Mi jefe es muy posesivo parte 2

Después de la experiencia en el baño del antro, la verdad estaba nervioso porque que llegue el día lunes, claro que recibí mensajes de mi jefe diciéndome que fue lindo lo del viernes y que a pesar a haber tomado el recordaba todo lo ocurrido, la verdad yo no respondí solo estaba nervioso

Mi jefe es una persona posesiva parte 2

Después de la experiencia en el baño del antro, la verdad estaba nervioso porque que llegue el día lunes, claro que recibí mensajes de mi jefe diciéndome que fue lindo lo del viernes y que a pesar a haber tomado el recordaba todo lo ocurrido, la verdad yo no respondí solo estaba nervioso, pero como en casa los fines de semana todos salen a almorzar, me dejaron la casa sola, como llegue de madrugada les dije que quería quedarme a descansar, ya estando sola la verdad me probé varios conjuntos de ropa, (aunque no crean era con la intención de sorprender a mi jefe), empece por una falda con dobleces muy elegante a media pierna y unas medias negras de red tacones y una blusa roja floreada que hacia juego, luego fue un pantalón jean licrado, me quedaba súper bien, sacándome una cola redonda, esa la probé con un conjunto de lencería de encaje negro y arriba tenia una camisa negra de mangas 3/4, ambos me quedaron muy bien por lo que sin que se de cuenta mi hermana las saque de su closet, y lo último que me probé fue un legins negro medio transparente con una blusa café y tacones lencería blanca de encaje, que me gusto mucho, bueno tenia ya la ropa para cualquier ocasión que se presente con mi jefe, así que a esperar.

Y llego el lunes y como siempre llegue temprano, limpie un poco la oficina, acomode algunas cosas, llegaron mis compañeros mas bien todo normal solo las risas por compartir el día viernes y que bien la pasamos y que debemos repetirlas, cosas de amigos nadie sospecho ni se dio cuenta de nada, entonces le jefe me senti un poco tenso ese momento no les miento que me puse nervioso, entro a su oficina y me llamo, al entrar me pidió que cierre la puerta que me indicara para dar respuesta a una demanda, como siempre me agache en su escritorio para escribir y lo primero que senti fue su mano que me agarra las nalgas. La otra la puso en mi pecho buscando tocarme, y me dijo veamos como te viniste ahora mi perrita, y me metió la mano bajo el pantalón y sintió que traía un cachetero de encaje, me acaricio busco mi agujerito con el dedo y sobre la lencería intento meterlo me excito mucho ya que respiraba cerca mi cuello y me decía serás mía cada vez que quiera y solo mía entendiste “no sabia si era una imposición”, y asentí con la cabeza prácticamente ese momento le dije que solo seria suyo, me apretó los pezones me apretó los pechos y no dejaba de agarrarme las nalgas que buen momento, se alejo y me dicto algunas líneas de consulta y me pidió que me retirara.

Los días pasaron rápido cada ingreso a su oficina era excitante se paraba detrás mío sobaba toda su verga dura, palpitante en mis nalgas, apretaba mis pechos me acariciaba, me hacia sentir una zorra de como me trataba, a ratos quería ser penetrado ese momento sin importar el lugar, creo que ambos nos conteníamos de hacerlo hasta que llego el día viernes, para mi sorpresa el salió de emergencia, yo me quede con las cosas de nena que lleve en mi maletin deportivo para disimular, así que con los compañeros de oficina nos fuimos a jugar, a compartir y después yo me fui a casa, la verdad me senti triste porque me había hecho lo idea que seria distinto, sin embargo cerca de la media noche recibí un mensaje de mi jefe diciéndome “mañana te espero en la oficina a las 9, serás mi secretaria, es sábado nadie trabaja en el edificio pero ya le dije al portero que tenemos un pendiente urgente, te espero (sorprendeme)”, ese sorpréndeme realmente me sorprendió mas a mi creo, jajajjajajajaja, la verdad, me senti feliz, me costo dormir de la emoción, al día siguiente desperté temprano, me bañe muy bien y como no sabia que ponerme lleve los tres conjuntos que escogí en un maletín, llegue temprano como siempre, el portero me abrió la puerta y subí a la oficina, me aliste primero me puse el pantalón jean, un conjunto de encaje blanco debajo encima cambie la camisa negra por la blusa floreada roja, me puse un brasier blanco también de encaje, un poco de perfume de mi hermana, una peluca, un poco de maquillaje y labial, me puse crema y lo espere a mi jefe el llego cerro la puerta con seguro, me saludo señorita buenos días y se entro a su oficina, enseguida me llamo a su oficina, ni bien cerré la puerta me dio un beso que fue bien correspondido, mientras con las manos apretaba mis nalgas me metía mano que rica sensación, besaba mi cuello, mordía mis orejas, mis labios, me tomaba de la cintura apretaba mis pechos, rayos me excito ese momento no me quede atrás empece a apretar su verga que se hacia dura y crecía entre su pantalón, la verda fui yo quien le dijo no aguanto quiero volver a ser tuya, el había desabrochado su pantalón, se lo baje, bajo su bóxer se notaba su dura verga, que al tocarla palpitaba de lo dura que estaba no espere mas lo saque lo mire y me lo fui metiendo a la boca de a poco el me agarro la cabeza quería meterlo de golpe le dije será a mi ritmo cariño ok, el me miro y dijo tienes carácter perrita, me gusta, empece suave quería sentir cada centímetro, saborearlo, lamerlo, hasta tenerlo dentro se lo bese de los mas rico, acaricie sus enormes bolas duras, lamia desde la base hasta la puta de su verga, se lo hice rápido, lento, lo pajeaba, solo sentía como disfrutaba acaricie sus piernas, apreté sus nalgas también eso le gusto, y de pronto me dijo mi turno, me paro me puso de espaldas desabrocho mi pantalón y me lo bajo muy lentamente, lo sentí agacharse, empezó a morder mis nalgas al principio un poco brusco luego lo hizo mejor, me las besaba sobre la lencería pasaba su lengua cerca a mi anito, por delante acariciaba mi cintura y la parte de adelante me excite salía líquido preseminal, con su dedo lo esparció y al pararse me lo llevo a mi boca, ese momento le pedí que me lubricara mientras sacaba el lubricante me desabrocho la blusa acaricio mis pechos me dio la vuelta me beso de nuevo, la boca, el cuello, mis pechos, me mordía los pezones, que rica sensación, me volvió a girar me bajo el cachetero, me hizo inclinar sobre el escritorio me puso el lubricante en mi agujerito, el sobrante se lo puso el y me acomodo la punta en la entradita, me pidió que con mis manos abra mis nalgas y así lo hice con ambas manos, lo que dejaba una buena vista y la entrada libre a su verga, empezó a penetrarme la misma sensación entre placer y dolor al principio siempre se siente cada centímetro que entra, el sabia que me dolía un poco, y lo hacia lento, lo metió suave hasta el fondo, entonces me tomo la cintura yo ya sabia que la tenia dentro toda su verga, empezó el mete saca, primero suave, y fue subiendo el ritmo hasta que me hizo gritar ya que cada embestida me la metía hasta el fondo de golpe entre gemidos le decía hasta donde mas la quieres meter ya llego hasta el fondo , el lo seguía haciendo yo gemía ya era de placer la pocision era la correcta me sentía bien y el no paraba luego se salió pensé que había terminado, pero me dijo date vuelta y me recostó sobre el escritorio, agarro mis tobillos abrió mis piernas y volvió a penetrarme de golpe, cada embestida sentía su verga en mi estomago pero me gustaba como me estaba follando, cerraba los ojos disfrutaba el momento, soltó mis piernas, me apretaba los pechos se acerco a mi me beso la boca, el cuello, me puso de costado realmente no paraba el seguía y seguía en todo ese tiempo termine y le dije que iba a volver a terminar ahí me dijo que lo hagamos juntos y me dijo donde lo quieres, le dije todo dentro para ser tuya y así fue cada chorro de leche era fuerte, caliente, lo sentía dentro ese momento lo abrace le dije que seria suya cuando quiera y donde quiera, el no paraba de besarme de apretarme los pechos y de moverse, hasta que se quedo quieto unos minutos y se salió, como buena mujercita se lo tuve que limpiar bien con la boquita, me dijo que fue el mejor polvo que tuvo, quien iba a pensar que seria conmigo, de verdad que me lleno de leche, me levante, recogí mis cosas y antes de salir, me sorprendió que me diga que descanse un momento, que él también lo haría.

Aproveche ese momento me fui a asear ya que no paraba de salir toda la leche que me dejo se escurría por mis muslos, la verdad que me dejo agotada y bien follada, entonces me puse la falda corta negra, debajo una tanguita de encaje negro, medias de red a media pierna, encima una blusa negra y tacones, me volví a maquillar un poco labial, perfume, peluca acomodada y espere que me llame nuevamente, habrá pasado una media hora en todo eso cuando volví a escuchar su voz llamándome, Mariana, ya que le dije que me llame así cuando estemos solos, al entrar a la oficina lo vi sentado en su silla sin ropa con la verga bien parada, esta ves yo tome la iniciativa me acerque, subí la falda, y me senté frente a el solo hicimos a un lado la tanguita y me penetro nuevamente lo hicimos a mi ritmo entre rápido y lento adelante y atrás, me volví una loca su verga era muy rica dura y vaya que duraba lo cabalgue mucho tiempo el me tocaba todo me besaba me mordía, apretaba y me daba nalgadas, pare un momento no quería que termine aun, me levante le di la espalda, y me senté así con las piernas cerraditas, vaya que lo sentía más apretó, escuachaba como gemía de placer al igual que yo, de un momento, se paro me puso en el escritorio hizo que levante una pierna sobre este y me siguió follando, vaya que lo hacia muy bien mi jefe no quería que termine me sentía muy cómoda con el, sabia lo que hacia, ya que me aviso que se vendría me solté, me día la vuelta, me agache y recibí toda su leche en la boca, como buena secretaria me lo tragué todita, y se lo deje muy limpia su polla, me pare me baje la falda, le di la espalda me dio dos buenas nalgadas y me dijo que se repetiría, gire la cabeza le guiñe un ojo y le dije “cuando usted guste jefe”, y salí contoneando mis caderas, me dijo muy cansada y muy feliz, mis piernas temblaban aun me cambie como pude y por el comunicador le dije que me retiraría, me despedí y me fui a casita a tomar una ducha y a dormir.

Repetimos unos cuantos sábados, hasta que ahorre dinero y defendí mi titulo, por lo que tuve que dejar el trabajo, el agradeció mucho mi ayuda mas que todo cuando era su secretaria personal, así que ahora he me encuentro trabajando en otra oficina con varios abogados que son buenos compañeros, a mi ex jefe me lo encontré por la calle siempre me saluda muy cordial y desea que este bien, lo cual agradezco mucho.

Espero les haya gustado el relato espero sus comentarios.