Mi madre
Este es un relato entre amor filial y exhibicionismo. No hay nada como tener una madre sin prejuicios.
Mi Madre:
Este es un relato que dedico a todos aquellos hijos de madres calenturientas que han sabido disfrutar de la vida sin importar las hipocresías sociales o religiosas que limitan nuestra capacidad para descubrirnos a nosotros mismos y nuestro potencial.
Toda la vida he sido un chico tímido al que le era muy difícil poder expresar los sentimientos de una manera "normal". En el colegio apenas me relacionaba con los compañeros y me era muy difícil hacer amistad con nadie. Esto provocó que me volviera un lobo solitario que se las apañaba solo en todo lo que podía y en lo que no podía siempre estaba mi madre para darme ese empujoncito que tanto me hacia falta.
Mi madre en la época que se sitúa este relato tendría unos 39 años y es rubia (no muy natural), 1,70 cm. delgada pero con las curvas bien sinuosas, pechos medianos ( de los que caben justo en la palma de la mano y sobra un poco) piernas largas y un culito bien proporcionado. Es muy servicial conmigo y siempre esta cuando la necesito aunque por mi carácter casi nunca le pido ayuda para nada.
Durante una etapa del instituto tuve una gran sorpresa al comprobar que unos cuantos chicos se peleaban por hacer trabajos conmigo, algo a lo que no estaba acostumbrado, ya que provengo de un colegio de curas y allí como supongo que pasa en todos los colegios de las mismas características está el grupito llamado "sensación de vivir" los cuales todo les sale bien a la primera y nunca tienen complicaciones ( visten a la moda sino la crean, juegan en el equipo de fútbol y son las estrellas, sus padres están en la junta escolar y nunca se meten en líos " siempre hay algún pringado que se lleva la bronca por sus animaladas" y sobre todo se quedan con las chicas mas guapas). Luego está el grupito de macabras o delincuentes que son todo lo contrario aunque también consiguen a las chicas que quieren (lo que me hace pensar que las tías no buscan aquello que siempre dicen que buscan, sino me las tendría que quitar a patadas de encima). Después esta el grupo de los que no se meten en líos y sacan notas aceptables que suelen recibir las gamberradas de unos y otros. Y por último estaba yo que parecía invisible, lo que tiene su lado positivo, nadie se metía conmigo y me dejaban en paz hasta esa etapa que he comentado anteriormente.
De repente el grupito de "sensación de vivir" se peleaba para hacer trabajos conmigo lo que me extrañó profundamente, pensé en primer lugar que me querían cargar el muerto de alguna de sus cabronadas o en segundo lugar que querían que les hiciera el trabajo sin que ellos perdieran el tiempo. Cual fue mi sorpresa que no pude detectar ninguna de las dos cosas anteriores, los trabajos se realizaban en mi casa siempre lo cual era cómodo para mi. Y siempre lo hacíamos lo más perfectamente posible por lo que le dedicábamos mucho tiempo.
Mi madre muy contenta y a la vez sorprendida por esa situación se mostraba muy atenta con mis invitados y ellos la correspondían muy educadamente. Nada sospechoso de momento, pero mi experiencia e instinto, que siempre me había ayudado, me decía que "piensa mal y acertarás". Tardé algún tiempo en descubrir lo que pasaba y además lo hice de casualidad (pasar desapercibido tiene sus recompensas en ocasiones) al escuchar a dos chicas hablando en el recreo sobre que los tíos eran unos guarros salidos( que novedad) y que ultima que estaban haciendo era intentar ligarse a una mujer madura madre de algún alumno ( se me cayó un muro de ladrillos encima y apareció una mano enorme y celestial que me señalaba a lo bestia.). No me lo podía creer, como habían caído tan bajo los que en aquel momento empezaba a considerar amigos. Mi cabreo era mayúsculo y cuando me enfado acostumbro a convertirme en Maquiavelo ( frío y calculador) y solo había una cosa en mi alma a partir de aquel día (VENGANZA Y DESTRUCCIÓN). Decidí destruir aquello que los mantenía en el orden social de la clase (la popularidad entre alumnos y maestros). Durante semanas estuve dando vueltas en mi cabeza de cual seria mi venganza, me cegué tanto que empecé a no pasar tan desapercibido como siempre ( alguno me llegó a decir que ciertas miradas mías le daban miedo). Abandoné mi timidez y me convertí en el confidente de las chicas que acompañaban al grupito "sensación de vivir" y me gané su confianza. Les saqué toda la información que pude, secretos, vicios y puntos débiles de cada uno y en especial del jefecillo llamado Juan Carlos pero todo el mundo le llamaba Johnny (lo que digo grupito "sensación de vivir") su madre y la mía eran muy amigas en aquella época y por lo que deduje que todo empezó por él (era el único que había visto a mi madre).
Lo más curioso de todo aquel tiempo en que me dedicaba a planear mi plan maestro comencé a mirar a mi madre más detenidamente. Y me sorprendió como una mujer de tal belleza había pasado desapercibida por mí durante tanto tiempo. La miraba cuando se arreglaba para salir a cenar con mi padre, cuando venía de la oficina y sobretodo cuando se duchaba, aunque era muy precavida y no conseguí ver gran cosa. Cuando había que hacer algún trabajo me las apañaba para que también viniera alguna chica de mis recientes amigas que eran novia de Johnny o amiga de su novia, por lo que me aseguraba que no me diera problemas con mi madre y podía seguir realizando mi plan sin levantar sospecha a pesar de cada vez que me cruzaba con él me daba ganas de cortarle el cuello y desmembrarle lentamente.
Después de varias semanas descubrí el plan perfecto, iba a utilizar a mi madre para atacar a Johnny y ponerle en situaciones muy vergonzosas( que por supuesto grabaría en vídeo). Pero, ¿ como iba a conseguir que mi madre me ayudara?, Si se lo decía abiertamente seguro que se negaba en redondo y su imagen sobre mi de niño bueno y tímido se destruiría para siempre (lo cual no me agradaba) mi madre era lo más parecido a la amistad que tenia en aquella época. Planeé que lo hiciera sin ella darse cuenta, como si fuera un juego entre ella y yo para que no se diera cuenta de mis verdaderas intenciones.
Mi padre por aquel entonces se encontraba mas tiempo en el trabajo que en casa. Y la mayoría de los fines de semana tampoco estaba en casa por que su empresa se estaba expandiendo y comprando a la competencia ( inteligente manera de deshacerte de ella). Sabia que se mandaban correos electrónicos continuamente para saber uno del otro y yo sabia donde estaba la clave para poder leerlos, solo que hasta ese instante no había sentido la necesidad de saber lo que decían. Me sorprendió saber que mis padres mantenían relaciones sexuales virtuales y que mi padre era un poco guarrete, ya que decía que le gustaba mostrar a su mujercita para que los otros hombres supieran lo que tenía, ya que si tienes algo muy valioso y que los demás quieren, pero no saben que lo tienes tú es muy aburrido. Ahora entendía como se arreglaba mi madre para salir a cenar. Por las respuestas de mi madre todavía no le había encontrado el gusto a exhibirse pero su resistencia empezaba a decaer.
Entré en la cuenta de correo de mi padre y le envié un correo a mi madre diciéndole que se había abierto una nueva cuenta de correo para sus conversaciones más sugerentes, ya que la habitual también recibía cosas del trabajo y no las quería mezclar. Des de el correo de mi madre le envié un correo a mi padre haciéndole creer que yo necesitaba utilizar su correo para un trabajo de la escuela y que había abierto una cuenta de correo nueva para él y sus perversidades. Como suponía se lo creyeron todo y como sabia que mi padre estaba muy liado con el trabajo y llevaba 2 semanas sin escribir ninguno tenia el camino libre para empezar mi plan.
El primer correo a mi madre que le mandé fue bastante suave pero hacia referencia a que si se había exhibido delante de alguien el tiempo que estaba fuera. Mi madre respondió que no a lo que yo le indiqué que me haría ilusión que lo hiciera y me lo contara para poder disfrutar a distancia. Ella decía que se pasaba todo el día en el trabajo o en casa cuidándome por lo que no tenia a nadie con quien exhibirse. Y yo empecé entonces a indicarle si no habían visitas en casa últimamente con las cuales se podría exhibir y disfrutar. Ella contestó que los únicos que veía era a Juan Carlos el hijo de su amiga que venía a hacer contrabajos conmigo y yo le contesté que era un buen ejemplar para empezar. Mi madre como es lógico me contesto que era un menor y su madre era amiga por lo que a situación era muy peligrosa además de que yo estaba presente y me podía dar cuenta. Conseguí convencerla con el morbo de la situación y el riesgo tal y como en los correos de mi padre se podía encontrar.
Escondí la cámara en mi cuarto en una esquina en lo alto de un armario para asegurarme de alcanzar lo máximo posible de mi habitación y cuando comprobé que mi madre ya no iba vestida como de costumbre deduje que la cosa estaba en marcha. Me las arreglé para tener que salir de mi habitación lo máximo posible mientras hacíamos el trabajo en mi habitación y me encargaba que mi madre lo supiera cada vez.
Después de que el capullo de Johnny se fuera a su casa me dediqué a mirar lo que había grabado mi cámara. Mi plan funcionaba, mi madre aparecía cada vez que yo salía de la habitación con una ropa súper ajustada y un escote de vértigo que visto desde arriba donde estaba la cámara era bestial y sus pantalones ajustados marcaban el culito como si no llevara nada encima. No me pude resistir y me pajeé a lo bestia esa tarde ( 4 veces sin exagerar). Por desgracia Johnny solo ponía cara de pasmado por lo que no me servia de momento para mis planes, pero no me importaba en exceso ( 4 pajas te dejan muy relajado).
Al día siguiente volví a repetir la operación, pero algo que no estaba previsto ocurrió, mi madre no esperaba a que yo me fuera para entrar y exhibirse delante de Johnny. Yo tuve que contenerme como pude para que él y ella no se dieran cuenta de que sabía de que iba el rollo. Mi madre se presentó con una minifalda ( pero que muy mini, casi un cinturón) y a la mínima se podía ver el comienzo de sus bragas y una camiseta muy ajustada sin sujetador( se le marcaban los pezones). Después de las 2 primera entradas de mi madre le dije a Johnny que me iba al lavabo un momento que no me encontraba bien ( pajearme a lo bestia) y cuando volví algo no me cuadraba, Johnny tenia una cara de cordero degollado e inocente que me hizo sospechar que mi plan estaba a punto de ser ultimado. Tenia unas ganas terribles de ver lo que había grabado mi cámara y desde luego no tenia precio lo que allí se veía.
Puse lo que había grabado y me tuve que volver a pajear viendo a mi madre, y después pude comprobar como Johnny una vez que me fui al lavabo se sacó su pene y en un par de sacudidas ya se había corrido encima. Esta era la mía (eyaculación precoz) lo iba a destruir, su reputación iba a caer por los suelos y las chicas se iban a reír de él enormemente. Aunque no hubiera tenido una eyaculación tan rápida los videos se pueden editar y manipular, pero por una vez le tengo que dar gracias a Johnny por ahorrarme el trabajo.
Edité el video y deje solo la escena en que Johnny se la sacada y se corría en segundos y se la enseñé a su peor enemigo. Él ya se encargó de hacer correr el rumor manteniendo en secreto de donde lo había sacado y ese famoso grupito de "sensación de vivir" se empezó a disolver (eso era verdadera amistad).
Si os pensáis que este relato acaba aquí estáis muy equivocados, ya que supongo que os estaréis haciendo la misma pregunta que yo. ¿por qué mi madre ya no esperaba que yo saliera de la habitación para entrar?
Pues bien, cuando Johnny atravesaba su peor crisis de popularidad y el grupito "sensación de vivir" se disolvía yo me encontraba enormemente feliz, ya que me dedicaba a meter cizaña para agravar la situación ( uno tiene que divertirse un poco) le dije que ya no quería que viniera más por casa que era un guarro y que lo que me habían contado ( los rumores crecen exponencialmente) era asqueroso.
Mi madre no pareció importarle que no viniera más por casa, seguía llevando la ropa más provocativa que tenia y ya no escribía correos ni contestaba los que yo le enviaba como mi padre. Esto me empezó a mosquear ya que no entendía nada y a la vez me pasaba todo el día haciéndome pajas por todos lados y a todas horas. Supe que algo no iba bien cuando mi madre no cerraba la puerta para ducharse y yo podía mirar con cuidado todo lo que quisiera (era como una polilla atraída por la luz) sabía que me destruiría pero no podía resistirme.
Llegó un día que mi madre se paseó en topless por la casa y cuando me vio se quiso tapar los senos aunque no lo hizo con mucha prisa y los pude ver sin ningún problema. Me dijo que no sabía que estaba en casa y que la próxima vez que entre y ella esté en la ducha la avise.
Corriendo a mi habitación a correrme nunca mejor dicho, y cuando esta a punto entra mi madre por la puerta en ropa interior y contempló mi disparo al aire. Que cayó sobre mis piernas y el suelo ya que me quedé petrificado.
Me temí lo peor, y me preparé para la gran bronca que me iba a hacer perder a la única amiga que tenia y que siempre estaba a mi lado. De repente me dice mi madre.
¿No sabía que con tu edad se tuviera esa potencia?. Sí que ha llegado alto.
Yo no sabía que hacer o responder, tenia mi pene en una mano y un trozo de papel en la otra. Ella siguió con sus preguntas.
Vamos no te sulfures que es normal a tu edad. ¿Cuéntame que chica te ha puesto así? ¿La conozco?.
Yo seguía sin responder, parecía que mi disco duro no funcionaba y era incapaz de articular palabra. No me atrevía a mirarla a la cara por vergüenza. Y ella con sus preguntas.
Vamos no seas tímido que ya te he dicho que es algo natural y no estoy enfadada. ¿Quieres decirme que chica te gusta?
Me gustas tú mama. Esto es por ti.
No me lo podía creer, lo había dicho sin pensar y seguro que esta vez si que se enfadaba y me exiliaba. Pero se empezó a sonreír y se acercó a mi, se agachó entre mis piernas y me quitó la mano de mi pene. Lo agarró suavemente y me miró a los ojos para decirme:
Gracias hijo mio, sabía que tu padre no me enviaba esos correos tan morbosos, él habla mucho pero cuando de verdad un hombre me mira se pone muy celoso. Creo que le van mas los celos que el morbo y tu has sido capaz de elevarme a un morbo desconocido para mí.
Ahora sí que estaba flipando en colores. Mi madre estaba pajeándome y de pronto me la empezó a mamar dulcemente. Cuando ya la tenia más que dura se quitó el sostén y me hizo una cubana que nunca olvidaré. Eran tan suaves sus pechos que no tardé en estar a punto. Ella de dio cuenta y se la volvió a meter en la boca. La intenté avisar que me corría pero ella se lo tragó todo y me la dejó limpia.
Se levantó, recogió su sostén y me dijo algo que fue el principio de la mejor relación que nunca he tenido.
-En esta casa somos muy ecológicos, a partir de ahora cada vez que necesites descargarte me avisas y dejamos de utilizar tanto papel.
Después me enteré que había encontrado la cámara después del primer día y me había observado en mi sesión de pajas y había trazado este plan para follarse a su hijo.
Después de todo un gran sabio dijo que siempre hay alguien mejor que tú en todo. Hay que ser humildes.
Un saludo a todos y si les ha gustado les relataré el primer polvo completo con mi madre.
Adios