Mi lectora (fan) madurita.
Una lectora que le gustan mis relatos, y una quedad que espero que guste.
Mi lectora (fan) madurita.
Después de escribir varios relatos y recibir algunos mensajes de personas que se interesaban por como continuaban los relatos, otros que me felicitaban y animaban a escribir más ya que les gustaban, me encontré con una mujer que vive cerca de Valencia, que me decía por correo, que le habían gustado mucho mis relatos y que frecuentaba los lugares donde transcurrían en ocasiones mis relatos.
A partir de este momento empezamos a intercambiar algún e-mail, ella me decía que era una chica muy sexual y que le gustaba mucho leer mis relatos y que le informara cuando los escribía, para no perderse ninguno. Después de varios días hablando y algún que otro relato donde intercambiamos distintas opiniones y sobretodo gustos, que por cierto eran bastante parecidos y por ello chocantes, (ella es una mujer que le gusta dominar y a mí también).
Como los dos teníamos ganas de seguir hablando, nos descargamos una aplicación para poder hablar, sin dar número de teléfono y ninguna identidad, ella es una mujer la llamaremos Ana (con muchas curvas, entre los 40 y 45, guapa de cara, pelo corto y de esas mujeres que hablando con ellas despiertan un morbo y una sexualidad fuera de lo normal), desde el primer día que hablé con ella, me despertaba sin saber porque cierta curiosidad. Yo soy un chico de 33 años de edad, castaño, ojos verdes, bastante alto y de complexión normal, aunque me gusta hacer bastante deporte.
Al poco tiempo, ella me decía que se lo pasaba muy bien hablando conmigo, pero que no quería nada más, todo y que vivíamos cerca, nuestros gustos eran muy similares y posiblemente uno de los dos no disfrutaría, y ella decía que las chicas con las que yo solía intimar eran muy diferentes a ella, yo le dije lo que pienso, que las chicas no se miran por su físico, sino por la sensualidad, el erotismo o la sexualidad que desprenden y que de eso, parece que ella iba sobrada.
Con todo ello, ella me mandó diferentes fotos, donde yo la pude ver perfectamente, era como se había descrito anteriormente y seguía pensando lo mismo, que desprendía una sexualidad muy grande, a eso le teníamos que sumar que ya habíamos hablado y su voz me gustaba mucho y me había contado algunas de sus experiencias sexuales y me tenía pensando en todo momento como sería tener relaciones con ella.
Tengo que decir que todo y que ella dice que no sería sumisa, el hecho de leer mis relatos y el hecho de ponerse en contacto conmigo, creo que la delataron, ya que en todo momento pensé que eso le ponía muy cachonda aunque ella dijera que no, de no ser así porque se habría interesado en hablarme?.
Después de negar en muchas ocasiones un encuentro un día estábamos hablando y fue ella la que me propuso quedar en un pub y tomar algo para ver qué pasaba, si estábamos los dos a gusto y conocernos en persona ya que llevábamos unos días hablando y ella quería conocerme, a partir de ese momento supe que en algún momento sería mía. Pero no sería ese día, ya que yo al final no pude, ya que tenía planes hechos desde hace mucho tiempo, a los cuales no pude renunciar.
Seguimos hablando, e intercambiando fotos, pero sin que ella pudiera ver mi cara, mientras que ella sí que me mandaba fotos de ella completa. Parecía muy guapa en las fotos.
Era finales de verano, y yo tenía ganas de que esa madurita con muchas curvas fuera mía, y en el fondo pensaba que ella también quería, pero que estaba jugando un poco para hacerse la dura o quizá porque en el fondo tenía un poco de miedo.
En otra ocasión me dijo de quedar a tomar un café, y en esta ocasión ya no iba a rechazar su invitación eso sí, íbamos a jugar con mis normas, ya que en el fondo ella quiere ser sumisa y dominada pero no lo sabe.
Le dije que íbamos a quedar, el sábado por la tarde, pero que para quedar ella debía seguir diferentes normas, yo se las iba a decir al día siguiente y ella tendría 24 horas para pensarlo y contestar si quería venir o no.
Me dijo, que seguro que no iba a ir, ya que me conocía y mis normas iban a ser dominantes y a ello eso no le gusta, yo le dije que estaba seguro que ella iba aceptar, ya que se le notaba que quería y que de todas formas era muy fácil, en caso de no querer, decía que no quiere venir a tomar ese café y ya está no pasa nada. Y con eso quedamos, que al día siguiente yo le mandaría las normas y ella en 24 horas me contestaría.
Esa noche estuve pensando mucho sobre que normas ponerle, ya que no quería ser muy duro para no asustarla, y en el fondo pensaba que ella quería ser dominada, después de pensar mucho redacte algunas normas sencillas y simples, y estaba completamente seguro que las iba aceptar.
Las normas eran las siguientes.
- El sábado quedaremos a las 4 en el bar (----).
- Estaré esperándote sentado en una silla de la terraza.
- Irás vestida, con un vestido, con tacones y sin sujetador (tiene unos pechos grandes).
- Vas hacer siempre todo lo que te diga, sin escusas y sin cuestionar nada de lo que mande.
- A hora de cenar estarás en casa
- Que sepas que vas a ser mía.
Al día siguiente de hablar y conforme habíamos quedado, le mandé estas normas, y esperé a ver su contestación, me dijo que era más o menos lo que se pensaba y que eso de ser sumisa no iba mucho con ella, le dije que era muy fácil, que se lo pensara y que tenía 24 horas para darme una contestación, y que fuera cual fuera su contestación la aceptaría sin ningún tipo de problema y que podríamos seguir hablando de la misma forma que lo hacíamos hasta el momento.
Ella me dijo que vale que se lo pensaba y en ese momento empezaba a intentar preguntar algunas cosas y yo le dije que no, que no había preguntas, que se lo pensara y si aceptada era sin saber que iba a pasar y con esas normas, que se lo pensara.
El día paso tranquilamente en ningún momento hablamos, estoy seguro que ella estaba pensando que iba a pasar y que debía de hacer, pero yo tenía claro o la sensación de que iba aceptar, parecía que la conocía de más tiempo y esa sexualidad que desprendía no le iba a dejar pasar esa oportunidad, de ser sumisa y experimentar ser dominada por un chico al cual apenas conocía.
Al día siguiente recibí su respuesta, y me decía que sepas que lo he pensado mucho y no estoy segura del todo, pero acepto ese café y todo lo que vaya a pasar, solo te pido que seas bueno conmigo y que me tienes excitada y por eso no he podido decir que no.
Le contesté, ya sabía que ibas aceptar, nos vemos mañana a las 4 guapa.
El bar estaba justo debajo de mi casa, me vestí con unos vaqueros y una camisa y bajé a las 4 menos cuarto, para poder esperarla sentado en una silla en la terraza como habíamos quedado.
A las 4 en punto apareció ella, muy guapa, vestido color gris y unos tacones negros, tenía unas curvas que tu mirada te llevaba a verlas todas y una cara de mujer más guapa incluso que las fotos que había visto de ella, los pechos se le notaban un poco más bajos de lo normal y se veía como tenían bastante movimiento, por lo que quedaba claro que no llevaba sujetador.
Una vez se acercó, me levanté le di dos besos y le dije que se sentara enfrente mía, vino la camarera y le pidió su café, al principio hablamos de todo, de nuestras vidas, aunque ya conocíamos mucho el uno del otro, de los trabajos, de los relatos y de aquello que le resultaba excitante en mis relatos.
Había pasado casi una hora hablando, y la cosa subía de tono, ya que al hablar de los relatos y de sexo, ella se lo notaba algo nerviosa, viendo que en cualquier momento iba a dominarla de alguna manera, pero yo seguía hablando con ella y aumentando su nerviosismo y el no saber en qué momento eso iba a estallar.
La terraza estaba llena de gente y hablábamos bajo cuando hablábamos cosas de sexo, en un momento dado me acerque y me puse a su lado, y cerca de su oreja le dije:
Yo: estas nerviosa?
Ella: Bastante, pero menos de lo que pensaba.
Yo: Me gusta.
Ella: Lo sé.
Yo: (saque de mi bolsillo un vibrador de los que te metes en el coñito) que van con una bolsita se lo puse en la mano y le dije, ahora vas a ir al baño te vas a poner este vibrador y yo voy a llevar el mando y voy a cambiar de intensidad o de programa cuando quiera.
Ella: Se levanto y moviendo ese culazo entró al wc.
Al cabo de unos minutos apareció ella y se sentó enfrente mía, parecía nerviosa, le dije que estuviera tranquila, que estaba pasando una tarde con ella muy buena y que me gustaba mucho que ella haya aceptado la invitación, a la vez que encendí el vibrador y ella pego un saltito levantando un poco el culo de la silla.
Al principio me miraba, como diciendo que la liberara de eso, que estaba caliente y no iba aguantar, yo le dije que si le pasaba algo? Ella me dijo que no, hablando bajo y mirándome cada vez menos, ya que miraba hacía bajo.
Llamé a la camera para que viniera le pedí una copa y le subí mucha intensidad al vibrador y vi que intentaba mover la cadera, ya que el vibrador con la silla hacía que le diera demasiado placer, y cuando estaba ella intentando notar lo menos posible el vibrador moviéndose le dije que ella que quería, que se lo dijera a la camarera, sin mirarla y moviéndose le dijo que lo mismo.
Una vez paso eso le baje la intensidad, lo encendía y lo apagaba, por cierto ella no probo la copa ya que no le gustaba, solo lo pidió para salir del paso en ese momento de apuro, cuando le dije que nos íbamos se levantó y fuimos a la barra a pagar, le di dinero y le dije que lo hiciera ella, cuando estaba en la barra le di máxima intensidad, y la miraba ella subía la pierna al escalón de la barra, se movía, miraba hacia abajo incluso pude ver como su vestido estaba mojado, de antes al estar sentado en la silla.
La camarera se acercó y le dijo cuanto era, ella sin apenas mirarla le dio el dinero y espero las vueltas y rápido y con la cabeza sin mirar a nadie vino conmigo, en ese momento volví a bajar la intensidad y nos fuimos para casa.
Al entrar en el ascensor y cerrarse me acerque a ella, metí la mano por debajo de su vestido, note lo mojado que estaba todo su coñito y roce el coñito mientras ella gemía.
El ascensor llegó a casa, entramos a casa y fuimos a mi habitación, rápidamente me puse detrás de ella, le bese el cuello, le chupe la oreja y le puse un antifaz para que no pudiera ver nada, fui corriendo a la nevera y cogí dos hielos que tenía preparados dejándolos encima de la mesa, y con un pañuelo le até las manos detrás de la espalda.
La bese suavemente jugando con las lenguas, y seguí bajando por su cuello con los besos y por el escote, luego me puse detrás de ella y le bese el cuello a la vez que encendí de nuevo el vibrador, se estremecía de placer, juntaba las piernas, yo le besaba el cuello, a la vez que empecé a bajar su cremallera del vestido, que cayó al suelo, quedando solo con un tanguita de color negro, que se le metía en medio de ese culazo.
Me puse delante de ella, cogí un hielo y lo pase por sus labios, luego lo baje por su cuello y lo llevé a sus tetas, cuando estaba acercándose a los pezones, le di máxima intensidad al vibrador ella, con las manos atadas en la espalda, el hielo en un pezón, yo lamiendo su boquita y jugando con su lengua, doblaba las piernas y gemía de placer, parecía que se iba a correr ya que cada vez gemía más y más me acerque a su oído mientras tenía un hielo cerca del pezón y le dije córrete!!!! Y baje y le mordí el otro pezón cuando empezó a gritar que se corría, le temblaban las piernas y casi no podía mantenerse en pie.
La agarré para que no cayera al suelo después de ese orgasmo, le saqué el vibrador de ese coñito y la senté en la cama, para que se recupera unos minutos y mientras me quite yo la ropa, quedando completamente desnudo.
Cuando habían pasado unos minutos le puse la poya que la tenia dura, rozando esos labios, ella no lo podía ver ya que tenía los ojos tapados y tampoco la podía coger al estar atada, abría la boca para intentar llevarla dentro y se la metí en su boca, le dije cométela, que sabes que me gusta mucho y desde que te he visto esa carita me tienes caliente, y con ganas de que me comas la polla como tú sabes.
Me la comía despacio al principio y luego empecé yo a darle ritmo y follarle la boca con más intensidad, agarrándole la cabeza y escupiendo en mi polla y volviéndosela a meter toda una y otra vez,
Posteriormente la levante y la puse en la cama a 4 patas, seguía con las manos atadas, por eso tenía la cara contra la cama y el culo bien alto, lo abrí con las manos y empecé a comérmelo, ella gemía mucho, me había dicho en alguna ocasión que le ponía mucho que le comieran bien el coño y yo iba hacerlo el tiempo que hiciera falta hasta que se corriera en mi boca y me mojara toda la cara, Abrí su culo con las manos y metí la cabeza, le comía el coño que estaba muy mojado, y de vez en cuando subía al culo, para comérmelo también, y cada vez me centraba más en ese coñito, y en su clítoris que estaba muy durito, la lamia lo medio mordía y ella gemía cada vez más fuerte, mientras yo le decía esto es lo que querías eee que te comiera bien el coño que tienes!!! Disfruta que no voy a parar hasta que me llenes la cara, ella gemía y yo lo comía más rápido, cuando se puso a gemir más rápido, aumente la intensidad de las lamidas, metí dos dedos en el coño y le daba cachetes en el culo, mientras le decía que quería que me mojara la cara, que se corriera y empezó a temblarle de nuevo las piernas, y a chillar si si me corro cabrón!!!!!! No pares!!!! Y seguí hasta que se corrió y cayó sobre la cama.
De nuevo la deje descansar unos minutos, y cuando ya se había recuperado la volví a poner en la misma posición que estaba a 4, volví a lamer un poco el coño y el culo para que se pusiera muy caliente y luego le pase la polla rozando el coño y dando golpecitos con ella muy dura a su coño.
Ella hacía con el culo fuerza hacia detrás, ya que quería que se la metiera toda, pero yo la hacía esperar, le decía que si quería que la follara, que no la oía, ella me contestaba que si!! Que quería que se la metiera toda de una vez, que no la hiciera sufrir que, estaba muy cachonda!!!
Cuando menos se lo esperaba se la metí toda de golpe, y empecé a follarla cada vez más rápido, y fuerte, ella gemía y yo muy caliente se la metía toda agarrándola por sus grandes caderas y viendo ese culo grande como se movía con cada embestida mía. Le deba cachetes al culo, al principio suave, mientras la follaba fuerte y luego más fuertes, al ser blanquita de piel se le ponía el culo rojo fácilmente y con lo caliente que estaba, empecé a follarla más y más rápido, cuando pensaba que me iba a correr paré, no quería correrme, pero esta madurita con curvas me tenía muy caliente.
Le saque la polla de su coño, en la misma posición empecé a comerle el culo, ella gemía y le metí un dedo en el culo, ya habíamos hablado que a ella no le hace especial gracia que le follen el culo, y yo le decía que yo se lo haría despacio y le gustaría, cuando estaba bien mojado saque un PluF de culo, de tamaño pequeño y mientras lamía el coñito, jugaba con él en su culo, hasta que poco a poco entró en su culo y se quedo dentro de ella.
Luego volví a pasarle la polla bien dura por su coño y empecé a follarla otra vez muy fuerte, estaba ,muy caliente, y ella notar como la follaba bien fuerte, tener el culo lleno también y mis azotes en su culo la ponían muy cachonda y gemía cada vez más, diciendo que le gustaba mucho que la follara.
La puse de pie, contra la pared, le desate las manos de detrás de la espalda para que las pudiera apoyar en la pared, y me puse detrás de ella, le di dos azotes para que sacara bien el culo y le dije saca el culo, ella apoyada en la pared y con los tacones puestos, sacó mucho el culo para que yo empezara a follarle ese coñito cada vez más fuerte.
Le agarraba las tetas por detrás, no me cabían en la mano y pellizcaba los pezones que estaban muy duros, cuando estaba muy caliente empecé a follarle el coño muy fuerte, sus tetas se movían con cada embestida, con una mano la tenía cogida del pelo tirando hacía mi, con la otra le daba azotes al culo, y mi polla entraba y salía fuerte de su coño empapado y el culo lo tenía relleno con el Pluf, le dije que se corriera que lo iba hacer yo también.
Y la empecé a follar más y más fuerte, rápido azotando el culo hasta que no puede más y con sus gemidos y sus gritos de que se corría me corrí llenándole el coño de leche.
Me separé de ella y de su coñito salía mi semen, con cuidado le saque el pluf de su culo, y le quite el antifaz, me acerque a ella, nos dimos unos besos suaves, jugando con las lenguas y le dije que nos fuéramos a la ducha.
Nos duchamos, nos secamos el uno al otro y salimos a vestirnos, le dije que era pronto que llegaba a cenar a casa y que ya hablaríamos cuando llegara a su casa, que esperaba su llamada, nos despedimos, con unos besos. Y le dije que me había gustado mucho y que me encantaba que fuera mi sumisa.
Salió por la puerta y le vi mover ese culo hacia el ascensor, le dije que era una madurita que me la ponía muy dura, guiñándole un ojo.
Y nos despedimos.
Espero vuestros comentarios (correo), si os ha gustado.
Un saludo