Mi jefa madura y fetichista...
Como termine a los pies de mi madura y fetichista jefa...
Mi jefa madura y fetichista
Por: Luis Felipe
Email: amantedemadurasccs@hotmail.com
Hola a todos, después de varios años leyendo a menudo los relatos de esta prestigiosa página, me decidí a publicar un relato que me ocurrió hace aproximadamente 10 años, cuando tenía 18
Empecemos por presentarme, soy un chico de Caracas-Venezuela, de estatura 1m81cms, cabello castaño, piel blanca, y con unos atributos físicos bien normales, que aunados a mi gran facilidad de expresarme y mi buena crianza y costumbres gracias a la buena posición económica de mis padres, me ha llevado a conquistar con algo de facilidad las chicas que me propongo, sin rayar en lo modesto
Tengo dos debilidades profundamente marcadas en mi vida y al pasar de los años se han ido profundizando, y son el fetichismo por todo lo concerniente a los pies, calzado, medias panty, botas y lencería erótica femenina, y el estar con mujeres mucho mayores que yo, de aquí partimos para mi primera experiencia que me ocurrió de este tipo, cabe destacar que es un relato 100% real
Vivo como les dije ya en la capital de Venezuela, Caracas, una gran ciudad, con todos los problemas que las grandes urbes poseen, y ampliamente conocidos por todos, a los 18 años estando recién graduado del bachillerato, como se le llama aquí, antes de empezar la Universidad, decidí empezar a ganarme la vida por mi cuenta sin depender tanto de mis padres, y aunque esta idea no les gusto mucho al principio puesto que pensaron que así olvidaría mis estudios Universitarios logre convencerlos, fue así como conseguí empleo en una empresa de venta de materiales para la industria medica, iniciándome como ayudante administrativo, no empecé de mensajero que es como se acostumbra en mi país a esas edades ya que por mi físico bien formado, para un chico de esa edad, y mis buenas costumbres me hicieron saltar ese primer escalón sin siquiera pisarlo
Era una mediana empresa de unos 80 trabajadores aproximadamente, el grupo de trabajo que me rodeaba (área administrativa), estaba conformado por mas mujeres que hombres, exactamente éramos 8 de los cuales tan solo éramos dos hombres (cabe mencionar que mi "compañero" era mas compañera que otra cosa), y 6 mujeres, incluida mi jefa directa y directora de todo el departamento, y aquí empieza lo bueno
Mi jefa vamos a llamarla Sofia, por aquello de mantener los personajes en secreto, era una mujer de unos 49 a 52 años (53 me enteraría de su propia boca mas tarde), pero que PARA NADA aparentaba esa edad, con todo y que su cuerpo no podía esconder el paso de los años, mostrando ciertos pliegues en su piel Posee un par de tetas 42D, algo que con palabras es muy difícil de explicar, es rubia de aproximadamente 1m75cms, y un culo, realmente de campeonato, algo entradita en carnes pero justo en el punto exacto para dar placer a cualquier hombre que se le antoje por horas y horas
Además de su GRAN cuerpo Sofia era una mujer que vestía siempre gracias a su importante cargo en la empresa, de manera muy sofisticada y elegante, con conjuntos de falda, y chaqueta, blusas mas tapadas que escotadas, y sus piernas siempre bien enfundadas en un par de medias panty, terminando en tacones altos, y sandalias, logrando que hasta el compañero mas intachable, dedicase minutos de sus tertulias en pasillos y áreas comunes hablando de semejante monumento de mujer
Sofia es una mujer felizmente casada y madre de 3 hijos, dos mayores que yo, y otro mas joven, tenía varios años trabajando en la empresa motivo por el cual ocupaba el cargo que ocupaba e imponía el respeto que imponía. En su lugar de trabajo imponía muchísimo respeto y hasta miedo en toda la empresa ya que era una mujer 200% eficiente en sus labores y disponía de una gran fama de excelente mujer, madre y amiga fuera de su lugar de trabajo
Al comenzar a trabajar allí me presentaron a Sofia, indicándome que era la jefa del departamento y la "mano derecha" de los dueños. Nuestro trato fue siempre muy ameno, empecé a notar rápidamente como sofia tenia detalles conmigo que no tenia para el resto de empleados, como eran, llamarme a su oficina muy a menudo, pedirme favores dentro de la empresa y a veces fuera de ella y de índole personal, como buscar a su hijo menor al colegio, etc A pesar de este trato Sofia, no dejaba de llamarme por mi apellido, y era raro ver una sonrisa en su rostro a la hora de hablarme, situación que fue creando en mi cierto grado de morbo, ya que me sentía atraído por mi jefa por su manera de vestir y por su trato tan respetuoso conmigo
Una tarde ya casi al salir de la oficina, Sofia me llamo a su oficina, por su puesto fui de inmediato
-Con permiso.
-Adelante Sr. Jiménez, lo molesto, para solicitarle si esta a su alcance un gran favor.
-Diga usted jefa.
-Miguel (Su hijo menor), está en práctica de futbol, y sale en una hora, debido a que en pocos minutos estaré entrando a una reunión con la junta directiva, y que mi esposo no esta en la ciudad, me preguntaba si Ud., podría buscarlo y llevarlo apara la casa, allí estará la señora de servicio que lo recibiría.
Escuchando todo esto yo seguía allí de pie frente a su gran y elegante escritorio viendo de arriba abajo a mi jefa, vestida con un traje negro, de falda hasta las rodillas y chaqueta, y una blusa blanca que aunque no poseía escote no podía disimular lo indisimulable, sus grandes tetas, y por supuesto, sus piernas lucían unas medias panty negras terminadas en unas sandalias altas que dejaban ver la punta de sus dedos, ante semejante visión, perdí un tanto el orden de su petición dejando escapar el momento en que ella terminaba de hablar a la espera de mi respuesta, razón por la cual ella me saco de ese trance con una nueva interrogante:
-Se encuentra bien Sr. Jiménez?
-Si disculpe jefa estaba pensando en otra cosa, pero si claro cuente conmigo enseguida salgo a buscar a Miguel, permiso
-Adelante y muchas gracias.
-No hay por que jefa, Hasta mañana.
-Hasta mañana.
Salí de su oficina algo preocupado, puesto que estaba casi seguro que Sofia me había pillado viendo sus piernas atónitamente, pero fui igual a cumplir con su mandato. Busque a Miguel el cual ya me conocía puesto que frecuentaba la empresa, y lo lleve sin mayores contratiempos a su casa
La mañana siguiente al llegar a la oficina Sofia me mando a llamar de inmediato, lo cual creo en mi un gran nerviosismo, ya que pensé que me reprocharía algo de lo sucedido la tarde anterior en su oficina, no la hice esperar
-Con permiso.
-Adelante Sr. Jiménez.
Como siempre entre y cerré la puerta de la gran oficina la cual posee una gran vista de toda Caracas.
-Sr. Jiménez, quería hacerle unas preguntas, ya que últimamente lo he notado algo distraído en su trabajo.
-Dígame jefa.
-Hay algo que lo perturbe o tenga preocupado en la empresa?
Quedando un poco mas nervioso le conteste:
-No jefa realmente no, porque viene su pregunta?
En ese instante Sofia se puso de pie y camino hacia el gran ventanal dándome la espalda..
Ante mi quedo aquel cuerpo ya antes descrito, esta vez vestido con una falda negra algo mas corta que de costumbre, una blusa algo mas transparente, que dejaba ver muy ligeramente su sostén (corpiño o sujetador en algunos países), de encaje negro, su chaqueta del mismo color, y sus medias de micro huecos también negras, con unas sandalias de fino taco alto, del mismo color, y que dejaban prácticamente todo su pie al descubierto , con tan solo una tira que le cubría el talón, y la cual pasaba por su empeine, ante semejante visión, y con el temor interno de que me reprochase algo de mi descuido la tarde anterior, apareció en mi cuerpo un gran grado de excitación que mi jefa y sus atuendos lograban en mi día tras día, así como en casi todos los hombres de la empresa
Aun de espaldas a mí, me dijo:
-Lo que sucede Sr. Jiménez es que ayer cuando le solicite el favor de buscar a mi hijo, note en usted un cierto letargo aunado, a que su visión se perdía en algo mas que mi rostro hablándole
Me quede frio sin saber que decir, tan solo atine a tartamudear:
-Jeeefaaa, veeeraaa usteeed
En ese momento me interrumpió, con voz de mando , algo elevada y directa, Sr. Jiménez cállese, y venga hasta aquí.
Sin saber que hacer, seguí sus órdenes sin poder disimular que algo se apoderaba de mi miembro, el cual empezaba a hacerse sentir a través del pantalón.
Al acercarme a ella, se dio vuelta repentinamente, y me ordeno:
-Arrodíllate y besa mis pies
Este cambio en su trato del formal "Sr. Jiménez" a "arrodíllate", y el mandato que me ordenaba hizo que el grado de excitación de mi cuerpo se terminara de disparar a las nubes, y casi sin pensarlo caí a sus pies, empezando con besarlos sin tocarlos con mis manos, después de un par de minutos así, en los cuales trate de dedicarme al máximo, ya que es algo que me excita sobremanera y mas si los pies están calzados en medias y sandalias como era el caso, Sofia me aparto un poco usando su mismo pie, cayendo hacia atrás en el medio de la oficina, con una erección a través de mi pantalón mas que evidente, ella se acerco a mí y acto seguido empezó a masajear con su zapato mi huevo (polla, pija, miembro), al mismo tiempo que me decía:
-Esto es lo que soñabas desde que llegaste a esta empresa verdad?, querías ser mi perrito y esclavo sexual cierto?
Yo sin poder pronunciar palabra ante la gran excitación que me poseía, tan solo atinaba a asentar con mi cabeza...
-Párate y quítate la ropa
Obedecí de inmediato, quedando ante ella, completamente desnudo con mis 19 cms de huevo apuntando al punto mas alto, entonces me dijo:
-Quítame la ropa, con sutileza, esclavo
No dude ni la hice esperar y empecé primero con la chaqueta , después la blusa, luego baje a quitarle las sandalias, a lo que recrimino:
-Ni se te ocurra!, las sandalias y medias son inquitables, no puedo estar sin ellas, como tu tampoco puedes estar sin mirarlas!!!
Me sentía en el paraíso, dominado y a los pies de mi jefa, una mujer de cuerpo espectacular, madura y además con el mismo fetiche que yo, las medias, y zapatos Le saque la falda quedando ante mí otra prenda que por razones obvias no sabía de su existencia, unos ligueros (portaligas), que culminaba su estampa, para mis ojos
Camino hacia un gran sillón de cuero que tiene en su oficina y se sentó, ordenándome arrodillarme a sus pies:
-Chúpame los pies, piernas, sandalias, ya que veo que te esmeras en ese particular y no lo haces mal
No la deje terminar de hablar cuando ya estaba allí besando sus dedos a través de sus medias panty, besando el tacón de sus sandalias, sus medias a lo largo de sus hermosas piernas Estuvimos así alrededor, de 1 hora, me extraño que en ese lapso nadie llamo a su teléfono interno ni tampoco a su puerta, mas tarde me enteraría que había dado órdenes a su asistente antes de yo llegar a su oficina de que así fuese, cuando levante la mirada puede ver a mi jefa tocándose las tetas y el clítoris con gran frenesí y en su rostro dibujada la satisfacción de estar en un trance
Luego de tanta excitación tome mi huevo (que aun y a pesar de estar una hora así se mantenía firme apuntando a lo mas alto), con mí mano para intentar liberarlo de su tensión, cuando sentí una cachetada que me alejo unos centímetros de Sofia, al mismo tiempo que me recriminaba:
-Quien te dio permiso para masturbarte?, quiero que sepas que de hoy en adelante tu no tomaras decisiones por ti mismo, y te tendrás que portar muy bien y obedecerme a la perfección podrás que algún día piense en dejar masturbarte para mí.
Acto seguido siguió masturbándose hasta llegar al clímax, conmigo por supuesto a sus pies dedicándome aun a adorar, masajear, besar, sus pies, zapatos, y piernas
Desde esa tarde me convertiría en su esclavo personal satisfaciendo varias de sus fantasías que mas adelante contare
Muchas gracias por el tiempo que dedicaron leyendo este relato, y espero sinceramente haya sido del agrado de la mayoría de ustedes
P.D.: Si alguna madurita o chica amante de lencería, fetichista de pies, medias panty, sandalias altas, de Caracas, leyó esto y desea compartirá sus experiencias conmigo, gustosamente estaré aquí para ti.
amantedemadurasccs arroba hotmail.com