Mi matrimonio arruinado por un chantaje (1ª parte)

Un matrimonio acaba siendo dominado y humillado por quien menos se lo esperan obligados por un chantaje.

Me llamo Raimon. Tengo 42 años y junto a mi mujer, Eva, de 35, somos propietarios de un pequeño supermercado en un

pueblecito de montaña en la provincia de Girona. En invierno trabajamos mucho, gracias a los esquiadores, y en verano

con eso del turismo rural tampoco nos podemos quejar. Las cosas nos iban muy bien y teniamos ante nosotros una vida

tranquila y estable.

Como cada año, para la temporada de invierno contratamos una chica del pueblo, hija de una clienta, algo alocada, con 19

años supongo que es normal. Habia estado estudiando en la capital y no queria acabar la carrera, asi que se habia vuelto

al pueblo. La verdad es que aunque no suelo fijarme mucho, es muy atractiva, morena, alta, delgada, pechos perfectos

y culo mas perfecto aun, siempre enfundado en tejanos ajustados.

Nos extraño que el primer mes fuera algo mas flojo que otros años, la crisis, pensamos, pero cada vez veiamos cosas mas

raras. Mi mujer controlaba los pedidos y veia que se compraba mas de lo que se vendia. Por motivos de seguros, hace un par

de años tuvimos que instalar camaras disuasorias de robo, y nos regalaron una mini camara con el kit. Viendo que podia ser

la chica nueva, decidimos instalarla, en la tienda, sobre la caja, y en un solo dia nos confirmo nuestras sospechas. Era

ella la que hacia desaparecer el dinero, calculamos que cada dia unos 40 o 50 euros. eso por los dos meses que ya llevaba

casi, eran unos 3000 euros de robo. Esperamos dos dias mas para tener varias pruebas y al tercer dia, al cerrar la tienda

la hicimos subir arriba, a nuestra vivienda. Le enseñamos los videos, ella aun se  encaro con nosotros, y le dijimos

que o nos devolvia el dinero o se lo enseñariamos a su madre. En un sitio pequeño esto corre rapido, y seria su fin en

el pueblo.

Total, al dia siguiente vino a devolver las llaves, el uniforme y trajo en un sobre 3000 euros. De malas maneras nos dijo

que esto no quedaria asi, que eramos unos explotadores y que ya se encargaria de nosotros.

Amenazas de niñata, pensamos, y nada, seguimos a lo nuestro, contratamos otra chica, esta vez bien, y paso la temporada,

esa y dos mas, sin problemas, con nuestras vidas rutinarias pero agradables.

Al cabo de dos años en un local cercano al nuestro vimos que hacian obras. A ver que montan, pensamos. No podia ser, un

supermercado, una cadena a nivel nacional, fuerte, grande, queria montar alli. Era de locos, no habia mercado para eso.

En pocos dias estaba abierto, y claro, ofertas, precios ajustados, y un marketing muy fuerte.

Mi mujer comento que nada, que los clientes no cambiarian por que si, y aunque era lo que creiamos, poco a poco la caja

fue bajando, hasta llegar a poco mas del treinta por ciento de lo que haciamos antes. No daba para seguir abiertos, pero

pensamos que quizas reformando y lavando la cara a la tienda mejoraria la cosa. Nos habiamos metido cuatro años antes en

hacernos una casa, y nuestros ahorros estaban alli, y con la crisis la caja del pueblo nos puso muchas pegas para darnos

dinero, claro, ellos veian que eramos david contra goliath y que para que darnos dinero, no ibamos a remontar. Total,

creyendo que si podriamos le pedimos el dinero a un conocido de mi esposa de la capital, de sus años de estudios, rico

y con el que no teniamos mucha relacion pero si la justa para decirle que se lo devolveriamos con intereses y ganaria

dinero con la operacion. Aceptó.

Tras las obras vino lo peor, el supermercado rival decidio hacer una campaña tan agresiva que practicamente vendia por

debajo de nuestros precios de coste.

Encima llegaba primavera, epoca peor de ventas. a los dos meses nos planteabamos cerrar, pero sabiamos que perderiamos la

casa, el super y que no podriamos pagar al conocido de mi esposa. Fuimos a verle, y le explicamos la situación, nos dijo

que tambien pasaba por malos momentos y que necesitaba el dinero. Volvimos a casa hundidos, aunque mi esposa me comento

que intentaria hablar con el para pedirle por favor que nos diera tiempo. A los dos dias bajo de nuevo a la capital, al

regresar a casa, esperando que todo hubiera ido bien, me hundi, llorando me dijo que le habia propuesto una alternativa,

sexo a cambio del dinero. No podia creerlo, me negue, claro, pero ella fue mas fria. Mira, me dijo, tiene las escrituras

de casa y si no le pagamos o aceptamos esto, la perdemos. Tengo que hacerlo, no te preocupes, tiene casi sesenta años,

que va a hacer? bajare y cuando vuelva lo habremos olvidado, vale?

No me quedo alternativa, ese dia lo pase fatal, se fue pronto , a las siete de la mañana, y volvio cerca de las diez de

la noche. Me explico que todo habia ido bien, que se conformo con una mamada y que la invito a comer y fue muy amable,

vamos, que yo seguia siendo un cornudo pero parecia que no de dimensiones descomunales.

A los dos dias aparecio en la tienda un señor, de traje, maletin en mano, Era de la empresa del super rival, nos queria

hacer una oferta por nuestro supermercado, dandonos algo de dinero, con el cual podiamos liquidar la deuda con el

conocido de mi mujer y ofreciendonos trabajo en su local a los dos, con lo que podriamos seguir viviendo en el pueblo

y pagar la casa.

Lo meditamos unos dias y acabamos aceptando, que alternativa nos quedaba....

en dos semanas estabamos ya en el otro local, daba pena ver el nuestro, cerrado. Mi mujer fue destinada a la fruta y yo

en almacen y cajas. Ya habia mi mujer saldado la deuda con el conocido y bueno, empezabamos de cero pero felices.

Lo peor estaba por llegar.

A las dos semanas de estar en el nuevo trabajo aparecio por el super la chica aquella de hace unos años que despedimos

por robar. Estaba igual de atractiva, aun mas con los años. Iba muy elegante y parecia altiva y orgullosa, pense que para

ser una ladrona demasiado.

-Hola, me dijo al entrar. -Hola.

-Vaya, asi que para esto hemos quedado, no? para cajero de super? si ya te dije que tendrias tu merecido. Y tu esposa?

por ahi tambien , no?

Yo le hacia caso omiso a sus comentarios, pero me dolian, y mucho.

-Bueno, ya nos veremos, dijo entrando hacia el super, suponia que a comprar. Pero no, siguio hasta el fondo, entro en el

almacen, lo cual me sorprendio, y saludo al encargado. Pero que era esto?

El encargado se acerco a la caja con ella. -Raimon, me dijo, te presento a la jefa, no la conocias aun, no?

me quede helado, no podia ser. Ella la jefa??

-Hola, Raimon, dijo ella, ya nos conocemos le comento al encargado. Se giro y se fue a saludar a mi mujer, presentandose

tambien. Al cabo de quince minutos me hacia llamar al despacho, y alli que fui, aun perplejo.

Estaba ella sola, sentada. entre . Cierra la puerta, me dijo. Lo hice.

-Bien...vaya, como nos vemos, eh?

-pues si, dije timidamente.

-Y lo peor, me dijo, lo de tu esposa, tener que llegar a prostituirse, eso si debe ser duro, no?

-Pero...que dices, estas loca? de que hablas?

-ahh, no tuvo que mantener sexo con un señor de la capital?

-como sabes eso?, le pregunte

-Lo se todo, me dijo sonriendo, tenia una sonrisa preciosa, la muy cerda.

-solamente fue una mamada, nada mas, y fue por obligacion, estoy seguro que tu has tenido mucho que ver en esto.

-un respeto, raimon, eso de hablarme de tu no esta bien, soy tu jefa, señora Sara Prats para ti, ya sabes, me case con el

dueño de la cadena, y entendio el capricho de que abriera un supermercado en mi pueblo natal.Bueno, volviendo al tema

mira, me dijo señalando la television.

le dio al mando y pude ver un video, mi mujer, desnuda, a cuatro patas, siendo follada por aquel señor,

-y esto solo es un trocito, el video dura tres horas y te aseguro que perdi la cuenta de las posturas que le hizo hacer.

-puta, como tienes tu eso?, dije abalanzandome hacia el mando..

-para, para, mira, si no te corrijes, esto acaba en internet, y tu y tu mujer en la calle, sin casa, sin nada, y sin

poder seguir aqui, cuando todo el mundo lo sepa.

-esta claro?

me calle y reflexione. -si.

-si señora, se dice, me dijo riendo.

-si , señora.

-Bien, llama a tu mujer, quiero que venga tambien a verme.

sali de la sala y me acerque a ella..-Eva, me mentiste...soy un cornudo de verdad, me mentiste.

vi brillar sus ojos, estaba sorprendida. -Ves al despacho, la jefa quiere verte.

Entramos los dos de nuevo, y otra vez la niñata, altiva, puso el video. -Asi que no le habias dicho nada de todo esto?

pues vaya, la verdad es que eres muy flexible, y aceptas casi de todo, me ha encantado ver el video, es de lo mejorcito

en porno que he visto ultimamente.

Mi mujer estaba helada, roja e inmovil

-Bien, no quiero perder el tiempo. tengo una oferta para vosotros. o la aceptais o la aceptais, esta claro?

-que oferta?, dijimos los dos a la vez.

-Acaban de terminar nuestra casa de montaña, en lo alto del pueblo, esa casa tan grande que esta sobre la vuestra.

Mi marido no es de esquiar, pero yo si, asi que pasare temporadas aqui, y necesito un par de personas para llevarla,

tenerla siempre lista y atender mis necesidades. Un matrimonio seria ideal, y mas como vosotros, sin niños.

De todas formas, quiero que sepais que atender mis necesidades implica mucho mas que servirme como criados. tu, raimon,

seras mi chofer, mi jardinero, mi sirviente, y tu , Eva, mi cocinera, mi asistenta, y todo lo que se me ocurra.

Y ademas, requerire de vuestros cuerpos cuando lo considere, viendo lo bien que atiende tu esposa en estas cosas.

-Esta loca? le dije yo.

-Bien, tened estos papeles, aqui esta todo especificado. Es viernes. El lunes a las ocho de la mañana o estais alli,

en la puerta, en las condiciones que dicen los papeles y aceptando esa normas, o venid aqui a recoged el finiquito

y hacedlo con las maletas, porque a la media hora el video de tu esposa lo habra visto todo el pueblo. Tomaos el fin

de semana de fiesta y meditadlo.

Salimos de alli hundidos, como podia ser todo esto? era el fin de nuestra vida, como habiamos llegado aqui?

Al llegar a casa nos fuimos cada uno a una habitacion diferente, estaba hundido, y ella tambien, se lo veia en los

ojos, si no era el fin de lo nuestro, estaba cerca. Al llegar la noche cenamos juntos, en silencio, sin casi mirarnos,

sobre el mueble del recibidor seguia el portafolios con las instrucciones que nos habia dado, aun ni lo habia abierto.

Esa noche mi mujer durmio en el dormitorio y yo en el sofa, si se puede llamar dormir a pasar la noche mirando el techo.

Al cabo de tres o cuatro horas de dar vueltas me decidi a mirar el contenido de los folios. Era algo absurdo, ordenes y

ordenes, como llamarla, como ir vestidos, como atenderla, parecia sacado de la epoca de la esclavitud americana, no

podia ser que nos odiara tanto para llegar a esto. Debia estar loca. Lo que tenia claro es que si no aceptabamos deberiamos

irnos del pueblo, sin nada, sin futuro, y sin sitio donde ir. Por otro lado el hecho de que mi mujer me engañara

respecto a lo que paso en la capital me tenia hundido. Viendo el video no tenia claro si de verdad ella lo estaba pasando

tan mal, no lo parecia al menos en manos de aquel viejo. Acabe quedandome dormido con los folios sobre mi pecho, pensando

que igual al despertar nada de eso habria pasado. Por la mañana, ya entrando los rayos de sol por el balcon me desperte.

No tenia los folios sobre mi ni alrededor. Fui hacia la cocina a prepararme un cafe y alli estaba mi mujer, sentada, con

los folios en la mano y la mirada perdida en ellos.

-que te parece, le dije?

-que no tenemos alternativa. Estoy convencida que es una rabieta de esa niñata y que durara dos dias, despues nos dejara

tranquilos como servicio en su casa, pero al menos tendremos una vida.

-pero has visto como debemos ir el lunes? dice que tu en gabardina,desnuda y depilada bajo ella y yo con la cabeza

totalmente afeitada, asi como el resto de mi cuerpo rasurado.

-pues eso haremos, raimon, no podemos hacer otra cosa.

Me di media vuelta y despues de vestirme sali a la calle, a tomarme un cafe en el bar, mientras miraba la cara de los diez

o doce hombres que habia en la barra. Pensaba que si me negaba, todos ellos el lunes verian a mi mujer follando con

aquel viejo....

Vague todo el dia por el pueblo, fui a la montaña a pasear, por la noche entre en casa y volvi a tumbarme en el sofa, mi

mujer ya dormia, y por la mañana, el domingo, entre en la ducha y alli me rasure todo el cuerpo, incluida la cabeza,

la imagen ante el espejo era ridicula. me vesti y me quede en el sofa el resto del dia, comiendo alguna cosa y poco mas.

A media tarde mi mujer salio del dormitorio, tambien fue a la ducha, alli se rasuro tambien completamente como yo, excepto

la cabeza, claro.

El lunes a las seis de la mañana estabamos despiertos, tomando un cafe en la cocina, mirandonos. Mi mujer en pijama y yo

ya vestido. Se me hizo raro que para salir de casa se desnudara y se pusiera solamente una gabardina. Al verla desnuda

volvi a desearla, la verdad, estaba impresionante. Jamas la habia visto totalmente sin vello.

Sin hablar salimos de casa, realmente nuestra nueva ocupacion estaba cerca, a trescientos metros, justo encima de nuestra

parcela. La suya era la casa mas espectacular del pueblo, con las vistas mas impresionantes y todo tecnologicamente a la

ultima. Llegamos a la puerta y toque el timbre. Nos abrio ella, en pijama y bata. Hola, personal de servicio, dijo riendo

y dandose la vuelta. Pasad, pasad, no tenemos todo el dia.

Entramos, y cerre la puerta. En ese momento ella se giro. -Habeis cumplido mis ordenes?

-si, señora, dijimos los dos a la vez.

-bien, bien, estais coordinados, sonrio. A ver, dijo mientras se acercaba a un enorme sofa y se sentaba en el.

Mi mujer se abrio la gabardina y yo me quede quieto, esperando. - deja caer la gabardina, eva, ordeno ella. Mi mujer asi lo

hizo, quedando desnuda, solamente con sus botines, como la señora habia ordenado.

Se levanto del sofa y la rodeo mirandola. -sabes? para tu edad estas muy muy bien, buen culo, buenas tetas, algo caidas

pero firmes, piernas largas, tobillos estrechos, toda una madurita de buen ver..creo que te sacare partido.

-y tu, perro, a que esperas? quiero ver que clase de esclavos he adquirido. desnudate.

-Me desnude, avergonzado. con todo esta situacion habia tenido una ereccion, y al quitarme la ropa se vio claramente.

La niñata se rio. -vaya, pero si aqui el perro esta caliente. pues nada, empieza el espectaculo, dijo sentandose.

  • a ver, perrita, recuerdas que decian los folios sobre que decir, no? -si, señora, dijo mi esposa.

-bien, separa las piernas, y coloca las manos sobre tu nuca. mi mujer asi lo hizo. -bien, perra, presentate..

-señora, aqui esta vuestra perra, desnuda, rasurada y dispuesta para ser su criada, su cocinera, su asistenta y

cualquier cosa que usted desee.

-bien, perra, girate e inclinate hacia delante dejando tu ano y coño cerca de mi para inspeccion. mi mujer asi lo hizo.

-eres virgen del ano, perra? -si señora, dijo ella.

-bien, perro, ya que estas empalmado aprovechemos, folla el ano de tu esposa, hay que arreglar eso de que sea virgen.

me acerque a ella,  la posicion en que estaba era perfecta y en cierta medida deseaba hacer algo que siempre me habia

negado en nuestro matrimonio, igual como venganza por lo del viejo. sin pensarlo la penetre, primero costo pero luego

escupi en el agujero y entro bien, aunque notando el gesto de dolor que ella hizo. Se oyeron las risas de la dueña.

-jajaja, recordais cuando erais mis jefes? y yo os robaba? y miraros ahora, perra, te esta dando por culo a mis ordenes.

que pateticos sois..

-ladra, perra, ladra... - guau, guau, decia mi mujer entre jadeos mientras la penetraba.

Por la lista de ordenes de los papeles sabia como debia comportarme, asi que le dije: señora, puede vuestro perro

correrse? - no, cerdo, sacala ahora mismo, ni se te ocurra, con reventarle el culo a la perra ya tienes bastante.

la saque en ese momento.

-tu, cerdo, ahora vas a masturbarte y te correras en el suelo, esta claro? -si señora, dije mientras me masturbaba,

muy caliente, no tarde en correrme, una gran corrida despues de dias de abstinencia logica, lleno el suelo.

-bien, cerdo, arrodillate y lamelo todo hasta dejarlo limpio, me ordeno ella,

asi lo hice, la primera vez que probaba semen, el mio ademas, pero no tenia otra opcion, mientras mi mujer seguia

inclinada, en la misma posicion en que la deje al sacarsela, sin moverse, gimiendo aun, al lado de la señora, que

acariciaba los pechos colgantes de mi esposa y sus pezones.

muy bien, cerda, dijo ella, lo has hecho muy bien, ya veras como aqui disfrutaras , estoy segura que en el fondo

eres toda una guarra, dijo mientras retorcia su pezon.

-ahora subid para arriba, a la primera habitacion a la derecha. sobre las camas estan vuestros uniformes, poneoslos

y comenzad vuestras tareas, tambien hay una lista de ellas junto a la ropa. la que habeis traido, tanto la gabardina

como la que el perro llevaba, quemadla en la caldera, no volvereis a vestir algo que no sea vuestro uniforme.

Subimos los dos, desnudos, por las escaleras mientras ella se tumbaba sonriendo en el sofa. Miraba el cuerpo de mi

mujer y los deseos de maltratarla crecian en mi. estaba convencido que ella lo merecia. Esa chica malcriada iba a

acabar con mi amor por mi esposa.

Al llegar a la habitacion sobre las camas estaban los uniformes, el mio, pantalon negro, zapatos negros, y dos pezoneras

brillantes, doradas. eso era todo, ni ropa interior, ni calcetines, ni nada mas. El de mi esposa era aun mas sobrio, un

tanga negro  un collar de cuerda negra en el que ponia en letras doradas perra y una cofia.

Junto a la ropa la lista de tareas para los dos por separado.

Mi esposa cocinar, limpiar, hacer camas y aprender como estaba todo situado en la casa, yo lavar los tres coches, cortar el

cesped y limpiar la piscina, todo eso sin descuidar que si sonaba la campanilla debiamos correr a arrodillarnos

a los pies de la señora sin dilacion.

Asi empezamos a servir en la casa de nuestra antigua dependienta ladrona, acababamos de llegar y ya habiamos tenido

sexo delante de ella y habiamos sido humillados. lo peor, cuando al volver al salon para coger la ropa que trajimos y

llevarla a quemar vimos en la television de plasma gigante como ella disfrutaba de nuevo del momento en que yo revente

el ano de mi esposa. todo estaba grabado. estabamos en sus manos sin ninguna duda.