Mi mujer y yo somos bisex

LOS PLACERES DE MI MUJER

Hola, soy Toni. Os voy a contar lo que sucedió en mi casa hace un mes. Para los que no me conocéis, soy un señor apasionado de la informática y casado.

Bueno pues hace un mes más o menos por el trabajo tuve que estar todo el fin de semana en Madrid, pero la reunión que íbamos a tener el domingo por la mañana se suspendió y el sábado nos fuimos para volver a casa por la noche. Como uno de los compañeros de trabajo vivía a varios kilómetros de mi ciudad le dije de quedarse a dormir en mi casa y por la mañana le llevaríamos mi mujer a su casa y nos quedaríamos a comer.

Llegamos a casa a la hora de cenar y la sorpresa que había en el salón me gustó, eran "mis amigas" las hermanas Ana y Rosa (para los que no las conozcan os recomiendo que leáis el relato CENA CON POSTRE en TRIOS). Hice las presentaciones puesto que mi mujer, que se llama Gloria no conocía a mi compañero de trabajo que se llama Jesús. Mi mujer es alta, morena con unas tetas no muy grandes y llevaba un vestido de tirantes hasta la rodilla. Ana llevaba un vestido blanco corto nada debajo como si no quisiera perder tiempo en quitarse la ropa, su hermana Rosa llevaba un pantalón pirata y una camiseta de tirantes. Jesús es un tío de 35 años que ha salido con muchas mujeres pero no ha durado más de 6 meses con ninguna, es castaño un poco bajito y cachas de gimnasio.

Cenamos loo que había entre los cinco, durante la cena estuvimos hablando de cosas sin importancia hasta que llegamos al tema de sexo, que si todos somos bisexuales aunque no lo queramos admitir, etc. Fue entonces Jesús cuando hizo la pregunta del millón

A vosotras las mujeres os gusta ver películas porno como a nosotros pero no lo queréis admitir.

ANA – Pues claro que nos gustan, yo veo cuando estoy sola y me masturbo.

GLORIA – Como pensaba estar sola este fin de semana he alquilado una para verla sola, si queréis la vemos todos juntos.

Dijimos que sí todos a la vez. Gloria se sentó en un sillón, Rosa en el suelo cerca de Gloria, yo en el sofá con Ana y Jesús yo estaba en medio. El ambiente se iba caldeando poco a poco hasta que llegó una escena en que están en la habitación los señores de la casa y entra la criada, se queda sorprendida al ver a la señora pero esta le da la mano y la lleva a la cama donde le quitan la poca ropa que llevaba los dos y mientras el señor se queda mirando entre ellas hay una escena lésbica. En ese momento Rosa le empieza a acariciar las piernas a mi mujer poco a poco, mi mujer hace un gesto de reprobación pero enseguida accede y Rosa se sienta encima de mi mujer y empiezan a besarse. Ana no sé si al ver la escena de la película o la de mi mujer y Rosa, se levantó el vestido y empezó a tocarse la rajita. Al verlo yo empecé a tocarle las tetitas por encima del vestido que enseguida le ayudé a quitarse. Jesús mientras estaba mirando y haciéndose una paja. Mi mujer y Rosa estaban encima de la alfombra haciéndose un 69.

Cogí a Ana y la tumbé en el suelo, me quité toda la ropa y empecé a montarla poco a poco y de repente sentí unos masajes con manos grandes por la espalda que me excitaban aún más de lo que estaba hasta llegar al culo entonces los masajes pasaron a ser besos por la espalda, me volví y era Jesús, no lo podía creer, pero me gustaba. Me di la vuelta y Jesús empezó a besarme por la cara, el pecho hasta llegar al pene que enseguida se lo comió. Rosa se levantó para cambiar de posición con mi mujer al ver semejante escena vino hacia a nosotros y puso su coñito encima de mi boca para comérmelo, mientras ella besaba la espalda de Jesús.

Mi mujer se levantó y fue hasta Ana para comerle el coño. La película ya había terminado pero no nos enteramos. Cuando ya me corrí Jesús me limpió la polla y los huevos con su boca, nos levantamos los tres. Jesús me dijó que me pusiera a cuatro patas que me quería dar por el culo. Yo con la excitación y sin pensarlo accedí, pero antes Ana le lubricó polla a Jesús convenientemente con su boca. No me habían dado por el culo nunca pero no me disgustó. Mi mujer al verlo vino hacia a mi y empezó a comerse mi polla. Cuando Jesús ya vació su carga de semen en mi culo, se sentó en el suelo a descansar pero poco le duró porque la incansable Ana enseguida le empezó a tocar y besar su enorme verga hasta que ya estaba a puntito y la empezó a montar. Mientras Rosa y yo nos estábamos comiendo mutuamente. Fue entonces cuando mi mujer apareció con un aparato que no sabía ni que lo tenía, un consolador que lo chupó y mientras yo estaba montando a Rosa. Mi mujer me metió el consolador por el culo, que placer. Después de tres horas de placer acabamos agotados y nos fuimos a dormir. Ana y Rosa se quedaron a dormir en una habitación, Jesús en otra y yo con mi mujer.

Yo no podía dormir pensado en lo que había pasado hasta que no pude más y cuando mi mujer se durmió fui a la habitación de Jesús y me metí en la cama. Estaba completamente desnudo, lo desperté con unos besos en la cara y entonces nos dimos un morreo. Me comentó que era hetero pero que alguna vez había tenido experiencias con otros hombres por eso fue el comentario de bisex. Mientras estábamos hablando se oían gemidos en la habitación de al lado que era la de las hermanas, primero se oían dos clases de gemidos pero pronto se empezaron a oír tres. Esa noche no dormimos ninguno de los cinco. Ya por la mañana nos duchamos los cinco con algunas escenitas y nos fuimos, las hermanas a su casa y yo con mi mujer a llevar a Jesús a la suya.

Llegamos poco antes de comer y ya nos quedamos a comer en casa de Jesús con su mujer, que ya conocía las andanzas de su maridito. Después de comer si preámbulos fuimos directamente a alcoba y nos empezamos a besar todos con todos, nos fuimos quitando la ropa mutuamente y allí estuvimos hasta que anocheció. Desde entonces de vez en cuando o bien vamos nosotros a casa de Jesús o ellos vienen a la nuestra y con las hermanitas nos vemos a menudo, bueno mi mujer más, especialmente con Rosa.

Ya me mandareis algún comentario o alguna sugerencia a abr1965@hotmail.com