Mi Infidelidad con Oswaldo

Un encuentro en California, con su amigo Oswaldo.

Hola amigos de Todo - Relatos, el trabajo y los quehacer de una mujer lo hacen ausentarse por varios días de su pasatiempos, pero ahora vengo a contarle lo que me ha sucedido en estos últimos días, una de ellas ha sido encontrarme con un chico que se llama Oswaldo en la ciudad de San Francisco California, resulta que yo tuve que viajar de emergencia a visitar a mi madre en dicha ciudad, y gracias a Dios solo fue una falsa alarma de su corazón, los medico dijeron que no había problemas y que estaba bien, dicho eso me quede mas tranquila y me dispuse a disfrutar de una merecidas vacaciones, y así lo hice.

Revisando mi correo y mis contactos y me escribía un chico de Nombre Oswaldo y el desde que yo estaba en mi País siempre me decía y me invitaba, que cuando viniera a San Francisco lo llamará para conocernos y poder salir. Decidí llamarlo y planear una salidita.

Llego el día y salimos con Oswaldo, el desde que me vio me dijo: "Eres la mujer que imagine en todo tus relatos", me sonroje y dispusimos a ir a Cenar un Restauran, él conducía y no apartaba sus ojos de mis piernas eso me hacia sentir bien caliente, ya que él rozaba mis piernas cuando hacia los cambios de su automóvil, cenamos contamos cosas vanas y experiencias laborales y salimos de ahí, no encaminamos a un hotel, no recuerdo su nombre, pero ya en el camino y con una copas de mas yo tenia el deseo de poseerme a Oswaldo.

Llegamos al cuarto solo cerramos la puerta y nos fundimos en un beso tan rico que yo ya tenia mi vagina húmeda del deseo, el empezó a quitarme la ropa mientras yo le quitaba también la de el luego nos quedamos desnudos en medio del cuarto, yo solo sentía en mi vientre el calor de su pene rozando, fui acariciándole y besándole, su cuellos baje a sus tetillas luego si vientre, rocé todo mi cuerpo y mis tetas en su pene, lo sentía grande y con un calor que me quemaba cuando baje hasta que su pene paso por mi cuello y logre sentir el olor de hombre, sexo y eso que a todas las mujeres nos embriaga.

Yo por mi parte me sentía tan excitada que mis ojos permanecieron cerrados dejándome llevar por el momento, hasta que lleve mis manos a su entrepierna y fui sabiendo, hasta que me tope con unos huevos erizos, duros los tome y los masajee logrando sacarle un gemido de placer a Oswaldo, luego tome la base de su pene asombrándome de las dimensiones de este chico, fue en ese momento abrí los ojos llevándome esa grata sorpresa.

Fu un impulso involuntario el llevármelo a la boca, lo bese, lo mamé desde la base hasta la punta glotanomente, sentía arcadas cuando mi emoción me impulsaba a llevármelos hasta dentro. Creo que pasaron unos 5 min. Y sentí en sus piernas una rigidez avisando su corrida, pero por más que pude no puede tragar tanto semen que Oswaldo me daba.

Quedo exhausto y yo seguía limpiándome su leche que había salido mis comisuras, y parte de mis senos, el solo me acariciaba mi cabello y diciendo que nadie en esta vida lo había hecho sentir como yo se lo había hecho.

Me levante y me dirigí a la cama y me puse en cuatro patas y le mire y hice una cara de lujuria que él entendió lo que yo deseaba se acerco, poso sus manos en mis nalgas, las acaricio suavemente y llevo su lengua por toda mi raja arrancándome unos gemidos de placer al sentir su puntita en mi clítoris que para ese entonces estaba alterado y colgando, creo que ni marido me había mamado como Oswaldo, lo hizo una delicadeza que parecía que pasaba su lengua por un pétalo de rosa. Sus dedos acariciaron mi ano, y no puede mas, fue en ese momento que con un impulso hacia atrás hice que su lengua se enterrara en mi raja y me vine derramándome en su boca, solo me arrecoste sobre mi pecho dejándole mi culo a su servicio, siguió con sus caricias volviéndome nuevamente a cien… movía la punta de su lengua en el contorno de mi ano, como el mejor maestro en lamidas de ano, lo hacia bastante bien que nunca me había lamido el ano como Oswaldo… paso cerca de los 10 min. Luego sentí que se paro y dirigió su pene a la entrada de mi ano y empezó a empujar, su saliva y mis jugos, le hicieron fácil la entrada de tremendo garrote.

Sentí que me agarro de la cintura y de un solo empujón me traspaso arrancándome un alarido de dolor y deseo. Empezó su mete y saca creo que le fascinaba ver como su garrote salía casi del todo y volvía a desaparecer en mi culo porque lo hacia lentamente, así podía sentirlo en todo lo largo de su pene que me estaba matando del deseo.

No se como sucedió pero en segundos me tomo de la cintura me llevo a su cuerpo y se arrecosto en la cama y yo estaba ahora encima de el con toda su verga en mi culo me incline hacia delante apoyándome en su piernas y dándole la mejor vista nadie la había dado; creo que eso hizo que su verga creciera mas porque con la manos que sentía en cada nalga, me las estrujaba dándome a entender que eso le fascinaba y mi culo albergaba mas del tamaño de su garrote no tardamos mucho en que su venida se hiciera saber cuando sus movimientos lo hacia mucho mas fuertes que hizo que al momento que el empezó a disparar su primer chorro de semen, yo me arqueaba haciendo que la penetración fuera mas profunda y así fue que los dos nos quedamos exhaustos durante varios minutos.

Fue él que se dirigió a la ducha cuando yo ya me sentía con los deseos de levantarme me dirigí a la ducha también y entre y lo empecé a enjabonar dándole unas pasaditas por su herramienta haciendo que esta reaccionara poniéndose nuevamente a disposición, baje y le di unos lengüetazos, pero el lo que quería era darme por mi concha, ya que no lo había hecho así es que se la puse a disposición. Levanto mi pierna y de un solo empujón me penetro, la verdad que Oswaldo me daba el placer a monos llenas, le di mi espalda me arquee he hice que me penetrará en esa posición y no tarde en venirme con unas ganas enormes como si había sido el primer orgasmo. El al sentir mi venida se vació haciéndome levantarme en puntillas por las ganas de sentirme bien ensartada.

Luego de esa noche de Placer que pase con Oswaldo, le muy gentilmente me llevo a casa de mis padres y se despidió con un tierno beso.

Espero le haya gustado esta historia, y como te lo prometí Oswaldo acá esta mi experiencia que pase contigo

Besos a todos y espero sus comentarios

Yanny