gozo que su padre emitía sin pudor ni esfuerzo, su padre tampoco sabía de su presencia pues tenía cerrado los ojos de tanto gozar, PJ untó su mano con saliva y la untó en mi culo que ardía por que lo penetraran sin piedad y la punta de la verga de PJ se colocó allí, en la entrada de mi culo, en la entrada de mi cueva de amor.

Yo al solo sentir ese leño que este macho, adulto joven que recién cumplidos sus 18 se disponía a penetrarme comenzaba a pujar por entrar sentí que me vine sin siquiera tocarme, aquello era fenomenal, un fuerte gruñido de placer y dolor fue lo que emití; Pablo levantó su cabeza y vio a su hijo situado detrás de mi.

PJ, pero??  Fue todo lo que pudo decir.

Sus ojos se abrieron a lo máximo al ver a su hijo que nos había sorprendido infraganti a ambos, teniéndome a mi metido entre sus piernas mamándole su gran vergota y a él que ni se percató a que hora entró por estar sumido en sus placeres homosexuales de hombre heterosexual.

Jjeeep  fue lo que PJ emitió al clavar su largo pene en mí, Yo tenía la verga de su padre en mi garganta por lo que solté fue un resoplido que pasó por lo largo de pene de Pablo que tenía alojado allí.

Aquello fue brutal, nunca pensé que estaría con el padre y ahora los tenía a los dos, Pablo y Pj, padre e hijo; uno en mi boca y el otro en mi culo.

Esto es fenomenal, PJ comenzó un tanto torpe, se notaba que no había tenido sexo anal con nadie pues no eran de experto sus movimientos pero aprendía a todo vapor.

En la habitación se escuchaban como palmadas que en verdad eran las bolas de PJ estrellándose en mis nalgas y en mis propios cojones, un soplido como de tren que era la boca de PJ que dejaba escapar aire cada vez que entraba y salía de mí y los movimientos de Pablo en la cama que iban a la par de un aj aj aj aj ahogado que era fruto de la soberbia mamada que le estaba dando Yo.

Aquello duró y duró, pronto PJ me empujó hacia arriba quedando mi culo al aire con la cabeza de la paloma de su padre enterrada en mi boca y él miso comenzó a lamer mi culo sin cesar, su lengua recorría toda mi raja y mi hasta hace poco fruncido ano porque después de semejante leño dentro de allí a cada lametón se abría con gran facilidad esperando que lo volviera a ocupar.

PJ le dijo a su padre que quería cambiar, este no respondió solo asintió, PJ me jaló para voltearme y quedando el en sus rodillas me la zampo en la boca al tiempo que me empujaba hacia atrás para que su padre me la metiera con solo apuntar la cabeza de su verga en mi culito glotón.

Aquello era la gloria, este par de machos me estaban usando sexualmente para satisfacerse ellos solos sin importarles si Yo disfrutaba, pero ellos no sabían que ya había terminado mi primera vez y si seguían así seguiría la segunda en un par de minutos más.

Pablo tomó mis caderas al tener la cabeza de su pija enterrada en mi y me empujaba y jalaba haciendo que en mis idas la verga de su hijo entrara hasta mi garganta y en mis venidas fuera la suya propia la que me traspasara por completo y que en su paso apretujara toda su verga gruesa y larga mi próstata dándome uno de los mayores placeres por mi experimentado.

Pronto en ese mete y saca, chupa y rechupa la verga de Pj y la pija de su padre mi verga soltó su primer disparo de las segundas descargas de la noche sin siquiera haberme tocado, mi esfínter anal aprisiono la verga de Pablo que debido a lo excitado que estaba allí pisándose a su compañero de trabajo junto a su hijo mayor no pudo resistir y comenzó a llenarme el culo, los intestinos de su leche, de su manjar.

Pablo se estiró y lanzó gruñidos de placer y estos al ser escuchados por su hijo que me tenía con la verga hasta la faringe comenzó también a estallar como cuete de presión que lanzó y lanzó cuanto leche tuvo en su interior, sus huevos pegaban en mi barbilla y su ariete me ahogaba sin compasión, pero no importaba podía sentir como sus jugos se estrellaban en las paredes de mi garganta y me llenaban el lugar.

Su padre me empalmó en su totalidad y podía sentir como si tuviera un consolador enorme con vibrador en mi interior pero no, era la verga de Pablo que me llenaba de chorros a presión.

Todos sudamos como no hay, PJ lentamente sacó su poderosa verga de mi boca y me sonrió, luego tomando mi cara en su mano se agachó y me besó de forma cálida y sabrosa, lamiendo mis labios que guardaban el sabor de la verga de su padre y de su liquido seminal.

Pablo se desplomó y resopló, podía sentir los últimos movimientos de su verga enorme en mi interior y poco a poco también me fui desempalando de aquel leño singular.

Cuando salió, un sonido de descorche se escuchó y todos tiramos a reír.

Pronto un chorro de líquido sentí que salía de mi ojete y me apresuré a pararme para ir al baño a limpiar ese rio de semen que de mi dijo a salir.

Y así fue, era enorme la cantidad con que Pablo me baño en mi interior y que después de limpiar y lavar ya tranquilo, volví al cuarto para poder contemplar la imagen hermosa de padre e hijo abrazados tal como estuve Yo hace unas horas en brazos de Pablo como estaba PJ ahora.

Aquello era hermoso, ese par de hombres, varoniles, hermosos y sensuales abrazados en el lecho sin mi, PJ al percatarse que volví me sonrió y dijo ven Luis.

Toda la semana estuve allí, gozando y haciendo gozar a ese par de hombrones que son sin igual.

El Lunes al volver a la oficina me sentía raro, quería estar sin ropas y poder montar a Pablo o a PJ en cualquier lugar y me puse a recordar que hacía una semana mi mundo era mi trabajo.

Espero les haya gustado, ya saben lo de los lugares, nombres y todo eso…..

Se cambian para proteger a todo el que tuvo que ver.

LUDAVAGI

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