Mi jefe.

Sueño con él y ahora que me ha llamado a su despacho, mi pulso cada vez es más rápido.

Mi pene rozaba sus testículos recién sacados de su pantalón y mi lengua comenzó a recorrer desde su barbilla al lóbulo de su oreja izquierda, desabotone lentamente los botones de su camisa...

Nic Nic Nic Nic.......

Son las 7 de la mañana, acabo de apagar el despertador, mi erección es dolorosa, aun siento en la punta de mi rabo los pelos de sus testículos, me chupo la mano bien de saliva y me masturbo con los ojos cerrados, aun veo su mirada, sus labios, sus manos, esos testículos que me imagino como pueden ser, se me hace la boca agua, me lamo los labios y gimo de gusto al sentir como el semen recorre los conductos de mi cuerpo, me la agarro duramente desde arriba y descargo sobre mi y en las sabanas acaba un reguero de lefa espesa.

9 de la mañana.

Ya estoy en mi mesa, sentado y con el ordenador encendido desde hace una media hora, debo entregar el articulo antes de las doce, pero me va a dar tiempo, siempre me da. Se abre la puerta de la sala y entra alguien, solo le miro los zapatos y la entrepierna, la boca se me hace agua, lleva hoy unos pantalones tan ajustados que dan poco para la imaginación, recorro con la mirada sus testículos y su rabo, tal vez el cuando se mire en el espejo se vea bien, y si esta bien, pero que muy bien, pero no para que parezca que lleva unas mayas de licra, subo la mirada y me encuentro sus ojos.

  • Buenos días Álvaro.
  • Buenos días jefe.
  • Raúl, dejate de jefe.
  • Lo intentare.

Lo de jefe me pone mas, bastante mas.

  • Pasate cuando tengas terminado el articulo por mi despacho Álvaro.
  • Emmm....si si claro.

Solo estuve dos veces en su despacho, cuando me realizo la entrevista y cuando me contrato, de esto hace ya mas de un año. Decidí poner en pausa su entrepierna en mi cabeza y me concentre a escribir. Dos horas mas tarde lo tenia ya resumido, editado, y listo. Me levante no sin antes imprimirlo y haciendo un desvió por la maquina de café, necesitaba un chute de cafeína antes de entrar en su despacho.

Toc toc.

  • Adelante.
  • Hola jefe, le traía el articulo.
  • Siéntate por favor.
  • Gracias.
  • Espera un segundo.- me dijo mientras por los ipod mantenía una conversación.

Aproveche y mire su despacho, no tenia nada de bonito, una ventana mala, la luz era mala y la ventana fea, solo tenia una puerta y cuatro paredes blancas y frías, algunas fotos perdidas por ellas y una mesa normalita con todo lleno de papeles, su macbook y un flexo que era lo único bonito, rosa y amarillo.

  • Perdona.
  • Nada.
  • Vale... si el articulo no hacia falta que lo trajeras, solo quería verte.

A punto del infarto estoy.

  • Vale.
  • Si el caso es que llevo meses leyéndote y creo que estas preparado para adelantarte en el periódico.
  • ¿Como?
  • De pagina, ahora mismo estas entre la 15 y la 18, sino me equivoco.
  • Así es.
  • Bien, a partir de la tirada del domingo pasaras a la pagina 3.
  • Peroooo...
  • Lo se y ya he hablado con el y esta de acuerdo, en lo que necesites te ayudare, pero no creo que te haga falta, enserio.

Tras decirme eso mi cara debía ser un poema, se levanto y se sentó en su mesa a escasos dos metros de mi. Su entrepierna de nuevo.

  • ¿Que te parece?
  • Estoy tan emocionado que solo puedo decir gracias.

Me sonrió y su entrepierna se recoloco .

  • De nada. ¿Te puedo hacer una pregunta no laboral?

Esto no me lo esperaba para nada.

  • Claro.
  • ¿Crees que voy demasiado ceñido?

¿Enserio?

  • Si lo creo.
  • Ya.
  • Pero si usted esta cómodo esta bien, vamos que cada uno viste como quiere.

Ahora enserio vas de sincero y con tu jefe....

  • ¿Puedo hacerte otra pregunta?

Entre el café, la noticia y las preguntas, me estaba poniendo malo. Con un gesto de cabeza le dije que adelante.

  • ¿Has tenido algún sueño conmigo?

Madre del amor hermoso, la madre concepción y la Veneno.

  • Si.
  • Se que me estoy andando con rodeos, perdona, cuando te contrate vi un chico de 28 años con ilusión, carácter y dedicación, con el tiempo y con las miradas que me echas en la entrepierna y tu sonrisa yo también he soñado contigo.

Tomaaaa yaaaaa, si hay una cámara de verdad que seria la ostia volver a verlo. JODERRRRR

  • Yoooo
  • Tranquilo no pasa nada.
  • Soy un poco descarado lo se.
  • Me gusta que lo seas, ¿me contarías alguno de tus sueños?

Apoyo las manos en la mesa con fuerza y abrió un poco las piernas. Su mirada....

  • Pues si pero...- mire hacia la puerta.

Se levanto y cerro con llave y se acerco al escritorio.

  • Olga cancela mi reunión de las 12 y no me pases llamadas ni que entre nadie.
  • Descuerdo jefe.
  • Raúl.
  • Eso Raúl.
  • Gracias.

Volvió a su sitio enfrente miá.

  • Adelante.

Cogí aire.

  • No había nadie en la sala de reuniones y mientras yo escribía usted se acercaba a mi y se sentaba encima de mis papeles, le bajaba la bragueta y le sacaba los testículos nada mas, metía mi cara en ellos y los chupaba y lamia un buen rato.

Mientras le contaba esto miraba hacia todos lados menos a el, hasta que escuche el sonido de su cremallera.

  • Continua.- metió la mano en la bragueta y rebuscando se saco los huevos.
  • Puesssss con calma yooo me sacaba el rabo y.....

Estaba ahí, delante miá con los huevos fuera de la bragueta, esos huevos que tantas veces soñé.

  • ¿Son como soñaste?
  • Mejor.
  • Mirame un momento. ¿Actuamos y luego hablamos?
  • Por mi perfecto.

El rabo ya estaba golpeándome por salir, me levante y me baje los slips y los pantalones, acerque mi silla a el y los admire, eran un par de huevos enormes, bien colganderos, estaban peludos pero no mucho, acerque mis manos a ellos y los manosee, lamí entre ellos y después cada uno, mi rabo goteaba de gusto, me los metí en la boca uno a uno y los disfrute, me incorpore y roce mi barbilla con la suya, nuestras narices se besaron, sus ojos cerrados del gusto de sentir mi glande pajearse con sus huevos. Me acerque al lóbulo de su oreja y lo lamí, lo mordí, sus manos soltaron la mesa y agarraron mi culo, con la lengua recorrí su mandíbula hasta llegar al labio inferior, se lo lamí y mordí también, sus dedos apretaban mas sobre mi piel, deje de pajearme y me puse a desabotonarle la camisa, sus ojos se abrieron y me miraron con timidez, tras terminar se la quite y el mientras me quitaba la camiseta, sus pezones oscuros estaban como el mármol, me lance de inmediato y se los comí, sus manos y sus jadeos aumentaron.

Hay gente que no se estimula con los pezones, yo me considero uno de ellos, pero que a ti no te guste no significa que al otro tampoco.

Baje por el camino de pelos desde el esternón hasta su ombligo, me volví a sentar y lentamente le quite el cinturón y desabroche su pantalón, su rabo salio como un resorte, un rabo grande y venoso, aun medio encapuchado, moreno como sus pezones, grueso muy grueso, lo sujete con la mano y lo observe, las gotas del precum le brotaron y se las lamí, le subí el pellejo y se lo mordí, con la mano libre agarre sus huevos y tire de ellos, la piel comenzó a tirar y se descapullo por completo, dejándome a la vista un glande enorme y hermoso, me lance a el y a todo su rabo, mi garganta se dilato hasta que toque con la barbilla sus huevos, el mientras tanto se retorcía de placer y por no gemir en alto se pellizcaba los pezones con fuerza.

En uno de mis sueños unicamente le comía el culo, después me corría en el y continuaba comiéndomelo, abrí los ojos tras sacarme su rabo de mi boca y sin pensármelo le agarre de las caderas y le hice girarse, coloque una mano en su espalda y le hice apoyarse en la mesa para que se quedara a cuatro patas, le quite el pantalón y el slip y abrí mejor sus piernas.

Por un momento me senté y masturbándome lentamente le mire de espaldas y ofreciéndome el ojete y no me cabía mas lefa y felicidad en el cuerpo en estos momentos.

Volví acercar la silla a el y me perdí en su culo, no era tan velludo como imaginaba, el ojal si pero no eran muchos, tenia un culo suave y terso, se notaba que hacia deporte, su ano entre marrón y rosado era una delicia, abrí sus cachetes y metí la lengua, soltó un gemido ahogado, no sabia muy bien lo que tenia el pensado pero yo en esos momentos no tenia muchas opciones.

¿Me lo follo?. Me lo follo.

Incorporándome agarre mi rabo y tras una buena escupida en su culo se la clave muy poco a poco, estaba tan excitado que si iba mas deprisa no tardaría en correrme, el arqueo su espalda y me empino el culo mas, dejándome mas facilidad para la penetración, poco a poco fue desapareciendo de mi vista mi rabo y terminando dentro de el, cuando mis huevos tocaron los suyos comencé poco a poco a follármelo, le agarre de las caderas y disfrute de su espalda, de sus dos lunares perdidos en ella, de esos hombros trabajados con pesas, de su nuca bien perfilada, lleve mis manos hasta sus hombros y le embestí varias veces con fuerza, nos reprimimos para gritar.

  • Alvaroooo.
  • Dime, ¿paro?
  • No no no, solo que quiero verte la cara.
  • Date la vuelta.

Se sentó sobre la mesa y apoyo los codos en ella, levante sus piernas y se la metí mientras me miraba con esos ojos marrones del color de sus pezones.

En esta postura y con el mirándome no me lo folle a lo duro, sino muy lentamente, ver su cara como cada vez que la sacaba y la volvía a meter era lo mas morboso que había visto nunca y como se mordía el labio inferior al golpear nuestras zonas bajas una con otra. Le agarre el rabo y lo tenia duro y muy descapullado.

  • Pajeame un poco y me corro.
  • ¿Quieres?

Con un gesto de cabeza me suplico por ello, le folle al ritmo de la paja y en cuatro mete saca comenzó a chorrear semen sobre mi y sobre el, no conté las descargas pero para mi fueron un montón, bajaba y subía su piel y la lefa recorría mis dedos lubricados y dándome mas placer a mi y a el, su cara de casi gritar me enamoro, se mordía la mano y convulsionaba fuertemente sobre la mesa, mi rabo se hundió en el y note como el semen salia dentro de el, casi solté un gemido al sentirlo y me lo trague, le embestí varias veces y se la saque.

Coloque sus pies con cuidado apoyados en el suelo y me tumbe sobre el.

  • Gracias.- me dijo entre risas.
  • A ti, joder, perdona...
  • Puedes decir joder tranquilo. ¿Puedo besarte ya?

Mi contestación como imaginareis fue comerle la boca como un poseso, y que boca nen@s , que lengua, ya me la imaginaba jugando en mi ojal.

Si quieres que continué comentarmelo o dime que me acueste. Un abrazo.