Mi hijo es mi hombre II

Laura sigue contando su historia de como su hijo se hizo su hombre.

Como ya saben mi nombre es Laura, creo que debería continuar con la historia, después de la gran corrida que mi hijo tuvo en mi cara, en la que me dejo llena de su lechita, quede encanta me lleno de mucho morbo. Mi hijo me pidió un par de veces que le ayudara con su problema, es decir que lo volviera a masturbar y se la chupara, yo me moría de ganas por hacerlo de nuevo, pero sentía que no debía.

Ya habían pasado unos cuantos días desde esa situación, era domingo en la mañana, nos habíamos despertado temprano, mi hijo comenzó a decirme que no había podido masturbarse como debería y que ya le empezaba a doler, yo tenía puesta solo mi pijama la cual era un poco transparente, no sé si era que yo también me moría de ganas, pero decidí ayudarlo.

~Está bien amor, te ayudare.

-Gracias mami

~Bueno hagámoslo aquí.

Estábamos en la sala, lo senté en el sillón y le bajé el pantalón, su verga estaba ya muy dura, con sus venas marcadas, se le veía los huevos tan grandes.

~Mi niño tu verga se ve tan grande y muy rica

Comencé por esos huevotes a darle lamidas y los intentaba succionar lo mejor que podía, lamia su tronco y me disfrutaba la cabezota de esa verga, su sabor era único, nunca me había gustado tanto saborear una verga, sentir su pene en mi boca me llenaba de placer, imaginaba lo morbosa de esa escena, una muy puta madre arrodillada frente a su joven hijo chupándole la verga, digna de una peli porno.

-Ahhh mami que rico

~Disfrutalo mi amor

-Si mami, me encanta

~Deja salir la leche para mami

Riiiingggg Riiiinnnggg

Comenzó a sonar mi teléfono y a llegar mensajes, lo ignore por un rato ya que estaba poseída con la verga de mi hijo, no podía pensar en otra cosa que no fuera su pene, me saque las tetas y comencé a darle una paja rusa, mi hijo tenía los ojos en blanco, se veía que lo estaba gozando.

~Se ve que lo disfrutas mi amor

-Mami tus tetas se sienten tan bien

~Te gustan las tetas de mami?

-Sí, mami, me encantan

Se la seguí pajeando con mis tetas y chupaba su cabeza, era tan erótico, me comportaba como una puta, pero quien no lo seria con esa verga tan rica en frente. Para entonces el teléfono había sonado unas cuantas veces más, pensaba contestarlo luego, cuando desleche a mi bebé.

-Mami ya casi me vengo

~Bueno bebé, dale la leche a mami

Tomé su verga con mis manos y lo comencé a pajear a gran velocidad, quería su leche, quería tomármela, su sabor me tenía enloquecida, lo quería en ese momento.

Toc Toc

La puerta sonó…

Yo aún tenía su verga en mi mano cuando mi hijo me dijo

-Mami me corro,

La puerta de entrada no estaba tan lejos del sillón del que estábamos y me desoriente un poco y había girado mi cabeza hacia la puerta.

-Ahhhh

Sentí un chorro de espeso semen de mi hijo, inmediatamente giré y abrí mi boca y puse su verga en mi boca, recibiendo el resto de su semen, estaba delicioso, caliente y espeso, pero era mucho, algo pudo salir por los bordes de mis labios, trague todo lo que pude, seguían tocando la puerta, así que le dije a mi hijo que se fuera a asear y me limpie lo mejor que pude.

Al abrir la puerta vi que era mi madre.

Hola hija, te estuve enviando mensaje y te llamé, como no me respondiste vine.

Ella vivía a un par de calles de mi casa, me explico que unos familiares habían llegado de otra ciudad y que querían ir al parque acuático.

Entonces se pueden alistar rápido para que vayamos todos juntos?

~Claro mamá no hay problema, en 30 minutos estamos en tu casa.

Bueno cariño, tienes algo en el mentón ¿de qué te has chorreado?

~¡¡No es nada mamá!! Vamos ve rápido y nos vemos en un rato para salir.

La saqué rápidamente de casa y me toque el mentón que tenía una gran gota muy grande de semen, lo tome con mi dedo y lo chupe, en verdad era tan delicioso. Mi hijo salió y me pregunto que para que había venido la abuela. Le conté y sé alegro de que fuéramos al parque acuático, disfrutaba de nadar, era uno de sus hobbies favoritos.

Nos alistamos rápidamente empacamos los trajes de baños y todo lo necesario, al llegar a la fuimos en carro hasta la casa de mi madre para poder tener más transporte para el resto de la familia. Habían venido bastantes familiares, todos teníamos que caber en tres autos, así que le ofrecí a un primo que condujera el mío, yo podía irme en las piernas de mi hijo y ganábamos un espacio. Nos fuimos todos apretados en los autos, yo iba sentada por completo en las piernas de mi hijo, mi culo estaba sobre su verga la que sentía que se ponía dura con cada roce, la sensación era maravillosa, esa verga pedía mi culo y yo ya estaba chorreando, me sentía tan sucia de sentirme tan caliente con el pene de mi propio hijo y en presencia de mi familia.

Nadie notaba mis movimientos gracias a lo lleno que estaba el auto, mi hijo ponía su cabeza en la ventanilla para que nadie lo viera disfrutar, puse mi celular entre mis piernas y lo deje caer, cayendo en el asiento, con mi mano hice que lo estaba buscando y aproveche para darle unos roces a la verga de mi hijo, podía sentirla, estaba como una piedra.

Al llegar él puso su maleta al frente disimulando un poco la erección, pagamos las entradas y caminamos al lugar, había mucha gente, como estaba temprano los vestuarios estaban muy ocupados, así que nos pusimos a hacer fila para entrar. La mayoría de la familia ya habían entrado a algunos, vi como algunas parejas entraban juntos, entonces ¿Por qué yo no entraría con mi macho? Así que aproveché uno que estaba vacío y halé a mi hijo conmigo.

-Nadie dirá nada si estamos en el mismo estuario?

~Somos madre e hijo que importa, además diré que ya tenía mi traje de baño abajo.

-Ok mami

~Te gusto que me sentara en tus piernas cierto?

-Si mami, aun lo tengo muy duro por eso

Quería un poco más de esa verga, no iba a desaprovechar esta oportunidad ahora. Por suerte los vestuarios estaban muy bien diseñados para ser íntimos, la puerta cubría todo el espacio. Lo comencé a tocar por encima del pantalón, lo besé y lo acariciaba, él me abrazaba correspondiendo mi beso, me tocaba mi trasero y mis senos, sus manos se sentían tan bien en mi cuerpo.

~Hijo, siéntate

Él me hacía caso en todo lo que le decía, era tan obediente, decidí darle más gusto. Me quite mi blusa y mi sujetador, dejando mis senos desnudos, lo abrace dejando su rostro entre ellos, comenzó a basarlos, lo guie hasta mis pezones y los mamaba tan fuerte y tan rico, succionaba mis pezones, algo de nostalgia paso por mi mente al verle su rostro tan angelical chipando mis senos, como cuando aún era un bebé y lo amantaba.

Pero ya era todo un hombre, un macho que va a satisfacer a la puta hembra que soy, así que mientras besaba mis pechos me fui bajando mis pantalones, ya estaba completamente desnuda ante mi hijo. Su cara de asombro y lujuria me calentaba aún más.

~Como me veo?

-Te ves muy sexy mami

~Eres mi hombre mi amor

Lo bese nuevamente mientras tomaba su camisa y se la quite y lo seguía besando, él me tocaba todo lo que podía, una de sus manos estaba en mi culo, se adentraba cada vez más y su dedo toco mi vagina tan húmeda, se detuvo por un momento y se miraba la mano, su dedo tenía algo de mi flujo, me acerque a su mano y chupe su dedo.

~Es delicioso ¿Quieres probar?

-Si mami

Hizo el intento de tocar mi vagina nuevamente, pero lo detuve.

~Así no bebé

Me senté y abrí mis piernas, se pueden imaginar lo puta que me veía abierta de piernas frente a mi hijo, enseñándole todo mi coño, me sentía tan sucia, tan perra, pero era eso mismo lo que hacía que estuviera tan caliente.

~Te gusta lo que ves amor?

-Se ve muy bien mami

~Ven pásale tu lengua por aquí

Se arrodillo en frente mío, comenzó a lamer y succionar, mi clítoris, y la entrada de mi vagina, como si quisiera extraer más de ese líquido que salía. Estaba tan excitada, no podía dejar de retorcerme del placer.

-Mami es delicioso

~Que bueno que te guste mi amor, me encantaría que siguieras, pero no nos podemos demorar más.

-Pero mami…

Se puso de pie y saco su tremenda verga, la cual estaba súper hinchada, me dijo lo obvio.

-No puedo salir así!!

Me incorpore, chupe su verga, pero sabía que eso no sería suficiente.

~Lo siento bebé, pero tu primera vez será aquí.

Lo senté y me puse de espaldas a él, le puse todo mi culo sobre su verga, con mi mano dirigí su pene a la entrada de mi caliente y húmeda vagina, entro con tanta facilidad, el me agarro de la cadera como queriendo que entre aún más.

Me movía súper rápido, estaba muy excitada y tenía que hacer que mi bebé se corriera rápido para que nadie sospeche nada.

-Mami se siente muy rico, me voy a venir

~Dale bebé, córrete dentro mío

Hice unos cuantos movimientos más rápido colocando todo mi peso sobre mi hijo, para que pudiera sentir todo mi trasero, escuche como hacía unos cuantos gemidos hasta que por fin su semen invadió todo mi vientre, sentía que me quemaba por dentro, mi hijo se había derramado todo su semen dentro de mí.

-Que rico mami ¿Podemos seguir en casa?

~Está bien amor, pero cámbiate rápido y salgamos

Me limpié un poco con un papel que tenía en mi bolso, me puse mi traje de baño y salimos, por suerte no había nadie de la familia cerca en ese momento, me cubrí un poco con una salida de baño que llevaba, le dije a mi hijo que fuéramos a comprar algunas cosas para compartir y así hicimos.

Al llegar mi madre me pregunto por qué tardamos tanto, le dije que la fila estaba muy llena para comprar las cosas, estuve un rato tomando el sol, mi hijo se había ido a las piscinas con sus primos, yo me decidí por bañar un poco, además que aun sentía algo del semen de mi hijo dentro mío, me di una ducha y entre a una de las piscinas donde había poca gente.

Nade por un rato hasta que unos tipos comenzaron a acosarme, a decirme cosas y todo eso, no era raro que me dijeran cosas en la calle, pero no me gustaban los comentarios grotescos de personas que ni siquiera conozco, hablaban de mis tetas y mi enorme culo. Así que mejor me fui de ese lugar, estuve un rato en la orilla de la piscina en la que estaba mi hijo con sus primos, algunos hombres pasaban por mi lado no sin notar mi trasero, un joven muy apuesto se me acerco, era muy simpático, con una gran sonrisa me pregunto si se podía sentar a mi lado, a lo que le dije que sí.

Hablamos un rato, él tendría unos 25 años, no era de la ciudad ya que a prensa hace unas semanas se había mudado por cuestiones de trabajo, le comenté que tenía un hijo y ni siquiera se mostró muy asombrado, solo hizo un comentario de lo joven que me veía para tener un hijo de esa edad. Mi hijo lo tuve a los 18 años.

Le dije que ya me iría un rato con mi familia pero que fue agradable conocerlo, le di mi numero para que siguiéramos en contacto, él día transcurrió con toda normalidad. Al llegar a casa estaba muy cansada, recibí un mensaje de Julio, el chico que conocí.

Mi hijo estaba durmiendo, la conversación con Julio era algo normal, pero yo aún pensaba en lo que paso con mi hijo, no pude satisfacerme en ese momento, mi cabeza volaba con pensamientos lujuriosos, así que fui llevando la conversación a algo más caliente.

Me comento de algunas experiencias sexuales que tuvo, de cómo le gustó mucho mi cuerpo, era muy caliente y respetuoso, eso me gustaba al menos como hombre, seguimos hablando de nuestros gustos sexuales, me pidió ver mis tetas, así que le envíe una foto para que se deleitara, yo le pedí que me dejara ver su cuerpo desnudo, me envió una foto maravillosa, totalmente desnudo y con una verga muy grande, un cuerpo atlético con músculos marcados que me hacían agua la boca.

Me pidió una foto completamente desnuda, pero le dije que no era muy buena usando el temporizador, escuche que mi hijo se estaba en la sala, yo estaba en ropa interior y lo llame, cuando entro pude notar que su verga empezaba a ponerse dura, esa verga tan deliciosa.

~Me haces un favor cariño?

-Claro mami

~Me tomas unas fotos

-Así?

~Sí, quiero verme

-Bueno

Le pedí unas fotos posando, de pie, en cuatro, con las piernas abiertas, bueno en fin fueron unas cuantas, él se sentó en mi cama viendo la TV mientras yo seguía en el chat con Julio. Le envié una de las fotos y le encantó, era obvio que la foto era tomada por alguien y él me lo pregunto, le dije que tenía mucha confianza con mi hijo y le pedí las fotos, que no veía problema con esto.

Seguimos hablando de eso, me comentaba lo afortunado que era mi hijo por tenerme como madre, seguimos compartiendo fotos, había unas muy cachondas, las que estaba en cuatro o completamente abierta de piernas.

Le pedirías algo más a tu hijo?

~Algo como…?

Con menos ropa

~Puede ser, pero… no sé

A él le gustará

~Pues eso si

Has notado que se le para?

~La verdad si y se ve grande

Que puta eres jajajaja ¿y entonces le pedirás más fotos?

~Está bien, espera

Ok hermosa

Me quite el sujetador, sabía que tanto yo como Julio estábamos calientes con la situación, mi hijo fotografiando a su madre desnuda, mi hijo voltio a verme.

-Vamos a hacerlo lo de antes?

~En un rato cariño, quiero descansar un poco mas

-Bueno mami

~Pero me tomarías más fotos?

-Desnuda?

~Si mi amor

Comenzó a tomar más fotos, me fui quitando el cachetero, mi hijo solo andaba en bóxer así que veía su gran paquete crecer, estaba disfrutando del espectáculo que le daba, las fotos eran completamente de una puta y más si sabes quién tomo las fotos.

Me acosté sobre mi cama con las piernas abiertas, mi hijo me miraba mi panochita bien depilada y húmeda, su vista estaba bien posada sobre mi cuerpo, me sentía deseada, ardiente.

-Mami quiero hacerlo

~Puedes tocarte mientras tanto bebé

-Bueno mami

El comenzó a masturbase en frente mío, sin ningún tipo de pena, su verga quedaba completamente erecta, se hacía una paja viéndome a mí, a su propia madre. Mientras hablaba con Julio, le fui enviando más fotos de las que me pidió.

Que rica te ves

~Gracias cariño

Y tu hijo lo disfruto?

~Pues esta con la verga bien parada

Dejaras que goce un poco

~Debería?

No lo vas a dejar así ¿cierto?

~No lo sé, pero tengo muchas ganas también

~Amor ven, besa mi panochita.

-Claro mami

Comenzó a besarme mi vagina, la tenía súper húmeda y tan caliente.

-Mami sabe delicioso

~Lo haces muy bien amor

Entonces no le vas a dar nada a tu hijo

~Emmm mira

Le envié una foto de mi hijo comiéndome la panochita

Que buena puta complaciente eres, ya quisiera estar ahí para ayudarle

~Luego tendrás tu oportunidad

Te la vas a dejar clavar

~Con las ganas que tengo por supuesto que si

Me envió un video de cómo se masturbaba, su verga me puso muy caliente, le dije a mi hijo que me la metiera, estaba que me venía solo de pensarlo.

~Ven amor, méteme tu vergota

Se colocó de rodillas en la cama con su verga tocando mi vagina, la tomé con mi mano y la fui metiendo, se sentía aún más rico que en el vestuario, mi hijo comenzó a gozarlo, movía las caderas desesperado, tomé el celular y comencé a grabar como me la estaban clavando.

~Dale mi amor, métesela toda a tu mami

-Que rico se siente mami

~Vamos dame duro bebé

Yo gemía de placer, gemía muy duro, creo que hasta los vecinos podían oírme, era maravilloso, tuve un par de orgasmo, mi hijo me la seguía metiendo y yo aproveché para enviarle el video a Julio.

~Ahora te envió mas, voy a gozar como puta

Me puse en cuatro y grabé a mi hijo dándome como podía, se notaba que era completamente inexperto, pero lo hacía muy bien, yo lo gozaba mucho, grababa mi cara de perra que ponía con cada envestida que me daba mi bebé.

Acosté a mi hijo y comencé a cabalgarlo, podía sentir como su verga me llenaba por completo, mi vagina estaba completamente llena de la verga de mi hijo.

-Mami

~Dime, mi corazón

-Me voy a correr

~Vente dentro de tu mami

Sabía que yo no planificaba, pero ya lo había hecho venir dentro de mí, ya no quería sacar su verga, quería continuar cabalgando ese animalote, me moví mas rápido, mi culo chocaba con sus bolas, ese sonido tan erótico que causa, era tan único.

~Vamos dame tu leche mi amor

-Ahhhh que rico mami, me vengo

~Embaraza a tu mami cariño, dámelo todo

Sentí como se corrió dentro de mí, era tanto que mucho de su semen corría por sus bolas, estaba llena, pero quería mas. Me seguí moviendo y el disfrutaba, se notaba en su cara, en sus gemidos, con sus manos jugaba con mis senos y de vez en cuando los chupaba, yo estaba como una perra en celo, lo único que quería era esa verga.

Me pare y me puse en cuatro

~Ven cariño métemela así

Mi hijo se puso de pie y comenzó a bombearme con su verga, mi vagina estaba goteando, entre mis orgasmos y su gran corrida, su pene hacia un movimiento de vaivén que yo estaba como loca disfrutando.

-Mami por aquí también se mete?

Puso sus dedos sobre mi ano, me dio una sensación tan rica, un corrientazo recorrió mi cuerpo.

~Si mi amor, pero lo haremos por ahí otro día, pero puedes meter tus dedos para que le des más placer a tu mami

Tome una gran cantidad de saliva y con mi mano la puse en la entrada de mi ano mientras él seguía penetrándome, me metí un dedo un poco para que viera como hacerlo.

El con su dedo medio lo puso en la entrada de mi ano y lo metió por completo, se sentía tan rico, le dije que hiciera el mismo movimiento que estaba haciendo con su pene, entonces comenzó mi doble penetración, su pene se movía al mismo ritmo que su verga.

-Mami, siento como me aprieta mi dedo

~Si amor es porque me gusta mucho, intenta metiendo más dedos

Cuando me di cuenta ya tenía tres dedos de mi hijo en mi culo, gemía como una perra, no pude aguantar más y me corrí haciendo un gran charco sobre las sabanas.

-Me voy a venir.

Agarre mi celular y lo puse a grabar y se lo pase a mi bebé.

~Grábame amor.

Él comenzó a grabar y yo con su verga en mi boca, la sacaba para pajearla hasta que se corrió sobre mi cara, fueron unos cinco chorros muy abundantes, con razón los huevos de mi hijo estaban tan hinchados, mantienen lleno de esta delicia, pero ya tenía la puta perfecta para sacarle su lechita.

-Mami eso es muy delicioso.

~A mí también me gusta mucho mi amor

~Vamos a tomar una ducha juntos

Fui a bañarme con mi bebé, seguí hablando con Julio, le envié algunos videos que tome, se puso muy cachondo, pero creo que lo dejare para después.

Espero que disfruten tanto como yo, recuerden soy Laura, espero que comenten si quieren que les cuente más.