Mi mujer me convirtió en voyeur (2)

He recibido muchos emails, y todos me piden que les cuente un poco mas sobre la puta de mi mujer. Ahi va...

Hola, estoy aquí otra vez para relatar algo que hacemos todavía, que ha disparado nuestro matrimonio en una dirección inesperada. Descubrí a mi mujer y a uno que pensaba era buen amigo, follando como conejos en su oficina. No solo eso, sino también compartiéndola con un extraño total.

Le dejé saber de inmediato que me había dado cuenta. Ella lloró por todo el camino a casa y lo peor (o mejor, dependiendo del punto de vista) del asunto es que, muy adentro, me gustó verla follar con los dos.

En la casa la abracé y le dije que la amaba y que no deseaba pelear por eso. Que mejor me diera detalles y que me había gustado verla. Bueno, no le dije todo a la vez, conforme pasaban las horas fui tomando inventario de mi situación y me di cuenta que en realidad me calentó bastante el asunto.

Ella quiso en algún momento culparme por lo sucedido entre nosotros. De ninguna manera la iba yo a aceptar culpabilidad. Cuando menos no tan fácil. La cosa se calmó al paso de las horas y terminamos besándonos y luego le recordé lo que había hecho, a lo que ella me dijo que le había gustado, luego añadió, con una sonrisa de diabla, que no estaba arrepentida ni tenía remordimientos. Y dijo esto porque ya veía bien la situación, en vez de reclamarle, le pedía detalles y, conforme me los relataba, me iba poniendo duro. Terminamos follando duro y esa vez terminé tres veces.

Resulta que el hijo de puta de Kevin coincidió varias veces con Alma en una discoteca o en algún bar, no se si fue coincidencia o algo planeado por el, pero la vio varias veces mientras estaba yo fuera de la ciudad.

En una fiesta de la compañía, a la que no pude asistir, otra vez estaba de viaje, Kevin me pidió de favor llevar el a Alma a la recepción para no llegar solo y para que Alma se distrajera mientras yo estaba fuera. Recuerdo bien ese día, me habló, no solo para pedirme que lo dejara salir con Alma, si no para que yo convenciera a mi mujer que saliera con el. Y luego, supe por Alma, que esa noche, fue la primera vez que se acostó con él. Se sentía sola, y luego bebió un poco mas de lo normal y Kevin proporcionó lo demás. Después de eso, Kevin la acosó y ella iba cayendo más y más. Primero pensó que solo iba a ser un idilio de una noche, pero Kevin logró acostarse de nuevo con ella. Conforme las cosas iban pasando, ella iba perdiendo la inseguridad y comenzó a darse más valor y pasó de ser una mujer casada de buena reputación a puta. Alma lo relaciona con las drogas, cuando caes, sabes que es algo malo, pero no te puedes salir tan fácil. Kevin la dominó más y mejor hasta convencerla para follar con el rubio, y así ganarse una buena cuenta para la compañía. Kevin dijo que sería compensada, pero nunca dijo cuanto. El cabrón de Kevin cree todavía estar en control, cree que sigo sin darme cuenta.

Al día siguiente, con un plan ya formulado por mi esposa, me le adelanté a Kevin, e intercepté al rubio, que se llama Phil. Lo abordé antes de que entrara al edificio y lo llevé al hotel donde estaba Alma esperando. Mi mujer estaba completamente desnuda cuando llegamos y no perdió tiempo con gentilezas, Phil se bajó los pantalones y mi mujer le ayudó con los interiores dejándolo desnudo de la cintura hacia abajo. Phil se puso duro casi de inmediato, ¿y quien no? Mi mujer le estaba dando una chupada espectacular, los ojos se le pusieron blancos mientras metía y sacaba su verga de entre los labios de mi mujer. Alma me sorprendió con su total abandono, fue como si yo no estuviera presente, con una mano le sobaba las bolas al Phil, con la otra se la jalaba mientras continuaba lamiendo y chupando la polla como una desesperada. Phil no aguantó mucho y sin dar aviso, se chorreó en su boca. Solamente dio un gemido a manera de advertencia y luego gruñó mientras descargaba su leche. Alma no se inmutó, se tragó toda la lefa y siguió con la polla en la boca. Por primera vez en nuestro matrimonio vi que Alma tragara lefa.

Le calculo a Phil unos cuarenta años, se ve en buen estado físico, no tiene nada anormal, una verga como la mía, de tamaño medio, ni muy gruesa ni muy delgada. La puta de mi mujer estaba tragándosela todo lo que podía, sentada en la esquina de la cama, desnuda y Phil le sobaba las tetas. Siguió chupando a Phil, luego de tragarse la lefa, y a mi modo de ver las cosas, el cabrón no perdió rigidez, seguía duro.

Y yo igual. Me apretaba el pantalón la polla y tuve que sacarla para aliviar la situación. Mi mujer me vio de reojo y se sonrió cuando me la saqué. Continuó con la verga en la boca.

Phil tenía otras ideas, saco su polla, acostó a Alma de espaldas y se metió entre sus piernas. Ahora era mi mujer la que gozaba de sexo oral. Le corría sus dedos por el cabello rubio de Phil mientras este se deleitaba lamiendo la raja. Alma no aguantó mucho tampoco y estalló en un orgasmo que la dejó gimiendo diciendo que se la metiera. El rubio no se hizo esperar, se levantó solo para dejarse caer sobre mi mujer mientras Alma tomaba la polla con su mano para encaminarla a su raja. Una vez a la entrada, no fue mucho el esfuerzo, y se hundió despacio hasta la base.

No tuve más remedio que jalarme, la escena frente a mi era tan erótica, y a la vez lasciva, como cuando ve uno porno. Veía desde mi silla como entraba y salía la polla. Ver a mi mujer así me mantenía duro y sin más remedio que seguir jalándome. Luego de follarse a mi mujer en esta posición, (dicen los gringos ‘estilo misionero’ el arriba, ella abajo) se levantó y la puso sobre él, ella tomó la polla, que estaba brillante, y se sentó sobre el, lo cabalgó varios minutos hasta que se volvió a correr dejándose caer sobre el. Phil le sobaba las nalgas, apretaba su culo, de vez en cuando, dependiendo de la posición de mi mujer, podía mordisquearle los pezones. Mi mujer mientras seguía follándose sola sobre Phil y yo estaba a reventar. Phil descargó nuevamente dentro de Alma y ella se dejó caer sobre el mientras se recuperaba. Luego se levantó y se puso de rodillas frente a mí y me ayudó con mi erección metiéndose mi polla entre sus labios. No aguanté mucho y descargué también mi leche en su boca. Me esposa se tragó todo y luego se levantó para besarme y decirme al oído que le había gustado mucho que a mi me gustara. Cuando se encaminó al aseo pude ver como se le escurría la lefa de Phil por una pierna.

Mientras mi mujer se bañaba, Phil y yo nos vestimos y antes de entrar en detalles del negocio comentó sobre mi mujer. Que le gustaba mucho, que era hermosísima y sobre todo lo puta que era. Claro que mantuve la farsa y no revelé el detalle que la mujer esa que se acababa de follar era mi esposa. Luego preguntó por Kevin, le dije que Kevin estaba en negociaciones con otra compañía y que me había dejado a cargo. En realidad, claro, Kevin estaba esperando a Phil, y luego tenía su trabajo y eso lo mantendría ocupado. Hablé con mi jefe y le dije que tenía entre manos un contrato grande y luego le confié que se lo estaba robando a Kevin, como a él no le cae bien Kevin (creo hubo algún rumor de que Kevin se había follado a su esposa), no hizo mas preguntas y recibí su apoyo para seguir con el contrato. De alguna manera Phil ya no volvió a preguntar por Kevin y al cabo de unas semanas cerramos el contrato.

En lo que a nuestra relación se refiere, nunca pensé que mi mujer y yo nos lleváramos tan bien después de pescarla in fraganti con una verga en la boca y otra en su coño aquel día en mi ex oficina. Seguimos casados y la verdad no veo le veo fin. Jamás pensé poder decir que me gusta verla follar. A veces estoy ahí para verla, a veces no, como cuando folla con Kevin. Así es, sigue acostándose con el enemigo. Claro, eso le ha costado ya tres contratos grandes y varias cantidades considerables de dinero. Le pasa lo que le pasa por asediar mujeres casadas. Phil viene de vez en cuando y siempre nos avisa con tiempo. Nos encontramos en algún hotel para que se folle a Alma mientras yo veo.

¿Sería bueno seguir con otro relato, o mejor ya paro?

Gracias a todos por tomarse el tiempo de mandarme e-mails o de escribirme en TR, Se los agradezco.