Mi historia con un amigo. Parte 2
Despues de la noche vivida entra David y yo no sabia que pasaria al dia siguiente cuando despertaramos.
Me dormí, serian las 10 de la mañana... De repende empeze a oir cachondeo fuera, creí que sería la hora de comer. Mire el movil, las 12 de la mañana. Me incorporé ¡Dios que resaca!. De repente a mi cabeza vino lo sucedido un par de horas antes con mi amigo David. Me desconcertaba el saber como sería su reacción, saber si la amistad cambiaria. El también se desperto, se incorporo y me plantó un beso en la boca, aquello acabo de desconcertarme. Buenos dias guapo, me dijo. Los amigos empezaron a patear nuestra tienda, ¡Vamos dormilones a la piscina a pasar la resaca!. Salimos fuera, ya estaban casi todos despiertos desayunando, desayunamos algo y fuí a ponerme el bañador para ir a la piscina, David entró conmigo a la tienda y volvio a besarme: ¡No se porque pero me vuelves loco!, sonrio, era una sonrisa adorable. Nos desnudamos para ponernos el bañador, y me enseño su rabo flácido mientras lo sujetaba con la mano y me decía: Esta noche lo vamos a pasar muy bien. Yo a estas alturas estaba más que confundido. Acabamos de ponernos el bañador y nos fuimos a la piscina con todos los amigos. El agua estaba helada pero era un buen remedio para combatir la resaca, jugabamos a hacernos ahogadillas y con un balón dentro del agua. Apenas coincidi con David en el agua porque estuvo mucho rato en la toalla. Mientras estaba jugando en el agua con el resto de colegas ví que me miraba, le correspondí con otra mirada y me sonrio. No entendia nada, pero queria disfrutar del momento. Salimos del agua y fui a la toalla que estaba al lado de la de David, yo soy bastante blaquillo de piel y me quemo con facilidad todos lo saben, David me dijo que me diera crema y se ofrecio a darmela. Se sento encima de mi culo para darme crema en la espalda, nadie se extraño porque siempre solemos darnos crema los unos a los otros. Yo notaba ese rabo que hacia menos de 3 horas había estado en mi boca, me extendia la crema y me masajeaba la espalda a la vez, yo ya estaba erecto entre aquellas manos recorriendome y notar su polla meneandose por la raja de mi culo. Yo creo que lo hacia adrede. Me dijó que me incorporara y me diera yo la crema en el pecho. Le dije que no, que me iba a fumar un cigarro así tumbado: No quería que nadie notara mi erección. Se acerco a mi oido y me dijo en voz baja: Estas palote eh? Que poquito autocontrol!. Se reia a carcajadas. Era adorable. La mañana paso entre risas recordando lo que habiamos echo la noche anterior. Llego la hora de comer y bajamos al bar del camping a comer el menú del dia, después del café decidimos echarnos la siesta. Nos metimos en la tienda y me dormí casi en el acto. Mis siestas suelen durar 30 minutos y cuando me despierto no puedo volver a dormir. Cuando desperté lo vi, me miraba. ¿No has dormido? Le dije, Poco, te estaba mirando y se rio. Tio hace un calor insoportable, me voy a duchar le dije. Cogi la toalla y ropa de cambio y me fui a las duchas, serian las 4y30 de la tarde y la mayoria de gente del camping dormia la siesta o estaba en la piscina. Yo soy un tio moreno, de piel mas o menos blanca y con un cuerpo normal, ni definido ni gordo. Guapete o eso me habian dicho siempre y con una polla de 17 cm y un grosor normal. Las duchas eras individuales y al llegar no habia nadie. Me desnude y me metí en una de ellas. Puse el agua fresca y comence a ducharme. No llevaría ni 5 minutos cuando oí entrar a alguien, pero nunca imagine que fuese el. La cortina de mi ducha se abrío y allí estaba el, completamente desnudo. Me beso y sin articular palabra se agachó y empezó a comerme la polla. Es la primera que me como una dijo, espero estar a la altura. Se le notaba inexperto pero el tener al macho de mi pandilla, el ligón, arrodillado comiendome el rabo me puso cachondo en cuestión de segundos. Me la comío durante un rato largo. Luego fui yo quien se arrodillo para comer aquel enorme pollón que no hacia tanto había tenido ya en mi boca, el gemía. Estaba claro que le encantaba como la comía. Me levanto y me apoyo en la pared. Separo mis piernas y busco mi ojete con uno de sus dedos, lo salivo y lo introdujo, me extremecí de placer. Sabía usar los dedos, estaba claro que lo había echo en muchos coños. Nunca he follado un culo me dijo. Le advertí que no se creciera que aquello no era un coño y necesitaba más tiempo y paciencia para dilatar. Se arrodillo y lamio mi ojete, aquello era un placer inexplicable y me gapeo el culo. Su polla estaba lista para adentrarse en mi y mi culo pedía guerra urgentemente. Acerco su grueso capullo a mi ojete y lentamente lo introdujo. Gemí. No me dolio mucho, asique le dije que siguiera. Poco a poco introdujo su polla casi entera en mi culo. Lo tienes ardiendo me dijo, me encanta. Su polla ya se había echo el hueco necesario en mi culo y ahora me follaba a buen ritmo, el tio bombeaba muy bien y yo me volvia loco de placer. El estaba cachondisimo y no aguantó tanto como yo creía, llevaria 3 o 4 minutos clavandomela cuando me dijo que estaba a punto. ¿Que hago?. Correte dentro le dije. Empezo a bombear con mas fuerza y noté como sus abdominales se contraian y de repente unos trallazos de lefa caliente inundaron mi culo. La saco. Su leche ya caia por mis piernas y el empezo de nuevo a chuparmela, no tarde en llegar al extasis y le avise de que me iba a correr pero no saco mi polla de su boca asique inevitablemente mi lefa lleno su boca. Se lo tragó!. Se incorporo, me beso y terminamos de ducharnos. Salimos de allí y alguno de nuestros amigos ya estaba despierto. ¿De donde venis tios?. De la ducha dijo David, hacia un calor de la hostia en la tienda y hemos ido a ducharnos. Pues si dijo uno de nuestros amigos yo iba a ir ahora mismo. Menos mal. Podrian habernos pillado en aquella incomoda situacion. David saco dos cervezas y me ofrecio una, estaba helada, que bien sentaba. Pasamos la tarde charlando como siempre sin que se notase lo que acababa de pasar entre nosotros. Estaba igual que siempre, bromeaba conmigo y nos reiamos. Aquello me relajaba, pero a la vez me intrigaba. ¿Que pretendía?. ¿Solo un polvo?. No me importaba el consiguio lo que quería y yo tambien, que era catar a mi amigo el macho, el destrozacoños, como cariñosamente le llamabamos por todas las tias con las que ya había estado pese a nuestros 19 años. Poco a poco todos se fueron levantando y duchando. Ya estabamos todos preparados para cenar y lo hicimos allí, alrededor de las tiendas, con la comida que habiamos llevado de casa. Nos fuimos a cambiar para empezar el botellón y bajar al pueblo a seguir la fiesta como la noche anterior. Al entrar a cambiarnos David me dijo que si no preferia que nos quedaramos en el camping con cualquier excusa, la verdad es que me apetecia quedarme toda la noche con el, pero me apetecia tambien estar con los amigos asique le dije que bajaramos y sobre las 5 o así buscariamos una excusa para volvernos los dos solos. Aprovecharía el camino de vuelta para hablar con el y preguntarle que era lo que esperaba de todo esto. Salimos ya cambiados dispuestos a beber, llevaba un vaquero que le hacia un culo y un paquete irresistible. Me alegraba saber que sería yo el que bajara ese pantalon esa noche. O eso pensé... La noche transcurrio como la anterior, hicimos botellón en el camping y bajamos al pueblo. Ya en la verbena perdí de vista a David, estaría con alguno de estos fumando un porro me imaginé. Seguí a lo mio. Hablaba con unos chavales del pueblo que conocia de otros años mientras el resto de mis amigos bailaba detras nuestro en la verbena. Unos de los chavales me dijo que si lo acompañaba a su garito a por un cubata. Le acompañe, era un buen chaval, sin ninguna pretension sexual. Yo había bebido ya bastante pero me apetecia tomar algo más. La peña de los chavales caia un poco lejos de la verbena asique por el camino fuimos charlando de cosas sin transcendencia. Cuando llegamos a la peña que estaba en un callejón, entramos y sorpresa... Alli estaba David con la morena de la otra noche. No hacian nada, pero algo recorrio mi cuerpo no se si rabia o mala hostia y tampoco lo entendia, David no era nada mas que un rollo o ¿Que creia yo? ¿Que lo iba a reconvertir?. El no me habia prometido ni fidelidad ni nada, pero aun así me sentí un imbecil. Hola dijo la morena. Buenas le respondimos. Venimos a por unos cubatas y nos vamos así os dejamos el garito libre conteste yo. David me miro y tuvo que darse cuenta que mi cara no era de buenas pulgas. Nos servimos y nos fuimos. Por el camino rober (que así se llama el chaval del pueblo) me pregunto: ¿Tio te pasa algo con tu amigo? Es que te he notado algo tenso. No, es que me cae algo mal. Mentí. Volvimos a la verbena que tocaba a su fín y yo iba ya demasiado bebido, pero no me apetecia pensar, en la discoteca me bebí otro par de copas y ya me encontraba fatal, no se si era el pedo que llevaba o lo de David. Anuncie a mis amigos que me iba al camping que no me encontraba bien. Insistieron en acompañarme pero no quise cortarles el rollo. Salí de la discoteca y cogi el camino que llevaba al camping. Hasta el final del pueblo hay farolas pero luego hay un cacho que va a oscuras, no me importaba. Iba pensando en David e inevitablemente se me cayeron un par de lagrimas. Me sentía un imbecil, no entendía porque lloraba, el no me había prometido nada y yo no tenia por que sentirme mal con el. Pero aún asi me sentia mal. Seguí andando hasta el camping. Llegue a la puerta y salude al guardia que hacía la ronda que amablemente me dijo: ¿Que ya se acabo la fiesta por hoy?. Si, le dije. Estoy cansado. Pues ya hay un amigo tuyo durmiendo desde hace un rato. Adios se despidio. ¿Quien estaba ya durmiendo? Yo juraria que estaban todos en la discoteca. Bueno daba igual quería acostarme de una vez y olvidarme de lo que habia pasado. Llegue a mi tienda y abrí la cremallera. Allí estaba David. Me miró. ¿Que haces aquí? Le dije. ¿La morena te a dejado cachondo otra vez y quieres rematar?. No me dijo. He venido a buscarte a ti. Quería hablar contigo de lo que has visto. No tenemos nada de lo que hablar le dije. Tu buscabas un polvo y yo también, ahora cada uno a lo suyo y listo le solté. Tio, me dijo David, dejame explicarte. Le dije que adelante, no tenía que darme explicaciones pero le deje hacerlo. No me estaba liando con Raquel (así se llamaba la morena). Estabamos hablando. Le estaba contando lo que me pasa. ¿Y que te pasa si puede saberse? Pregunte yo. Que me encantas, que creo que me estoy pillando por tí y que estoy confuso porque nunca he sentido nada por un tio. Me dejo helado. Lo mire y se lanzó a darme un beso. No sabía que pensar. Hablamos largo aquella noche. Me preguntó si a mi me molaban los tios y le dije que si, que había tenido varias experiencias y que era lo que realmente me molaba. El me contó que nunca había echo nada con un tio pero que en alguno se había fijado. Que nuestro polvo de las duchas había sido el mejor de su vida, nada comparado a las tias. Pero que estaba confundido, no sabia si sentía algo por mi. Volvimos a besarnos, entendía su confusión en estos momentos, yo habia pasado ya por ello y sabia lo que era, sin embargo el era mucho mas valiente que yo y se atrevio a hablarlo con alguien, evidentemente no le conto detalles a raquel, simplemente que estaba confundido. Ella le aconsejo que viviera el momento y luego ya se vería. Volvio a besarme. Le ponía mucha mas pasión que cualquier beso que me hubiesen dado antes. Yo nunca había tenido nada especial con un tio. Simplemente algún polvo de vez en cuando para aliviar. Con tias había tenido alguna experiencia pero no sentía lo mismo. Aquella noche volvimos a follar pero todo fue mas relajado y lento que lo anterior. Me desnudo entero y comenzó a recorrer mi cuerpo a besos, lamia mi pecho mientras yo acariciaba su pelo. Me comio la polla y esta vez fue mucho mejor que la anterior. Luego fui yo quien se entrego a comer su cuerpo y su polla. Recorrí cada centimetro de su cuerpo con mi lengua, aquel chico me volvía loco y ahora sabia que el sentía lo mismo por mi. Era diferente. Cuando su polla estaba lo suficientemente dura, empezó a lubricar mi ojete con saliva, era el mejor beso negro de mi vida. Introducia su dedo en mi culo y jugaba con el, sin prisas. Luego se tumbó y me dijo que me sentara encima de el. Me sente a horcajadas encima de su polla y me la meti sin mucha dificultad. Comence a moverme arriba y abajo. Veía su cara de placer y eso me ponía mas cachondo todavia. Cambiamos varias veces de postura, me follo a 4 patas, con las piernas levantadas en sus hombros, asi pude notar como su polla llenaba todo mi culo y sus huevos chocaban contra los mios. Echamos un buen polvo y esta vez aguanto como un campeon, fue una follada larga y mas placentera, alternaba las acometidas brutales con unas mas suaves, volvimos a cambiar de postura cuando estaba a punto de terminar, me sente encima suya, mientras el estaba también sentado y nos besabamos. Comenzo a bombearme con mas fuerza y note esa contraccion de abdominales que ya me iba sonando, estaba a punto de correrse, y me abrazo y me beso. Asi se corrio abrazado a mi. Note como su leche invadia mi culo. Y le bese con pasion. Me pajeo y me corri en sus abdominales. Nos limpiamos y caimos rendidos. Nos abrazamos y nos dormimos. No habria pasado mucho rato cuando a lo lejos se empezaron a oir voces. Me desperte estabamos abrazados desnudos. Le desperte. David, corre que vienen estos. Ponte el calzoncillo y metete en tu saco. Eso hicimos no vaya a ser que nos pillaran. Las voces se acercaban y estaba claro que eran nuestros amigos. Abrieron la tienda. Tios os habeis perdido un fiestón por haberos subido tan pronto. David se rio a carcajadas metido en su saco. Cerraron nuestra tienda y se fueron a dormir. David me miro y me planto un beso. Se reia y me dijo: Si ellos supieran lo bien que lo hemos pasado nosotros... Tenia razón, eso habia sido mejor que seguir la fiesta en el pueblo. CONTINUARÁ.