Mi hijo (06)

Si hasta ahora cada relación era mas fuerte que la anterior en esete relato se mezcla todo y la orgia esta servida.

Al llegar al reservado Lucia y Marc se reían de nuestra tardanza, yo al pasar hacia mi sitio deje ver de nuevo mis nalgas pero esta vez sin nada pues mi tanga se había quedado en el baño, Lucia se levanto y se fue al lavabo en ese momento Cris mirando a mi hijo le dijo:

Tu ya sabes la madre que tienes?

Si claro que lo sé,

Es una diosa.

Dijo Cris,

No te pases mujer que con mi hijo aún me da mucho corte,

Corte?, a ti? Mira que mujer,

Diciendo esto me levantó la falda dejando a la vista mi coñito y con sus dedos abría mis labios enseñando a Marc el agujero dilatado de mi vagina, yo seguía súper excitada mis pezones me dolían de lo erectos que estaban, Marc me miraba y se acariciaba sus pantalones, Cris seguía jugando con mi sexo mientras con su otra mano me desabrochaba la blusa, me desabrocho el sujetador y quitando los cuatro vasos de encima de la mesa me estiro encima de ésta, yo estaba como loca con mi blusa completamente desabrochada mis pechos al aire mis piernas semi-flexionadas y abiertas de cara a la puerta, mi falda caída en mis caderas, la escena era digna de las mejores películas de Enmanuelle lo que sentía en ese momento es difícil de explicar mi nivel de excitación era brutal tendida encima de aquella mesa, pero a la altura del suelo me sentía como un manjar que mis dos acompañantes se disponían a devorar, así mi hijo empezó a chuparme mis pechos mientras Cris me lamía el sexo, yo no podía dejar de pensar en aquella locura, la puerta se abriría en cualquier momento, y entraría Lucia pero en ese momento cualquiera que pase me verá, y mi hijo… le he de decir que Cris no es lo que parece, esto no puede ser tengo que pararlo, pero como si estuviese posesa era incapaz de decir nada de lo que pensaba, en ese momento se abrió la puerta, nadie se inmutó solo yo me quede inmóvil como muerta de miedo, Lucia entro rápidamente y cerro tras de sí, no dijo ni palabra, solo aparto un poco a Cris y fue ella la que se sumergió en mi vagina, Cris con sus pechos desnudos se puso de rodillas y mi hijo no dudo en morderlos con lujuria, dios mío pensé se lo he de decir, Marc se había puesto de rodillas y yo le desabroche sus pantalones y sacándosela empecé a chuparsela el se agacho siguió besándome mis pechos, entonces yo me gire hacia Cris ella me miro yo le mire fijamente su entrepierna y ella entendió y quitándose las ajustadas mallas mientras yo meneaba la polla de mi hijo dejo a la vista el enorme bulto de su secreto, que yo no dude en sacar y metermelo en la boca, la cara de mi hijo era para hacerle una foto, no se lo podía creer, claro semejante hembra y con semejante polla, en fin seguimos cada uno a lo nuestro ahora Marc ya sabía lo que era Cris y yo de niña mimada en medio de todos recibiendo caricias de los tres, Cris se acercó a mis pechos y empezó a morderlos, uff que dolor más estupendo, me estaba haciendo daño de verdad y yo estaba en las nubes succionando la polla de mi hijo, la cara de Cris cada vez estaba mas cerca de mi boca y claro de la verga de mi hijo, y en una de estas sin mas me la cogió de la boca y empezó a chuparsela, Marc no sabia que hacer me miraba como preguntándome y yo le hice un gesto de aprobación como diciéndole si te gusta adelante, así cerro los ojos y se dejo hacer Cris entonces tomo la iniciativa, se puso a cuatro patas encima de mí metiendome su polla en mi boca e invitó a Marc y mi hijo sin pensarlo dos veces se puso detrás de ella y se la metió por el culo de una envestida mientras Lucia seguía propinándome una soberana comida de coño con orgasmos múltiples incluidos, Cris gritaba de placer con los 22cm de polla de hijo entrando y saliendo de su precioso culo, todo aquello era alucinante yo no podía mas la hábil lengua de Lucia me mantenía en un orgasmo continuo, levanté un poco la cabeza y entre tanta carne conseguí ver a Lucia estaba a cuatro patas, la puerta del reservado estaba entreabierta y aquella amable chica del kimono que nos había recibido estaba de rodillas con la boca clavada en el culo de Lucia, aquello era Sodoma y Gomorra, en ese momento Cris se empieza a convulsionar y unos chorros de caliente semen inundaron mi boca mientras Marc se corría en su culo yo dejaba ir toda clase de líquidos en la boca de Lucia y en la de Aita ( o algo así) que se había sumado a la fiesta y junto con su amiga lamían y succionaban mi vagina mientras con sus dedos penetraban mi ano, Cris se levantó y dejó caer sus últimos chorros de semen sobre mi pecho, y mi hijo al sacarla de su culo también me mancho toda, yo absolutamente extasiada cerré los ojos y empecé a notar como un sinfín de lenguas recorrían todo mi cuerpo, eran mis cuatro amantes que pasaban sus lenguas recogiendo el semen o más bien repartiéndolo por todas partes Aita al poco se situó detrás de mi hijo y como él estaba de rodillas inclinado sobre mí empezó a lamerle el culo, Marc se dejaba y ponía cara de placer mientras no dejaba de besarme y lamerme los pechos embadurnados de semen, en ese momento note como algo me penetraba, levanté la cabeza, era Lucia con un juguete, la muy viciosa me metía uno a mí por la vagina mientras se metía uno ella por detrás, Cris se levantó y con su cuerpo de infarto se dirigió hacia Aita y con su pollón en la mano la invitó a chuparsela, no mucho pues a la pobre japonesa no le cabía en la boca, aún así la empapo a tope, Marc se colocó tal y como estaba antes Cris, ósea a cuatro patas encima de mí con su pene en mi boca, a Cris le faltó tiempo para colocarse detrás de él y con sumo cuidado y sin que mi hijo se quejase lo mas mínimo se la metió hasta el fondo, fue una follada larga, la cara de mi hijo era una mezcla de placer y dolor Cris follaba su culo de forma cada vez más salvaje, Lucia seguía follandome con su juguete y la polla de mi hijo empezó a escupir leche a borbotones inmensos que me sobresalían por mis labios, Cris soltó un grito

" meeee corrrrrrrro", Marc se la sacó rápidamente se giró y empezó chupar la negra polla de Cris mientras se corría salpicando la cara de mi hijo con los chorros de leche que éste no era capaz de tragar, quedamos todos exhaustos. Mas tarde me explicaron que Aita era la hija del dueño y que cerraba ella, que por supuesto le encantaba el sexo y que más de una vez habían montado fiestas a restaurante cerrado, bueno más en menos tiempo imposible nos despedimos pues era ya muy tarde y nos fuimos al hotel no sin antes quedar en llamarnos.