Mi inicio en el sexo 8

No sabria que ocurriria esa mañana con Julio

Auqella mañana, cuando llegue a la parada del autobus, me debatia entre encontrarme a Julio o mejor que ya hubiera tomado el bus anterior, pero no, alli estaba mirando para todos lados como esperandome. Yo llegue y me coloque en mi lugar en la cola que habia y vi como él me sonreia mientras me miraba de arriba a abajo casi desnudandome. Paso un autobus en el que ni siquiera pudieron entrar mas de 5 persona y el resto nos quedamos esperando al proximo. Julio poria haber side de los que subieron pero dejo pasar a otras personas y se quedo esperando el proximo sin quitarme el ojo de encima. Rapidamente vino uno casi vacio que nos dispusimos a abordar. Julio se quedo en el pasillo, a pesar de que habia asientos libres y cuando pase junto a él dirigiendome a un par de asientos libres que habia al final de vehiculo senti como me seguia casi pegado a mi. Tome asiento y a continuacion se sento él a mi lado quedandome junto a la ventanilla. Dada su corpulencia casi estabamos pegados uno al otro lo que aprovecho para, haciendo como que miraba por la ventanilla, susurrarme al oido:

  • Buenos dias cariño no sabes como deseaba encontrarte de nuevo, mmmmmm que ganas tenia de verte y olerte como hueles a esta hora.

Yo miraba por la ventanilla con la confianza que solo se quedara en ese comentario, aunque sabia que cuando nos bajaramos algo intentaria cuando la gente se dispersara cada una para sus lugares. Sin embargo al instante note su mano izquierda como se colaba entre el asieno y mi culo, agarrandomelo y manoseandolo mientras me decia la oido:

  • Mmmmmm cariño que rica estas, que ganas tenia de tocarte y de sentirte de nuevo.

  • Por favor Julio dejame, nos van a ver, por favor -decia yo sintiendo la cara roja de calor y de verguenza.

  • No, no puedo cariño, tengo tantas ganas de ti. La gente no mira, cada una va a lo suyo. Tranquila y no te preocupes, yo tengo cuidado.

Ya notaba como intentaba meter su mano por debajo de la cintura de mi falda y llegaba hasta mis bragas. Yo no sabia que hacer, por un lado me moria de verguenza por si alguien nos miraba y veia lo que estaba haciendo, por otro esa sensacion que ya me era familiar de excitacion y calor que me recorria el cuerpo comenzaba a luchar con mi cabeza, deseando que no parara y sentire su mano sobre mi piel. El notaba como me estremecia y su respiracion, junto a mi oido, me decia que él tambien estaba excitandose.

  • Mmmm como me pones cariño mmmmm si me tocaras mi polla te gustaria ver como esta de dura. No puedo esperar al mediodia, ahora cuando nos bajemos aceleramos el paso y me sigues hasta la tienda. Aunque sea 10 minutos necesito besarte y tocarte cariño mmmmm me tienes muy caliente y se que tu tambien lo estas deseando.

Y asi fue. Fue tocandome y manoseandome mi culo hasta que nos fuimos acercando a nuestra parada. Nos bajamos, y mientras el iba mirando hacia atras para ver que le seguia, mis pasos se dejaban llevar por mi excitacion y aunque no faltara mucho para la hora de entrar queria estar un momento con él y que tocara mas. Cuando ibamos acercandonos a la tienda yo me retrase un poco para que pudiera abrir y que ningun compañero del colegio o alguien me pudiera ver entrar. Llegue y habia dejado la puerta entreabierta, mire a un lado y a otro y cuando vi que no venia nadie empuje un poco la puerta y entre. Alli estaba el detras para cerrar en cuanto estuve dentro. La tienda estaba apagada y solo entraba algo de luz por las cortinillas del escaparate. Julio me tomo de la cintura y llevandome sobre un mostrador que estaba junto a la entrada me sento en él mientras me tomaba la cara y me besaba, introduciendo su lengua en mi boca mientras sus manos me subian la falda hasta la cintura y me acariciaba los muslos.

  • Mmmmmm fina que ganas tenia mmmmmmm dame esa lengua, quiero comertela, mmmmm asi putita mia asiiiiii, abre esos muslos que quiero ver como estas de mojada. Mmmmmm lo sabia, sabia que estarias empapada, se que te gusta estar conmigo y sentirte mi putita. Te gusta todo lo que te hago y quiero que seas mia.

Cuando Julio se excitaba era muy distinto a Emilio, usaba palabras mas fuertes, su excitacion se notaba mas y llegaba hasta mi su calor. Lo que me decia, como lo decia y sobre todo sus manos que no dejaban de hurgar por todos lados me excitaba hasta un punto muy diferente al que alcanzaba con Emilio. Con Julio era todo mas desenfrenado, mas alocado y eso me excitaba de una manera diferente a cuando estaba con Emilio. Su mano estaba ya debajdo de mi braguitas masajeandome mi rajita, mientras el me seguia besando mi boca y mi cuello, mientras su otra mano me agarraba por detras a la altura de mi cintura y me apretasba contra su mano de delante. Pero como siempre, cuando llego con su dedo a ese punto donde todo se tornaba contrario a lo que estab sintiendo, me encogi y solte un quejido.

  • Mmmmmm no pasa nada, tranquila. Estas cerradita aun y por eso te duele, pero eso lo tenemos que solucionar. Tengo que ir abriendote poco a poco cariño, para que luego mi polla pueda entrar bien y terminar abriendote toda para mi. Mmmmmmm se que lo quieres y lo querras mas aun despues. Mmmmmm asi, si, aguanta un poco, esto es asi al principio, pero veras como despues te gusta mas y vendras a buscarme para que te de lo tuyo todos los dias putita mia, mmmmm que estrechita estas mmmm y que mojada.

Yo sentia una mezcla de dolor y excitacion que me tenia trastornada, pero llego un momento que senti un dolor mas agudo y tomando su mano le pedi:

  • Ya, ya, para por favor, me duele mucho, no sigas asi, no me gusta eso.

  • Calla no seas quejica, al principio tiene que ser asi para que mi polla no te duela tanto cuando entre dentro de ti...Mmmmmm ese dia vas a gozar de verdad y me pediras que no te la saque, mmmmm quiero desvirgarte y poder follarte con mi polla y vaciarme dentro de ti. Que sientas mi leche llenando tu coño, rebosando por tus labios y bajando por tus muslitos.

Yo no podia aguantar el dolor y sujetaba, intentando quitarla, su mano diciendole

  • Ya, para, saca la mano, no quiero, me duele mucho.

El paró y fue sacando la mano poco a poco y el dolor fue bajando, aunque no la molestia pero era soportable, hasta que senti como un alivio que me hizo abrazarme a él.

  • Ya, ya esta, iremos poco a poco pero no podemos dejarlo cariño, asi poco a poco veras como cada vez te duele menos. Y cuando ya no te duela como ahora lo haremos con esto que tanto te gusta -Me dijo, tomando mi mano y llevandola hasta su pene.

  • Mmmm mira como me has puesto, mmmmmm siiiiiii asi, agarrala fuerte. Mmmmmmm que ganas tengo de follarte putita, mmmm sentir como te entra poco a poco en tu chochito, mientras lo va abriendo....Si, mmmm, quiero sentirte debajo mia con tu chochito abierto y que tu pirmera sangre sea para mi. Ven que te baje, quiero que me la chupes. -Me dijo ayudandome a bajar del mostrador y haciendo que me pusiera de rodillas, mientras el se sabaca su pene y lo ponia a la entrada de mi boca.

  • Mmmmmm asi abre tu boquita, asi, metela dentro y lamela chupala bien, asi despacio, asi...como me gusta follarte esa boca de putita que tienes. Mmmmmmmm como se nota que te gusta, sigue, no pares mmmm quiero darte toda mi leche.

Tenia su pene entrando y saliendo de mi boca a un ritmo, que el me imponia tomando mi cabeza con su mano, que me impedia pasar mi lengua por su punta. La notaba entrar y salir de mi boca caliente, cada vez mas dura y mas rapido, hasta que senti como su semen se disparaba dentro de mi boca casi atragantandome y haciendome toser.

  • Mmmmmm si, siiiiiiiiiiiii, asiiiiiiiii, no pares, tragatela puta, siiiiiiiii asiiiiiiii...es la misma que quiero que te llene y rebose despues de tu coño cuando te folle con mi polla, mmmmmmmm ahhhhhhhhhhhhhh asiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii

Trague toda la que pude aunque algo se derramo en el suelo, estaba caliente y me seguia gustando su sabor, su testura y sobre todo sentirla en mi boca me excitaba mucho. El respirando ya mas tranquilo me ayudo a ponerme de pie y mirando el reloj me dijo.

  • Cariño tenemos que dejarlo ya es hora de abrir y tu de ir al colegio. Mmmmmmm que bien me has dejado. Quiero que vengas luego, al mediodia, con mas tiempo, podremos estar detras y voy a conseguir que seas mia, que me busques y necesites estar conmigo todos los dias. Mmmmmm, vendras, verdad?

Yo asenti mientras me recolocaba la ropa un poco y me dirijia a la puerta para poder salir. Temia por todo aquello que decia pero habia algo dentro de mi que, antes de salir, ya me incitaba a que llegara el medidia y volver a estar con él, aunque por otro lado cuando Emilio volvia a mi cabeza todo se volvia preocupacion y tristeza.