Mi mujer y sus primas. parte i

La prima de mi mujer vende juguetes sexuales nos visita en casa. Ante la curiosidad d emi mujer le exlica a como funcionan y todo termina en un delicioso trio en el que sucederán cosas inimaginables.

La prima de mi mujer era una mujer fogosa, tenía dos hijos, de distinto marido. Un día mi mujer me contó que ella le había dicho que el semen era bueno para la piel y que ella se lo untaba en la cara. Eso me excitó muchísimo y desde ese día comencé a fantasear con ella.

Una tarde que estábamos solos mí mujer y yo en la casa, llegó ella. Traía un bolso grande como especie de maleta. Nos sentamos a hablar normalmente, le ofrecí un café y luego nos sentamos en el sofá. Nos dijo que estaba vendiendo productos especiales para parejas que venía de buscar a unos amigos que vivían cerca pero que no estaba. - ¿y qué es lo que vendes  a ver? Le preguntó mi mujer. Ella abrió la maleta mientras nos miraba con cara de picardía y comenzó  a sacar estuches de varios colores. Al abrirlos eran consoladores de varios colores y tamaños. Mi mujer los tomó y comenzó a observar con curiosidad. Había uno negro descomunal - ¿y esto?  ¿Para quién? – preguntó admirada. Si supieras – contestó su prima- es un encargo de una señora ya mayor. - ¡en serio! – le respondió mi mujer y así entre risas y bromas siguieron observándolos. Había uno pequeño. – Este es para el señor chiquito le dijo su prima en broma. Las dos rieron.

De pronto de una caja saco otro consolador de normal tamaño que venía con unas correas. Mi mujer lo tomo con curiosidad. -¡y esto para qué? Preguntó a su prima. – Esto es para hacerlo entre mujeres, una se lo amarra en la cintura y ya. – A ver, a ver dijo mi mujer, enseguida se puso de pie para probárselo. Su prima le ayudó a amarrarlo. Al tenerlo puesto, mi mujer quedó de pie y su prima sentada de frente al consolador. – Esto se llama un strapon, le explicó la prima, mientras comenzaba a frotarlo como si lo masturbara. Hubo un corto silencio, las dos se miraron y se rieron. – Interesante- dijo mi mujer mientras comenzaba también a frotarlo, su prima no dejaba de masturbarlo. -¿y cómo se sentirá eso? Dijo mi mujer poniendo risa de inocencia.

Como pidiendo una aprobación las dos me miraron con sensualidad, les respondí con una sonrisa y un gesto de curiosidad. -¿querés probarlo? Preguntó la prima. ¿y cómo? Dijo mi mujer. Su prima dio la vuelta se puso en cuatro sobre el sofá, se subió la minifalda separó unas pequeñas tangas fucsia que traía miro a mi mujer y tomándola del strapon la atrajo hacia ella. Yo me acomodé en el sofá, desde mi posición veía todo el perfil de la acción vi la cara de mi mujer mientras le veía la raja a su prima y tenía un rostro de excitación como el que pone antes de darme una mamada. Entendí que le gustaba lo que hacía. – Dale despacio le dijo su prima. Mi mujer empujo y pude ver como el strapon se perdía entre las nalgas de la prima. Ella dio unos gemidos cortos y comenzó a moverse. Mi mujer le daba suavemente aunque con un poco de torpeza. Una de sus manos agarraba la base del strapon y la otra una de las nalgas de la prima. – uff, uff- decía mi mujer. – de pronto me miró como recordando que yo estaba allí. – es raro pero interesante – se justificó un poco. – su prima también me miro de manera provocativa sin decir nada. Se notaba que estaba disfrutándolo al máximo. Miro a mi mujer -¿ya ves como funciona? Mi mujer también se detuvo pero sin sacárselo. Su prima la miraba mientras comenzaba a mover el culo suavemente. Las dos se miraron con excitación. No había duda que lo estaban disfrutando. – ¡Uff está más ricoooo! – dijo su prima. Nunca lo había probado. Mi mujer comenzó a tomar algo de ritmo, me miro de manera insinuante su rostro lo decía todo. Entonces comprendí que era la hora de intervenir. Los movimientos de las dos lograron sincronizarse. Mi mujer aumentó el ritmo y su prima comenzó a gemir más duro y rápido.- Ufff, ufff, asssiii, sssiii. Mi mujer miraba fijamente la raja de su prima abriéndole camino al strapon – ahh, guauuu , ufff, ufff. Ya no era solo una prueba, las dos se estaban comiendo frente a mis ojos.

Me paré del sofá y me puse al lado de mi mujer, entonces pude ver la raja y el culo de su prima y el strapón color piel humedecido entrando y saliendo casi en su totalidad. Una de las manos de mi mujer separaba la tanga de su prima y la otra apretaba una de sus nalgas. Mi mujer me miró la abracé y me ofreció su lengua. Nos besamos y comencé a sobar sus tetas. Su prima miró hacia atrás y nos sonrió sin dejar de gemir. Mi mujer tomó mi mano y la llevó hacia el strapon, pude sentir la humedad de los labios de su prima y el movimiento de su culo. Ella lo sintió y se movió con un poco de más fuerza. Con la otra mano seguía sobando las tetas de mi mujer y luego la baje y agarré su culo.

De pronto, su prima agarró uno de los consoladores y comenzó a chuparlo. Mi mujer al verla comenzó a clavársela más fuerte, entonces mi prima se lo pasó – probalo, mi mujer me lo puso en mi mano y se lo llevó a su boca y comenzó a chuparlo mientras me miraba. Su prima tomó otro consolador más pequeño y siguió chupándolo. Mi mujer pasaba la lengua por la cabeza del consolador y se lo metía casi hasta la mitad en su boca. El consolador era de color café oscuro como la polla de un negro y un poco grande pero dentro de lo normal. De pronto sentí la mano de mi mujer agarrando mi polla y sobándola por encima de mi pantalón. Luego trató de sacarla bajándome el cierre yo le ayudé y comenzó a masturbarme. Miro a su prima que seguía chupando el otro consolador y le dijo- ¿te gusta chupar? – ufff, me encanta le respondió ella, sacándose el consolador de la boca un momento. - ¿no querés probar una de verdad? Le dijo mi mujer. Entonces su prima nos miró, mi mujer detuvo un poco la clavada.  Jaló de mi pene hacia adelante y entonces su prima bajó la mirada y vio mi polla en manos de mi mujer. -¡!!guauu!! dijo – ¿y eso? – proba esta y me decis – le dijo mi mujer mientras me empujaba hacia ella. -¿en serio? Pregunto su prima mientras miraba mi polla.

Yo estaba sorprendido, todo esto jamás lo había imaginado y sentía mi verga a punto de explotar de la excitación – uuuff que rica se ve dijo su prima. La verdad nunca me la había visto tan grande y dura. Estaba mojada y brillante, me acerque al sofá y me senté. La prima la agarró y comenzó a frotarla y a apretarla suavemente con sus dedos.- uyyy, ¡!!está durísima, que cosota más ricaaa!!! Al oír esto mi mujer volvió a clavarla fuertemente – cómesela, chúpasela – le inquirió. Su prima me acomodó con un gesto en la parte de arriba del sofá se acercó y se la tragó entera dejándola un rato dentro de su boca. –ummmm, ummmm, agggggmmmm, la sacó y siguió frotándola - ¡que ricura, que cosotaaaa.  Mi mujer me miraba y yo a ella. Con las miradas nos decíamos todo lo caliente que estábamos. Su prima me la chupaba de arriba abajo y pasaba la lengua por mi glande y mis testículos. En un momento tomó el consolador y comenzó a alternar las chupadas entre este y mi verga. – uuuff que glotona- le decía mi mujer riendo un poco.

De pronto mi mujer se detuvo, sacó el strapon de la cuca de su prima. Esta dejo de mamármela. Las dos se miraron. – ufff que locura – dijo mi mujer. ¡te gustó preguntó su prima. – si, y a ti, le respondió mi mujer mientras con un gesto de su boca señalaba mi polla. – ja, ja, ja, tenés todo un tesoro con esta cosota tan rica, le respondió su prima.

Continuará…

YOLD&YOLY