Mi inicio, mejor amante, amiga y compañia (3 fin)
Porque muchos pidieron esta tercera parte y despues de haber vivido hermosos momentos al lado de mi queriada Laika, les mando la mas apacionada y ultima parte como un tributo a mi mejor amante, amiga y compañera.
Mi inicio, mejor amante, amiga y compañera (3 final)
Ha pasado muchos años desde que escribí los primero relatos, decidí escribir esta tercera parte primero por los comentarios que he recibido de todos ustedes, segundo porque mi compañera y amante, el pasado 6 de abril me dejo (murió), y quisiera que este no solo fuera un relato, sino un homenaje a lo que es y fue para mí, mi gran LAIKA.
Como les mencione anteriormente me costó mucho trabajo encontrar la forma correcta de tener una buena penetración, pero el tiempo, la calentura y experiencia van convirtiendo lo difícil en fácil.
Fueron muchas las ocasiones que Laika y yo gozamos en la sala, pero pasado casi un año de intimidad un día se dio el máximo de los placeres, fue un día festivo, el día previo había tomado unas copas en el trabajo, así que amanecí con una cruda bastante significativa y pesada, pero como a todos los hombres nos pasa, amanecemos crudos, con dolor de cabeza y con ganas de coger. Laika había pasado la noche junto a mí en la cama, me levante, fui al baño a orinar, pase a la cocina por algo de beber y comer, mientras hacia este recorrido mi perruna amante seguía echada en la cama (supongo yo que como buena fémina ese día tenia flojera de levantarse, ja ja ja ja), decidí complacerla y consentirla, le serví un poco de leche en su plato y algo de comer, lleve todo a la recamara y se lo acerque, increíblemente solo levanto la cabeza para beber y comer y continuo recostada sobre la cama, mientras ella hacia esto yo bebía y comía simultáneamente, al terminar la cruda que me acompañaba, poco a poco se alejaba y solo me quedaba con las ganas de coger y pasar un buen momento, y que mas podía pedir si hay sobre mi cama esta mi mejor amante, la que nunca se queja, que solo pide más cuando la siente dentro.
Al darme cuenta de esta situación decidí no esperar más y pasar una mañana (posiblemente un día) de ensueño, le silbe suavemente a mi canina amante para que se acercara mas a mí, movimiento que ella realizo de inmediato, le comencé a acariciar la cabeza, mientras con mi otra mano comenzaba a deslizar el calzoncillo con el que había pasado la noche, poco a poco induje a mi amante a que nuevamente se recostara sobre la cama, baje mi mano a su conchita, siempre que la tocaba se desataban hormonas en el aire, siempre estaba calientita, húmeda, pero ese día era algo especial (no sé si era mi cruda, la hora del día o qué), en ese momento estaba más húmeda y caliente que de costumbre, sus labios exteriores estaban más hinchados que de costumbre, al final ese día y momento serian inolvidables, mi pija estaba al máximo de dureza y con ganas de introducirse hasta el fondo, pero no sería así, en ese momento decidí probar algo nuevo, suavemente le sobaba su conchita, uno de mis dedos se comenzaba a introducir con gran facilidad en su vagina que al igual que sus labios estaba hinchada, más caliente y lubricada, decidí acércame más a ver ese manjar, por primera vez desde que iniciamos este amorío prohibido tenia a menos de 5 centímetros de mi nariz esa vulva que tanto me satisfacía y volvía loco, instintivamente saque mi legüa y comencé a lamer esa vulva exteriormente, era un sabor raro, salado, fuerte (mmmmm, como queso), pero agradable, poco a poco fui tomando confianza hasta el punto de abrir con los dedos esos exquisitos labios y ver su vagina y clítoris, poco a poco fui dirigiendo mi lengua a su clítoris, al sentir esto mi amante endureció y estiro sus patas alrededor mío, como pidiendo que continuara con la sensación que le estaba proporcionando, fui recorriendo con mi lengua ese pequeño camino que me separaba de su vagina hasta llegar a ella, el sabor que al principio había percibido, poco a poco desaparecía, solo sentía una textura suave, caliente (indescriptible), al llegar a su orificio mi lengua resbaló a su interior, los pocos centímetros que la penetre fueron suficientes para sentir las contracciones internar de la vagina, incitándome a penetrarla más afondo, mi pija deseaba complacer a mi amante, pero mi cabeza solo pensaba en seguir probando ese nuevo manjar oculto, al mismo tiempo solo deseaba seguir dándole placer a mi amante como ella lo había hecho miles de veces anteriormente, no se con precisión cuanto tiempo estuve lamiendo, chupando y penetrando con mi legüa ese conchita, cuando decidí dar el siguiente paso (penetrarla con i pija), me di cuenta que sus labios exteriores se habían hinchado al doble de cuando habíamos iniciado ese camino de erotismo y placer.
Me separe lentamente de esa vulva, observándola, sabiente del placer que le había proporcionado y del que me iva a proporcionar, por primera vez sobre la cama haríamos el amor mi perruna amante y yo, era una posición nueva nunca antes probada, acomode a Laika al centro de la cama y me recosté a un lado de ella, acomodando sus cuartos traseros a la altura de mi pija, por lo hinchada de su vulva, fue fácil acomodar la cabeza de mi pija en la entrada de su vagina, era una sensación increíble, aunque muchas veces la había penetrado, esa ocasión era especial, su temperatura era muy superior, su lubricación era sobresaliente, no había duda que ella había disfrutado increíblemente el sexo oral que la había proporcionado, la posición era sumamente cómoda, ejercí una poco de presión de mi pija sobre su abertura vagina, fue sorprendente, fácilmente se introdujo la cabeza en si interior, la temperatura interna era aun más caliente que la exterior, las contracciones vaginales eran fuerte, se sentía una como succión que me incitaba a meter todo mi trozo de carne en el interior de mi amante, poco a poco lo introduje, centímetro a centímetro se fue perdiendo con gran facilidad mi pija en mi amante hasta sentir mis huevos con el pelo de los cuartos traseros, deje unos segundos dentro me herramienta, sin moverla, disfrutando la temperatura, humedad y sobre todo todas las contracciones sobre mi pija, mi perruna amante no se movía, solo jadeaba fuertemente mientras mantenía cerrados sus ojos cafés, poco a poco inicie un suave movimiento de mete y saca, nunca antes había disfrutado con ella una relación como ahora, coloque mis manos alrededor de la caderas de mi amante, aumente el ritmo y velocidad de mis arremetidas, era un ritmo constante, rápido sin llegar a ser veloz, poco tiempo puede sostenerlo pues tantas sensaciones juntas y placer me hicieron derramar mi leche dentro de esa exquisita vagina, al terminar de derramarme, me quede quieto esperando que mi trozo de carne volviera a su normalidad, pero algo sucedió, mi amante no se movió ni un milímetro al sentir mi leche en su interior, pero lo más memorable fue que mi trozo de carne se mantuvo duro, como si nada hubiera pasado, estaría sin moverme un minuto, cuando nuevamente comenzaron las contracciones internas de esa extasiante vagina, poco a poco inicie nuevamente el movimiento de mete y saca, la temperatura interna era más caliente que al principio, las contracciones eran mucho más fuertes (supongo que estaba teniendo un orgasmo), como yo tenía poco tiempo de haberme venido, esta ocasión mi duración era mayor, me mantuve metiendo y sacando mi pija a un ritmo constante un buen rato, hasta que mi amante trato de moverse indicándome que ya era tiempo e terminar, aumente mis movimientos hasta que nuevamente sentí como entre las contracciones externas y las mías me vine como nunca, esta yo empapado en sudor, esta vez al terminar de expulsar leche mi trozo volvió prácticamente a su esta normal, solo quedando la cabeza dentro, mi amante al sentir esto de inmediato se incorporo dejando ver un gran chorro de semen saliendo por su orificio que comenzó a lamer hasta dejarlo limpio, pero el olfato le indico que había otra parte que limpiar, busco mi pija y la limpio como nunca lo había hecho, era una sensación impresionante, pues al haberme venido dos veces y mantener tanto tiempo el mete y saca tenía muy sensible la cabeza, al sentir esa lengüa tibia y rasposa, me hiso erizarme todo el cuerpo, me retorcía como gusano con sal.
Habíamos terminado por ese momento una experiencia inolvidable, existía en el ambiente erotismo, excitación y placer, para ese momento el hambre nuevamente se había despertado y la sed se había multiplicado, decidí solicitar a una cadena de comida rápida servicio para dos a las casa, mientras yo me tomaba una cerveza fría y mi querida Laika bebía agua de su plato, al llegar los alimentos Laika y yo comimos, tomamos líquidos y nuevamente nos encerrábamos en mi cuarto, iva a prender la televisión, pero al recordar lo vivido un par de horas antes, mi pija nuevamente se comenzó a poner duda, no sé si mi Laika se encontraba en las mismas condiciones pero al extender mi mano para tocar nuevamente su vulva, ella inmediatamente abrió sus pata para facilitar mi labor, de inmediato me desnude y deje al aire mi pija que apuntaba hacia el cielo, esta vez no lo pensé, simplemente dirigí mi boca a esa vulva hinchada y dilatada por la actividad matutina, ahora los sabores eran diferentes pues estaban mezclados con mi leche dejada en el interior, su orificio vaginal también estaba dilatado, mi lengüa entraba con mucha facilidad, mi amante jadeaba, estiraba sus patas y a momentos como que se convulsionaba por las sensaciones recibidas, no mantuve mucho tiempo mi labor oral pues deseaba desmesuradamente penetrarla, nuevamente me coloque como la había hecho y de un solo tajo introduje mi fierro en ese pequeño orificio, esta yo como loco, solo sentía y vivía para ese momento, contracciones, temperatura, humedad y erotismo, son una combinación rara e inexplicable, estaría metiendo y sacando mi trozo de carne por 10 o 15 minutos hasta que nuevamente explote dentro dejando mi leche en las entrañas de mi amante.
Esta vez fue un final increíble, los dos nos quedamos recostados y a los pocos minutos yo me quede dormido, poniendo fin a ese día.
Fueron muchas más las ocasiones que vivimos de esa forma, hasta hace poco tiempo que la vida decidió separarnos.
P.D.
Sé que a muchos lectores todo lo anterior les desagrada, pero creo que existen muchos lectores que comprenderán el verdadero significado de mis palabras, decidí expresar y compartir con ustedes estos momentos por el amor y el dolor generado por la ausencia de mí:
"MEJOR AMANTE, AMIGA Y COMPAÑERA"
"LAIKA"