Mi mayor secreto

Descripción de mi primer ciber sexo y encuentro lésbico

¡Hola! Saludos a todos

🙂

D

e ante mano agradezco nuevamente sus mails, y sobre todo que sean tan respetuosos es algo que lo agradezco de todo corazón, denme paciencia para seguir

contestándolos

ya que son muchos.

Esto que estoy próxima a redactar es uno de mis

secretos

más

grandes, es algo que

jam

á

s

a nadie le he dicho, ni siquiera a esa amiga que sabe

absolutamente todo de ti.

Ten

í

a

la edad de 15

años,

segu

í

a

en mi etapa de secundaria, esa cuando te la

viv

í

as

pegado a la computadora por estar chateando con tus amigos, recuerdo que llegaba del colegio y

ten

í

a

l

í

nea

directa a la oficina de mi casa para

pose

s

ionarme

de la computadora y no soltarla hasta las 6 de la tarde o

m

á

s

.

Un

d

í

a

no

s

é

c

ó

mo

fue exactamente, no lo

recuerdo

,

pero

apareci

ó

en mis

contactos una chica de Coahuila, no me

pareci

ó

raro porque me encantaba hablar con personas y

m

á

s

que no fueran de mi ciudad o país; nos presentamos, ella era 3 años mayor que

yo

,

pero aun

as

í

siempre fue muy amable conmigo, nos hicimos muy buenas

amigas

y

habl

á

bamos

todos los

d

í

as

sobre

c

ó

mo

nos

hab

í

a

ido en

nuestro

d

í

a

de escuela, que

hab

í

amos

hecho y todas esas

tonter

í

as

de niñas

adole

s

centes

.

U

na tarde de charla, comenzamos hacernos preguntas con el fin de conocernos

m

á

s

í

ntimamente

, ella por su edad estaba

m

á

s

experimentada que yo, lo cual me agradaba porque

sabr

í

a

que ella me

ayudar

í

a

con cosas que no

entend

í

a

ya que la empezaba a ver como una hermana mayor (mi hermana

ten

í

a

su edad, pero en la

adole

s

cencia

jam

á

s

logramos llevarnos bien). Ella me preguntaba si alguna vez

hab

í

a

tenido un novio a lo cual yo conteste que

jam

á

s

, pero le

confi

é

que me gustaba mucho y me era muy placentero masturbarme y que cada vez que podía lo

hac

í

a

, en eso empezamos a contar nuestras experiencias y

c

ó

mo

es que nos gustaba hacerlo a cada una, a

m

í

me

ex

c

itaba

mucho hablar con ella porque me gustaba imaginarme como era hacer todo eso que ella

hac

í

a

, la charla ya estaba bastante subida de tono pero lamentablemente ambas ya

t

en

í

amos

que desconectarnos, quedamos que el

d

í

a

siguiente

despu

é

s

de la escuela nos

conectar

í

amos

para seguir con la

pl

á

tica

, ella me dijo "tengo una sorpresa para ti mañana" lo cual me

volvi

ó

loca,

mor

í

a

por que fuera mañana

as

í

que las

an

s

ias

me comieron todo lo que resto de la tarde, la noche y parte de medio

d

í

a

.

Llegue a mi casa, me despoje de uniforme,

com

í

y me postre en l

a

silla de la computadora para poder hablar con mi amiga, para mi mala suerte no estaba conectada aun y mis nervios estaban al mil por hora por saber

que

era la sorpresa que me iba a dar, trate de calmarme y me dispuse hablar con otros amigos de mi colegio; en eso brota una ventana y es ella, mi amiga, me saluda y casi inmediatamente le contesto y empezamos a ponernos al

d

í

a

con lo que nos

hab

í

a

pasado en la escuela,

no

p

uedo

m

á

s

y le digo que me diga que es la sorpresa que me tiene, que necesito saber ya porque siento que voy a estallar si no me dice, a lo cual ella me contesta con una risa y me pregunta si estoy sola, esa pregunta me dio un poco de

miedo

y me asombro a la misma vez, le  dije que no, mis papas estaban en casa y la oficina en donde yo estaba

dentro de su habitación, a lo que pregunte ¿porqué, que tiene que ver? Y me

dice que para que pueda enseñarme mi sorpresa no tiene que haber nadie cerca, leyendo eso me dio temor de que era lo que se trataba y ella me dijo que me tranquilizara que no era nada malo, que al contrario

ser

í

a

algo que me iba a gustar mucho.

Le

coment

é

que en unos 30 minutos mis papas

saldr

í

an

de mi casa y

estar

í

an

un tiempo fuera, y en lo que llegaban mis hermanos de sus

a

ctividades

tendr

í

a

unas 2 horas para estar sola. Esperamos mientras esto

suced

í

a

y ella iba preparando terreno para

despu

é

s

darme mi tan codiciada sorpresa,

segu

í

amos

con el jugueteo que un

d

í

a

anterior

ten

í

amos

,

platic

á

ndonos

experiencias y cosas que ambas en

alg

ú

n

momento

quer

í

amos

hacer

, hasta que

lleg

ó

el momento en el que mis padres salieron y le dije:

  • ¡Listo! Ya se fueron mis

papas,

¿

ahora si me puedes dar mi sorpresa?

Ella me dice que espere 2 minutos a lo que esos dos minutos me parecieron dos horas, hasta que noto que me envío un archiv

o el cual se estaba

descargando,

le

pregunte

qu

é

era lo que me

hab

í

a

mandado y ella me contestó:

  • E

s tu sorpresa,

á

brela

, es

para ti, la tome para ti

¿La tome para ti?, ¿eh? De que hablaba, ya no

entend

í

a

nada,

esper

é

a que terminara de cargar y ya estando lista la

abr

í

con cierto temor y curiosidad, mi adrenalina estaba al tope...  Era una foto... de su vulva... bastante descriptiva a lo que

a

ú

n

recuerdo, estaba completamente depilada y tomada de un

á

ngulo

que

ning

ú

n

detalle se

escapaba. Me quede petrificada

, no

pod

í

a

creer lo que me

hab

í

a

mandado, pero, me gustaba, su vulva se miraba

de color cálido

,

tan delicada, tan fina que casi hasta

pod

í

a

sentir que la estaba tocando

a

trav

és

de la pantalla del computador. Al no contestar

despu

é

s

de haber abierto la foto me pregunta ella "¿te agrado?", no p

ude

evitar y le dije: ¡

siiii

, y mucho!, "¿quieres

m

á

s

? Me contesto, y yo

respond

í

que

si a lo cual no tardo

m

á

s

de un minuto en volverme a enviar un archivo con otra foto, esta vez estaba en cuatro dejando ver parte de su vulva y ano y poniendo mucha

atenci

ó

n

en la foto se

pod

í

an

ver sus pechos colgando, era una

posici

ó

n

sin duda muy

ex

c

itante

, note como

r

á

pidamente

mi sexo

empez

ó

a palpitar

dici

én

dome

que era hora de ponerl

e

atenci

ó

n

a

é

l

, no repare en hacerlo, me quite mi pijama (que era lo que usaba cuando estaba en casa) y me quede en ropa interior para poderme tocar arriba de este.

Me

comenz

ó

a decir que la

pl

á

tica

de ayer la

hab

í

a

ex

c

itado

mucho y esa noche se

hab

í

a

masturbado pensando en todo lo que

hab

í

amos

hablado, que por eso

hab

í

a

tomado esas fotos. Me preguntó si yo

quer

í

a

o

pod

í

a

hacer lo mismo y no me

pareci

ó

mal idea, a lo que fui por mi

c

á

mara

a mi

habitaci

ó

n

, entre al baño, me

despoje

de mi ropa interior y me

abr

í

completamente de piernas

p

a

ra

tomarme una foto como la primera que ella me

hab

í

a

enviado,

jam

á

s

hab

í

a

visto una

gr

á

ficamente

mi vulva pero me encantaba verla

as

í

, todo eso era nuevo para

m

í

, a lo que me

ex

c

itaba

much

í

simo

, si se

pon

í

a

mucha

atenci

ó

n

en mi

fotograf

í

a

se

pod

í

a

notar como

hab

í

a

f

l

u

i

dos

de por medio a lo que ella lo noto

r

á

pidamente

y me dijo

  • "¿E

stá

s mojada

?" * Yo un poco apenada le dije "no lo

s

é

, tal vez"

  • Y me dice "

mmmh

que rico, que no te de pena, es normal, tu cuerpo

é

sta

respondiendo, para estar segura

deber

í

as

de meter tu mano y

che

c

ar

si estas

h

ú

meda

.

A lo que yo muy obedientemente hago, con mucha cautela comienzo a meter mi mano derecha a mi calzón y empiezo a bajar por toda mi rayita, para este entonces yo ya me

hab

í

a

masturbado muchas veces, yo

sab

í

a

que era lo que

segu

í

a

despu

é

s

de esto;

cerr

é

los ojos y mis dedos comenzaron a buscar una entrada para poder ir al interior de mis labios, y si, como era de suponerse estaba empapada, ella me pregunta:

  • E

lla: ¿sigues ahí?

¿te estas tocando verdad? * Y

o:

si, y tienes

raz

ó

n

estoy

muy

h

ú

meda * E

lla: ¡que rico

!,

¿

te

gustar

í

a

que

jug

á

ramos

a algo?

  • Y

o: ¿jugar? ¿A

qu

é

? * E

lla:

¿tienes

c

á

mara

cierto?, no lo

s

é

, podríamos ponerla y tocarnos un rato,

as

í

te

ver

í

a

yo a ti y

t

ú

a

m

í

que dices, ¿te gusta la idea? * Y

o: ¿es enserio? (pienso por un momento sin contestar nada y me decido,

pens

é

, que puedo perder, quiero verla, me

gustar

í

a

poder ver a alguien

toc

á

ndose

y porque no, que me vea a

m

í

tambi

é

n

, es mi amiga y la

cono

z

co

as

í

que no pasara nada) * E

ll

a: si

o

¿no quieres? * Y

o:

si, ¡

si quiero!

Dame un momento en lo que conecto

la

c

á

mara

A

mbas

esper

á

bamos

an

s

iosas

en lo que las

c

á

maras

se conectaban, al conectarse nos saludamos y todo eso, no era la primera vez que

habl

á

bamos

por

c

á

mara

, anteriormente lo

hab

í

amos

hecho para conocer nuestras caras.

  • E

lla: ¿

est

á

s lista

? Voy a quitarme mi blusa par

a ti, ¿

t

ú

te la puedes quitar para

m

í

? * Y

o: si, si claro (yo

ten

í

a

algo de pena ya que a esa edad mis pechos ya eran talla B y no era normal para una niña de

esa

edad

, claro, en aquellos tiempos) * E

lla: ¡

wow

! Estas de envidia, mira que pechos te cargas, seguro el que

sea

tu

novio se

ver

á

muy afortunado jajaja. * Yo: (morí de la pena)

mmmh

si vedad jeje

  • E

lla: ¿quieres ver algo

mejor? (en eso baja la

c

á

mara

y la pone directamente

enseñ

á

ndome

su

vulva), tengo tiempo

toc

á

ndome

, yo

tambi

é

n

estoy muy mojada * Y

o:

s

í

que

est

á

s

mojada

, pero no seas mala,

ens

é

ñame

como te tocas, quiero verte, ¿

s

í

? * E

lla: va,

est

á

bien, pero lo voy hacer con un poco de ayuda, te voy a enseñar mi secreto.

Y

o ya no me

sorprend

í

que me

di

g

iera

eso,

s

é

que a este punto todo

pod

í

a

pasar, pero a decir verdad si me

sorprend

í

jaja, me mostro algo que no

cre

erí

a

ver, es

m

á

s

, que no

sab

í

a

si quiera que

exist

í

a

, se trataba de un consolador.

  • Y

o: ¿eso es? ¿de juguete? ¿enserio?, ¡

wow

! ¿d

e

d

ó

nde

lo has sacado?

  • E

lla: es de mi mama, lo he encontrado en su

habitaci

ó

n

hace ya un par de meses y desde entonces me he masturbado con

é

l

, ¡un

d

í

a

tienes que

pro

b

arlo

, es lo mejor! * Y

o: ¡vaya que

s

í

!

Estando con su sexo expuesto a mi empieza a tocarse con su mano todo al

rededor

de su vulva, como para seguir

calent

á

ndose

, hasta que abre sus labios y comienza a pasar su dedo medio por toda su rayita, muy despacio... puede escucharse muy levemente que ella gime muy quedito, no

qui

s

e

decir nada para no avergonzarla y que se fuera a cohibir porque a ese punto no

quer

í

a

perderme de nada y que me dejara de

most

r

ar

ser

í

a

una nostalgia para

m

í

. Comienza a masajear su

cl

í

toris

y empieza a darle pequeños pellizcos lo cual puede notarse que se retuerce, recuerdo que su clítoris era mucho

m

á

s

grande que el

m

í

o

, estaba muy

h

inchado

y

de

color rojo, pero ella

segu

í

a

estimul

á

ndolo

para

despu

é

s

abrir sus labios y enseñarme todo su interior

  • E

lla: ¿te gusta lo que

ve

s

? * Y

o: ¡sí! (totalmente embobada)

  • E

lla: ¿y te

gustar

ía

estarme

toca

ndo

t

ú

? Porque a

m

í

s

í

me

gustar

í

a

estarte tocando a ti, tienes una conchita muy bonita, de color rosa y casi no tienes pelo, podría estarte tocando sin

ning

ú

n

problema, y porque no, hasta pasar mi lengua por tus labios,

ser

í

a

como darte un beso (y se río). * Y

o: (quede fría) a

m

í

tambi

é

n

me

gustar

ía

hacerte eso

(

a

este punto ya no

ten

í

a

ni idea de lo que

quer

í

a

o que

dec

í

a

o

si

realmen

t

e

lo

sent

í

a

o no) * E

lla: mira lo que voy hacer...

T

omo el consolador y se lo

lle

v

o

a la boca para chuparlo y

as

í

lo tuvo por un momento en su boca mientras lo

ensali

v

aba

, yo solo recuerdo estar con los ojos

m

á

s

abiertos que sus piernas y atenta a todo lo que pasaba, mientras

una de mis manos estaba

adentro

de mis calzones tocando todo mi sexo.

Despu

é

s

de unos 2 minutos saca el consolador de su boca y se lo

lle

v

a

entre sus piernas, lo pasa por en medio de toda

su

vulva

y pega un brinco diciendo...

  • E

lla: ¿te gusta mi panocha? ¿quieres ver lo que hago con ella?

E

n eso, toma el consolador y busca la entrada de su vagina para colocar la punta de este en la entrada, el

dildo

no era

mu

y

grande ni muy

pequeño,

era

de tamaño

est

á

ndar

y recuerdo bien que era de color rosa

transpa

rente. Al colocarlo en la entrada ella empieza a quererlo empujar para meterlo, a lo cual suelta un fuerte chillido

  • Y

o: ¿

est

á

s

bien? ¿te lastimaste? * E

lla: estoy bien hermosa, no te preocupes, siempre batallo para que entre

E

lla sigue

empuj

á

ndolo

para que entre y yo noto como su vagina se va abriendo para darle paso

a ese objeto de

pl

á

stico

, ya estando la mitad adentro ella empieza a moverlo de forma giratoria como para ir haciendo campo al resto, hasta que

empez

ó

a dar de

s

í

y

comenz

ó

a entrar un poco

m

á

s

(nunca le

entro t

odo).

  • Y

o: ¿no te duele?

  • E

lla: no linda, se siente "

mmmh

" super rico, el

d

ía

que tengas uno dentro

sabr

á

s

que se siente. * Y

o: ¿puedes moverlo

m

á

s

para

m

í

? * E

lla: claro, todo esto que estoy haciendo es para ti, dime que quieres que haga y si puedo lo hare * Y

o: me

gustaria

que te pusieras como la segunda foto que me mandaste (en 4) ¿puedes? ¿si, por fis?

E

lla obedientemente mueve la

c

á

mara

a un

á

ngulo

que me permita verla en 4 y cuidadosamente se acomoda sin que salga parte del consolador que tiene adentro y empieza a moverlo con el

cl

á

sico

"mete y saca" yo por mi lado mis dedos

est

á

n

que escurren por mis fluidos vaginales, y ya tan lubricada como estoy introduzco mi dedo

í

ndice

en mi vagina (no

sol

í

a

meterme cosas ni dedos por lo tanto me molesto un poco, pero quise seguir intentando

) y empiezo a moverlo poquito a poco de forma circular, mientras con la otra mano masajeo mi

cl

í

toris

.

  • E

lla: te quiero ver mientras te tocas, ¿me dejas?

A

comodo la

c

á

mara

para que pueda observar mi vulva.

  • E

lla: ¡que rica se te ve! tan jugosa, como para estar

chupand

o

todos los juguitos que

est

á

soltando. * Y

o:

¿enserio lo

har

í

as

? * E

lla: ¡claro! Te tengo mucha confianza y contigo si lo

har

í

a

, tienes una

panochita

tan rica como las

act

rices

de videos porno, chiquita, rosadita y apretadita, sigue

toc

á

ndote

para

m

í

,

ha

z

lo

despacio, siente lo rico que se mueven tus dedos, ahora ve a tu

cl

í

toris

y

mu

é

velo

un poco

m

á

s

r

á

pido

,

mmmh

si, que rico has de estar sintiendo verdad...

  • Y

o:

síííií

, me encanta, quiero mas * E

lla: sigue hermosa, no pares, hay que venirnos juntas ¿

s

í

?

A

quello era todo un

espect

á

culo

, ambas gimiendo, ella con un

consolador

ensartado

en su vagina y yo con un dedo dentro de la

m

í

a

, y con la otra mano masajeando mi

cl

í

toris

.

  • E

lla: "

ahhhh

" ya me voy a venir hermosa, ya no puedo aguantar

m

á

s

, hazlo

r

á

pido

, vente conmig

o, (en eso ella se acomoda quedando de rodillas para que a brincos la penetre el juguete) * Y

o: yo

tambi

é

n

, ya me vengo "

mmmmh

" ya casi...

  • E

lla: "

mmmh

" que rico, imagina que estoy arriba de ti, frotando nuestras conchitas,

ufff

que rico ¡

siiii

! * Y

o: ¡

ahhhh

siiii

!

A

mbas dejamos de hablar para entregarnos a lo que

est

á

bamos

sintiendo

para

despu

é

s

al cabo de

30

segun

d

os

m

á

s

ambas

estall

á

ramos

en un glorioso

orgasmo. Nos incorporamos poco a poco para

despues

comentar lo ocurrido.

  • Ella: me encantaste, como me

gustar

í

a

estar ahí contigo para abrazarte y estarte

lamien

d

o

tus pechos, o

por

que

no,

comi

é

ndome

todos esos juguitos que has de ver soltado * Y

o: a mi igual me

gustaria

  • E

lla: te tengo otra sorpresa, pero para esa vas a tener que esperar un poquito

m

á

s

, no comas

an

s

ias

¿

ok? * Y

o:

mmmh

,

é

sta

bien esperare tranquila, pero... ¿podremos algún

d

í

a

volver hacer esto? * E

lla: ¡claro! Todas las veces que quieras y se pueda obvio

Q

uedamos hablando unos minutos

m

á

s

para

despu

é

s

desconectarnos de la

c

á

mara

, lo hicimos, nos quedamos minutos

m

á

s

platicando ya sobre

ot

ras

cosas y nos desconectamos. No

pod

í

a

creer lo que

hab

í

a

pasado, pero sin duda ese

hab

í

a

sido mi mejor orgasmo desde que

hab

í

a

descubierto el arte de la

masturbaci

ó

n

. Con esa amiga

viv

í

varias experiencias que

ya

en un

pr

ó

ximo

relato

revela

re

la otra sorpresa que me

ten

í

a

(muy buena sin duda),

hable

con ella hasta que tuve 16 años y por una u otra cosa nos perdimos el rastro, ahora no se nada de ella y me

encantar

í

a

saber

qu

é

fue lo que paso con ella, pero bueno, supongo que lo incognito

a

veces

es

m

á

s

ex

c

itante

, ese es mi secreto, secreto que

jam

á

s

nadie

sab

í

a

, ni de su existencia ni de ninguna de las cosas que

vivimos por las tardes frente al ordenador.