Mi historia Gay
Escribo mi historia, o el como desee que fuera mi historia, mis inicios
De pequeño estudiaba en un colegio de solo niños, un colegio de curas, y en ese colegio se iniciaron mís primeros deseos gays. Yo era un niño de 12 años muy delgado, blanquito de piel y tímido, y como suele pasar en esas edades hay niños que son más lideres y otros que se siguen o se dejan llevar. El niño mas travieso con el que jugabamos solía pasarse con otro que parecía muy femenino como una niña rubita muy linda, cuando estabamos el grupito de niños el solía tratarle como niña, incluso jugaba con una regla poniendosela como pene y haciendo como le penetraba sin bajarle el pantalón. A mi lo que me hizo una vez fué bajarme los pantalones y sobarme las nalgas durante unos minutos delante de los otros. Estos jueguitos empezaron a crearme fantasias eróticas gay.
Otras situación que influyo en mis fantasias era que en el super solía encontrarme de vez en cuando con dos señoras especiales, eran mayores una de unos cuarenta y muchos , y la otra de más de cincuenta. La primera era una autentica señora que vestía de forma muy recatada y feminia como una señora con camistas de mujer mayor y pantlones de mujer, y se le notaba algo la zona de la cara del afeitado aunque era muy femenina se le notaba que era hombre de estatura media ni gorda ni flaca siempre muy seria y callada. Iba siempre muy bien maquillada y se notaba que algo calva de coronilla pero esta cubierta por su peinado. Yo la miraba mucho pero ella nunca a mí. La otra era menos femenia, más bien y señor bastante afeminado, muy alegre con pelo blanco ropa androgina, camisetas oscuras pantalones que no parecian ni de hombre ni de mujer, y su rostro era más maculino. Hablaba bastante con las dependientas de forma muy educada y bromista, yo siempre le miraba y ella me sonreía. Estas dos personas tambien alimentaron mucho mi erotismo gay --- trans....
Y una tercera situación se dió con un señor de unos treinta y pico años, sordomudo. Siempre le había visto por el barrio, que estaba cerca del puerto, y el iba siempre en dirección al puerto como que trabajaba por allá. Sólo recordaba de él eso y que siempre hacía ruido al hablar que no entendía yo ya que el era sordomudo. Un día que había fiestas del barrio, en el cual en un descampado había una fería, estaba con unos amigos de mi edad 12, 13 años, jugando al futbol en la parte del descampado donde no estaba la fería, cuando tras unos árboles estaba el orinando, cosa a la que estabamos acostumbrados ya que mis amigos y yo, y bastante gente solía hacerlo en dicha zona, pero en un momento determinado el empezo a gritarnos mientras reía, estaba señalando hacía su polla, un pollón me pareció a mi en ese momento, mientras se la sacudía. Yo le recuerdo gordito, algo pero no demasiado, con gafas y cara regordeta, siempre algo sucío por el trabajo, y ese instante se quedo grabado en mi mente a camara lente su sonrisa, su lengua fuera de la boca, sus gritos como con una mano señalaba su polla, y con la otra se la meneaba mientras aparentemente se esparcián sus gotas de orín. Mis amigos y yo salimos corriendo ante tal dejenerado, pero yo no podía alejar de mi mente el vaiven de aquel pollón y sus gotas, su sonrisa picara, y no podía dejar de pensar en las señoras....
Yo por aquel descampado a veces iba a jugar al futbol y otras a montar en bici, normalmente a montar en bici iba solo y daba vueltas, vueltas y más vueltas. Hacía como unos tres meses de que el sr. sordomudo nos había enseñado su polla, cuando montando en bici lo volví a ver por la zona, me puse muy nervioso y rojo, casí me caigo de la bici al pasar cerca de él pero seguí pedaleando. El al verme casi caer solto uno de sus gritos, y luego cuando lo mire y yo estaba muy rojo, el siguio soriendo y gritando pero no le entendía. Seguí dando vueltas en el descampado y miraba hacía donde se dirigial el señor. Él se dirigió hacía los árboles yo en mis vueltas con la bici pasaba bastante cerca de los árboles. En una de mis pasadas vi como soltaba un generoso chorro de pis, el me miraba y yo a él y casi tropiezo con la bici. No podía quitar de mi mente la visión de su polla la otra vez, ahora le vi de lado como salía el chorro muy amarillo, y de bastante cantidad. Yo temblaba estaba muy rojo y no sabía que hacer.
Yo como comente algo con 13 años era muy delgado, algo nalgón, se me notaban las costillas y tenía las piernas largas con poco vello. Pelo corto yo me veía feucho pero ahora viendo las fotos tenia cara aniñada y algo lindo ni masculino ni femenino. Ese día iba vestido con una camiseta de manga corta y pantalón de chandal. De cintura hacia arriba era bastante delgado sobre todo la cintura, y hacía abajo era nalgón sin vello en las nalgas, dos globos de nalgas, una polla normal larga y delgada y los huevitos. Las piernas largas pero no tan delgadas buenos muslos y poco vello.
El señor sordomudo se giro y pude ver mejor su polla, me parecio gorda y bastante roja oscura. Tenia el glande cubierto por el frenillo, media morzillona y salían algunas gotas amarillas. Me grito e hizo señas con una de las manos. Yo estaba muy nervioso, bastante rojo, mire a los lados y no vi a nadie y me dirigí hacía el señor. Al llegar a su altura me baje de la bici, él puso la bici tras el árbol, y me agarró una mano y me jaló junto a él trás los árboles. Cogío mi mano y la acerco a su polla y senti la rugosidad y suavidad de la piel que cubría su pene, este iba creciendo y la cabeza iba haciendose paso entre los plieges de la piel que le cubría. El sonreía mientras me soltó la mano, pero yo seguí acariciando su pene, recorriendo con mis dedos su largo falo y acaricaba la punta de su cabeza que aún seguía con alguna gota de orín.
El cogío mi mano y me llevo mis dedos ligeramentes mojados de orín a mi boca, y saque la lengua para lamerlos, tenía un sabor salado, me tenía hipnotizado y cachondisimo, me jaló la la mano para que me pusiera de rodillas y acerco su pene a mi cara, y empezo a restregarmelo por mis cachetes y labios, saque mi lengua y recorrí su faló y especialmente su cabezota, saboreando sus jugos mezcla de orin y liquido preseminar, y el olor a sudor de los pelos que cubrian su entre pierna los lengueteaba como si fuera un helado hasta que el me agarró de la cabeza me lo acercó a mis labios y fue marcando un ritmo de penetración de mi boca. Me la metía un poco y la sacaba, cada vez más adentro y más rápido, hubo momentos en que sentí arcadas pero no podía parar de succionar esa polla y masajerala con mi lengua dentro de mi boquita. El suspiraba y marcaba el ritmo con su mano en mi cara hasta que de repente empezó a gritar, y empeze a notar mi boca llena de su semen, no podía dejar de succionar, y cuando saco su polla, recogio el semen de alrededor de mis labios y me los introdujo en la boca. El sonreía y gritaba. Yo estaba como en un sueño, esperando por él no se que a que el se recogio su pene me levantó y me dió un beso mientras masajeaba mis nalgas. Metío una mano dentro del pantalón y calzoncillo, masajeo una de mis nalgas, me dió dos nalgadas y acaricio con uno de sus dedos mi ano, primero haciendo circulos alrededor y luego apretó un poco sin penetrarme. Sus manos eran rudas, gordas con dedos gruesos y un tacto áspero. Miéntras que mis manos era delgadas, largas y muy suaves. Durante todo este manoseo, me besaba, su lengua recorrio de manera ruda toda mi boca, su aliento a café, y babeaba mucho dentro de mi boca. Me dió una nalgada se separó de mi, sonrío me grito algo que no entendí se colocó el pantalón y se fué.
Yo cogí mi bici y me coloque la ropa, seque mi boca con la camisa y me fuí para casa, temeroso y confuso por lo que había ocurrido