Mi mejor amigo se folla a mi madre (6)

Nos vamos de concierto, mi padre trabaja y no puede acompañarnos, pero Carlos, Fernando y yo intentaremos amenizar el fin de semana de mi querida mama.

- MI MEJOR AMIGO SE FOLLA A MI MADRE (6)

El tiempo paso volando, ya estábamos a viernes y el sábado era el concierto, mi madre estaba muy ilusionada con el hecho de ir a un concierto, la verdad es que verla así era un gustazo, rebosaba ilusión y felicidad por los cuatro costados.

Pero el hecho de saber que iba a ir con Carlos no me hacia ni pizca de gracia, ese cabron no pensaba en otra cosa que beneficiarse a mi madre, y para colmo desde su irrupción en nuestras vidas yo había pasado a un segundo plano.

La verdad es que acepte ir al concierto por dificultar los planes de Carlos, ya que con mi presencia esperaba que se cortase, pero después me arrepentí de haber aceptado ya que sabía que Carlos para nada se iba a cortar, al revés el saber que yo estaba allí lo estimulaba, era un plus añadido para él.

Pero ese no era el único problema, ya que durante las dos semanas anteriores al concierto hable varias veces con Fernando, le había pasado el video de mi madre con Carlos y le había contado todo lo que había pasado ese fin de semana, por lo que Fernando estaba que se subía por las paredes.

Mi idea era ir con Fernando al concierto y dormir en su casa, a Fernando la idea le encanto, estaba ansioso por volver a coincidir con mi madre, pero conforme pasaban los días y se acercaba el día del concierto mis dudas no dejaban de incrementarse, en mi fuero interno sabía que no era una buena idea haber invitado a Fernando, la situación se podría ir de madre en cualquier momento, dos machos alfa disputándose a mi madre no parecía el mejor de los planes para un fin de semana.

El sábado por la mañana mi madre estaba extasiada, nerviosa, iba de un sitio para otro, se ducho y se arreglo a conciencia, en la comida, le pregunto a mi padre si verdaderamente no le importaba que fuera al concierto sin él, mi padre le dijo que no se preocupase por nada y que disfrutase del fin de semana, lo que no sabía mi padre es como iba a disfrutar mi madre ese fin de semana.

Así pues, después de comer mi madre llamo a Carlos quería estar segura de que la ropa que llevase era la adecuada, este le dijo que hacía mucho calor que llevase ropa cómoda y si mañana nos apetecía iríamos a la piscina.

Tras esto me dijo lo que le había indicado Carlos así que cogí un bañador y una toalla a parte de la ropa que había cogido, y salimos para la ciudad.

Teníamos una hora de camino que aproveche para hablar con mi madre.

Yo:”Mama te veo muy feliz, y eso me gusta, pero desde que esta Carlos te veo diferente, distinta”” ¿Piensas dejarnos?”

Mama:” ¿A que viene eso ahora?””¡No pienso dejar a nadie¡” “Simplemente estoy disfrutando, me dejo llevar” “¿Que hay de malo en eso?””¿Acaso tu no haces lo mismo?”

Yo:”Mama yo no estoy casado ni tengo familia”

Mama:”Dime hijo cuantos maridos se van de putas o le son infieles a sus mujeres” “Pero si es una mujer la infiel, es una mala madre y peor mujer ¿No es así?” “Lo siento y siento que seas tan neandertal pero no pienso cambiar”

Yo:” ¿Cómo me has llamado?”

A pesar de que mi madre estaba molesta por mi comentario cuando nuestras miradas se cruzaron ambos rompimos a reír.

Y o:”Jolín mama no es eso pero desde que Carlos ha vuelto a aparecer te veo diferente, me has apartado, se que te has liado con él, que tiene una gran influencia sobre ti y que te hace feliz y lo disfrutas, pero me da miedo que te pilles por él, que nos abandones y el te haga daño, el no siente nada serio, solo eres un reto, un objetivo, disfruta consiguiendo lo que no tiene o humillando a papa tu marido y su mejor amigo””Mientras tengas claro que solo es sexo, y la clase de hombre que es, no me importa lo que hagas yo te quiero y siempre te apoyare pero no quiero que te haga daño”**

Mi madre se sonrió, y me dio un beso en la mejilla, pero no me dijo nada, hasta que al cabo de un rato me pidió que parase en la próxima área de descanso que había en la autopista, yo obedientemente desacelere y me metí en el área de descanso sin protestar, ni preguntar el motivo.

Ya en el área de servicio y con el coche completamente parado mi madre observaba nerviosa toda el área y tras comprobar que no había nadie cerca, tan solo un camión aparcado, me miro y me sorprendió lo que me dijo.

Mama:”Venga vamos, pásate a la parte de atrás, venga corre antes de que nos vea alguien”

Mientras me decía esto, una sonrisa picarona y juguetona se dibujaba en su rostro sin dejar de mirar a un lado y a otro, mientras se pasaba a la parte de atrás.

Yo no daba crédito, mi madre ya en la parte de atrás comenzó a tocarse delante de mí, las lunas de atrás estaban tintadas y nadie más que yo podía ver lo que estaba pasando allí, y la verdad es que lo que ocurría era que mi madre con las piernas completamente abiertas se abría sus labios vaginales con los dedos de una mano mientras con la otra se frotaba su clítoris, ella gemía y me miraba fijamente con una mirada febril y lujuriosa, incitándome, yo salí del coche y me fui a la parte de atrás, nada más cerrar la puerta mi madre se abalanzo hacia mí, desabrochándome los pantalones muy hábilmente y de forma rápida, para dejar al aire mi polla.

Jugueteo con ella y le dio varios lametazos, y algún besito tierno, mientras la cogía suavemente entre sus manos.

No tardo mucho mi polla en ponerse dura como el acero, y cuando mi madre se la metió en la boca, casi me corro ahí mismo al sentir como su lengua se movía hábilmente mientras su cabeza subía y bajaba, a la vez que cogía mis pelotas y las amasaba suavemente.

Estaba en el paraíso, la mamada que me estaba haciendo mi madre era fantástica, parecía tener prisa por hacerme correr pero no se lo iba a permitir, busque su chochito y le introduje dos dedos en su húmeda cavidad para comenzar a masturbarla de forma rápida y violenta, mientras con la otra mano me aferraba a uno de sus pechos y pellizcaba el pezón sintiendo como se endurecía.

Al cabo de un rato mi madre se monto sobre mí a horcajadas, y cogiéndome el tallo de la polla la oriento hacia su gruta, para bajar lentamente hasta tener toda esa barra candente en sus entrañas.

Tras un segundo inmóvil, comenzó a cabalgarme mientras yo me aferraba a sus caderas y mordisqueaba sus pezones que bailaban sobre mi cara mientras mi madre gemía y suspiraba de forma acelerada y entre cortada, hasta que sintiendo como bañaba mi polla y huevos se corrió abundantemente, quedándose nuevamente inmóvil sobre mi disfrutando del intenso orgasmo que acababa de tener.

Justo en ese momento un coche con cuatro jóvenes paro delante nuestro, mi madre pareció no darse cuenta y cuando se separo de mi vio que seguía empalmado y no me había corrido.

Mama:”Uyyy pobrecito, que egoísta soy no te has corrido todavía”

Y diciendo esto se coloco entre mis piernas, me cogió la polla y nuevamente se la metió en su boca para hacerme una felación mejor que la anterior, poco o nada pareció importarle que esta estuviese bañada con sus fluidos, ya que no dejaba de succionar con autentico deleite.

Yo vigilaba a los chavales, estos se habían parado para mear, uno de ellos cuando termino miro hacia nuestro vehículo, parecía que algo había llamado su atención, y a pesar de que los cristales laterales estaban tintados y no se veía lo que pasaba dentro, no es menos cierto que el cristal frontal no estaba tintado y tras acercarse un poco pudo ver sin dificultad lo que estaba pasando en el interior del vehículo, vi como sus ojos se abrían como platos y tras un breve momento de sorpresa, sus labios dibujaron una sonrisita picarona.

En ese momento me lleve un dedo a mi boca en señal de silencio y mientras le cucaba un ojo al chaval, cogí la cabeza de mi madre y la forzaba a seguir mamando, ahora era yo quien dirigía la mamada de mi madre, al cabo de un rato comencé a mover mi cadera, como si me estuviese follando su boca, sin dejar de mirar fijamente al mirón, este aviso sin hacer ruido a sus colegas y pronto cuatro jóvenes salidos estaban delante del coche observando cómo le follaba la boca a mi dulce madre sin ninguna consideración.

Ellos me hacían gestos obscenos y se reían como bobalicones mientras comentaban el espectáculo, cuando estuve a punto de correrme en la boca de mi madre los mire y levante una de mis manos con el dedo pulgar en alto, para después darle un par de movimientos más de cadera y correrme en la boca de mi madre.

Ellos al ver que el espectáculo había terminado, me hicieron varios gestos en señal de aprobación y felicitación y se fueron por donde habían venido, yo para evitar que mi madre se enterase de lo ocurrido con los chavales, le retuve la cabeza con mis manos fuertemente hasta que termine de correrme y vi como los chavales arrancaban el coche y se marchaban, mientras que mi madre me daba golpes en uno de los muslos para decirme que la soltase.

Cuando la solté mi madre dio una gran bocanada de aire antes de mirarme fijamente y recriminarme que casi la ahogo.

Mi madre a pesar de que estaba colorada con los ojos vidriosos y rojizos, estaba preciosa y si a eso le sumamos como se hinchaban y deshinchaban esos pechos al coger aire la hacían irresistible, a pesar de sus años era una mujer de bandera y yo tenía la suerte de poder disfrutar de ella.

Mama:” ¡Serás cabron casi me ahogas¡””En que pensabas”

Yo:”Perdona mama, pero después de tanto tiempo sin hacer nada y con lo bien que usas esa boquita me he venido arriba”

Y tras esto recompusimos nuestras ropas y volvimos a emprender viaje.

Al cabo de un rato llegamos a una urbanización donde se suponía que vivía Carlos, se veía una urbanización de pasta, y cuando llegamos al lugar indicado por Carlos comprobé que efectivamente la casa era una pasada, era una casa adosada de tres plantas, con una zona ajardinada en la parte delantera y un local en el que entraban un par de coches y un choco o zona de recreo, y en la parte de atrás había otra zona ajardinada junto con una piscina y un merendero.

La verdad es que Carlos tenia la típica vida que todos queremos, guapo y con pasta.

Cuando nos vio llegar nos recibió con una sonrisa de oreja a oreja, ataviado con un bañador unas gafas de sol y un cubata en la mano.

Vino hacia nosotros le dio dos besos a mi madre y quitándose las gafas me miro y me pregunto dónde estaba mi chica.

Yo torcí el gesto y le dije que iría con un amigo de la ciudad que más tarde quedaría con él, entonces él se sonrió miro de reojo donde estaba mi madre y tras comprobar que no podía oírnos me soltó a bocajarro.

Carlos:”Uff pues no sé yo si tu madre va a poder con todos””Muchos rabos y pocas mujeres tenemos esta noche, me parece a mí”

La verdad es que no me esperaba esa contestación y me quede estupefacto sin poder decir nada, él como si no hubiese pasado nada me invito a entrar en su casa, nos la enseño y nos llevo hasta las que se suponían serian nuestras habitaciones.

Mama: “No te preocupes Carlos mi hijo creo que se va a dormir con su colega””Es un buen chaval y me recuerda mucho a ti.”

Entonces él me miro y con una sonrisa maliciosa, le contesto a mi madre, mientras me miraba fijamente a mí.

Carlos:”Sin problema que duerma donde más le plazca, la habitación tiene dos camas así que si quieres venir con el colega no hay problema, también está invitado.”

Yo:”Bueno mama la verdad es que después de ver esta mansión  y la piscina que tiene no se qué hare…”

Mama:”A vale como en casa me comentaste que irías a dormir con tu colega..”

Deje mi maleta en la habitación que me indico Carlos y me excuse ya que había quedado con Fernando un poco antes del concierto para hablar un rato, tomar unas cervezas y cenar, tras esto mi madre me dio algo de pasta y me marche.

Sabia de sobra lo que iba a pasar en ese momento, solo verle la cara de sátiro que tenia Carlos intuía lo que iba a pasar, así que fui a la habitación me cambie, llame a Fernando y me marche.

Ya con Fernando comenzamos a tomar unas cervezas mientras hablábamos como era evidente de mi madre, Fernando estaba extasiado, nervioso, nunca antes lo había visto así, no dejaba de preguntarme como era Carlos en persona, que sentía mi madre por él.

Yo decidí enseñarle el video que tenia de cuando Carlos se la follo en la misma cama con mi padre durmiendo, pero con la condición de que no dijera nada y sobre todo que no lo podría ver más que conmigo y en mi móvil.

Fernando flipaba, no le importaba que estuviésemos en un sitio público, sus ojos parecían que en cualquier momento fueran a salirse de sus cuencas y no paraba de repetir lo capullo que era Carlos y lo morboso de la situación, era como si lo venerase lo estaba poniendo en un pedestal, para Fernando Carlos era un dios, y ver la actitud de Fernando hizo que un escalofrió recorriese mi cuerpo.

Justo en ese momento mi teléfono sonó, Fernando vio que era Carlos.

Fernando:”Tienes el teléfono de Carlos” “Serás mamon me estas reemplazando por el”

Yo me lleve el dedo índice a mis labios para que se callase y cogí el teléfono. Mientras Fernando se arrimaba a mí para oír lo que me decía.

Yo.:”Dime Carlos” “Que pasa”

Carlos:” ¿Dónde estáis?” “Habéis cenado ya” “Era por ir con vosotros al concierto sino os importa”

Yo:”No no estamos aquí tomándonos unas cervezas aún es pronto para cenar” “Venga veniros que os esperamos”

Tras colgar le envié la dirección donde estábamos, Fernando me miraba de forma inquisitoria, se le veía molesto, desconfiado, yo intente convencerlo que no tenía nada con Carlos y que no me gustaba, pero él no parecía creerme.

Al cabo de un rato apareció Carlos y mi madre, al entrar en el bar pude ver como mi madre causaba furor, más de uno se giraba para disfrutarla y otros simplemente la devoraban con la mirada, el caso es que estaba preciosa, sin nada del otro mundo y aun así destacaba sobre el resto.

Iba con un top verde esmeralda ajustado de tirantes con un escote en V dejando ese  vientre liso y espalda al descubierto, dudaba mucho que llevase sujetador ya que no se veía ninguna tira, con una mini falda vaquera bastante corta muy por encima de medio muslo y unas botas de caña alta tipo mosquetera.

Ambos venían hacia nosotros muy sonrientes, me fije en Fernando, estaba hipnotizado con la mirada fija en mi madre, que al verlo le regalo la mejor de sus sonrisas.

Ya en la mesa mi madre pareció alegrarse de ver a Fernando, y tras las presentaciones de rigor, pedimos otra ronda, el sitio estaba bien y vimos que habían platos combinados y bocadillos por lo que decidimos quedarnos a cenar allí.

La cena estuvo bien, fue amena y divertida, una buena conversación y muchas risas, todo ello acompañado con abundante alcohol, antes de pedir la cena nos tomamos un par de cañas mas y durante la cena nos bebimos 2 jarras de sangría, pero por si no fuera poco después del postre nos tomamos unos cubatas y unos chupitos, por lo que lógicamente todos íbamos bastante contentillos y algo achispados.

Antes de irnos hacia el concierto mi madre fue al baño y Fernando tras ella, dejándonos a Carlos y a mi solo.

Carlos:”Por cierto muchas gracias”

Yo:” ¿Gracias?”

No sabía muy bien a lo que se refería, estaba en fuera de juego, aunque pronto sabría porque me daba las gracias.

Carlos:”jeje si por irte de casa, así he podido disfrutar de “todos” los orificios de tu dulce madre” “uff la he visto muy necesitada la verdad” “¿Acaso no le das lo que necesita?””¿O es que es mucha mujer para ti?”

La verdad es que no tenía ninguna duda de que mi madre y el habrían aprovechado para poder follar sin problemas, pero de ahí a que me lo restregase por el morro, no entendía que es lo que buscaba, porque me provocaba.

Yo:”Serás capullo””La verdad es que no se que ve mi madre en ti”

Carlos:”Es sencillo atiendo las necesidades de tu madre”

Y mientras decía esto se tocaba el bulto de su entrepierna y me sonreía de forma burlona.

Justo cuando le iba a contestar aparecieron mi amigo y mi madre, y ya nos dirigimos para el concierto, todavía teníamos tiempo pero Carlos comento de ir en metro para llegar antes y poder coger un buen sitio.

Así pues nos dirigimos a la boca del metro y tomamos la línea que nos llevaba al concierto, conforme nos acercábamos el metro se llenaba de gente, íbamos de pie hasta que en una de las paradas una marabunta de gente que también iban al concierto provoco que nos separásemos, Fernando se aferro a la barra y quedo preso entre la multitud mientras que a mi madre a Carlos y a mí nos empujaron hasta el final del vagón,  Carlos estuvo hábil y cogió a mi madre y la puso delante suya para estar juntos mientras que yo quede solo apoyado en la pared con dos o tres personas entre mi madre, Carlos y yo.

Cuando arranco el metro, vi como mi madre se aferraba a la barra para no caer, esta me miro y me regalo una bonita sonrisa, sin embargo no tarde mucho en ver como a mi madre le mudaba la cara y se sonrojaba, no podía descifrar esa expresión, pero una idea asomo a mi cabeza así que busque a Carlos, y como no podía ser de otra forma nuestras miradas se cruzaron y vi como Carlos hacía gestos obscenos y se mordía el labio mientras me cucaba un ojo, no podía verlo pero intuía lo que estaba pasando, volví a mirar a mi madre y la vi con los ojos cerrados y la boca entreabierta, empujando un poco conseguí acercarme un poco más a ellos hasta que pude ver con claridad lo que estaba pasando.

Me quede de piedra, Carlos tenia una de sus manos en la entrepierna de mi madre, que lejos de protestar lo estaba disfrutando, no daba crédito, el vagón iba lleno y eso no parecía que les importase lo más mínimo, ahí estaba Carlos masturbando a mi madre, mientras esta aferrada a una barra abría sus piernas para facilitarle el acceso.

Mis sentimientos estaban encontrados, por un lado sentía como una rabia se apoderaba de mí por ver como mi madre perdía el control si en algún momento lo tuvo cuando Carlos estaba cerca, pero por el otro, lo morboso de la situación hacia que me empalmase como un burro.

Mire a mi alrededor, estaba aterrado de que alguien los pudiese ver, pero a parte de mi solo otro hombre parecía haberse dado cuenta, mire a Fernando y el pobre no se percato de nada, me saludo como para hacerse notar y que supiese que estaba ahí pero poco más.

Sin embargo el cabron de Carlos estaba dispuesto a ir más allá, al estar detrás de mi madre, le restregaba su bulto de forma descarada en el culo de mi madre, lo vi como se acercaba a mi madre y algo le debió decir al oído, me hubiese encantado poder oírlo pero no fue así, fue el único momento que mi madre abrió los ojos y se giro hacia el para mirarlo fijamente, con una especie de suplica y una sonrisilla nerviosa.

Carlos con una sonrisa y sin apartarle la mirada a mi madre se aparto un poco, a lo que mi madre aprovecho para disimuladamente abrir un poco más sus piernas y echar el culo hacia atrás, dejándolo en pompa.

Momento que aprovecho Carlos para introducir nuevamente una de sus manos entre las piernas de mi madre mientras con la otra le subía la mini casi hasta la cintura, esa maniobra la pudimos ver cuatro personas, que al igual que yo estaban alucinados con el comportamiento de ambos y no perdían detalle.

Carlos al verse observado, les miraba y les sonreía haciendo gestos obscenos e invitándolos a mirar y a que se acercasen para que le cubriesen,  todos a excepción de mi le sonreían como bobalicones, sin dejar de quitar ojo a lo que hacía, ya que el espectáculo que estaban dando era impresionante.

Mi madre no se enteraba de nada, o no quería enterarse, ella se dejaba hacer e iba con los ojos cerrados, en un momento dado, vi como Carlos hablaba con el chaval que estaba más cerca, más que hablar le hacía signos, yo no lo podía ver muy bien, pero parecía como si lo estuviera invitando a tocar.

El chaval que tendría unos veintitantos, en un principio se sobresalto, como si no entendiese lo que le estaba proponiendo, o no se lo creyese, pero pronto y ante la insistencia de Carlos, vi como la expresión de sorpresa mudaba a otra bien diferente, era el fiel reflejo del deseo.

Vi como se coordinaban para que el chaval se colocase detrás de mi madre, y en un momento dado la mano de Carlos salió para que su lugar fuese ocupado por la del chaval, yo mire a mi madre, esta parecía no darse cuenta de nada, sin embargo el chaval estaba alucinado tenía su mirada clavada en el culo de mi madre mientras su mano se perdía en la entrepierna de esta, no tenía dudas de que ese pobre desgraciado no había estado con una mujer como mi madre, le había tocado la lotería.

Carlos clavaba su mirada en mí, la verdad es que me incomodaba, me hacía sentir fatal, lo odiaba con toda mi alma, pero ver a mi madre manoseada por otro, mientras piensa que la que la estaba sobando era su amante me excitaba hasta puntos insospechados.

Mi madre parecía estar cerca del orgasmo ya que sutilmente comenzó a mover sus caderas de forma sutil y cadente mientras se aferraba a la barra de manera más fuerte, al verlo Carlos por signos le indico al chaval que ya valía, era hora de apartarse, este muy educadamente se aparto como le indico Carlos mientras se reía de forma bobalicona y se llevaba sus dedos a la boca para deleitarse con los flujos de mi madre.

Pero si pensaba que había visto todo, estaba muy equivocado, ya que Carlos se saco la polla completamente erecta se coloco detrás de mi madre que al sentirla fuera de sus pantalones sí que abrió los ojos como platos y miro hacia atrás.

Carlos con un movimiento seco de cadera le introdujo el glande de la polla en sus entrañas, lo que provoco que mi madre se fuese hacia delante y emitiese un gemido casi imperceptible para el resto del vagón, menos mal que tenia la barra porque si no se hubiese dado de bruces con un par de maromos que gracias a dios le estaban dando la espalda y le hacían de parapeto para que nadie más del vagón lo viese.

Carlos seguía intentando penetrarla, pero no era fácil, los presentes estaban tan flipados como yo, varias veces nos mirábamos de manera incrédula para rápidamente seguir observando como Carlos intentaba penetrar a mi madre.

Me sorprendió que mi madre accediese a todo esto, pero mi madre excitada como estaba, poco o nada parecía importarle que los pillasen, dudo mucho que fuera consciente de la situación. La verdad es que a mi madre casi no se la veía, absorbida por la marabunta de gente que había en el vagón,  y los que éramos conscientes de lo que estaba pasando nos habíamos acercado a ellos formando un circulo sobre ellos y evitando que fueran vistos por el resto, vimos abrió un poco mas sus piernas y movía sus caderas buscando la mejor postura para que la penetrasen mejor, Carlos aferrándose a sus caderas comenzó a penetrarla suavemente.

Era alucinante ahí estaban mi madre y su amante en el final de un vagón lleno de gente follando mientras tres o cuatro personas lo estábamos contemplando.

Entonces vi como el que había estado manoseando en coño de mi madre, parecía haberse quedado con la ganas y se envalentono poniendo una de sus manos en uno de sus pechos, mi madre al percatarse del manoseo, lo miro y lejos de enfadarse o recriminárselo le regalo la mejor de sus sonrisas.

Mi madre estaba irreconocible, vale que la situación de hacerlo en un sitio publico la pudiese excitar pero ¿Esto? Ser consciente de que no solo tu amante te esta follando en un sitio publico sino que además uno de los que estaban observando la manoseasen… y lo consintiese, no me lo podía creer, ¿Seria por el alcohol?.

Eso pareció ser la confirmación para que los otros tres que no habían perdido detalle se acercasen más a ella y comenzasen a manosear cada centímetro de su escultural cuerpo.

Casi no podía ver a mi madre, esos maromos la tapaban por completo, mientras Carlos con una sonrisa triunfante y una mirada desencajada la bombeaba sin compasión.

Para colmo, el metro comenzó a discutir su velocidad hasta que se paro por completo; nos quedamos parados en la mitad de un túnel. Justo en la entrada de una de las estaciones,  las luces se apagaron y se encendieron unas muy tenues que apenas iluminaban el vagón.

Fue la situación propicia para que esos hombres aprovecharan la coyuntura de la situación y pudiesen disfrutar a su antojo del cuerpo de mi madre sin ser vistos y sin tener ninguna prisa, Carlos estaba en su salsa, organizaba a esos hombres y se hacía con el mando de las operaciones.

Vi como uno de ellos se colocaba de forma hábil, delante de mi madre, entre la barra y ella, que al no tener la sujeción de la barra y fruto de las embestidas de Carlos no le quedaba más remedio que apoyarse en el pecho de este desconocido.

El desconocido con una sonrisa sátira, coloco sus manos en la cabeza de mi madre, obligándola a bajar hacia abajo, mi madre al ver las ideas de este, no opuso resistencia y cuando se encontró esa polla dura de considerables dimensiones fuera de sus pantalones y a escasos centímetros de su cara, se la metió en la boca y comenzó a succionar mientras intentaba mantener el equilibrio apoyando sus manos en los muslos del desconocido que estaba disfrutando de la dulce boquita de mi madre.

Era un autentico espectáculo, pero ver como desaparecía la polla de ese desconocido a cada envite que Carlos le daba, mientras los otros tres, tampoco perdían el tiempo y sobaban toda la anatomía de mi madre, pechos, culo y coño eran manoseados por los dedos diestros de esos desconocidos, yo estaba paralizado, lo que estaba viendo era simplemente alucinante.

Cuando Carlos se corrió en el interior de mi madre se retiro, pero de inmediato otro de los presentes ocupo su lugar, sin embargo las intenciones de este no eran las que todos esperábamos, ya que este desconocido apunto su miembro hacia la entrada de su culo, mi madre quiso evitar esa penetración sin mucho éxito, ya que estaba inmovilizada y el tremendo pene empezó a abrirse paso entre sus nalgas, intento gritar, pero su boca seguía tapada y creo que nadie la pudo oír, imagino que esa penetración no fue tan placentera como le hubiese gustado a mi madre, ya que nadie había perdido el tiempo en prepararlo para dicha penetración y la barra de carne que estaba profanando ese orificio no era precisamente pequeña.

Uno tras otro todos los chavales tuvieron su turno para follarse a mi madre, mientras Carlos los dirigía con maestría, hasta que el metro comenzó a moverse de nuevo lo que casi hace que se caigan al suelo.

Justo en el momento que  avisaban por megafonía la que era nuestra parada, donde probablemente todos nos bajaríamos, los hombres que estaban disfrutando de la situación se había corrido al menos una vez, sin embargo varios de ellos  a regañadientes dejaban de sobar el cuerpo de mi madre y se alejaban del lugar con una evidente erección, vi como mi madre aparecía nuevamente y se recomponía la ropa.

Alguno de los presentes felicitaban y hablaban con Carlos, como pidiéndole que les diese el teléfono, probablemente para continuar con lo que habían comenzado, este se le veía en su salsa y les daba largas.

Cuando mi madre miro hacia donde yo estaba nuestras miradas se cruzaron y lejos de sobresaltarse por descubrir que lo había presenciado todo, me sonrió y me cuco un ojo, como si lo que acabase de suceder fuese la cosa más normal del mundo, era evidente que para ella era un juego, y sinceramente yo sentía como una sensación de rabia e impotencia se apoderaba de mi, a fin de cuentas no era una mujer cualquiera, era mi madre, la mujer que estaba casada con mi padre, no entendía como podía hacer esas cosas delante de su hijo y sin ningún remordimiento.

Lo peor de todo, era bajar la mirada y ver la erección que tenia, y ver que yo, si era sincero conmigo mismo, no solo no hacía nada por evitarlo, sino que lo disfrutaba como el que más, hasta que terminaba el espectáculo y entonces aparecían mis sentimientos de impotencia y rabia.

Cuando paro el metro a trompicones salimos del vagón, dejando atrás a los hombres que habían disfrutado de una u otra manera de los placeres de mi madre, ya en las escaleras mecánicas nos juntamos los cuatro, y fuimos hasta el concierto, mi amigo iba con mi madre, sin saber nada de lo que había pasado, mientras Carlos iba a mi lado.

Carlos:”Has visto lo puta que es tu madre””como le va la marcha””no es una mujer de un solo hombre””A tu madre le va mas la polla que a un crio una piruleta”

Yo iba absorto en mis pensamientos y pasaba de los vaciles de Carlos, aunque él no cejo en su empeño y seguía provocándome, era su momento lo estaba disfrutando.

Carlos:”Veo que a tu colega también le pone tu madre”

Al oír esas palabras me hicieron reaccionar, mire a Carlos, este me observaba y vio mi reacción, al parecer le hizo gracia pero no dijo nada.

La verdad es que la simple idea de que ese par de capullos se juntasen para gozar de mi madre me hizo estremecer y al parecer Carlos se había dado cuenta a pesar de esforzarme porque no se diera cuenta.

Ya dentro del estadio había bastante gente, a pesar de que aún era pronto, era evidente que el grupo tenía gancho, en ese momento estaban tocando los teloneros, a mi madre se la veía con muchas ganas, y estaba como loca por ir a la primera fila, así que fuimos para allí, aunque no llegamos hasta la primera fila nos quedamos muy cerca, Carlos fue a por unos litros y estuvimos hablando.

Cuando los teloneros terminaron aprovechamos para acercarnos un poco más, conforme se acercaba la hora no paraba de entrar mas y mas gente en aquel abarrotado estadio, por lo que cada vez estábamos mas apretujados, hasta que el concierto comenzó.

El grupo salto al escenario para deleite de los presentes que comenzaron a saltar y vitorear, el calor era sofocante y apenas se podía respirar, mi madre se vino arriba y al igual que una colegiala comenzó a saltar y a chillar, era evidente que se conocía las canciones, Carlos a su lado también tarareaba las canciones mientras Fernando y yo detrás de ellos nos reíamos y contemplábamos embobados como botaban las tetas de mi madre libres de cualquier impedimento al no llevar sujetador.

Un grupo de jóvenes comenzó a dar saltos y tirarse la bebida unos a otros, por lo que nos fuimos apretujando para evitar que esos chavales nos golpeasen o tirasen bebida, mi amigo no perdió la oportunidad de apretarse a mi madre más de la cuenta aprovechando la situación, la música era ensordecedora pero vi como Fernando le decía algo a mi madre al oído, a lo que ella se sonreía y echaba la mirada hacia atrás, menos mal que Carlos no parecía darse cuenta de nada, vi como mi colega colocaba una de sus manos en el culo de mi madre y lo sobaba descaradamente, mientras me miraba.

Mi madre lejos de reprenderle o apartarse se coloco delante de él y parecía centrarse en el concierto mientras miraba o hablaba con Carlos.

La mano de Fernando volvió al ataque, y vi como nuevamente le decía algo al oído que no podía oír, mi madre parecía concentrada en el concierto como si la cosa no fuera con ella, mientras Fernando apretujaba sus posaderas, miraba de vez en cuando a Carlos que estaba ajeno a la situación, mi colega nuevamente, se apretujo contra mi madre que al sentir el abultado paquete de mi colega vi como provocaban que sus pechos se endureciesen y se marcasen en ese hermoso top.

Fernando fue subiendo su mano de su culo por la cintura hasta llegar a los pechos, comenzó a acariciarlos por el costado, hasta que metiendo la mano por la abertura del top amaso uno de sus pechos a placer, primero suavemente y luego con más fuerza, hasta pellizcarle ese pezón, imagino que el contacto de su mano directa en su piel, y más concretamente en su pezón estaban erizando todos los bellos de mi madre, que seguía como si no pasase nada y lo que estuviese viendo fuera lo más importante.

Carlos al cabo de un rato nos indico que iba a por unos litros, gesto que agradecimos debido al calor que hacia allí.

Una vez que Carlos se marcho Fernando volvió al ataque, el hecho de que Carlos se marchase le permitía maniobrar mejor a mi amigo, yo me acerque un poco más para intentar oír lo que le decía Fernando a mi madre, y de paso hacerles la cobertura.

Fernando: “Uff guapa, que buena estas” “Dime ¿me has echado de menos?”

Mi madre no decía nada, tan solo tragaba saliva y se dejaba hacer, ya no saltaba, ahora estaba inmóvil con la mirada fija en el escenario, Fernando seguía tocándole los pechos, haciendo que sus pezones se pusiesen cada vez más duros y se marcasen de forma evidente mientras restregaba su polla en el culo de mi madre.

Fernando:”Tengo el rabo como una piedra, no sé si voy a poder aguantar..””Vaya tetas tienes, casi no me caben en la mano, y son tan redonditas y duras..uff”

Podía ver como mi madre se excitaba, como su respiración se aceleraba y cerraba los ojos, Las manos de Fernando volvieron a su culo y siguieron con su labor de sobar y sobar sin cortarse un pelo, pero más allá llegó su atrevimiento cuando una de sus manos se introdujo por debajo del vestido y comenzó a acariciar la parte interna de sus muslos.

Vi como a mi madre se le escapaba un suspiro...

Fernando:” madre mía que muslos tienes, que suaves, parecen terciopelo....” “verás que bien lo vamos a pasar...”

Mientras le decía esto comenzo a subir centímetro a centímetro hasta que sus dedos llegaron al sexo de mi madre, su dedo acariciaba su húmeda rajita, se acerco nuevamente a su oído y le dio un mordisquito en el lóbulo de la oreja mientras le susurraba

Fernando:”Vaya..Estas caliente, bien caliente y mojada, ¿has visto lo bien que entran mis dedos?””Si es que tienes el coñito tan estrecho.. Pero que rico, dios que delicia”

Mi madre inevitablemente soltó un nuevo suspiro y un gemido casi inaudible, entonces Fernando me miro y pude ver como tenía la cara desencajada, estaba disfrutando de lo lindo y sin cortarse un pelo me dijo lo zorra y caliente que era mi madre y la suerte que tenia, fue en ese momento cuando mi madre pareció acordarse de que yo me encontraba allí también, y se giro buscándome, su mirada era puro vicio y deseo, casi desesperación, cuando nuestras miradas se encontraron pude ver como mi madre me sonreía y al verme tan cerca busco con su mano mi paquete, en ese momento duro como una piedra.

Fernando al ver la reacción de mi madre se rio, le cogió la mano a mi madre y se la coloco en su paquete.

Fernando:”Uff si eso es, aquí tienes dos machos jóvenes que te van a dar toda la caña que necesita una puta como tú” “Venga vámonos de aquí”

Madre:”Uff por ganas no serán pero y Carlos”

Fernando:”Ese cabron, que se joda”

Y diciendo esto cogió a mi madre de la mano y dando un tirón la saco de allí, yo los seguía a una distancia prudencial, hasta que llegamos a los baños, Fernando metió a mi madre en uno de ellos y yo cerré la puerta, estábamos bastante apretujados pero no importo, Fernando levanto la falda de mi madre y se metió entre sus muslos, vi como su lengua jugaba con el coño de mi madre, y como con sus manos separaba los glúteos y esa misma lengua exploraba el agujerito posterior, para después con un lametazo volver a centrarse en el clítoris, mi madre instintivamente abría mas sus piernas para que esa maravillosa lengua explorara bien el conejito de esta.

Yo estaba inmóvil apoyado en la puerta del baño sin perder detalle de lo que estaba pasando allí, mi madre tenía la mirada clavada en mi mientras disfrutaba de la maestría de Fernando, hasta que tuvo un intenso orgasmo que la obligo a apoyarse en mi.

Fue el momento que aprovecho Fernando para salir de debajo de la falda de mi madre, mientras le decía el coño tan delicioso y maravilloso que tenia.

Fernando:”Pedazo de coño, que rico, lo comería en cualquier momento”

Mi madre estaba inmóvil apoyada en mi pecho mientras sentía su respiración bastante agitada y algo acelerada.

Entonces Fernando se cogió su polla y comenzó a restregársela una y otra vez contra el sexo de mi madre, hasta que de forma ruda y violenta se la clavo hasta las entrañas, mi madre dio un grito pero Fernando estaba fuera de sí y la penetraba con toda su alma, lo que hacía que mi madre se abalanzase sobre mí, yo estaba como hipnotizado viendo como sus pechos bailaban a cada embestida de mi amigo, mientras mi madre no paraba de gritar, hasta que furibunda de deseo me busco la boca y cuando nuestros labios se encontraron son dimos un morreo intenso y apasionado, sentía como quería chillar y no podía por tener mi lengua en su boca, yo me aferre a sus pechos y los pellizcaba a placer, hasta que no pude mas y recordando la escena del metro, cogí de los hombros a mi madre y la obligue a bajar su cabeza, mi madre al intuir lo que quería, me miro se sonrió y saco mi polla babosa y dura para introducírsela de forma glotona en su boquita, dios mío que placer no aguante mucho y me derrame en su boca, pero ella lejos de parar continuo succionando como si no hubiese un mañana mientras mi amigo excitado por la escena seguía bombeándola de manera violenta, el placer que me estaba dando en ese momento era indescriptible casi insoportable.

Cuando Fernando estuvo a punto de correrse cogió a mi madre con un movimiento rápido y certero la volteo, la cogió de los pelos y le metió la polla en la boca derramando su néctar en su boca, mi madre estaba fuera de sí y al igual que hizo conmigo siguió chupando con deleite a pesar que Fernando ya se había corrido, yo veía como su cabeza subía y bajaba, pero más me alucinaba ver lo abiertos que tenía sus orificios del ferrete que había recibido durante todo el día, así que me cogí la polla y sin ninguna dificultad aproveche para introducirle mi polla en el encharcado coño, mientras con uno de mis dedos jugaba con el agujerito posterior de esta, que al sentirlo gemía y se movía de forma nerviosa, seguramente de la irritación que le había provocado el chaval que la enculo en el metro, no se la dé nalgadas que le di provocando que ese hermoso culito blanco tornase enrojecido, mientras mi madre seguía chupando como una loca la polla de mi amigo, sentí como sus fluidos corrían por toda mi barra de carne, era bestial una gozada sentir como mi madre se corría, lo que provoco que yo también me corriese de manera intensa y abundante.

Después de adecentarnos un poco salimos de uno en uno hasta que ya fuera de los baños fuimos al sitio donde habíamos estado, mire el móvil y vi que Carlos me había llamado, me alegre y no dije nada.

Cuando llegamos al sitio, ahí estaba Carlos, este nos pregunto algo malhumorado que donde estábamos y Fernando le dijo que habíamos ido al baño y que había mucha gente, vi que Carlos no se creyó la excusa que le dio y me clavo su mirada como culpándome, sinceramente esa mirada me intimido, había algo en ella que me dio respeto.

Al cabo de un rato Carlos vino había mi.

Carlos:”Dime tu amigo también se folla a tu madre ¿Verdad?”, “Y como tú eres un puto voyeur lo disfrutas más que nadie ¿no es así?” “Disfrutas viendo a tu madre en manos de otro hombre”

No podía mirarlo a la cara, me sentía indefenso y me fastidiaba darle la razón, a pesar de que era mi madre y sabia que lo que hacía no estaba bien, no es menos cierto que estaba enamorado de mi madre, era una mujer preciosa con un cuerpo de escándalo y no sabría decir porque ni el motivo pero me excitaba verla disfrutar, ver como otros hombres la hacían perder la cordura y la llevaban hasta esos extremos de excitación y lujuria, verla en ese estado de febril excitación, no podía evitarlo y deseaba que sucediese con todas mis fuerzas, y lo que realmente me fastidiaba no era que Carlos lo supiera y me hubiese calado, era que mi madre estaba en sus manos, que a su lado mi madre era un juguete sexual, que él fuera el causante de que llegase a esos límites y no lo hiciese conmigo.

Carlos al ver que no le respondía que estaba en mis pensamientos se sonrió y echándome la mano sobre el hombro me comento.

Carlos:”No preocupes pequeñín, si me dejas vas a disfrutar como nunca, pienso disfrutar de tu madre y hacerla disfrutar como nunca antes lo haya hecho, tenemos un diamante en bruto que vamos a pulir” “Y si quieres y me ayudas vas a poder disfrutarlo”

La verdad es que no sabía muy bien a lo que se estaba refiriendo pero esa mirada no me estaba gustando nada.

Tras esto vi como Carlos se acerco por primera vez a Fernando, mientras mi madre se acercaba a mí.

Mama:”Que tal hijo, como estas qué tal te lo estas pasando”

No daba crédito mi madre preguntándome que tal lo estaba pasando..

Yo:”Mama que quieres que te diga, eres una mujer espectacular y aunque sé que está mal porque eres mi madre me gustas mucho, tienes un cuerpazo que ya quisieran muchas más jóvenes””Pero dime como estas tu, porque me estas dejando asombrado””Nunca imagine que fueras así”

Mama:”En una nube, nunca antes he estado mejor, no me arrepiento de nada, simplemente que ahora mismo estoy agotada””solo espero que mi pequeñín lo esté disfrutando tanto como yo”

Y  diciendo esto me atuso el pelo y me dio un tierno beso en la mejilla con la mejor de sus sonrisas, vi como en ese momento Carlos le daba un codazo a Fernando y este se volvía para ver la escena, ambos estaban juntos no se dé que estaban hablando pero imagino que el tema seria mi madre, y eso no me estaba gustando nada, que esos dos sementales estuviesen hablando juntos y por lo que veía conectasen no era nada bueno.

Cuando acabo el concierto, Fernando propuso ir a una discoteca pero mi madre estaba muy cansada y no le hacía mucha ilusión lo de seguir de fiesta.

Carlos:”Venga hombre, no fastidies, el día está siendo genial, para un día que sales, además hay una discoteca de camino a casa”

Madre:”Estoy muy cansada, no me apetece bailar y mas agobios de gente, no estoy acostumbrada hacía mucho tiempo que no salía”

Ver a esos dos cabrones maquinando juntos el siguiente paso no me hacia ni pizca de gracia, pero ahí estaban intentando convencer a mi madre.

Observe como ella me miraba como pidiéndome ayuda para que la apoyase en su idea de ir a casa, pero estaba intrigado no sé porque, quería saber que tramaban esos dos.

Yo:”Venga mama, hace nada me has dicho que lo estabas pasando en grande, para una vez que sales”

Al ver que los tres insistíamos no le quedo más remedio que aceptar a regañadientes, entonces Carlos tomo el mando, en vista de la dificultad de poder coger un taxi decidimos ir andando, cuando llevábamos unos 15-20 minutos mi madre protesto y pregunto si faltaba mucho, entonces Carlos nos dijo que cerca de donde estábamos había una chupiteria que iba cuando era joven, la bebida era barata y no estaría mal para coger fuerzas, así que decidimos hacer una parada, cuando llegamos era un antro oscuro, con la música a todo trapo y bastante cutre.

Nos sentamos en una mesa algo apartada, desde hay observe como la gente que había estaban fumando porros, Carlos fue directo a la barra y nos trajo una jarra con cuatro vasos de chupito y comenzó a servirnos.

La verdad es que la bebida estaba fresquita y muy dulce, entraba sola, Fernando y Carlos iban a degüello a por mi madre, su vaso siempre estaba lleno, era evidente lo que pretendían, en un momento dado mi madre se fue al baño, momento que Carlos aprovecho para comentarle algo a mi colega Fernando sin que yo pudiese oírlo.

Vi como Fernando le asentía de manera afirmativa y Carlos se levanto rápidamente y fue a la barra, yo aproveche para preguntarle a mi colega que estaba pasando.

Yo:”Que pasa ahora Carlos te cae bien o que”

Fernando: “Bueno no es mal tío, y me ha comentado que estás de acuerdo y que le habías dicho que yo me follaba a tu madre” “Entonces me ha dicho que follandonosla los dos porque hacerlo por separado…””Uff y la idea de hacer un trió con tu madre me ha puesto muy cachondo la verdad”

Lo que suponía, ese par de capullos estaban confabulados contra mi madre, esto no podría acabar bien.

Justo cuando iba a preguntarle de que estaban hablando y como pensaban hacerlo apareció mi madre y ya no pudimos seguir con la conversación, quedándome con las ganas.

Tampoco tardo mucho en aparecer Carlos, que traía consigo un par de cocteleras consigo, vi como se miraba él y Fernando era evidente que se traían algo entre manos y eso me intrigaba.

El caso es que cuando terminamos esas cocteleras nos fuimos del local, en dirección a la discoteca que nos comento Carlos, estaba a unos 15 minutos andando, en el camino mi madre parecía eufórica, no lo entendía los chupitos parecían haberla animado en exceso, es cierto que todos estábamos contentillos pero a mi madre parecía haberle afectado mas.

Carlos y Fernando no dejaban de hablar entre ellos, susurrando y riéndose entre dientes, mientras mi madre iba dándonos un verdadero espectáculo.

Cuando llegamos a la discoteca no había mucha gente, solo la pista de baile estaba iluminada, Carlos se fue a la barra con mi madre, mientras Fernando y yo nos fuimos al baño, momento que aproveche para preguntarle que estaba pasando entre Carlos y el, que me fastidiaba que me tuviesen al margen.

Fernando se sonrió, y me dijo que no me preocupase que pronto lo descubriría.

Cuando salimos del baño, fuimos en dirección a la barra donde Carlos y mi madre debían estar, y estaban, pero antes de llegar, Fernando me aviso y nos paramos, me señalo hacia donde estaban Carlos y mi madre y lo que vi me dejo helado, ambos estaban en la barra pero Carlos estaba sobándole el culo a mi madre con la falda completamente levantada lo que dejaba al descubierto las zonas más intimas de mi madre y varios chavales lo estaban viendo e incluso grabándolo en video, sin que mi madre dijese o hiciese nada.

Mire a Fernando y este estaba con una sonrisa de oreja a oreja e incluso se toco su paquete, mientras me comentaba lo puta que era mi madre y lo bien que lo iban a pasar.

Yo le dije que ya valía, que ya estaba bien, era mi madre y no me parecía correcto, así que fui hacia ellos con la esperanza de que parasen, me coloque detrás de mi madre para que los mirones dejasen de grabar, Carlos al verme se sonrió y vi como buscaba con la mirada a Fernando que iba detrás mía.

Por vergüenza torera dejo de magrear a mi madre, mire a mi madre y esta estaba a todo sudar, su cuerpo brillaba por la sudoración, y la verdad es que la hacían mucho mas apetitosa, estaba radiante.

Mama:” ¿Que calor hace no?””Vaya noche”

Carlos:”Jeje no será que ese calor que tienes es un calor interior”

Fernando le reía las gracias, mientras mi madre se abanicaba con una de sus manos para darse algo de aire, lo cierto es que hacía calor pero no hasta el punto de cómo estaba mi madre.

Mama:”Venga chicos, vamos a bailar, no hemos venido aquí a bailar pues venga vamos, quien se anima a bailar conmigo”

Y diciendo esto fue directa a una desangelada pista de baile, sus movimientos eran muy sensuales y excitantes, verla mover las caderas de esa manera era una delicia.

Nosotros tres fuimos detrás de ella y por lo que pude comprobar la veintena de jóvenes que había en la barra también se acercaron.

Mi madre comenzó a bailar, al son de la música sus movimientos eran muy sensuales y provocadores, el que pinchaba en la cabina comenzó a poner reggaeton y mi madre comenzó a bailar movía sus caderas arriba y abajo al ritmo de la música, este movimiento provocaba que su falda se subiese dejándonos contemplar nuevamente ese hermoso y duro culito vibrar al son de la música.

Carlos se coloco tras ella, y coloco de forma suave sus manos en su cadera, mientras mi madre al sentir el paquete de este se restregaba de forma exagerada, Fernando se coloco delante de ella y también coloco sus manos en la cintura para ir subiéndolas poco a poco hasta sus pechos, al principio eran solo roces hasta que acabo posando esas manazas en sus pechos, mire hacia atrás, y como supuse los chavales estaban expectantes con sus móviles en la mano grabándolo todo, esto no me gustaba un pelo, no lograba comprender que estaba pasando.

Pero la cosa no quedo ahí, el que ponía la música, cogió un altavoz y comenzó a animar a mi madre para que se subiese a la plataforma y nos deleitase con su baile.

Pude ver como Caros le decía algo al oído a mi madre, que con una sonrisa se separo de ambos y como le estaban demandando se subió a la plataforma, y una vez arriba mi madre comenzó a bailar nuevamente, Carlos comenzó a animar a los chavales a que se acercasen, para que no se perdiesen el baile, estos le hicieron caso y con el móvil en la mano no dejaron de grabar los bailes de mi madre, mientras el que estaba pinchando no dejaba de animar a mi madre para que continuase con sus bailes.

Mi madre bailaba de forma desinhibida como si estuviese ahí sola, pero lo que no se debió de percatar, o si lo hizo no le importo, fue que al no llevar ropa interior y estar en alto todos los presentes podíamos ver ese hermoso y depilado conejito y ese duro y hermoso culo, los chavales flipaban sin dejar de grabar, no dejaban de comentar lo buena que estaba y el polvo que tenia.

Entonces Fernando subió a la plataforma, cogió a mi madre desde atrás, esta no abría los ojos solo sonreía, era como si estuviese ausente, como si se encontrase en un sueño y no se enterase de nada.

Fernando se pegaba al cuerpo de mi madre, frotaba su polla contra el culo de esta que al sentirlo se reía y movía sus caderas al son de la música, lo que provocaba que el bulto de mi amigo se marcase de forma evidente, cuando paso un rato, Fernando ya fuera de sí, le levanto la falda hasta la cintura, mi madre lejos de recriminárselo o evitarlo siguió bailando.

Fernando viendo el estado y comportamiento de mi madre, le dio varias nalgadas, que fue recibido por varios bitores de los presentes, viéndose el centro de atención, se vino arriba y metió una de sus manos en la entrepierna de mi madre y desde donde estábamos podíamos observar cómo le introducía un par de dedos y los movía de forma diestra, al cabo de un rato mi madre ya no bailaba simplemente se aferraba a la plataforma mientras Fernando la inmovilizaba con su cuerpo y amasaba uno de sus pechos mientras continuaba masturbando de forma frenética a mi madre.

Todos los allí presentes no dejaban de grabar la escena incluso una lluvia de flases hacían que pudiésemos ver todo de forma nítida.

Cuando no pudo mas Fernando fruto de la excitación y el morbo del momento, se saco la polla de forma torpe y nerviosa, se escupió en la mano y frotándosela en el glande se cogió esa barra dura y nervuda y la apunto en la entrada del coño de mi madre, para con un movimiento seco y duro de cadera enterrársela en sus entrañas, Fernando estaba fuera de sí, la penetraba de forma violenta y rápida, mientras mi madre boqueaba como un pez y se aferraba a la barra de la plataforma, debido a la violencia de las embestidas la mitad del cuerpo de mi madre estaba fuera de la plataforma, sus pezones se marcaban de manera exagerada.

En un momento dado me acorde de Carlos, este estaba con los chavales hablando, me acerque hasta él, y pude oír como los animaba a follarse a mi madre, los chavales al oírlo parecían no dar crédito a lo que les estaba proponiendo Carlos, yo me cabree bastante, una cosa era que él se follase a mi madre, pero de ahí a que la ofreciese al primer pringado que pasase eso ya era pasarse.

Yo:”Carlos se puede saber que haces”

Carlos:”Estoy haciendo negocio” “Gracias a tu madre voy a ganar unos cuantos euros si estos pringados se animan”

Yo:”Tío no creo que esto esté bien””No te pases”

Carlos:”Que no me pase, jeje ¿pero has visto a tu madre? Esta desatada con tres pollas no va a ser suficiente… simplemente estoy buscando una solución”

Los chavales estaban callados observando atentamente la discusión entre Carlos y yo.

Carlos dejo de escucharme y me dio la espalda para seguir con sus negocios, yo le cogí fuertemente del brazo, haciéndole ver que no me parecía correcto, pero él se volvió hacia mí, su mirada era dura y severa, me intimido y no me quedo otra que soltarlo.

Entonces uno de los chavales se acerco a mí.

Chaval: “¿En verdad esa mujer es tu madre?”

Yo lo mire pero no dije nada, cuando fui a contestar Carlos se me adelanto.

Carlos:”desde luego que es su madre, y gracias a él podemos disfrutarla”

Esas palabras fueron como cuchillos para mí, me sentí humillado y avergonzado, pero más cuando el chaval que me había preguntado le pregunto a Carlos cuanto por poder disfrutarla.

Carlos lo miro y le dijo que por ser el primero y el más valiente gratis, colócate detrás de mi colega y cuando acabe, ya sabes disfruta.

Esto pareció ser el acicate para que seis o siete mas previo pago de 50€ se apuntasen y rápidamente se colocasen detrás de su amigo haciendo una fila, y así uno tras otro disfrutaron de los orificios de mi madre mientras vi como Carlos y Fernando se repartían el dinero y no perdían detalle de lo que ocurría, satisfechos y orgullosos de que su negocio fuese como habían planeado.

Yo con una erección de caballo y completamente avergonzado no podía dejar de mirar, sentía como los chavales clavaban su mirada en mi mientras, disfrutaban del hermoso cuerpo casi inerte de mi madre, esas miradas las sentía como puñales, y ver esas sonrisas en sus rostros me quemaban y humillaban a partes iguales.

Cuando los chavales acabaron con mi madre, Carlos cogió a mi madre y la bajo en volandas, estaba agotada, apenas se tenía en pie ni podía abrir los ojos, fueron a la barra y le pidieron que llamasen a un taxi.

Al cabo de diez minutos el taxi que habíamos pedido apareció, mi madre era un cuerpo inerte, que difícilmente podía andar, sus muslos estaban pringosos, podía ver cómo le resbalaban goterones de semen por la cara interna de sus muslos.

Carlos metió a mi madre como pudo y me dijo que me pusiera delante, mientras Fernando y el se sentaban atrás y colocaban a mi madre en medio, mi madre iba dormida, su estado era lamentable.

El taxista era un hombre mayor de unos cincuenta y muchos, gordo y feo, cuando miro hacia atrás para preguntar por la dirección pude ver como los ojos de este se abrían como platos, deduje que mi madre le había impactado y no le di importancia.

Carlos le dijo la dirección y este arranco, pero me fije que no dejaba de mirar hacia atrás y eso me mosqueaba, en un principio me daba bastante apuro mirar hacia atrás, algo me decía que no me iba a gustar, pero al ver como ese viejo verde clavaba su mirada en el espejo me anime a mirar, y nuevamente quede impactado, ese par de cabrones tenían a mi madre completamente espatarrada, con la falda en la cintura y cada uno tenía en sus piernas una de las piernas de mi madre, dejando al taxista unas vistas espectaculares.

Fernando a modo cuchara le sacaba a mi madre goterones de semen, para dárselos a chupar después, mientras Carlos le había sacado uno de los pechos de su top y lo mordisqueaba a su antojo.

Por un segundo la mirada del taxista y la mía se cruzaron, ambos estábamos sorprendidos y excitados, pero no dijimos nada.

Vi como una sonrisa maliciosa se dibujaba en el rostro del taxista y colocaba el espejo retrovisor de tal forma que pudiese contemplar todo lo que estaba pasando en la parte de atrás de su taxi.

Carlos me dio la puntilla cuando le pregunto al taxista.

Carlos:”Una pregunta señor, ¿Está usted casado?”

Taxista:”Viudo, desde hace 10 años”

Carlos:”Entiendo que entonces estará necesitado de hembra ¿No?”

Taxista:”No lo sabe usted bien”

Carlos:”que le parecería cobrarse el servicio con esta hermosa mujer”

El taxista paro el coche de inmediato y miro hacia atrás, como escrutando si estaba hablando enserio o le estaban tomando el pelo.

Carlos: “Si quiere es suya” “Sin prisas y sin límite”

Taxista:”Quien es”

Carlos:”La madre del que tiene adelante” “Nuestra puta”

Nuevamente me atacaba y me hacía sentir violento, el taxista me miraba fijamente como valorando si lo que acababa de oír era cierto o no.

Carlos:”Venga, díselo”

Yo con un hilillo de voz le dije que si, mientras movía mi cabeza afirmativamente sin poder mirarlo por la vergüenza que me provocaba.

Carlos:”No muy lejos de la dirección a la que vamos a un par de manzanas tiene un par de naves abandonadas, si acepta sería un buen lugar para cobrarse el viaje”

Taxista:”Y que le pasa a ella, porque no dice nada”

Carlos:”Esta cansada, se ha pasado con el alcohol y no está acostumbrada a salir”

El taxista no decía nada, miraba atrás observando a mi madre mientras valoraba la oferta, y tras unos segundos que a mí se me hicieron eternos decidió aceptar.

El taxista arranco y efectivamente llegamos a unas naves que parecían estar abandonadas, en las que no se veía un alma, nosotros nos bajamos del taxi mientras el taxista se pasaba a la parte de atrás junto con mi madre.

El viejo se relamía mientras sobaba las tetas de mi madre, su cara se desencajaba fruto del deseo y la pasión, seguramente ese capullo no habría catado una mujer tan buena como mi madre en su vida.

Vi como le separaba las piernas y colocándose encima de ella, comenzaba a mover sus caderas, mientras sacaba las tetas de mi madre fuera del top para introducirse sus pezones en la boca y succionarlos con deleite y mordisquearlos con pasión, en algún mordisco se excedió ya que hizo que mi madre refunfuñase, pero este no le hizo ningún caso y siguió a lo suyo.

No tardo mucho en correrse, y tras un rato en el que continúo jugueteando con los pechos de mi madre se aparto ya con la polla fofa y se subió los pantalones, con una sonrisa y una mirada perversa me miro y me felicito por lo hermosa y lo rica que estaba mi madre, para después indicarnos que nos montásemos para llegar a casa.

Una vez en casa vi que el taxista le entregaba a Carlos una tarjeta, supongo que el muy cabron esperaba poder volver a follarse a mi madre en un futuro.

Ya en casa Carlos llevo a mi madre en volandas hasta su habitación, pero antes invito a Fernando a quedarse, yo estaba alucinado, esos dos estaban confabulados y no me hacia ni pizca de gracia, y menos ver el estado tan lamentable en el que había acabado mi pobre madre.

Una vez le quito la ropa y la metió en la cama Carlos salió al salón donde nos encontrábamos Fernando y yo hablando.

Fernando no paraba de decirme lo majo y agradable que era Carlos, mientras yo le recordaba lo mal que le caía no hacia tanto.

Carlos:”Bueno campeones, que tal el día” “Que os a parecido”

Fernando:”Espectacular, de lo mejor de mi vida””Que pasada, ni en mis mejores sueños”

Carlos:”Pues esto no ha hecho más que empezar, si aquí el amigo nos ayuda y nos cubre podemos disfrutar de una puta sin igual”

Vi como ambos me miraban de manera expectante y con una sonrisa triunfal a la espera de mi respuesta.

No entendía muy bien qué es lo que querían de mí ni que podía hacer yo.

Yo:”Pero y que es lo que puedo hacer yo..” “Mi madre esta a vuestra entera disposición”

Carlos:”Por tu madre no te preocupes de eso me encargo yo, pero te necesito para que tu padre no se entere, y siga sin enterarse de nada” “Si de repente tu madre se va siempre conmigo, lo lógico es que tu padre dude y acabe enterándose y si se entera se acaba el chollo”

Yo:”Y si me niego” “Que te hace pensar que yo quiera ayudarte”

C arlos:”Sabes de sobra que tu madre no va a parar, y entonces tú saldrías de la ecuación, y nosotros no vamos a dejar pasar la ocasión de disfrutar de una mujer como tu madre” “Y si tu padre se entera se le rompería el corazón, y entonces ¿Qué pasaría? ¿Tu padre seguiría con tu madre? Y el sentimiento de culpabilidad caería sobre tu conciencia” “¿Realmente quieres eso?”

Me jodia como tenía todo controlado, no dejaba nada a la improvisación, y lo peor de todo es que  Fernando estaba expectante callado, viendo todo lo que pasaba en esa sala, no me hacia ni pizca de gracia que esos dos capullos se llevasen tan bien, y menos que tuviesen el mismo objetivo que no era otro que disfrutar de mi madre.

Yo:”Solo aceptare si estoy al tanto de todo, quiero participar, y saberlo todo”

Carlos:”Perfecto” “Pero tienes que entender que en este juego somos tres y tu madre, se hará siempre lo que decida la mayoría”

Yo:”Ok acepto pero si siento que me estáis dando la vuelta se acaba, si creo que no me sois sinceros se acaba””siempre sin que mi padre sufra y sin que mi madre salga dañada, y con su consentimiento” “Esto último del taxista no me ha gustado nada..””Mi pobre madre ni se ha enterado””Habéis aprovechado su estado para venderla como una puta barata..”

Carlos:”Esta bien, a partir de ahora somos socios, los tres por lo tanto creo que es justo que sepas lo que ha pasado, como muestra de confianza”

Yo estaba confundido, ¡qué había pasado¡¡Que me había perdido¡, que es lo que me iba a contar que yo no sabía, y porque se ponía tan serio.

Carlos:”A ver cuando estuvimos en la chupiteria, no sé si te fijaste que traje dos cocteleras, nosotros bebimos de una pero tu madre siempre bebió de otra, en esa le metimos un poco de coca que le compre al camarero con unas pastillas que me aseguro que calentarían a un muerto y las mezclamos para dárselas a tu madre””La idea surgió porque queríamos hacer un trió con ella, y como ella parece no mezclarnos pensamos que si estaba aturdida y excitada la cosa seria más sencilla, pero la cosa como has visto se nos ha ido un poco de las manos y paso lo que paso”

Yo:”Joder Carlos eres un cabron, con esa mezcla podías haberte cargado a mi madre en qué coño pensabas, acaso no has conseguido todo de ella sin necesidad de drogarla..”

Fernando:”Tío no me negaras que ha sido una pasada”

Yo:”Ya vale, por favor no mas drogas, todo siempre consensuado y con el beneplácito de mi madre” “Joder capullos”

Ambos se miraron y a regañadientes aceptaron mis condiciones.

Yo:”Venga de verdad entre los tres sabéis de sobra que podemos hacer lo que queramos, mi madre está dispuesta a todo, no es necesario que usemos nada de lo que luego nos podamos arrepentir””La voluntad de mi madre es débil en cuanto al sexo se refiere””Y lo sabéis igual que yo”

Tras esto nos fuimos a la cama, Fernando y yo dormimos juntos, mientras Carlos se fue a su habitación dejando a mi madre sola en la otra habitación.

Esa noche la verdad es que dormí muy poco recordando todo lo que había pasado, hable con Fernando, este estaba fuera de sí alucinado de lo que había pasado ese día y estaba claro que Carlos lo había impactado, esa confianza ese saber hacer con mi madre, había nacido un ídolo para mi amigo y eso me daba mucho miedo, no paraba de comentarme lo que le había gustado de Carlos, lo que le había sorprendido mas y todas las cosas que le gustaría hacer con mi madre.

Al día siguiente cuando me levante Fernando seguía dormido así que tras ir al baño me fui a la cocina para ver si podía desayunar, cuando llegue estaban Carlos y mi madre, la verdad es que ambos tenían mala cara, los salude y les pregunte que tal.

Carlos con una sonrisa me indico que le dolía la cabeza, y mi madre me dijo que le dolía todo el cuerpo que no recordaba casi nada de lo que había pasado desde la cocteleria, que tenia lagunas.

Vi como Carlos se sonreía por lo bajini pero no dijo nada y yo tampoco.

Cuando salió Fernando estaba risueño, y feliz, estaba claro que no tenia resaca ni nada por el estilo, mi madre al verlo tan feliz hizo referencia a la juventud.

Fernando no se corto y le dijo que su felicidad no era por su juventud sino por lo feliz que le había hecho esa noche, mi madre se sonrojo y miro de soslayo a Carlos que la miraba de forma divertida.

Carlos comento que si nos parecía bien darnos un baño antes de comer, todos aceptamos y subimos a nuestras habitaciones para cambiarnos.

Una vez me puse el bañador y cogí mi toalla fui a la habitación de mi madre, necesitaba hablar con ella, pero justo en ese momento salía también de su habitación y nos cruzamos en el pasillo.

Estaba radiante, el bikini que había elegido para la ocasión, resaltaba ese cuerpo hecho para el deseo, el bikini era de dos piezas color azul marino, resaltaban ese color aceitunado que ya tenía mi madre, la parte de arriba  los tirantes iban atados al cuello con una banda ancha en la espalda más firme y con esa forma de V le hacían un escote muy apetitoso y deseable, y la parte de abajo era una braguita con dos lazos laterales lo que hacían resaltar ese vientre plano y unas piernas infinitas.

De esa guisa mi madre se disponía a meterse en una piscina con tres lobos hambrientos, la verdad es que viéndola nada bueno podía pasar o si.

Mire para atrás y vi que estábamos solos, así que cuando estuvimos uno frente a otro le pregunte.

Yo:” ¿Mama, que estás haciendo?”

Vi como mi madre me miraba y poco a poco se le iba borrando la sonrisa de la cara.

Mama:”Ir a tomar el sol, ¿Te parece mal?”

Yo:”Sabes que no me refiero a eso” “¿De verdad no te acuerdas de lo que paso anoche?””Y qué me dices del metro, o del concierto, ¿Tampoco te acuerdas?”

Vi como mi madre se sonrojaba y apartaba la mirada, pero yo no pensaba dejarlo, estaba harto.

Yo:”Dime mama, ¿A que estamos jugando?”

Mama:”Hijo de verdad no me agobies, cual es el problema, ¿acaso tu no lo disfrutas también?”

Yo:”Si mama lo disfruto, no te voy a mentir, pero creo que se nos está escapando de las manos, bien que metamos en el juego a Fernando, pase lo de Carlos, pero meter a desconocidos, no se fuera de casa no me importa tanto, pero en el pueblo..””Joder y si se entera papa””lo destrozaríamos”

Mama:”Hijo lo siento, no lo hago a posta, ni mucho menos a mala fe o por fastidiar a tu padre, espero que eso lo tengas muy claro, quiero muchísimo a tu padre no tengas ninguna duda”

Mi madre se estaba sincerando, parecía que  le ofendía que dudase de sus sentimientos hacia mi padre, y me lo quería dejar muy claro y vaya si lo hizo, reconozco que ese arrebato justificando lo que sentía por mi padre me dio mucha tranquilidad y se lo agradecí, pero lo siguiente me dejo helado, no lo esperaba.

Mama:”Pero tampoco puedo negarte que hay momentos que siento que pierdo los papeles que no me puedo controlar y tampoco tengo claro que lo quiera controlar, un torrente de emociones y sensaciones me arrastra y siento como pierdo la cabeza, siento como en mi interior aflora un sentimiento primitivo que no puedo sofocar, el morbo y la excitación me desborda y quiero más, es como una droga y ahora mismo estoy con todo el mono, no puedo desengancharme”“Tengo claro que para mí solo es sexo y estoy disfrutando de sensaciones nunca antes vividas, ni con tu padre ni con nadie, siempre he sido fogosa y caliente, pero llevo muchos años reprimiendo esos sentimientos y ya vale, si no puedo satisfacerlos con mi marido tendré que buscar soluciones, siempre que él no se entere ni sufra pienso seguir experimentando y me gustaría que con tu consentimiento, ya que el saberte cerca me da cierta tranquilidad”

Tras este epilogo por parte de mi madre se hizo un tenso silencio entre ambos, yo no daba crédito a lo que acababa de oír, no pensé que mi madre lo tenía tan claro, estaba desatada y para nada iba a dejarlo estar muy al contrario era como una chispa en mitad del secarral.

Yo:”Mama me alegro que lo tengas tan claro, pero sabes que hay abajo te esperan solo para aprovecharse de ti, ¿verdad?””No quieren otra cosa que disfrutar de ti, para ellos solo eres un objeto sexual, te quieren para su disfrute personal”

Mama:” ¡Me parece genial¡””Yo tampoco busco otra cosa, solo quiero eso disfrutar del sexo sin malos rollos, experimentar siempre de manera sana”

Yo:”Vale, siempre que tu estés de acuerdo yo también jugare, pero no quiero ser tu hijo, quiero que me trates como un hombre””quiero poder decidir y ser yo quien lleve la voz cantante, si veo que algo no me gusta dejarlo”

Pude ver como a mi madre conforme oía lo que le decía se le dibujaba una sonrisa enorme y preciosa, hasta que termino por abalanzarse sobre mí y entre besos y arrumacos me  susurro algo al oído.

Mama:”Me parece perfecto tu serás mi chulo””el que me protegerá y cuidara de su putita”

Oírla decirme eso entre susurros provoco que mi polla se endureciese.

Yo:”Y quien te follara siempre que quiera”

Y tras esto dándonos un beso apasionado, como sello de nuestro acuerdo le dije que bajase por delante ya que necesitaba ir al baño.

Lo que no quería era bajar con semejante erección, estaba taquicardico, por lo que fui al baño y me masturbe, no tarde mucho en correrme fruto de la excitación que tenía después de la conversación con mi madre, pero agradecí poder recobrar un poco la normalidad.

Cuando baje vi que Fernando y Carlos estaban dándose un chapuzón, la verdad es que el calor apretaba y apetecía, mientras mi madre se tostaba al sol, deje la toalla frente a mi madre y fui directo a darme un baño y unirme a mis nuevos socios.

Fernando:”Joder macho ya te ha costado cambiarte ¿No?”

Yo:”A ver campeón no querías realizar un trió con mi madre… pues lo estoy preparando todo para hoy que me dices”

Vi como se miraban entre ellos y tenía toda su atención, la verdad es que esa sensación era algo nuevo para mí, pero me estaba gustando sentirme así.

Carlos:”Y como piensas hacerlo”

Yo:”Dejármelo a mí y pronto disfrutareis como creo que no lo habéis echo nunca””Tan solo seguirme la corriente”

Pude ver como sus caras pasaban del asombro por mi actitud y chulería a una alegría y excitación propia de pensar que si lo conseguía disfrutarían como nunca antes lo había hecho.

Entonces salí de la piscina y me seque frente a mi madre, esta parecía estar adormecida, fruto del calor que allí hacia, por lo que decidí echarle un poco de agua fresca, cuando esta sintió el frescor del agua se sobresalto.

Mama:” ¿Pero qué haces?”

Yo me sonreí y ella al ver que era yo se sonrió.

Mama:” ¡Serás tonto¡”

Y mientras decía esto sentí que algo llamaba la atención de mi madre, al girarme para ver lo que era vi que venían hacia nosotros tanto Carlos como Fernando, y cuando me fije en este ultimo observe que no llevaba bañador, iba en calzoncillos tipo bóxer y al ser blancos se le trasparentaban de forma evidente toda su herramienta que para colmo estaba semi erecta, seguramente por lo que les había comentado anteriormente.

Yo:”Pero Fernando ¿Qué bañador es ese?”

Mi madre se sonreía sin dejar de mirarlos, la verdad es que ambos tenían unos cuerpos hechos para el deseo, esculpidos seguramente por horas de gimnasio.

Fernando:”Chico yo es que me había preparado para ir a un concierto y claro con el calor que hace... ya me dirás, esto o en pelotas, y tampoco era plan”

Mama:”umm pues por mí no lo hagas eee””Como más cómodo estés”

Fernando:”Joder pues si no os importa igual si que me quedo en pelotas porque son los únicos calzoncillos que tengo así que o luego voy sin ellos o los pantalones los voy a mojar y paso que la peña se piense que me he meado encima”

Mientras decía esto miraba de forma coqueta a mi madre, como esperando su contestación.

Mi madre se bajo un poco las gafas hacia abajo y con una sonrisa coqueta le contesto.

Mama:”Fernando hijo, como más cómodo estés, tú mismo, como si yo no estuviese aquí”

Carlos:”Joder pues si no os importa yo suelo tomar el sol en pelotas, es que odio las marcas en el cuerpo, así que si no os importa yo también me lo voy a quitar”

Aun no había terminado la frase que tanto Carlos como Fernando se había quitado los bañadores y estaban completamente desnudos a escasos centímetros de mi madre, que los miraba sin pestañear ni decir nada.

Fernando fue un poco mas halla y con la escusa de que se le secaran los calzoncillos antes de irse se acerco hasta donde estaba mi madre y los coloco en la tumbona mientras su polla se balanceaba a escasos centímetros de la cara de mi madre, esta al verlo se aparto y le dio un cachete en el culo mientras de forma divertida le recriminaba que le pasase el miembro tan cerca.

Carlos viendo la situación también se acerco y le pidió si podía darle un poco de crema solar para evitar quemarse, cuando mi madre se giro con el bote de crema para darle la crema se encontró con el pollon de Carlos a escasos centímetros de su cara.

Vi como mi madre se sonrojaba y se incorporo para darle la protección, fue entonces cuando vi como los pezones de mi madre se le marcaban en la tela y estaban completamente duros.

Carlos le pidió que le diera bien por todas las partes incluido el culo, ya que según él era una zona sensible al sol y no quería quemarse, a mi madre la sentía nerviosa, pero se deleito dándole la crema a Carlos por todo el cuerpo.

Cuando termino, Carlos y Fernando se colocaron delante de mi madre completamente desnudos y comenzaron a hablar como si mi madre no estuviera allí mismo, vi como los cabrones se tocaban la polla de forma grosera probablemente buscando excitar a mi madre, que aunque llevaba las gafas puestas estaba seguro de que no estaba perdiéndose ningún detalle.

Yo estaba detrás, observándolo todo, y me quede alucinado cuando pude ver como la braguita del bikini estaba más oscura fruto de la humedad que tenía mi madre con la situación, momento que decidí aprovechar para culminar mi plan.

Me levante y le dije a mi madre si quería que le pusiera un poco de crema que llevaba mucho tiempo bajo este sol abrasador no fuera a quemarse.

Mi madre agradecida se incorporo para coger el bote y pasármelo, yo lo cogí y le pedí que se sentara en la tumbona, ella se sentó a horcajadas sobre la tumbona y yo me senté tras ella.

Mi madre me dio las gracias y se relajo esperando que le echara la crema solar, pero antes de echársela aproveche para desanudar el cordel del sujetador del bikini con la escusa de poder darle mejor la crema.

Mi madre ante mi acción se asusto un poco, pero hábilmente coloco una mano en el bikini para evitar que le cayese y que nuestros compañeros allí presentes le pudiesen ver los pechos desnudos, ya que ambos imaginando lo que podía pasar estaban expectantes sin apartar la mirada de nosotros.

Yo:”Mama que pasa, ¿ahora tienes vergüenza?””Cuantas veces has hecho top less en casa para evitar las marcas” “Te me vas a volver remilgada ¿ahora?””Y más cuando tienes a esos dos completamente en bolas””No seas cría, que estas entre adultos”

Y mientras le decía esto cogía la parte delantera de su bikini para tirarlo al suelo, mi madre al verse en top less delante de Carlos y Fernando se puso colorada, yo disimuladamente me fije en su entrepierna y pude ver como la mancha de humedad crecía y se hacía más evidente, estaba claro que se estaba excitando.

Hice varios gestos a mis colegas que rápidamente entendieron y miraron con todo el descaro a su entrepierna, cuando vieron lo mismo que yo, vi como sus pollas se ponían morcillonas, incluso se las tocaban sin disimulo mientras yo le daba la crema solar a mi madre por hombros y espalda.

Fue ella misma la que se embadurno bien los pechos mientras mis colegas no perdían detalle, ella al verse observada los provocaba dándoselo de forma suave y recreándose en los pezones con la escusa de que era la zona más sensible.

Al cabo de un rato cogí sus hermosos pechos por la base y los agite para que botasen y mirando a mis colegas les pregunte.

Yo:”Enserio, habéis visto alguna vez unos pechos mejores que estos””A que son un par de tetas impresionantes”

Mama:”Venga hijo no seas tonto””Seguro que tienes miles de amigas con las tetas mejores que yo””Más duras y turgentes que las mías”

Yo:”Pero mama estas de coña”” Ya quisieran muchas tener unas tetas como las tuyas”

Y diciendo esto la cogí por una de sus manos y la hice incorporarse para hacerla girar sobre si misma mientras los presentes observábamos ese cuerpazo.

Mi madre sonreía de forma nerviosa, yo aproveche para darle un cachete cariñoso en uno de sus duros glúteos, haciendo que mi madre soltase un gemidito, y la acerque hacia mí, nuestras bocas se quedaron a escasos centímetros, la tensión sexual del momento era máxima.

Yo:”Bueno mama, todos los aquí presentes sabemos que te hemos catado y tu a nosotros, pero siento curiosidad y me gustaría saber con cual de nosotros te quedarías, quien te hace disfrutar más, cual es el mejor”

Ante esta pregunta mi madre se sobresalto, dejo de reírse y primero me miro a mi sorprendida y después a los otros dos, estos al igual que mi madre se quedaron de piedra ante la pregunta que le había echo a mi madre y desde luego que estaban expectantes ante la respuesta de esta.

Mi madre con un hilillo de voz y bastante ruborizada y cortada me contesto sin mirarme a la cara, con la mirada perdida en el infinito.

Mama:”Hijo, no sabría decirte, sois diferentes, todos sois muy buenos en la cama y os complementáis muy bien””me hacéis disfrutar mucho y no sabría quedarme con uno de vosotros.”

Yo:”Perfecto, pues no se hable más y veamos que somos capaces de hacer los tres juntos”

Y mientras decía esto mire a mis colegas para ver como en sus rostros se dibujaba una mueca de deseo, placer e incluso incredulidad, mientras se incorporaban con sus pollas en la mano y se acercaban hasta nosotros, mientras mi madre seguía inmóvil frente a mí.

Yo le susurre a mi madre que se relajase y se dejase llevar, que lo iba a disfrutar como nunca, mientras cogía las tiras de su braga y dando un tirón se desanudaba dejando caer la ultima prenda que faltaba para que estuviese completamente desnuda..

Ahora mi madre era presa de tres sátiros que no deseaban otra cosa que perforarle todos y cada uno de sus maltrechos orificios.

Mi madre se aferro a mí, nos unimos en un tórrido beso en el que enlazamos nuestras lenguas, mientras Carlos se colocaba detrás de ella y le sobaba el culo y coño a placer, y Fernando tampoco perdía el tiempo y le cogía una de las manos de mi madre para posarla en su polla, esta al sentirla comenzó a masturbarla suavemente.

Ver como mi madre era manoseada por tres tíos entre ellos su hijo, como poco a poco la rigidez inicial de mi madre pasaba a una relajación e incluso excitación, como sus resistencias saltaban por los aires y se dejaba llevar por la lujuria, me encendían y me hacía sentir poderoso, me encantaba esta nueva situación, ser el cabecilla, el líder, el que dictaba las normas, me gustaba y excitaba a partes iguales.

Yo: “Venga chicos, esto ya esta apunto, vamos a un sitio donde estaremos más cómodos”

No hicieron falta más palabras, Carlos la cogió por la cintura y se la echo al hombro, mi madre dio un chillido y una risilla nerviosa se le escapo.

Mama: “Cuidado Carlos no me tires”

Nos dirigimos los cuatro hasta la habitación de Carlos, una habitación amplia y con una cama enorme, además de tener un baño interior con una ducha con hidromasaje.

Una vez en la habitación nos quitamos todos la ropa, ahí estábamos tres tíos completamente desnudos con nuestras pollas completamente erectas en nuestras manos, frente a mi dulce y hermosa madre, que no dejaba de mirarnos fijamente, hipnotizada como nos tocábamos nuestras pollas.

Yo:”Venga chicos, ha llegado el momento, y veo que las herramientas están en su punto” “Carlos túmbate en la cama” “Tu mama, súbete encima de el”

No daba crédito todos hacían lo que les ordenaba sin protestar, esto era nuevo para mí y muy gratificante.

Vimos como Carlos se tumbaba boca arriba y como mi madre cogiéndole la polla la apuntaba a la entrada humedecida de su coño y se dejaba caer sobre él para enterrarse en sus entrañas toda esa barra de carne dura y caliente, mientras gemía y nos miraba fijamente a Fernando y a mí, era evidente que buscaba excitarnos, provocarnos y lo cierto es que lo estaba consiguiendo.

Su cara era un poema, intentaba mantener el rictus serio pero sin mucho éxito ya que su cara era una mueca de placer, su mirada lujuriosa la hacían más deseable, ver botar esos hermosos y duros pechos con sus pezones duros y erectos, mientras la polla de Carlos aparecía y desaparecía cada vez más rápido, lo que provocaba que mi madre acelerase su respiración, parecía que le faltase el aire, varias veces se relamió de forma sensual.

Le di un codazo a Fernando y este se coloco delante de mi madre, ofreciéndole su polla para que se la chupara, esta al verlo se abalanzo sobre ella como si le fuese la vida, en ese momento fue Carlos el que aprovecho para follarsela, mientras mi madre se dedicaba con deleite a la polla de Fernando.

Entonces yo me subí a la cama, le dije a Carlos que parase, este asombrosamente me hizo caso y paro, entonces salive bien mi dedo índice y se lo introduje en su culo, no sin dificultad, comencé a jugar con el dentro, escupí varias veces y juguetee con mi lengua en su orificio trasero, lo que le provocaba espasmos, tras un rato así le introduje otro dedo mas, podía sentir su estrechez, por lo que me dedique a ese agujerito un buen rato, hasta que decidí que ya estaba bien y sustituí mis dedos por mi polla.

No fue tarea fácil introducírsela, y de hecho mi madre cuando sintió entrar el glande se saco la polla de Fernando de la boca y dio un chillido que nos asusto, sin embargo no hice mucho caso y seguí empujando hasta que sentí como mis pelotas chocaban con su pelvis.

Era una sensación indescriptible, ver ese culazo en forma de cereza partido por mi polla hasta las entrañas y sentir la polla de Carlos solo separada por una fina membrana hacia que me excitase sobre manera.

Mi madre sin embargo no parecía disfrutarlo mucho, ponía una de sus manos en mi pecho y nos pedía que lo hiciésemos con cuidado, mientras su respiración era entrecortada y acelerada.

Estuve inmóvil un buen rato al igual que Carlos, hasta que fue mi madre la que poco a poco se fue relajando y comenzó a mover suavemente sus caderas para sacar y penetrarse nuevamente una y otra vez.

Fernando al verlo, la cogió por los pelos y le introdujo la polla, solo que ahora no era ella la que chupaba sino Fernando la que se follaba su boca de forma violenta y rápida, mientras Carlos inmóvil desde abajo se aferraba a sus pechos y los sobaba, mordisqueaba y pellizcaba a su antojo y sin ninguna oposición, mientras yo me aferraba a su cadera para comenzar a follarla en un principio suave, rítmicamente, la sensación era simplemente fascinante, podía sentir como su culo se cerraba y se volvía a dilatar en cada envite, hasta que comencé a incrementar el ritmo.

La situación era dantesca, la cama gruñía y amenazaba con hacerse añicos, mientras todos los orificios de mi madre estaban siendo profanados al mismo tiempo y de forma brutal.

Al cabo de un rato Fernando se corrió en la boca de mi madre, Carlos en sus entrañas y yo en su recto, fue delicioso una experiencia que habría que repetir.

Tras unos segundos en los que permanecimos inmóviles, nos salimos de mi madre, mientras ella se quedaba inmóvil en la cama, vi como tosía, tenía toda la cara congestionada, llena de babas y semen, sus ojos enrojecidos, me senté a su lado y le pregunte que tal estaba, ella no decía nada, y me preocupe, ¿Nos abríamos pasado?

Mire su cuerpo vi como su culo y coño estaban deformados y sonrojados producto de la caña que le habíamos metido e incluso una gotita de sangre salía de su culo, rojizo por las cachetadas que le había dado durante la follada.

Se limpio la cara con las sabanas y se volvió hacia mí, me regalo la mejor de sus sonrisas y me dijo que había sido impresionante, pero que me había pasado un poquito con la enculada, que ahora estaba dolorida.

Le pedí perdón y la bese tiernamente en los labios, justo en ese momento salieron Carlos y Fernando del baño comentando lo bien que lo habían pasado, que era indescriptible y que había que repetirlo.

Mi madre les regalo una sonrisa a cada uno pero les dijo que por esta semana ya valía que estaba muy cansada y dolorida.

Carlos y Fernando parecieron disgustarse, no esperaban esa respuesta.

Carlos:”Jooo yo quería probar ese culito..”

Fernando:”Toma y yo”

Yo:”Bueno chicos ya está bien, para la próxima ya habrá ocasión.., ahora nos tenemos que ir a casa y mi madre está cansada y dolorida”

Carlos:”Y para cuando, porque yo ahora no puedo pensar en otra cosa que no sea ese culito..”

Yo:”Bueno tranquilos, lo organizamos y os aviso.”

Me fije como tanto Carlos como Fernando hacían muecas, signo evidente de que no les estaba gustando o haciendo gracia lo que oían, pero a partir de ahora era yo y solo yo quien decidiría cuando cómo y con quien por mucho que les fastidiase.

Así pues mi madre se ducho se arreglo y cogimos el coche para volvernos a casa, vi como mi madre andaba con cierta dificultad e incluso como al sentarse en el vehículo se removía inquieta y su cara reflejaba síntomas de dolor.

Ya de camino a casa y preocupado por su estado le pregunte qué tal, como estaba y que le había parecido el fin de semana, ella me miro, su cara reflejaba cansancio y dolor, pero aun así me regalo una enorme sonrisa y me respondió.

Mama:”Cariño, el fin de semana ha sido de matrícula, pero verte gestionar y dominar la situación ha sido realmente fantástico.”

Y dándome un beso en la mejilla dio por finalizada la conversación y se durmió hasta llegar a casa.

De vuelta a casa mi cabeza iba a mil, la situación había cambiado radicalmente, si antes era un mirón y solo podía disfrutar de las migajas ahora era yo quien mandaba y ante mí se presentaba un futuro prometedor y lleno de posibilidades, y eso hacía que me excitase, mi cabeza no podía parar imaginando mil y unas situaciones.

Espero que les haya gustado y se aceptan ideas.