Mi historia con el joven Javier - 4ª parte

Mi historia con el joven Javier  - 4ª parte(Continuación de Hace tiempo me puso los cuernos)

Tras marcharse Javier, yo seguí con mi trabajo en casa de Marisa, cuyas historias ya os voy contando, al día siguiente de su marcha fue cuando grave el video con Marisa en la cual me depilaba mi sexo y mis axilas (recordad que había dicho a Javier que aprovechando que él estaba fuera durante el verano me depilaría una sola vez, con el fin de que cuando él volviera de nuevo para comenzar el curso yo ya tuviera bastante pelos en mi coño y en mi sobaqueras, que era como a él le gustaba y excitaba).

Javier era raro el día que no me llamaba dos y hasta cuatro veces por teléfono, decía que me echaba mucho de menos que no paraba de pensar en mí, que me deseaba muchísimo, etc. Que tenía que preparar algún viaje a Madrid para verme que no podía estar cerca de tres meses sin verme, que aunque fuera un día cogía el AVE en Ciudad Real y aunque fuera unas horas las pasaría conmigo. Cuando pasó una semana me decía que no podía más, me contaba cómo se masturbaba pensando que estaba conmigo, que había puesto mil veces el video que gravo dándome por el culo y que se pasaba todo el día viendo las fotos que me hizo en su casa.

Cuando me contaba lo que me haría y como me lo haría y que acababa corriendo, cuando me narraba esto con todo tipo de detalles a mi me ponía a mil, a veces (cuando tocaba trabajar en casa de Marisa) lo calmaba con mis clientes, pero otras veces no podía y me tenía que conformar haciéndome masturbaciones. Los días que estaba mi marido en casa porque no tenía que viajar me desahoga con él, me jodía de maravilla y me hacía quitarme de mi cabeza la imagen de mi joven amante y cuando el resto de la semana mi marido viajaba cuando llegaba los fines de semana los polvos que me metía eran apoteósicos. No sé si mi marido se dio cuenta de mi cambio sexual, pero en una de estas ocasiones después de haberse corrido dos veces en mi coño hambriento y una en mi culo, me dijo:

“Esperanza, llevo algún tiempo, como 4 ó 5 meses antes de que te quedaras embarazada y tras tu aborto, que te encuentro más sexi , que participas más cuando hacemos el amor, te encuentro más caliente y con más ganas de follar que antes, sino fuera porque nos conocemos y llevamos más de 20 años de casados dirías que te estás volviendo muy puta y sabes eso me gusta , me encanta que te sientas con ganas de polla y si por mi fuera te estaría jodiendo y follando todo el día”

Y dándome un beso me apretó a él acariciándome mi cuerpo desnudo. Esto me hizo pensar que si sabría algo de mis aventuras e infidelidades  con mis amantes o de mi trabajo en la casa de putas, y así entre bromas o no le dije:

“A lo mejor es que soy una puta, me acuesto con varios amantes e incluso trabajo de puta en un prostíbulo y es más grabo películas porno, eh”

El me contesta:

“No es eso Esperanza, ya sé que no haces eso, pero ya te digo te noto con una calentura sexual fuera de lo normal en ti desde hace tiempo. Pero te digo una cosa, si alguna vez sucediera, te quiero tanto que si así fuera lo comprendería y seguiría junto a ti, no como cornudo sino como un hombre que quiere a una mujer con todo su corazón y que lo que más le importa es que sea feliz y si se tiene que entregar a otros hombres, prostituirse e incluso grabar películas porno, porque la calentura que lleva dentro la empuja a ello y no lo puede remediar, yo lo comprendería y estaría siempre a tu lado”

Al decirme esto me lleno de alegría aunque me creo la duda de si lo sabia o no, porque había dado en la diana.

Cuando hacía ya dos semanas que se había marchado Javier el viernes de esa semana recibí una llamada suya diciéndome:

“Esperanza, tengo todo arreglado para ir a verte la semana que viene, pero  solamente podrá ser unas horas pues el último AVE que puedo coger para no levantar sospechas en mis padres es el de las 6,00 de la tarde. Por favor arregla tú tus cosas para poder estar juntos. Si lo puedes arreglar para el jueves me llamas”

Su noticia me alegro muchísimo y le dije:

“Javier me das una gran alegría, yo tengo muchísimas ganas de verte, pero tengo que mirar como lo arreglo, en cuanto lo tenga arreglado te llamo”.

Por parte de mi marido no tenía problemas, pues aunque ese día estaba en la oficina de Madrid, el trabajaba de 8,00 de la mañana a 6,00 de la tarde  y a esa hora ya había marchado Javier, pero quedaba como siempre el tema de mi hijo, entonces el sábado cuando estábamos comiendo dije en la mesa:

“Me  han dicho las amigas si quiero ir con ellas a pasar el jueves el día a Madrid de compras y a dar una vuelta, pero las he dicho que no puedo por ti hijo que te quedarías solo todo el día y me da pena”

Entonces mi hijo dijo:

“No te preocupes mamá por mí, me dejas la comida hecha y yo me arreglo. Ahora os quiero decir una cosa, mirad me han propuestos mis amigos irnos este verano a Inglaterra los dos meses de verano para practicar el ingles, el precio del internado es de ……….€ los dos meses y se reduce a la mitad si colaboramos con el colegio para ayudar en las labores de limpieza y cantina, que opináis. A mí me vendría muy bien y a la vez de practicar el ingles conocería otro país”

Entonces mi marido me pregunta:

“Esperanza tú que opinas, yo no lo veo mal y así el chico sale un poco de con nosotros que ya va teniendo edad”

Yo le contesto:

“Bueno si tú crees que es lo más conveniente y le va a venir bien, de acuerdo, ¿cuándo sería la marcha?”

Y contesta mi hijo:

“Dentro de 10 días. Entonces les puedo decir que cuenten conmigo, ¿no?”

Y le contesto:

“Si, pero antes me tienes que hacer el favor del jueves, ¿vale?”

Y con una sonrisa de lado a lado de su cara dice:

“De acuerdo, os quiero a los dos”

El domingo cuando me llamo Javier le dije:

“Cariño todo arreglado, cuenta que nos veamos el jueves”

El entonces me dice:

“Te quiero, mira yo saldré el jueves en el AVE a las 10,00 de Ciudad Real y llegaré a Madrid a las 11,00, y a las 12,00 te espero en mi piso donde tú con algo que compres puedes hacer una comida rápida y después podemos estar juntos hasta las 4,00 de la tarde pues a las 5,00 me sale el AVE de vuelta, pues he dicho a mis padres que tenía que hacer unos tramites de la universidad y que volveria una vez los hiciera en  pocas horas. Estoy deseando que llegue el jueves”

El resto de la semana se desarrollo normal, acudí mis dos días acordados a casa de Marisa donde tuve 9 clientes  y lo pase bien con la mayoría de ellos aunque dos de ellos no me gustaron mucho, pero en este oficio hay que hacer de todo por desagradable que sea.

El jueves, se me presentó un inconveniente al levantarme por la mañana, me había venido la regla, esto me molesto y me fastidió un poco, pero no estaba dispuesta a perder la ocasión de estar con Javier después del tiempo que llevaba sin estar entre sus brazos. Entonces me puse un sujetador blanco transparente (como es normal cuando estoy con mis amantes) más pequeño que mi talla, sin adornos ninguno en el que a través de su fina gasa se me podían apreciar mis grandes aureolas y pezones, las bragas me tuve que poner unas como digo yo normales ,es decir de las que llegan a la cintura y te tapan bien la chocha por las ingles sin que se te vea nada, dado que me tuve que poner una compresa por la regla ( no me gusta usar tampones, los veo menos higiénicos que la compresa), luego una fina blusa semitransparente, en la que me deje los tres botones de arriba sin abotonar dejando ver el canalillo que formaban mis no despreciables pechos y parte de ellos y completaba el atuendo una faldita ni corta ni larga . Mi aspecto ni era excesivamente atrevido ni vulgar y tampoco era serio, yo consideré que estaba bastante bien y más sin poder ir tan libre como otras veces debido a tener la regla.

Al salir de casa me pase por el supermercado y compre unos apaños para hacer una comida rápida y unas bebidas, como Javier me había dicho.

A las 12,00 de la mañana, ya estaba en el portal de su casa de Alcobendas, llame al telefonillo y sin preguntar quién era me abrió, cuando subí a su piso la puerta ya estaba entreabierta, fue llegar a ella que la abrió y cogiéndome de la mano tiro con suavidad de mí para adentro y cerrando la puerta, como ya era habitual me puso de espalda a ella dándome un beso en mi boca a la vez que me abrazaba que me quito el sentido.

Tras separarnos nos dirigimos a la cocina donde deje la compra y después agarrándome de la mano como dos enamorados me llevo al salón diciéndome:

“Toma es un regalo para ti, espero que te guste, aunque más me gustará a mi verte con ello”

Entonces cogiéndolo le dije:

“Gracias”

Y me puse abrir el paquetito. Al abrir la caja vi que era un conjunto de braguitas y sujetador, los extendí para verlos y cuál sería mi sorpresa al ver unas braguitas negras de encaje con lacitos rojos de los que venden en las tiendas eróticas. Con aberturas tanto en la parte del coño como en la parte del trasero. Así como un sujetador a juego tanto en estilo y color como en las aberturas de arriba abajo de cada cazoleta que dejaban ver todo los pechos. Y le dije:

“Y esto, si tienen apertura tanto las braguitas como el sujetador, me dejan al aire todas mis partes”

El me pregunto:

“No te gusta, pruébatelos, los he cogido con todo mi cariño. A partir de ahora te regalaré siempre ropa interior y objetos que nos alegren y nos animen sexualmente, pruébatelos por favor”.

Yo le contesto:

“¿Javier,  que talla has cogido “

Me dice:

“Como siempre te pones dos tallas más pequeña he calculado que uses la 110 ó la 100 y he optado por traerte una talla 95 y una talla L de braguitas, con el fin de que te quede todo muy ajustado y resalte más tus partes nobles, que tanto me gustan y estoy deseando verte con ello puesto y comerte entera”

Entonces con la voz mimosa le digo:

“Javier….no sé como decírtelo, te veo tan….ilusionado , igual que estoy yo, pero es que me parece que hoy no me voy a poder probar y poner este conjunto pues………es que esta noche me ha venido la regla y estoy echando bastante sangre y mancharía todas las braguitas “

El contesta contrariado:

“Joder, ya es mala pata, el día que quedamos para vernos y que se presente esa visita tan inoportuna……, entonces no podremos hacer nada……..”

Yo al verlo tan desilusionado le digo:

“Mira lo del conjunto me preocupa poco, pues me vas a ver con él, aunque las braguitas me las pondré encima de las que llevo, y referente a si podemos hacer o no algo dependerá de ti, pues si a ti no te da asco de entrar tu polla dentro de mi chumino todo lleno de sangre, yo por ti aunque no debiera lo haría, así que tú decides en ese sentido. También quiero decirte que como comentamos antes de marcharte me he depilado mi coño y axilas para este verano, con el fin de que cuando tu volvieras ya pudieras disfrutar otra vez de ellos peludos, pero en esta ocasión te tendrás que conformar con ellos depilados”

Contesta:

“Tú sabes, Esperanza que llevo días que no dejo de hacerme pajas pensando en ti y que deseo con todas mis fuerza tenerte entre mis brazos y hacer el amor contigo, a mi no me da nada de ti asco y menos porque estés con la regla incluso me excita pensar que puedo follarte teniéndola, así que si tu quieres lo estoy deseando…. Por favor dime que sí”

Acercándome a él le cojo su cara entre mis dos manos y apretándole las dos partes de su cara le estampo un beso en sus morros que le dejo sin respiración y le digo:

“Lo estoy deseando, soy toda tuya, y ahora mismo me pongo el conjunto que me has regalado aunque las braguitas me las coloque encima de las que llevo para darte el gusto de verme con él”

Comencé a quitarme la blusa y el sujetador, dejando mis grandes pechos al descubierto. Me fije en su cara, en al que se le dibujo una sonrisa y me di cuenta que no apartaba su vista de mis senos. Cogí el sujetador del nuevo conjunto  me di la vuelta de espalda a él y diciéndole:

“Ayúdame, abróchamele tú cariño”

Le deje la parte del broche y él un poco nervioso por la impaciencia (tardó más de lo normal) me le abrocho. Me di la vuelta para que él viera como me quedaba y sin decirle nada, me quite mi falda y cogiendo las braguitas me las puse encima de las que llevaba.

La imagen que debía de dar tuvo que ser espectacular pues se quedo como bobo y solo atino a decir:

·Joder, como estas……..”

Me fui a su cuarto y me mire en el espejo del armario, la imagen mostraba todos mis pechos fuera como si estuvieran sujetos por unas cintas, al ser el sujetador dos tallas más pequeño la parte de tela que debía de quedar a la altura de donde acababan mis aureolas prácticamente no se veía desbordado por las carnes de mis grandes pechos. Las bragas que me abrían bastante tanto por delante como por detrás, pues yo uso la XL y él me había cogido una L al ser negras y las bragas que llevaba puestas blancas todavía destacaba más la apertura, realmente si no hubiera tenido puestas las otras bragas daba la imagen de una verdadera puta. Cogí y me fui de nuevo al comedor donde él estaba y le dije:

“Que te parece, te gusta, te gusta cómo me has vestido, ¿no te parezco una verdadera puta con esta ropa? ¿O es así como quieres verme? ¿O es que quieres que sea una puta ¿ ¿dímelo? ¿Quieres que sea una puta solo para ti o quieres que sea también para los demás?

Yo le decía eso porque sé que le calentaba que se lo dijera, ya me había dicho en otras ocasiones que le ponía pensar que estaba con otros hombres.

El me contesta:

“Me parece cojonudo, me encanta como te queda, y me gusta que parezcas una verdadera puta con ello puesto y si es posible que seas tanto mi puta como la de otros, ya sabes que me excita pensar que te puedan poseer otros, aunque a la vez me fastidia”

Y cogiéndome mis pechos comienza a sobarlos, a chuparlos y mamarme alternativamente un pezón y el otro. Me estruja mis brevas con fuerza como si quisiera sacar leche de ellas, esto me excita, me pone a cien. Yo cuando tengo la regla (tanto antes como ahora) me pongo muy caliente y ando todos los días que la tengo salida. Yo alargo mi mano a su bragueta y por encima de su pantalón le masajeo su paquete, noto como se le va endureciendo, le noto excitado, miro mi reloj y veo que son la 1,00 del mediodía, entonces le separo (aunque me costó que dejara mis tetas) y le digo:

“Javier, son la 1,00 de la tarde, vamos a la cocina hacer la comida, comemos rápido y recogemos un poco la loza y nos vamos a tu cuarto a disfrutar, pues estoy tan deseosa de mi que quiero aprovechar al máximo las pocas horas que nos quedan”.

Nos dirigimos a la cocina como estábamos y preparo una comida rápida. Mientras hago la comida Javier no hace más que tocarme por todo el cuerpo, mis tetas ya están coloradas del magreo  que me las trae, trata de meter su mano en mi chocho y yo no le dejo. El cabrón me tiene a cien y yo creo que él no está a cien sino a doscientos.

Pongo la comida y no tardamos ni diez minutos en comer, me ayuda a recoger y nos dirigimos a su cuarto. Entonces le digo:

“Javier, espera me voy a lavar, pues estoy toda llena de la sangre que estoy echando y no quiero poner todo perdido”

El me dijo:

Espera, voy a por la cámara, quiero grabar todo, para cuando este lejos de ti poder ver este encuentro y de esa manera recordarle mientras me masturbo pensando en ti”

Fue al cajón donde tenía la cámara la cogió y comenzó a grabar según me  acompaña al baño, yo me quito las dos bragas y la compresa, esta última la tiro a la basura, y las dos bragas las doblo y las guardo. Me siento en el bidel el cual lleno de sangre nada más sentarme y enfoco el chorro de agua a mi rajita lavándomela y refrescándomela. Cojo una toalla y me limpio todo mi potorro, manchando la toalla de rojo.

Le digo:

“Javier, desnúdate del todo, no quiero que se te manche la ropa que tienes que volver a tu casa. Por las sabanas y la toalla no te preocupes, cuando marchemos yo me la llevo a mi casa y las lavo y la próxima vez que nos veamos la traigo.”

El me hace caso y comienza a desnudarse, yo me acerco y le voy ayudando. El de pie le digo que se quede en esa posición y yo me arrodillo cogiendo su miembro lo miro y lo calibro y le digo:

“Javier, le veo más largo y ancho, ¿es que estas haciendo de verdad el tratamiento de alargamiento de tu polla?

El sonriendo me dice:

“Si lo estoy haciendo, y debe de funcionar, pues tu lo has notado, yo como me le veo todos los días no lo noto”

Yo le riño diciendo:

“Pero como haces eso, si lo tenias ya de buen calibre, no te era necesario, cualquier mujer estaba de sobra servida con el rabo que tenias, ¿ no te das cuenta que ahora al ser tan larga y gorda habrá bastantes chicas que no quieran hacerla contigo por miedo a que las puedas hacer daño?”

Contesta:

“La demás chicas no me importan nada lo que puedan pensar, solo quiero lo que te guste a ti, y me dijiste que te gustaban largas y gordas y yo quiero darte gusto, eres la única mujer que me importa y haría cualquier cosa que me pidieras, y tú lo sabes”

Yo le digo:

“Está bien, como tú quieras, mi coño y culo siempre se adaptaran a tus medidas aunque me cueste que entre en ellos, te quiero y haría yo también cualquier cosa por ti. Vamos a tu dormitorio que empecemos de una vez”.

Nos dirigimos a su dormitorio, yo me quite el sujetador que me había regalado (no lo quería manchar) y doblándolo lo puse sobre la mesilla, estaba completamente desnuda. Hecho esto se la cogí y se la comencé a acariciar con mi mano todo lo larga que era, (había aumentado unos 3 ´0 4 centímetros de larga y uno por lo menos de gorda, tendría ahora 27 centímetros por unos 7 de gorda y pensar que seguiría alargándose y engordando, pues Javier estaba dispuesto a llegar a los 30 por 8 como me dijo después.) se le iba poniendo cada vez más tiesa y gorda al contacto con mis manos, no le quería todavía coger con mi boca quería ponerle a tope y que él me lo pidiera, comencé a apretársela con mis manos a realizar unos movimientos como si se la estuviera masturbando, poco a poco le notaba ir agitándose hasta que ya no pudiendo más me decía:

“Esperanzaaaa, no sigas con la manoooo, por favooorrr hazmeloooo con tu bocca me vuelves loco como la chupas”

Yo entonces bajé mi cabeza y mi lengua recorrió todo su escroto, amplio, suave y colgón, para nada contraído. La punta de mi lengua pasó a la base de su tronco y fue subiendo hasta la punta del glande. Mi lengua, sólo la punta, iba haciendo círculos sobre su glande, solo rozándolo, casi sin tocarlo. Dirigí el extremo de mi glándula hacia su meato, que intenté abrir apretando el glande. En su interior dejé un rastro de saliva y estimulé aquella parte con un movimiento vertiginoso de mi lengua, rápido, como una serpiente. Javier cerraba los ojos. Era el momento. Abrí mi boca y engullí entero el capullo de Javier y me pareció que en mi boca entraba un obús. Fui resbalando mi boca abajo, abajo, mientras parte de la polla iba desapareciendo en mi cavidad oral, otorgando cobijo y humedad a aquel voluminoso nabo que ya era mío. Pero no pude hacerla desaparecer por completo dentro mía, ya que noté que la punta tocaba mi garganta antes de que mi nariz rozara su pubis. Liberé saliva como pude para engrasar aquel falo, le saqué de nuevo de mi boca y observe aquel bello instrumento, de nuevo acerque mi boca que de nuevo por segunda vez comenzó a acoger en su interior, el extraordinario tamaño de aquel pene, al que comencé a hacerle un traje de saliva en casi toda su superficie. Subía mi cabeza y bajaba, provocando a Javier el placer que tantas veces él había imaginado en sus dos semanas de ausencia. Con una mano, pajeaba su miembro. Con mi boca, recorría su carne. Con mi lengua, rodeaba su volumen a una velocidad de vértigo. Disfrutaba como una auténtica zorra de chuparle la polla, aquel mástil que mi joven amante estaba transformando y modelando  para mi deleite, para que yo lo engullera, para saborearlo con mis labios, para que mi esófago se topara con su capullo. Mi lengua, de vez en cuando, recorría toda su extensión, su superficie, seguía el rastro de sus venas hinchadas, recogía las muestras de mi propia saliva para escupir un poco más y volver a recogerlas y volver a escupir. Chupé su capullo con fruición, como quien chupa un caracol para sacarle lo más profundo. Bajé hasta sus huevos, sabrosos, y mi lengua los envolvió en un juego sádico mientras mi mano continuaba estimulando aquellos interminables y gordos centímetros hinchados. Pasé su polla por mi boca, por mi frente, por mi nariz, por mis ojos, por mis orejas. Me toqué mi coño, empapado no solamente de sangre de la regla sino está mezclada con los flujos que mi calentura ya estaba derramando, y me llevé mis líquidos a mi pecho, lubricándolo manchándolos todo. Le oí decir:

“Joder Esperanza me estas subiendo a la gloria, sigue por favor no pareeeesss que placeeeerrrr…..”

Yo entonces tomé su polla dura, gorda a punto de explotar era  impresionantemente brutal, y la encerré entre mis tetas. Notaba aquel trozo de carne dentro de mí, taladrando mi pecho, hirviendo de pasión. Javier ponía una cara de máxima felicidad ante mi cubana. Yo bajaba y subía con mis tetas, haciendo aparecer y desaparecer su capullo, mucho más gordo que hacía dos semanas parecía una pelota de golf, una y otra vez. Escupí sobre su polla y mis tetas continuaron masajeando, masturbando, jugando, coqueteando con su polla, sintiéndome llena, apretando mis tremendos pechos sobre ellos, envolviéndolo todo, aún con más lubricación. La punta de la polla de Javier comenzó a toparse con mi barbilla. Mientras continuaba a gran velocidad mi cubana, bajé la cabeza, abrí la boca, y comencé a acoger, una vez más, aquel capullo cuando aparecía de entre mis tetas, dándole chupadas muy despacio parsimoniosas, metódicas, rápidas, yo estafa fuera de mí le deseaba y le decía:

“Aguanta cariño después quiero que me folles… Quiero sentirte dentro de mí… Quiero que me metas todo esto dentro de mí y aaahhhahhhh…….”

Según decía esto, mis tetas seguían invadidas por su polla, empecé a notar que él se tensaba, comenzaba a tener una respiración rápida, era síntomas de que estaba a punto de correrse, Javier sacó su polla de entre mis tetas y decía:

“AAHHHAAA, asiiiiiii, aaaahhhh, me crroooooooo, no puedo más , tomaaaatomaaa puta asquerosa coge mi lefa, toma mi semen en tu caraaaaa en tus tetaaas ahhhhhhhhhhhhhh”

Según decía estas palabras sostenía con su mano su polla tiesa, apretó más la polla y le dio más fuerte. Pronto su pollón empezó a escupir gelatinosos pegotes de semen amarillento sobre mi rostro. Uno me cayó en la frente y resbaló por mis sienes. Otro me cayó en mis dientes superiores, goteando al labio inferior y la barbilla, para gotear después sobre mis tetas. Y numerosos salpicones me mancharon la mejilla. Cesaron los movimientos del brazo y retiró la mano de la verga. Yo entonces me pasé el dorso de mi mano por el labio para limpiarme algunos restos y degusté algunas gotas esparcidas por mi lengua. El entonces me dijo:

“•Esperanza qué buena mamada ¿Te ha gustado mi nueva verga, que estoy preparando solo para ti?, vera cuando haya terminado todo el proceso de alargamiento y grosor, entonces vas a disfrutar al máximo con ella”

Yo sonriéndole y mirándole a su cara le pregunté:

“¿Te ha gustado como te la he chupado? ¿Sí?, estaba deseando tenerla en mi boca la he echado tanto de menos. Y ahora quiero que me folles, lo necesito y lo deseo, quiero ser tu puta entre tus brazos, tu zorra. Quiero que me hagas llegar al cielo todas las veces que puedas. Que me lleves donde nunca nadie me ha llevado. Que me jodas sin control. Quiero que me conviertas en una fuente de placer. Quiero sentir tu joven polla dentro de este coño tan vacío…quiero sentir muy puta contigo quiero ser tu puta. ¿Quieres?”

Él me contestó:

“Si, siiiiii, si quiero, pero levántate”

Me cogió por mi axila para ayudarme a levantarme y se lanzo a mis labios para besarme, probando restos de su propio semen, yo le correspondí uniendo mi lengua. Mis tetas se aplastaron contra sus pectorales sintiendo un placer inmenso al contacto con su piel. Le rodeo abrazándole y deslizando mis manos por su espalda hasta llegar al culo. Le manoseó sus nalgas encogidas y peludas. Él también me toca mi culo. El beso se demoraba, unas espumillas de saliva se formaban en las comisuras de nuestros labios. Yo estoy muy cachonda, y el no menos se notaba en la forma de tocarme el trasero y la espalda, el entonces me dice:

“Vamos a comenzar, espera voy a mi coger un condón, ya que tú no quieres hacerlo a pelo”

Yo entonces acercando mi boca a su oído se lo chupo y le digo con voz sensual:

“No mi niño, hoy vas hacerlo a pelo, con la regla no hay peligro de que me quedes embarazada, quiero sentir directamente tu rabo en mi almeja, quiero sentir como riegas con tu semen todo mi interior, y quiero que tengas el placer mayor que te pueda dar una mujer, correrte en su interior , hacerlo sin preservativo, y eso todo porque eres mi hombre , mi dueño y te deseo con toda mi alma, jódeme, jódeme ya no me tengas más tiempo sufriendo, quiero tu nabo dentro de mi coño, te deseo”

Yo me tumbe boca arriba en la cama, Javier me estuvo grabando con su cámara, enfocándome detenidamente a mis pechos para luego ir bajando hacia mi coño, haciéndome una señal me indicó que abriera al máximo mis piernas y el metiéndose entre ellas acerco el objetivo a menos de 30 centímetros de mi concha llena de sangre mezclada con mis flujos que me manaban de la calentura que llevaba. Luego se fue separando y colocando la cámara sobre un trípode que podía girar con el mando a distancia la ajustó, comprobando que la cama quedara toda encuadrada dentro del marco de la imagen. Yo que estaba muy salida e impaciente le dije:

“Javier, deja ya quieta la cámara y vente conmigo, me tienes con una calentura atroz y necesito cuanto antes tus caricias, tu  polla, te necesito a ti. Hoy yo no te voy a decir nada de cómo lo tienes que hacer y quiero que seas libre de hacerlo como tú quieras, que hagas lo que más te apetezca, que me trates si quieres como te gustaría que me portara, si es como una señora decente con su marido me lo dices , si quieres como una puta o una cualquiera también me lo dices , solamente quiero ser tuya y que me hagas vibrar en tus brazos, de ahora en adelante soy tú puta hasta las tres y media de la tarde que lo tendremos que dejar para ducharnos, vestirnos y que tú puedas estar a las 5,00 en la estación para coger el AVE venga no enredes más y vamos a empezar cariño”

El dejo grabando la cámara, se acercó a la cama y colocándose entre mis piernas y adoptando la posición del 69 me dijo:

“Puta comienza a comerte mi verga, yo voy a probar el sabor de tu sangre, pues como este como estaban tus jugos, es todo un manjar”

Yo le dije:

“No javier, no me chupes hoy el coño, te vas a poner perdido y encima es asqueroso de cómo esta con la sangre, si no tuviera la regla, tu sabes que me encanta que me acaricies con tu boca y me chupes mi conejo, pero así ¿no te da asco?

El dándome un cachete fuerte en mis nalgas, me dice:

“Tú a callar, cerda asquerosa, yo sé bien lo que tengo que hacer. Hemos quedado que haremos hoy lo que yo quiera y como me gustaría hacerlo a mí ¿no?, pues entonces a obedecer, comienza a mamarme mi polla”.

Y dándome otro cachete más fuerte acerco su lengua a mi rajita y comenzó a pasármela todo lo largo de mis labios hasta llegar a mi clítoris con el que se entretuvo un ratito, para luego ir bajando y abriéndome mi concha con las manos meter su lengua dentro de ella y absorber todo lo que de mi coño emanaba. Yo entonces ya le había cogido su rabo y estaba dándole una mamada de campeonato. Notaba que le estaba gustando por su forma de mamarme mi coño. Entonces cogí uno de mis dedos y se le metí en el agujero de su culo y acordándome que el gusto que le dio la otra vez que le tocara su próstata se la busque y cuando la encontré colocando el dedo en forma de gancho se la oprimi un poquito hasta que le hice decir:

“Ooohohohhh, siiiii, sigue chupándomela y haciéndome eso en mi culoooooo, oh,oh que placer me das cabronaaaa, no lo dejeesss, sigueeee”

El siguió mamando mi chumino, con más ansia y fuerza a medida que se iba calentando, me agarró con sus labios mi clítoris empezó a succionarlo con fuerza me lo estiraba y me proporcionaba esta caricia un placer divino, yo con esta caricia no pude aguantar más y comencé a enlazar un orgasmo tras otro diciéndole:

“Así, asíiii cabróoonnn, sigue sigue no pares, dale fuerte , quiero máass quiero maasss, quiero ser tu puta, tu ramera …..Pero no pareesss , me coroooo ohohoooooo….que gustooooooo, me estas matando que comida de coñooooo, hoooooomi amor que bien lo haces como has aprendidoooooo”.

El entonces también excitado dice:

“AAhahhhahhhhh, te gustaaaa Esperannzaaaaa te gusta cómo te lo hagoooo, tú también me estas llevando al orgasmooooo, sacame el dedo del culo y ábremele y comete mi agujeritoooooooeso me gustaaaaa, ahhhhhhhh, me corrooooooooo”

No me dio tiempo a chuparle el culo, pues se empezó de nuevo a correr y me inundo mi boca y mi garganta con su rico semen que me trague todo lo que pude, saliendo el resto por la comisura de mis labios.

El entonces se tendió en la cama, con la polla aun dura ( se notaba su juventud, no se le había bajado aún habiéndose corrido ya dos veces con mi boca) y me dijo:

“Ahora zorrita  súbete encima de mi mirando hacia mí, y te vas clavando mi badajo, hasta dentro, quiero que la sientas en tu útero, empieza a cabalgarme como un caballo”

Yo hice lo que me decía manchando al levantarme toda la sabana y parte de su cuerpo con la sangre de la regla y mis jugos que salían de mi potorro. Cogí su manguera con una mano y la coloque a la entrada de mi vagina y fui bajando despacio sobre él hasta que le sentí todo dentro, notando sus cojones en mi culito. A medida que iba entrando el iba soltando una serie de jadeos del placer que le proporcionaba, decía:

“Ahyyyy que gustooooo, como siento como entra, me gusta el calor de tu coño, que placer notar las paredes de él sin condón que gustoooo daa hacerlo a peloooo, muévete, muévete putona, quiero sentir tu sube y baja, trae para acá esas tetorrras, te las voy a estrujar igual que si fueran sandias y si pudiera me bebería tu néctar. Joder que leche deben de dar cuando te quedes embarazada, porque por mis cojones, yo a ti te preño pedazo de puta hoy no podré pero en otra ocasión ya verenmos aaahaaaa me gustaaaa, sigueeee…..”

Yo aceleré mis movimientos, me estaba gustando me proporcionaba un placer muy intenso el roce de su polla en mi coño, y me lo aumentaba como me estaba tratando, a lo bestia como si fuera una furcia , era su puta era en esos momentos su esclava, me tenía tan salida que hubiera hecho cualquier cosa que me hubiera pedido. El maltrato a mis melones apretándolos, tirando de mis pezones, aun doliéndome me ponía a un más caliente. Yo de nuevo me empecé a correr, no me aguantaba. El entonces soltó mis tetas y se deleitaba viendo el movimiento que tenían sueltas, pues yo al estar teniendo un orgasmo tras otro saltaba con más fuerza y las tetas cogían un movimiento mayor, a mi tercer orgasmo, el cabrón me empezó a decir:

“Sigueee, potra sigueeeso pedazo de zorra me estas volviendo a sacar mi lecheeeee, me vieeeneeeeeee la notasssss me corrro quiero inundar tu puto coñooooooo, quiero llenártele enterooooooo, mi amooorrrr te quieroooooEsp Epeeeerannnzaaaaaaa………….me coroooooooo”

Entonces yo también tuve mi cuarto orgasmo y desmadejada me tumbe sobre su cuerpo, el me agarro y comenzó a acariciarme y a besarme, diciéndome:

“Gracias Esperanza, te quiero , te amo quiero estar siempre contigo, quiero quedarme aquí contigo, no quiero irme, te quierooo”

El siguió llenándome de beso por todo mi cuerpo. Yo mire el reloj eran las 3,47 de la tarde, íbamos tarde, entonces le dije:

“Javier cariño, vamos a ducharnos, se nos ha hecho tarde y si nos descuidamos vas a perder el tren”

Me levanté y vi toda mis ingles y la suya llenas de sangre de mi regla, de mi coño caía hilos de sangre mezclados con su semen y mis jugos, me tapone mi coño con la toalla y me dirigí a la ducha, el me siguió y nos duchamos juntos sobando nuestros cuerpos y dándonos placer, no queríamos que el tiempo pasará, entonces yo como más sensata, me salí de la ducha, me seque y comencé a vestirme de nuevo, cuando esto hacía le pregunté:

“Javier, no quiero estar sin verte hasta después del verano, te necesito ¿Cuándo podrás venir?, no me dejes sin ti tanto tiempo”

El secándose me dijo:

“Esperanza, yo también quiero estar contigo, y desde luego no voy a esperar hasta que pase el verano para volver a verte, voy a ver si me invento algo y convenzo a mis padres para volver pronto. ¡Ah! Ya sé lo que les voy a decir. Le diré que las gestiones que he realizado hoy en la universidad tengo que venir a por los resultados dentro de 15 ó 18 días. Seguro que al ser cosa de la universidad ellos no me pondrán pegas. Si es así ese ya habré acabado el tratamiento de alargamiento y grosor de mi pene  y podrás verle y tenerle. ¿Qué te parece?.

Echándome a su cuello y dándole un beso en su boca le digo:

“Fantástico, que largo se me van hacer esos 15 ó 20 días, no puede ser antes”

El contesta:

“Ojala, pero mis padres no son tontos y no quiero que sospechen y se nos estropee todo, incluso el que venga a estudiar al año que viene, tenemos que tener cuidado, yo también tengo muchas ganas de estar todos los días contigo , mi amor”.

Recogió la cámara, saco la tarjeta y se la metió en su cartera. Recogimos un poco la casa, yo cogí mi regalo y también las sabanas (que estaban todas manchadas de la sangre de la regla) y la toalla, las metí en una bolsa y salimos del piso de Javier.

No permití que cogiera un taxi para ir a la estación de Atocha a coger el AVE, le lleve yo en mi coche, quería estar el mayor tiempo posible con él. Al despedirme no pude reprimir mis lágrimas, de verdad lo que hubiera dado por haber podido estar toda la noche y todo el día siguiente con él.

Ya os contaré en la siguiente entrega nuestro encuentro a los 20 días.

Si os ha gustado mi relato, no dudéis de escribirme a mi correo j.trujicornu@hotmail.com , diciéndome que o ha parecido y si os atrevéis que harías conmigo si tuvierais la oportunidad de poder pasar una tarde, noche o día conmigo. Espero vuestros comentarios