Mi mujer adicta al sexo

Yo y mi mujer llevamos más de 20 años juntos nos conocimos siendo veinteañeros y ahora yo ya entre en los 40.

Yo me llamo Carlos tengo 43 años soy de media estatura con un poco de barriga y con poco pelo, debido a al stress de mi trabajo siendo joven ya empecé a quedarme calvito, en cambio mi mujer Mónica tiene 38 años es delgada con muy buen tipo y rubia, gracias a mi trabajo mi mujer nunca tuvo que trabajar fuera de casa y se dedica a las tareas del hogar.

Mi historia se remonta aproximadamente a los últimos cinco meses, yo la veía distinta enamorada de mi pero como desganada, ya pocas veces teníamos relaciones y cuando las teníamos eran cortas y poco satisfactorias.

Un día estando en el trabajo a última hora de mi jornada laboral, cuando la mente ya esta más espesa de lo normal se me ocurrió una idea, algo kamikaze pero quiero tanto a mi mujer que hasta la vi lógica.

El plan consistía en darle un capricho a mi mujer, me metí en una página de contacto y contarte a un chico joven y fuerte, para que si hiciera pasar por técnico del gas y se la follara o por lo menos lo intentara.

Esa noche dormí fatal y por la mañana mientras desayunaba estuve a punto de dar marcha atrás, las dudas recorrían mi cabeza pero el creer que era lo correcto pudo más, y seguí con el plan establecido, antes de irme de casa di un beso a mi mujer y la avise de la visita del técnico.

Estando en mi oficina con el agobio de negocios que tenía pendientes se me olvido el asunto, hasta que recibí una llamada del chico diciéndome que todo había salido según lo previsto, yo le cite en un bar cercano para que me contara todo lo ocurrido y pagarle su parte, asique sin mas recogí mi maletín y mi abrigo y fui al bar.

Allí me estaba esperando el chaval, la verdad es que era un tío guapo y fuerte no me extraña que mi mujer no se resistiera, una vez pedimos el chico me empezó a contar, me dijo que de primera su mujer no le hizo ni caso hasta que él se desnudo por completo delante de ella y le beso.

Según me lo contaba no me estaba cabreando algo que me molesto mi mujer se acababa de follar a un chico y encima yo pagaba.

El siguió contándome que después de besarse ella empezó a comer la polla y él me aseguro que lo hacía muy bien, a mi pocas veces me la comía imagino que debido a nuestra falta de pasión, el siguió contándome con todo lujo de detalles, terminando con que ella era muy caliente y que tenía que haber sido él quien pagara, cuando ya nos despedíamos el chico mi conto que ella lloro diciendo que como podía haber hecho eso.

Después de la reunión con el joven me fui a casa estaba claro que lo que necesitaba mi mujer era pasión y ese chico se la había dado.

Entrando en casa deje las llaves y el maletín en el hall y me dispuse a quitarme el abrigo cuando me di la vuelta después de colgarlo me encontré a mi mujer, iba solamente con un tanga dejando el resto de su cuerpo al descubierto.

Se acerco a mí y me dio un beso acto seguido bajo a mis pantalones y me empezó a chupar el pene, nunca me lo había comido así, ahora ya sabía de que hablaba el chico.

La excitación era máxima y mi polla estaba a tope mi mujer se dio la vuelta y apartando un poco su tanga me indico que se la metiera, debido al momento que me pillo de sorpresa lamentablemente no dure más de 5 minutos, y a mi mujer no le sentó bien dejándolo patente con la frase ¿ya te has corrido?

Mónica se puso el tanga bien y se fue hacia nuestro cuarto, yo me subí los pantalones y fi tras ella, cuando la fui hablar ella se me puso a llorar diciéndome que lo teníamos que dejar, yo nervioso la pregunte que porque quería dejarlo.

Ella respondió que no se merecía un hombre tan bueno a su lado y que me había sido infiel, empezó a decirme que esta mañana cuando vino el técnico se desnudo delante de ella y no pudo aguantarse y se le follo.

Viendo la desazón que tenía mi mujer le conté todo, ella me miro con cara de odio y me llego incluso a dar un tortazo, pero cuando le conté que fue porque la quería se paro y me abrazo diciéndome lo mucho que me quería.

Esa día sin quererlo desperté a la bestia en los siguientes días me dio sexo a todas horas y también se compro juguetes sexuales de todo tipo incluso pollas gigantes, me pedía que se la metiera por el culo cosa que nunca me había pedido, y a veces la veía chatear con gente por cam y aunque estuviera yo delante era capaz de todo.

Un día cuando llegaba del trabajo me conto que quería hacerlo con más gente a la vez y que había quedado con un pareja muy agradable, eran más mayores que nosotros en la foto que me mando se les veía a ambos desnudos bebiendo cerveza él era delgado y con el pelo blanco y con algo de barba y una polla con gran cabeza, ella era gordita con unas tetas enormes.

Después de comer y descansar un rato fuimos a su casa, un pisito a las afueras de la cuidad era verano y hacía calor lo que aprovecho mi mujer para ir provocativa.

Cuando llegamos allí nos abrió ella con una sonrisa nos hizo pasar y se presentaron, su piso era un dúplex y la parte de arriba tenían terraza la cual había aclimatado para evitar mirones.

Una vez nos sentamos arriba en unos sillones y bajo una gran sombrilla que nos protegía del sol, empezamos hablar ellos sabían que era nuestra primera vez y nos aseguraban que era lo mejor que podíamos hacer.

Después de un par de cervezas las conversaciones todas iban por el mismo lado y mi pene empezaba a ponerse a tope. Mi mujer empezó a decir que hacía mucho calor y ni corta ni perezosa se quedo en ropa interior, ellos aceptaron la propuesta y también se desnudaron pero la sorpresa fue cuando vimos que no llevaban ropa interior, en un abrir y cerrar de ojos se quedaron desnudos.

Todos me miraron y sin otra opción me desnude y me quede igual que ellos, viendo mi mujer que era la única que llevaba algo se lo quito y lo dejo en el suelo, la conversación siguió con la única diferencia que ahora todos nos tocábamos nuestro miembros.

Mónica corto una conversación y se levanto expresando sus ganas de chupar dos pollas a la vez, se acerco a nosotros dos y empezó a menearlas una con cada mano, mi mujer ponía cara de puta mordiéndose el labio, nosotros nos pusimos de pie para que ella tuviera las pollas más cerca, después de ponerlas duras  empezó a comerlas a la vez, estaba siendo una delicia y nuestro amigo estaba disfrutando de lo lindo, su mujer mientras miraba sentada tocando su coño.

Estábamos fuera de nosotros cuando sonó el timbre, yo me asuste y vi que ellos ni se inmutaban la mujer se levanto y se fue imagino que a ver quién era, nosotros seguíamos a lo nuestro pero mi mujer quería que la penetráramos asique cada uno la metimos por un agujero, ella gemía y nos insultaba mientras se besaba con el señor.

Estaba siendo una sesión de sexo impresionante, después de un rato mi mujer nos dijo que no podía más que quería que nos corriéramos en su cara, y los dos obedecimos sacamos nuestras pollas de sus agujeros y nos corrimos en su cara y tetas, ella recogía las últimas gotas de nuestras pollas y fue a limpiarse al baño, nosotros nos vestimos y bajamos también ya que el calor allí era insoportable.

Pero aun había más sorpresa cuando bajamos vi que mi mujer estaba de rodillas chupándosela a un hombre mientras se corría también en su cara, una vez termino se fue a la ducha y el hombre se presento, era un vecino que solía venir a jugar con ellos.

Después de esa follada volvimos a quedar con ellos pero ahora mi mujer era otra era insaciable.