Mi inocente vecina (1)
me fije en uno en cuestión no por su atractivo y espléndido cuerpo joven y moldeado, sino por que este tampoco dejaba de mirarme y de una manera muy penetrante...
Mi Inocente vecina I
Hola, me llamo Susana, ante todo gracias a todos los que me habéis leído, sobre todo aun más agradecida a aquellos que me habéis escrito. Ante todo perdonarme pues esta nueva confesión aunque satisfactoria al menos para mí, es bastante extensa por lo que os la confesares en dos partes, pues no deseaba cortar o mejor dicho privaros de esos momentos tan satisfactorios.
Esta nueva confesión os la voy a narrar muy a pesar mía en dos partes más por todas aquellas criticas que opinan los extensos que son, por lo que me lo apunto en esta nueva confesión. Comenzare pues, intentare no cansaros liarme demasiado en detalles o algún anécdota o acontecimiento alguno. Os confieso que lo cierto es que no se como coño acabe liada en tal situación y tampoco tengo justificación para ello. Lo cierto es que lo que os voy a confesar es un hecho bastante insólito aunque cierto, me ocurrió hace al menos unos cuatro años. Os pondré en antecedentes antes de iniciar por lo ocurrido.
Os diré a modo de que mi hagáis una idea que cuando me compré el piso o mejor me lo buscaron vivía prácticamente sola en mi planta, todo era silencio y calma... que todo hay que decirlo me venía muy bien, más por el entrar y salir de mi piso de mis amigos, amigas y (Dios, que juergas me pegue). Con el pasó de los meses conocí a la dueña del piso contiguo al mío, una mujer mayor con cara de perro y de muy mala ostia, que tras presentarse me pidió que de vez en cuando echará un ojo a su piso pues según ella viva en un barrio de Sevilla llamado "Los Pajaritos" e intentaba venderlo pero sin resultado no me extraña, quien coño iba a comprar semejante zulo.
Bueno continuo, me comento que los fines de semanas lo iba a utilizar una nieta suya como lugar de reunión y estudio con sus amigas (inocente la cabrona). Durante algunas semanas los fines de semanas estaban tranquilos e incluso cuando entraba o salía de casa observaba el entrar y salir de chicos... que inocente la chiquilla. Obviamente en la viña del señor no todo iba a hacer silencio, un domingo en cuestión aquello se pasó de castaño oscuro, ya no sólo era la música a todo volumen sino los mismos porrazos a la pared... no aguanté más, como un resorte aparecí en su puerta y tras tocar el timbre en unos minutos se escuchaba los murmullos de pánico ante la ignorancia por saber quién estaba al otro lado de la puerta.
Recuerdo que tras abrirse está, apareció una chica muy joven e inocente aparentemente esto ultimo, bastante robusta pero no muy entrada en carnes, quién por su forma de hablar de forma autoritaria me quiso intimidar, tras comentarle quién era yo y los problemas que tenía respecto al ruido, está en un primer momento se hizo la sueca pero tras amenazarla por llamar a su abuela (mi vecina) o incluso a la misma policía, me rogó que no lo hiciera que se portarían bien y la verdad aquello funcionó.
Os comento que en las semanas siguientes a la señora o sea mi vecina, le ponía al corriente de las novedades sin mentarle las fiestas de su nieta... al menos de momento (joder, no era tan hija de puta como lo soy hoy en día, aunque eso se aprende a base de recibir palos). Pero como no hay una sin dos la volvieron a formar la música demasiado elevada porrazos en la pared, etc., por lo que volví a llamar a su puerta y está vez, en vez de aparecer la sobrina mari macho de mi vecina, apareció una chica e igual que joven que ella pero con aires de superioridad, de piel más morena muy delgada, tan hermosa como sensual con un cierto puntillo de alcohol (joder, por no decir borracha).
Recuerdo sobre todo a está chica por su desfachatez y por su cara dura, pues nada más abrir la puerta me pregunto sin que me diera tiempo a abrir la boca, me pregunto por si yo era la chica de la maleta roja (coño, eso si que no lo esperaba), ante primero mi silencio y no menos cara de desconcierto quiso cerrarme la puerta en mis narices, acabando por mentarme que no le interesaba nada de lo que pudiera vender.
Os juro que me dejó blanca sin saber que decir, para cuando reaccione rápidamente salió la sobrina la cual se disculpó por la actitud de su amiga argumentando que esta había comido algo seguramente en mal estado no me extraña la verdad. Pero lo cierto es que no me pude contener, dejándome llevar por los nervios más ante tal pasotismo y chulería de estas, siento mucho que en ese momento me deje llevar por la tensión y los nervios, aún más cuando estos no sólo me levantaron la voz sino cuando me faltaron al respeto, pues en esos momentos debí recordar quién era el adulto y quien la menor pues es esto precisamente lo que nos diferencia (si la educación lo olvide).
Pues sí efectivamente no sólo les levante la voz yo también sino que intruso le falte a ella el respeto... rebajándome a su mismo nivel, acabando por volverla a amenazar con llamar a su abuela o denunciarla a la policía, recordando el buen resultado de la vez primera. Tras finalizar la discusión me volví a meter en mi piso aunque esta vez me marche yo malhumorada e incluso decepcionada conmigo misma, por lo que decidid tomar una ducha a modo de bajarme los malos humos, mientras iba al baño me fui desnudando y tras ducharme me puse el pijama mas bien lo que normalmente me suelo poner, la parte superior de esta pues como norma general suelo dormir en braguitas o solo con esta como única prenda.
Recuerdo que tras coger un libro me deje caer sobre el sofá a leer un poco, sobre las 9 o 9.30 horas sonó el timbre de la puerta, tras encaminarme hacia está a ver quién coño era abrí, sin caer ni tan siquiera en lo que llevaba más por poder ponerme algo más acto. Tras abrir la puerta me encontré con la desagradable aparición de mi vecina... la abuela de la niña, el padre hijo de mi vecina y padre de la niña y la niña... la puñetera nieta e hija
Os podéis imaginar la escenita, no sólo me increpaba la niñita de mi conducta sino que hasta su misma abuela la reprochaba comentándome que debía de dar ejemplo de mis modales. Recuerdo que cuando hice mención de las entradas y salidas de chicos... casi me comen (joder, me saltaron como lobos), no sólo me llamaron mentirosa sino que al mismo tiempo comenzaron a chulearme siendo prácticamente atacada por 3 bandos, pues al tiempo que su padre la defendía de ser una angelical y dulce niña no apartaba sus ojos de mi camiseta... de mis más que marcados pezones en está.
Obviamente considere que el silencio era la forma más adecuada para finalizar la discusión claro error por mi parte nuevamente, pues la muy cabrona no sólo me estaba dejando mal sino que me dejaba en evidencia. Está no dejaba de mentar que no sólo le había amenazado sino que le había formado un numerito en presencia de sus amigos, claro está intentaba defenderme llegando a mentarle que le amenace por llamarla a ella... a su abuela, respondiéndome está por que no la llame, aunque intentaba hacerle entender que era una manera que se asustará y que sí ante tal evidencia no llame a nadie, tras un buen rato "dialogando" por fin zanjamos la discusión.
Obviamente tras marcharse estos como os podéis imaginar como estaba no tenía ni ganas para follar ni con mi chico ni con nadie, por lo que cogiendo una gabardina (más por ponerme algo) y el bolso salí de casa y me marché a casa de una amiga a modo de poder vaciarme con ella... y no veáis como esta me vacío. Cuando llegué a casa de está me recibió no solo con los brazos abiertos, pues tras dejar caer la gabardina supo rápidamente lo que realmente necesitaba, tras ver mi escasa indumentaria me comento que debíamos de ir a hablar a un sitio algo más cómodo a su dormitorio.
Continuo, durante toda la semana se planto la tranquilidad aunque lo cierto es que tampoco yo estaba lo suficiente como para afirmarlo, pues como bien sabéis entre que salgo tarde o me acerco a los aparcamientos de la Expo ya sea por la entrada en la cual las autoescuelas preparan a los motociclista o entro por el acceso que da al estadio olímpico y que esta por debajo de la súper norte. Cuando acabo solo tengo ganas de dirigirme a casa para asearme, ponerme algo cómodo y cenar, y en el caso que esa noche este mi chico cumplir al menos para poder dormir mejor pero lo cierto, es que quien dormirá será el mientras yo me iré al PC y conectare el Messenger o sacare del polvo de mi diario alguna confesión e intentare pasarla al Word.
Bueno como no hay dos sin tres en esta ocasión en vez de ocurrí el domingo ocurrió el sábado, estaba yo en casa bastante liada y desde el tabique se escuchaba nuevamente el ruido que provenía del piso de mi vecina pero no está vez no iba a actuar, esta vez iba a pasar del tema por lo decidí ir a lo mió aunque la estuvieran matando iría. Minutos más tarde sonó el móvil y tras ver el desconocido número conteste era la cabrona de mi vecina, la cual me pedía echar un vistazo a su nieta pues el vecino de abajo le había informado del escándalo. Tras una mera conversación entorno al "escándalo", me pidió disculpas aunque eso sí con una semana de retraso y tras fui a echar un vistazo lo que vi me dejó de piedra.
Os cuento, las chicas estaban casi desnudas pues sus modelitos dejaban en evidencia sus cuerpos inocentes, evidentemente la música estaba muy alta, había bastante alcohol y había chicos que estos no deberían ni de estar. Recuerdo que me fije en uno en cuestión no por su atractivo y espléndido cuerpo joven y moldeado, sino por que este tampoco dejaba de mirarme y de una manera muy penetrante... creo que me delaté. Tras poner una música algo más lenta comenzó este chico a despojarse de algunas de sus prendas al compás de esta (coño, que eran demasiados jóvenes como para solo pensar esa posibilidad), apareciendo otra chica de la multitud me dio algo de beber un cubata, el cual tras unos sorbos extrañamente comencé a encontrarme mareada y lo peor sofocada de calor.
Cuando este chico semí desnudo se me acercó, comenzó a bailar alrededor de mí y a pegar y restregar su joven cuerpo al mío haciéndome sentir a la altura de mis nalgas algo duro que provenía del interior de su bóxer... Dios sabe que quise resistirme, pero esas manos aunque inexpertas (al menos eso quise creer), estaban logrando lo que pretendían uuummm. Creo recordar que yo en ese momento era el centro de atención pues sentí las miradas de todos ellos en mi, no se por que razón me fije hacia un lado, descubriendo como la hija de mi vecina la cual se encontraba en compañía de su amiguita se estaban riendo de mi al tiempo que me señalaban al menos eso lo creí en ese momento, ignoro el por que y aun menos podía saberlo más por el estado en el que me encontraba.
Os aseguro que me sentía aturdida, mareada e incluso mi vista estaba cada vez más borrosa llegue a pensar que estaba siendo señalada con algún objeto e incluso pensé que quizás fuera un puntero láser, pero cuanto quise acercarme era persuadida por este chico a base de caricias de las más malévolas.
Os admito que me sentía en la gloria pero ya no solo estaba siendo acariciada por un chico sino que ya eran dos, notaba como las manos del primero se habían introducido bajo mi vestido y me acariciaba desde mis hombros hasta mis nalgas ooohhh. Mientras las del segundo no solo habían comenzado a magrear mis senos sino hasta a chuparlos y lamer mis pezones hasta endurecerlos uuummm (joder, que sois niños y que niños).
Os juro que intente rebelarme pero ignoro por que no me salían las palabras de mi boca, quizás me negaban a salir al sentir como algunos de esos dedos jugaban con mi vulva al tiempo que otros se deslizaban por mis labios vaginales, mire hacia las chicas con una mirada de socorro pero ni por esa aun más por que el siseó de uno de los chicos me mandaba sumisión a modo de "quita zorra". Sin apenas haber acabado mi primer cubata ni me dio tiempo a soltarlo cuando me dieron un segundo. No se como explicaros aquella situación en la cual yo fui quien manoseada contra mi voluntad entre estos dos chicos jóvenes.
Os afirmo que ignoro de donde coño saqué fuerzas para salir de ese infernal piso, pero doy gracias a mi fuerza de voluntad por no solo salir sino por no llegar a acabar en la cama con estos dos jóvenes chicos que lo cierto que no me hubiera importado. Pues si antes mi cuerpo no cedía más ante tales magreos de placer, si lo hizo cuando sentí como unos dedos se introducían tanto en mi orificio vaginal como el anal haciéndome sobresaltar más por el dolor de esos dedos inocente e inexpertos que por el placer, tras soltarme de tales degenerados me dirigí a toda leche hacia la puerta con la idea de salir y adentrarme en mi casa. Recuerdo que no tuve tanta suerte como había pensado pues esta se encontraba cerrada e ignoro como abrir esos putos cerrojos.
Joder me encontraba mareada, sofocada e intruso os afirmo que sin aliento más por culpa de las zancadas que me pegue hasta la puerta o quizás fuera algún ingrediente del cubata, como una luz en la oscuridad apareció la nieta de mi vecina Roció (que es como se llama la chiquilla) y Anabel su amiga (por el color de su piel al principio creí que se trataba de una mulatilla, magrebí e incluso quizás gitana), las cuales se ofrecieron su ayuda a acompañarme a mi piso.
Sabéis una vez que entramos en mi piso me dejaron caer inicialmente sobre mi sofá, no me podía ni aguantar con mis propios brazos por lo que imaginar de pie, tras escuchar tras de mi un ruido deduje que se trataba del portazo al cerrar la puerta al menos eso creí, tras sentir de nuevo sus manos en mis brazos me volvieron a levantar llevándome esta vez a mi dormitorio. Notaba como si me zarandeaban ignoro el cometido o el por que para continuar por dejarme caer sobre mi cama, mientras las escuchaba hablar mas bien diría discutir por algo, al tiempo que oía unos ruidos de fondo los cuales la verdad lo ignoro su significado.
Recuerdo que tras despertarme por la mañana eso si con un tremendo dolor de cabeza, me encontré tras destaparme con sólo mis braguitas como única prenda, tras poner la cafetera me di una ducha pues la necesitaba para continuar por tomarme ese gran y cargado café, siendo alertada por los ruidos que provenían del piso de al lado llegando a pensar que estos aun continuaban de fiesta, pensé en llegarme nuevamente primero por averiguar dichos ruidos y segundo por averiguar como coño acabe en mi cama casi desnuda (mi miedo en esos momentos era por si llegue a ser alguna locura con los chicos).
Por lo que antes de presentarme en la puerta me puse algo por lo que cogí lo primero que vi (un vestido tipo buzo negro) y me pinte algo más por aprovechar para salir luego. Tras presentarme delante de la puerta de mi vecina llame, apareciendo Rocío que tras preguntarme por mi estado y sin dejarle acabar le pregunté por como coño acabe casi desnuda en la cama.
Recuerdo que al tiempo que me siseaba y movía sus manos de arriba hacia abajo a modo de que bajara la voz más por evitar escándalo alguno antes los vecinos. Al tiempo que apareció su amiga Anabel, entre las dos intentaban explicarme lo sucedido por lo que me comentaron a modo de que yo recordará era repetir lo que hicimos la tarde noche anterior, la verdad es que en ese momento lo vi justo, por lo nos dirigimos las tres a mi piso nuevamente donde estas me indicaron los pasos que lo cierto no recordaba.
Me hicieron saber que fue Anabel quién me desnudo al tiempo que Rocío me reconocía con esa chulería que tanto le caracteriza que había aprovechado para registrar mi dormitorio a modo de poder encontrar algún indicio de mi forma de ser, acabando por comentarme los objetos que había encontrado y que a ciencia cierta nunca había visto hasta entonces.
Os podéis imaginar como me puse, no sólo habían abusado de mi intimidad sino de mi "amistad", llegué a decirle de todo e incluso e asegurarles que las denunciarías mientras que estas me miraban sin inmutarse sin decir palabra alguna y menos gestos o actos de miedo sino todo lo contrario se mostraban muy seguras e incluso sonrientes. Tras callarme y pedirles explicaciones, fue Rocío quién tomo la iniciativa y tras sacar del bolsillo de su pantalón un móvil, ignore la razón pues más bien pensé en que llamaría a su abuela, pero nuevamente me equivoqué pues tras rebuscar en este, me enseñó unas fotos de lo más sorprendentes como bochornosas en la cual aparecía yo en medio de dos menores y como aparecía Dios la casa se me caía encima.
Coño, recordé en ese momento cuando está me señalaba con un objeto... el puto móvil, era sencillo pensar que en ese momento me tendieron una trampa en la cual caí como una tonta. No solo se me caía la cara de vergüenza por dichas fotos sino que me sentía vencida, no supe que decir y aun menos como actuar más por miedo a saber que pretendían. Tras coger aire cogí la decisión de preguntarle no solo los motivos de esas fotos sino lo que pretendían.
Os juro por Dios que es cierto, tras mandarme Roció a callar continua Anabel la cual me pidió silencio y colaboración en todo lo que a continuación Roció me dijera, por lo que resignada escuche su propuesta me pidió colaboración en todo y aún más respecto a su abuela. Tras callarse creí que sus peticiones habían finalizado cuando su amiga Anabel llamando mi atención me comentó que faltaban las suyas. Lo cierto es que más temía a ella que a Rocío está me pidió una sola cosa, que fuera servicial con ellas durante ese día... lo cierto que no lo entendía, por lo que le pedí que fuera mas explicita que no comprendía sus palabras por lo que esta tras coger uno de mis juguetes se dirigió de nuevo hacia mi.
Recuerdo que tras interrumpiéndome me pidió que digo me ordeno que me desnudará, continuando por pedirme que le enseñara la utilización de aquellos objetos llegándome a sugerir que sí era preciso los utilizara con ellas mismas. Os admito que me negué inicialmente llegándole a mentar que no serían capaces de hacer lo que tuvieran en mente sin saber aun lo que pretendían lo cierto es que no me lo creía ni yo.
He de admitir que mis palabras fueron inútiles más cuando Anabel tras quitarle el móvil a Rocío de su mano, me comentó lo fácil que es distribuir las fotos y tras fijarme como está toqueteaba nuevamente su móvil, me dejo helada al coger mi móvil tras haber escuchado el sonido de mensaje y tras abrir este, observar como la muy hija de puta me había mandado algunas fotos vía bluetooth, acabando esta por comentarme lo fácil que es divulgar las fotos e insistiéndome nuevamente en sus peticiones por lo que no me quedó más remedio que aceptar (coño, si tuve que ceder que hubierais echo vosotros en mi lugar).
Recuerdo que alcé la vista a Rocío echándole una mirada de tristeza y compasión la cual actuó como Pilatos lavándose las manos. Tras darme la espalda se dirigió hacia mi cama que tras subirse se sentó sobre mis almohadas echada sobre el cabecero con la mirada desafiante en mí. También se dirigió Anabel hacia mi cama sentándose a la orilla de esta a la altura de los pies, comenzó a incitarme a que comenzará a desnudarme pero creo que el resto os lo contare mejor en la siguiente confesión.
Ante todo perdonarme por que quizás no me exprese adecuadamente o no plasme lo que realmente me han hecho sentir o me han hecho hacer, pues aunque lo intento una infinidad de veces que las mismas ansias por plasmar lo sucedido, no me doy cuenta y cuando lo leo más tarde me doy cuenta que me he comido tanto palabras como símbolos (interrogaciones o exclamaciones). Lo siento enormemente, pero intentare redactaros lo mejor que pueda mis experiencias, me cuesta a veces escribir todos mis sensaciones, pues el plasmarlas creo que es lo mas difícil.
A aquellos que queráis contactar conmigo hacedlo a mí dirección de email susanabix@hotmail.com. O si queréis pasaros por mi blogs, aunque se que no esta actualizado más por falta de tiempo que por pereza (donde os muestro varias fotos mías), es susanabix-misconfidencias.blogspot.com o buscarme en Facebook o en Twuenti.