Mi mujer se la chupa al viejo vecino en su puerta3
Sin corte alguno le agarre el cipote que andaba en la puerta del coño de mi mujer y tras frotarlo un poco como el hacía, le metí la punta en la puerta y cuando noto el entraba empujo y volvió a follarla con energía.
Mu mujer andaba desenfrenada con la polla del viejo y no paraba de insistir en quedar nuevamente con él pues le hacía llegar a unos puntos de gozar que la dejaban casi en trance.
Le dije que yo de momento solo veía y quería entrar en el juego por lo que decidimos preparar el tema para el día siguiente, si bien no sabíamos cómo preparar los preliminares, por lo que lo dejamos a la aventura y lo que fuese sucediendo.
A la mañana siguiente fui yo a sacar el perro y el abrió la puerta rápidamente como si esperara mi mujer, se quedó cortado pues salía en calzoncillos también y al verme a mí se quedó algo parado.
Le salude y le dije como va todo, él fue también amable y dijo, bien aquí levantándome y comenzando el día, oí ruido y salí por si era para mí, dijo el disimulando… ¿y su señora no saca hoy al perro?.. no está preparando un desayuno de esos copiosos pues con estos calores se pierden las fuerzas y últimamente la veo decaída y agotada… el riendo dijo ¿ esos son los calores y las calenturas? .. Debe ser le dije yo también riendo con esto de las vacaciones a las mujeres le duele menos la cabeza, volviendo a sonreír los dos a sabiendas él pensaba que yo no sabía se la estaba calzando bien.
Mire pase y desayune con nosotros que me dijo mi mujer usted es viudo y está solo, yo tardo poco en sacar la perrita y así le ayuda a preparar el café mientras ella hace unos tostadas y dulces.
No quiero molestar me dijo, y además mira estoy recién levantado y mira que pinta solo con los calzoncillos estos …. No se preocupe le dije estamos en verano y eso parece un bañador o pantalón corto, cierre la puerta y pase, venga no se corte que yo regreso en un segundo.
Vale pero no quiero ser un incordio dijo, y tomando la llave cerro su puerta y paso a la vez que yo le decía a mi mujer desde la puerta que tenemos invitados a desayunar que regresaba en cinco minutos.
Paso y luego cuando entro me conto mi mujer que al oír yo cerraba la puerta se fue a ella y dijo que menudo marrón esa mañana igual iba a sospechar yo, la estaba follando o nos lo iba a notar, diciéndole mi mujer que no se preocupara que yo era muy liberal en este aspecto e incluso ya hace tiempo habíamos hecho un trio y esa mañana era la propicia para intentar si cuadraba llevarme al huerto y follar los tres.
Le pareció la ida genial al viejo pues de hecho la agarro por atrás pegándola a la encimera y le dijo, además mira como vengo hoy tengo el armamento recargado y listo disparar otra vez.
Mi mujer se giró según me conto y el la beso metiéndole la lenguas hasta la garganta mientras le agarraba el paquete metiéndole la mano por los calzoncillos y testando aquella morcilla como andaba esa mañana de gruesa y sabrosa.
Si supiera iba a tardar tiempo te diría me la comieras pero igual llega y te pilla con la flauta en la boca o metiéndote un pollazo en ese chochito que me tiene loco a la vez que le agarro por debajo de la falda el coño notando no llevaba bragas.
Joder replico el… Ostia que estas sin bragas joder me dan ganas de follarte ahora mismo aquí aunque me cueste tu marido me vea… Mi mujer le dijo tenga paciencia que vera como sale todo bien y llevo a mi marido al huerto.
Regrese en unos quince minutos pues quise dejarles tiempo hablar y mi mujer preparar al viejo, notando cuando entre en la cocina que su bulto andaba algo más crecido aunque el trato de disimular girándose sobre la encimera como ayudando a mi mujer, pero el semi empalme que tenía ya se le hacía notar en los calzoncillos.
Mi mujer me guiño un ojo como diciendo todo iba según lo previsto y tras una pequeña charla entre bromas pasamos al salón a tomar el desayuno en una mesa pequeña que allí había, sentándose mi mujer descaradamente frente el para mostrarle su potorro desnudo, quitándome yo también la camisa y quedándome con unos pantalones cortos anchos para estar más fresco y acorte a él.
Él no se cortó un pelo pues abriendo un poco las piernas sentado también se dejaba ver un poco el frondoso pelaje que recubría los huevos y parte de uno de estos, a la vez que agradecía el desayuno y el café, aunque dijo que con lo caliente que estaba menos mal no llevaba camisa pues sino se pondría a sudar.
Yo le dije que por eso me había quitado la mía, que era también persona de sudar fácil, contestando el, que nosotros éramos más afortunados que las mujeres pues podíamos quitarnos más ropa fácilmente, a lo que mi mujer entrando en el juego dijo, de eso nada que una también se puedo poner fresca o es que ustedes nunca vieron en la playa las mujer sin la parte de arriba, porque estemos en una casa no quiere decir tenga que estar con todo.
Y sin mediar palabra se abrió y se quitó la blusa dejando los pechos tersos al descubierto pues no llevaba sujetador, quedándose solo con la falda que a medio abrir enseñaba su conejito al viejo.
Se quedó un poco sorprendido y me miro como esperando alguna respuesta negativa mía pero fue lo contrario pues le dije, no creo que usted a su edad se vaya a asustar de ver un par de tetas, aunque reconozco estas esta impresionantes y no es porque sean de mi mujer, pues las tiene bien duras y tersas.
Ya lo creo dijo el viejo con cara ya de medio salido que las tiene bien duras y tersas, esa no se caen y levanta el libido de cualquiera de mi edad.
Tenga cuidado le dije entre bromas no sea ahora con el calor del café y las vistas esos calzoncillos se queden cortos, riendo todos por mi respuesta para ir entrando en ambiente.
El viejo dijo, pues no te lo garantizo pues uno no es de piedra ante semejante mujer guapa que tienes.
Mi mujer entro en escena y dijo, bueno ustedes tampoco están nada mal, que mi marido se cuida de lujo y usted para su edad es un hombre muy atractivo, tiene buen cuerpo es guapo y además muy masculino con ese torso peludo que le hace sea seguro el ojito de muchas mujeres.
Se sintió alegado y dijo que su pensamiento hacia nosotros era mutuo, en ese momento para terminar de romper el hielo cogí un poco de mermelada con un dedo y le unte a mi mujer un pezón y acto seguido se lo chupe a la vez que decía esto si es un desayuno.
El viejo dijo, la verdad que si afortunado de poder hacerlo, así desayuna bien cualquiera… volví a ponerle más mermelada en los dos dejándose mi mujer en el juego y volví a comerlos más despacio, oyendo el resople del viejo que se echó mano al paquete como conteniendo el crecimiento de este.
Como sigan me voy a tener que poner hielo dijo el entre risas… bueno espere le dije le hemos invitado a desayunar tiene usted también que probar esto y poniéndole otra vez mermelada en los pezones le dije al viejo, venga cátelos vera que bien saben así.
Miro a mi mujer que y como vio esta no decía nada, dijo con su permiso vamos a ver…. Acercándose y con suavidad retiro la mermelada del primero con pequeño suspiro de mi mujer al sentir la lengua limpiar la aureola del pezón y este pasando al otro que absorbió más lentamente recreándose un poco más en él y casi sin querer llevo la mano al otro como agarrándolo.
Ufff así sí que sabe la mermelada a gloria, me tomaba el bote entero dijo el viejo… pues ponga un poco más que hay mermelada y si no saco otro bote…. Pasando el viejo a la acción y tras untarlos con más cantidad volvió a comerle los pezones a mi mujer que ya se dejaba caer hacia atrás del gusto.
El hielo ya se había derretido entre todos y sin corte me levante y saque la polla mientras el viejo le comía los pezones a mi mujer y me la unte con más mermelada y se la puse a mi mujer en la boca para que también desayunara.
Ufff el viejo resoplo al verme ofrecerle el rabo semiduro a mi mujer y más cuando esta la chupo mirándolo a los ojos y saboreando mi capullo como si la vida le fuese en ello.
Este tenía la mano en el muslo de mi mujer apoyándose y no dudo con disimulo pasar esta al interior de la falta y rozar con los nudillos de sus ruda mano los labios vaginales del mi mujer, haciendo esta se abriera de piernas y agarrándole la mano al viejo le incitara a frotárselo más fuerte.
Mientras yo ya andaba empalmado y mi mujer agarrándome los huevos me dijo que quería más mermelada.
Espera dijo el viejo que le doy yo un poco, a la vez que se bajó los calzoncillos y su pollon salió terso como un resorte balanceándose hacia arriba como la polla de un toro bravo a la vez que puso mermelada en la punta tras descapullarlo en nuestra presencia.
Joder le dije, menudo rabo tiene… joder si casi dobla al mío, eso sí que es una polla en toda regla, agarrándola mi mujer y comenzando a chupársela.
Se la sacaba la parte que solo podía meterse en la boca de lo gruesa y larga que era y se golpeaba en los labios y en la cara con ella mientras le dijo, póngale más mermelada que este brazo gitano me lo voy a comer entero hasta sacarle la nata.
Volvió a resoplar el viejo y más cuando le agarro las enormes pelotas y las masajeo, diciéndome a mí que tenía un par de huevos gordos y enormes ya además se hacía notar el peso al cogerlos…invitándome a que se los tocara yo también.
Le dije al viejo, con su permiso voy a ver ese peso y se los agarre mientras este decía, tienes el privilegio de ser el primer hombre que me toca los huevos, riendo después… no me corte y tras los huevos le agarre un poco el tronco de la polla mientras mi mujer le chupaba la cabeza, diciéndole esto mide seguro 22 cms..Diciendo el que no andaba equivocado.. Lo dicho le dije, tienes un pollon de lujo.
Bueno tu mujer creo lo está disfrutando y lo va a disfrutar más hoy seguro, mientras la tome y le dije, síganos, dirigiéndome al dormitorio los tres ya completamente desnudos.
La tumbe en la cama y poniéndome sobre la cabeza le ofrecí mi rabo para que me lo chupara mientras el viejo se tiro como un cohete a comerle el coño con una sabiduría que mi mujer comenzó en segundos a levantar la cadera de gusto, subiendo este las manos hasta los pechos, sobándolos con descaro y energía, chupando mi mujer mi polla dura con una energía que pensé me la arrancaba de lo caliente que estaba.
Le metió el dedo gordo por arriba en el coñito a la vez que la lengua y mi mujer a los pocos minutos exploto con un orgasmo que casi me arranca el capullo de un bocado por lo fuerte que fue este.
Ya no andaba el viejo con milongas y agarrando la polla se la froto como le había hecho en otra ocasión que yo anduve mirando a escondidas , hasta el punto de placer que mi mujer le pedía entre balbuceos se la metiera ya que quería macho y ser follada ya.
Tranquila le decía el, aquí tienes dos que te van a calmar toda, levantando sus pies y llevándoselos a los hombros, le metió la punta y movió la cadera para que esta retozara en la puerta y la pusiera bien caliente.
La tuve que sacar de la boca de mi mujer, pues casi me corro de gusto al verlos y más con la ansia me la chupaba, pero la imagen era de tomar un instantánea pues aquel viejo con aquel tronco cuerpo tomaba a mi mujer con una maestría que el coño de esta palpitaba pidiendo se la clavara entera.
Resoplo el viejo antes de meterle una estocada seca que le marco los huevos en los labios vaginales, pues entro con una virulencia que esta levanto la cabeza como poseída por el diablo al sentir entrar aquel torpedo en su totalidad.
No querías pollas le dijo el viejo ahora en tono macho salido… ahora vas a ver cómo te folla un macho bien folla, comenzando a meter y sacar como antes no lo habíamos visto, haciendo mi mujer un manojo de goce girando la cabeza a todos lados con los ojos desencajado por el placer de los pollazos que recibía.
No tardó en llegarle su segundo y muy intenso orgasmo que casi la deja cao, aprovechando el para sacarla y darle un poco de respiro mientras se puso de lado tras ella ahora en la cama y tras levantarle una pierna que aguantaba con una de sus mano me pido ayuda para dirigirla y volver a metérsela pues la otra mano estaba aprisionada y cogiendo a mi mujer por un lado.
Sin corte alguno le agarre el cipote que andaba en la puerta del coño de mi mujer y tras frotarlo un poco como el hacía le metí la punta en la puerta y cuando noto el entraba empujo y volvió a follarla con energía.
Me puse de rodillas frente a la cara de mi esposa y ofreciéndole el rabo esta me lo chupaba con los ojos medio entornados por el placer que estaba teniendo con aquella monta espectacular.
El tras la nuca de ella le hablaba y le animaba que me la comiera, diciéndole come el rabo a tu marido sácale la leche que yo te voy a llenar el chocho con la mía, hoy vas a tener leche por los dos sitios hasta hartarte.
Yo andaba que explotaba pero quería aguantar por lo que me agarre los huevos fuerte para no correrme mientras mi mujer se metía la polla hasta la garganta animada por el que no paraba de decirle , sigue chupándosela así sigue que la comes muy bien.
Creo fueron unos diez minutos increíbles con algún pequeño descanso bajando el ritmo hasta que ella ya no pudo más y exploto otra vez haciéndome correrme a la vez en su boca con una corrida copiosa que casi la atraganta, sacándomela de su boca al casi ahogarse mientras esta aun soltaba alguna ráfaga que casi impacta en la cara de él.
En ese momento resoplo el como un toro bravío rugiendo con la garganta a la vez que golpeaba ahora con pollazos secos y duros hasta que comenzó a correrse y llenarle el coño de espesa leche con sus inagotables ráfagas que casi dejan a mi mujer en estado catatónico por el goce tan grande que había sufrido con aquellos orgasmo tan explosivos.
Yo estaba aún salido perdido con aquel polvo aunque agotado, cuando oí a mi mujer con tono casi inaudible decirme … cómelo ahora un poco, quedando el viejo sorprendido al verme bajar al conejo de mi mujer todo lleno de leche rebosando esta y comenzar a comérmelo suavemente.
Agradeció mi mujer la suavidad con lo que se lo hacía, cuando el viejo dirigiéndose me dijo, esa rica esa crema…le dije yo que riquísima y agarrándole el cipote volví a decirle... Con tu permiso y le presiones por el tronco de este llevando la mano hasta la cabeza y al salir unas gotas más de leche, se la chupe y me la comí…
Esto sí que no me lo habían hecho nunca, joder que morbo me dijo… Veo te gusta todo.. Yo le dije que en el morbo no ponía techo a nada.. Pues nada sigue a ver si queda algo más me dijo… y continúe con aquel ya flácido pollon hasta que ya no salió nada más, pasando nuevamente al coño de mi mujer hasta que esta me pido ya descansar.
Pasador unos veinte minutos nos aseamos y fuimos a degustar el desayuno que antes dejamos a medias, diciendo el viejo que aquello le había parecido un sueño a la vez que se pellizcaba como viendo si era realidad….
Antes de irse me dijo que esa noche quería invitarnos a cenar fuera que sobre las ocho nos tocaba e íbamos a un restaurante que él conocía y se comía muy bien.. y después si hay fuerzas y quieren más pues podemos tomar unas copas en mi casa o aquí…….por supuesto aceptamos y como adelanto diré que hubo copas…..y algo mas …