Mi mujer me enseña a abrirme 2
Vero sigue explorando otras formas de darme placer y empieza a hacerme desear una polla de verdad
Mi mujer me enseña a abrirme 2
Hola, les aconsejo leer la primera parte
http://www.todorelatos.com/relato/133166/
A la mañana siguiente hablamos de lo sucedido y los dos coincidimos en que nos había encantado. Había sido toda una experiencia, demasiadas cosas para un solo día, pero con Verónica todo era así: muy intenso.
Daniel, me encantó ver como te corriste anoche - me decía Vero - y ver que te gusta el sabor del semen.
Sí, la verdad es que no me lo podía imaginar, nunca me había planteado cómo sabría y ayer cuando metiste las gotitas que salian por mi polla en mi boca me encantó. Así es como sabe una polla?, - Le pregunté a Verónica con curiosidad
Si, cariño, a que es muy delicioso? - Me respondió. Era una gozada poder hablar abiertamente de cualquier tema sexual con ella. No teníamos tabues, y así nos pusimos a charlar
La verdad es que me gustó mucho, jeje - Le dije - ahora entiendo porque te gusta tanto chuparmela jeje. Sabe delicioso
Si, Daniel, chupar una polla es algo delicioso. Por eso una de mis fantasias es tener dos, tres o cuatro pollas para mi sola. Chuparlas, tenerlas en la mano, notar como salen las gotitas, pasar de una a otra continuamente y que se corran todos a la vez encima de mi. Es sólo una fantasía, pero me pongo a mil cuando la imagino.
Ya lo sé Verónica - le respondí - y me parece bien, no quiero ser quien te reprima tus deseos, al contrario, lo que más me gusta es ver que disfrutas. A que también te gustaría que se corrieran todos encima de ti? y extenderte su semen por tus preciosas tetas, y acabar saboreando la deliciosa leche en gran abundancia?
Siiii, Daniel me encanta que seas tan comprensivo. - me dijo mientras me abrazaba con fuerza y me empezaba a besar y comerme toda la boca.
Claro cielo, - le dije - yo he visto muchas películas en internet y la chica goza de lo lindo cuando tiene a muchos chicos a su lado. Quieres que busquemos alguna peli ahora?
-si, vamos. - Nos pusimos con el portatil a buscar páginas de todo tipo tumbados en la cama completamente desnudos.
-Es increible la de cosas que hay, todo tipo de videos, hetero, gay, lesbianas, bisexuales, transexuales, orgias, y muchas cosas mas.
-Vamos a ver un poco de cada cosa, vale? - sugirió Verónica.
En seguida nos empezamos a poner muy cachondos mientras veíamos todo tipo de sexo. Nos acariciabamos, besábamos y tocabamos por todos lados mientras no dejabamos de mirar a la pantalla, donde ocurria todo tipo de sexo.
Me di cuenta que a Verónica le gustaban mucho las escenas en las que una chica trans se follaba a un muchachito que gemía al recibir una gorda polla por el culo a la vez que las tetas de la trans le golpeaban la espalda.
Daniel, - me preguntó sin dejar de mirar la pantalla - te gustó anoche cuando te toqué tu culito?
Pues la verdad es que fue una sensación muy extraña - le dije - fue tan rápido y me corrí tan deprisa que no sabria decirte.
Yo creo que tienes miedo de reconocerlo por si pienso que eres gay - me dijo Veronica - pero creo que has demostrado de sobra que gay no eres, jaja. Te pones super cachondo conmigo. Creo que deberíamos probar cosas nuevas que seguro que son placenteras.
La verdad es que sí - le dije - quiero quitarme todo tipo de tabues y probar de todo. Mira que de cosas hay en los videos, y todos gozan muchisimo.
- Pues dejame que exploremos nuestros cuerpos, tumbate boca abajo que te voy a dar un masaje y a comprobar si lo de ayer te gustó de verdad.
me tumbé mirando la pantalla en la que salía escenas de una orgía completa. Había chicos, chicas y transexuales. Verónica me empezó a masajear mi culito de nuevo y directamente empezó a tocarme mi agujero anal.
-Quieres que explore tu culito, cariño?. Quieres sentirte como el chico que estás viendo ahora en la pantalla? (había un chico que estaba siendo enculado de nuevo por una trans con una polla enorme).
Yo no decía nada, pero Verónica había cogido un bote de lubricante y me estaba metiendo suavemente un dedito por detrás. Yo me dejaba hacer, era una sensación extraña, pero la polla la tenía a mil.
Poco a poco su dedo iba entrando con suavidad. - vaya, veo que se te abre muchísimo tu agujerito, dilatas muy bien. te gusta? - asentí con la cabeza sin decir nada. La verdad es que estaba un poco avergonzado, pero me estaba gustando.
Pronto noté que Verónica estaba metiéndome un segundo dedo y que los dos entraban hasta el fondo con muchisima facilidad. - Vaya, si tienes un culito de autentica putita y sin utilizar, que desperdicio, jeje. Pero a partir de ahora ya sabemos otro juego mas, jeje.
Me estaba encantando, debido a lo placentero y morboso de la situación el culito se me había dilatado solo muchisimo y los dedos de Verónica entraban hasta el fondo con mucha facilidad. De repente me descubrí que yo mismo me estaba cogiendo las gotitas que salían de mi empalmada poya y me las estaba chupando. Estaba cachondo perdido.
En la pantalla el chico seguía siendo enculado por la trans con el rabo tan grande y otro chico, guapo y musculoso, se había acercado a su cara con la polla tiesa y se la estaba poniendo en los labios. El pobre protagonista abrió la boca y se tragó la poya de su amigo entera.
- Verónica,- dije mientras me chupaba mi propio dedo lleno de gotitas - quiero más , quiero más.
Verónica tenía los dos dedos dentro de mi culito, su mano era muy pequeña, no podía llegar más dentro. - Creo que necesitas algo más que mis dedos, jeje. Te atreverías a que comprásemos una polla de goma en un sexshop? -me preguntó.
- Si, si, me estas poniendo a mil, claro que si. Esto me está gustando mucho.
En la pantalla el trans se había salido del culito del protagonista justo en el momento en que este se corria salvajemente. - quieres una cosa así de grande verdad?
-si, si dije yo
-lo entiendo, cuando me masturbo a mi me pasa lo mismo y mis dedos no son suficientes, necesito una polla de verdad o algo igual de grande. - decía Verónica.- qué puedo meterte?, no puedo dejarte así. Hay que seguir investigando y veo que te está gustando.
-Vero cielo, espero que no pienses que soy un degenerado, pero me gustaria saber que se siente, quiero que me llenes mi culito. Mañana mismo compramos un consolador para nuestros juegos, pero ahora qué podrías meterme?
qué te parece una salchicha? creo que en la cocina hay?.
lo que tu quieras, necesito que explores esta nueva sexualidad mia. - le respondí entre jadeos, estaba a punto de correrme
Vero fue a la cocina a por una salchicha, la metió en un preservativo y empezó a intentar meterla en mi culito. - Uff, estaba a mil, y la salchicha no conseguía entrar del todo. Yo movía el culo y me abría las nalgas, pero era muy blandita
- No te preocupes, - me dijo - he traído más cosas. - y me enseñó varias zanahorias que había encontrado en la cocina.
Cogió la más grande, ya no se quería andar con chiquilladas, jeje, la metió en un preservativo, la lubricó bien y me la metió despacio pero hasta el fondo en mi culito.
La verdad es que la zanahoria era muy grande y me abrió completamente el culo. Me sentía como el chico de la película con todo el culo lleno por la polla de la trans.
Vero me agarró por las caderas, me puso a cuatro patas y empezó a golpearme con su coño en mi culo como si me estuviera follando.
-Uff, estoy a mil, me encantaria ser yo la que te metiera algo, jeje. Creo que el consolador que vamos a comprar será para que juegues tu solito. Lo que yo quiero es un arnés con una polla de látex y poder follarte agarrándote por las caderas.
-Siii, - dije yo - follame, follame, meteme más la polla, aunque no sea de verdad me está dando mucho placer.
Verónica estaba tan excitada y viendo que me iba a correr que se agachó y mientras seguía moviendo dulcemente la enorme zanahoria dentro de mi culo, se metió toda mi polla en su boca. Yo no pude más y me corrí con fuerza, el primer chorro le llegó a la garganta y se lo tragó entero. Los demás los pudo retener en la boca que no retiró hasta que se me pasaron los espasmos. Fue increible.
Veronica me sacó poco a poco la zanahoria de mi culo, ya la echaba de menos, me estaba convirtiendo en un vicioso, y me dio un profundo beso compartiendo toda la leche que había salido. Fue una maravilla.
Yo me quedé muy relajado, pero Verónica quería correrse, así que esta vez fue ella la que se tumbó mirando la pantalla y yo me dediqué, sin más preámbulos, a chuparla su encharcado coño. Me pedía que le metiera dos dedos mientras veía en la pantalla una escena en la que un montón de chicos se estaban corriendo en la cara de una chica. La estaban poniendo la cara llena de lefa, por lo menos eran ocho o diez. Y eso a Verónica la excitaba mucho.
Aprovechando que estaba toda empapada la metí un dedo por su coñito y suavemente, como la noche anterior, la introduje un bien lubricado dedo por su culito. Lo hice con mucha suavidad mientras el dedo del coñito se movía a toda velocidad llevándola a un orgasmo incipiente. Cuando se quiso dar cuenta todo mi dedo estaba dentro de su culito, hasta el fondo, y entonces le llegó un orgasmo doble por su culo y por su coño que la hizo chillar de placer.
Después, aunque relajados, seguimos viendo películas porno en internet. Aprendimos un montón y decidimos que teníamos que conocer más cosas.
en cuanto pueda seguiré con el relato. Y estaré encantado de recibir sugerencias y comentarios si les ha gustado. un besito muy dulce
dulcex@gmx.es